Puerto Rico/18 de Diciembre de 2017/Primera Hora
Hay que repensar la “idea de que tiene que haber una escuela en cada esquina para atender a cuatro estudiantes» después de María.
Los exsecretarios de Educación Rafael Cartagena y Rafael Aragunde, coincidieron en que las escuelas públicas debieron permanecer abiertas luego del paso del huracán María para que la comunidad participará en los esfuerzos de recuperación.
“Hubiese sido una experiencia muy formadora, muy educativa. Se tiene que trascender el concepto de que la educación sea en el salón de clases y esta experiencia con María hubiese provisto un escenario en el que tanto estudiantes, maestros, como miembros de la comunidad se hubiesen realmente educado quizás de una forma más efectiva…”, sostuvo el doctor Aragunde.
Ambos especialistas participaron hoy del conversatorio “Educación y Sociedad”, en la Universidad del Turabo, como parte del ciclo de conferencias titulado: “Oportunidades en la recuperación y la reconstrucción”. Al foro se unieron: Larry Alicea, presidente del Colegio de Profesionales de Trabajo Social de Puerto Rico, y la doctora Silma Quiñones, profesora de la Escuela de Ciencias y Comunicaciones del Turabo.
Precisamente hablando del impacto de María en el diario vivir, el doctor Cartagena sostuvo que ante la dramática realidad de que “unas 220,000 personas están viajando a la Florida”, hay que repensar la “idea de que tiene que haber una escuela en cada esquina para atender a cuatro estudiantes. Vamos a tener que pensar de verdad dónde ponemos nuestros recursos a nivel de maestros, etcétera… Va a haber que relocalizar gente… espacios físicos… y la manera de funcionar”, aceptó.
Aragunde, que tituló su charla “Nuestra continua minoría de edad”, al mencionar también la baja de estudiantes, agregó que hay que asegurar que en los planteles “haya una sensibilidad por las dinámicas que se están dando dentro de esas comunidades”.
“La escuela tiene que tener una relación concreta material inmediata con el contexto en el que está enclavada. Si no la tiene está mirando hacia donde no debería estar mirando”, advirtió.
Por eso, Cartagena urgió retomar la “escuela individual” donde se toman decisiones que son pertinentes a ese plantel, convirtiéndose “en un centro de pensamientos e ideas para la comunidad, uno de distribución de recursos materiales, y de ayuda social, psicológica y de servicios”.