Saltar al contenido principal
Page 3 of 4
1 2 3 4

La ciencia permanece como dominio de las grandes potencias

Fuentes: IPS

El mundo gasta más dinero en la ciencia y el número de investigadores aumenta, pero esos avances siguen concentrados en unos pocos países poderosos, planteó el más reciente estudio de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco).

El informe “La carrera contra el reloj para un desarrollo más inteligente”, divulgado en esta capital, registró que el gasto mundial en ciencias aumentó 19 por ciento entre 2014 y 2018, y el número de investigadores se incrementó en 13,7 por ciento.

Sin embargo, hay importantes disparidades: solo dos países (Estados Unidos y China), son responsables de casi dos tercios de esa progresión (63 por ciento), en tanto que cuatro de cada cinco países van muy por detrás e invierten menos de uno por ciento de su producto interno bruto en investigación científica.

Por lo tanto, “el paisaje científico sigue siendo un paisaje de las grandes potencias”, asentó el informe divulgado en la sede de la Unesco en esta capital.

América del Norte invierte 2,73 por ciento de su PIB en investigación y desarrollo científico, la Unión Europea 2,02 por ciento (Alemania 3,09), Rusia 0,99 y Asia oriental y sudoriental 2,13 por ciento  (Japón 3,26 y China 2,19 por ciento).

América Latina invierte 0,66 por ciento de su PIB (Brasil 1,26, Argentina 0,54 y México 0,31 por ciento), Asia del sur 0,60, África subsahariana 0,51, los Estados árabes 0,59 y, en el oeste de Asia (1,37) Israel invierte 4,95 por ciento.

“Los desafíos actuales –ya sea relacionados con los cambios climáticos, la pérdida de la biodiversidad, el declive de la salud del océano o las pandemias– son hoy planetarios, y, por lo tanto, precisan movilizar a científicos e investigadores del mundo entero”: Audrey Azoulay.

En número de investigadores por millón de habitantes, América del Norte tiene 4432, la Unión Europea 4069, Rusia 2784, Asia oriental y sudoriental 1476 y los Estados árabes 736.

En Asia del sur hay 263, en África subsahariana 124, en América Latina 593 (1192 en Argentina, 888 en Brasil y 260 en México) y en el Caribe 520.

La inteligencia artificial (IA) y la robótica son áreas muy dinámicas, según el texto, y destaca que solo en 2019 se publicaron casi 150 000 artículos al respecto.

Por el contrario, hay ámbitos decisivos de la investigación que atraen inversiones mucho menores: en 2019 la investigación sobre la captación y el almacenamiento de carbono dieron lugar únicamente a 2500 artículos, 60 veces menos que la IA.

Y en seis de los 10 países más especializados en ese ámbito, la temática está en neto retroceso (Canadá, Francia, Alemania, Países Bajos, Noruega y el actual líder, Estados Unidos).

También el campo de las energías sostenibles está insuficientemente explorado, ya que en 2019 representó únicamente 2,5 por ciento de las publicaciones mundiales.

La conclusión ante esa evidencia es que queda un largo camino por recorrer para que la ciencia pueda aportar todo su potencial al desarrollo sostenible.

Audrey Azoulat, directora general de la Unesco, dijo que “es indispensable una ciencia mejor dotada, debe ser menos desigual, más cooperativa y más abierta”.

“Los desafíos actuales”, prosiguió Azoulay, “ya sea relacionados con los cambios climáticos, la pérdida de la biodiversidad, el declive de la salud del océano o las pandemias, son hoy planetarios, y, por lo tanto, precisan movilizar a científicos e investigadores del mundo entero”.

Aunque en los últimos años la cooperación científica progresó, solo produjo una de cada cuatro publicaciones. “Además, pese al formidable aliento colectivo al que dio lugar la lucha contra la covid-19, persisten en el mundo numerosas trabas que continúan obstaculizando la investigación”, asentó el informe.

Por ejemplo, más de 70 por ciento de las publicaciones permanecen inaccesibles para la mayoría de los investigadores. El informe documenta esfuerzos para derribar estas barreras, fuente de desigualdad e ineficacia, y preconiza modelos nuevos de circulación y difusión del conocimiento científico.

La Unesco trabaja en ello, desde 2019 prepara un instrumento normativo mundial en pro de la ciencia abierta, y aspira que el texto se adopte en la próxima conferencia general de la organización, en noviembre de 2021.

El Informe también recogió que en el mundo solo un tercio de los investigadores son mujeres, y aunque la paridad de género es casi total en ciencias de la vida, es algo todavía muy lejano en otros muchos ámbitos científicos prometedores.

Por ejemplo, las mujeres representan únicamente 22 por ciento de los efectivos empleados en IA, “una traba que no es únicamente actual, sino también futura, porque no podemos dejar que la ciencia del futuro reproduzca o incluso amplifique las desigualdades de la sociedad”, según la Unesco.

El informe subrayó que la ciencia debe congregar a toda la humanidad para hacer frente a los desafíos actuales y por venir, y preconizan la vulgarización científica para sostener la confianza de la sociedad en que la ciencia es su aliada.

Fuente: https://ipsnoticias.net/2021/06/la-ciencia-permanece-como-dominio-de-las-grandes-potencias/

Comparte este contenido:

La Coalición Mundial para la Educación examina el momento crucial del aprendizaje digital en África

El 25 de mayo de 2021, con motivo del Día de África, la UNESCO congregó a los ministros del continente africano, a los agentes educativos y a los representantes del sector privado durante el foro en línea de la Coalición Mundial para la Educación (CME), titulado “El momento crucial del aprendizaje digital en línea: qué papel desempeñan los ecosistemas locales”.

“Celebramos esta jornada tras la mayor perturbación de la educación en la historia reciente. Esta perturbación ha exacerbado las desigualdades y amenaza seriamente los logros alcanzados durante décadas en materia de desarrollo en el continente y en todo el mundo”, declaró la Sra. Stefania Giannini, Subdirectora General de Educación de la UNESCO, durante la inauguración del foro ante más de 200 participantes. “Pero también ha permitido innovaciones que garantizan que todos los niños y jóvenes tengan acceso a una educación de calidad y a un aprendizaje diferente y de mejor calidad”.

Al igual que otras regiones del mundo, el cierre de las escuelas debido a la COVID-19 en África tuvo una repercusión en la educación de millones de alumnos, incrementando las desigualdades existentes y afectando más a las poblaciones más vulnerables, en particular a las niñas, a los niños discapacitados y a los educandos que viven en las regiones rurales. Según un documento publicado por la UNESCO con motivo del Día de África, el cierre de las escuelas en todo el continente duró entre 11 y más de 40 semanas.

Como respuesta a la pandemia, numerosos gobiernos africanos lanzaron inmediatamente emisiones educativas a través de la televisión, la radio o en línea. Aunque se trataba de iniciativas positivas, solo el 34% de los hogares tienen acceso a Internet y aproximadamente el 89% de los educandos no tienen acceso a una computadora en sus casas, algo que hace de la brecha digital el mayor obstáculo para la continuidad pedagógica.

Creada al comienzo de la pandemia de COVID-19 para apoyar la continuidad pedagógica, la Coalición Mundial para la Educación de la UNESCO dio prioridad a África en sus operaciones. Hoy en día, la Coalición trabaja en 66 proyectos en 39 países de África y se están debatiendo otros 38 proyectos.

El Sr. Firmin Matoko, Subdirector General de la Prioridad África y de Relaciones Exteriores de la UNESCO, advirtió que la pandemia llevó a 34 millones de africanos a la pobreza extrema y destacó lo urgente de aumentar la eficacia del aprendizaje a distancia, apoyar a los docentes y construir conjuntamente con los jóvenes el futuro. “Se debe seguir sacando provecho del espíritu de celebración e innovación que existe hoy a través de toda África para apoyar la continuidad pedagógica mediante las inversiones en nuestros jóvenes, nuestras tecnologías y nuestros agentes educativos con miras a construir un futuro mejor para el continente”, declaró.

El interés cada vez mayor en sacar provecho de las tecnologías con miras al reforzamiento de los sistemas educativos permite reinventar, a través de diversas alianzas intersectoriales, un nuevo futuro para la educación en el continente africano apoyándose en los objetivos de la Agenda 2063, la Estrategia Continental de Educación para África (CESA) y el Objetivo de Desarrollo Sostenible sobre la educación.

S. E. la profesora Sarah Anyang Agbor, comisaria de la Unión Africana para la Educación, la Ciencia, la Tecnología y la Innovación, hizo hincapié en el hecho de que “la pandemia había reforzado la importancia de transformar los sistemas educativos del continente mediante la educación digital”. Asimismo, explicó que es este el objetivo de la estrategia tecnológica digital de la Unión Africana que adopta un enfoque holístico que abarca el acceso, la calidad, los contenidos pedagógicos, las pedagogías, la conectividad y los dispositivos.

Durante la primera mesa redonda, los ministros africanos de la República de Côte d’Ivoire, Ghana, el Reino de Marruecos y Túnez, así como el representante de la República Democrática del Congo, intercambiaron las lecciones extraídas de la pandemia y los desafíos a escala nacional en materia de generalización del aprendizaje digital y de ecosistemas locales. Resaltaron los problemas de equidad, de formación de docentes, de conectividad, de mala calidad de las infraestructuras y de carencia de dispositivos. Y convinieron en que la pandemia había acelerado la transformación digital, indicado una dependencia cada vez mayor con respecto al aprendizaje híbrido y subrayando la necesidad urgente de movilizar las financiaciones y las alianzas y de reforzar el aprendizaje entre homólogos, el intercambio de conocimientos y la necesidad de compartir los recursos educativos con espíritu solidario.

La mesa redonda de los asociados de la CME que tuvo lugar a continuación permitió presentar ideas para desarrollar ecosistemas de aprendizaje digital prósperos en África, que incluyen la participación de las partes interesadas clave, la movilización de financiaciones y la instauración de amplias estrategias. Finalmente, una sesión dedicada al mercado presentó soluciones locales y globales prometedoras y oportunidades de reforzar los ecosistemas locales para el aprendizaje digital, concebidos por los participantes de la CME, empresas y redes tales como Technovation, Pix, LabXchange, Curious Learning, Teach for All, Blackboard, Orange, Vodacom, Weidong Cloud Education y la Universidad del Pueblo.

Instantánea de los desafíos educativos y de las posibilidades de recuperación en África

Basándose en datos a escala subregional, incluido el paso al aprendizaje a distancia, el documento de la UNESCO, Instantánea de los desafíos educativos y las posibilidades de recuperación en África, destaca los retos y las respuestas a la COVID-19.

Con respecto a la transición hacia la enseñanza a distancia y la brecha digital en África, el documento subraya que la crisis vinculada a la COVID-19 y el cierre repentino de las escuelas provocaron evoluciones rápidas a escala nacional para remplazar la enseñanza presencial por diferentes formas de enseñanza a distancia e híbrida basada en las TIC. Los datos del UIS, 2021, demuestran que el momento de mayor auge de la pandemia y en septiembre de 2020, se impartió el aprendizaje en línea como solución eficaz en el conjunto de los países del mundo (84-86%). No obstante, África subsahariana y, en menor medida, África del Norte, no disponían de suficientes dispositivos ni de una conexión a Internet adecuada para apoyar la enseñanza y el aprendizaje en línea y a distancia para todos los alumnos. Un año después de que comenzara la pandemia, los países africanos deben crear y apoyar un entorno propicio para ampliar las infraestructuras de aprendizaje digital para que nadie quede rezagado.

El informe concluye que, durante los dos últimos decenios, África alcanzó importantes progresos en materia de desarrollo social, crecimiento económico y educación, que se han visto afectados por la pandemia. Si no se toman medidas audaces, sacando provecho del potencial de innovación y creatividad, como las iniciativas educativas concebidas y puestas en marcha durante la crisis, esta situación podría exacerbar la pobreza y las desigualdades en un futuro cercano.

Al ser la educación el mayor igualador de la sociedad y en la mejor posición para contribuir a reducir las desigualdades, se han identificado las siguientes acciones a corto y largo plazo para que la educación desempeñe un papel clave en la recuperación del continente:

Prioridades a corto y mediano plazo:

  • Volver a escolarizar a los educandos
  • Organizar programas de recuperación
  • Empoderar a los educandos (la tecnología digital debe integrarse a su formación, incluidas las pedagogías relativas al aprendizaje mixto)
  • Apoyar la demanda de educación, en particular por parte de las poblaciones desfavorecidas
  • Implementar programas de perfeccionamiento de recualificación para los trabajadores que corren mayor riesgo de perder su empleo
  • Proteger los gastos públicos dedicados a la educación

Prioridades a largo plazo:

  • Hacer frente a los desafíos estructurales de larga duración, fundamentalmente, el acceso, la equidad y la calidad de la educación
  • Movilizar más recursos a escala nacional para la educación
  • Invertir en las infraestructuras (incluido en los dispositivos digitales y en la conectividad)
  • Emprender una transformación digital de la educación y sacar provecho de las tecnologías para promover la calidad y la equidad de la educación y las posibilidades de aprendizaje a lo largo de toda la vida para todos

Fuente: https://es.unesco.org/news/coalicion-mundial-educacion-examina-momento-crucial-del-aprendizaje-digital-africa

Comparte este contenido:

Los desafíos de la educación en pandemia

Por: portafolio.co

Se estima  que en el momento más crítico, más de 160 millones de estudiantes latinoamericanos dejaron de estar en sus escuelas

La pandemia ha desnudado las profundas carencias e inequidades y la falta de preparación de los sistemas educativos latinoamericanos para enfrentar los retos de la educación fuera del aula.

Se estima que en el momento más crítico, más de 160 millones de estudiantes dejaron de estar en sus escuelas, cifra que evidencia, por un lado, el déficit de integración de herramientas digitales y, por otro, la gran brecha de América Latina y el Caribe en comparación con estados más avanzados.

Otra de las falencias que ha destapado la pandemia es la deficiente preparación y capacitación de los docentes para utilizarlas en el aprendizaje. Si se suma la falta de acceso, especialmente de las familias más vulnerables, a herramientas como computadores, tablets, teléfonos, y buena conexión a internet, los resultados a corto plazo son preocupantes.

Caídas en el desarrollo de habilidades básicas en lectura escritura y matemáticas; profundización de brechas socioeconómicas preexistentes que afectan especialmente a las familias de menores recursos; y afectación al desarrollo integral de niños y niñas en su salud y alimentación.

Pero posiblemente, a mediano y largo plazo, el efecto más grave de la pandemia puede ser el incremento en la deserción escolar y sus devastadoras consecuencias, como la interrupción de las trayectorias educativas, la reducción de oportunidad de conseguir empleos de calidad y remuneraciones potenciales más bajas.

De todas formas, la crisis actual presenta oportunidades de mejora, especialmente para aprovechar mucho más la tecnología para potencial las habilidades digitales de estudiantes y maestros, mejorar la gestión de los sistemas educativos y formar para la cuarta revolución industrial.

En este video se presentan una serie de medidas que deberían contribuir a cerrar la brecha educativa de la región, reformulando la relación entre escuela y comunidad, e imaginando nuevas e innovadoras formas de relación entre estudiantes y profesores dentro y fuera del aula.

Vídeo y texto: Fernando Ehlers, ejecutivo principal de comunicación en CAF
Visiones del Desarrollo es una sección promovida por CAF -banco de desarrollo de América Latina- que analiza los principales temas del desarrollo de la región. Los artículos que contiene se publican simultáneamente en los principales medios de América Latina.

https://www.portafolio.co/internacional/los-desafios-de-la-educacion-en-pandemia-551425

Comparte este contenido:

Educación y Transdisciplinariedad

Por: Oscar Zamora Zambrano

Introducción

Un estado de cosas convulso, en el que la sobrevivencia de la especie humana está en juego, permite evidenciar la necesidad perentoria que tenemos de comprender la realidad, para entonces tener la posibilidad de emprender esfuerzos que apunten a su transformación. En medio de esta tarea urgente, la humanidad puja por comprender lo que sucede en un espacio que media entre las partículas que colisionan en las entrañas de los átomos hasta lo astronómicamente gigantesco que va años luz más allá del planeta que habitamos. El sólo reconocimiento de la infinitud de este maravilloso escenario permite prefigurar su condición compleja.

En “La teoría del todo”, película basada en el libro “Hacia el infinito. Mi vida con Stephen Hawking” de Jane Wilde Hawking, se recrea una conferencia en la que el científico expone lo siguiente:

… sólo somos una rama avanzada de primates en un planeta menor que orbita alrededor de una estrella común, en la periferia de una galaxia, entre otras cien mil millones de galaxias. Pero, desde el principio de la civilización, las personas han deseado entender el orden subyacente del mundo. Debe haber algo muy especial sobre la naturaleza de los límites del universo y lo que puede ser mas especial que eso, es que no haya límites. (Hawking citado en McCarten, 2014).

El planteamiento de Hawking expresa, por una parte, la inconmensurable complejidad del universo y por otra, el deseo irrefrenable del ser humano por comprenderlo. Pero la complejidad, más allá de la etimología de la palabra y de la carga semántica impuesta por el sentido común, ha devenido en una categoría en sí misma compleja para definir. En este sentido, el principal exponente de la teoría de la complejidad afirma que es complejo “aquello que no puede resumirse en una palabra maestra, […] lo complejo no puede resumirse en el término complejidad, retrotraerse a una ley de complejidad, reducirse a la idea de complejidad” (Morín, 1990, p. 21).

Se inicia este escrito abordando la complejidad, por considerar que esta condición sustenta y justifica la transdisciplinariedad. Manfred Max-Neef (2004, p. 2) afirma que esta condición convulsa de la sociedad actual, caracterizada por “migraciones forzosas, pobreza, crisis ambientales, violencia, terrorismo, neo-imperialismo, destrucción de tejidos sociales [no] puede ser adecuadamente abordada desde el ámbito de disciplinas individuales específicas. Se trata de desafíos claramente transdisciplinarios”.

Al explicar el principio dialéctico de concatenación universal, Rodrigo Navarrete (2007, pp. 66-67) concibe la realidad “como un todo estructurado y orgánico en donde todos los objetos y fenómenos que la componen mantienen relaciones de interacción a través de una compleja de red de conexiones, directas o indirectas”. Esta madeja de fenómenos interconectados es lo que plantea que “El desafío de la complejidad [sea] el de pensar complejamente como metodología de acción cotidiana, cualesquiera sea el campo en el que desempeñemos nuestro quehacer” (Pakman citado en Morín, 1990, p. 14), y es precisamente la transdisciplinariedad una manera de instrumentalizar el pensamiento complejo, para revertir la tendencia simplificadora que viene implicando disyunción y atomización de los fenómenos de la realidad en su dimensión gnoseológica y epistemológica, en procura de neutralizar el riesgo de que también se asuman fragmentados los fenómenos en su condición ontológica.

Duque (2000) refiere que “La metodología de la investigación transdisciplinar está determinada por: los niveles de realidad, la lógica del tercero incluido, y por la complejidad”. Otros autores, como Edgar Serna, reivindican al Maestro Paulo Freire respecto a la transdisciplinariedad, encontrando que en su pensamiento “la complejidad y la dimensión universal trascienden hacia la transdisciplinariedad como otro tema central de su obra. Porque como educador debe transitar a través de y en relación con diversas áreas del conocimiento” (Serna, 2016, p. 215).

La transdisciplinariedad y los nuevos desafíos en la educación universitaria

Docencia, Investigación y Extensión, son en modo general, las funciones que se le ha asignado a la Universidad por asociación a la educación universitaria, introduciéndose I+D (Investigación y Desarrollo) en la ecuación original. Pero en un mundo con abismales asimetrías sociales y económicas, en virtud de un modelo de sociedad global clasista, habría que establecer ciertas consideraciones cuando se trata de precisar los desafíos en la educación universitaria, pues no serán de la misma orientación los desafíos de la educación universitaria de un país industrializado, que los desafíos en algunos de los países denominados emergentes o subdesarrollados.

La revisión de algunos antecedentes de capital importancia, ayudan a nutrir el contexto de los desafíos de la educación universitaria, particularmente en Venezuela y en países cuyas condiciones histórico-sociales y geoestratégicas puedan asimilarse:

  • Decreto del 24 de junio de 1827 promulgado por el Libertador Simón Bolívar, para entonces Presidente de Colombia (la Grande), en el que se dictaban los Estatutos Republicanos de la Universidad Central de Venezuela, los cuales iban dirigidos a reformar la vieja universidad colonial, elitista y eclesiástica, para dar paso a una nueva institución, democrática, impulsada por una auténtica vocación científica y que fuese abierta a sectores sociales que hasta entonces la tenían vedada por razones de casta.
  • Movimiento de la Reforma Universitaria de Córdoba, Argentina, en 1918, en el que se propuso crear una Universidad que rompiera con el modelo colonial y aristocrático que imperaba entonces en Latinoamérica.
  • Movimiento de Renovación Universitaria de finales de la década de 1960 en Venezuela, el cual tenía como propósito impulsar un cambio radical en las estructuras académicas Universitarias.

Se puede notar que ha existido una pugna histórica entre sectores conservadores y sectores progresistas en torno a la posibilidad de un sistema educativo universitario más democrático, verdaderamente científico y definitivamente conectado y comprometido con los más altos intereses de los pueblos de Latinoamérica. Particularmente en Venezuela, expresados estos intereses como fines esenciales del Estado en el texto Constitucional.

En cuanto a la caracterización de la educación universitaria de aquellos años de la década de 1960 del Movimiento de Renovación Universitaria, que mantuvo sus atributos fundamentales durante todo el siglo XX y que ha persistido en su influencia aún por estos días, serán referidas las posturas de tres investigadores latinoamericanos, activos militantes de las luchas por la renovación universitaria. Estas referencias, por cierto, abundan en argumentos que evidencian las asimetrías de las condiciones económicas-políticas-sociales y por tanto, el imperativo de diferenciar los desafíos y su signo político:

  • Oscar Varsavsky (2006), por ejemplo, afirma que la universidad latinoamericana “padece un defecto esencial: no es nuestra”. Añadiendo que esta viene a representar un enclave que reproduce la concepción de ciencia, tecnología y técnica entronizada en la cultura occidental, y por esta vía, reproduce y promueve su modelo de industrialización y economía, sus patrones de consumo, la noción de trabajo y de sociedad. Para Varsavsky, la universidad latinoamericana ha sido diseñada históricamente para transmitirnos e inocularnos el “estilo cultural” que celebran los grandes medios de comunicación y la grandes editoriales, al punto en que pretenden sea la única opción para “salir” del subdesarrollo.
  • Darcy Riveiro (2006), por su parte, manifiesta que la situación de sujeción de la universidad latinoamericana respecto a la universidad de las potencias occidentales se explica por los efectos de la dependencia socioeconómica y cultural que pesa sobre América Latina desde los tiempos de la colonia. Según Riveiro, las élites políticas, científicas e incluso académicas latinoamericanas sólo han aspirado una “modernización” que permita la incorporación de nuestros países en el mercado mundial como proveedores seguros de materia prima, en condiciones de calidad, cantidad y bajos precios, y al mismo tiempo como destino comercial cautivo de productos elaborados y de tecnología depredadora del medio ambiente y de la salud de los trabajadores. Añade Riveiro que de esta forma, la universidad latinoamericana ha sido connivente con el sistema capitalista, en cuanto que reivindica la tesis de las etapas del crecimiento económico de Walter Rostow, según la cual, para alcanzar altos niveles de industrialización hay “… un sólo proceso de desarrollo y que este era lineal, acumulativo e igual para todos los países” (Boron, 2009).
  • Mientras que José Rafael Núñez Tenorio (2009), plantea que la universidad latinoamericana ha sido cómplice de la política neocolonizadora que desarrolla los Estados Unidos de Norteamérica. Para Núñez Tenorio, desde esta perspectiva se ha concebido a la universidad como una entidad meramente instrumental, tecnocrática y convenientemente elogiada como “moderna” por los centros de poder global, generadora de profesionales útiles al sostenimiento de un modelo dependiente y cada vez más subdesarrollado. La universidad latinoamericana, según este autor, está sostenida por élites políticas entreguistas que promueven, por la vía de la distorsión curricular y otros mecanismos, una conciencia neocolonial, aunque barnizada de una condición dizque “científica” y “tecnológica”. Núñez Tenorio considera que la dirigencia estadounidense no tiene dudas en cuanto a lo que considera “conveniente” a los intereses de los pueblos latinoamericanos en el plano universitario, por ello sutilmente desarrolla acciones dirigidas a ganar conciencias neocoloniales en nuestros países, conciencias enajenadas en favor de los intereses de los centros de poder global. El investigador destaca que tales acciones “persiguen fines bien precisos, al servicio de la política estadounidense de sumisión colonial de nuestra cultura y nuestras universidades”.

En correspondencia con la complejidad de los desafíos de naciones que procuran su emancipación científica y tecnológica para apuntalar su desarrollo económica autónomo y autodeterminación política, la teoría transdisciplinarprovee vías para el abordaje de la realidad, procurando una aproximación a la esencia de los fenómenos, en franco diálogo entre las distintas disciplinas.

Educación, práctica educativa y abordaje de la realidad desde una perspectiva transdisciplinaria

La educación no representa un fin en sí misma, esta sólo tendrá un sentido trascendente si logra sustentar la libertad de conciencia, fomentar la valoración crítica de la realidad, apuntalar la defensa y el desarrollo de la persona y el respeto a su dignidad, el ejercicio democrático de la voluntad popular, la construcción de una sociedad justa y amante de la paz, y la promoción de la prosperidad y bienestar del pueblo, tal como lo establece el Artículo 3 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela.

Para asegurar que la educación, en tanto proceso fundamental de la sociedad venezolana cumpla su elevado rol, es menester que sus métodos y la filosofía que le sustenta sean permanente revisados y actualizados. En este sentido, en 2015, con ocasión del Proceso de Transformación Curricular del Subsistema de Educación Media emprendido por el Ministerio del Poder Popular para la Educación venezolano, se pudo comprobar la necesidad de promover una práctica educativa que implique la capacidad de intervenir la realidad desde una perspectiva transdisciplinar.

 En el aparte de diagnóstico del Documento General de Sistematización de las Propuestas Pedagógicas y Curriculares Surgidas en el Debate y Discusión y Orientaciones Fundamentales se puede leer:

Hay jóvenes que expresan que sus clases, sus ‘profes’ son aburridos, que no cuentan con espacios para aprender a saber, más allá del sistema disciplinar, asignaturizado, fraccionado y atomizado, creando cabezas entrenadas, adiestradas, enajenadas y dominadas por un pensamiento simple, que inclusive, los y las imposibilita a comprender el mundo complejo y multidimensional en el cual les ha correspondido vivir. (MPPE, 2015, p. 25)

Este hallazgo en el diagnóstico es explicado en el documento desde la Teoría del Pensamiento Complejo de Edgar Morin, refiriendo la tensión entre la aspiración a un saber no parcelado y no reduccionista y la aceptación de que la búsqueda de la verdad científica implica el reconocimiento de la incompletitud, de la posibilidad de vivir en permanente incertidumbre siempre que se transite un proceso de indagación permanente.

Más adelante en la argumentación para desarrollar un currículo nacional integrado y actualizado, se asimila tal integración al enfoque inter y transdisciplinar.

Conclusiones

La transdisciplinariedad, en tanto modo de abordaje del hecho educativo, es hoy un imperativo si se pretende objetivar lo que hasta ahora ha pasado desapercibido en la relación estudiante-docente, docente-comunidad, docente-docente. De modo que se potencien en los centros educativos todas sus capacidades transformadoras comunitarias.

La transdisciplinariedad, así como el pensamiento complejo dispuestos como plataforma operativa de los estudiantes frente a la realidad que deben enfrentar y a la naturaleza que deben armónicamente dominar, se constituye en un mandato si se quiere superar las contradicciones de un orden global que cada día somete con mayor crueldad y sin disimulo a un sector inmensamente mayoritario de la población mundial, a decir de Paulo Freire, los desharrapados del mundo: “Quienes instauran el terror no son los débiles, […] sino los violentos, quienes, con su poder, crean la situación concreta en la que se generan los ‘abandonados de la vida’, los desharrapados del mundo” (Freire, 1970, p. 56).

Referencias

Boron, A. (2009). Socialismo siglo XXI: ¿Hay vida después del neoliberalismo. Caracas: Monte Ávila.

Duque, R. (2009). Disciplinariedad, interdisciplinariedad, transdisciplinariedad: vínculos y límites (II).  Semestre Económico [Revista en línea]. 4(8), 145-158. Disponible: https://revistas.udem.edu.co/index.php/economico/article/view/1398 [Consulta: 2021, marzo 13]

Freire, P. (1970). Pedagogía del oprimido [Libro en línea]. Disponible: https://fhcv.files.wordpress.com/2014/01/freire-pedagogia-del-oprimido.pdf [Consulta: 2021, marzo 13]

Max-Neef, M. (2004). Fundamentos de transdisciplinaridad [Documento en línea]. Disponible: http://ecosad.org/phocadownloadpap/otrospublicaciones/max-neef-fundamentos-transdisciplinaridad.pdf [Consulta: 2021, marzo 13]

McCarten, A. (Productor/Guionista), Marsh, J. (Director) y Hawking, J. (Escritora). (2014). La teoría del todo [Película]. Reino Unido: Working Title Films.

Ministerio del Poder Popular para la Educación. (2015). Proceso de transformación curricular para la educación media general en la modalidad jóvenes y adultos: documento general de sistematización de las propuestas pedagógicas y curriculares surgidas en el debate y discusión y orientaciones fundamentales [Documento en línea]. Disponible: https://siteal.iiep.unesco.org/sites/default/files/sit_accion_files/ve_0462.pdf [Consulta: 2021, marzo 13]

Morin, E. (1990). Introducción al pensamiento complejo [Libro en línea]. Disponible: https://norberto2016.files.wordpress.com/2016/10/morinedgar_introduccion-al-pensamiento-complejo_parte1.pdf [Consulta: 2021, marzo 13]

Navarrete, R. (2007). Nosotros y los otros: aproximación teórico-metodológica al estudio de la expresión de la etnicidad en la cerámica de las sociedades barrancoide y ronquinoide en el bajo y medio Orinoco (600 a.C.-300 d.C.). Caracas: Monte Ávila.

Núñez, J. (2009). Renovar la renovación: Hacia la constituyente universitaria. Caracas: El perro y la rana.

Riveiro, D. (2006). La universidad nueva: Un proyecto. Caracas: Biblioteca Ayacucho.

Serna, E. (2016). La Transdisciplinariedad en el pensamiento de Paulo Freire.  Revista de Humanidades [Revista en línea]. 33, 213-243. Disponible: https://www.redalyc.org/pdf/3212/Resumenes/Resumen_321246548009_1.pdf [Consulta: 2021, marzo 13]

Varsavsky, O. (2006). Hacia una política científica nacional. Caracas: Monte Ávila.

Comparte este contenido:

Desafíos De La Educación Universitaria Venezolana

Por: Solange Celeste Mendoza Mendoza*

Resumen

Este artículo pretende realizar una descripción de los desafíos que ha afrontado la educación en general, pero en especial la universitaria, como garante de los procesos de transformación económica del país, mencionando principalmente tres (3) desafíos de los mucho que la población venezolana y la educación ha padecido: Bloqueo Económico y Sanciones, Apagón Eléctrico y Tecnológico y la llegada de la pandemia del Coronavirus, siendo este último el de mayor impacto ha tenido, motivado al giro que ha dado la educación en general para poder garantizar el derecho a la educación, protegiendo la vida de los docentes, estudiantes y comunidad en general durante los dos momentos vividos: cuarentena radical y método 7×7, y actualmente el 7×7 plus, a través de la estrategia de Universidad en Casa, y el rol que le han dado a las Tecnologías de Información y Comunicación, a pesar de las desavenencias y problemas presentados por los dos desafíos anteriores.

Palabras Claves: Desafíos, Educación Universitaria, Tecnologías de Información y Comunicación, Universidad en Casa

Introducción

La educación en todos sus ámbitos han sufrido grandes cambios con el pasar del tiempo, pero en el caso de Venezuela, sus grandes cambios han surgido desde el nacimiento de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, aprobada por la mayoría del pueblo en 1999 y enmendada, con gran esfuerzo y lucha y gracias al pueblo venezolano en 2009, y todo ello con la finalidad de poner

* Ingeniera en Informática. Magíster en Educación Comparada. Profesora Adscrita al Programa de Formación de Grado en Estudios Jurídicos. Universidad Bolivariana de Venezuela. Eje Geopolítico Territorial Cipriano Castro. Eje Municipal Tamá. Sede Táchira

en primer lugar al ser humano y buscando la sinergia entre todos los ámbitos (económico, social, cultural, entre otros) para potenciar al país y por ende a la región. A raíz de la misma, han surgido diferentes políticas públicas, la cual es bueno mencionar que ellas se trata según Colina (s,f),

Indudablemente el sistema político se encarga de diseñar las políticas públicas obligatorias para la satisfacción de las necesidades de la población. Desde esta perspectiva coincido con la opinión de Piñango (2003), quien considera que las mismas son proposiciones gubernamentales sobre la mejor forma de lograr determinados objetivos sociales.

Más y relacionando al tema a la educación, pero para efecto de este artículo se concentrará en el subsistema universitario. Como se mencionó con anterioridad, han surgido nuevas políticas públicas para poder saldar una gran deuda social: el acceso a la educación con calidad, por ello, que desde el 2003, y luego de que Venezuela y el Gobierno Revolucionario liderado por el Comandante Hugo Rafael Chávez Frías afrontaran una guerra campal para arrebatar la revolución como fueron los golpes de estado (2002) y el paro petrolero (2003) nacieron misiones educativas como la Misión Sucre y universidades como Universidad Bolivariana de Venezuela, Universidad Nacional de las Artes, entre otras.

Sus inicios no fueron fáciles, hubo quienes apostaron a su fracaso, pero hubo más quienes aportamos y apostamos a que se consolidaran tanto los sueños de quienes nunca pudieron terminar sus estudios universitarios, o quienes no pudieron estudiar la carrera que querían por diferentes razones (entre otras los procesos de pruebas de admisión, costos de las universidades y también operaciones y procesos ilegales como operaciones colchón); se pudo más la perseverancia y constancia de muchas personas que llevaron al éxito de estas y demás misiones y políticas públicas enmarcadas a la potenciación de la tecnología y el conocimiento científico y comunitario por medio de las tecnologías, generando a que en la educación se obligara a repensar su manera de enseñar y aprender, muchas veces desaprendiendo viejos conocimientos inadecuados u obsoletos en tiempo y espacio, aunque también conllevó a una lucha interna y externa de los docentes en cuanto a la resistencia al cambio que presentaron muchos y otros por mero interés personalista y hasta económico.

Sin embargo, a pesar de las vicisitudes por las cuales Venezuela y el gobierno revolucionario, en conjunto con su pueblo ha padecido, como lo descrito en el párrafo arriba, a su vez el año 2004 que fue el proceso del referéndum que resultó ser confirmatorio para el Comandante Chávez, nadie, ni lo más acérrimos enemigos ni el pueblo mayoritariamente creyente en Dios y en Chávez, se imaginó de nuevos y hasta desafortunados  acontecimientos  por las cuales tendríamos que afrontar, sin saber si estábamos completamente preparados para ello o no, y que afectaría a todos los ámbitos, sistemas y subsistemas existentes, incluyendo la universitaria, quienes en aquellas universidades tradicionales que impidieron la ejecución de políticas, por supuesta violación de la autonomía (caso Universidad Central de Venezuela) u otros argumentos, muchas veces sin sustento.

Hace 7 años, nuestro líder (permíteme hablar de 2da persona por que también considero mi líder) Chávez, sucumbió ante una terrible enfermedad que él mismo tuvo la valentía de anunciar a la nación y de luchar porque su mayor preocupación era el pueblo, más que él: el cáncer, porque no lo pudieron vencer con las distintas artimañas que la oposición venezolana violenta intentó en miles de ocasiones; y que mediante el juramento hecho a Chávez aquel 8 de diciembre del 2012, que asume al timón de la revolución Nicolás Maduro, de ahí se desató grandes desafíos y problemas para el país y para la revolución: oligarquía desmedida, guarimbas, guerra económica, incremento de la guerra psicológica, hiperinflación inducida, incremento de burocracia y corrupción, pero los 2 últimos años se incorporaron sanciones y bloqueos hacia la nación, intento de magnicidio hacia el Presidente Obrero y alto personal,  sabotaje eléctrico y tecnológico y actualmente, la pandemia del coronavirus, problemas y males, forman parte de las estrategias creadas y ejecutadas desde el imperio y la oposición venezolana son títeres,  y no estábamos preparados ni teníamos ni tenemos un manual de cómo resolverlos, pero de todo ello, se hablarán de dos más contundentes y de las cuales la Educación y las TIC tienen un papel muy importante.

Guerra Económica, Bloqueo y Sanciones por parte del Imperio Estadounidense

 

Entre tantos desafíos que ha afrontado tanto el gobierno revolucionario como el pueblo, se encuentra una implacable guerra económica desde el momento que Nicolás Maduro asumió en primer lugar, la presidencia temporal por la siembra del Comandante Chávez, y en segundo cuando, mediante elecciones presidenciales del 14 de abril de 2013 asume la Presidencia de la República y por ende, la continuidad de la Revolución Bolivariana. Entre 2013 al 2015 se desató una feroz y cruenta guerra económica, comenzando en un primer momento con escasez de alimentos y bachaqueo como respuestas a las medidas implementadas por el gobierno para poder controlar la especulación generada a través del incremento desmesurado de los alimentos, entre otras medidas, que lamentablemente no fueron suficientes, pero también, es menester destacar que el año 2014 hubo muchas acciones violentas denominadas guarimbas para intentar derrocar al gobierno y a la revolución en sí, pero no pudieron, sin embargo, tuvo trágicas secuelas de muchos heridos y fallecidos.

Pero, el 9 de marzo de 2015, durante el Gobierno Estadounidense de Barack Obama, éste «emitió una nueva orden presidencial al declarar una emergencia nacional con respecto a la amenaza inusual y extraordinaria a la seguridad nacional y política exterior de Estados Unidos planteada por la situación en Venezuela» (Telesur,2015), por lo que le permitió generar las primeras sanciones contra el país como «congelamiento de activos en EE.UU. y la prohibición de entrar al país», por supuestas violaciones a los derechos humanos en el país por las guarimbas ocurridas en 2014 que para ellos lo denominan como «protestas pacíficas». El hecho es que esta medida tanto en el mandato de Barack Obama como el de Donald Trump (que asumió la presidencia de ese país en 2017) ha sido ratificada, y las sanciones recrudecidas, generando bloqueo económico para Venezuela, ya que entre las medidas recrudecidas están, aparte de congelamiento de activos o robos de los mismos, el que empresas internacionales no pueden hacer negocios con el país

El hecho es que estas sanciones ha ocasionado bloqueo económico a Venezuela, agudizando su situación e impactando en todos los sectores, donde tanto la educación como las tecnologías de información y comunicación no han sido la excepción, ya que ha generado problemas para los procesos de exportación e importación de materiales, insumos y productos en las áreas mencionadas como en otras, además, por ejemplo, los atletas que estaban en otros países tuvieron dificultades al no recibir los recursos necesarios para la continuidad de sus tratamientos o, el caso de aquellos niños, niñas, adolescentes y adultos que estaban en otros países por programas médicos implementados por el país, pero debido a estas sanciones, corrieron de manera alarmante su vida, como sigue corriendo su vida también los que tienen enfermedades crónicas (diabetes, sida, cáncer, problemas renales entre otros), y afectando también los servicios públicos y de transporte, por el uso del gasoil, gasolina y gas

Ante esto, el gobierno Bolivariano no se ha quedado de brazos cruzados, y por el contrario, ha tenido que reinventarse y generar nuevas estrategias para que el impacto de estas sanciones y bloqueo sean lo menor posible, aunque no ha sido fácil

 

SABOTAJE ELÉCTRICO Y TECNOLÓGICO.

 

Otro de los desafíos que hemos afrontado el pueblo y el gobierno, ha sido lo ocurrido el 7 de marzo de 2019 en la mayoría del país (80%), que inclusive, también fue un desafío para las Tecnologías de Información y Comunicación, como lo fue el sabotaje eléctrico y su posterior afectación en todas las áreas, entre ellos, lo tecnológico. Aunque ya había habido episodios de este tipo de sabotajes, como los ocurridos en el año 2018 y parte del 2019 como lo referencia el portal web del Ministerio del Poder Popular para las Comunas y Movimientos Sociales (2019), en cuanto a la cronologías de los ataques de este sector, el de ese día, fue el mayor y cruel ataque, además de súbito y general. Esta institución referencia

El mayor y cruel ataque ocurrió el día jueves, 7 de marzo, cerca de las 5 de la tarde, donde se produjo una caída de los sistemas esenciales de suministro eléctrico del Guri, el cual suministra en más de un 80% la energía al territorio nacional. Por su parte el presidente Nicolás Maduro informó que el ataque al Sistema Eléctrico Nacional se produjo mediante tres modalidades:

La primera de ellas, mediante el hackeo del cerebro informático y los sistemas de control. Estos sistemas habrían sido invadidos por vía electrónica «dejando las pantallas de los computadores en negro», indicó el Presidente Maduro.

La segunda modalidad de ataque, fue mediante el uso de aparatos de pulso electromagnético. Dispositivos altamente sofisticados de guerra electrónica, que apuntaron a los sistemas de transmisión y la plataforma de controles para inhabilitarlos, acción que generaría una sobrecarga del sistema y su caída.

La tercera y última modalidad de ataque, sería de tipo física y en directo a las plataformas intermedias de distribución eléctrica. Dejando como resultado cinco ataques a cuatro subestaciones, con poco tiempo de separación entre cada uno de estos eventos, justamente los días en que se intentaba levantar y estabilizar el suministro eléctrico.

 

El hecho es que este apagón, mejor dicho, sabotaje eléctrico, aparte de afectar al 80% de la población venezolana, el mismo tuvo una duración más o menos de 4 días, y además de esta situación, se generó otra que lo considero como apagón tecnológico, la cual impolicó el hecho de que operaciones bancarias que por lo general son cotidianas, haciendo la salvedad cuando se presenta algunas fallas del sistema o conexión, con este sabotaje eléctrico afectó seriamente dichas operaciones, no se podían hacer ninguna transacción, ni retirar dinero, depositar o hacer pagos por puntos por ejemplo; también CANTV, MOVISTAR, MOVILNET y DIGITEL se vieron seriamente afectados en sus telecomunicaciones, impidiendo poder realizar comunicaciones por teléfonos móviles, fíjos o residenciales e internet; por tanto generó temores sociales y psicológicos en la población en un momento, sobre todo al momento de adquisición de productos de primera necesidad.

Después de 4 días, y de arduos trabajos de recuperación, comenzó el proceso de recuperación del servicio eléctrico, pero ha tenido consigo varias secuelas, más por el hecho mencionado en el punto anterior, como las sanciones y bloqueo, tiempo después hubo otro ataque pero sus efectos fueron menores por la rápida acción de los trabajadores de CORPOELEC

 

CORONAVIRUS O COVID 19. LA PANDEMIA QUE LLEGÓ PARA ¿QUEDARSE?

 

Para hablar sobre los efectos y consecuencias que ha traído esta terrible enfermedad a todos los países del mundo, pero especialmente en Venezuela y hacia todos los ámbitos, haciendo énfasis en el educativo; es necesario recordar ciertos términos del mismo.  Ante todo, según la Organización Mundial de la Salud,(OMS,2020 ), señala que:

Los coronavirus son una extensa familia de virus que pueden causar enfermedades tanto en animales como en humanos. En los humanos, se sabe que varios coronavirus causan infecciones respiratorias que pueden ir desde el resfriado común hasta enfermedades más graves como el síndrome respiratorio de Oriente Medio (MERS) y el síndrome respiratorio agudo severo (SRAS). El coronavirus que se ha descubierto más recientemente causa la enfermedad por coronavirus COVID-19.

En base a esto, se tiene la información de, entre los años 2008 o 2009 la OMS prendió las alarmas para uno de los tipos de coronavirus que afectó a los seres humanos como el SARS o SRAS, la cual fue controlado. Pero, en el año 2019, específicamente a finales del mes de diciembre, en Wuhan, China, se originó una forma extraña de neumonía y los casos estaban incrementando sin saber ni cómo sucedió ni cómo combatirla; desafortunadamente en ese momento surgía una nueva forma o familia de coronavirus, que tiempo después se convertiría en pandemia declarada por la OMS: el COVID-19.

Esta enfermedad, la OMS (ob.cit) referencia que “es la enfermedad infecciosa causada por el coronavirus que se ha descubierto más recientemente”, y sus síntomas varían dependiendo realmente del nivel de defensas que tenga el organismo de cualquier persona, pero los más comunes son:

 Fiebre, la tos seca y el cansancio. Otros síntomas menos frecuentes que afectan a algunos pacientes son los dolores y molestias, la congestión nasal, el dolor de cabeza, la conjuntivitis, el dolor de garganta, la diarrea, la pérdida del gusto o el olfato y las erupciones cutáneas o cambios de color en los dedos de las manos o los pies. Estos síntomas suelen ser leves y comienzan gradualmente. Algunas de las personas infectadas solo presentan síntomas levísimos…

Los primeros estudios surgidos en Wuhan y luego al ser expandida la enfermedad demostraron que la población vulnerable es aquella población adulta mayor (de más de 60 años) y con patologías o enfermedades de base (cáncer, hipertensión, entre otras), pero, al verse afectados países cuya población mayoritaria es joven, estos resultados cambiaron; ahora lo puede afectar cualquier persona de cualquier edad, no importa que raza, etnia, credo, civil, militar, político, religión, incluyendo a personas completamente sanas, sin ningún problema o antecedente médico, ya que la mayoría son asintomáticas, siendo este tipo de contagio el más peligroso, porque la persona no lo sabe y es portador de la enfermedad.  Y en los niños y niñas su peligro puede ser mayor, porque, aparte de desencadenarse complicaciones ya conocidas, también se puede generar un síndrome o enfermedad por lo general muy poco común como la Enfermedad de Kawasaki; tal como lo publica el portal web El Periódico, en el artículo realizado por Lami(2020).

Es una rara condición que afecta típicamente a los niños menores de cinco años. Provoca que los vasos sanguíneos se inflamen e hinchen. Los síntomas típicos incluyen fiebre y sarpullido, ojos rojos, labios o boca secos o agrietados, enrojecimiento de las palmas de las manos y las plantas de los pies, y glándulas inflamadas.

Por eso, la misma organización mundial en conjunto con la Organización Panamericana de la Salud (OPS) ha recomendado a los países una serie de medidas para evitar incrementar los contagios y por ende, pérdidas humanas. Esto generó un revés drástico en muchas áreas; para muchos países esta enfermedad ha impactado en materia económica, pero también lo ha hecho en el ámbito educativo, debido a que la mayoría de la educación es presencial, tanto en lo privado como en la pública, desde maternal o preescolar hasta la universitaria, por lo que de un momento a otro para algunos países tomaron la decisión de suspensión de actividades académicas, mientras que otros aplicaron métodos de teleducación o educación a distancia mediante herramientas tecnológicas conocidas como redes sociales, correos electrónicos, llamadas telefónicas o hasta el uso de medios de comunicación como televisión y radio; es decir, las tecnologías de información y comunicación jugaron y juegan un papel importante para la educación, y dependerá tanto de los gobiernos en aplicación de políticas públicas correctas que implican reinventarse y transformarse; como también los docentes y estudiantes para lograr los objetivos.

A pesar de esto, desafortunadamente esta terrible pandemia aún no se ha detenido y ha dejado más de un millón de fallecidos y millones de infectados (Universidad John Hopkins, 2020), presentando problemas de todo índole en todas las áreas, siendo las más afectadas salud por estar al frente en primera línea, además que en varios países los distintos sistemas de salud han colapsado por las políticas incorrectas implementadas o por la poca o nula asignación presupuestaria, educación (razones mencionadas con anterioridad), económicas (afectación que afianza los distintos gobiernos, mayoritariamente de derecha), sociales y psicológicas, aunque también hay un elevado número de recuperados, sembrando esperanza de la disminución de la mortalidad, nuevas investigaciones y estudios para conocer el genoma y reconocimiento de los síntomas para la detección temprana, y de creación de vacunas y otros tratamientos. Es bueno señalar que esta enfermedad para miles de los recuperados ha traído consigo secuelas que va desde «fatiga y cansancio, problemas cardíacos, sensación de falta de aire, hasta problemas psicológicos», según el grado de infección que haya padecido (Ruiz, 2020)

En Venezuela no fue ni es la excepción, con los primeros informes emanados de la OMS sobre la enfermedad y su avance hasta convertirse en pandemia, el Gobierno Bolivariano tomó lo que considero medidas correctas para prepararse para su llegada como la creación de la Comisión Presidencial COVID-19, creado el 28 de febrero del año en curso, y cuando llegó los primeros casos al país, de inmediato tomaron otras medidas como el Decreto de Alarma, publicado en Gaceta Oficial Extraordinaria N° 6.519 (Presidencia de la República, 2020), contentiva de 36 artículos y 12 disposiciones finales, se refiere a la «suspensión inmediata de actividades económicas no priorizadas, educativas y legales para preservar la vida de los venezolanos y combatir la enfermedad»; la cual desde el 13 de marzo hasta el 01 de junio se mantuvo la cuarentena radical y estricta y en ese tiempo se ha extendido dicho decreto, inclusive cuando el país entró en una nueva fase denominada «método 7×7», referente a la apertura de ciertos sectores (hasta 24) considerados no prioritarios durante 7 días (semana de flexibilización), y los otros 7 días de cuarentena, en un principio radical y estricta que luego pasó a ser flexibilización controlada, pero no se aplicaba a los municipios de estados fronterizos donde los casos se mantienen activos.

De lo anterior, tanto la pandemia como las medidas impactaron en la vida de todos los venezolanos y todas las venezolanas: aunque podrá sonar cliché decir que el primer impacto fue el económico, que de por sí ya el país está sufriendo los estragos producto de las razones mencionadas en los primeros párrafos y en los desafíos afrontados; con esto se agudizó más la situación; pero también es necesario señalar otras áreas impactadas en el país, específicamente en el aspecto que compete este artículo: el educativo, en todos sus sistemas y subsistemas. La educación venezolana desde maternal hasta bachillerato es mayoritariamente presencial, inclusive la educación para adultos y misiones educativas; en cuanto a las universidades, también un alto porcentaje es presencial, sólo donde se conoce por ejemplo la Universidad Bicentenaria de Aragua tiene modalidad mixta (presencial y a distancia) y algunas carreras de algunas universidades.

En el caso de la Universidad Bolivariana de Venezuela (UBV), la cual formo parte ya desde hace 10 años y de manera orgullosa lo comento, así como realicé la Maestría en Educación Comparada, un convenio con el Centro Internacional Miranda (CIM), la mayoría de sus Programas de Formación de Grado y Programas Formación Avanzada (PFG, y PFA respectivamente) también son presenciales, sin embargo, cuando realizaba mi trabajo de grado para la maestría que comencé desde el 2012, se pudo evidenciar que la universidad cuenta con una plataforma virtual realizada en Moodle, que es UBVirtual, y en ese momento apenas estaba surgiendo como una manera de apoyar la educación presencial, generando la semipresencialidad o semivirtualidad, apoyados de esta herramientas de las tecnologías de información y comunicación (TIC), sin pensar que más o menos 8 años después, esta herramienta y otras descritas serían el auge para apoyar a la educación, tanto a la UBV como a las demás universidades, según sus plataformas, y aunque por parte de las universidades se han generado talleres, aún hay problemas de adaptación o adecuación a las TIC’s.

El papel de las Tecnologías de la Información y Comunicación en la Educación Universitaria por la pandemia: Plan Universidad en Casa

 

Desde el primer caso detectado en el país el 13 de marzo del año en curso, el Gobierno Bolivariano tomó la correcta decisión en su primer momento para salvaguardar a la población venezolana, aparte de prepararse para la llegada del virus en el sistema de salud, también de decretar el Estado de Alarma, cuyo primer momento (marzo – mayo) permitió tener la curva de casos aplanada y de fallecidos en muy bajísimo porcentaje, aunque con la llegada de connacionales que venían de países limítrofes, se puede decir que se dio un desbalance en la curva, pero esto no fue motivo ni para el gobierno ni para el pueblo rendirse. Ahora bien, durante ese primer momento, todas las universidades entraron en una encrucijada sobre la manera de cómo dar cumplimiento a lo emanado del Decreto Presidencial, pero sin afectar los avances de los períodos académicos, y es a partir de ello que nace una nueva estrategia: Universidad en Casa, sin embargo, hay que reconocer que también presentó otro desafío debido a la situación económica actual por las razones mencionadas, se han presentado, hasta la actualidad muchas fallas en servicios de telefonía, telecomunicaciones, entre otros.

Este plan, también conocido como Plan Universitario Anticovid-19, desarrollado por el Ministerio del Poder Popular para la Educación Universitaria (2020) señala

Es una estrategia para la contingencia ante el Decreto de Estado de Alarma anunciado por el Presidente Nicolás Maduro Moros, basado en el artículo 338 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, que se materializa en acciones estratégicas para garantizar el derecho a la Educación; por ende, la prosecución académica de pre y postgrado, se desarrolla mediante la educación a distancia como modalidad alternativa, según la naturaleza de la formación que incluye a todas la instituciones de Educación Universitaria (IEU)

Y es ahí donde entran las Tecnologías de Información y Comunicación, el reimpulso de ellas para poder ejecutar el plan anunciado por el ministerio, para ello, se empleó desde canales de televisión como VIVE TV, hasta redes sociales (Whatsapp, Facebook, Telegram)  y plataformas virtuales como Moodle o Google Classroom. En su primer momento y segundo momento (durante la cuarentena radical y método 7×7), a pesar de que hubo detractores al plan, se activaron el 67% de estudiantes y 65% de docentes, en más del 80%  de las universidades del país y más de 5000 aulas virtuales creadas (ob.cit); con ensayos y errores, también más del 80% de las universidades lograron sus objetivos de la prosecució académica, además se establecieron otras líneas estratégicas como los intensivos para recuperación de materias que hayan perdido o retirado, y aplicación de una encuesta, que fue incorporada en la plataforma Patria.

En los actuales momentos, cuando ya arrancaron el período académico 2020-2 en la mayoría de las universidades, este plan sigue en marcha, pero con más líneas estratégicas, ya que por lineamientos del Gobierno Nacional, a través de las encuestas realizadas en plataforma Patria, se pudo determinar la continuidad de la modalidad el plan o de modalidades mixtas, es decir la semipresencialidad según los programas de formación y materias o asignaturas prácticas, por lo que las TIC’s siguen jugando un papel trascendental tanto para la Educación en Casa, pero también de establecer nuevas metodologías, es decir, con la llegada de la pandemia, a pesar de su impacto negativo, también se generó impactos favorables en cuanto al hecho de que educación repensaran su formas de accionar e incorporara innovaciones educativas pero también adecuación de los modelos educativos o incluso, también innovaciones en los mismos.

Conclusiones

  • Surge la necesidad de reinventarse y transformarse en lo económico, que implica el reimpulso de proyectos con los recursos que posee el país para no depender de materiales, insumos, productos que no son están en el país, hasta que no cesen las medidas coercitivas impuestas por el Imperio Norteamericano; aplicación de la ingeniería social y la reingeniería, aunque ya se están haciendo, impulsar aun más
  • Blindar los sistemas de control y de información en las áreas neurálgicas como la eléctrica, y también con los recursos que posee la Nación realizar las inversiones necesarias para adecuaciones y mantenimiento al sector eléctrico
  • Reimpulsar los proyectos tecnológicos existentes en el país como los proyectos canaimas, ya sea a nivel de hardware o software, para garantizar y dar cumplimiento al Plan de la Patria en cuanto a la independencia, en este caso tecnológica. Esto también implica en el área de telecomunicaciones
  • Además de hacer una sinceración de precios o costos en equipos donde estén presente las TIC’s, también sincerar la situación salarial de los docentes, no solo permitirá una motivación económica a su trabajo, sino también permitirá adquirir equipos o hacer mantenimientos de aquellos que por distintas circunstancias se hayan averiado.
  • También en materia de educación, que el Plan Universidad en Casa no solamente se siga implementando por la situación de la pandemia del coronavirus, sino que se haga de manera constante según los programas de formación (que no implique prácticas, pasantías y trabajos con comunidades) porque se está demostrando que, aunque con falencias, las tecnologías de información y comunicación han contribuido a garantizar la educación universitaria y al proceso de formación tanto de docentes como estudiantes
  • Que el Ministerio de Educación Universitaria sigan implementando otras actividades como las que están en estos momentos como Plan Formación en Casa y Taller de Renovación, dirigido a los docentes, pero que también haya una integración con otros ministerios para que estas actividades sean dirigidas a las comunidades organizadas.

Referencias Bibliográficas

Comparte este contenido:

Humanizar desde la inmediatez de los cuerpos.

Infancias y educación, desafío y oportunidad de transformación social.

Por: Alejandra Castiglioni

Humanizar…Muchos de nosotros reiteramos en estos tiempos -y enfáticamente- la necesidad de humanizar nuestros vínculos, nuestras perspectivas, nuestros horizontes, nuestro hacer. Implica un gran debate que invita a un diálogo sensible e interdisciplinar.

Quizás esta pandemia nos sitúe ante la oportunidad de desarmar la hegemónica deshumanización y en verdad, la educación y la infancia son los territorios privilegiados para intentarlo.

Boaventura de Sousa Santos menciona la necesidad de desmonumentalizar el conocimiento hegemónico, yo creo que mucho tiene que ver con la posibilidad de humanizar (2009). Siglos de modernidad en que una deliberada disociación entre razón y emoción, cuerpo y alma -entre otras escisiones- ha fragmentado la integridad humana, deshumanizándonos. Desde la perspectiva blanca, occidental, patriarcal y colonial se ha organizado la producción del conocimiento y las estructuras de poder, el hacer, es decir, el ser.

Nos inspira la utopía impulsada en las urgencias para descubrir un futuro en la complejidad del presente. Los umbrales de lo desconocido y los malestares de la incomodidad, que surgen cuando una pandemia revela las profundas inequidades  de las infancias del mundo, nos convocan a transformaciones creando paulatinamente la esperanza de un nuevo orden. Una nueva organización basada en el principio ético de la vida, como hemos escuchado mencionar a Enrique Dussel en estos días.

En particular, humanizaremos habitando la integridad de nuestro ser, legitimando la experiencia sensible de los cuerpos y en el espesor de la corporalidad; esto implica una mirada ética y estética de  un hecho social y político.

En los cuerpos se vivencia e inscribe la efectivización de derechos desde la más temprana edad, esto implica una perspectiva insoslayable para entender a la niña, niño y niñe como sujetos de derecho desde el nacimiento, ciudadanxs de hoy, ciudadanxs interculturales.

Parafraseando a Tonucci, lo cierto es que la cotidianeidad del hogar es hoy, la Escuela de la vida.  Construir diálogos es un desafío coyuntural, también alojar las nuevas interacciones que operan actualmente en la experiencia de enseñar y aprender, las del hogar. Además, erupcionan emociones diversas, incertidumbre, inquietud, temor, desconocimiento, entre otras, presentes en cada contexto, en cada gesto.

¿Por qué pensar desde los cuerpos?

Nuestro cuerpo en tanto construcción social y política situada en un aquí y ahora, es la superficie donde se inscribe nuestra historia y la de generaciones pasadas, nuestra vida y también nuestra muerte.  El hilo de vida que entrama la existencia humana mientras se conforma en los distintos vaivenes del saber, del poder, del ser.

Cuando el cuerpo es considerado como envase, como límite de la individualidad, como recinto del sujeto y por ello, objeto, es que aparece un cuerpo escindido del hombre, deshumanizado.

O bien, un cuerpo encorsetado en disciplinamientos que a veces invaden la cotidianeidad de la educación infantil, formateando tiempos, estereotipando juegos, técnicas corporales o danzas, gestos y emociones según el género, la clase o las más diversas categorías con la que se pretende organizar el mundo.

Indagar en la conversación educativa y en la posibilidad de transformación social pensando en los cuerpos, implica comprenderlos como portadores y productores de cultura y de conocimiento. Cultura en clave relacional, como entramado de estrategias para habitar el mundo y dar sentido a nuestra relación con cada uno de los mundos que habitamos. Esto sedimenta en la memoria del hacer, que como diría Heidegger, es ante todo un habitar.

Ahora bien, ¿es posible trascender la materialidad de los cuerpos en este distanciamiento preventivo y más allá de él? Si. Existe una interfaz entre las fronteras de los cuerpos y en su espesor circulan gestos, voces y relatos, este es el espacio de la corporalidad. Es ese lugar donde podemos redescubrir la potencia del gesto, la intensidad de los diálogos para encontrarnos distinto, para abrazarnos y sostenernos de otros modos y construir así una trama de esperanza que no es ingenuidad sino espera crítica y comprometida. Tan necesaria hoy.

También, allí se desenvuelven diversas representaciones de la otredad que nos convierten en oportunidad o amenaza. Están las que valoran amorosamente y las que nos hacen vulnerables y nos desplazan hacia el abismo, manteniendo asimetrías sociales que desechan seres humanos -marcan niñxs desde la más temprana edad- expulsándolxs al abismo social y simbólico. Lxs niñxs las cuestionan, su voz nos guía y así crea rupturas.

Humanizar, implica apostar a la integración de sí y con lxs otrxs. Asimismo, cuestionar representaciones de la otredad -producto de imaginarios ajenos- que lo impiden; ellas siguen formateando la experiencia infantil y la mutua percepción de quienes compartimos el camino en la vida.

Sabemos que mediante las luchas de los pueblos, algunas representaciones mutan a lo largo del tiempo, allí está nuestra oportunidad y desafío.  Y en esa esperanza, vamos enunciando nuestros sentipensares, construyendo diálogos interdisciplinares que nos permitan repensarnos.

¿Caminos? La educación infantil. No sólo como derecho, sino como territorio para la descolonización del saber,  un camino inacabado de preguntas emancipadoras más que de respuestas. En particular, y en su dimensión política insoslayable, la educación intercultural critica como perspectiva encarnada para detectar adultocentrismos e impugnar instrumentos de homogenización de subjetividades, funcionales a la mercantilización del capitalismo depredador.

Y la potencia de la mirada de lxs niñxs. En estos tiempos -más aún- esa mirada nos conecta con la necesidad de recuperar lo más genuino de nuestro ser, quizás, la cultura de nuestros pueblos indígenas, adaptándola a nuestra realidad desde el hacer… lo que es descolonizar … el saber, el estar, el pensar, el soñar, es decir, el ser. Mientras sentipensamos nuestros cuerpos, revisando cómo los habitamos. Esto implica gestar una nueva corresponsabilidad de existir ampliando la experiencia de la infancia y alojando su impulso vital.

En lo adverso de esta pandemia, habita una oportunidad para honrar ese impulso vital, reinventando paisajes más justos, más humanos, donde de este caos surja un nuevo orden que nos encuentre disponibles amorosamente a la presencia singular de cada niñx, trayendo rupturas con sus gestos -claro- pero invitándonos siempre a un nuevo comienzo (Bustelo, 2011).

Y durante esta noche, para programar un amanecer más humano, no debe faltar la ternura en nuestros modos de vincularnos, imaginar y habitar el mundo. Alejandro Cussianovich, expresa que la ternura debe ser entendida como una virtud política, como un componente insoslayable de nuestra práctica educativa, familiar, profesional sea cual fuere la que nos encuentre trabajando por un mundo más justo y significativo (2009). Sin dudas… la solidaridad es el rostro de la ternura de los pueblos.

Bibliografía:

Bonaventura de Sousa Santos (2009). Una epistemología del Sur. La reinvención del conocimiento y la emancipación social. México, CLACSO y Siglo XXI

Bustelo, Eduardo (2011). El recreo de la infancia. Argumentos para otro comienzo. Buenos Aires, Siglo XXIEditores.

Cussianovich, Alejandro (2009). Ensayos sobre infancia II. Sujetos de derechos y protagonista. Perú, Iflejant.

Buenos Aires. Agosto, 2020.

Comparte este contenido:

Se celebra el Día Internacional de la Alfabetización, en medio de los desafíos que impone el coronavirus.

Por: Pagina12

Este martes 8 de septiembre se celebra el Día Internacional de la Alfabetización, una fecha establecida por la Unesco para recordar su importancia «como una cuestión de dignidad y derechos humanos, y como un eje central para promover un desarrollo sostenible, facilitando el cumplimiento del derecho al trabajo, a la salud, a la nutrición». Este año, el organismo propone analizar la enseñanza de la alfabetización y el aprendizaje durante la pandemia desatada por el coronavirus y plantear el papel desempeñado por las y los docentes y la evolución de las pedagogías.

Desde 1967, el Día Internacional de la Alfabetización se celebra cada año en todo el mundo. A pesar de los logros alcanzados, los desafíos persisten, ya que 773 millones de adultos en el mundo no poseen, hoy en día, las competencias básicas en lectoescritura. La irrupción del coronavirus deterioró aún más la calidad de la educación a nivel mundial.

La pandemia de COVID-19 obligó a escuelas y universidades a cerrar sus puertas, impactando a un número sin precedente de estudiantes en todo el mundo. Según una publicación reciente de la UNESCO, mil millones de estudiantes, es decir, dos tercios de la población estudiantil mundial, se enfrenta al cierre de instituciones educativas. Las poblaciones más vulnerables, en particular las niñas, corren un riesgo especial de incertidumbre.

«Varias generaciones se enfrentan a la amenaza del cierre de escuelas, que afecta a cientos de millones de estudiantes y ha durado muchos meses. Se trata de una emergencia para la educación mundial«, explicó Audrey Azoulay, Directora General de la UNESCO.

«En un momento en el que necesitamos reinventar un mundo de esperanza, la cuestión de la alfabetización reviste más importancia que nunca. Por ello, en este Día Internacional, invito a todos los agentes que intervienen en la educación a que redoblen sus inversiones y movilicen todos sus recursos para realizar el potencial de todas las personas al servicio de un mundo compartido», comunicó en la conmemoración la Directora General del principal organismo de las Naciones Unidas para la educación en todo el mundo.

La alfabetización constituye un eslabón clave para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Unesco dentro del marco de la Agenda 2030, los cuales promueven el acceso universal a una educación de calidad y oportunidades de aprendizaje a lo largo de la vida de las personas.

Una de sus metas es asegurar que todos los jóvenes aprendan a leer y escribir y tengan conocimientos básicos de aritmética, así como dar la oportunidad de adquirir estos conocimientos a los adultos que carezcan de ellos.

*Fuente: https://www.pagina12.com.ar/290680-se-celebra-el-dia-internacional-de-la-alfabetizacion-en-medi
Comparte este contenido:
Page 3 of 4
1 2 3 4
OtrasVocesenEducacion.org