Estados Unidos y su apoyo a los golpes de Estado y a los dictadores

Por: Renán Vega Cantor 

“Trujillo es un hijo de puta, pero es nuestro hijo de puta”, palabras de Cordell Hull, Secretario de los Estados Unidos, hablando del dictador de República Dominicana.

El título de este artículo puede parecer de entrada como injurioso y fuera de tono, pero adquiere sentido porque parafrasea lo dicho por altos funcionarios de los Estados Unidos en varias ocasiones cuando se referían en conciliábulos privados a algunos dictadores de América Latina que ellos patrocinaban. Quien originalmente pronunció la palabra “hijo de puta” para referirse a uno de los dictadores apoyados por Washington fue Cordell Hull, en 1938.

Después la repitió el mismísimo presidente de los Estados Unidos Franklin Delano Roosevelt para referirse al dictador de Nicaragua Anastasio Somoza a quien también considero como “nuestro hijo de puta”. Esta última referencia es la que más se suele citar, porque apareció en un número de la Revista Time de 1948. La palabra soez se usaba para señalar la verdadera catadura criminal de los dictadores apoyados por Washington, algo que al final poco interesaba en la medida en que ellos fueran sumisos e incondicionales a los Estados Unidos. Que esos dictadores mataran, torturan, desaparecieron a miles de personas en sus respectivos países, poco le interesaba a Estados Unidos, siempre y cuando no fueran a tocar los intereses del capital estadounidense. Traducida la afirmación sobre los dictadores quería decir: sí, son asesinos y criminales, pero nos sirven y los necesitamos, y por eso si hay que matar y torturar para mantener incólumes nuestros intereses, poco importan esos métodos tan poco refinados. Y para camuflarlos un poco, y que no salpicaran sangre hasta el territorio de los Estados Unidos, a esos dictadores se les calificaba por parte de políticos y medios de desinformación en Estados Unidos, como campeones de la libertad y amigos del mundo libre.

El término ofensivo, sobre todo con las pobres madres de los dictadores Rafael Trujillo y Anastasio Somoza, ha vuelto a cobrar actualidad en estos días, pero en un sentido diferente, en términos geográficos y políticos, a raíz de la absolución que se le hizo a Donald Trump en el segundo juicio político, relámpago por lo demás, que se le hizo en el Senado de los Estados Unidos, para juzgarlo por la toma del Capitolio el 6 de enero de este año.

Algunos liberales, admiradores de Estados Unidos y que son ignorantes, ingenuos o cándidos, que tanto han aplaudido la ida de Donald Trump de la Casa Blanca y elogian a su nuevo inquilino, Joe Biden (el “bonachón” que bombardea), se hacen cruces de incredulidad al enterarse del resultado de ese juicio relámpago y comprobar que Trump ha salido indemne, a pesar de que haya sido promotor de un intento de golpe de Estado, para perpetuarse en el poder, y que dejó un saldo fatal de cinco muertos.

Las preguntas más bien son otras: ¿De qué se sorprenden? ¿Acaso creían que a Trump lo iban a acusar de ser golpista, lo iban a sentenciar a cadena perpetua o a la pena capital y de forma inmediata lo iban a encarcelar? Si Estados Unidos nunca ha hecho eso con los dictadores que ha fabricado mientras le son útiles, mucho menos lo iba a hacer con uno de los suyos. Si el Congreso de los Estados Unidos hubiera condenado a un golpista, hubiera roto con la tradición que forma parte de los principios centrales de la política exterior de los Estados Unidos: apoyar a cuanto hijo de puta le sirva al American way of life, un axioma, tanto “teórico” como sobre todo práctico, que ha caracterizado la actuación de los Estados Unidos desde finales del siglo XIX en el mundo y particularmente en América Latina.

Recordemos que en listado interminable de golpes de Estado y de dictadores que Estados Unidos ha patrocinado se encuentran criminales de la talla de los ya nombrados Rafael Leónidas Trujillo y Anastasio Somoza, a los cuales hay que agregar Augusto Pinochet (Chile), Jorge Rafael Videla (Argentina), Efraín Ríos Montt (Guatemala), Maximiliano Hernández Martínez (Salvador), Tiburcio Carias (Honduras), François Duvalier (Haití), Alfredo Stroessner (Paraguay),Ferdinand Marcos (Filipinas), Hahi Moamaed Suharto (Indonesia), Mobuto Sese Seko (Zaire) y una interminable cadena de otros hijos de mala madre del imperio, a lo largo y ancho del mundo, cuya lista es tan larga que se requieren muchas páginas para mencionarlos.

La novedad “politologica” del caso de Donald Trump no es que Estados Unidos tenga hijos malnacidos en casa, porque la casi totalidad de los presidentes y altos funcionarios de ese país lo son, sin duda alguna, sino que ahora uno de ellos se haya atrevido a atentar contra ellos mismos. Es decir, el gran crimen de Trump no radica en los múltiples crímenes que realizó fuera de los Estados Unidos, algo que es perfectamente normal en cualquier presidente de ese país, sino en que se haya realizado en casa lo que se hace y aplaude en el exterior. Al respecto, resulta diciente y cínico que Nancy Pelosi, del Partido Demócrata y presidenta de la Cámara de Representantes, una de las más beligerantes contra Donald Trump por su intento del golpe en el Capitolio, sea la misma que aplaudió a rabiar y recibió personalmente al golpista venezolano Juan Guaidó, otro hijo de puta Made in USA. (Ver fotos).

El juicio inútil a un HP doméstico (Nancy Pelosi firma documentos de juicio contra Donald Trump) y en la otra foto se apoya a uno de nuestros HP en América Latina (Nancy Pelosi recibe al golpista venezolano Juan Guaidó)

Aunque no se le perdone a Donald Trump por lo que hizo el 6 de enero, esto tampoco podía llevar al Parlamento de Estados Unidos ‒una institución criminal, untada de sangre del resto del mundo, hasta los tuétanos‒ al peligroso extremo de condenarlo. Eso sería sentar un precedente funesto y de alguna forma cerrar las puertas a que futuros golpes de Estado, en los que se encuentre la mano asesina de Washington, salieran deslegitimados de antemano y alguien se atreviera a juzgar a los golpistas. No, no se puede abrir la Caja de Pandora, con una condena judicial a un golpista, que ha sido presidente de Estados Unidos. No, ahora hay que proceder en el ámbito doméstico de la política de Estados Unidos, como se ha hecho con los golpistas y dictadores que manufactura Estados Unidos en el exterior (y Juan Guaidó es uno de los últimos), decir en voz bajaque es un malnacido, pero afirmar en publico que es un demócrata, un genuino luchador por la libertad, un combatiente por la justicia y mil mentiras por el estilo.

Por eso, más bien hay que decir en adelante que Donald Trump, como lo deben murmurar políticos, periodistas y académicos del establecimiento en los Estados Unidos, es “un hijo de puta, pero al fin y al cabo es nuestro hijo de puta” y lo hemos tenido en casa, en plena Casa Blanca.

Fuente e imagen:  https://rebelion.org/estados-unidos-y-su-apoyo-a-los-golpes-de-estado-y-a-los-dictadores/

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Respuesta a Rita Segato de las Mujeres de la Red de Intelectuales, Artistas y Movimientos Sociales en Defensa de la Humanidad (REDH), Capítulo Argentina

Por: Mujeres en la REDH Cap. Argentina

El patriarcado nos habita cuando justificamos golpes de estado oligárquicos e imperialistas

 

Rita Segato en varios de sus escritos plantea la hipótesis de que el patriarcado es arcaico, que nació con el origen de la especie. Uno de sus fundamentos es la existencia de mitos y fábulas a nivel planetario en donde se repite la estructura de una mujer o grupo de mujeres que falla o transgrede y es o son disciplinadas despojándolas de su poder. Uno de estos mitos fundamentales en Occidente es el de Adán y Eva. Pero el mismo hecho de necesitar de narrativas que lo justifiquen, muestra que no responde a un orden natural sino a una realidad de subordinación y poder construida.

El patriarcado es un orden político fundante. Igual que el concepto de raza, transforma una diferencia fenotípica -y no genotípica lo cual está demostrado que no existe y que la “raza” humana es una sola- en una diferencia política, construida desde la colonia para controlar, usufructuar y explotar todo tipo de trabajo humano bajo la división racial del trabajo.

En relación a la aparición del patriarcado en los pueblos originarios americanos, la misma autora argumenta que la conquista no hubiera sido posible sin la preexistencia de un patriarcado de baja intensidad, que tornó a los hombres dóciles al mandato de masculinidad y, por lo tanto, vulnerables a la ejemplaridad de la masculinidad victoriosa y proclives a reproducir, o al menos ser funcionales, a estructuras competitivas, jerárquicas y crueles. Señala que el sistema colonial se apropia de las asimetrías preexistentes para transformarlas ahora en las asimetrías propias del mundo colonial moderno.

Partiendo de sus propios conceptos ¿qué pasa cuando el timón del estado nación lo asume un indio, sindicalista, trabajador campesino, militante popular, permeable a la cultura patriarcal hegemónica como todos los hombres blancos que lo antecedieron en el cargo, pero que multiplica por 8 el PBI? Que, además de multiplicarlo, lo distribuye como ningún gobernante antes en la historia de un país históricamente saqueado. Que es cabeza y articulador de luchas que condensan otras ancestrales, en las que las mujeres están en la trinchera, en las que se amplían y profundizan los derechos sociales, políticos y económicos de las mujeres y de todo el pueblo por siglos oprimido. Que democratiza un estado racista en el que quienes antes eran servidumbre de los y las blancas, luego de 2006 son diputadas, senadoras, médicas, mujeres que exhiben con orgullo sus colores, su sabiduría y su cultura sin agacharse frente al privilegio de los “amos”, entre otros miles de ejemplos que hicieron a ese pueblo, hombres, mujeres, niñas, niños y personas sin encasillar, sujetxs hacedores y protagonistas de su propia historia. Que además eligen una y otra vez a su líder, pudiendo no hacerlo. Quizá un líder no del todo “deconstruido en su machismo” -como tantas de nosotras y la sociedad en general-, pero que expresa genuinamente a su pueblo, especialmente al movimiento campesino-indígena y a lxs trabajadores. Un hermano aymara que viene desde abajo, que fue deconstruyendo en su vida y práctica la colonialidad del saber y del poder con su militancia sindical que también desprecia la autora y que como mujeres levantamos y protagonizamos con toda la dignidad de los y las oprimidas y explotadas del mundo. Como ayer Tupac Katari y Bartolina Sisa y Tupac Amaru y Micaela Bastidas, este extraordinario compañero, indio y sindicalista hermano presidente, intenta ser disciplinado por la supremacía blanca heredera de las oligarquías que forjaron el estado nacional a sangre y fuego despojándolo de su poder, y con él a su pueblo.

El jefe indio es desterrado pero no por lo que hizo mal. Es desterrado por todo lo que hizo bien, por convertir en políticas de estado tantas demandas de siglos regadas con sangre de su pueblo y naciones que habitan su amado territorio, como consecuencia de una transgresión originaria. Después de haber ganado la presidencia en primera vuelta con el 47% de los votos del 88% del padrón electoral que votó, y con mas de 10% de diferencia sobre el segundo candidato, lo saca el racismo blanco, la esclavitud latente y el odio de clase, apoyado por el ministerio de colonias de los estados Unidos: la OEA, quienes encabezan los ataques a todas las democracias populares que no establecen relaciones carnales con Washington. Lo amenazan junto a sus compañeros y compañeras de lucha y lo destierran desatando el revanchismo clasista y racista que va dejando cientos de hermanos y hermanas asesinadxs, encarceladxs, heridxs y perseguidxs injustamente hoy en Bolivia.

El patriarcado vive y se refuerza en el capitalismo imperialista. El patriarcado vive en el colonialismo y racismo que nos habita si nos dejamos ganar por el feminismo liberal. El feminismo será popular, anticapitalista y antiimperialista o no será. El feminismo popular y latinoamericanista combate hoy al golpe de estado y está con las mujeres que valientemente lo enfrentan en la calle y en cada trinchera.

A los 22 días del mes de noviembre.
A casi 40 muertos y muertas producidas por el golpe de estado.
A dos semanas de intentar callar al pueblo y a sus voces.
A dos semanas de sacar al gobierno de los Movimientos Sociales del Estado Plurinacional de Bolivia.
A dos semanas de resistencia creciente, donde lloramos a nuestrxs muertxs sin abandonar la lucha.

Fuente del documento: https://redhargentina.wordpress.com/2019/11/24/respuesta-a-rita-segato-de-las-mujeres-de-la-red-en-defensa-de-la-humanidad-redh-de-argentina/

 

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Alarmas de emergencia en Suramérica

Ilka Oliva Corado

“No está en juego mi mandato, sino el respeto a las urnas y a la voluntad soberana del pueblo,” palabras de Dilma en su defensa ante el Senado el día lunes 29 de agosto. Se puede estar de acuerdo o no con el gobierno de Dilma en Brasil, pero lo que debe ser condenable en absoluto es el Golpe a la democracia.

Dilma fue elegida por 54 millones y medio de brasileños en votaciones democráticas, y sacada de la presidencia por un grupo de senadores corruptos fieles a la embajada de Estados Unidos en Brasil. Fieles a las políticas de exclusión y al monopolio de las empresas trasnacionales.

No es una simple crisis política la que se vive en Brasil, es un asalto a la democracia; es el regreso de la impunidad y del neoliberalismo. Y no es por Dilma, que no nos engañen, no van por Dilma y no van por Lula; ellos van a cortar de tajo las políticas de inclusión y de igualdad social que fueron establecidas en ambos gobiernos. Ellos van para volver al retroceso y al empobrecimiento del país. Van por los avances logrados en materia de Derechos Humanos, salud, educación e infraestructura.

Visto desde cualquier ángulo e ideología, este Golpe a la democracia nos viene a recordar que Estados Unidos es capaz de todo para lograr dominar la región. Derrocar gobiernos totalmente democráticos (recientemente Lugo en Paraguay y Zelaya en Honduras). Nos recuerda que la oligarquía siempre estará a las órdenes del capital. Que unos cuántos están dispuestos a traicionar a su pueblo a cambio de la vergüenza de la estafa.

Lo podemos ver a cabalidad con Argentina, Macri que desde el primer día de su mandato echó a andar las políticas neoliberales que pidió Estados Unidos, en tres meses había logrado tirar por la borda los logros progresistas de 12 años. Aún así hemos visto que Cristina no ha desistido y sigue activa políticamente junto a las masas, junto al pueblo que no la ha abandonado. Sufre una evidente persecución junto a otros líderes políticos y Las Abuelas de la Plaza de Mayo. Milagro Sala es un presa política del gobierno de Macri y lo quieren hacer con Hebe, presidenta de Las Abuelas de la Plaza de Mayo. Y quieren ver a Cristina encarcelada también, pero no por ella, sino por los logros y por haber empoderado al pueblo.

¿Qué hará el pueblo brasileño? ¿Se dejará arrebatar los logros? ¿Permitirá que este grupo de corruptos desvalore su voto? ¿Dejará que vuelva el neoliberalismo al país? ¿Qué vuelva la hambruna, la violencia gubernamental, las minerías, la deforestación y los ecocidios? ¿La represión? ¿La miseria? ¿El clamor desde el terror? ¿El silencio y el espanto? ¿Qué Brasil retroceda 40 años?

Es abrumante el silencio de la mayoría de gobiernos de Latinoamérica ante este atraco a la democracia. Los gobiernos del mundo. Guardar silencio es sinónimo de encubrir y admitir una agresión de semejante magnitud a la libertad de decisión de un pueblo que fue a la urnas y eligió con autoridad y derecho, a conciencia. ¿Qué dice la OEA de todo esto? ¿Para qué existe la OEA entonces? ¿Por qué Estados Unidos no se ha pronunciado así como lo hace constantemente con Venezuela? Son evidencias claras que además de faltar el respeto a nuestra inteligencia natural, nos dicen con claridad que harán lo que quieran y cuando quieran. Y nosotros lo estamos permitiendo.

El mismo grupo de usurpadores y corruptos que sacó a Dilma con acusaciones falsas, porque no existe prueba alguna de lo que se le acusa, votará para destituirla. Es más que sabido que la decisión final será perpetrar de lleno el Golpe para que Temer y su grupo de atracadores, hagan de Brasil lo que ha sucedido con el resto de América Latina y sus gobiernos neoliberales. Quieren la cabeza de Dilma, de Lula y del Partido de los Trabajadores para darle un escarmiento al pueblo y hacerle entender a balas y a represión que la democracia no existe y que se hace lo que la derecha y Estados Unidos quieran. Pues ahora es que el pueblo brasileño debe demostrar de qué está hecho.

El nuevo modelo del Plan Cóndor va viento en popa, jueces que trabajan y deciden bajo órdenes de las empresas transnacionales, oligarquía nacional e internacional y Estados Unidos. Un puñado de estafadores que buscan su tajada a costa de la seguridad, la alegría y la vida de miles de brasileños.

La semana es decisiva, se encienden de nuevo las alarmas de emergencia en Suramérica. Un ataque por la espalda al gobierno de Evo Morales para desestabilizar el proyecto progresista del socialismo en la región; el asesinato de un vice ministro que también fue torturado por mineros en una muestra feroz de lo que es capaz de hacer la derecha boliviana para regresar al poder. Busca derrocar al gobierno popular de Evo que también fue elegido en votaciones democráticas; como Dilma, Correa, Maduro, Cristina, Chávez, Lugo, Pepe Mujica, Lula, Néstor, Zelaya.

Las fechas están relacionadas entre sí, con días de diferencia en Brasil, Venezuela y Bolivia, la injerencia de Estados Unidos busca cortar de raíz los gobiernos populares y progresistas de América del Sur. Un coletazo seguramente le llegará a Correa dentro de todo esto para después buscar tomarlo por la yugular e implementar medidas neoliberales en Ecuador.

Para el jueves 1ro de septiembre, en Venezuela la derecha y la embajada de Estados Unidos buscan crear de nuevo el caos en la población, algo a lo que han llamado “La toma de Caracas” que no anuncia ser una manifestación pacífica (la de la derecha nunca lo es) y se deja ver como la segunda versión de La masacre el puente Llaguno, como la del 11 de abril de 2002 con el Golpe de Estado que los grupos oligárquicos mundiales le quisieron dar a Hugo Chávez.

Un Golpe dirigido por el embajador de Estados Unidos en ese momento, Shapiro que encabezó la operación desde el brazo armado de la Policía Metropolitana y con la ayuda de la mediatización de los medios de comunicación oligárgicos en los que están Venevisión y Globovisión.

El gobierno de Maduro presentó en cadena nacional la noche del martes 29 de agosto, en Venezolana de Televisión el documental “Puente Llaguno: claves de una masacre” para recordar a la población lo que es capaz de hacer la derecha y Estados Unidos. Murieron 19 manifestantes tanto de ciudadanos afines al gobierno de Chávez como de opositores, más de 73 heridos de bala. Disparos en la cabeza, el rostro y el cuello. Francotiradores extranjeros que horas después de la revuelta salieron del país. Ubicados en puntos estratégicos en contubernio con los medios de comunicación de la oligarquía que encubrieron estos ataques y que manipularon imágenes y sonidos, para culpar a los manifestantes afines del gobierno de Chávez.

Gracias al periodismo independiente y a los medios de comunicación comunales se supo la verdad y se pudo realizar este documental con pruebas irrefutables de la emboscada que se tendió a Chávez desde la oligarquía; misma que ahora comandada por los mismos actores busca llenar de sangre nuevamente las calles de Venezuela. No han podido desde la Asamblea Nacional y no han podido con las mentiras de la OEA ni con el “clamor” de Estados Unidos, España, y de Uribe y secuaces que piden a gritos una intervención militar.

Que no nos engañen, no van por Maduro, como en el 2002 no fueron por Chávez, van por las políticas de inclusión. Van por la plusvalía; por el derecho a la educación, a la salud, a la vivienda, a la oportunidad del pueblo, de las masas. Van por esa enorme diferencia del 70% de pobreza en la que se encontraba Venezuela antes de Chávez y el 18% con el que se encuentra ahora. Después de Cuba, Venezuela es el país con más igualdad social en América Latina. De 4 de 10 niños que iban a la escuela antes de Chávez, ahora van 8 de 10. 1 de cada 9 va a la universidad. Esos son logros de la Revolución Chavista, que no nos engañen con la hambruna; lo que sí existe y es latente es la guerra económica contra el país. Más de 6 intentos de Golpe de Estado a Chávez y Maduro, y seguirán porque van por el pueblo; lo quieren de rodillas, muriendo de hambre, cansado, enajenado, sumiso, acabado.

Son innumerables los intentos de la oligarquía latinoamericana e internacional y de Estados Unidos por derrocar a los gobiernos progresistas de Suramérica. Tenemos que tener presente que están en juego muchas cosas: la voz y el voto de los pueblos que salieron a elegir en democracia. Los logros en políticas de inclusión que no se había visto en el continente por lo menos durante los últimos 40 desde que el Plan Cóndor arrasó con todo y las dictaduras nos llenaron de torturados, desaparecidos y presos políticos. La sangre que se derramó es nuestra Memoria Histórica, identidad y debe ser también nuestra dignidad.

Denunciar la injusticia deber ser nuestra obligación humana. En cuanto a Dilma, no hay duda alguna, ella no es culpable, no hay que esperar a que pasen los años y la historia la absuelva, es ahora cuando se debe pelear por lo que tanto ha costado restaurar. Hay un tejido social roto, hay secuelas de la opresión, hay niños con deseos de estudiar y jugar en libertad, tienen anhelos. Es por ellos, por ellos debe ser.

Mi respaldo absoluto a los presidentes progresistas de Suramérica que están viviendo el embate de la injusticia imperialista. Y mi lealtad a mi presidenta Dilma, mujer valiente, inteligente, humana y orgullo de la mujer latinoamericana. No pudieron con ella ni torturándola, mucho menos podrán ahora, es inquebrantable.

En cuanto a Venezuela, la toma de Caracas ya la hizo el pueblo el día que eligió a Hugo Chávez y a la Revolución Chavista, de ahí pal real…

Fuente del articulo: https://cronicasdeunainquilina.com/2016/08/30/alarmas-de-emergencia-en-suramerica/#more-5554

Fuente de la imagen: https://cronicasdeunainquilina.files.wordpress.com/2016/01/cropped-16676214378_8634fc78b3_o.jpg

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Expresidente Pepe Mujica: «A Dilma la destituyeron por negarse a la corrupción»

04 Septiembre 2016/Fuente y Autor: TeleSur
El exmandatario uruguayo afirmó que lo que sucedió este miércoles en Brasil fue «la consumación de un golpe de Estado anunciado desde hace rato».

El expresidente y actual senador de Uruguay, José Mujica, expresó que la mandataria de Brasil electa en los comicios de 2014, Dilma Rousseff, fue destituida porque no cedió a las presiones para cubrir a políticos acusados de corrupción.

“A esta mujer la están condenando por no haber entrado en la corrupción”, afirmó Mujica mientras participaba del lanzamiento de una jornada de intercambio entre varios sindicatos de Suramérica.

El exmandatario uruguayo (2010-2015) recordó que el proceso de impeachment de Rousseff comenzó luego de que la mandataria se negara a ceder protección parlamentaria a quien era el presidente de la cámara de diputados Eduardo Cunha.

“Existe un señor, Eduardo Cunha, que era presidente del Parlamento y parece que alguien que pasó por Suiza le dejo 5.000.000 de dólares a su nombre pero él no sabe quién fue”, ironizó el senador perteneciente a la coalición oficialista Frente Amplio (izquierda).

Mujica agregó que tanto el Partido de los Trabajadores (PT) de Brasil (izquierda) como la presidenta no intervinieron para evitar que fuera investigado y eso llevó a Rousseff a la condena.

“Y cuál fue el error del PT, error entre comillas y el error de la presidenta, no agarrar viaje para tapar un hecho de corrupción”, concluyó.

«Lo que hubo en Brasil fue un golpe de Estado. Póngale el nombre que quieran pero es así», aseguró Mujica.

Durante el acto, declaró que lo que sucedió este miércoles en Brasil fue «la consumación de un golpe de Estado anunciado desde hace rato».

Al respecto, aludió a que la última vez que el actual embajador brasileño José Serra visitó Uruguay «dijo a boca de jarro que esto estaba decidido» por lo que «toda esta discusión del Senado fue una gigantesca pantomima».

Mujica añadió que la salida de Rousseff «estaba decidida en otra parte» y que «se montó un escenario a los efectos de embaucar a la opinión pública y dar una apariencia de juicio».

«Hubo una decisión política de la derecha de aventar este gobierno. Hubo una decisión política que buscó reacomodar el artilugio jurídico a los efectos de tener ciertas cosas para presentarse ante la opinión del pueblo y del mundo», continuó.

«Cuando los compañeros dicen golpe de Estado, es un golpe de Estado», manifestó.

Fuente de la entrevista: http://www.telesurtv.net/news/Mujica-A-Dilma-la-destituyeron-por-negarse-a-la-corrupcion-20160901-0003.html

Fuente de la imagen: http://www.telesurtv.net/__export/1472712958468/sites/telesur/img/multimedia/2016/09/01/mujica.jpg_1718483346.jpg

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Comunicado de CLACSO sobre la destitución de Dilma

La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, fue destituida de su cargo. Se cometió así una de las mayores infamias de la historia democrática latinoamericana. Desde CLACSO, expresamos nuestro más vehemente y enfático repudio al golpe de Estado que se ha consumado en Brasil.

Reiteramos el comunicado del Comité Directivo y de la Secretaria Ejecutiva de CLACSO, así como las declaraciones de diversos Grupos de Trabajo que expresan su rechazo al proceso de desestabilización del estado democrático de derecho en dicho país.

Hoy es un día de luto para Brasil y para toda América Latina. Mañana será un día de «luta». Defenderemos la democracia como sea y donde quiera que sea.

Buenos Aires, 31 de Agosto de 2016

Secretaría Ejecutiva

CLACSO

Fuente: http://www.clacso.org.ar/difusion/mensaje_2016_4.php#n11

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Entrevista a Ilka Oliva Corado: «América Latina necesita salvar su identidad cultural»

31 Julio 2016/Autor: Eduardo Vasco

La escritora y poetisa guatemalteca Ilka Oliva Corado és inmigrante indocumentada y vive en EEUU hace más de diez años. Escribe para diversos medios del continente y tiene sus artículos traducidos al inglés, francés y portugués. Ella también es columnista de Diário Liberdade. La sangre latinoamericana hierve en sus venas.

EV: ¿Estás acompañando la crisis política en Brasil?

IC: Por supuesto, es un abuso a la democracia y a Dilma que junto a Lula han sido los mejores presidentes de Brasil.

El mismo lo pasó recientemente en Paraguay y Honduras. ¿Será coincidencia eso?

La modalidad de Plan Cóndor en estos momentos es otra, y el eje central es la manipulación de los medios de comunicación. Ya no se oprime con dictaduras sangrientas, lo que hacen es idiotizar a las masas ( digo masas, hablando propiamente de la clase media latinoamericana) que de por sí son indiferentes, y las conducen  hacia donde la oligarquía quiere. Todo eso lo disfrazan de democracia.

Ahora bien, hablando de los golpes blandos son estructuras que se han hecho a fuego lento, lo intentaron en más de una ocasión con Chávez, con Cristina, Evo, Correa, y no es novedad que le tocara a Lula y a Dilma. Están en peligro las reformas sociales que estos gobiernos han llevado a cabo durante la última década en la región.

EV: ¿Por que la clase media es tan fácilmente manipulada?

IC: Por su indiferencia, tienen el pensamiento colonialista más enraizado que el pueblo. La clase media siempre busca ser burguesa, eso la coloca en distancia de años luz con el pueblo aunque económicamente vivan de apariencias. Porque es clasista y racista y responde a una educación de tinte burgués y capitalista.

EV: : ¿Crees que EEUU está por tras de estos golpes en América Latina?

Siempre lo ha estado. Esa no es novedad. La oligarquía latinoamericana siempre ha respondido a los intereses corporativos y políticos de Estados Unidos.

Mas allá de la injerencia del imperio, tal vez haya algo en la cultura política latino americana, que la corrupción tenga raíces históricas, con la brutal colonización, esclavización y sumisión hasta los días de hoy de los pueblos nativos y los pobres por las oligarquías de todo el continente…

Por supuesto, echarle la culpa de todo a Estados Unidos es no tener agallas para reconocer que el mal comienza en nuestro propio continente precisamente por eso, por las mentes colonizadas, por el racismo y la segregación. Si los de adentro no vendieran los de fuera no compraran. Eso es así.

La oligarquía vende patria, que no valora a los costumbres y tradiciones históricas de nuestros pueblos, pero sí lo hace con la cultura importada e impuesta por EEUU…

Exacto, hemos crecido bajo normas de colonización, no tenemos identidad y todo lo que viene de afuera lo vemos como  excelente y fantástico que lanzamos por la borda lo propio. La oligarquía latinoamericana no es más que un grupo empresarial sin patria y sin identidad, su patria y su identidad son  el dinero y su comodidad. Ellos importan todo lo que tenga que ver con el mundo anglo.

EV: ¿Crees que América Latina aún persigue su identidad propia y original?

IC: Los pueblos milenarios sí, los pueblos indígenas, los pueblos originarios, ellos aún tienen identidad y luchan por rescatarla de las garras de la imposición. Claro que sí la tiene, Latinoamérica aún sigue en resistencia porque hay muchas cosas por salvar, entre ellas su identidad cultural.

De los pueblos originales, los más conocidos que luchan por su identidad son los indígenas de la floresta amazónica, los Aymara en Bolivia y los Mapuche en Chile. Pero, ¿como está la situación de los pueblos nativos de América Central, que, más allá de los Mayas y Aztecas, tantas otras culturas fueron violentadas por los españoles? ¿Hay memoria y rescate de las tradiciones ?

Si te das cuenta los que  siempre han manifestado son los pueblos originarios. En Guatemala por ejemplo están en manifestaciones constantes, a las que la sociedad capitalina no presta atención. Inclusive para las manifestaciones por corrupción los denigraron dentro de las mismas. Los capitalinos dejaron de manifestar y ellos (los pueblos originarios y movimientos campesinos) siguen manifestando. Porque el olvido del Estado y en paradoja el ataque  del mismo no les permite vivir siquiera con lo básico, encima les roba el modo de sobrevivencia y la misma fotografía está en El Salvador, Honduras y México. Extracciones mineras, desviando los ríos hasta secarlos. Ecocidios.  Son los pueblos originarios los que han mantenido la cultura y las tradiciones mientras los capitalinos cada día pierden más su identidad.

EV: ¿Y como ellos vienen manteniendo su cultura y tradiciones?

IC: Pues como pueden, con lo poco que el Estado les permite. Vemos gobiernos neoliberales que los atacan. En Guatemala «la tierra arrasada» fue plan de Estados Unidos y el ejército guatemalteco para acabar con los indígenas. Además pesa mucho la influencia del exterior. Todo lo que viene de afuera es visto como lo mejor, cuando no lo es, cuando lo propio es lo que tenemos valorar.

Son los pueblos originarios los únicos que mantienen vivas las tradiciones y la cultura propia de la región. Y se les ataca y explora por eso.

EV: ¿Los diferentes costumbres de nuestros pueblos permiten o dificultan la aproximación entre nosotros?

IC: No creo que sea cuestión de costumbres  o cultura. Porque las distintas  costumbres y las culturas son parte de nuestra diversidad. Nos enriquece como continente. Lo que nos divide es la indiferencia en su grado más vil. En esa mente colonizada no nos abrimos a otras formas de pensamiento, a otras costumbres, a otras culturas.

EV: ¿Entonces crees que los pueblos de nuestra América todavía no se conocen?

IC: Creo que no me di a entender. Quiero decir que lo que nos separa como  humanidad es la indiferencia no las culturas ni las tradiciones, porque éstas al cabo nos enriquecen. Hablando propiamente de pueblos originarios por supuesto que sí se conocen, no olvides  que venimos de una misma raíz, hay diferencias pero lo vital es lo que nos une.

Me parece que hay un paradojo con nuestros pueblos. Aunque seamos, en general, amistosos, acogedores, humildes, un pueblo digno, verdadero y amable…, aún vivimos en sociedades conservadoras, tal vez herencia del pasado colonial…

Claro, con nuestra doble moral a cuestas, cachurecos a morir, desleales y xenófobos. Porque somos racistas por excelencia  y discriminamos todo aquello que  no nos parezca y lo desvalorizamos. Nos creemos superiores por clase social, color de piel, grado de escolaridad. Somos un continente hermoso, sublime y por desgracia colonizado. Y no damos por dónde cambiar las estructuras y arrancar de raíz esa norma patriarcal que aún nos sigue dominando.

EV: ¿Tienes esperanza de que eso cambie?

Sería lo ideal pero sabemos que no sucederá de la noche a la mañana. Llevamos 500 años con ese yugo colonizado que nos ha convertido en clasistas y racistas al colmo de negar lo propio. Nuestra propia identidad. Para cambiar se tiene que trabajar en todos los estratos de la sociedad: en cultura, educación principalmente. Y eso no será fácil, claro que no es imposible pero se necesita querer hacer las cosas y como vemos estructuralmente nuestras sociedades son de doble moral.

Entrevista concedida a Eduardo Vasco (do Diário Liberdade/Brasil) por e-mail, y remitida a la redacciòn de OVE por Ilka Oliva Corado

Fuente de la imagen: http://www.unpa.edu.ar/sites/default/files/editor/noticias/23PU-Caleta-web.JPG

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Latinoamérica, golpes y resistencia

Ilka Corado
Publicado en abril 20, 2016

Hoy en día las dictaduras dejaron de ser sangrientas, Estados Unidos y la oligarquía latinoamericana cambiaron de estrategia. La imposición es corporativa. Una nueva modalidad de guerra sucia y Plan Cóndor que da los golpes blandos con su eje central: a través de la manipulación de los medios de comunicación y, con esto adormecer las mentes de las masas (clase media latinoamericana) que por indiferentes son fáciles de utilizar. Sin percatarse votan por estructuras que según ellas (clasistas y racistas) afectarán solamente a la población más vulnerable, no se darán cuenta (por polarizadas) que son tan solo el trampolín para el beneficio de los buitres que después las tratarán como lo que son…

Ejemplo claro es el No en Bolivia, la nueva Asamblea Nacional en Venezuela, Macri en Argentina, el intento de golpe en Brasil contra Dilma. Y los presidentes de corte neoliberal en el resto del continente. En ninguno de estos Estados Unidos recurrió a la dictadura como en décadas pasadas, lo hizo en tiempos de democracia; fue un trabajo a fuego lento y muy bien cuidado donde las dosis fueron exactas: televisión, radio y prensa escrita. Un poco de caos para atemorizar a la población y fue suficiente.

El saqueo es industrial, tiene tintes bancarios y la extracción de recursos naturales es uno de los objetivos principales; por esa razón vemos a lo largo y ancho del continente la opresión a los movimientos sociales y campesinos que defienden el agua y la tierra. Los ecocidios están a la orden del día y las minerías hacen lo suyo con el permiso de los gobiernos de turno. Un ajuste en políticas económicas que anulan inversiones en educación, salud, trabajo y vivienda y, al contrario lo invierten en “seguridad” para vulnerar más a la población y desvincularla de todo activismo social y voz de insurrección.

La resistencia de gobiernos progresistas no es de agrado para Estados Unidos que con golpes blandos y con las masas manipuladas en un disfraz de democracia hizo destituir a Lugo, Zelaya y pretende hacerlo también con Maduro, Dilma, Evo y Correa. A Cuba le fue a decir en su propia cara que libere a su pueblo del socialismo, como si no fuera Cuba uno de los pueblos más libres del mundo precisamente por el socialismo.

Siendo Latinoamérica un continente de mente colonizada, clasista y segregacionista; es fácil que el neoliberalismo se cuele por las fisuras culturales y políticas. Por el lado de la impunidad. Donde lo humano, la dignidad y la lealtad no tienen pie de entrada. Es ésa la resistencia de los gobiernos progresistas con sus reformas políticas que han hecho florecer a una América Latina post dictaduras. Están sanando las brechas y el tejido social. Están ofreciendo trabajo, alimento, educación, hogar y plusvalía a las mayorías marginadas. Están encarcelando a los torturadores, a los culpables de crímenes de lesa humanidad. ¿Qué gobierno neoliberal le apuesta al desarrollo de su pueblo? ¿A la cultura, a la educación, a la salud?

Si bien es cierto no son gobiernos ideales, les hace falta mucho por hacer, se han equivocado en decisiones, dentro de sus filas también hay corruptos disfrazados de progresistas y muchos terminan en Miami con negociones millonarios. Eso es cierto y no se puede negar. Pero una cosa son los que han traicionado la revolución y otra que los gobernantes estén involucrados, tal es el caso de Dilma en estos momentos. El ataque no es contra ella ni contra Lula, es contra el progreso del pueblo brasileño.

Dilma ha denunciado a estos corruptos y en resultado Brasil está viviendo un nuevo intento de golpe de Estado para que estos mismos corruptos que ella denunció tomen el poder. Esta ecuación no es tan difícil de entender. Ataques por género siempre han sufrido Dilma, Cristina y Bachelet. Y es el patriarcado quizá el peor de nuestros males porque nos afecta a todos y es una norma con la que crecemos y es preciso hacerla desaparecer junto a la misoginia y el machismo. Es la misoginia y el machismo el que ataca en este momento a Dilma, con todo su odio hacia su género, inteligencia y entereza.

Los golpes blandos no terminarán, los intentos de golpes de Estado siempre han estado ahí y con fuerza, son corporativos y se visten de votos, rezos y oratorias clasistas, cachurecas y deshumanizadas. Nuestra doble moral y nuestra haraganería para formular un análisis propio nos colocan en la posición de marionetas y somos pues la diversión de los que realmente hacen de nosotros un espectáculo de mierda. Sigamos pues durmiendo la mona.

Entre otras noticias, ¡volvió Cristina! Demostrando que la militancia es en todo momento y con el pueblo. Que se aliste Macri y su horda de buitres porque esto apenas empieza. Que se aliste la derecha brasileña y Estados Unidos porque 50 millones de brasileños que votaron por Dilma no se dejarán vencer así por así. ¿Qué harán para silenciarlos? ¿Acaso llenar de sangre las calles de Brasil? La Revolución Bolivariana sigue en resistencia.

500 años de invasiones y genocidios y no han podido con La Patria Grande, no será ahora que la vencerán.

Ilka Oliva Corado.
@ilkaolivacorado contacto@cronicasdeunainquilina.com
Abril 20 de 2016.

Artículo tomado de : https://cronicasdeunainquilina.com/2016/04/20/latinoamerica-golpes-y-resistencia/

Foto tomada de: http://pbs.twimg.com/media/Cgg23TXUIAEfKrz.jpg

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