La financiación de la educación pública en Chicago sigue en el limbo

América del Norte/EEUU/laraza.com
A días de que de manera oficial inicie el año escolar en las Escuelas Públicas de Chicago, la incertidumbre continúa ante la falta de un presupuesto equilibrado. El sistema escolar público de Chicago necesita $269 millones en dinero adicional del gobierno para superar la brecha presupuestaria.

Aún está por definirse de dónde provendrán esos fondos para equilibrar el presupuesto de las Escuelas Públicas de Chicago (CPS), el tercer distrito escolar más grande del país.

En los próximos días, la Cámara de Representantes de Illinois estará en sesión y podría votar sobre la anulación del veto del gobernador de Illinois Bruce Rauner a un proyecto de ley que busca reformar la financiación escolar y daría unos $300 millones más para las CPS.

El Senado de Illinois ya votó para anular el veto de Rauner, mientras que la Cámara de Representantes estatal tenía previsto hacerlo este miércoles, pero Mike Madigan, presidente de la Cámara de Representantes de Illinois, canceló la sesión especial.

Según reportó CBS, Madigan canceló el voto porque los líderes de ambos partidos dijeron que se lograron avances significativos en las reuniones a puerta cerrada celebradas el martes.

La iniciativa de ley SB1 es un proyecto de reforma de la financiación escolar que alteraría la forma en el que dinero se distribuye a las escuelas en todo el estado.

Rauner vetó la medida porque según él da demasiado dinero a las escuelas públicas de Chicago y demasiado poco a los planteles de los suburbios.

Para el alcalde de Chicago Rahm Emanuel, el proyecto de ley de educación del Senado es adecuado para los niños de Illinois y el veto del gobernador Rauner es erróneo. “El voto del Senado es un rechazo bipartidista a la política de división del gobernador [Rauner] y de sus repetidos intentos de enfrentar a niños con diferentes orígenes y de diferentes partes del estado unos contra otros”.

Por ley estatal, el plan de gasto de CPS debe ser aprobado antes del próximo 1 de septiembre.

Por su parte, el Sindicato de Maestros de Chicago (CTU) indicó en una  declaración  que el presupuesto de ese distrito escolar se basa en “dinero fantasma de la ciudad y el estado”.

Según Karen Lewis, presidenta del CTU, el plan de vales escolares que el gobernador Rauner ha promocionado durante mucho tiempo y el alcalde Emanuel ahora está considerando “no hará nada para la sustentabilidad a largo plazo de los presupuestos de las Escuelas Públicas de Chicago, sino que drenará los recursos de las escuelas y empujará a los estudiantes fuera del distrito”.

“Rahm no ha logrado obtener ingresos tanto a nivel de la ciudad como del estado y ahora está apoyando un plan que dará dinero a escuelas privadas que podrían ser dirigido a nuestras aulas de las escuelas públicas”, indicó Lewis. Y agregó: “Los vales son un doble golpe dirigido al corazón de la educación pública, y para ser franca equivale a robar de los mismos niños [de minorías] a los que afirma estar proporcionando santuario y equidad”.

Buscan equidad en el financiamiento

En medio de esta crisis de fondos, las Escuelas Públicas de Chicago anunciaron a principios de agosto, que planeaba despedir al menos a 950 empleados, de los cuales 350 son maestros y 600 miembros de personal de apoyo.

“Queremos dinero de los fondos TIF, dinero de impuestos que ha colectado Rahm Emanuel que él le está dando a sus amigos ricos que usan para construir renovaciones en el centro y construir condominios, no necesitamos más de eso, necesitamos más dinero para las escuelas públicas”, mencionó Andrea Ortiz, organizadora comunitaria de Brighton Park Neighborhood Council.

Ortiz, quien aboga por la equidad en el financiamiento de las escuelas locales, dice que de ocurrir recortes en el presupuesto escolar planteles en barrios de minorías podrían verse afectados. “En caso de no haber dinero ni recursos vamos a ver más estudiantes en las calles, vamos a ver más aumento en la violencia, lo que queremos es prevenir esto, hay que decirle a los concejales y al alcalde Emanuel que traigan más dinero para las escuelas públicas sin pedir prestado”.

En materia de presupuesto, Byron Sigcho, director ejecutivo de la organización Alianza de Pilsen, dijo que las Escuelas Públicas de Chicago no deben depender enteramente De lo que haga el estado sino que la ciudad debe tener un plan para poder mantener el funcionamiento de sus escuelas. “A la medida que nosotros seguimos insistiendo en que las Escuelas Públicas de Chicago tengan el mismo tipo de financiamiento que en todo el estado, tenemos que comenzar a ser responsables en cómo financiar consistentemente el dinero TIF, es un dinero que debe ir a las escuelas públicas”, destacó.

Sigcho es de la idea de que hay que buscar más equidad en el tipo de financiamiento. “La desigualdad que existe no solo entre los suburbios y la ciudad, pero en escuelas dentro de la ciudad, donde tenemos escuelas que tienen buen financiamiento y otras escuelas que reciben poco o no lo suficiente o el financiamiento por estudiante no es el mismo que en los suburbios, yo creo que esas reformas a nivel estatal pero también a nivel local son muy necesarias, debemos buscar fórmulas donde el financiamiento presupuestario sea equitativo”.

Fuente: https://laraza.com/2017/08/23/la-financiacion-de-la-educacion-publica-en-chicago-sigue-en-el-limbo/

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