Page 3 of 3
1 2 3

Perú: Los países que promueven el trabajo en equipo dentro del aula

Perú / 2 de enero de 2018 / Autor: Redacción / Fuente: RPP

En un mundo cada vez más interconectado, es imprescindible que los estudiantes aprendan a temprana edad que la colaboración los ayudará a alcanzar sus objetivos.

El trabajo en equipo en el aula trae numerosas ventajas para los alumnos. Según el portal Habilitas Educación, especializado en introducir nuevas tecnologías en la educación, la primera ventaja es que genera relaciones positivas. Los miembros del grupo se apoyan entre sí para alcanzar un objetivo en común.

Además, mejora las relaciones sociales ya que la interacción ayuda a que uno pueda ponerse en el lugar del otro y ser más empático. De este modo, se aprende a entender mejor a las personas y así tener más capacidad para resolver situaciones.

El trabajo en grupo también es beneficioso para el aprendizaje, ya que no solo se aprende recibiendo información, sino cuando se utiliza lo que se sabe con el resto de compañeros. Así, es posible que las personas construyan su propio conocimiento a través de la interacción.

Por último, aumenta la autoestima del estudiante ya que los trabajos en grupo fomentan  la responsabilidad por cumplir con la tarea encomendada. El hacerse responsable del éxito o fracaso de su parte en el trabajo grupal, le da más autonomía al estudiante.

El Programa para la Evaluación Internacional de los Alumnos (PISA) es conocido por medir las habilidades de estudiantes en lectura, matemáticas y ciencia. En el 2017 evaluó por primera vez las habilidades para resolver problemas de manera colaborativa.

EL programa PISA evaluó en 2017 y por primera vez, las habilidades para resolver problemas de manera colaborativa.
EL programa PISA evaluó en 2017 y por primera vez, las habilidades para resolver problemas de manera colaborativa. | Fuente: Shutterstock

El resultado fue que los alumnos sobresalientes en las pruebas académicas también son mejores en la solución de dificultades en colaboración con otros.  Los cinco países que mejor resuelven problemas en conjunto son: Singapur, Japón, Hong Kong, Corea del Sur y Canadá. Los siguen de cerca Estonia, Finlandia, Macao, Nueva Zelanda, Australia, Taiwán, Alemania, Estados Unidos, Dinamarca, Reino Unido, Holanda, Suecia, Austria, Noruega y Eslovenia.

Según esta prueba, las niñas tienden a interesarse más en las opiniones de los demás y quieren que los otros tengan éxito. Los niños, por su parte, son más propensos a ver que la colaboración puede ayudarles a trabajar de forma más efectiva y eficiente.

Incluso los estudiantes con menos ventajas académicas valoran el trabajo en equipo porque sienten que se toman mejores decisiones que de manera individual.

En consecuencia, el  trabajo en grupo no solo se trata de la distribución de tareas en partes iguales, sino que involucra el compromiso de todos sus miembros para resolver una tarea en común. Ser parte de un equipo ayuda a que los estudiantes  asimilen mejor normas y valores intrínsecos al trabajo grupal, lo que resulta una lección para toda la vida.

Fuente de la Noticia:

http://rpp.pe/campanas/branded-content/los-paises-que-promueven-el-trabajo-en-equipo-dentro-del-aula-noticia-1096856

Comparte este contenido:

El Salvador: Lanzan el documental «Un crimen llamado educación»

El Salvador / 5 de noviembre de 2017 / Autor: Redacción / Fuente: La Página

Con la participación de expresidentes, educadores, ministros de educación, este documental muestra la realidad de la crisis educativa a nivel mundial.

Jürgen Klaric famoso orador y neurocientifico decidió hace un año iniciar el viaje por 14 países para descubrir las ventajas y desventajas del sistema educativo, y cómo afecta la vida de los jóvenes y niños alrededor del mundo.

El documental fue rodado en Finlandia, Singapur, Corea del Sur y Estados Unidos, también  Bolivia, Colombia y México, en el cual se realizaron entrevistas a distintos actores sociales  para conocer la forma en la que se educa.

Personalidades como el expresidente de Uruguay José Mujica, el presentador de tv Ismael Cala, educadores, sociólogos, niños y jóvenes, participan en esta producción.

Según el equipo de Biialab la compañía de neuromarketin de Jürgen Klaric “la educación es el factor más importante en el desarrollo de la sociedad. Sin embargo, en los últimos años el currículo y el ambiente de las escuelas han afectado negativamente el desarrollo del estudiante, la autoestima, el presente y el futuro de nuestros niños, estudiantes y profesionales”.

Por lo cual creen importante el aporte que este documental hará, pues alegan que “hay muchos desafíos negativos, pero hay personas sorprendentes descubriendo nuevas formas de educar correctamente” y es justamente eso de lo que trata el documental “Un crimen llamado educación”.

Lo mejor de todo es que dicho documental se encuentra accesible para todos, en el canal oficial de Biialab en Youtube, esta decisión fue tomada por el equipo de Klaric pues han definido que su misión es “generar conciencia y promover el cambio”.

 

 

 

 

 

Fuente de la Noticia:

http://www.lapagina.com.sv/cultura/133871/2017/11/02/Lanzan-el-documental-Un-crimen-llamado-educacion

Comparte este contenido:

Un Crimen Llamado Educación – Documental dirigido por Jürgen Klaric

Estados Unidos / 5 de noviembre de 2017 / Autor: BiiALab / Fuente: Youtube

Publicado el 31 oct. 2017

La educación es el factor más importante en el desarrollo de la sociedad. Sin embargo, en los últimos años el currículo y el ambiente de las escuelas han afectado negativamente el desarrollo del estudiante, la autoestima, el presente y el futuro de nuestros niños, estudiantes y profesionales. Aunque hay muchos desafíos negativos, hay personas sorprendentes descubriendo nuevas formas de educar correctamente. Al no cambiar no nos estamos comprometiendo…

 

NUESTRA MISIÓN

Generar conciencia y promover el cambio

 

PARTE 1

 

Visitamos 14 países, de los cuales cuatro tenían los mejores sistemas educativos del mundo, incluyendo a Finlandia, Singapur, Corea del Sur y Estados Unidos. Otros de los países que visitamos fueron Bolivia, Colombia y México. Descubrimos que aunque los países del primer mundo tienen una mejor educación, no se preocupan por el estado emocional de los estudiantes que se deteriora y conduce al alcoholismo y al suicidio. Independientemente del estado económico de un país, el bullying sigue siendo un problema y como resultado de que los educadores no pueden combatir esta cuestión, más de 350.000 estudiantes se suicidan anualmente.

 

PARTE 2

 

Entrevistamos a los mejores neurocientíficos y expertos en educación para recabar opiniones sobre la mejor manera de arreglar la estructura educativa de nuestro sistema escolar para las generaciones futuras.

 

PARTE 3

 

Mostramos a las mejores personas y escuelas que están haciendo cosas increíbles para inspirar a nuestros niños, jóvenes y futuros profesionales. Mostramos la forma correcta y posible de la educación.

 

PAÍSES ESTUDIADOS

 

Finlandia

Corea del Sur

Singapur

Indonesia

España

Estados Unidos

Bolivia

México

Colombia

Ecuador

Chile

Argentina

Uruguay

Perú

 

JÜRGEN KLARIC (ESCRITOR Y DIRECTOR)

Jurgen Klaric es considerado uno de los 10 motivadores más influyentes del mundo. Es el autor de dos de los libros más vendidos que han asesorado a una docena de compañías líderes en todo el mundo. Jurgen recientemente fue nombrado el Steve Jobs de la educación debido a su innovación social y educativa llamada BiiA Lab, que ha dado más educación gratuita a los latinos en la historia. http://www.uncrimenllamadoeducacion.com/

http://biialab.org/

Fuente: https://www.youtube.com/watch?v=4afDUFkAosY
Comparte este contenido:

Los secretos de las naciones con mejor educación

Asia – Europa / 22 de octubre de 2017 / Autor: Evelynr / Fuente: NewsGur

 

 

La última prueba PISA, realizada en el 2016, arrojó que los asiáticos son las superpotencias educativas a nivel mundial. Los tres primeros lugares fueron ocupados por Singapur, Japón y Estonia. Si bien es arriesgado decir que hay una fórmula acertada para mejorar la educación, aquí les dejamos las opiniones de los especialistas acerca de lo que hace que estas naciones destaquen en la educación. Las estadísticas parecen indicar que la expectativa de muchos de los países más exitosos en la educación, es que la gente haga lo que se les dice. Una cultura centrada y conformista, un sentido de propósito colectivo o un Estado de un sólo partido de los tradicionales parecen ser elementos que dan mejores resultados.

Los tres primeros lugares fueron ocupados por Singapur, Japón y Estonia. La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) publicó sus clasificaciones internacionales de las pruebas PISA (Informe del Programa Internacional para la Evaluación de Estudiantes), realizadas cada tres años y que miden el desempeño en ciencias, lectura y matemáticas. El estudio se basa en el análisis del rendimiento de estudiantes de 15 años mediante exámenes estandarizados.

Según dice el informe PISA, las pruebas no miden sólo si un estudiante puede reproducir conocimiento, sino también si este es capaz de extrapolar a partir de lo que ha aprendido y aplicar el conocimiento adquirido en aquellas situaciones que le son poco familiares, dentro y fuera de la escuela. Si bien es arriesgado decir que hay una fórmula acertada para mejorar la educación, aquí les dejamos las opiniones de los especialistas acerca de lo que hace que estas naciones destaquen en la educación.

Las estadísticas parecen indicar que la expectativa de muchos de los países más exitosos en la educación, es que la gente haga lo que se les dice. Una cultura centrada y conformista, un sentido de propósito colectivo o un Estado de un sólo partido de los tradicionales parecen ser elementos que dan mejores resultados. Aunque hay excepciones, por ejemplo, los finlandeses consiguen un elevado rendimiento con un fuerte sentido de independencia liberal.

En la educación existe también un fenómeno llamado «la maldición de los recursos», pues las economías basadas en riquezas naturales, como las que tienen vastas reservas de petróleo, rinden menos en la educación, algo que pasa por ejemplo, en gran parte del Oriente Medio.

Por el contrario, los países pequeños con pocos recursos naturales han tenido que aprender rápidamente cómo vivir de su ingenio. Tal es el caso de Corea del Sur, que hace 60 años tenía uno de los peores índices de analfabetismo a nivel mundial y hoy es una de las potencias en la producción de dispositivos tecnológicos.

Pero la educación depende en gran medida de sus profesores, así lo señala el gurú de la educación de la OCDE Andreas Schleicher al decir que «Ningún sistema de educación puede ser mejor que la calidad de sus profesores». Varios organismos no dudan que el éxito está unido inseparablemente a la oferta de docentes de buena calidad, de ahí la importancia de invertir en maestros.

Otra característica de los principales países en la educación es cuántos tienen que competir con un vecino mucho más grande. Por ejemplo, en las historias de éxito de las naciones europeas, en los últimos años países como Finlandia, Polonia y Estonia, tuvieron que salir de la sombra del antiguo bloque soviético. Por su parte, en Asia, Corea del Sur y Hong Kong están en contra de la China continental y Singapur es una pequeña ciudad Estado rodeada de grandes vecinos con poblaciones mayores.

En cuanto a capacidades adquiridas por los estudiantes los mejores sistemas son aquellos que asumen que todos los estudiantes deben cruzar la línea de llegada, incluidos los más pobres, un elemento que es distintivo de los sistemas principales de Asia: los mejores profesores se dedican a los alumnos más débiles para que todo el mundo tenga un nivel básico.

Por el otros lado, en Occidente la educación se tiende a abordar como una carrera de caballos, con la perspectiva de que muy pocos de los que comiencen la carrera lleguen a la meta. Si bien el que los cambios en un sistema de educación hagan alguna diferencia positivaen el ranking mundial puede tardar hasta 10 años, el mensaje de ese ranking es que para sobresalir en educación se necesita es consistencia y continuidad.

Fuente de la Noticia:

http://es.newsgur.com/2017/10/los-secretos-de-las-naciones-con-mejor.html

Comparte este contenido:

Singapur o cómo triunfar sin tener ni idea.

Hace tiempo que se veía venir y ya algunos iniciaron la peregrinación a la Meca de los resultados PISA. Para ver cómo lo hacen, qué saben que nosotros no sepamos y aprender de los mejores, a ver si mejoramos. Por el contrario, yo voy a centrarme aquí en lo que no saben o no hacen»

Por: Jose Manuel Ballester.

En ambientes educativos, Singapur está de moda. Es lo más.

Hace tiempo que se veía venir y ya algunos iniciaron la peregrinación a la Meca de los resultados PISA. Para ver cómo lo hacen, qué saben que nosotros no sepamos y aprender de los mejores, a ver si mejoramos.

Si quieren averiguar cómo una excolonia que alcanza su independencia en 1965, con un nivel educativo propio de pescadores y cabreros, ha logrado ser el número uno del mundo en las últimas pruebas PISA, ya tienen a su disposición estudios, artículos y libros (destacaría Quince cartas desde Singapur, recién traducido al español en México). Si quieren saber qué hacen y cómo lo han logrado, ese es el camino.

 Por el contrario, yo voy a centrarme en lo que no saben o no hacen. No por adoptar un enfoque original sino porque, a lo mejor, ahí hay una clave que podría interesar.

No tienen Educación Infantil. Como suena. No gastan un céntimo en Infantil, ni invierten (que a los puristas no les gusta el verbo gastar cuando se trata de educación). Los chiquillos ingresan en el sistema educativo a los seis años sin saber hacer la O con un canuto malayo.

Podríamos preguntarnos si es que no saben que en el mundo en que vivimos la escuela debe hacer posible la conciliación asumiendo la educación de los chicos desde la cuna a la tumba. Parece que no, que no lo saben. En cambio, impulsan políticas como financiar la compra de vivienda si se realiza cerca del domicilio de los padres. Tienen estas gentes la idea de que si vives cerca de tus padres, les endosarás los chiquillos a los abuelos. Así, lo que se gasta en financiar viviendas, se ahorra en la costosísima Educación infantil que el Estado del Bienestar proporciona desde el destete. Y los niños cuidados con los abuelos resulta que duermen más, juegan más y no llegan a los seis años ya con estrés en varios idiomas y esas cosas.

Total que los niños llegan a Primaria sin saber nada, sólo jugar.

Y empiezan la Primaria donde tienen exámenes de verdad. Exigentes, con publicación de resultados (esto no falla en ninguno de los sistemas que mejoran, en ninguno), y con consecuencias académicas. No saben que esos exámenes aquí los llamaríamos reválidas, les echaríamos agua bendita, pactaríamos el fusilamiento preventivo de quien los defienda, y a otra cosa. Ellos no lo saben: en los primeros cursos de Primaria hacen, incluso, exámenes de 90 minutos.

La séptima de las cartas a Singapur lleva por título Observaciones de la decana de una escuela de educación porque la autora, Christine B. McCormick, de la Universidad de Massachusetts quiere que queden al descubierto las vergüenzas pedagógicas del sistema. ¿No saben ustedes, pregunta la decana, que un niño a estas edades es incapaz de mantener la atención durante 90 minutos? Es que adquieren la capacidad de atender durante 90 minutos precisamente haciendo exámenes como este, le responden los singapurenses. En la misma línea, la decana se escandaliza al descubrir que «usan las pruebas para evaluar el rendimiento de los alumnos y no la efectividad de los profesores». Al parecer no saben lo básico de pedagogía. Por eso hicieron lo que hicieron, los pobres.

Para Singapur la evaluación es clave. Fundamental para los alumnos y esencial para los profesores. El objetivo de la evaluación de los profesores es que ellos mismos sepan cuál es su posición y en qué necesitan mejorar. Lo de la posición tiene que ver con que los profesores disponen de una bien remunerada y clara carrera docente. En dos ámbitos: docente y ‘administrativa’. Hay una carrera clara, como digo, es decir los profesores saben que pueden seguir progresando mediante el aprendizaje (aprendizaje del que pueden rendir cuenta en evaluaciones suyas o de sus alumnos, y supervisados a pie de aula por profesores de nivel superior en la escala docente), pueden tener más mérito y, por tanto, aspirar a puestos mejores y sueldos superiores.

Tampoco tienen Atención a la Diversidad: ni practican la inclusividad ni el igualitarismo o, dicho en palabras ajenas a la jerga pedagógica: no pretenden educar a todos los alumnos por igual sino que procuran que cada uno desarrolle al máximo sus capacidades (no que llegue a la media nacional o al aurea mediocritas, que dicen los clásicos). Como no hay inclusividad, hay centros especializados, con profesores especializados en ayudar a desarrollar sus posibilidades a los alumnos con necesidades educativas especiales (ACNEES). Y en el resto del sistema, muy competitivo, muy exigente, cualquier profesor sabe lidiar perfectamente con alumnos con altas capacidades intelectuales. Como no saben que es contraproducente instruir separadamente a estos alumnos, no sólo el conjunto de los alumnos singapurenses obtiene la primera posición sino que los ACNEES de Singapur están un 70% por encima de los USA que, para no saber pedagogía, no está nada mal.

Otra cosa en la que se muestran escandalosamente ignorantes es en la cuestión de los ‘valores’. Transmiten valores, eso es inevitable, pero no lo hacen directamente, no forman parten de currículo alguno ni son el credo de ninguna religión. No adoctrinan, en definitiva. Los valores que transmiten son, digamos, transversales: competitividad, mérito, esfuerzo, superación, responsabilidad, transparencia. Y cosas así.

Ya lo decía Pennac: ¡Qué bien enseñábamos cuando no sabíamos pedagogía! Los de Singapur todavía no saben pedagogía. Saben lo que es la realidad que les espera a sus alumnos, saben de rendimiento de cuentas por su trabajo. Y los profesores saben su materia y la transmiten con eficacia.

Juegan para ganar. A lo mejor por eso ganan.

Fuente: http://www.laopiniondemurcia.es/opinion/2017/01/12/singapur-o-triunfar-idea/797059.html

Imagen: http://www.abc.es/Media/201312/08/exito-educativo-singapur–644×362.JPG

Comparte este contenido:

Este es el modelo educativo que seduce a todo el mundo.

El docente Mike Thiruman cuenta cómo construyó Singapur uno de los sistemas educativos más exitosos.

Por: Sonia Perilla Santamaria.

En cinco décadas apenas, Singapur pasó de ser una de las naciones más pobres y subdesarrolladas del planeta a una próspera, industrializada y moderna, cuyo exitoso modelo educativo es, sin exagerar, la envidia de todo el mundo.
Desde hace años, sus estudiantes brillan en los primeros puestos de las pruebas internacionales de educación más exigentes, como las Pisa, de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (Ocde), en las que Colombia y los países latinoamericanos que hacen parte del organismo siguen mostrando pobres resultados.

Precisamente, a la decisión de ese país de apostarle, desde su independencia, en 1965, todo su futuro a la educación de la población, se debe a que hoy sea considerada una nación de avanzada y con bajos niveles de corrupción. No es gratuito que países como Colombia se interesen en su experiencia y busquen reproducirla de algún modo.

Para hablar del modelo educativo de su país, Mike Thiruman, psicólogo y presidente del Sindicato de Maestros de Singapur, vino recientemente a Colombia, donde participó en el Tercer Congreso para Directivos de Santillana.
Este hombre, de 47 años y que empezó su vida profesional como maestro de primaria, fue invitado por el secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, a formar parte del Grupo Técnico Asesor de la Iniciativa Global de Educación.

¿Cómo describiría el proceso que transformó la educación en Singapur en una de las mejores del mundo?

Pasamos por cuatro fases: una primera, de supervivencia; la segunda fue de eficiencia; la tercera, de formación de habilidades; y ahora estamos en la cuarta: los estudiantes y la educación en valores, incluido el desarrollo del talento de los estudiantes.

¿A qué se refiere con supervivencia?

Cuando logramos nuestra independencia, nos enfocamos en sobrevivir; no tenemos ningún recurso natural importante, y somos una población diversa y multilingüe. Fue una etapa difícil, que se prolongó hasta 1978; en ese periodo nacionalizamos el sistema educativo, y aunque el inglés no es nuestra lengua nativa, decidimos que sería el idioma de instrucción para los estudiantes. También construimos un currículo nacional, enfocado en ciencias y matemáticas. En 1978 hicimos una revisión del sistema educativo, con miras a lograr que los jóvenes permanecieran en la escuela.

¿Tuvieron problemas de deserción?

En esa primera etapa del país la economía estaba saliendo a flote, lo cual abrió muchas plazas de trabajo; no pocos estudiantes decidieron salir de los colegios para vincularse a las empresas, y eso en el largo plazo no era bueno para Singapur, pues no tenían las habilidades necesarias. Buscamos que cada niño estuviera enrolado en el sistema educativo al menos diez años, para que pudiera adquirir competencias básicas en comunicación y numéricas, esenciales para cualquiera trabajo. En 1994 volvimos a analizar el sistema; ya nos habíamos consolidado como nación, ahora podíamos tomar el riesgo de ser un poco más creativos. Seguimos enfocados en habilidades comunicativas y matemáticas, pero nos propusimos promover el desarrollo de la habilidad, del talento, de cada estudiante. Eso nos tomó hasta el 2006, más o menos…

¿Qué vino luego?

Nos dimos cuenta de que el mundo estaba cambiando con la tecnología, la globalización, y el mundo se volvía cada vez más pequeño. Nos planteamos cómo preparar a los estudiantes para competir en un mundo con esas condiciones, y coincidimos en que requerían una serie de habilidades para sobrevivir y ser exitosos en la vida, como las comunicativas, la creatividad, el pensamiento crítico, la curiosidad, la adaptabilidad. Eso es mucho más complicado de enseñar que un contenido; toma mucho tiempo desarrollar estas habilidades.

¿Qué papel cumplieron los profesores en todo ese proceso?

Sin importar qué tan bueno es el sistema educativo o qué tan avanzada es la tecnología, lo importante para todos nosotros siguen siendo las personas. Nos aseguramos de reclutar para nuestro equipo a personas muy competentes como docentes. El secreto del éxito de la educación de Singapur son los maestros. Punto.

¿Qué tipo de estudiantes, de ciudadanos, está formando Singapur?

La idea es que tras 12 años de colegio cada estudiante se convierta en una persona que contribuya activamente a la sociedad, en un ser humano confiable, autónomo y un ciudadano preocupado. Un contribuyente activo piensa en los demás, comparte lo que tiene, siempre.

¿Y qué buscan en los docentes de Singapur?

Para nosotros, los maestros son como un diamante, piedras preciosas con ciertas características importantes: en el centro está la ética en la educación y alrededor, la capacidad de hacer aprendizaje colaborativo, de transformar y transformarse, de ser un líder y un gestor de la sociedad y un profesional competente. Estas son las características de nuestros profesores. Si consideramos que son una gema, los valoramos, los cuidamos y estamos pendientes de que brillen en todo momento.

¿Qué clase de docentes necesita un país como Colombia para transformar la educación?

Necesita a los mejores. En Singapur sufrimos un poco el tema de los docentes cuando la economía estaba ya bien, pues el sector privado pagaba más que el público, y los buenos profesores emigraban para allá; la calidad en el sector oficial bajaba y los sueldos de sus maestros, también. Había que romper ese círculo. El reto de que las personas mejor preparadas sean maestros no es solo nuestro, es mundial. Ante eso teníamos que ser sensibles políticamente hablando, y aunque eso es difícil económicamente, les subimos los salarios a los docentes. Al tiempo, construimos un currículo para que los profesores que no estuvieran en el nivel alto que queríamos pudieran desarrollarlo en las aulas, en un estándar esperado.

El incremento salarial fue para todos, incluidos los maestros que no estaban en un buen nivel…

Sí. A esos docentes en particular, el Ministerio de Educación les dio mucho apoyo en materia de capacitación y entrenamiento, mientras íbamos reclutando a las mejores personas. El salario se les subió a todos, porque no podía haber disparidades si prestaban el mismo servicio. Tomó cuatro o cinco años, más o menos, hasta que cambió también la mentalidad de las personas que hacían parte de ese sistema. Luego, los padres también entraron en esa onda de que si el docente es bueno, invierto, pago. Y solamente eso se produce por el éxito que se evidencia en puntos de referencia internacionales, como las pruebas Pisa.

¿Los papás pagan? ¿Es pública, privada o mixta la educación en su país?

Desde el primer grado hasta el 12, todos los colegios son públicos y financiados por el Estado, y tanto los profesores como los directivos docentes son seleccionados por el Gobierno. Los padres de familia sí pagan un aporte, solo porque queremos que sientan que se les da valor a lo que están recibiendo. Muchas veces, cuando las cosas son completamente gratuitas, la gente no les da el debido valor.

¿Cómo lograr que las prácticas de aula sean atractivas y motivadoras y no aburran a los estudiantes?

Eso no solo pasa solo en Colombia, también es un fenómeno global. Mientras los espacios de trabajo se han transformado y adecuado a los cambios del mundo, los salones de clase siguen siendo los mismos. En general, los profesores no sabemos qué hay afuera; y si eso pasa, pues sigo haciendo lo mismo todo el tiempo. Tiende a pensarse que si tengo un trabajo que funciona, ¿por qué cambiar? Hay que entender que si el mundo se ha transformado, tenemos que cambiar el modo en que enseñamos, el cómo.

¿Qué sugiere a los docentes?

Partir del hecho de que quien más debe trabajar en el aula no es el profesor, sino el estudiante; su función no es acaparar todo el conocimiento y dárselo digerido al alumno. A los niños hay que enseñarles a resolver problemas de manera creativa, distinto a como lo hacen las demás personas. Hay que motivar eso en la clase recurriendo a imágenes, fotos, tecnología, contarles algo y pedirles que lo interpreten…

¿Qué características debería buscar Colombia en aquellos que aspiran a convertir en docentes?

Dos cosas: pasión por los estudiantes y por enseñarles y valorar al ser humano, y pasión por la asignatura, por la disciplina que imparte. Eso debe sentirse para proyectarse. Ese par de cosas no se pueden enseñar. Se tienen o no se tienen.

¿Cómo motivar a miles de profesores que ya hacen parte del sistema educativo pero carecen de esas características?

Colombia ya está revisando currículos, textos y estándares de aprendizaje. Lo primero que hay que hacer es establecer esos estándares. Si tengo que llegar allá, algunos pueden ir corriendo y otros, no; hay que ayudarlos en ese proceso con recursos digitales, guías para profesores, textos, y enseñarles a enseñar con creatividad cada asignatura. Hacerlo tan sencillo que cualquier maestro pueda incorporarlo a su práctica de aula. Cuando el docente ve que va siendo exitoso, se motiva, confía en lo que es capaz de hacer. Hay que asegurarse de que hagan un entrenamiento exitoso.

¿Cree que Colombia va por buen camino?

En la última década, el acceso a la educación ha aumentado de manera significativa en Colombia, y eso es muy bueno; ahora hay que mejorar la calidad de ese acceso, y en eso trabaja el Ministerio de Educación, en materia de textos, currículos, estándares, evaluación continua y entrenamiento docente. Esa es la forma de avanzar. Una vez que se hayan establecido los estándares, es más fácil seguir en este proceso de mejoramiento. Colectivamente, todos los colombianos deben enfocarse en esa meta; sé que hay interés de la sociedad. La idea está. Es un buen punto de partida. Definitivamente, debe ser la prioridad. La economía, la cultura, la unidad de los ciudadanos dependen de la educación.

¿Algún mensaje para los maestros colombianos?

La educación es buscar la verdad, es un concepto socrático. Así es como los profesores debemos vernos. Tengo que sentir que soy un maestro, y no por cuánto me paguen o por las condiciones que me rodeen, sino por quién soy yo. Entender que la docencia está en mi ADN, que mi trabajo no es transmitir conocimientos sino abrir la mente de los niños y los jóvenes y moldear estos destinos que estoy formando en el aula. Si nos concebimos a nosotros mismos como docentes que somos, no necesitamos más arandelas para motivarnos. Eso lo ve la gente, eso lo respeta la gente.

Fuente: http://www.eltiempo.com/estilo-de-vida/educacion/entrevista-con-mike-thiruman-docente-de-singapur/16706184

Imagen: http://www.eltiempo.com/contenido/estilo-de-vida/educacion/IMAGEN/IMAGEN-16706331-2.jpg

Comparte este contenido:
Page 3 of 3
1 2 3