Un nuevo movimiento prodemocracia está tomando fuerza en Tailandia. Desde hace varias semanas, miles de estudiantes han salido a las calles a manifestar pacíficamente contra el gobierno y contra la monarquía, exigiendo una reforma constitucional. Pero en un país con duras leyes de censura, estos jóvenes se las han ingeniado para expresarse de manera indirecta.
A primera vista parecen protestas como cualquier otra en el mundo, pero al escuchar resuena en algunas de ellas la letra del musical Les Misérables. Este y otros símbolos de la cultura ‘millenial’ se han tomado las manifestaciones.
«Hay dos símbolos principales», explica Ángel Marrades, politólogo y autor en el blog de geopolítica Descifrando la Guerra. «Está Voldemort, de Harry Potter, aquel que no puede ser nombrado. Ya que el rey de Tailandia es intocable y hay que buscar maneras de criticar esa imagen», dice.
En Tailandia rige en el código penal el artículo 112 que castiga el delito de lesa majestad. «Si criticas al perro del rey, puedes tener 15 años de prisión», dice Marrades y agrega que también se está usando en las protestas el gesto de la mano con tres dedos, en referencia a la película Los Juegos del Hambre. «Ese símbolo fue prohibido cuando se estrenó, en el año 2014, cuando se dio el golpe de Estado», cuenta el politólogo.
«Tiene mucho que ver con protestas de redes e imaginarios que se crean en línea», dice. Un movimiento que se conecta con varios otros en Asia en una especie de internacional prodemocracia cibernética llamada «Milk Tea Alliance» (La Alianza del Té con leche, en referencia en parte al Bubble Tea, muy popular en países asiáticos), conformada por movimientos en China, Tailandia, Taiwán y Hong Kong en rechazo a la represión de internet por ejemplo.
Censura y represión
En las protestas pacíficas, los jóvenes critican a la monarquía pero sobre todo al gobierno del actual primer ministro Prayut Chan-O-Cha, ex comandante del ejército que en 2014 instauró una junta militar durante 5 años. «Ese general reformó en 2016 la Constitución para convocar elecciones en 2019», cuenta Fernando Pedrosa, profesor e investigador de la Universidad de Buenos Aires, especialista de políticas en Asia. «Desde entonces el Senado lo nombra enteramente el ejército. Otro problema es que las elecciones no fueron totalmente transparentes y limpias. Los partidos que representaban a los jóvenes, como Future Forward (FFP), fueron prohibidos hace años», dice.
El investigador apunta que se critica también al rey Rama X, que actualmente reside en Alemania. «Su vida siempre ha sido muy ligada a los viajes, a las fiestas y al derroche. Ahora ha decidido involucrarse en cuestiones políticas, apoyando al ejército y al gobierno de Prayut Chan-O-Cha», explica.
A todo esto se suma lo que Pedrosa nombra «una represión informal»: activistas secuestrados o desaparecidos, que han generado mucha indignación en la juventud.
Ahora se teme que las protestas acaben de forma sangrienta como en 1976, cuando decenas de estudiantes de la universidad de Thammasat murieron en la represión policíaca y paramilitar.
Fuente: https://www.rfi.fr/es/asia-pacifico/20200814-en-tailandia-protestas-con-sabor-a-cultura-pop-para-reclamar-democracia