Por: Pedro Echeverría
1. ¡A toda Madre!, si la lucha de la CNTE es apoyada por 52 mil telefonistas, 18 mil electricistas, otros cinco mil de la refresquera Pascual, así como otros miles de trabajadores y académicos de la UNAM, según los resolutivos de su Congreso, pues el gobierno debe ponerse a temblar. Por el contrario los profesores del país tienen que enterarse de esos resolutivos para que vean que no están solos; que al fin las grandes batallas en las calles, que durante más de tres años ha realizado la Coordinadora (la CNTE), comienzan a fructificar porque sus concepciones de lucha de no venderse, no dar pasos atrás ni claudicar, han sido las más correctas.
2. Estos sindicatos no han sido radicales en sus luchas, pero han logrado vivir muchos años manteniéndose en el bando progresista. No se puede olvidar 1976 cuando Hernández Juárez logró derrocar al tal Salustio Salgado que era un líder venal plegado a Fidel Velázquez, el más grande charrote que ha dado México. Desde entonces el líder telefonista ha sabido caminar en el filo de la navaja que maneja Carlos Slim desde entonces. Pero si Hernández Juárez apoya a los maestros esto quiere decir que en toda la República los telefonistas saldrán a la calle junto con los maestros invitando a otros sindicatos como del IMSS, el ISSSTE, a manifestarse.
3. Los electricistas del SME después del terrible golpe que les dio el presidente Calderón y su perro Lozano, el secretario de Trabajo, cesando a 44 mil electricistas, no pudieron levantarse. Hoy, los 18 mil obreros restantes, después de importantes batallas dadas para recuperar su trabajo, han conseguido restaurar sus fuerzas para reconfirmar su apoyo a la CNTE. La refresquera Pascual lleva décadas construyendo su sindicato independiente y al mismo tiempo luchando por fortalecer su cooperativa de producción. Pero, a pesar de mil dificultades, la cooperativa ha logrado sobrevivir dentro del capitalismo salvaje que ha buscado destruirla.
4. El STUNAM, que se constituyó en 1977 con la unión de los trabajadores del STEUNAM y de los académicos del SPAUNAM, ha luchado desde 1971 por representar a todos los trabajadores de la UNAM. (A mí me tocó ser uno de los 20 integrantes de la Comisión Coordinadora del SPAUNAM en 1975/76 durante la gran huelga que logró su fundación y reconocimiento) Los empleados y académicos de la UNAM tienen mucha presencia dentro del sindicalismo académico del país y podrían intervenir para conquistar más apoyos a las batallas de la CNTE. Quizá ayude a que los sindicatos de la UAM, del Colegio de Bachilleres, la UACDMX, pronuncien su apoyo.
5. Obvio, no es tan fácil. En este momento la secretaría de Gobernación, la del Trabajo, la Procuraduría, deben estar moviendo sus contactos para evitar que los apoyos sean reales y que sólo sean simples declaraciones. Imagine nada más cuando Gobernación les dice a los dirigentes: “Compañeros del STUNAN, electricistas, telefonistas, refresqueros, ¿qué necesitan de mí que todo lo tengo, que no pueda darles? ¡No se olviden que esta es una política de Estado y con su intervención pueden descomponerlo todo! En fin, ya lo veremos en las próximas movilizaciones, aunque también en la actitud de los gobernantes en al trato a la CNTE.
6. Lo más importante es que esas declaraciones y apoyos de sindicatos y organizaciones a la CNTE, son un reconocimiento de la justeza de las luchas de los maestros y de los padres de familia ligados a ellos. Mientras los empresarios explotadores cumplen su misión de estar junto a los políticos y gobierno, los dirigentes obreros cumplen también con estar con sus hermanos de clase: los trabajadores. Esto es lo que se llama la lucha de clases: clase explotadora y clase explotada, opresores y oprimidos, multimillonarios y miserables; no hay término medio: o se está con unos o con otros en una batalla que es histórica de los trabajadores contra sus opresores.
7. La Coordinadora, después de 36 de grandes batallas, no tiene “cola que le pisen”, es decir, se ha conservado absolutamente limpia y honesta en su actuar y proceder; por ello cualquier apoyo es un reconocimiento a su historia. A partir de la solidaridad del STUNAM, telefonistas, electricistas y la cooperativa Pascual –así como del permanente apoyo de López Obrador- la CNTE se fortalece. Se continuarán con las marchas, los campamentos y los bloqueos hasta que el gobierno derogue la Reforma Educativa Privatizadora y regrese las cosas a su lugar. Los miembros de la CNTE estamos muy agradecidos con esos apoyos.
Fuente: http://www.rebelion.org/noticia.php?id=216065&titular=sindicatos-con-la-cnte-