La Política como Hegemonía Educativa y Cultural

JUAN CARLOS MIRANDA ARROYO

Las contiendas políticas cuentan, entre otros significados, con la idea de desarrollar diferentes frentes de lucha por lograr la hegemonía del poder (como supremacía o dominio) en una sociedad. De esta forma, el Estado, si bien representa a la sociedad, no deja de ser una formación social diseñada, racionalmente, para dominar (Max Weber), sobre todo porque éste (el Estado) constituye la estructura de organización y poder social más desarrollada en las democracias modernas. De hecho, el Estado actúa como un conjunto de instituciones hegemónicas, en todos los ámbitos de la vida pública, sobre la vida individual de los ciudadanos.

Como ente regulador de los actos y el comportamiento de los ciudadanos, el Estado es el garante de los derechos individuales y colectivos, sin embargo, no sólo ejerce la supremacía en el orden jurídico (autorregulación), sino también, e históricamente, lo hace en los órdenes militar, económico, educativo, cultural y material de una sociedad, entre otros aspectos.

Dentro del contexto del concepto general del Estado como la gran organización social «hegemónica», existe el concepto de «hegemonía cultural» al que se refirió en varias de sus obras, Gramsci. «La hegemonía cultural se refiere a la supremacía de una cultura sobre otra u otras. Como tal, es un concepto desarrollado por el filósofo y político marxista italiano Antonio Gramsci, quien entendía la hegemonía cultural como el domino, en términos de imposición, del sistema de valores, creencias e ideologías de una clase social sobre otras, fundamentalmente de la burguesía sobre la clase obrera. Dicha clase, además, generalmente ejerce el control de las instituciones y de las formas de producción.» (1)

Hay que matizar y contextualizar los conceptos. Cuando los políticos en México y el mundo, han puesto como prioridad sus deseos por el poder político, pero no por sí mismo, sino como instrumento para alcanzar, a toda costa, el enriquecimiento personal o de grupo en forma ilícita, (hablamos, en otras palabras, de actos de corrupción), tienden a descomponer el valor original de la actividad política (el servicio público por el bien común). Particularmente en México, desde 1988, con el arribo al poder político del llamado «salinismo», lo político se reconvirtió (desde entonces y por varias generaciones de políticos, hasta nuestros días), en el ejercicio pragmático y usurero del poder: De ser un acto de servicio, lo político se transformó en una actitud para «servirse» del erario, por encima y por debajo de la mesa. Emergió así -tal como lo ha dicho en varios espacios Ciro Gómez Leyva-, una generación de políticos mediocres.

Lo político, de ese modo, pasó a ser una actividad de lucha, a través de las burocracias partidistas, por la conquista del poder público, por medio de métodos fraudulentos y con la finalidad de acumular riqueza, y para conservar circularmente el poder. No es casualidad que uno de los políticos simbólicos del régimen hegemónico priísta, Carlos Hank González, haya pronunciado la famosa y desafortunada frase: «Un político pobre es un pobre político», que sirvió como máxima para aquellos políticos surgidos del tricolor durante finales de los años 70´s, y que se extendió, según los datos disponibles, en una ideología para los políticos de todos los colores y emblemas. «El que no transa no avanza», decían los cínicos. Nostalgia trágica de un círculo desvirtuado (no virtuoso) del poder en México; la mudanza de la vida política: un ir y venir entre la lucha por el poder político y la disputa por el poder económico. En el fondo, como escenografía, la lucha por la hegemonía del Estado.

Aquella generación de políticos, en México, que vaya más allá del deseo material y económico-financiero como herramienta del poder político, será la generación que habrá de lograr «el quiebre» del régimen vigente. La hegemonía del poder político del Estado orientado por la corrupción y la impunidad, sería desplazado (vaya utopía), por el poder político dirigido e inspirado en la austeridad, la solidaridad social, la equidad, la inclusión y la riqueza cultural y educativa de la sociedad.

El concepto más amplio de la hegemonía cultural en Gramsci, contextualizado o trasladado a nuestro entorno, es el que da significado a la recuperación de la conciencia humana; porque piensa en una «superestructura» de la sociedad centrada no en los valores materiales o en los productos tangibles (de una «estructura» que no habrán de obviarse, sin duda), sino en los valores cívicos y éticos (morales); espirituales o de la fe; culturales, educativos, científicos y tecnológicos, es decir, en los valores intangibles que constituyen «el Ser» (no «el tener») de los miembros de una sociedad, repito, en un sentido humanista, solidario, incluyente, respetuoso de los derechos y de las libertades.

¿Cuál o cuáles de los candidatos presidenciales que están en la lucha hoy por el poder político en México, tiene o tienen la capacidad de llevar a cabo esta ruptura generacional? ¿Quién estará en condiciones de liderar esta necesaria reconversión delo político como servicio público y no como artículo de mercancía? Esta transformación no será fácil ni súbita. Será gradual. Y en ella jugarán un papel determinante la familia, la escuela y los medios de comunicación. Será un proceso lento de reeducación de políticos, administradores públicos, legisladores, ministros de justicia y demás órganos de la burocracia, a efecto de que no cedan ante los deseos del dinero y del poder público como instrumento de dominación. Pero la principal transformación estará en la base de la sociedad, no necesariamente en la cúspide de la clase política. Por eso justamente es necesario revisar y profundizar los conceptos y los programas que están implícitos y explícitos en la llamada Reforma Educativa en México.

¿Quién estará a la altura de esta demanda social como para encabezar un «quiebre» de este tamaño y se atreva a transformar la vieja hegemonía del Estado, «desde arriba»? ¿Cómo generar una nueva «supremacía», una renovada hegemonía, orientada hacia la solidaridad, el bienestar social o el beneficio común?

Prefiero pensar en una utopía social de esta naturaleza, que caer en el pesimismo de creer que, en términos de la vida pública, este tipo de cambios son imposibles de alcanzar. La idea es pensar que esto es posible, en vez de bloquearnos al pensar que es imposible. ¿Acaso no hay espacio y tiempo para soñar en la recreación de nuestras organizaciones sociales, con otros valores, desde lo individual, lo colectivo y «desde abajo»; o esperaremos a que esto lo inicie la clase política, «desde arriba»? Habrá modo también de imaginar cómo se podría actuar por las dos vías.

Fuente consultada:

https://www.significados.com/hegemonia/

jcmqro3@yahoo.com

Fuente: https://www.sdpnoticias.com/nacional/2018/04/05/la-politica-como-hegemonia-educativa-y-cultural

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Libro: Influencia de los organismos internacionales en las políticas educacionales

Influencia de los organismos internacionales en las políticas educacionales

¿Sólo hay intervención cuando hay consentimiento?

Silvia Regina Canan. [Autora]

ISBN 978-987-722-299-1
CLACSO. Mercado de Letras.
Buenos Aires.
Septiembre de 2017
 

En esta obra escrita por Silvia Regina Canan está explicitado el conjunto de condicionantes e implicaciones que resultan de la trayectoria del capitalismo involucrando la categoría educación, trayendo como mensaje subliminar que el mundo es mucho más complejo de lo que nos imaginamos, que en el decurso del camino aparecen los percances y que somos sorprendidos por la certeza del cuanto todavía tenemos que caminar. Pero eso no impide que continuemos, justo lo contrario, nos mueve a buscar nuevos y desafiantes rumbos.
La lectura de este libro se hace obligatoria a todos aquellos que trabajan con educación, sea formal o no formal. Esa es, sin duda, la palabra que más representa la construcción de esta obra: desafiante. El desafío de salir de la “zona de confort”, donde lo conocido estaba seguro y protegido, para encontrar nuevas posiciones/oposiciones.
Fuente: https://www.clacso.org.ar/libreria-latinoamericana/libro_detalle.php?orden=&id_libro=1288&pageNum_rs_libros=5&totalRows_rs_libros=1276
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Seoul protests new teachings on disputed islets in Japan’s new education guidelines

Japón/Abril de 2017/Fuente: The Japan Times

RESUMEN: Corea del Sur presentó el viernes una protesta formal en relación con una referencia en las últimas directrices educativas de Japón a una reclamación territorial en un par de islotes en disputa controlados por Seúl en el Mar de Japón. «El gobierno (de Corea del Sur) condena enérgicamente al gobierno japonés por ignorar nuestras advertencias repetidas y por aprobar las directrices de educación para sus estudios sociales (currículo) de las escuelas primarias y secundarias que incluyen sus reivindicaciones injustificadas a Dokdo, que es parte integral de Corea «, dijo el Ministerio de Relaciones Exteriores de Corea del Sur en un comunicado.

South Korea on Friday lodged a formal protest regarding a reference in Japan’s latest education guidelines to a territorial claim on a pair of disputed islets controlled by Seoul in the Sea of Japan.

“The (South Korean) government strongly condemns the Japanese government for ignoring our repeated warnings and for approving the education guidelines for its elementary and middle school social studies (curriculum) that include its unjustified claims to Dokdo, which is an integral part of (South Korean) territory,” South Korea’s Foreign Ministry said in a statement.

In a related move, Lee Jeong-kyu, deputy minister for political affairs at the ministry, called in Hideo Suzuki, minister of the Japanese Embassy in Seoul, at around 10 a.m. to deliver the protest.

The protest was lodged in response to the Japanese government’s approval of a set of revised education guidelines officially announced in Tokyo on Friday that call for teaching students in elementary and middle schools that the islets, known as Takeshima in Japanese and Dokdo in South Korea, belong to Japan.

Calling for the immediate withdrawal of the guidelines, the statement said the Japanese government should remember that Japan’s younger generations will learn “false history” if they are given incorrect information through the revised guidelines.

Fuente: http://www.japantimes.co.jp/news/2017/03/31/national/seoul-protests-new-teachings-disputed-islets-japans-new-education-guidelines/

Imagen: http://english.yonhapnews.co.kr/national/2017/03/31/0302000000AEN20170331003152315.html

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Gib University looks to Africa for partnerships

África/Noviembre de 2016/Fuente: Gibraltar Chronicle

RESUMEN: El suplemento de educación superior del Times informó que la Universidad de Gibraltar buscaba asociaciones en África. Su vice-canciller Daniella Tilbury dijo al Times que la ubicación geográfica ideal de la universidad «ofrece opciones en Europa y más allá». El profesor Tilbury dijo que la universidad había recibido mucho interés de Asia, pero que se sentía bien para que comenzara a establecer asociaciones en África, «debido a nuestra proximidad, a causa de nuestra historia y de nuestras conexiones interculturales». Explicó que la oferta de la universidad no es exclusiva para los estudiantes locales y que el objetivo de Gibraltar es consolidar su posición estratégica -como un territorio de ultramar británico situado entre Europa y África- para consolidar su posición en el sector de la educación superior internacional .

The Times Higher Education supplement reported the University of Gibraltar was looking to Africa for partnerships. Its vice-chancellor Daniella Tilbury told the Times the university’s ideal geographical location “affords options in Europe and beyond”.

Professor Tilbury said the university had received a lot of interest from Asia, [but] it felt right for it to start brokering partnerships in Africa – “because of our proximity, because of our history and intercultural connections”.

She explained that the university’s “offer isn’t [solely] for local students”, and Gibraltar’s aim is to build on its strategic position – as a British overseas territory situated between Europe and Africa – to solidify its position in the international higher education sector.

Because of this, she said, she was less worried about the effects of Brexit than a UK university vice-chancellor might be, although she shared the universal concerns about access to research funding.

“Africa has got the fastest-growing demographic in terms of potential students in HE. We have Spanish, French and English [people] as common practice in Gibraltar, and obviously all of that will facilitate a lot of the international brokering,” she added.

Fuente: http://chronicle.gi/2016/11/gib-university-looks-to-africa-for-partnerships/

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Trump y la derrota educativa

Por: Pedro Flores Crespo

A Indra y Alessandro, porque construyan lugares sin trumpismo.

Lo que no deseábamos ocurrió: Donald J. Trump fue elegido por el pueblo estadunidense como su próximo presidente. Ricas y diversas lecturas políticas, sociales y culturales empezaron ya a circular de esto que juzgo como un profundo retroceso para la humanidad. ¿Es exagerado verlo así? No creo. Aquí explicaré por qué, pese a que para el gobierno mexicano, en voz de la canciller, Claudia Ruiz Massieu, el triunfo de Trump representa “una oportunidad” para el país (Entrevista en Expansión, 13.11.16). Ojalá pronto los priistas dejen de hacer FODAS, leer literatura empresarial barata y enfrenten la realidad.

Al ver ganar a Trump uno se pregunta: ¿cómo puede ser posible que un país que ha hecho grandes aportaciones científicas y tecnológicas al mundo haya elegido a un “psicópata” (Krauze)? ¿Cómo explicar que en una de las democracias más consolidadas del orbe se imponga un personaje “grosero, arrogante y violento” (Berman)? Ante el triunfo del demagogo, ¿qué vigencia deberá adquirir el clásico, Democracia y Educación (1916) del gran pedagogo John Dewey? ¿Qué lecciones educativas recogemos de este grave acontecimiento?

El triunfo de Trump es una muestra más de la necesidad de promover y defender las finalidades amplias de la educación. Esto es necesario porque no son pocos los gobiernos, comentócratas, empresarios, especialistas y padres de familia que guiados por los ideólogos del capital humano, le asignan una función única (y estrecha) a la educación: aquella de ser “exitoso” por la vía de la acumulación de la riqueza material.

Sentirse auto suficiente gracias al “talento” hace pensar a algunos personajes tan despreciable como Trump que ser “rico” lo convierte automáticamente a uno en una “estrella” con el derecho de manosear a cualquier mujer. Este será, tristemente, el “modelo de éxito” que dirigirá a la nación más poderosa del mundo. Dígame usted si no estamos ante un grave retroceso en términos humanos. El racista y acosador será encumbrado.

Hacer que la educación responda solo a los requerimientos del empresariado, la industria o la economía nos ha dejado varias taras. La primera ha sido estar tuertos y por consiguiente, no hemos podido ver la capacidad que puede tener el conocimiento para mantener viva nuestra democracia, como bien observa Martha Nussbaum. En aras de darle “relevancia” a la educación superior, no pocas universidades han modificado sus planes de estudio para que respondan primordialmente a las necesidades del mercado laboral porque se asume que institución académica que no “coloca” a sus egresados en puestos para los que estudiaron es un fracaso, una “fábrica de desempleados”.

Pero aún más grave de esta imagen fabril —que es errónea— , está el riesgo de convertirnos en una nación de descerebrados. Estudiar en la universidad puede también contribuir a formar ciudadanos. ¿Y esto qué significa? Según Nussbaum, un ciudadano es aquel que sabe pensar por sí mismo y no repetir como perico lo que dicen los demás; aprender, por medio del razonamiento, a criticar la tradición y a la autoridad y yo agregaría, a no dar nada por sentado. Todo por tanto es cuestionable.

Ser ciudadano implica también, y de acuerdo con la filósofa de la Universidad de Chicago, aprender a ser compasivos con los logros y sufrimientos de las personas por medio de la imaginación que nos ofrecen las artes, la literatura y las humanidades. No podemos relacionarnos socialmente bien, dice Nussbaum, con puro conocimiento técnico. La inteligencia académica es por tanto limitada.

Aunque fue mayor el porcentaje de graduados universitarios que rechazó la opción política que representaba Trump (52%), es importante preguntarse: ¿qué pasó por la cabeza —y por el corazón— del 43 por ciento restante para apoyarlo? Seguramente no la intención de criticar la tradición. Recordemos que el lema de campaña del republicano fue “hagamos grande a América de nuevo”. Tampoco creo que Trump y sus seguidores tuvieran mucha compasión por los conciudadanos mexicanos que migraron al norte en busca de mejores oportunidades. ¿En qué tipo de razonamiento se asienta el presidente electo de los Estados Unidos para afirmar que los mexicanos que emigran ilegalmente son todos criminales y violadores? Con Trump, el prejuicio, odio y exacerbado nacionalismo fueron expresados abiertamente y no solo ello, se convirtieron en parte de una opción política-electoral y lo peor: su representante fue electo. Parece que estamos entonces frente a una clara derrota de la educación para la democracia.
Y si esto ocurrió en Estados Unidos que mantiene a algunas de las mejores y más elitistas universidades del mundo y en donde viven grandes intelectuales y humanistas, ¿qué nos espera en México en 2018? ¿La corrupción e irresponsabilidad ya completamente normalizadas con un nuevo gobierno del PRI? ¿Más muertes e impunidad transexenal con Acción Nacional o el regreso al pasado con otro demagogo como Andrés Manuel López Obrador?

Ojalá cuaje una candidatura independiente y ciudadana para 2018 cuyo plan de gobierno refleje una comprensión profunda de la crisis por la que atravesamos, escuche el disenso, responda a las múltiples razones del descontento y sea audaz para defender la idea de que una educación de calidad no solo es aquella que forma trabajadores diestros, sino también ciudadanos dispuestos —por su conocimiento y humanidad — a fortalecer y mantener viva nuestra democracia. El riesgo es muy grande.

Fuente: http://campusmilenio.mx/index.php?option=com_k2&view=item&id=5202:trump-y-la-derrota-educativa&Itemid=152

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Libro: Soberanía, hegemonía e integración De las democracias en revolución en América Latina

Reseña:

El libro que presentamos es producto de una reflexión colectiva realizada en Quito, Ecuador, en abril de 2014, mediante un seminario que involucró a los Grupos de Trabajo del Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales (Clacso) “Integración regional y unidad latinoamericana y caribeña” y “Estudios sobre Estados Unidos”, y al Instituto de Altos Estudios Nacionales (IAEN) en el marco del Programa Democracias en Revolución, Revoluciones en Democracia. Esta iniciativa es parte de los esfuerzos del Área de Grupos de Trabajo (GT) de Clacso por articular a los grupos, identificando ejes transversales y promoviendo los intercambios, a la vez que produciendo alianzas colaborativas con instituciones de la región que enriquezcan y amplifiquen la producción de los GT, y de esta forma contribuir al pensamiento colectivo y transformador.

soberania_y_hegemonia

Fuente:

http://www.clacso.org.ar/libreria-latinoamericana/libro_detalle.php?orden=&id_libro=1072&pageNum_rs_libros=7&totalRows_rs_libros=1115

Fuente imagen:

https://lh3.googleusercontent.com/PipBqAbKNzig6hMFG7r9i6Q6sPv9EpeXROyeLxQWm9O01Zq9wr9kN1yOfm-5yydEfxjBzQ=s85

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