Redacción: Euronews
Afganistán, un país en el que ni el gobierno ni la sociedad son inmunes a los ataques suicidas. La enseñanza y los medios de comunicación no son una excepción. El 60% de la población es analfabeta y casi 4 millones de niños carecen de formación. El ministro de Educación, Mirwais Balkhi, cree en la posibilidad de derrotar al terrorismo si se erradica el analfabetismo y lleva a cabo visitas a las escuelas en Kabul. Se trata de un responsable político que está decidido a luchar contra el extremismo con educación, libro y pluma.
El 27 de enero de 2018, la capital afgana fue testigo de uno de los mayores ataques suicidas. Los talibanes llenaron una ambulancia de explosivos provocando 103 muertes y dejando heridas a 235 personas. La Escuela de Secundaria Malala, solo para niñas, se encuentra a 10 metros del lugar del ataque.
Su directora, Shafigha Ahmadi Vardak, hizo al ministro un estremecedor relato de ese día y le mostró las fotos y videos que grabó justo después del atentado: «Recogimos un pedazo grande de la ambulancia volada. Vi una mano que había sido amputada, pero todavía se movía, e incluso ahora cuando hay tormentas, desde árboles al otro lado del edificio caen sombreros, botas, incluso barbillas y pedazos de corazones o hígados».
Blakhi cree que el problema también reside en «algunos miembros del Gobierno en nuestra región que están explotando a personas sin educación. Son responsables de los asesinatos y del derramamiento de sangre».
Según un informe de las Naciones Unidas, del año pasado casi mil niños y niñas murieron y más de 2.500 resultaron heridos en 2016, en el camino a la escuela en Afganistán. Aquel sábado sangriento, la escuela Malala estaba cerrada por ser festivo, aunque en el país también existe un problema para la igualdad de género en un ámbito tan básico como la formación. «En comparación con la de los niños, la educación de las niñas es un problema grave. Las chicas quieren terminar el instituto e ir a la universidad. Pero no tenemos suficientes escuelas en las diferentes partes del país», explica Balkhi.
Durante la visita el centro, el ministro de Educación estuvo en todo momento acompañado por guardaespaldas armados debido a que su actividad, al igual que la de la directora de la escuela «no es diferente de lo que hace un soldado en primera línea contra el enemigo. Y los que promueven la guerra siempre están buscando la manera de eliminarme, así que no tengo más remedio que rodearme de jóvenes guardaespaldas para poder luchar contra la ignorancia».
El 30 de abril, cuatro días después de entrevistar al ministro de Educación, otro ataque suicida en Kabul mató a nueve periodistas, que cayeron en una trampa al acudir al lugar donde había estallado una primera bomba antes de que detonara un segundo artefacto. Todavía la educación y los medios de comunicación deben llevar a cabo una ardua tarea hasta convertir a Afganistán en un país pacífico.
Fuente: http://es.euronews.com/2018/07/23/educacion-contra-el-terrorismo-en-afganistan