Prólogo
Sin duda la universidad es una de las instituciones que más ha resistido la erosión del tiempo, ya que a lo largo de los años su estructura institucional ha sufrido profundos cambios. Hoy en día las universi- dades más antiguas tienen poco en común, entre ellas, la Universidad de Tombuctú (una ciudad en la actual Malí, África Occidental) fundada en 982 e. c. y a la que asistieron, a lo largo del siglo XII, unos 25.000 estudiantes, o la Universidad AlAzhar, que fue fundada en El Cairo en 970 e. c. y hoy supervisa una red de instituciones con dos millones de estudiantes, o las principales universidades europeas medievales, como Bolonia fundada en 1088, Oxford, ca. 1096, Sorbona, 1150, Salamanca, 1218, Coimbra, 1290, la Universidad Napoleónica de París, 1808, y la Universidad Humboldt, Berlín 1811. Estas dos últimas son modelos de universidades que se extendieron por Europa, América y el mundo entero en los últimos dos siglos. Lo que todas ellas tuvieron en común desde el principio fue el impulso de desarrollar estudios avanzados y formar élites, ya fueran religiosas, políticas, culturales o científicas.
Descarga el libro completo aquí: Descolonizar-universidad
https://www.clacso.org/descolonizar-la-universidad-el-desafio-de-la-justicia-cognitiva-global/