Por. Diario El País
Christos Kamposos tiene ocho años y se ha quedado solo en el colegio de la isla griega de Arkoi
1. Christos Kamposos, de ocho años, es el residente más joven de la isla de Arkoi, una de las más pequeñas de Grecia, y el único alumno que asiste a una de las escuelas más solitarias del mundo. Por ello, el Ministerio de Educación griego designa cada año un maestro para que se desplace a enseñar a este colegio. Durante este curso la maestra es Maria Tsialera, que empezó a dar clase a Christos en septiembre.
El de esta deshabitada isla es el único centro educativo de Grecia que cuenta con un solo estudiante. Cuando Christos se gradúe (ahora está en tercer grado), el centro, seguramente, cerrará durante unos años. Solo volverá a abrir si una de las personas más jóvenes que aún vive en la isla forma una familia y tiene hijos.
2 La maestra de Christos, Maria Tsialera, iza la nueva bandera de la escuela. La anterior quedó prácticamente destruida tras un tempestuoso invierno. La isla de Arkioi no mide más de 6,7 kilómetros cuadrados y está a unos 270 kilómetros de Atenas. Se encuentra justo en la frontera con Turquía y desde el lado este de la isla se puede ver en la parte posterior de la costa turca.No importa cuántos niños vayan a una escuela pues, con que solo haya uno, el Ministerio de Educación griego ya está obligado a enviar a un maestro, como ocurre en Arkoi. En otros casos similares en Grecia se reúne a todos los estudiantes de diferentes pueblos cercanos en un solo centro educativo. En este caso, es imposible transferir al niño a otro lugar porque se encuentra en una isla y no siempre hay un ferry que conecte este pequeño lugar con las islas más grandes que lo rodean.
3. Christos está en tercero de Primaria y, junto con su profesora, son las únicas dos razones por las que el colegio está abierto en esta remota isla. Antes que él fue su hermano mayor, Panayotis, quien mantuvo la escuela viva, y hace más tiempo asistieron a ella sus hermanos y primos mayores.
Un hecho muy interesante es que la isla de Leipsoi (donde la maestra de Christos vive con su marido y va y viene todos los fines de semana) es la isla con el mayor número de jóvenes de todo el país. De las aproximadamente 790 personas censadas en 2011 (último año registrado) más de 200 son niños. Casi el 30% de las personas tienen menos de 18 años de edad.
4. Txialera comprueba las impecables tareas de matemáticas que Christos hizo el día anterior. Le ha puesto un ¡Excelente! “Christos es un niño muy inteligente y le encanta venir a la escuela”, dice.La de Arkoi es una escuela primaria, lo que significa que Christos permanecerá allí tres años más como mucho. Después, la única forma de que el menor continúe sus estudios es dejando su hogar y trasladándose a una isla diferente donde haya una escuela de educación secundaria.
5 El 28 de octubre es conocido en Grecia como el Día del No y es una de las mayores festividades del país. Conmemora la fecha en la que el general Ioannis Metaxás pronunció su célebre negativa al ultimátum que le entregó el embajador italiano en Atenas, en el marco de la Guerra greco-italiana ocurrida durante la Segunda Guerra Mundial. Para celebrar el 77 aniversario del Día del No, Christos ayuda a su profesora a decorar la clase con banderas de papel. DEMETRIOS IOANNOU
6 Christos escribe invitaciones confeccionadas a mano para la celebración del Día del No. Más tarde, él mismo las entregará a todas las familias de la isla. El último censo se realizó en 2011, cuando vivían 44 personas. Hoy, aproximadamente la mitad de ellos todavía están allí. No hay oficinas de policías o médicos en Arkioi, pero hay un pequeño helipuerto para emergencias.
7 Christos vive con su familia en una casa un poco fuera de la aldea principal de la isla, a un kilómetro y medio de la escuela. Es una ruta que por lo general recorre solo en su bicicleta. Es un chico muy amable, inteligente y tímido. Al niño le encanta ayudar a su familia cuando no está en el colegio o cuando termina los deberes que le encarga su profesora.
8. Los isleños son mayoritariamente pastores y pescadores, como la familia de Christos. Casi todos tienen un pequeño bote para pescar cuando el clima lo permite.A la familia de Christos le resulta imposible mudarse, y por eso solo uno de sus hermanos mayores completó la secundaria, ya que se fue a vivir con unos familiares a Patmos. Tal y como está la situación en este momento, el niño está condenado a dejar los estudios dentro de tres años y permanecer en la isla donde probablemente trabajará como pastor, igual que su padre.
9. Christos va a buscar los libros que guarda junto a la ventana de su dormitorio. La familia vive una vida tranquila lejos de la locura de una gran ciudad. Hasta hace poco, ni siquiera tenían televisión y, por supuesto, tampoco un ordenador. Ahora, hay uno en la escuela, que la maestra usa casi a diario para mostrar a Christos cómo es la vida fuera de su pequeña isla. Él no ha viajado, pero todos los días su profesora le enseña el mundo.
10. Christos es el hijo menor en su familia. Tiene un dormitorio propio en el que pasa la mayor parte de su tiempo libre, que suele dedicar a la lectura. Cuando se le pregunta qué quiere ser de mayor, siempre responde: «Profesor».
El 11 de septiembre, día que empezó el último año escolar, en cada escuela de Grecia un sacerdote ortodoxo griego realizó una santificación para tener un buen año. Sin embargo, en esta isla remota no pasó nada, ya que no hay ningún religioso en la isla, a pesar de que hay tres iglesias en él. Cada vez que suena la campana, solo Christos corre hacia su escritorio.
11. Christos juega cerca de la casa familiar con su hermano mayor, Panayotis. El niño no tiene ningún compañero de clase ni otros chicos para jugar. Sus únicos amigos en la isla son también sus hermanos mayores y, a veces, sus primos que vienen por un día o dos (generalmente los fines de semana) de las islas cercanas. En las vacaciones de verano llegan más visitantes.
12. En la preparación para el desfile del Día del No, el pasado 28 de octubre, Tsialera ayuda a Christos a ponerse el traje tradicional de las islas del Dodecaneso. Los desfiles militares y estudiantiles se llevan a cabo en todo el país. Pero aquí, la única persona que marchó fue Christos. Llevaba la bandera griega y vestía el traje que le regaló un grupo tradicional de danzas folclóricas de Leros, una isla cercana.
13. Christos, ataviado con el traje tradicional del Dodecaneso, posa de pie delante de un mapa de Grecia. Arkoi queda sobre su hombro izquierdo, cerca de Turquía.
14. Minutos antes de que comience el desfile, Christos mira por la ventana abierta de la escuela cómo se aproxima un transbordador a la isla, con la esperanza de que traiga más espectadores para su actuación.Ir a Arkoi no es tarea fácil, ya que no hay un ferry que la conecte directamente con El Pireo, el principal puerto de Grecia. Primero hay que viajar a Patmos o Leros, y luego buscar un ferry que lo lleve a Arkoi. En invierno, cuando el clima es muy malo, no hay conexión con las islas más grandes por días. El invierno pasado, después de una mala tormenta,el colegio no tuvo teléfono durante meses y, debido al aislamiento, se tarda mucho en realizar cualquier reparación. Las cosas mejoran en el verano, cuando hay afluencia turística.
15 Al final del desfile, Christos ondea la bandera griega ante un olivo en el centro de la aldea, junto al puerto viejo. “Grecia es mi isla”, dice con orgullo. Nunca ha viajado a Atenas, solo ocasionalmente a ínsulas cercanas por razones médicas o para visitar a la familia.
Fuente: https://elpais.com/elpais/2018/05/09/album/1525884321_190028.html#foto_gal_15