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Libro: La pregunta por la violencia

La pregunta por la violencia

Ana Belén Blanco. María Soledad Sánchez. Sergio Tonkonoff. [Editores]

Ana Belén Blanco. María Soledad Sánchez. [Presentación]

Rubén R. Dri. Emmanuel Taub. Gustavo A. Ludueña. María Stegmayer. María Pía López. Daniel Alvaro. Miguel Angel Rossi. Ezequiel Ipar. Carlos Gustavo Motta. Daniel Mundo. Martina Lassalle. Sergio Tonkonoff. Sofía Tiscornia. Henrik Malmström. [Autores de Capítulo]

Secretaría Ejecutiva.
ISBN 978-987-42-2889-5
Pluriverso Ediciones. CLACSO.
Buenos Aires.
Mayo de 2017
 

Puede decirse que la violencia es una de las problemáticas más recurrentes en las reflexiones e investigaciones que se desarrollan en la actualidad en el marco de las ciencias sociales y humanas. Con todo, es difícil pensar que sea ésta un objeto de indagación claramente delimitado según las exigencias de una rigurosa metodología científica. Vale decir, que pueda rápidamente definirse como una categoría exhaustiva y excluyente. ¿Qué entendemos por violencia? ¿Qué prácticas, procesos, objetos, sujetos pueden ser caracterizados como violentos? ¿Por quién/es? ¿Cómo? ¿Cuáles serían los lenguajes que nos permitirían aproximarnos a su estudio? En resumen, ¿cómo responder a la pregunta por la violencia?
Fuente: http://www.clacso.org.ar/libreria-latinoamericana/libro_detalle.php?orden=&id_libro=1234&pageNum_rs_libros=0&totalRows_rs_libros=1174
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7 fallas de derechos humanos en México

México/Febrero de 2017/

El 2016 sin duda dejó huella. Por lo menos los mexicanos recordaremos ese año. Ese año se destapó un sentimiento de xenofobia que provenía desde el primer socio comercial de México, Estados Unidos. Ya había indicios de que era una actitud que se esparcía por el país vecino, pero que fuera una de las actitudes que ayudara a llegar a un candidato a la Casa Blanca, fue reflejo inequívoco de un sentimiento que había pavimentado su camino hasta la superficie.

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, basó su campaña en la construcción de un muro a lo largo de la frontera entre Estados Unidos y México y atribuyó el alto desempleo a la inmigración, siempre con un discurso que estaba enfocado en ensalzar una confrontación directa entre dos grupos plenamente focalizados.

Pero no sólo en Estados Unidos este tipo de retórica trascendió, permeando desde la escena política hacia el grueso poblacional. Las ultraderechas xenófobas se hicieron un hueco en la mente de la gente de sus países con sus discursos con muchas similitudes con el que usó Trump.

La proliferación de este tipo de actitudes preocupan en muchos sectores, debido a las dinámicas de la economía mundial actual, a las de las decisiones políticas y sociales, pero además en materia de Derechos Humanos.

El 10 de diciembre de 1948 la Asamblea General de las Naciones Unidas en París proclamó la Declaración Universal de Derechos Humanos, marcando un hito en la historia de los derechos humanos, considerando que la libertad, la justicia y la paz en el mundo tienen por base el reconocimiento de la dignidad intrínseca y de los derechos iguales e inalienables de todos los miembros de la familia humana y que lamentablemente el desconocimiento y el menosprecio de los derechos humanos han originado actos de barbarie ultrajantes para la conciencia de la humanidad.

Los Derechos Humanos resultan indispensables para el desarrollo integral de la persona. El respeto hacia los derechos humanos de cada persona es un deber de todos. Todas las autoridades en el ámbito de sus competencias, tienen la obligación de promover, respetar, proteger y garantizar los derechos humanos consignados en favor del individuo. Es por esto que salta a la vista que las invitaciones xenófobas provengan desde la clase política.

Amnistía Internacional (AI) presentó este miércoles 22 de febrero su evaluación anual de la situación de los derechos humanos en el mundo, e hizo un análisis exhaustivo del estado de los derechos humanos en el mundo donde destacó los peligros de la retórica divisoria que han manejado algunos líderes, misma que “impulsa un retroceso global en materia de derechos humanos”.

En el caso de México y otros países de América, la situación continúa complicada al seguir siendo una de las regiones más violentas y desiguales del mundo. Según la Organización no Gubernamental, en toda el continente la situación de crisis de los derechos humanos se vio acelerada por una tendencia al aumento de los obstáculos y las restricciones a la justicia y a las libertades fundamentales, con aumentos en la represión tornándose más violentos y haciendo uso de los sistemas judiciales y de los aparatos de seguridad para responder a la disidencia y al creciente descontento de la ciudadanía, y así aplastarlos.

En México la violencia en el país continúa de manera generalizada. Se siguen recibiendo informes de tortura, desapariciones forzadas, ejecuciones extrajudiciales y detenciones arbitrarias. Persiste la impunidad por violaciones de derechos humanos y crímenes de derecho internacional.

¿Cuáles son las fallas que el país acusó durante el 2016?

1. Violencia

Según AI, las autoridades registraron 36,056 homicidios hasta el final de noviembre, la cifra más elevada desde el inicio del mandato del presidente Peña Nieto en 2012, frente a los 33,017 de 2015. En respuesta a las manifestaciones de los movimientos de docentes, se llevaron a cabo operaciones policiales y algunas saldaron con muertos y heridos.

2. Ejecuciones extrajudiciales

Según AI, en el 2016, los autores de ejecuciones extrajudiciales siguen gozando de impunidad debido a que las investigaciones no se hacen adecuadamente. Por tercer año consecutivo, las autoridades no publicaron la cifra de personas muertas o heridas en enfrentamientos con la policía y las fuerzas militares. Se descubrieron decenas de fosas comunes en todo el país. En junio, al menos ocho personas murieron y decenas resultaron heridas en Nochixtlán, Oaxaca, durante una operación policial lanzada tras un bloqueo de carretera en protesta contra la reforma educativa del gobierno. La investigación sobre los homicidios de 22 personas a manos de soldados en Tlatlaya, estado de México, en 2014, todavía no había arrojado resultados concretos.

3. Tortura

Según AI, la impunidad por tortura y otros malos tratos seguía siendo casi absoluta, con numerosas denuncias. La violencia sexual como forma de tortura era habitual durante las detenciones de mujeres. Aunque en este sentido hubo avances de la Procuraduría General de la República (PGR) con La Unidad Especializada en Investigación del Delito de Tortura que anunció que ya revisaba a nivel federal 4,715 expedientes. Aunque en la mayoría de los casos no se aplicaron los dictámenes forenses especializados de la Procuraduría General de la República para supuestos de posible tortura; había más de 3,000. En el Senado aprobó una iniciativa de Ley General contra la Tortura que se ajustaba a las normas internacionales. El proyecto de ley se reformó, y al concluir el año seguía pendiente una votación general en la Cámara de Diputados.

En agosto, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) concluyó que miembros de la Policía Federal torturaron al menos a dos personas en el municipio de Tanhuato, estado de Michoacán, en mayo de 2015. La CNDH concluyó, además, que 22 de las 43 personas muertas durante la operación habían sido víctimas de ejecución arbitraria y que la policía había alterado pruebas. En septiembre la Comisión Interamericana de Derechos Humanos remitió a la Corte Interamericana de Derechos Humanos el caso de 11 mujeres sometidas a violencia sexual como forma de tortura en San Salvador Atenco en 2006.

4. Desapariciones Forzadas

Según el reporte de AI, las desapariciones forzadas con implicación del Estado y las desapariciones perpetradas por agentes no estatales siguen como práctica generalizada, y los responsables seguían gozando de una impunidad casi absoluta. AI denunció que según el gobierno, 29,917 personas (22,414 hombres y 7,503 mujeres) se hallaban en paradero desconocido. Las cifras del Registro Nacional de Datos de Personas Extraviadas o Desaparecidas no incluían casos federales anteriores a 2014 ni casos clasificados como otros delitos, tales como secuestro o trata de seres humanos. Las investigaciones del caso de los 43 estudiantes de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa fue un festival de posiciones encontradas, sin respuestas concretas por parte de las autoridades.

5. Periodistas y defensores de derechos humanos

Según AI, durante el 2016, continuaron las amenazas, el hostigamiento, la intimidación, las agresiones y los homicidios contra periodistas y defensores de derechos humanos. Al menos 11 periodistas fueron víctimas de homicidio a lo largo del año.

6. Equidad de género

El Congreso rechazó en noviembre una propuesta de reforma constitucional para garantizar de manera expresa el derecho a contraer matrimonio sin discriminación después de que en mayo, el presidente Peña Nieto había presentado dos anteproyectos de ley para reformar la Constitución y el Código Civil Federal. La segunda reforma del Código Civil propuesta prohibiría la discriminación por motivos de orientación sexual e identidad de género con lo que se permitiría contraer matrimonio y adoptar a las personas del mismo sexo. También incluía el derecho de las personas transgénero a que México les reconociera su identidad de género. El proyecto de ley seguía pendiente de debate en el Congreso. En septiembre, pasó a ser vinculante para todos los jueces y juezas del país la jurisprudencia de la Suprema Corte de Justicia que confirmaba los derechos de las parejas del mismo sexo a contraer matrimonio y adoptar sin sufrir discriminación por su orientación sexual o su identidad de género.

7. Violencia contra mujeres y niñas

Según AI, la violencia contra las mujeres y las niñas sigue siendo endémica. En abril, decenas de miles de personas se manifestaron en todo el país para exigir el fin de la violencia contra las mujeres, incluido el acoso sexual. El mecanismo de “Alerta de Género” se activó en los estados de Jalisco y Michoacán, tras su activación en los estados de Morelos y México el año anterior. La falta de datos precisos, actualizados y desglosados sobre violencia de género constituía un importante obstáculo para abordar el problema.

Fuente: http://eleconomista.com.mx/sociedad/2017/02/22/7-fallas-derechos-humanos-mexico

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Estados Unidos: New York Changes the Way It Keeps Tabs on School Violence

Estados Unidos/Diciembre de 2016/Autora: Elizabeth A. Harris/Fuente: The New York Times

RESUMEN: Funcionarios de educación del estado de Nueva York votaron el martes para cambiar la forma en que el estado controla la violencia escolar, con la esperanza de mejorar un sistema que se ha llamado confuso e inexacto. Pero debido a que el sistema seguirá dependiendo de las escuelas para reportar datos, puede que no ofrezca una imagen más clara de lo peligrosas que podrían ser las escuelas. El viejo sistema de Informes de Incidentes Violentos y Disruptivos, o Vadir, rastreó delitos en 20 categorías, incluyendo homicidios, secuestros, amenazas de bomba y disturbios. Las escuelas informaron episodios basados ​​en las pautas del estado. Muchos llamaron a las categorías confusas y dijeron que los que informaban de los datos no siempre estaban adecuadamente capacitados para determinar si algo era «maldad criminal», por ejemplo, o para dilucidar la diferencia entre «robo» y «hurto». Bajo las nuevas regulaciones, aprobadas por la Junta de Regentes, la autoridad educativa más alta del estado, los funcionarios estatales han reducido las categorías a nueve y trató de aclarar las definiciones para que las escuelas informen los episodios con mayor precisión.

New York State education officials voted Tuesday to change the way the state tracks school violence, hoping to improve a system that has been called confusing and inaccurate.

But because the system will continue to rely on schools to report data, it may not offer a clearer picture of how dangerous the schools might be.

The old Violent and Disruptive Incident Reporting system, or Vadir, tracked offenses across 20 categories, including homicide, kidnapping, bomb threat and riot. Schools reported episodes based on guidelines from the state.

Many called the categories confusing, and said those who were reporting the data were not always adequately trained to determine if something was “criminal mischief,” for example, or to tease out the difference between “burglary” and “larceny.”

Under the new regulations, approved by the Board of Regents, the state’s highest educational authority, state officials have whittled the categories to nine and tried to clarify definitions so schools report episodes more accurately.

A Vadir score can be enormously consequential because if a school has a certain level of episodes two years in a row, it can be labeled “persistently dangerous,” a designation the federal government requires states to make, and one that means students who request a transfer must be offered a place at another school in their district.

“If the purpose of Vadir reporting is to identify the most persistently dangerous schools, then let’s get the most violent incidents being submitted, and not things like minor altercations,” said Renee Rider, an assistant commissioner at the New York State Education Department who oversees Vadir. While every episode should be investigated, she said, “sometimes what happens at the local level should stay there, and not necessarily be submitted to the state.”

In recent years, criticism of Vadir came from all sides, including the United States secretary of education, John B. King Jr., when he was education commissioner in New York. Mr. King said the system “rarely reflects the realities of school health and safety.”

A frequent complaint was that the persistently dangerous formula, which is the ratio of violent encounters to enrollment, puts small schools at a disadvantage. Five major episodes at a school with 100 students, for example, comes across as more problematic than five episodes at a school with 500 students. David Goldsmith, the president of the Community Education Council for District 13 in Brooklyn, said there had been small schools in his district on the persistently dangerous list that he thought did not belong there.

“When you’ve been in the school and know the culture of the school, and this school has been labeled persistently dangerous?” he said. “You think, ‘That’s crazy.’”

But some critics now wonder if the system has moved too far in the other direction. Among them is Families for Excellent Schools, a pro-charter-school group that is suing New York City for what it says are violent conditions in city schools. Jeremiah Kittredge, the chief executive of the organization said that by removing and collapsing categories, the state would give families less information about what’s going on in schools, not more. Ms. Rider of the State Education Department said New York would still make some of that information available in subcategories.

The changes do not remove what many see as the most fundamental problem: Vadir is based on self-reported information, and given that the reporting has consequences, school administrators might have an interest in keeping certain episodes to themselves.

Jonathan Burman, a spokesman for the State Education Department, did not address that issue directly but said in an email: “It is critical that everyone has a clear and consistent way to track and compare the level of safety in every school. The department’s goal is to ensure that the most accurate school safety data possible gets reported.”

Johanna Miller, the advocacy director at the New York Civil Liberties Union, was a member of a task force that worked on the new regulations. She said the group “worked a lot with the language of the categories so it matched up better with the language of school discipline, rather than what it was before, which was penal code language.”

For example, “assault with physical injury” and “assault with serious physical injury” will now become a single category, called “physical injury.” Categories like “reckless endangerment” will disappear.

“You don’t have to be a lawyer anymore to understand how to report things,” Ms. Miller said.

The new regulations will take effect in July.

One thing that will not change is the formula for determining whether a school is persistently dangerous. So to try to keep small schools from being unnecessarily branded with that label, Ms. Rider said, the department plans to review any school that is flagged but has fewer than 250 students.

Even before Tuesday’s vote, the state had taken action to reduce the number of schools on the persistently dangerous list. At the start of the 2015-16 school year, there were 32 schools on the list.

This year, there were five.

Ms. Rider said that last year, the department started working intensely to help manage student behavior at schools that had one year of data with a high number of episodes, putting them in danger of ending up on the list the next year.

Schools were also given more guidance on how to report disruptive behavior. Schools kept in regular contact with the state, Ms. Rider said, and some 70 sessions were offered last year to teachers, principals and district staff members on interventions, investigation and reporting.

Ms. Rider said schools were not instructed to report fewer episodes or to downgrade their severity to create a more flattering portrait. “That did not happen,” she said.

Ms. Rider said that changes in how educators at all levels thought about discipline and misbehavior had also played a role in reducing the number of episodes reported. Schools and districts around the state have been moving away from suspensions and toward practices like restorative justice, which encourages getting to the source of outbursts rather than just sending students out of the classroom.

She also said the state planned to expand this holistic view of student behavior on the measurement side as well. This year, the state is testing a new School Climate Index in seven schools. It will look at information like Vadir data, rates of absenteeism, and school surveys from parents, teachers and students.

Fuente: http://www.nytimes.com/2016/12/13/nyregion/new-york-education-school-violence-vadir.html?_r=0

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Ravensbrück, el campo de concentración para mujeres del que nadie quería hablar

Por: Hector G. Barnés

El 30 de abril de 1945, alrededor de 3.500 prisioneras del campo de Ravensbrück, malnutridas y muchas de ellas al borde de la muerte, fueron encontradas y liberadas por el Ejército Rojo en su avance sobre Alemania. Puede parecer el final de uno de los episodios más dramáticos de la locura nazi, pero era tanto el epílogo a los horrores del campo de concentración como el prólogo de una larga historia de olvido, humillación y desprecio a las supervivientes del campo alemán, que se acostumbraron a ver cómo se dudaba de su palabra.

Si hoy en día conocemos lo ocurrido ha sido gracias al esfuerzo de algunas de sus supervivientes por contarlo, especialmente a partir de los años 90, cuando algunas académicas feministas alemanas empezaron a indagar en las memorias de mujeres que, hasta la fecha, habían preferido callar. La última de ellas es Sarah Helm, la autora de “Ravensbrück: Life and Death in Hitler’s Concentration Camp for Women” (Bantam Dell), quizá la obra definitiva sobre lo ocurrido entre mayo de 1939, apenas cuatro meses antes de la guerra, y abril de 1945.

“Ravensbrück fue el único campo de concentración nazi construido para mujeres”, explica la autora en un fragmento del libro reproducido en “Long Reads”. “Tomó su nombre del pequeño pueblo que colinda con la ciudad de Fürstenberg y que se encuentra a unas cincuenta millas al norte de Berlín”.

Su localización fue otro motivo más para que no se hablase de lo allí ocurrido: el acceso a los terrenos propiedad de Himmler, intencionadamente lejos de las miradas de los viajeros, quedó en la República Democrática Alemana, por lo que durante décadas fue terreno vedado para los historiadores occidentales que quisieron comprobar con sus propios ojos lo que algunos testimonios contaban.

Los datos son confusos, ya que todos los documentos fueron quemados en una pira o en los hornos crematorios y arrojados a las profundidades del lago que se encontraba al lado del campo (como recuerda Helm, a Himmler le gustaba que los campos de concentración fuesen construidos en bellos parajes). La autora calcula que en Raensbrück murieron entre 30.000 y 90.000 mujeres. En su peor momento, 45.000 vivieron en sus habitáculos, muy probablemente hacinadas, ya que Himmler mandó construir un campo de tamaño pequeño, a pesar de los avisos de compañeros como Rudolf Höss, que le recordaban que, si estallaba la guerra, se iba a quedar corto muy pronto.

Una cosa en común: eran mujeres

Uno de los datos que sorprenden a los que conocen la existencia de Ravensbrück, explica la autora, es que un porcentaje muy pequeño de las víctimas (apenas un 10%) eran judías. La composición de la población del campo era muy diversa, y por lo general, exceptuando a los niños, tan solo tenían una cosa en común: eran mujeres. La mayoría de sus 2.000 habitantes iniciales eran alemanas que se habían opuesto a Hitler. Entre esas primeras pobladoras destacaba un populoso grupo de 500 testigas de Jehová, que consideraban a Hitler “el Anticristo” y que ya habían pasado por Moringen, antes de que este fuese reconvertido en una prisión juvenil. Su fe en Dios, y no en el Führer, fue lo que las condujo a Ravensbrück.

Otro importante contingente era el formado por las mujeres comunistas y antiguos miembros de la Reichstag que habían sido detenidas a lo largo de la década de los 30, además de miembros de la intelectualidad como la pintora Gerda Lissack. Como ocurría a menudo en los campos de concentración nazis, la mayor parte de sus habitantes eran aquellas que las autoridades de la SS consideraban desechos sociales: prostitutas, criminales y gitanas. A lo largo de su historia, unas 130.000 mujeres pasaron por el campo, donde fueron “golpeadas, obligadas a pasar hambre y a trabajar hasta la muerte, envenenadas, ejecutadas y gaseadas”.

A este primer grupo se le añadieron durante la guerra varios miembros de los equipos de operaciones especiales de los Aliados, detenidas tras aterrizar en paracaídas sobre suelo alemán. También miembros de la resistencia francesa. Es el caso de Anise Postel-Vinay, una de las últimas supervivientes de Ravensbrück y que contó su historia en ‘Vivir’ (Errata Naturae). Capturada en Le Havre, pronto comprendió lo que le esperaba: “Al ver a aquellas mujeres desfiguradas, grises, con la mirada ausente, nos asustamos. De repente sentimos que entrábamos en una zona de muerte”. Se calcula que en sus barracones fueron encerradas 8.000 francesas, 1.000 holandesas, 18.000 rusas y 40.000 polacas (y tan solo 20 inglesas, una de las razones por las que, sospecha Helm, no se ha escrito mucho sobre el tema).

Muchas de las supervivientes se negaban a hablar con la autora sobre lo ocurrido, como Yvonne Baseden, miembro de las Fuerzas Especiales, que le preguntó “¿No puedes escribir sobre otra cosa? Es horrible”. Las presas llevaban un triángulo de color que identificaba su categoría y nacionalidad, algunas de ellas tuvieron que afeitar su cabeza (como las checas y las polacas), y la mayoría de ellas eran obligadas a trabajar en la fábrica de Siemens que se encontraba al lado del campo, construyendo componentes del cohete V-2. A partir de agosto de 1941, la cosa empezó a empeorar: cada día morían unas 80 internas por enfermedades relacionadas con el hambre. Las prisioneras judías empezaron a ser deportadas a Auschwitz en el verano de 1942.

Algunas de las presas que se quedaron, especialmente las polacas, se vieron sometidas a experimentos médicos. Uno de ellos consistía en probar sulfonamidas cortando e infectando huesos, músculos y nervios de las mujeres para infectarles con bacterias a través de piezas de madera o cristal. El otro consistía en intentar trasplantar huesos de una mujer a otra, lo que en la mayoría de los casos, las dejó mutiladas. Además, entre 120 y 140 mujeres romaníes fueron esterilizadas en enero de 1945 a través de la (falsa) promesa de que, si lo aceptaban, serían liberadas. En los días finales del campamento, los oficiales de la SS obligaron a 24.500 supervivientes a caminar hacia Mecklenburg huyendo del Ejército Rojo en una de las marchas de la muerte más terribles que se recuerda. Muchas de las que quedaron no tuvieron mejor suerte, ya que fueron violadas por los soldados rusos.

Los testimonios de las supervivientes coinciden en señalar que fue el compañerismo entre las víctimas lo que permitió que saliesen adelante. Muchas diseñaban sus propios efectos personales (brazaletes, colgantes, muñecas) como recordatorios de su sentido de humanidad. La propia Postel-Vinay lo recuerda en su libro: “La solidaridad entre mujeres nos salvaba. Era una necesidad vital. Nos ayudábamos mutuamente. Cuando una amiga caía enferma, hacíamos todo lo posible por ayudarla”.

El silencio cómplice

A pesar de todo, no ha sido hasta hace relativamente poco que se ha empezado a hablar en profundidad de lo ocurrido en Ravensbrück. En 1946, tuvieron lugar los juicios de Hamburgo en los que las guardias, acusadas de crímenes de guerra y contra la humanidad, fueron sentenciadas a la muerte. Pero tuvieron que pasar décadas para que los testimonios completos fuesen escuchados. En parte porque, como hemos explicado, los rusos impidieron a muchas investigadoras, como la oficial Vera Atkins, acceder al campo. Este, por otra parte, fue en muchos casos considerado un campo de trabajo y no de concentración, lo que, a ojos de muchos, suavizaba lo ocurrido.

Durante décadas, la historia de Ravensbrück se partió en dos. Como explica Helm, en la zona soviética el campo se convirtió en un santuario para las heroínas comunistas caídas, y en Occidente, simplemente, desapareció. No solo por la imposibilidad de acceder al territorio y por la desaparición de todos los documentos, sino porque en muchos casos no se quiso escuchar a las supervivientes. No ayudó que los archivos sobre el juicio de Ravensbrück estuviesen clasificados hasta casi los años ochenta.

Una de las historias rememoradas por Postel-Vinay en su libro resume bien el clima de rechazo que existía hacia aquellas que se atrevían a contar lo ocurrido. Cuando explicó en la televisión que el profesor Karl Gebhardt había seleccionado a varias mujeres para realizar “experimentos humanos” con gérmenes del tétanos y la gangrena gaseosa que introducía en el hueso de las conocidas como “kaninchen” (“conejas”), el médico con el que compartía plató la tomó por mentirosa. “No solo no me creyó, sino que encima se puso hecho una furia”. Ese fue su principal pecado, no solo durante el auge del nazismo y durante la Guerra, sino también en las décadas que siguieron: eran mujeres.

Fuente: http://www.elconfidencial.com/alma-corazon-vida/2016-11-27/ravensbruck-campo-concentracion-nazi-mujeres_1291431/

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No disparen al pianista

Francisco Javier Lozano Díaz

El pasado sábado, día 3 de diciembre de 2016, a las diez menos cuarto de la mañana (hora aproximada del receso) en las cercanías de las instalaciones de la Universidad Multitécnica Profesional (Campus Central) de la ciudad de Colima, un individuo a pie disparó contra un grupo de alumnos y alumnas alcanzando a cuatro personas con el resultado funesto de tres personas heridas y una fallecida, según diferentes fuentes de información y medias de la región.

El estudiante fallecido, objetivo principal del ataque, cursaba estudios sabatinos en la licenciatura de Derecho. Su formación le valía día a día en su quehacer profesional, ya que se desempeñaba como Agente de la Procuraduría de Justicia del Estado. Dedicaba parte de su tiempo extralaboral a superarse con formación superior que lo dotaban de mayor competencia para ser un mejor agente judicial.

Tras lo inevitable del ataque y su desenlace, la Universidad tomó las medidas de seguridad pertinentes de acuerdo al protocolo que establece Protección Civil y Seguridad Pública para salvaguardar la integridad de sus alumnos; además, una vez que las autoridades tanto de la Universidad como del Gobierno del Estado, hicieron la valoración de la situación, ordenaron la suspensión de las actividades del turno vespertino. La misma institución educativa externó sus condolencias y apoyo a los familiares y amigos del alumno que perdió la vida, así como de los alumnos heridos y víctimas del impactante suceso. Las muestras de solidaridad de los representantes políticos, así como de la misma sociedad civil han sido unánimes y prontas desde la más profunda indignación ante estos hechos criminales.

Han pasado varios días desde lo acontecido, ahora toca pensar desde la frialdad. ¿Quién dispara al pianista? Quienes no quieren oír la música. El pianista tiene la función de dar banda sonora al cine Western; sencillo y esencial. Y este asesinato no es más que el reflejo de una sociedad silenciosa, sin música.

La persona ejecutada era objetivo por su desempeño laboral sin ser relevante su condición académica. No se trata de un caso como las 43 personas desaparecidas de Ayotzinapa hasta el día de hoy desde 27 de septiembre de 2014, donde su condición de académica era esencial en el desarrollo de la trama. Ambos caso contienen la misma intrahistoria, ¿a qué ritmo se desarrolla México? Al toque de gallito, tambor percutor y plomo que aniquila pianista, los cuales podrían poner en escena músicas de un mundo nuevo y mejor, donde la vida acaba sin silencios sostenidos.

Descanse en paz. Respeto y abrazo a familiares y amigos, que el consuelo y la justicia reconforte el dolor.

Fuente del articulo:http://www.educacionfutura.org/no-disparen-al-pianista/

Fuente de la imagen:  http://www.educacionfutura.org/wp-content/uploads/2016/12/Cyx-hgtXAAQOohu-300×223.jpg

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Entrevista a Samir Amin. La afirmación de la soberanía nacional popular frente a la ofensiva del capital

Entrevista a Samir Amin
«La afirmación de la soberanía nacional popular frente a la ofensiva del capital «

 

Por: Raffaele Morgantini
Investig’Action
Los análisis sobre la crisis que agita -de manera estructural- el actual sistema capitalista llegan a ser de una esterilidad patética. Mentiras de los medios, políticas económicas antipopulares, olas de privatización, guerras económicas y “humanitarias”, flujos migratorios. El cóctel es explosivo, la desinformación es total. Las clases dominantes se frotan las manos frente a una situación que les permite mantener y reafirmar su predominio. Intentemos entender algo. ¿Por qué la crisis? ¿Cuál es su naturaleza? ¿Cuáles son ahora y cuales deberían ser las respuestas de los pueblos, de las organizaciones y de los movimientos preocupados por un mundo de paz y justicia social? Entrevista con Samir Amin, economista y pensador egipcio sobre las relaciones de dominación (neo)-coloniales, presidente del Foro Mundial de Alternativas.

-Raffaele Morgantini (Investig’Action): Durante varias décadas, sus escritos y sus análisis nos dan elementos de análisis para descifrar el sistema capitalista, las relaciones de dominación Norte-Sur y las respuestas de los movimientos de resistencia de los países del Sur. Hoy hemos entrado en una nueva fase de la crisis sistémica capitalista. ¿Cuál es la naturaleza de esta nueva crisis?

-Samir Amin: La crisis actual no es una crisis financiera del capitalismo, sino una crisis del sistema. Esto no es una crisis en “U”. En las crisis capitalistas ordinarias (las crisis en “U”) las mismas lógicas que llevan a la crisis, después de un período de reestructuraciones parciales, permiten la recuperación. Estas son las crisis normales del capitalismo. Por contra, la crisis actual desde los años 1970 es una crisis en “L”: la lógica que llevó a la crisis no permite la recuperación. Esto nos invita a hacer la siguiente pregunta (que es también el título de uno de mis libros) ¿Salir de la crisis del capitalismo o salir del capitalismo en crisis?

Una crisis en “L” indica el agotamiento histórico del sistema. Lo que no significa que el régimen vaya a morir lenta y silenciosamente de muerte natural. Al contrario, el capitalismo senil se vuelve malo, y trata de sobrevivir redoblando la violencia. Para los pueblos la crisis sistémica del capitalismo es insostenible, ya que implica la creciente desigualdad en la distribución de los beneficios y de las riquezas dentro de las sociedades, que se acompaña de un profundo estancamiento, por un lado, y la profundización de la polarización global por el otro. A pesar de que la defensa de crecimiento económico no es nuestro objetivo, hay que saber que la supervivencia del capitalismo es imposible sin crecimiento. Las desigualdades con estancamiento, se convierten en insoportables. La desigualdad es soportable cuando hay crecimiento y todo el mundo se beneficia, incluso si ello es de forma desigual. Como en los gloriosos años 30. Entonces hay desigualdad pero sin pauperización. Por contra, la desigualdad en el estancamiento se acompaña necesariamente de empobrecimiento, y se convierte en socialmente inaceptable. ¿Por qué hemos llegado aquí? Mi tesis es que hemos entrado en una nueva etapa del capitalismo monopolista, que yo califico la de los “monopolios generalizados”, caracterizada por la reducción de todas las actividades económicas al status de facto de la subcontratación en beneficio exclusivo de las rentas de los monopolios.

-¿Cómo evalúa vd. las respuestas actuales a la crisis por parte de los países y de los diferentes movimientos?

-Ante todo, me gustaría recordar que todos los discursos de los economistas convencionales y las propuestas que avanzan para salir de la crisis, no tienen ningún valor científico. El sistema no saldrá de esta crisis. Vivirá, o tratará de sobrevivir, a costa de destrucciones crecientes en una crisis permanente. Las respuestas a esta crisis son hasta el momento, lo menos que se puede decir, limitadas, poco fiables e ineficaces en los países del Norte.

Pero hay respuestas más o menos positivas en el Sur que se expresan por lo que se llama “la emergencia”. La pregunta que surge entonces es: ¿emergencia de qué? Emergencia de nuevos mercados en este sistema en crisis controlado por los monopolios de la tríada (de los imperialismos tradicionales, de la tríada Estados Unidos, Europa Occidental y Japón) o de las sociedades emergentes? El único caso de emergencia positiva en esta dirección es el de China que intenta asociar su proyecto de emergencia nacional y social para su posterior integración en la globalización, sin renunciar a ejercer el control sobre las condiciones de esta última . Esta es la razón por la que China es probablemente el mayor oponente potencial a la tríada imperialista. Pero también están los semi-emergentes, es decir, aquellos a los que les gustaría serlo, pero que no lo son realmente, como la India o Brasil (incluso en el tiempo de Lula y Dilma). Países que no han cambiado nada en las estructuras de su integración en el sistema mundial, permanecen reducidos a la condición de exportadores de materias primas y productos de la agricultura capitalista .Son “emergentes” en el sentido de que registran en ocasiones tasas de crecimiento no demasiado malas acompañadas por un crecimiento más rápido de las clases medias. Aquí la emergencia es la de los mercados, no de las sociedades. Luego están los otros países del Sur, los más vulnerables, notablemente los países africanos, árabes, musulmanes, y aquí y allá otros en América Latina y en Asia. Un Sur sometido a un doble saqueo: el de sus recursos naturales para el beneficio de los monopolios de la Tríada y los ataques financieros para robar los ahorros nacionales. El caso argentino es emblemático en este sentido. Las respuestas de estos países son a menudo por desgracia “pre-modernas” y no “post-modernas”, como se las presenta: retorno imaginario al pasado, propuesto por islamistas o cofradías cristianas evangélicas en África y en América Latina. O aún respuestas pseudo-étnicas que hacen hincapié en la autenticidad étnica de pseudo-comunidades. Respuestas que son manipulables y a menudo eficazmente manipuladas, aunque dispongan de bases sociales locales reales (no son los Estados Unidos quienes inventaron el Islam o las etnias). Sin embargo, el problema es grave, por que estos movimientos tienen grandes recursos (financieros, mediáticos, políticos, etc.) puestos a su disposición por las potencias capitalistas dominantes y sus amigos locales.

-¿Qué respuestas se podrían imaginar, por parte de los movimientos de la izquierda radical a los retos planteados por este capitalismo peligrosamente moribundo?

-Una de las tentaciones, que voy a descartar de inmediato, es que frente a una crisis del capitalismo global, la respuesta buscada también debe ser global. Tentación muy peligrosa porque inspira estrategias condenadas al fracaso seguro: “la revolución mundial”, o la transformación del sistema global desde arriba, por decisión colectiva de todos los Estados. Los cambios en la historia nunca se han hecho de esa manera. Han partido siempre de aquellas naciones que son eslabones débiles en el sistema global; de progresos desiguales de un país a otro, de un momento al otro. La deconstrucción se impone antes de la reconstrucción. Esto vale para Europa por ejemplo: deconstrucción del sistema europeo si se quiere reconstruir otro posteriormente, sobre otras bases. Debemos abandonar la ilusión de la posibilidad de “reformas” llevadas a cabo con éxito dentro de un modelo que ha sido construido en hormigón armado para no poder ser otra cosa que lo que es. Lo mismo para la globalización neoliberal. La deconstrucción, llamada desconexión aquí, ciertamente no es un remedio mágico y absoluto, que implicaría la autarquía y la migración fuera del planeta. La desconexión llama a la inversión de los términos de la ecuación; en lugar de aceptar ajustarse unilateralmente a las exigencias de la globalización, se intenta obligar a la globalización a adaptarse a las exigencias del desarrollo local. Pero atención, en este sentido, la desconexión no es jamás perfecta. El éxito será glorioso si se realizan sólo algunas de nuestras principales demandas. Y esto plantea una cuestión fundamental: la de la soberanía. Este es un concepto fundamental que debemos recuperar.

-¿De qué soberanía está hablando? ¿Cree vd. en la posibilidad de construir una soberanía popular y progresista, en oposición a la soberanía tal como fue concebida por las elites capitalistas y nacionalistas?

-¿La soberanía de quién? Esa es la pregunta. Hemos sido acostumbrados a través de la historia a conocer lo que se ha denominado como la soberanía nacional, la implementada por la burguesía de los países capitalistas, por las clases dominantes para legitimar su explotación, en primer lugar sobre sus propios trabajadores, pero también para fortalecer su posición en la competición con los otros nacionalismos imperialistas. Es el nacionalismo burgués. Los países de la tríada imperialista nunca han conocido hasta el momento más nacionalismo que ese. Por contra, en las periferias hemos conocido otros nacionalismos, procedentes del deseo de afirmar una soberanía antiimperialista, trabajando contra la lógica de la globalización imperialista del momento.

La confusión entre estos dos conceptos de “nacionalismo” es muy fuerte en Europa. ¿Por qué? Pues bien, por razones históricas obvias. Los nacionalismos imperialistas han estado en el origen de dos guerras mundiales, fuente de estragos sin precedentes. Se entiende que estos nacionalismos sean percibidos como nauseabundos. Después de la guerra, la construcción europea ha dejado creer que ayudaría a superar este tipo de rivalidades, para el establecimiento de un poder supranacional europeo, democrático y progresista. Los pueblos han creído en eso, lo que explica la popularidad del proyecto europeo, que sigue en pie a pesar de sus estragos. Como en Grecia, por ejemplo, donde los votantes se han pronunciado contra la austeridad pero al mismo tiempo han conservado su ilusión por otra Europa posible.

Hablamos de otra soberanía. Una soberanía popular, en oposición a la soberanía nacionalista burguesa de las clases dominantes. Una soberanía concebida como un vehículo de liberación, haciendo retroceder la globalización imperialista contemporánea. Un nacionalismo antiimperialista, por tanto, que nada tiene que ver con el discurso demagógico de un nacionalismo local que aceptaría inscribir las perspectivas del país implicado en la globalización local, que considera al vecino más débil como su enemigo.

-¿Cómo se construye pues un proyecto de soberanía popular?

-Este debate lo hemos llevado a cabo varias veces. Un debate difícil y complejo teniendo en cuenta la variedad de situaciones concretas. Con, creo, buenos resultados, especialmente en nuestras discusiones organizadas en China, Rusia, América Latina (Venezuela, Bolivia, Ecuador, Brasil). Otros debates han sido aún más difíciles, especialmente los organizados en los países más frágiles.

La soberanía popular no es fácil de imaginar, porque está atravesada por contradicciones. La soberanía popular se da el objetivo de transferir un máximo de poderes reales a las clases populares. Estos pueden ser tomados en los niveles locales, pudiendo entrar en conflicto con la necesidad de una estrategia a nivel del Estado. ¿Por qué hablar del estado? Por que nos guste o no, se continuará viviendo bastante tiempo con los Estados. Y el Estado sigue siendo el principal lugar de decisión que pesa. Aquí está el fondo del debate. En un extremo del abanico del debate, tenemos a los libertarios que dicen que el Estado es el enemigo con el que se debe luchar a toda costa, y que se debe actuar fuera de su esfera influencia; en el otro extremo tenemos las experiencias nacionales populares, especialmente las de la primera ola del despertar de los países del Sur, con los nacionalismos antiimperialistas de Nasser, Lumumba, Modibo, etc. Estos líderes han ejercido una tutela verdadera sobre sus pueblos, y pensado que el cambio sólo podía venir desde arriba. Estas dos corrientes han de dialogar, comprenderse para construir las estrategias populares que permitan auténticos avances.

¿Qué se puede aprender de aquellos que han podido ir más lejos, como en China o América Latina? ¿Cuáles son los márgenes que estas experiencias han sabido aprovechar? ¿Cuáles son las fuerzas sociales que son o podrían ser favorables a estas estrategias? ¿Por qué medios políticos podemos esperar movilizar sus capacidades? Estas son las preguntas fundamentales que nosotros, los movimientos sociales, los movimientos de la izquierda radical, militantes antiimperialistas y anticapitalistas, debemos preguntarnos a nosotros mismos y a las que hay que responder, con el fin de construir nuestra propia soberanía, popular, progresista e internacionalista .

Fuente: https://www.rebelion.org/noticia.php?id=217929

Imagen: http://www.ayudaeficaz.es/el-modelo-economico-breve-introduccion-al-pensamiento-critico/

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Save the Children reclama más ayudas para los niños afganos ante el aumento de la violencia en Afganistán

Asia/Afganistán/04 de octubre de 2016/Fuente: lainformacion

La organización no gubernamental Save the Children ha reclamado más ayudas económicas destinadas a los niños de Afganistán ante el aumento de la violencia que se está registrando en todo el país.

Tras recordar los informes que «revelan que la ayuda europea a Afganistán podría estar condicionada por la devolución de 80.000 solicitantes de asilo afganos desde Europa», Save the Children ha manifestado en un comunicado su preocupación por los efectos de esa retirada de ayuda en los derechos de la infancia en Afganistán.

Ante la celebración este miércoles de una reunión internacional en Bruselas para recabar fondos económicos para Afganistán, Save the Children ha exigido «una inversión de carácter urgente en salud, educación y protección de la infancia con el fin de evitar un retroceso en su desarrollo».

«La ayuda se debe impulsar únicamente por las necesidades de los niños afganos y sus familias. No debe estar condicionada a la devolución de miles de solicitantes de asilo, especialmente al ver cómo han aumentado los niveles de violencia y conflictos en todo el país», ha denunciado la directora general de Save the Children en Afganistán, Ana Locsin.

 «A pesar de las mejoras sanitarias y educativas en la última década», la organización no gubernamental cree que la situación sigue siendo «muy grave» para la infancia en Afganistán, con dos de cada cinco niños menores de cinco años «desnutridos» y cuatro de cada cinco niñas sin poder terminar la escuela primaria.

Save the Children ha señalado que la violencia «se ha intensificado en gran parte del país durante los dos últimos años» y que en 2015 «se registró el mayor número de víctimas civiles en un período de 12 meses desde que un informe de la ONU iniciase el registro de víctimas en 2009».

«Sin la ayuda urgente y sostenida de la comunidad internacional, incluyendo los fuertes compromisos en materia de salud, educación y protección, gran parte de los avances conseguidos podrían comenzar a erosionarse», ha asegurado Locsin.

La ONG ha advertido de que los desplazamientos internos en Afganistán «están aumentando» debido al incremento de la violencia y los conflictos «están obligando a niños y familias enteras a huir de sus hogares en busca de una vida más segura». «El país no está preparado para hacer frente al gran número de personas desplazadas que hay», ha indicado.

En esta misma línea, ha señalado que «cientos de miles de afganos instalados en Pakistán se están viendo obligados a regresar a sus hogares para escapar de los incidentes de violencia, arrestos arbitrarios, detenciones y otras formas de acoso que sufren en territorio paquistaní».

Este potencial regreso repentino de «un millón de afganos que huyeron de los combates en Afganistán en la década de 1980 supondría una enorme carga para las comunidades a las que regresan», a juicio de la ONG. «Es muy importante que los menores que regresen tengan los mismos derechos que el resto de niños que viven en el país», ha explicado Save the Children.

«Al mismo tiempo, el número de niños que se dirigen a Europa ha aumentado drásticamente en comparación con hace unos años. El hecho de que estos menores abandonen el país, exponiéndose a riesgos enormes y, a menudo haciendo el viaje solos, muestra el nivel de desesperación que sienten», ha afirmado Locsin. Más de la mitad de los niños no acompañados que solicitaron asilo en Europa en 2015 eran de Afganistán.

«Hay muchas razones por las que deciden huir, incluyendo la falta de acceso a la educación, los conflictos, la violencia y la pobreza. Y lamentablemente salen de sus casas para encontrarse con otros peligros en el camino a Europa. Los países europeos no deben obligar a los niños a volver a un lugar donde pueden recibir amenazas y estigmas por haber traicionado a su familia o a su país», ha asegurado la responsable de Save the Children en Afganistán.

Por todo ello, Save the Children ha hecho un llamamiento a los líderes mundiales que participarán en la Conferencia de Bruselas este miércoles para hablar sobre Afganistán que trabajen de manera constructiva durante la reunión para la realización de compromisos para aumentar la ayuda a Afganistán y para responder con urgencia a las crecientes necesidades de los afganos repatriados y de los desplazados internos.

Por último, ha exigido al Gobierno afgano que trabaje para que se cumplan los derechos y la protección de todos los niños afganos como prioridad política.

Fuente: http://www.lainformacion.com/politica/ayuda-internacional/Save-Children-afganos-violencia-Afganistan_0_959304473.html

Imagen: img.europapress.net/fotoweb/fotonoticia_20161003121914_640.jpg

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