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Holanda dejará de poner el sexo en el documento de identidad

Europa/ Holanda/ 14.07.2020/ Fuente: www.heraldo.es,

El Estado holandés dejará de señalar en el documento de identidad el sexo de los ciudadanos, hasta ahora representados con «hombre«, «mujer» o «X«, porque lo considera «innecesario» e impide que los ciudadanos «moldeen su propia identidad con libertad».

La nueva medida, que se aplicará a partir de 2024, afecta a los documentos nacionales de identidad de los Países Bajos pero no a los pasaportes, donde se mantendrán por las regulaciones europeas.

En una carta enviada al Parlamento, la ministra de Educación y responsable de Emancipación, Ingrid Van Engelshoven, explicó que su plan de acción para «limitar el registro innecesario del sexo cuando sea posible» incluirá una guía para determinar cuándo solicitar y utilizar información sobre el sexo de una persona.

La guía también explicará cuándo el registro del «género y sexo es necesario e innecesario, y cuándo es posible omitir su registro»; contendrá, entre otras cuestiones, una «caja de herramientas» en línea con directrices, ejemplos y una «versión fácil» sobre cómo evaluar esta necesidad de conocer el sexo de un ciudadano.

La guía se elaborará junto a empresas, autoridades municipales y grupos de interés, mientras que el proceso de omisión del sexo de los ciudadanos comenzará en 2024, año en el que ya estaba prevista la modificación del diseño de las tarjetas de identidad, lo que permitirá ahorrar costes e incluir en el cambio esta nueva medida.

Un estudio encargado a la Universidad de Utrecht mostró que «las consecuencias prácticas de la omisión del sexo para las organizaciones que usan la tarjeta de identidad para verificar la identidad siguen siendo limitadas», aunque reconoce que tendrá que informar a la Policía, la gendarmería y a otros países de que la tarjeta de identidad holandesa ya no contiene el sexo.

La indicación de «hombre«, «mujer» o «X» (para sexo neutral), se mantendrán en los pasaportes holandeses por exigencia del reglamento de la Unión Europea y por las directrices de datos obligatorios acordadas a nivel internacional, lo que permite «salvaguardar» la función del pasaporte como documento de viaje en todo el mundo.

Van Engelshoven subrayó la importancia de que «los ciudadanos puedan moldear su propia identidad y compartirla con total libertad y seguridad» y consideró que limitar el registro innecesario del sexo es un «paso importante» hacia este objetivo.

Fuente de la noticia: https://www.heraldo.es/noticias/internacional/2020/07/06/holanda-dejara-de-poner-el-sexo-en-el-documento-de-identidadholanda-identidad-1384495.html

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La educación sexual tiene que empezar en casa, según sexólogos y docentes

Por: ABC

Los expertos insisten en la «importancia del papel de los padres y madres en esta materia» y defienden que se haga de forma colaborativa también en la escuela.

La educación sexual tiene que empezar en casa y la familia y debe colaborar con la que se imparte en los colegios, según han coincidido en señalar pedagogos, psicólogos y sexólogos consultados por Efe, que aplauden la implementación en Cataluña del plan de educación sexoafectiva «Coeduca’t», que ha empezado a aplicarse en 300 institutos catalanes con el objetivo de introducir en tres años la educación sexoafectiva en todas las escuelas como una materia transversal desde los 3 a los 15 años.

Los expertos insisten en la «importancia del papel de los padres y madres en esta materia», ya que son «el referente más cercano para sus hijos» y defienden que, en consecuencia, «la educación sexual tendría que empezar en casa», aunque defienden que se haga de forma colaborativa también en la escuela.

Según el departamento e Educación, el plan «Coeduca’t» es «un paso adelante hacia el reconocimiento de la diversidad, el derecho al propio cuerpo y la libertad sexual».

La educación sexual incluye temas como la identidad de género, la orientación sexual, la violencia de género, el consentimiento u otros aspectos de la sexualidad y la afectividad en contenidos adaptados según la franja de edad. La psicóloga clínica del centro de Psicología Cepsim y sexóloga del Instituto de Psicoterapia Gestalt de Madrid, Sandra Isella, lamenta en declaraciones a Efe que «la educación sexoafectiva sea una asignatura pendiente en España. Se da anatomía y biología, pero no se contempla la dimensión emocional y sexual».

«Es cierto que la dimensión emocional comienza a tenerse en cuenta, pero la sexualidad no se considera aún. Si la familia tuviera el apoyo de los colegios en estos temas, se ahorraría mucho sufrimiento», según Isella.

Educación sexoafectiva

El psicoterapeuta y sexólogo Raúl Padilla opina, en declaraciones a Efe, que «existe un tabú, es un tema incómodo y que intrinca en lo estrictamente personal y diverso», lamenta la ausencia de estos contenidos en el currículum educativo y asegura que «impide que se generen debates racionales en relación a la sexualidad».

Ambos expertos coinciden en que la educación ha de iniciarse en el ámbito familiar, al resaltar que ciertos valores sólo pueden adquirirse en casa, y recomiendan que la escuela, siempre respetando la multiculturalidad de las familias, trabaje con los padres para evitar que el alumnado entre en contradicciones al recibir conocimientos respecto a la educación sexoafectiva.

«Si en casa no tenemos una educación en condiciones, en la escuela va a estar desfasada. El respeto, las formas, el estilo comunicativo, la empatía, todo esto se aprende en casa. Si solo se trabajan en el aula no es suficiente, el trabajo tiene que ser conjunto», defiende Padilla.

Un esfuerzo conjunto de las familias y las escuelas que Padilla ve fundamental, ya que «a estas edades lo peor que puede pasar es encontrar mensajes opuestos en la escuela y en casa y esto debe tenerse en cuenta, siempre respetando la pluralidad y diversidad de las familias».

La presidenta de la Federación de Asociaciones de Madres y Padres de Alumnos de Cataluña (Fapac), Belén Tascón, ha recibido el plan positivamente indicando que «me parece una buena iniciativa y una buena formación», ha dicho a Efe.

«Sería importante adaptar el discurso a cada franja de edad y aunque la participación no siempre es muy elevada serían muy provechosos unos talleres de formación para padres», propone Tascón.

En el instituto público IES Verdaguer, la directora del centro, Marta Vidal, reafirma a Efe que es necesario que los valores que se inculcan en la escuela «los den también las familias, porque si no es difícil hacer este trabajo».

«Además tenemos familias de muchas procedencias y queremos respetar su cultura, pero tratamos de hacerlo sin dejar de recomendar amplitud de miras», asegura.

No llegar tarde

En este instituto, la materia de la violencia machista la imparten mediante talleres puntuales la Guardia Urbana, y sobre sexualidad, voluntarios de la Cruz Roja en tercero y cuarto de ESO.

A estas edades, según Padilla, ya solo se puede «reparar» para evitar que el adolescente genere «patologías o una visión limitada de la sexualidad que le haga vivir relaciones deficitarias en su vida adulta».

La directora del centro indica, sin embargo, que estos talleres se complementan con sesiones respecto al consentimiento y la violencia sexual, pero no se coordina o incluye a los padres en el programa.

«Estaría bien que los padres participaran de alguna forma, para saber qué hacemos entre todos, pero es difícil que los padres quieran participar en la educación en los centros», lamenta Vidal.

«Los jóvenes suelen saber mucho más de lo que se les explica en estos talleres, pero les faltan conocimientos tan básicos como el respeto, el consentimiento, la asertividad y otros valores y estas carencias no les permiten dar a la sexualidad el valor que tiene», concluye la directora del instituto.

Fuente e Imagen: https://www.abc.es/familia/educacion/abci-educacion-sexual-tiene-empezar-casa-segun-sexologos-y-docentes-202002160118_noticia.html

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Mujeres organizan huelga de sexo hasta que les construyan una vía en sur de Colombia

América del Sur/Colombia/13-01-2020/Autor(a) y Fuente: www.publimetro.co

En tiempos de protestas, esta es una de las más llamativas que se haya visto. Un grupo de mujeres en Nariño anunciaron que no tendrán sexo con sus esposos hasta que se termine de construir la vía Junín-Barbacoas, en el departamento del sur. ¿Los hombres son quienes construyen la vía? No, pero ellas apelan a la huelga de sexo porque ya les funcionó.

«La verdad es que estamos en pie de lucha para volver a organizar una huelga de sexo, porque creo que no es justo que por una entidad se pare una obra de gran importancia», aseguró la líder de la Fundación Piernas Cruzadas.

A la vía de 56 kilómetros le faltan ocho kilómetros de construcción, lo que conectará el triángulo Telembí-Pasto. Por eso, como hace nueve años, las mujeres de la población volverán a tener una huelga de sexo. En su momento la protesta surgió efecto para empezar a construir la vía, ahora esperan que funcione para el tramo final.

Ante el tema, el alcalde de Barbacoas, Adams Rincón, afirmó que para la región es clave tener esa vía. «Tenemos el tema de conectividad que nos va a permitir la competitividad de la producción», manifestó.

Fuente e Imagen: https://www.publimetro.co/co/noticias/2020/01/12/mujeres-organizan-huelga-de-sexo-hasta-que-les-construyan-una-via.html

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El mal nace en la escuela

Por:  Carlos Blanco

El colectivo de los profesores ha tragado el sapo de la pedagogía, y ahora su ruina corporativa es inevitable.

España no tiene futuro. Siento decirlo con estas palabras tan crudas, tan negras y derrotistas. Pero cuanto antes nos hagamos a la idea, antes podremos adoptar medidas que permitan al menos «salvar los trastos». Engañarse con patrioterismos, lucir banderas y eslóganes cuando hay tantos y tan aviesos enemigos no sirve de nada. Hay quienes piensan en recuperar el Peñón o rehacer imperios ultramarinos, cuando lo cierto es que toda una región española -¡españolísima!- como es Cataluña, está hoy ardiendo y desde esos incendios está a punto de iniciar el proceso de balcanización del país.

Éste, como otros males, es un cáncer que nace en la Escuela. La Escuela española, la Educación Primaria, es un fraude y es la semilla del mal de nuestra nación. No querer verlo es ceguera, o por mejor decir, es estupidez. No admitir esta tesis de que el mal de la nación empieza en la primera enseñanza es adoptar una posición suicida. Y el problema no es, única ni principalmente, el grado de adoctrinamiento al que los niños catalanes están llegando, como en la peor de las pesadillas totalitarias, desde hace generaciones. El problema no es, de manera exclusiva, este aberrante «Estado de las Autonomías» que ha entregado la Educación –instrumento de Estado y arma civilizatoria al mismo tiempo- a los mayores sinvergüenzas de la historia de España, gentes que arrancaban prebendas y privilegios del Estado sin ceder ni un ápice en sus pretensiones adoctrinadoras y separatistas (los Pujol, los Mas). Lo cierto es que los «grandes» patriotas y estadistas (Felipe, Aznar, Zapatero) serán juzgados dentro de un siglo con más dureza que los sátrapas regionales, de butifarra, sardana y birretina. En sus manos, las manos de presidentes del gobierno de la nación, estuvo la posibilidad de contener a los sátrapas y a los balcanizadores, en su obligación estaba el ver venir las cosas a largo término. Pues fue en La Moncloa, y no en Palau, donde se comenzó a destripar España.

Y se destripó mucho más, y mucho más gravemente, con las leyes educativas. Lo tremendo no es que no se pueda hablar en español en un colegio de España. Catalán y español siempre han convivido, y la Ley Fundamental establece esta convivencia. Lo tremendo es que ante el fraude de la Primaria estemos –docentes y administradores- deliberando sobre un «lenguaje inclusivo» o poner aseos «unisex», mientras la formación moral e intelectual de los futuros españoles, y no sólo catalanes, se va al inodoro. Se adoctrina siempre que no se educa. Y en España no se educa. Voy a hablar claro: no se educa y no dejan educar desde la LOGSE (1990). Se ha sustituido el magnífico entramado educativo del franquismo tardío por un engendro adoctrinador llamado «sistema educativo español», que sólo sirve para estabular niños y adolescentes, tiranos hoy y esclavos mañana.

En el presente artículo me centraré más en la Enseñanza Primaria. Debo decir bien alto que en la mayor parte de los colegios de nuestro país ya no se enseña. Los maestros, liberados de la responsabilidad de otorgar títulos al terminar sexto curso, que es el último año de Primaria, envían a los niños al Instituto de Secundaria sin hacer ninguna valoración realmente objetiva sobre las posibilidades de seguir estudiando con éxito. Al ser el título de graduado en E.S.O. [Educación Secundaria Obligatoria] el título más bajo que otorga el sistema educativo, expedido en el Instituto y no en la Escuela, ésta ni siquiera se siente obligada a emitir un informe objetivo sobre las capacidades de cada niño que, siendo díscolo, inquieto o torpe, abandonará (con gran alivio para los maestros de Primaria) el colegio de Primaria y se «integrará» en una Secundaria que, amén de obligatoria, es aluvialallí van a parar todos, mezclados y revueltos, como mandan los cánones del pensamiento pedagógico moderno.

En seis años de Primaria, muchos niños no disponen de verdadera experiencia de acercamiento al arte, la belleza, la historia, la ciencia, la moral. Son años «gamificados» (educación lúdica, basada en juegos, excursiones, conexión a internet). Muchos colegios rozan el rizo incorporando tabletas electrónicas, móviles y demás sistemas de «virtualización de la enseñanza» fomentado la tecnoadicción, los problemas visuales, la obesidad, y diversos trastornos psiconeurológicos (trastornos atencionales, hiperactivos, desórdenes en el procesamiento cerebral de la información). Los libros están siendo desterrados de la Enseñanza y, cuando hay lecturas obligatorias, ya no se recomiendan clásicos de la literatura infantil y juvenil sino autores actuales que preparan al niño como adolescente o pre-adulto, iniciándole prematuramente en los temas del sexo, la droga, la violencia. El papel de ciertas obras «literarias», además de charlas y documentales a la hora de crear una erotización de la infancia y una hiperestimulación en conductas cibernéticas, es del todo preocupante, y la Escuela está siendo un agente fundamental en este adoctrinamiento. Se busca (y se logra con notable éxito) un consumista prematuro: alguien fundamentalmente inculto, pero apto para gastar un dinero que él no gana, y que probablemente nunca llegará a ganar con su propio esfuerzo. El niño de Primaria, especialmente quien está agotando la etapa (4º, 5º y 6º), es, gracias a padres irresponsables y a maestros y pedagogos ineptos, un nuevo y terrible bárbaro. El españolito del futuro será –ya es, en muchos casos- un monstruo: alguien que a los doce años ya está «de vuelta» en materia de sexo…es un monstruo. La iniciación precoz en el sexo es el síntoma de que la Civilización europea, cristiana y española está muriendo. Otro tanto se diga del «enganche» o dependencia precoz que los niños sufren con respecto al móvil. Entre los ocho y diez años va creciendo el porcentaje de niños con teléfono móvil dotado de datos para acceder a internet, y con ello, con la posibilidad de acceder a golpe de clic a la más deleznable pornografía y violencia. Es evidente que el haber «liberalizado» de tal manera el acceso a la red desde sus inicios, sin pedir credenciales de edad e identificación (algo que la Policía de todos los Estados podría haber logrado, habiendo voluntad para ello) supone «nuevos yacimientos de negocio»: pedofilia, adoctrinamiento, iniciación en el hiperconsumo.

Y los maestros se están cruzando los brazos. Como la evaluación (que incluye calificaciones y decisiones sobre pasar de curso o «promocionar») se ha trivializado hasta extremos grotescos, los maestros del colegio dan el pase al instituto a todos los niños. En vez de firmar unas actas con calificaciones numéricas vinculantes, la pedagogía moderna ha permitido a los maestros informar estúpidamente de esta manera: «progresa adecuadamente», «competencia digital adquirida», «competencia emocional en vías de consolidación». Consecuencia: los niños de doce años llegan al Instituto sin ninguna valoración objetiva acerca de lo que saben y lo que no saben hacer. Es frecuente que los profesores de secundaria reciban unos niños en estado ferino, sin hábitos adquiridos en la Escuela, niños que se levantan de la silla cuando quieren, intervienen en clase o interrumpen cuando les viene en gana, no pongan una tilde, jamás escriben mayúsculas en los nombres propios, exhiban deficiencias en sus capacidades aritméticas, no sepan poner ningún país en el mapa… Lo peor es la carencia de normas y falta de memoria en estas nuevas generaciones de muchachos. Avezados en pulsar teclas en aulas de informática, en hacer «búsquedas» en su propio móvil o duchos en talleres de «inteligencia emocional» y «educación afectivo-sexual», estos niños de ahora no pueden memorizar una sola hoja de apuntes, y, por supuesto, nunca toman apuntes porque éstos están «colgados» en la red o volcados en su tableta digital. De otra parte, está llegando el momento en que los padres que no han solicitado una «adaptación curricular» para su niño van a parecer unos tontos, porque esto equivale a renunciar a las ventajas que supone alcanzar un aprobado o la titulación con el más mínimo esfuerzo. Cualquier niño que acuda a un «especialista» poseerá alguna «diversidad» (las que están más de moda son TDA, TDAH, y toda una suerte de sopa de letras de síndromes y trastornos) si éste «experto» se propone buscarlas. A veces hay una base real: la conexión de niños a dispositivos electrónicos con o sin acceso a la red está generalizada, y la voluntad, facultad que se encuentra en la base de la atención y demás sistemas cognitivos necesarios para la vida escolar, se ve con ello perturbada. Pero otras veces no hay base para tal diagnóstico: es una moda que el propio sistema potencia, porque «la diversidad mola».

«La diversidad mola» y lo mismo que trae ventajas que el orientador decrete la necesidad de «adaptaciones curriculares» (verbigracia: ponérselo más fácil al estudiante), también está trayendo ventajas la promoción del homosexualismo, de la ideología «trans», y de la ideología de género. El sistema educativo español, siguiendo consignas de organismos internacionales que planifican la ingeniería social mundial y una «superación de las barreras naturales», ha optado por la inflación legislativa y la promoción a bombo y platillo de unos sentimientos, comportamientos y dudas que, en un menor, digan lo que digan, no pueden ser definitivos, auténticos ni madurados. No es de recibo que un menor, a quien no le dejan salir de la verja del centro y que tiene que contar con la autorización firmada de los padres para ir con su clase de visita a un Museo que está en la acera de enfrente del Colegio, tenga en cambio, como sujeto, la capacidad para «autodeterminar» su identidad «de género» y que un Colegio o Instituto se ponga patas arriba para acoplarse a esa «autodeterminación».

Hemos perdido el norte, y los maestros y profesores son parte del problema. En un principio, las aberraciones de la LOGSE y demás leyes hijuelas suyas se atribuían a la abstrusa legislación en sí misma, al imperio omnímodo de doctrinas pedagógicas extranjeras y pseudocientíficas, a la ideologización y politización del propio sistema educativo. Pero ya es el momento de poner el dedo en la herida y señalar al colectivo de los docentes como corresponsables de este fracaso, de esta negación de toda posibilidad de hallar salida al suicidio de España.

Para cortar por lo sano, la única posibilidad que nos queda es devolver al maestro y al profesor su soberanía en materia calificadora. Evaluar es duro, es un acto administrativo de gran seriedad y que exige mucha responsabilidad. Pero para hacer esto con objetividad es preciso quitarse de encima las moscas que revolotean en torno al docente. Todo docente que ha tenido que poner las notas tomándose en serio su trabajo puede contar docenas de casos en que todo tipo de moscas aterrorizaron sobre su acta de evaluación: el director, el orientador, el jefe de estudios, el padre influyente, la madre con ascendientes, el inspector y el defensor del pueblo, si me apuran. Todo el que pasa por delante de la nariz del profesor tiene «algo que decir», y la amenaza de reclamaciones y papeleos infernales está siempre pendiente, cual espada de Damocles. Así hemos creado, desde la LOGSE de 1990, varias generaciones de docentes timoratos, aterrorizados, gandules cuyo lema «haz que pase» se ha hecho proverbial. Nadie quiere líos, sólo se piensa en cobrar a fin de mes y escaparse en los puentes y fiestas de guardar, «desconectando» de la Escuela y viviendo con la venda en los ojos. Los maestros y profesores saben que sus decisiones no cuentan con el apoyo de nadie y que lo que predomina es ese lema de Pedro Sánchez: «haz que pase», que el niño gandul y caradura pase de curso, y cuente con unas notas infladas. Llegará el día en que ese niño se haga mayor y el Sistema se lo coma crudo. Carne de cañón para todo género de dependencias, débil ante poderes mundiales de control social, carente de voluntad y capacidad crítica, el niño que ha pasado de curso con «empujoncitos» paternalistas, con buenismo irresponsable, con corrupción inherente al Sistema (por medio de presiones, amenazas o reclamaciones de nota sin fundamento), ese será el futuro votante, consumidor y esclavo. Quedémonos nada más que con esa palabra: esclavo. Un suspenso a tiempo, igual que un bofetón a tiempo, han salvado a millones de españolitos de otros tiempos. Los han salvado de la gilipollez extrema. Pero estos de hoy son otros tiempos. Tiempos en los que la Escuela ya hace décadas que no funciona, y la Escuela ha arrastrado sus males y su «pedagogismo» a los Institutos y a la Universidad.

Que en la calle vemos niños con sexualidad precoz cuando no aberrante: Haz que pase. Que en casa vemos niños tecnoadictos. Haz que pase. Que al niño se le concede un «derecho de autodeterminación». Haz que pase. Que al niño se le imparten charlas adoctrinadoras en lugar de enseñarles a leer, escribir y hacer bien sus cuentas. Haz que pase. Que el maestro y el profesor sean, nada más, que unos «mediadores de aprendizajes», es decir, unos tipos sin prestigio alguno, cuyas decisiones vienen cuestionadas por parte de cualquiera (incluyendo sus propios «compañeros» de profesión)… Haz que pase.

En España dejamos pasar a todo el mundo, y tragamos carros y carretas. Ningún partido político ha dicho palabra sobre este descalabro. Nadie articula ni pergeña una reforma legal que restablezca la autoridad (disciplinaria y calificadora, ambas) al profesorado, ni tampoco nadie ha diseñado un plan para modificar el acceso a la profesión docente. Al menos desde los tiempos de Zapatero, los sindicatos docentes se han convertido en agentes para la admisión masiva de interinos, esto es, de graduados universitarios que nunca han aprobado un examen de oposición en su relajada existencia pero que «por su cara bonita», y por el populismo sindical y autonómico, han visto que se les daba plaza fija de por vida. Y nadie habla de retirar para siempre todas esas asignaturas típicas de «iniciación al turbocapitalismo» (Economía, Administración de Empresas, Iniciación para Emprendedores, Robótica, Informática, Tecnología, Talleres varios…) que quitan tiempo y espacio a la necesaria formación científica y humanística de la persona.

¿Los niños catalanes adoctrinados? ¿Los vascos? Sí, y los castellano-manchegos, y los andaluces, y los extremeños. Adoctrinar es lo opuesto a educar. La revolución en la enseñanza sería volver a hacer dictados, clases magistrales, leer a Cervantes y a Homero, mandar muchas cuentas y ejercicios para hacer cada tarde, poner de rodillas a quien se porte mal, cerrarle la puerta al padre que entre en un Colegio dándole voces al tutor o al mismo director. Revolución sería contar con inspectores formados en las materias específicas y ajenos al populismo (nada hay más populista que darle la razón a unos padres-clientes y quitársela al funcionario, sujeto como está por una nómina y sometido a una autoridad jerárquica).

Me río y me distancio, como de la peste, de una derecha que quiere poner la bandera rojigualda en el Peñón o que clama por detener a Torra, pero elude todas estas cuestiones de que hablo. Me río, y me aparto como si fuera el diablo, de una izquierda que habla de pedagogías «emancipadoras» y prepara, en cambio, a los niños de hoy, para ser perfectos esclavos sin voluntad y sin cacumen en el turbocapitalismo que está ya aquí.

Apéndice:

En contra de la pedagogía.

La pedagogía es una de las pseudociencias más peligrosas y dañinas que han surgido en los últimos tiempos. En un falso saber que, formalmente, se arroga el derecho a recomendar e imponer métodos de enseñanza basándose única y exclusivamente en prejuicios ideológicos. Precisamente al presentarse como «ciencia» y el recibir el interesado respaldo de organismos mundiales encargados de aplicar la ingeniería social (UNESCO, ONU, etc.) y de los partidos y sindicatos, los poderes han hecho de la Pedagogía una peligrosa arma de control social capaz de provocar estragos terribles en la infancia y la juventud. Como recordaba el profesor Ricardo Moreno Castillo en una reciente entrevista [https://latribunadelpaisvasco.com/art/11665/ricardo-moreno-castillo-el-desprecio-por-el-saber-ha-convertido-a-los-alumnos-en-autenticos-analfabetos sólo el desprecio y la envidia hacia el verdadero saber y únicamente el interés por crear un mundo de analfabetos explican el poder cada vez más omnímodo de esta herramienta de control social llamada «pedagogía».

En nombre de la pedagogía han surgido un sinfín de «expertos» en Orientación Escolar, Psicopedagía e Inspección que –salvo contadas y loables excepciones- no hacen sino controlar ideológicamente a los profesores, les coaccionan para que regalen los aprobados, halagan populistamente a los padres y a los chicos zascandiles o introducen burocracia inútil y verborrea en los centros educativos. Todo esto tuvo lugar de manera desatada a partir de la tristemente famosa LOGSE, la llamada «Reforma» de la cual son hijuelas todas las legislaciones posteriores, hasta llegar a la actual LOMCE.

El colectivo de los docentes españoles se haya tan dividido, alienado y adocenado, que jamás ha tenido una respuesta ante esta pseudociencia que les controla y que interfiere con su labor profesional: nunca han pasado de las burlas condescendientes y las ironías inocentes a la hora de relacionarse con estos comisarios de su labor académica. La jerga pedagógica llegó a resultar risible cuando al recreo se le hizo llamar «segmento de ocio», a las lecciones o temas a explicar había que llamarlos «bloques de contenido» o «unidades didácticas», etc. Si el peligro de la jerga pedagógica hubiera consistido únicamente en llamar a las cosas de otro modo para que así se quedaran contentos ciertos funcionarios, no habría tiempo que perder en quejas y lamentos. Pero los pedagogos y psicopedagogos, en la medida en que ocupan puestos de dirección y gestión importantes en los centros y en la administración educativa, son capaces de hacer algo peor, ellos pueden dañar gravemente la neutralidad y objetividad de las labores académicas de los profesores. Cualquier profesor, en su ejercicio docente, tanto a la hora de determinar el nivel y rigor de sus lecciones como la justicia y justeza de sus calificaciones, se ha tenido que topar alguna vez en su carrera, al menos desde la LOGSE (1990), con interferencias de orientadores, psicopedagogos e inspectores que manejan la jerga y la pseudociencia de la Pedagogía.

Así las cosas, hoy es habitual que el profesor se inhiba de ser objetivo a la hora de poner las notas de alumnos vagos y maleducados, so pena de enfrentarse con reclamaciones de padres y de advertencias de los propios orientadores y pedagogos, cuando éstos no alientan aquellas. Siempre hay algún criterio pseudocientífico de los pedagogos que sirve para minar la labor del profesor, cuestionando las más sólidas y contrastadas técnicas artesanales de la enseñanza académica. Algunos de los «éxitos» de la pedagogía española son –por ejemplo- el elevado nivel de analfabetismo funcional entre titulados de Educación Secundaria por medio de «hallazgos» como la «promoción automática» (pasar de curso con todas las materias suspensas), las «adaptaciones curriculares» (pedir menos de la décima parte de los contenidos a determinados alumnos supuestamente «distintos» para que aprueben y titulen, sea como sea), los «planes de refuerzo individualizados» (poner en gruesos informes lo que tiene que estudiar un zascandil para así recuperar una asignatura que, sea como fuere, no la va estudiar). Un dato grave en la normativa española en materia educativa es que el cargo de director o jefe de estudios de un centro puede ser ejercido por un orientador escolar del mismo, contraviniendo así la necesaria cercanía de los cargos directivos a las aulas, y siendo «juez y abogado defensor» simultáneamente, en cuanto a decisiones académicas (notas, títulos) referidas a los alumnos. No se entiende que los orientadores (que no dan clase) dirijan los centros en tantas ocasiones, y puedan presionar –sin embargo- en materia de notas, casi siempre en beneficio de los perezosos y gamberros. El colectivo de los profesores ha tragado el sapo de la pedagogía, y ahora su ruina corporativa es inevitable.

Por muchas razones, la sociedad debería posicionarse en contra de la pedagogía. ¿De dónde brota su «ciencia»? ¿Qué fundamento tiene? ¿Por qué al profesor de matemáticas o filosofía le tienen que enseñar cómo ha de trabajar unas personas desconocedoras por completo de éstas u otras especialidades? ¿Hasta cuándo debemos tolerar necedades tales como «aprender a aprender», las «competencias» o los «estándares de aprendizaje»?

Fuente: http://www.tradicionviva.es/2019/12/01/el-mal-nace-en-la-escuela/

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Sexo y género, las dos variables que la ciencia ignora

Redacción:  La Vanguardia

Expertos afirman que ambos factores pueden mejorar los experimentos, reducir sesgos y fomentar la igualdad social.

Tener en cuenta el sexo y el género puede ayudar a los científicos a mejorar sus investigaciones. Así lo afirma un nuevo artículo publicado hoy en la revista Nature . En él se asegura que estos factores a menudo son ignorados en la ciencia.

“Es sorprendente hasta qué punto se pasan por alto”, dice en un comunicado de la Universidad de Exeter el biólogo marino Robert Ellis, coautor del estudio. “Necesitamos incluirlos en todos los niveles de investigación o, en caso de no hacerlo, proveer justificaciones basadas en evidencia experimental sobre por qué no son importantes”.

Según afirma el artículo, titulado “Sex and gender analysis improves science and engineering”, incorporar ambos factores supone ante todo fomentar la igualdad social al asegurar que los hallazgos de las investigaciones son aplicables a toda la población. A su vez puede mejorar los experimentos, reducir sesgos y promover nuevas oportunidades para los descubrimientos y la innovación.

Mejoras

Incorporar ambos factores supone ante todo fomentar la igualdad social al asegurar que los hallazgos de las investigaciones son aplicables a toda la población.

Ignorar el sexo (atributos biológicos que distinguen entre mujeres, hombres o intersexuales/hermafroditas) y el género (construcción social que afecta a cómo un individuo se identifica en el entorno) conlleva el riesgo de malinterpretar los datos y, posiblemente, alcanzar resultados perjudiciales. Ese fue el caso de los maniquíes empleados para pruebas de choque.

“Los maniquíes originales estaban basados en el físico masculino. Sin embargo, un estudio encontró que, como resultado, las mujeres conductoras estadounidenses tenían un 47% más de probabilidades que los hombres de sufrir lesiones graves en un accidente de coche similar”, afirma Ellis en el comunicado.

El campo de la biomedicina es el que más tiene en cuenta el sexo y el género en sus investigaciones

El campo de la biomedicina es el que más tiene en cuenta el sexo y el género en sus investigaciones (Pepo Subiranas)

Donde sí se tienen especialmente en cuenta ambos factores es en el campo de la biomedicina. Aquí se han realizado los mayores avances en la comprensión de las diferencias sexuales, por ejemplo, en relación con las bases genéticas y el sistema inmune.

“Sabemos que las células inmunes funcionan de forma diferente dependiendo de si tienen el complemento cromosómico XX o XY o si están expuestas a diferentes concentraciones de hormonas sexuales en el cuerpo. Hay implicaciones interesantes de tratamientos con anticuerpos y nuevas inmunoterapias para el cáncer”, afirma en el comunicado Cara Tannenbaum de los Institutos Canadienses de Investigación de la Salud, también coautora del estudio.

Como solución

Los autores proponen guías para formular mejor las preguntas en las investigaciones, diseñar metodologías e interpretar datos

Fuera de este campo se pasan por alto en gran medida. Por ello en el artículo se llama a los investigadores, organismos de financiación, revistas científicas y universidades a coordinar esfuerzos para implementar métodos robustos de análisis de sexo y género.

“Los pasos más inmediatos que deben tomar los investigadores son informar del sexo de los organismos de su estudio e incluirlo como un factor experimental. Ambos ayudarán a generar un cuerpo de evidencia de la importancia del sexo en la investigación o destacar los casos en los que el sexo no necesite ser considerado”, dice Ellis.

Entre sus propuestas se incluyen consideraciones estratégicas para establecer prioridades en los estudios o guías para formular mejor las preguntas en las investigaciones, diseñar metodologías e interpretar datos. De esta forma se podrá alcanzar la excelencia y la responsabilidad en ciencia e ingeniería, concluyen.

Fuente: https://www.lavanguardia.com/ciencia/20191106/471429268156/sexo-genero-variables-ciencia-ignora.html

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Sexo, drogas y redes sociales: La nueva ola del drama adolescente

Redacción: Cinemanía

Euphoria se ha convertido en el nuevo fenómeno seriéfilo dejando claro que la nueva ficción apuesta fuerte por los dramas adolescentes cuanto más chungos, mejor.

Es agosto y las piscinas están abarrotadas. Y los que nos quedamos aquí como La Virgen de Agosto de Jonás Trueba, a parte de ir de verbena en verbena también vamos de piscina en piscina, municipal o comunitaria. Y los grupos de adolescentes que invaden estos hábitats veraniegos no paran de hablar de Euphoria, de si Jules le conviene a Rue, de si ellas se dejarían grabar mientras echan un polvo, de las fotopenes, hablan de que el camello de la serie está buenísimo, de las drogas, claro, las que han probado y las que les gustaría probar, y mientras hablan de todo esto se graban unos cuantos stories.

Euphoria es una serie de HBO que han visto adolescentes y adultos. Y resulta que ha impactado mucho más a los adultos que a los adolescentes porque hacía tiempo que no existía una ficción que retratara de manera tan explícita qué significa tener hoy 16 años.

Sexo, drogas y redes sociales son los tres pilares de esta nueva ola de dramas adolescentes que han desenfocado en nuestras plataformas de VOD -el cine es una cosa de otra generación o en todo caso hoy al cine se va a ver Marvel, no dramas de instituto- Hablamos de Skam, Por 13 razones, Elite, Euphoria y la tremenda película titulada Shareque acaba de estrenar también HBO.

Pero vayamos un poco más atrás.

ADOLESCENTES ESCRIBIENDO SOBRE ADOLESCENTES

Esta es la clave de todo el asunto. La mejor película sobre el universo de la adolescencia, o al menos la película más sincera y más cruda, es Yo maté a mi madre de Xavier Dolan. Escribió el guión con 17 años y con 19 la rodó. Ganó tres premios en Cannes y su carrera se cotizó hasta el punto de convertirle en el último enfant terrible de la industria. Sin embargo, su primera película, hecha de forma bruta, sin dinero, torpe en cierta forma aunque encantadora, sigue siendo, claro, la mejor.

Ser adolescente es terriblemente complejo y difícil, y además es el momento de forjarnos como adultos así que la presión es terrible. Solo estos seres son capaces de contar qué demonios llevan en la cabeza, y ni eso. Así que conseguir llegar al público adolescente con una ficción, llegarle de verdad, hacerle replantearse cosas, provocarle remordimientos y otros sentimientos importantes y valiosos es casi imposible. 

Hay mitos cinematográficos anclados a la adolescencia como James Dean y su Rebelde sin causa, la película de Coppola Rebeldes o La ley de la calle, pero funcionan como escaparates de personajes molones, estereotipos en los que te querrías convertir, nada más. Y luego están series como Freaks and Geeks, que está muy bien pero cuya intención son tan naif como el resto del cine de Judd Apatow.

Sin embargo, algo ha ocurrido en la industria. Algo fascinante que ha llevado a productores y creadores a construir ficciones que, esta vez sí, impactan de verdad en la vida de los adolescentes. Y todo ha sido gracias a SKAM, una serie noruega (cuya adaptación en España podéis ver en Movistar +) que lleva desde 2015 siendo un referente mundial. El resto de series de la lista son imitaciones, sucedáneos o réplicas.

¿QUÉ ES ‘SKAM’?

Un grupo de amigos que van juntos a secundaria en el instituto Hartvig Nissen en la captial de Noruega. Este sería el argumento básico de SKAM, que significa Vergüenza. A partir de ahí entramos en una representación realista y construida como un relato sobre la adolescencia moderna explorando temas básicos como el paso a la madurez, el sexo, las relaciones sentimentales, la amistad, las redes sociales, la familia, el alcohol, los primeros acercamientos a las drogas

Pero el hallazgo de SKAM es otro. El motivo por el que deberemos guardarnos a fuego el nombre de su creadora, Julie Andem, es porque ha hecho algo nuevo. NUEVO DE VERDAD. Ha inventado una narrativa. Algo que solo está al alcance de genios y genias de la historia.

SKAM tiene cuatro temporadas -acabó en el verano de 2017-  y cada temporada se centra en un personaje distinto muy al estilo de Skins, la serie británica de 2007. Y entre la emisión de un capítulo y otro las vidas de sus personajes siguen vivas, lo que ocurre en un capítulo tiene sus consecuencias en las redes sociales del personaje, en su Instagram, en su grupo de Telegram, facebook, en un vídeo de YouTube… Y además estas pequeñas píldoras de ficción en formatos 360 construyen y van hilando el argumento del capítulo siguiente. 

Al principio esta nueva forma de ficción era para los espectadores adolescentes un entretenimiento meramente contemplativo, sin embargo, estos comenzaron a interactuar con los personajes, a preguntarles, a esperar respuesta a preocuparse por ellos. Y fue en este momento cuando una serie noruega ambientada en Oslo se hacía viral en otras partes del mundo como Brasil o Japón.

A Julie esto no le pilló de sorpresa, esta directora que ya había pasado por varios proyectos fallidos con dinámicas parecidas en su narrativa, había hecho un excelente trabajo de campo entrevistando a decenas de adolescentes de toda índole social, raza, orientación sexual… Les preguntaba por sus inquietudes, por sus presiones, sus problemas y lo más básico, claro. ¿Qué personaje les representaría en una serie de instituto?

SKAM está escrita como si fuera un adolescente quien la escribe. Y el objetivo es despojar de toda esa presión que significa no solo no saber lo que quieres hacer con tu futuro, sino con la sensación de que ser feliz no es suficiente, también hay que aparentarlo. Una dinámica que agota, consume y deprime.

Volviendo al boom de la serie… Cuando se comenzó a hacer viral los espectadores comenzaron a interactuar con los personajes y Julie aprovechó esto para integrar los pensamientos de adolescentes reales a la serie. Si, por ejemplo, un personaje no daba señales de vida durante la semana en redes sociales, los espectadores comenzaban a impacientarse y mandaban mensajes tipo: “Tengo un examen mañana y no puedo estudiar pensando en que Isak (protagonista de la tercera temporada) no contesta”. Este mensaje, tal cual, con puntos y comas, era trasladado al time line de otro personaje de la serie. De esta forma un pensamiento real de una persona real se convertía en el de un personaje de la serie.

Y así se ha ido construyendo SKAM, que además también tiene una factura a nivel visual muy potente. Este, por ejemplo, es el tráiler de la tercera temporada:

También a nivel técnico la serie se iba transformando con los comentarios de los espectadores. La directora, por ejemplo, dejó de abusar de la cámara lenta cuando los adolescentes que la veían comenzaron a quejarse de que el recurso empezaba a ser cansino. Incluso hay encuadres o escenas en SKAM que son réplicas de dibujos o fanarts del público.

Y aunque las réplicas de SKAM han sido remakes del mismo título en España, Francia, Austin o Italia… Las últimas ficciones adolescentes beben de los argumentos, los conflictos y la estética de SKAM, desde Elite hasta Por 13 razones y por supuesto Euphoria, siendo esta última la obra culmen de esta nueva ola de ficción adolescente.

EL MEJOR MOMENTO DEL GÉNERO

Gracias a SKAM, gracias al éxito de Por 13 razones o gracias a productos más ligeros como Sex Education estamos en el mejor momento de este género. Nunca se ha dedicado tanto talento al drama de instituto como ahora mismo. Nunca ha tenido una parte tan importante del pastel. Y la clave, a parte de entender cuáles son los problemas reales de toda una generación a la que, sinceramente, no escucha nadie, es, sobre todo, reconocer que tan importante como el contenido es la forma de consumirlo.

Que sigan surgiendo películas tan impactantes que nos revuelvan el estómago como Share. O series llenas de purpurina y vómito como Euphoria y series que sean tan universales como SKAM, que sean como un terremoto que sacuda a un país tras otro enseñando a los adolescentes a tomarse la vida menos enseria, a quitarse presión y a reírse de ellos mismos.

Fuente: https://cinemania.20minutos.es/series/sexo-drogas-y-redes-sociales-la-nueva-ola-del-drama-adolescente/

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¿Cuánto sabemos de educación sexual? Spoiler: una vergüenza

Por: Melina Álvarez e Iván Mónaco.

En Argentina, cada año se registran 6500 nuevos diagnósticos de VIH por no usar preservativo en las relaciones sexuales.

Lo que propone la ley de Educación Sexual Integral (ESI) es que el trabajo sea integral y se brinde información de manera transversal a las diferentes áreas, por lo que ya no se tratará de reuniones aisladas sino de un trabajo continuo y sistemático en la temática.

Si bien la ley ESI se sancionó en el 2006 en nuestro país, aún su cumplimiento tiene muchas dificultades y no logra completar los objetivos finales. A tal punto que algunos chicos “no conocen qué son los testículos”, nos comentó Sofía Macchi, quien lidera el proyecto “Preservate”.

En Argentina, se triplicaron los casos de sífilis en los últimos 5 años y cada año se registran 6500 nuevos diagnósticos de VIH por no usar preservativo en las relaciones sexuales. Sin embargo, el 30% de las personas que tienen esta enfermedad desconocen su diagnóstico.

A raíz del tema, salimos a la calle para preguntarle a la gente cuánto sabe sobre Educación Sexual Integral y esto fue lo que respondieron.

Todas las respuestas correctas:

-¿Qué pasa si te olvidas más de dos pastillas anticonceptivas?

Debes tomarlas juntas y usar preservativo por al menos 7 días seguidos.

-¿Si tomo anticonceptivos, necesito usar preservativo?
Si, siempre. Los anticonceptivos no protegen de enfermedades.
-¿Demos usar preservativos para el sexo oral?
Si, siempre. Las enfermedades pueden transmitirse por tener encías sangrantes o llagas en la boca, la vagina o el pene
-¿Si se tienen relaciones mientras la mujer está menstruando, puede quedar embarazada?
-Sí, la ovulación puede variar en cada ciclo.
-¿En una relación entre mujeres, debo cuidarme?
-Sí, con un campo de látex.
-Si uso el preservativo sólo cuando estoy por terminar el acto sexual ¿estoy protegido?
-No, se debe usar durante todo el acto para prevenir enfermedades y embarazo no deseado

Educación sexual integral pedida “a los gritos”

“La educación en materia de sexualidad tiene que ser dada por el Estado porque es un derecho de los chicos y no se puede dejar librado a cada familia porque es el formato que se usó hasta el momento y los resultados dan la prueba de que no funcionó”, opinó la escritora Gabriela Larralde, en diálogo con Mundo TKM.

El Artículo 1 de la Ley 26.150 indica que todos los establecimientos educativos públicos de gestión estatal y privada deben garantizar la realización de acciones educativas sistemáticas de Educación Sexual Integral. Para esto, toda comunidad educativa deberá incluir en el proceso de elaboración de su proyecto institucional, la adaptación de las propuestas a su realidad social.

Fuente de la reseña: https://www.mundotkm.com/actualidad/2019/08/02/cuanto-sabemos-de-educacion-sexual-spoiler-una-verguenza/

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