31 julio 2017/Fuente: Educacion Tres Punto Cero
Maestro de Primaria y coordinador TIC en el Colegio Santo Domingo Savio en Petrer, Alicante, Javier Sellers reflexiona en este artículo sobre el papel de los docentes en la educación sobre las nuevas tecnologías. En su opinión, tanto maestros como padres deben ser modelos de ‘netiqueta’: conjunto de normas de comportamiento general en Internet.
Recientemente, un tribunal ha condenado a una mujer a no salir de casa durante cinco días por injuriar a su exmarido por redes sociales. En los comentarios, lamentablemente se veía involucrado un menor. En un mundo en el que estamos permanentemente conectados y los menores adquieren un terminal a edades cada vez más tempranas, maestros y padres debemos ser modelos permanentes de ‘netiquette’ (conjunto de normas de comportamiento general en Internet). Los niños no deben padecer ni ser testigos de cómo sus padres se enzarzan en las redes sociales sin el menor decoro pues esto les influirá negativamente en su formación digital.
Maestros y padres debemos ser modelos permanentes de netiquette
Los grupos de Whatsapp, por ejemplo, son en muchas ocasiones auténticos estercoleros repletos de malas intenciones en los que la mala educación se multiplica al no estar presente el interlocutor, haciendo un flaco favor a los menores, al sistema educativo y a la sociedad. Aunque parece que la red poco a poco deja de ser el lejano oeste en el que se puede calumniar e injuriar sin consecuencias camuflado en un teclado.
Nuestra obligación es incluir en nuestras programaciones tareas que desarrollen en los alumnos el buen uso de la tecnología
A pesar de llevar más de diez años usando nuevas tecnologías, la formación de los alumnos en esta competencia digital es escasa, siendo la causa de cada vez más conflictos tanto dentro como fuera del aula. Y aunque muchos maestros somos usuarios habituales de aplicaciones como Whatsapp, Facebook o Instagram, no nos hemos formado adecuadamente en esta competencia. Tenemos que tener en cuenta que la tecnología ha llegado para quedarse y es nuestra obligación incluir en nuestras programaciones tareas que desarrollen en los alumnos su buen uso. Para ello, podemos tomar como referencia el Marco Común de Competencia Digital Docente que publica el INTEF, el Instituto Nacional de Tecnologías Educativas y Formación del Profesorado u otros medios que nos mantengan actualizados.
Debemos formarnos y educar a los más jóvenes en las nuevas tecnologías. De lo contrario, estamos exponiéndoles a factores de riesgo como el acoso escolar
El problema no es la tecnología, sino el uso que se haga de ella. Un uso adecuado aporta muchos beneficios, por ello debemos construir entre todos los valores que deseamos transmitir a nuestros hijos, pero para alcanzarlos debemos formarnos y educar a los más jóvenes ya que es un derecho que les ampara y a su vez una obligación que a todos nos compete. De lo contrario, estamos exponiéndoles a factores de riesgo como el acoso escolar, el cual se ha elevado desde que la tecnología ha entrado. Así que “eduquemos hoy para no castigar mañana”.