Cambios y retos del CONAFE en la 4T

Por: Diego Juárez Bolaños
Académico del INIDE, Universidad Iberoamericana Ciudad de México
Responsable Técnico de la Red Temática de Investigación de Educación Rural (RIER)

El Observatorio del Derecho a la Educación y la Justicia (ODEJ) es una plataforma para el pronunciamiento público, impulsado por el Campo Estratégico en Modelos y Políticas Educativas del Sistema Universitario Jesuita (SUJ). Su propósito consiste en la construcción de un espacio de análisis informado y de posicionamiento crítico de las políticas y las reformas educativas en México y América Latina, arraigado en la realidad social acerca de las injusticias del sistema educativo, y recupera temas coyunturales y estructurales con relación a la agenda educativa vigente.


El pasado 11 de febrero, Gabriel Cámara rindió protesta como nuevo director general del Consejo Nacional de Fomento Educativo (Conafe). Este organismo descentralizado del gobierno federal es el encargado de ofrecer servicios educativos de los niveles inicial, preescolar, primaria y secundaria a los niños, niñas y adolescentes de las localidades rurales más pequeñas y dispersas del país. Precisamente el 11 de septiembre de este año, el Conafe celebrará 50 años de existencia.

El haber existido por casi 50 años es un logro del Conafe, en un país donde son constantes los casos de desaparición de instituciones educativas. Un logro más, es el haber subsistido a una importante cantidad de directores que llegaron al cargo por claros criterios políticos, más que por sus conocimientos y experiencias relativos a la educación rural.

Sin duda, la designación del nuevo director en Conafe es uno de los mayores aciertos en materia educativa del actual gobierno federal. Basta recordar que el Director que antecedió en el cargo al Dr. Cámara fue señalado en diversos medios de comunicación por otorgar contratos millonarios a empresarios cercanos a su persona, por lo que fue denunciado por ejercicio abusivo de funciones, tráfico de influencias, peculado y conflicto de interés (El Norte, 2020).

Un perfil totalmente opuesto es el de Gabriel Cámara, quien cuenta con una larga experiencia relacionada con procesos educativos en los territorios rurales. Ha sido Consejero Técnico de la Comisión Nacional para la Mejora Continua de la Educación (Mejoredu); colabora en la organización civil Redes de Tutoría, la cual impulsa las estrategias pedagógicas llamadas Comunidades de aprendizaje y redes tutoras; ha fungido como asesor del propio Conafe durante la implementación de los modelos de Posprimaria Comunitaria en la década de 2000 y del actual modelo de educación comunitaria nombrado Aprendizaje Basado en la Colaboración y el Diálogo (ABCD); además de haber colaborado con telesecundarias rurales y de haber participado en procesos de formación a diversos actores educativos, incluyendo funcionarios y académicos.

Sin embargo, el Dr. Cámara llega a una institución debilitada durante la presente administración federal. A pesar de los impactos sociales y educativos que ha tenido Conafe durante varias décadas en las poblaciones que, al menos en el discurso, son el centro de atención de la 4T, su presupuesto ha pasado de poco más de 4 mil 800 millones de pesos en 2019, a alrededor de 3 mil 900 millones en 2021 (SHCP, 2021). De esta manera, los recursos públicos para atender la educación básica de los pobladores de las comunidades rurales más pequeñas y dispersas del país han disminuido casi 20% durante los últimos dos años.

Lo anterior marca el principal reto que Gabriel Cámara y su equipo enfrentarán en Conafe: la falta de recursos económicos para fortalecer las tareas del Consejo. Ya que la disminución presupuestal del Conafe es una acción regresiva, se tendría que dar a conocer tal hecho tanto en el área hacendaria federal, como en el poder Legislativo, además de la opinión pública. Podría desarrollarse una estrategia del Conafe en los ámbitos político y comunicativo para obtener un presupuesto mayor durante 2022. Dispone de abundantes argumentos para intentarlo.

Otro de los retos que enfrenta el Conafe tiene que ver con las figuras educativas que imparten la educación comunitaria. Desde sus inicios, la institución atiende los centros educativos mediante jóvenes que realizan su servicio social en las comunidades rurales. Diversos estudios y evaluaciones (Arteaga, Popoca y Juárez, 2020; RIER/INEE, 2018; Urrutia, 2014; Juárez, 2009; Ezpeleta y Weiss, 2000) han mostrado que la reducida formación didáctica de estos jóvenes servidores sociales es una limitante del funcionamiento del Consejo. A ello habría que sumar el hecho de que muchos de los docentes egresados de Escuelas Normales y UPN’s no están dispuestos a trabajar en las pequeñas y alejadas comunidades rurales que atiende Conafe.

Una alternativa para atender este asunto ha sido el firmar convenios entre Conafe y diversas instituciones formadoras de docentes, a fin de que los estudiantes realicen su servicio social o prácticas profesionales como maestros rurales. Ello permitiría incrementar el perfil educativo de las figuras que atienden las escuelas comunitarias.

Un reto más tiene que ver nuevamente con el tema presupuestal. Durante la llamada 4T se han ampliado para los jóvenes las posibilidades para obtener alguna beca. Y los recursos que otorgan tales becas son muy similares a lo que se paga a los líderes educativos del Conafe. Esta ampliación de oferta de becas ha impactado en la cantidad de jóvenes que desean ser figuras educativas del Conafe, además de que se ha incrementado su tasa de deserción (RIER/ INEE, 2018). Tendría que ser un motivo de vergüenza nacional que el gobierno federal continúe ofreciendo apoyos que apenas rebasan los $3,500 pesos mensuales a las figuras educativas que trabajan en las escuelas de las poblaciones más pequeñas y dispersas del país.

Durante varios ciclos escolares el Conafe creó una figura educativa llamada Asesor Pedagógico Itinerante (API), la cual reforzaba el trabajo pedagógico en ciertas escuelas, donde los alumnos hubiesen obtenido un bajo rendimiento escolar. Los API’s constituían la única figura con estudios profesionales que trabaja en las localidades atendidas por Conafe. Sin embargo, sin alguna explicación pública y sin mostrar razones técnicas que llevasen a tal decisión, el Conafe despareció la figura del API en 2020. Un desafío más del Dr. Cámara y su equipo en el Consejo será dar marcha atrás a tal decisión.

El último reto que deseamos destacar se relaciona con las limitaciones pedagógicas que ha mostrado el modelo educativo ABCD que utiliza el Conafe desde el ciclo escolar 2016-2017. Entre éstas, se encuentra la dificultad para aplicarlo con estudiantes de preescolar y de los primeros grados de primaria, además de que el modelo no considera estrategias para la enseñanza de la lectoescritura, lo que se suma a la necesidad de contar con diversos recursos (libros, recursos tecnológicos) que faciliten procesos investigativos en el alumnado, recursos cuya existencia es muy limitada en las escuelas comunitarias y al preocupante “olvido” que ha tenido la implementación del modelo en poblaciones de estudiantes indígenas y de jornaleros agrícolas migrantes.

Esperamos que éstos y otros temas sean abordados por las nuevas autoridades a cargo del Conafe. Los niños, niñas y adolescentes habitantes del medio rural lo merecen. Mejorar la pertinencia de la educación rural es una exigencia social y moral que ya no debería esperar por más tiempo.

Referencias

Arteaga, P., Popoca, C. y Juárez Bolaños, D. (Coords.). (2020) La Educación Rural en México. Propuestas para una política educativa integral. Ciudad de México: Universidad Iberoamericana.

El Norte (2020, 4 de julio). “Denuncian peculado en Conafe”. Monterrey. https://www.elnorte.com/denuncian-peculado-en-conafe/

Ezpeleta, J., Weiss, E. et al. (2000). Cambiar la escuela rural. Evaluación cualitativa del Programa para Abatir el Rezago Educativo. 2ª edición revisada. México: Departamento de Investigaciones Educativas del CINVESTAV.

Juárez Bolaños, D. (2009). “Educación rural en México: el caso de los cursos comunitarios”. En J. B. García Horta, y J. M. Fernández Cárdenas (eds.). Investigación, política y gestión educativa desde Nuevo León: Una aportación joven al debate nacional. México: UNESCO Comité Norte de Cooperación/ Universidad Autónoma de Nuevo León, pp. 263-286.

Red Temática de Investigación de Educación Rural- RIER e Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación, INEE (2018). Evaluación de las intervenciones públicas y programa de escuelas multigrado. https://www.inee.edu.mx/portalweb/suplemento12/evaluacion-intervenciones-y-programa-escuelas-multigrado.pdf

Secretaría de Hacienda y Crédito PúblicoSHCP (2021). Paquete Económico para el Ejercicio Fiscal. Años 2019 y 2021. https://www.ppef.hacienda.gob.mx

Urrutia de la Torre, F. (2014). ¿Por qué los bajos resultados del Conafe en primaria? Restricciones para el buen desempeño del Consejo Nacional de Fomento Educativo. Revista Latinoamericana de Estudios EducativosXLIV(1), 47-70.

Fuente: http://www.educacionfutura.org/cambios-y-retos-del-conafe-en-la-4t/

Comparte este contenido: