Uruguay/ 23 de abril de 2016/Ciento Ochenta
De acuerdo a Pérez, la inclusión educativa de niños y jóvenes con trastornos del espectro autista “ha sido una de las dificultades que se han dado prácticamente desde los inicios”.
El plan para la concreción de este proyecto llevaba más de tres años de trabajo, cuando en diciembre de 2015 el Codicen lo aprobó.
“Emanó que se haga este centro de orientación y consulta para las familias que van peregrinando de una escuela a otra o de un liceo a otro, para que deje de estar librado a la buena voluntad del director o el equipo docente y pase a ser un organismo independiente el que asesore a las familias y los oriente, conectándose con los distintos subsistemas para buscar la escolarización de ese niño o joven y seguir un tránsito educativo, que es a lo que tiene derecho por ley”, agregó Pérez.
El presidente de la Federación de Autismo del Uruguay (FAU) dijo que incluiría a la esfera de la educación pública y privada, formal y no formal, de acuerdo a la resolución pero, en una primera instancia, “lo primero para organizar sería el sistema pública, que es lo que corresponde a la ANEP”.
Añadió que esto será “un gran disparador y un gran revulsivo para el sistema”, debido a que es la primera asociación civil que logra concretar un espacio exclusivamente para personas con trastornos del espectro autista.
Un cambio en el modelo educativo
Según dijo Pérez, “esto va a tener que promover que haya cambios en los planes de estudio”, haciendo que los maestros estén preparados para tener a un niño con autismo en el aula. Esta falta de preparación es algo de lo que algunos educadores se quejan hoy en día.
“El sistema tendrá que organizarse de tal forma que las dificultades de aprendizaje, los diferentes tipos de discapacidad, tengan alguna materia en las currículas de los docentes para que puedan ser abordados en igualdad de condiciones, o lo más parecido a ello, que ellos necesiten. A su vez, para manejar distintos mecanismos alternativos de comunicación que hoy en día sirven para todos los niños, no solo para niños con discapacidad”, comentó.
El espacio de consulta estará centralizado en la Unidad de Promoción, Intervención y Desarrollo Educativo (Upide), y estará integrado por Primaria, Secundaria y UTU, la dirección sectorial de Planificación Educativa, el Hospital Pereira Rossell como policlínica de referencia del espectro autista, el Liceo Nº 32, que es el que tiene más experiencia dentro de la inclusión, la inspectora nacional de Educación Especial, el IPES (Instituto de Perfeccionamiento de Estudios Superiores) y el Consejo de Formación en Educación.
Pérez también contó que otro de los planteos futuros será exigir la presencia de un acompañante pedagógico para el niño en el aula, “para mejorar la comunicación con sus compañeros y facilitar la interpretación de los parámetros que maneja el maestro”. Dijo que algunas asociaciones civiles están haciendo cursos para educadores y terapeutas y suelen ser ellos quienes acompañan a los niños hoy en día. El costo de esto corre por parte de los padres de cada alumno.
De todas formas, Pérez comentó que esto debería regularse y generar esa preparación específica para la actividad. Indicó que algunas dificultades en la comunicación, o la invasión por parte del acompañante de los roles del maestro son consecuencias de ello.
Fuente: http://www.180.com.uy/articulo/61569_crean-espacio-para-la-inclusion-educativa-de-ninos-con-trastornos-autistas