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Un intelectual revolucionario

Por: Emir Sader

Fernando Martínez  Heredia, muerto esta semana en La Habana, fue el intelectual más importante de la revolución cubana. Su trayectoria, su obra, su actuación en Cuba y en toda América Latina, han hecho de él y de sus pensamientos, una presencia insustituible en la lucha de ideas.

Fernando dirigió la revista Pensamiento Crítico, la más importante del continente en los años 60, que hacía llegar a Cuba y a muchísimos países de América Latina lo más nuevo y relevante que producía la nueva izquierda mundial. Se mezclaban textos del Che, discursos de Fidel, con artículos de Ernest Mandel, de Althusser, de líderes de la izquierda latinoamericana, junto a la redición de textos clásicos del marxismo.

Más adelante, Fernando fue un activo participante del Centro de Estudios de América (CEA), que reagrupó lo mejor y lo más importante de la intelectualidad cubana, publicando textos determinantes para entender la realidad en Cuba y de todo el continente.

En el momento de su muerte, trato de rescatar su trayectoria personal, su formación política, para que se tenga una idea de cómo se formaba la intelectualidad cubana en los comienzos de la revolución. Siempre uno llegaba a La Habana y buscaba a Fernando para enterarse de cómo andaba la isla, a qué se dedicaba él, cuáles eran sus grandes preocupaciones. Y puedo decir que siempre, a lo largo de tantas décadas transcurridas desde el comienzo de la revolución, hemos coincidido siempre en nuestras visiones políticas y preocupaciones teóricas.

En uno de esos viajes le hice una larga entrevista para la revista Crítica y Emancipación (año 9, número 5) que yo fundé y dirigí en sus primeros años, cuando dirigía Clacso. Así él se refería a sus orígenes: “Nací en el pueblo de Yaguajay, en la antigua provincia de Las Villas. Mi padre pedía limosna en la calle cuando era niño y no fue nunca a una escuela. Mi madre hizo sólo el primer año de primaria y de ahí pasó a ser una niña obrera en la industria del tabaco. Eramos seis hermanos pero sólo cuatro llegamos a adultos. Yo nací en 1939. Estudié siempre en escuelas públicas. Comencé a leer cosas politizadas en Bohemia, la revista semanal cubana más famosa, de extraordinaria calidad. Tiraba más de 300 mil ejemplares. Enviaba 700 ejemplares a Buenos Aires por avión.

En Santa Clara participé en las protestas estudiantiles. Por primera vez oí hablar de Fidel. Asaltaron al cuartel Moncada el 26 de julio de 1953 y ello me causó un impacto decisivo. Yo tenía entonces 14 años y mi mamá me había llevado a ver unos familiares a un poblado. Al salir vimos el cuartel con todos los soldados en guardia. Preguntamos a alguien, que nos dijo que habían peleado en Santiago de Cuba y que el ejército estaba movilizado. Al día siguiente el dictador habló al país, lo escuché y pensé que había dicho muchas mentiras, y que los asaltantes al Moncada eran unos héroes revolucionarios. Para hacer algo comencé a anotar en una libreta los pocos nombres de los muertos que iban apareciendo, para evitar que cayeran en el olvido.

Cómo viviste el primero de enero del 1959, le pregunté: “Yo estaba en Santa Clara, se estaba combatiendo ahí desde el 28 de diciembre. Es la famosa batalla que dirigió el Che. Recuerdo al Che con un brazo fracturado, con una seguridad absoluta en sí mismo, caminando por una vía principal, la calle Independencia, ancha y recta. El ejército trataba de avanzar como a 700 metros, venía con dos tanques; sus disparos eran lejanos, pero en línea recta el fusil es efectivo a esa distancia y más. El Che se detuvo delante de una vidriera destrozada del Ten Acentos, y llegó bajo el fuego hasta la esquina siguiente, donde había cinco o seis rebeldes. Yo estaba a unos 50 metros, con bastante miedo, pegado a la acera. Ahora pienso que actuaba así para darles confianza a los que veían, porque los cañones de tanques en una ciudad hacen un ruido espantoso.”

Así Fernando tuvo las primeras noticias y los primeros contactos con Fidel y con el Che, así empezó a integrarse a la revolución en su país. La primera lectura de marxismo que le dieron fue el Manual de Economía Política, de la Academia de Ciencias de la Unión Soviética. Y reaccionó rápido: Si esto es el marxismo, yo no sigo, esto es insoportable. Felizmente para el marxismo cubano pocos meses después le dieron El Estado y la Revolución, de Lenin, cuya lectura le encantó. Pero su maestra principal del marxismo era la revolución. Yo absorbía todo lo que Fidel decía.

En la entrevista Fernando relata cómo nació la idea de la revista Pensamiento Crítico, cómo surgió su primer número a finales de 1966, sobre las luchas armadas en América Latina. A partir de ahí Fernando Martínez Heredia se proyectó como un líder de vanguardia del pensamiento crítico cubano y latinoamericano. En los últimos años se dedicó a un balance de la historia cubana del siglo XX, retomando temas como la cuestión nacional, su articulación con la lucha por el socialismo, así como un balance del pensamiento y de la vida de Fidel, su última obra.

Fuente: https://www.rebelion.org/noticia.php?id=228006

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Uruguay: Dificultades y desafíos de la educación sexual en el sistema formal

Uruguay/Junio de 2017/Fuente: República

En Uruguay, la educación sexual supuso avances y retrocesos. Desde comienzos del siglo pasado hubo intentos de incorporarla en el ámbito formal, pero quedaron por el camino. En 2005 el gobierno nacional planteó la necesidad de su presencia en las currículas y un año después comenzó el proceso que en 2017 cumple doce años ininterrumpidos. La última evaluación de su implementación, que incluye opiniones y percepciones de docentes y estudiantes, muestra que todavía hay dificultades. No obstante, el país destaca en la región.

Con el apoyo del Fondo de Población de Naciones Unidas (Unfpa),  la Comisión de Educación Sexual (CES) creada en 2005 y encargada de planificar, diseñar y consolidar las actividades para la implementación curricular del proyecto sobre educación sexual para la educación pública uruguaya, recorrió los 19 departamentos del país, junto a docentes, estudiantes e integrantes de equipos de salud y de la comunidad educativa. El tema se trabajó en el marco del Debate Educativo Nacional, convocado para recoger insumos para la nueva Ley General de Educación Nº 18.437.

En 2008 se creó el Programa de Educación Sexual (PES), que se integró a la Dirección de Planificación Educativa del Consejo Directivo Central (Codicen) de la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP).

Propone una educación sexual con enfoque de derechos humanos, atendiendo diferentes dimensiones involucradas en la sexualidad como género, diversidad, salud sexual y reproductiva, violencia sexual y doméstica, entre otras, que supere su reducción a los aspectos sexo-genitales. El objetivo es encararla de forma transversal a las cotidianeidades de las y los estudiantes,  reconociendo que el derecho a ella se vincula con los ciclos de vida de los sujetos.

La implementación del programa fue evaluada en 2008 y 2009. En 2014 una consultoría técnica contribuyó a identificar sus fortalezas, debilidades, oportunidades y desafíos en cada subsistema (educación inicial y primaria, secundaria, técnico profesional y formación en educación).

La última evaluación, realizada en el segundo semestre de 2015 y primero de 2016 por la División de Evaluación y Estadística del Codicen de la ANEP, recoge las percepciones de docentes y de estudiantes.

Docentes y referentes de educación secundaria y técnico profesional

A partir de percibir su rol como pilar fundamental y asumir que la especialización y la formación permanente son imprescindibles para la adecuada implementación del programa, docentes y docentes de secundaria y educación técnico profesional consideran que la oferta pública en ese terreno es aún limitada, y demandan más instancias de seguimiento y acompañamiento en su tarea. También perciben que algunos equipos de dirección ejercen controles que ponen en riesgo un amplio desarrollo de la formación en sexualidad.

Las y los docentes referentes entienden que es importante mantener una continuidad en el trabajo con grupos determinados de estudiantes a los efectos de un acompañamiento individualizado, ya que muchas veces actúan como intermediarios de situaciones de violencia doméstica, abusos, etc.

Maestras/os de educación primaria

Casi la mitad de maestras y maestros de primaria encuestados recibieron formación u orientaciones específicas del propio programa y la evalúan positivamente, en el entendido de que constituyen una fortaleza para proyectarla a conjuntos más amplios de colegas.

Los contenidos más abordados en este nivel son los relativos a vínculos afectivos, cuestiones de género y aspectos biológicos. Pero la falta de formación suficiente, los juicios de valor sobre la temática y su adecuación a las edades de las y los estudiantes, son las principales razones esgrimidas para justificar que los mismos queden relegados. No obstante, quienes tienen más formación específica están comenzando a incluir en el menú diversidad sexual, salud sexual y reproductiva y, en menor medida,  violencia doméstica e intrafamiliar.

En la planificación de actividades quienes tienen mayor formación específica aplican diversidad de modalidades; los que tienen menos tienden a utilizar como modalidad prototípica la inclusión de contenidos como respuesta a un suceso que necesite ser trabajado en clase.

El cuerpo docente enfatiza en el alto grado de socialización que niñas y niños mantienen a través de las redes sociales asociado al intercambio de material erótico, lo que es identificado como un desafío para el programa, que debe responder a estas nuevas situaciones emergentes.

Estudiantes de educación media

Casi la totalidad de las y los estudiantes de educación media manifiesta haber recibido contenidos en la materia durante el año anterior a la aplicación de la encuesta, pero la intensidad es despareja: siete de cada diez que cursan educación técnico profesional han tenido en el año más de diez clases, mientras que solo uno de cada diez estudiantes de educación secundaria están en esa situación.

El colectivo valora positivamente la contribución del programa para recibir información de utilidad, adquirir conocimientos prácticos y conocer sus derechos. Pero sus opiniones están más divididas  en cuanto a que sirva para el cambio de actitudes y comportamientos.

Aproximadamente la mitad manifiesta que la formación recibida no ha ayudado a fomentar el diálogo sobre el tema con sus familias. Paralelamente, docentes y docentes referentes alertan sobre dificultades para vincularse y trabajar con esas mismas familias.

Hay interés estudiantil por la educación sexual, particularmente en lo referente a infecciones de transmisión sexual, salud sexual y reproductiva, violencia doméstica e intrafamiliar y violencia sexual. Por su parte, las y los docentes perciben que la violencia en el noviazgo y el bullying (acoso escolar) son problemáticas emergentes que reclaman atención especial.

Las mujeres muestran más interés que los varones, en especial por la diversidad sexual, violencia doméstica e intrafamliar, violencia sexual, género y vínculos afectivos. En el tema erotismo el interés de los varones supera ampliamente el de las mujeres.

Estudiantes de educación técnico profesional, del interior del país y las mujeres manifiestan mayor conformidad con el desempeño docente en la materia, en particular respecto a la propuesta de actividades que les resulten atractivas.

En general, las y los estudiantes conocen el derecho a decidir sobre su propia sexualidad, pero persiste un grupo importante que desconoce la puesta en práctica de sus derechos sexuales en sus actividades cotidianas.

Quienes cursan educación secundaria en Montevideo y las mujeres son más proclives a mantener una perspectiva de la sexualidad en tanto derecho.

Se percibe una amplia información sobre métodos anticonceptivos disponibles, en especial preservativo, pastillas anticonceptivas y dispositivo intrauterino (DIU), aunque cerca de un tercio no sabe cómo proceder en caso de que el método utilizado falle.

También parece haber amplia información sobre infecciones de transmisión sexual, particularmentre VIH/sida, pero uno de cada diez estudiantes desconoce que debe usar preservativo en caso de otras infecciones.

Cerca del 43% de las y los estudiantes considera que la homosexualidad está determinada genéticamente, pero casi un tercio cree que es una enfermedad o declara que no sabe. Estas creencias son más frecuentes en la educación técnico profesional, el interior del país y entre varones.

La mitad de la población estudiantil considera que en el centro educativo se puede expresar libremente sobre sexualidad; un 30% está en desacuerdo con esa afirmación y un 20% no sabe al respecto.

Estudiantes de formación en educación

En este subsistema no hay, en general, un cabal conocimiento del PES ni de sus características de implementación en los diferentes subsistemas. Sin embargo, entienden que la educación sexual es una materia indispensable para la formación en educación y demandan mayores oportunidades sobre esta área durante la carrera, considerando que un seminario de 30 horas es insuficiente y no brinda el acervo teórico ni las herramientas prácticas para enfrentar y resolver situaciones cotidianas que surgen en los centros educativos.

Operadores gubernamentales

La presentación de la evaluación del PES contó con la participación del presidente del Codicen, Wilson Netto; Valeria Ramos, oficial a cargo del Unfpa; la directora sectorial de Planificación Educativa del Codicen, Graciela Almirón y el coordinador del programa, Diego Rossi.

´´La sexualidad es un componente sustancial de la identidad de género y la educación sexual asegura coherencia en el transitar de las distintas etapas educativas“, afirmó Almirón, convocando a trabajar en territorio para contextualizar en las características diferenciales de las poblaciones y reconociendo que el éxito de la tarea se apoya en la profesionalidad del cuerpo docente.

Rossi recordó que el primer curso de formación profesional en educación sexual fue coordinado por Stella Cerrutti y reconoció que la continuidad del programa actual es mérito del sistema educativo, pero también resultado de logros de la sociedad.

Netto también reconoció a Stella Cerrutti como referente en la materia y definió  la educación sexual como ´´una política pública que tiene que ver con la expansión de las libertades“. Asumiendo la necesidad de las y los docentes de profundizar en espacios de formación, les felicitó “por el coraje para abordar diferentes temáticas“.

Ana Laura Conde, directora de la División de Evaluación y Estadística del Codicen, explicó las motivaciones de esta última evaluación del programa: conocer de qué forma se está incorporando y cómo actuan los actores en cada subsistema. La metodología incluyó encuesta online a maestros de 4º y 5º año; entrevistas a docentes con trabajo en grupos de educación sexual, a partir de una pauta semiestructurada; recolección de percepciones de estudiantes de 3er año de educación media; opiniones de autoridades de los consejos educativos; grupos de discusión con alumnos del Instituto de Formación Docente.

Mirada internacional

Desde  la cooperación internacional, Ramos visualiza un contexto regional complicado para la educación sexual: “Algunos países del área están bajando los programas, Uruguay es una burbuja que se mira con buenos ojos´´. Valora que, aunque el programa comenzó a implementarse con una intensa cooperación externa, cuando esta se acabó el gobierno cumplió con el compromiso que había asumido: “Hoy el tema está en la agenda gubernamental, que fue agenda social mucho tiempo“.

Para Esteban Caballero, director regional del Unfpa, ´´la educación sexual es un instrumento de empoderamiento y desarrollo, pero no se ha puesto suficiente atención en ella. El docente es agente de cambio. No todos están preparados, hay que hacer más en formación docente“.

Sergio Meresman, consultor internacional en salud sexual y reproductiva e inclusión, opinando “desde afuera“, valoró la resignificación de la educación sexual de biologiscista a abordada como derecho, pero se detuvo en algunos aspectos, entre ellos la necesidad de indagar más profundamente en el que dijo y que no dijo el o la estudiante consultados, para entender las dificultades y resistencias de ellos o de sus familias ante la temática. También propuso profundizar en las nociones de autonomía, ejercicio voluntario y no obligado, cuidados en común, que las diferencias de poder no permeen en la intimidad.

Tomando datos del trabajo realizado, destacó que solo la mitad de las y los estudiantes reconocen tener libertad para expresarse sobre sexualidad en sus instituciones educativas y manifiestan menor interés en el erotismo, la diversidad, los vínculos, el género, cuando son los aspectos más interesantes de la materia.

“Hay una tarea no suficientemente conquistada y eso tendría que ser lo que sigue“, sintetizó, advirtiendo que a su juicio no habría que hacer cosas nuevas sino potenciar lo que se está haciendo, con especial énfasis en involucrar a los jóvenes y trabajar con sus familias y con los medios de comunicación.

Meresman observa, a partir de contenidos en línea, una presencia intensa de la pornografía en la vida de los y las jóvenes, “que también es educación sexual“. Por su parte, el bullyng y la violencia en internet sucede con mucha más frecuencia. Recomienda trabajar más lo que tiene que ver con la vulnerabilidad, el género, los derechos de las mujeres, el derecho a la diferencia y potenciar el liderazgo estratégico de la educación sexual en estos y otros aspectos.

Textual

´´La educación sexual es una política pública que tiene que ver con la expansión de las libertades“.

Wilson Netto

´´La sexualidad es un componente sustancial de la identidad de género y la educación sexual asegura coherencia en el transitar de las distintas etapas educativas“,

Graciela Almirón

“ El docente es agente de cambio. No todos están preparados, hay que hacer más en formación docente“.

Esteban Caballero

 

“Algunos países del área  están bajando los programas de educación sexual, Uruguay es una burbuja que se mira con buenos ojos´´.

Fuente: http://www.republica.com.uy/dificultades-desafios-la-educacion-sexual-sistema-formal/

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ECUADOR: El Parque Cóndor le apuesta al rescate de aves rapaces y la educación ambiental

Ecuador/Junio de 2017/Fuente: Entorno Inteligente

Asentado sobre la colina del Pucara de Curiloma, en el cantón Otavalo , provincia de Imbabura, a 2 800 metros de altura, está el Parque Cóndor . Se trata de un zoológico de rescate de aves rapaces y zoocriadero, que está regulado por los ministerios de Ambiente, de Turismo y Agrocalidad, explica Ruth Herrera, administradora del lugar.

Este paraje ecológico se levanta en 17 hectáreas. Ahí se han instalado exhibidores especiales, que acogen a 79 aves de 39 especies. Entre otros conviven el águila harpía , gavilán barreteado, búho real, lechuza de campanario y cóndor andino, el ave insignia del país que dio nombre al lugar. También hay área para vuelos de exhibición y otra para la se reproducción de roedores (ratas y ratones bancos), que sirven de alimentos para las aves rapaces.

Según los iniciadores del proyecto , el objetivo que busca el parque es crear conciencia sobre los problemas ambientales que ocasiona la destrucción de la biodiversidad y especialmente la realidad que viven las aves rapaces en el Ecuador.

El Parque Cóndor es una fundación sin fines de lucro . Es autosustentable y ha contado con la colaboración de instituciones, como: Doen, Buttler Foundation, GIZ, BTC CTB, Embajada de los Países Bajos, Indutexma, Pronaca, Incubadora INCA, entre otras.

Quizá el principal atractivo del sitio son los vuelos de exhibición de aves, como águilas, halcones, gavilanes que se realiza ante la mirada sorprendida de los visitantes. Ahí los experimentados cetreros, como Joep Hendrix, uno de los iniciadores del proyecto, explican que estas aves gigantes ayudan al equilibrio ambiental.

Lamentablemente, la mayoría, como el cóndor , están en peligro de extinción . De ahí la importancia del trabajo del Parque Cóndor en concienciar sobre el cuidado y protección de estas especies silvestres.

Pero las tareas de educación y sensibilización no están destinadas únicamente a los turistas . La capacitación incluye en especial a las comunidades kichwas vecinas al Parque Cóndor.

El Parque Cóndor abre sus puertas el público de miércoles a domingo y feriados, de 09:30 a 17:00. Los vuelos de exhibición se realizan de 11:30 y 15:30 si el clima lo permite. El ingreso de los adultos cuesta USD 4,50 y de los niños 2,50.

Fuente: http://www.entornointeligente.com/articulo/10128531/ECUADOR-El-Parque-Condor-le-apuesta-al-rescate-de-aves-rapaces-y-la-educacion-ambiental-18062017

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EDUCACIÓN S.A (el mercado ataca de nuevo)

Por: Pablo Gentili

Aunque quizás pocos lo hayan notado, la educación ha sido la verdadera protagonista de algunos de los principales acontecimientos políticos de la última semana en América Latina. El hecho parece inédito. El estrellato de la educación no se debió esta vez a ninguna mala noticia, como suele ser habitual, sino más bien a un inusual reconocimiento acerca del valor que ella tiene para resolver providencialmente los principales problemas que deberán enfrentar los países de la región.

El hecho debería alegrarnos. Finalmente, la educación parece estar ganando el lugar que le cabe como gran apuesta al futuro, como oportunidad para hacer de las nuestras, sociedades más democráticas y justas.

Entre tanto, una revisión de las razones y argumentos que dirigieron hacia la educación el centro de las atenciones en el debate regional, no dejan de ser frustrantes y, de cierta forma, lamentables.

Los días 5 y 6 de diciembre pasado, se celebró en Santiago de Chile la Conferencia “Desafíos para asegurar el crecimiento y una prosperidad compartida en América Latina”, organizada por el Fondo Monetario Internacional (FMI). Allí, diversos funcionarios del organismo alertaron que el ciclo de reformas sociales de la última década se había agotado y que las bajas tasas de crecimiento económico del continente, en un contexto global cada vez más incierto y riesgoso para la región, obligaban a un mayor rigor fiscal y a una inmediata reorientación de las políticas macroeconómicas. La reunión contó con la participación de algunos ministros de economía, presidentes de bancos centrales de diversos países latinoamericanos y un destacado conjunto de intelectuales y representantes de organizaciones internacionales. En la ocasión, la titular del FMI, Christine Lagarde, expuso algunas de las recomendaciones elaboradas por el organismo para enfrentar los desafíos futuros, poniendo especial énfasis en que, la necesidad de reactivar las economías, dependerá de una progresiva y sistemática mejora de “la educación, la infraestructura y la promoción de políticas que conduzcan a un crecimiento más equilibrado, inclusivo y sostenible”.

Difícil es saber si alguno de los presentes, en su sano juicio, pudo haber confiado en semejante aspiración de buena voluntad, por parte de un organismo que mucho ha tenido que ver con los mayores desastres económicos que ha vivido América Latina durante los últimos cincuenta años. Lagarde no perdió oportunidad de exponer su particular visión sobre los avances en los procesos de integración regional, descalificando con una metáfora gastronómica al Mercosur, la Unasur y el Alba, a los que tildó de “plato de espagueti”, al mismo tiempo en que señaló magisterialmente a Chile como “un alumno que trabaja duro y trata de mejorar su destino”. (Esto último no se supo si era un elogio o una advertencia al gobierno de Michel Bachelet). Por cierto, nunca ha sido la delicadeza ni la cordialidad la marca del trato que los funcionarios del FMI le han dispensado a América Latina, algo habitual en sus anteriores gerentes, como el promotor de crisis globales Michel Camdessus, la poco amigable señora Anne Krueger, el eximio administrador de empresas Rodrigo Rato, o el festivo Dominique Strauss-Kahn.

Preocupada con los altos índices de desigualdad y de violencia en la región, Christine Lagarde sostuvo convencida que “hay que realizar reformas estructurales, y eso incluye mejorar el nivel de educación, asegurando que la formación responda a las necesidades del mercado”.

Desde este punto de vista, los problemas de competitividad y productividad que limitan las posibilidades de crecimiento de las naciones latinoamericanas en el actual contexto internacional, dependen de la necesaria y urgente orientación de la educación a los requerimientos de la economía. Por otro lado, en un contexto potencialmente recesivo, la disminución del fondo público obliga a orientar el gasto social de forma más efectiva, priorizando la formación profesional y el desarrollo de competencias que permitan una inserción más competitiva de los individuos en el mercado, contribuyendo al dinamismo de la economía. En otras palabras, la educación debe reducirse a la capacitación laboral ya que es el déficit de formación lo que explica, en buena medida, las trabas que impiden el desarrollo de las naciones latinoamericanas.

El desafío atribuido a la educación contrasta, naturalmente, con un diagnóstico muy negativo de las condiciones en que se promueven las políticas educativas en la región: la improductividad del sistema escolar, su pésima calidad, la mala formación docente y los bajísimos niveles de aprendizaje de los alumnos, sumados a una mala gestión y administración de los recursos invertidos. Reorientar la educación hacia las demandas y necesidades del mercado es la solución propuesta por el FMI, así como por el Banco Mundial, una receta que vienen repitiendo desde hace más de treinta años y que siempre plantean con una sorprendente pretensión de originalidad.

En una línea semejante, el día de ayer, 9 de diciembre, la Comisión Económica para América Latina (CEPAL), la Corporación Andina de Fomento (CAF) y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), presentaron su publicación conjunta, Perspectivas Económicas de América Latina 2015: Educación, Comptencias e Innovación para el Desarrollo. El documento alerta también sobre las incertidumbres y desafíos que impone la nueva coyuntura internacional a las economías latinoamericanas:

“Para impulsar el crecimiento potencial y la equidad es necesario seguir avanzando en reformas estructurales. El crecimiento de la productividad continúa siendo modesto con relación a los países de la OCDE y otras economías emergentes y, a pesar de las reformas recientes, América Latina es la región más desigual del mundo. En particular, las bonanzas de los recursos naturales y los flujos de capital de corto plazo hacia la región no se han reflejado en un incremento del crecimiento económico potencial de la región. Reformas para fortalecer la educación, las competencias y la innovación han de favorecer la expansión del potencial de crecimiento y la productividad a través de una mejora de las capacidades de los trabajadores. Igualmente, deberán garantizar la igualdad de oportunidades en el acceso a una formación de calidad”. (+)

No deja de llamar la atención que la CEPAL y la CAF, cuya contribución ha sido fundamental para entender críticamente los procesos de desarrollo y la situación social latinoamericana durante las últimas décadas, ofrezca una visión tan limitada de la educación y de su potencial como medio promotor del progreso y del bienestar. Reducida a un mecanismo de transmisión de competencias y capacidades laborales, la acción del sistema escolar acaba así subordinada a las demandas económicas, a un mecanismo de valorización y dinamización de la fuerza de trabajo que debe adaptarse a las exigencias del mercado. El documento presentado se aleja de la perspectiva más amplia y crítica a partir de la cual estos organismos han entendido los derechos sociales, entre ellos el derecho humano a la educación, predominando aquí la visión tecnocrática y economicista que la OCDE, el FMI y el Banco Mundial siempre han defendido. El gran desafío de la educación queda reducido a mejorar las competencias laborales y a reducir (o, en el mejor de los casos, priorizar) toda aspiración de reforma educativa a la ampliación de la formación profesional.

El capítulo uno del documento, “Educación, competencias e innovación para una América Latina más dinámica e inclusiva”, amplía estos argumentos, afirmando que el aumento de la productividad y de la capacidad competitiva de las naciones latinoamericanas dependerá de la mejora en las condiciones de formación para el empleo, actualizando las competencias y la movilidad de los trabajadores. En tal sentido, “la participación y coordinación con el sector privado es muy importante tanto para orientar las demandas presentes y futuras de las empresas, como para proveer directamente formación en el lugar de trabajo”. (+)

El parámetro de la formación educativa son las demandas y necesidades empresariales y, por tal motivo, nadie mejor que los empresarios para determinar qué y cómo deben aprender nuestros alumnos.

Las referencias al carácter de la educación como un factor de inclusión social se reducen así a un problema estrictamente laboral y de inserción productiva. Un argumento al que la OCDE nos tiene ya bastante acostumbrados, pero que no era la perspectiva de la CEPAL ni de los valiosos aportes que nos ha brindado su excelente División de Desarrollo Social en los últimos años.

El problema planteado no deja de ser muy semejante al del FMI: los sistemas educativos latinoamericanos deberán salvar nuestras economías de un desastre quizás inminente. Y para hacerlo, deben cambiar, ya que son de bajísima calidad, como lo demuestran, según ellos, las pruebas PISA.

El documento citado fue divulgado mientras concluía la XXIV Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno llevada a cabo en Veracruz los días 8 y 9 de diciembre. Su lema ha sido: “Iberoamérica en el siglo XXI: Educación, Innovación y Cultura”. Un evento de fundamental importancia para consolidar y ampliar los acuerdos de cooperación e integración educativa regionales. La Cumbre de Veracruz se realiza a cuatro años de la XX Cumbre de Mar del Plata, cuyo tema había sido “Educación para la Inclusión Social” y en cuyo ámbito se realizaron importantes acuerdos como las “Metas 2021: la educación que queremos para la generación de los Bicentenarios”.

Los acuerdos de la Cumbre de Veracruz significaron un avance en el recorrido sinuoso de la integración educativa regional, gracias a la creación de una Alianza para la Movilidad Académica iberoamericana, el fortalecimiento y ampliación del Programa Neruda para la movilidad estudiantil de posgrado y el relanzamiento del Programa Iberoamericano de Alfabetización.

El trabajo de la Secretaría General Iberoamericana (SEGIB) y de la Organización de Estados Iberoamericanos (OEI) ha sido, en este sentido, destacado y de gran valor. Sin embargo, las ausencias de los mandatarios de países de enorme importancia en la promoción de cualquier acuerdo regional, como Brasil, Argentina, Bolivia y Venezuela, sin lugar a dudas, poco ha ayudado a fortalecer una perspectiva de la educación que supere las visiones reduccionistas y economicistas que amplifican los gobiernos más conservadores y organismos como la propia OCDE.

Las Cumbres, a pesar de todas sus complejidades, fueron un espacio central para fortalecer una perspectiva que valoriza la dimensión de la educación como un derecho humano fundamental y de la política educativa como un factor de promoción de la igualdad y la justicia social. Algo bastante diferente a la visión que allí mismo manifestó el Secretario General de la OCDE, Ángel Gurría, al sostener que “si deseamos evitar una década de bajo crecimiento económico en América Latina, debemos mejorar el nivel educativo, fortalecer las capacidades de los trabajadores e impulsar la innovación”.

El economicismo reduccionista de la OCDE quizás sólo haya sido ofuscado por las desatinadas declaraciones del presidente español Mariano Rajoy. Pareciendo querer justificar el éxodo científico que vive España, Rajoy propuso en la Cumbre que los países con “excedentes de talentos” cooperen con las naciones menos desarrolladas de la región. Además, como si uno de los méritos de su gobierno hubiera sido la promoción de más y mejores aportes financieros a los estudiantes más pobres, sostuvo la necesidad de implementar amplios programas de becas para fomentar la formación de calidad, “evitando que la falta de recursos sea un obstáculo”. Vaya, vaya…

Mariano Rajoy y el presidente de México, Enrique Peña Nieto en la Cumbre de Veracruz. Foto: Henry Romero (Reuters)

¿Qué problema hay en todo esto?

Si Ud ha llegado a esta altura de la nota, quizás se pregunte qué problema puede haber en destacar la necesidad de que la educación responda a las demandas productivas, que nuestros jóvenes tengan una mejor formación y que puedan insertarse competitivamente en el mercado de trabajo, mejorando sus ingresos y contribuyendo así con el desarrollo nacional.

Por supuesto que ninguno.

El problema no está en reconocer que la educación puede y debe contribuir con la economía. El problema reside en reducir todas las funciones educativas a las demandas y necesidades que formula el mercado y, más operativamente, a las demandas y necesidades de las empresas. Educar para el desarrollo social es algo más complejo que educar para las Sociedades Anónimas. Pensar políticas educativas de inclusión supone un desafío mucho más amplio, más complejo, y ambicioso que desarrollar políticas de formación profesional.

Es absolutamente verdad que América Latina es la región más desigual del planeta. Entre tanto, una perspectiva educativa como la defendida por el FMI, el Banco Mundial y la OCDE no hace otra cosa que cristalizar las enormes desigualdades que imperan en el sistema escolar, revirtiendo los importantes avances logrados por casi todos los países de la región en la última década.

América Latina ha vivido una importantísima transformación democrática durante los últimos años. Los niveles de pobreza, que a comienzos de los años 90 alcanzaban a casi la mitad de la población, se redujeron drásticamente llegando hoy a menos del 28%. En el período transcurrido entre el 2002 y el 2013, más de 60 millones de latinoamericanos superaron la línea de la pobreza y, la mitad de ellos, la línea de la indigencia. La región pasó de tener algo más de 225 a 168 millones de pobres en diez años. La desigualdad, aunque más tímidamente, también disminuyó, inclusive en algunos de los países en que parecía haberse impreso como la marca estructural e indeleble de un modelo de desarrollo que siempre benefició a unos pocos, despreciando los derechos y negando cualquier oportunidad de bienestar a las grandes mayorías. Podría haberse hecho muchísimo más, sin lugar a dudas. Pero las transformaciones vividas comenzaron a revertir un ciclo de estancamiento económico y de cristalización de injusticias sociales promovidas por las políticas neoliberales que se multiplicaron en la región desde los años 70 y, particularmente, con una radicalidad expresiva en los 90.

En este marco, uno de los más significativos avances sociales del continente fue la ampliación de las oportunidades educativas a millones de latinoamericanos y latinoamericanas. Los niveles de acceso y permanencia en la escuela aumentaron de forma exponencial, permitiendo que sectores tradicionalmente excluidos del sistema educativo accedieran a él o superaran las barreras que les impedían su progresión hacia niveles que nunca antes habían alcanzado. La matrícula universitaria creció. Y lo hizo porque los hijos de los sectores populares, en algunos de los países de la región, comenzaron a cursar, por primera vez, los estudios superiores, invadiendo un nivel del sistema que siempre había permanecido como privilegio de los más ricos.

Lejos está América Latina de haber alcanzado la igualdad educativa. Pero los avances fueron notables y pusieron de relevancia no sólo la dramática persistencia de la desigualdad escolar, sino la posibilidad de revertirla por medio de políticas públicas orientadas por gobiernos que, ampliando la inversión social y promoviendo programas de gran escala, asumieron ésta como una de sus deudas y como uno de sus desafíos más ambiciosos en la promoción de la democracia y la justicia social. El inventario de lo que aún falta hacer en el campo educativo es enorme. Pero solapar o desconsiderar los avances alcanzados no puede ser otra cosa que un gesto de indiferencia hacia una conquista colectiva que ha comenzado a cambiarle la vida a millones de personas.

El gran desafío de la educación latinoamericana es contribuir a afirmar y consolidar sociedades fundadas en los derechos humanos, ampliando el ejercicio de la ciudadanía y la participación democrática. Querer hacerlo por medio de la subordinación de la educación al mercado, no parece un buen camino. El mercado es el imperio de la desigualdad, de la necesidad, es el espacio de la diferenciación y la clasificación. Cuando la educación se subordina al mercado acabamos aceptando que su función no es ampliar la igualdad entre los seres humanos, sino profundizar sus diferencias sociales, de clase, de género, de raza, de origen. Atribuimos a la competencia y al mérito individual la virtud de seleccionar y elegir a los mejores, justificando así las injusticias y la reproducción sistémica de la desigualdad.

La educación es el espacio que las sociedades democráticas disponen para producir sentidos, conocimientos, saberes y prácticas que nos ayudan a construir sociedades más justas, igualitarias, solidarias y humanas.

Se trata de politizar la educación, como una herramienta de transformación y emancipación social. Reducir toda aspiración educativa a la capacitación laboral no nos lleva a otro camino que a pensar en el sistema escolar de los pobres como una gran agencia de formación profesional para empleos flexibles.

No debe así sorprender que, justo cuando América Latina comienza a transitar de forma incipiente por un proceso de ampliación de oportunidades ciudadanas, se activen de forma drástica los discursos que insisten en recordarnos que a los pobres les cabe ocupar el lugar que siempre ocuparon, y que su tránsito por la escuela no debe ser otra cosa que la apropiación de un aprendizaje supuestamente útil para su rápida inserción como fuerza de trabajo adaptada a las necesidades de aquellos que los contratarán, los cuales, por cierto, nunca aceptarían que a sus hijos les toque como única oportunidad educativa un curso corto de inserción profesional.

La estrategia discursiva parece ser siempre la misma, aunque algunos términos se modernicen y ganen nueva fisonomía: se atribuye a la educación un poder redentor (salvar a la nación del subdesarrollo y del atraso económico), mientras se condena el sistema educativo realmente existente, aquel en el que se educan, día a día, millones de niños, niñas y jóvenes; aquel en el que trabajan miles de docentes, muchos de ellos quizás mal preparados, pero que poco tienen que ver con el imagen caricaturesca que los presenta siempre como sujetos perezosos e indolentes. Hay una educación salvadora que se dibuja en el horizonte de la esperanza conformista de un mercado que sólo aspira a ser competitivo y dinámico (sólo eso). Y una educación real, digamos de carne y hueso, degradada y despreciada por los que aspiran a reformarla desde su totalitarismo economicista, especialmente cuando ella es pública y la garantiza el Estado; esa educación que, en apariencia, nos impide cumplir nuestro justo deseo de abandonar, de una vez por todas, el subdesarrollo.

Ya lo sabemos, ya lo hemos visto, escuchado y vivido a lo largo de los últimos cincuenta años: para los economistas oficiales, para el mainstream político y empresarial latinoamericano, la educación pasa a tener alguna función relevante cuando la economía va mal y cuando hay que elaborar un pase de magia que permita prometer una salida rápida y milagrosa a los problemas que se avecinan. Así, la economía latinoamericana creció gracias a la inteligencia y a las brillantes ideas de los economistas. Como ahora enfrentará problemas por la caída del precio de las materias primas, la desaceleración de China, el alto costo del financiamiento externo y las bajísimas perspectivas de ingreso de capitales en los países de la región, al sistema educativo le toca, providencialmente, cumplir su papel. Si no lo hace, estaremos mucho peor y la culpa será de él. ¿De quién? De los docentes, de los funcionarios educativos, de las familias y los jóvenes, de los sindicatos, de la “cultura nacional”… o de quien sea, pero nunca del mercado.

Cuando el mercado funciona bien, los méritos son del mercado. Cuando funciona mal, la culpa es de la educación.

“Tanto va el cántaro a la fuente que al final se rompe”, decía mi abuela. Menos en este caso. El argumento ha sido utilizado hasta el hartazgo. Y se lo repite, se lo repite y se lo vuelve a repetir.

No deberá sorprender que, en este marco, en toda América Latina, se multipliquen los cursos de formación profesional como la mejor opción de educación para los más pobres y se amplifiquen las demandas y reclamos empresariales por una educación que se adapte a sus necesidades de productividad y sus casi siempre poco modestas aspiraciones de ganancia. Tampoco deberá sorprender que cada vez más la voz y la participación empresarial en el campo escolar, inclusive en la formulación y ejecución de las políticas educativas, tienda a ampliarse y multiplicarse; una tendencia que se observa de forma clara durante los últimos 20 años.

La política latinoamericana muchas veces parece una sesión de cine continuado: siempre vuelve a comenzar. Los avances sociales, uno de cuyas causas y al mismo tiempo consecuencia fue la ampliación de las oportunidades educativas de los más pobres, parecen irrelevantes porque, ante la posible inminencia de una nueva crisis económica, los empresarios vuelven a reclamar que no producen más y mejor porque no disponen de una fuerza de trabajo calificada y que contribuya a aumentar la calidad y la productividad de las empresas. Una vez más, la culpa es del Estado y de los pobres.

Las discusiones de la Conferencia del FMI y el documento analizado, casi nada mencionan acerca de los problemas que hoy existen y persisten en el mercado de trabajo de los países latinoamericanos (y mundiales), como el racismo, la discriminación de género, la negación de oportunidades a las personas con discapacidad, a los jóvenes, o las precarias condiciones de protección y respeto a los derechos de los inmigrantes o a los que siendo del mismo país son tratados como si fueran indocumentados invisibles.

Tampoco mencionan que si hubo una disminución de la pobreza (algo que todos festejan), pero la desigualdad no se redujo con la misma intensidad, esto quiere decir que, en estos últimos años, a los más ricos mal no les ha ido. Los pobres dejaron de ser tan pobres, pero los ricos no dejaron de ser tan ricos; por el contrario, en algunos casos, se volvieron aún más ricos.

Frente a los obstáculos que enfrentarán las economías latinoamericanas, el FMI, el Banco Mundial y la OCDE proponen cambiar a los pobres haciéndolos más productivos, sin preocuparse siquiera cómo los ricos producen y acumulan riqueza, cómo la reproducen y garantizan intergeneracionalmente, en sociedades marcadas por la injusticia, la exclusión y falta de garantías para el ejercicio de los derechos fundamentales. Nada indica que arriando a las agencias de formación laboral a los jóvenes más pobres, sus condiciones de vida mejorarán substantivamente. Lo que sí parece claro es que el actual modelo de desarrollo económico latinoamericano ha generado formas predatorias de apropiación de ganancias que han beneficiado a algunos pocos. Por lo tanto, que colocar el problema en las capacidad de innovación del sistema científico o tecnológico y en el formación profesional de los jóvenes, aunque no deja de ser importante, puede distraernos más que concentrarnos en el asunto fundamental: para revertir los altos índices de desigualdad hay que cambiar primero a los ricos, no capacitar a los pobres para que se conformen con lo que tienen.

El futuro nos señala la luna. El FMI, el Banco Mundial y la OCDE, sólo le miran el dedo.

Las economías latinoamericanas enfrentan, sin lugar a dudas, enormes desafíos. Y los enfrentarán en la próxima década. Sería bueno comenzar democratizando las relaciones humanas en el mercado de trabajo, mejorando las condiciones de distribución de la riqueza (cada vez más concentrada), ampliando los derechos de los trabajadores, promoviendo reformas fiscales que reduzcan la regresividad tributaria estructural que tenemos y que poco se ha modificado.

Que el FMI, el Banco Mundial y la OCDE se dediquen a opinar acerca de cómo mejorar todo esto. Si lo hacen, otros, bastante mejores que ellos, se ocuparán de la formación humana de las futuras generaciones, sabiendo que al salir de la escuela los esperará un sistema económico inclusivo, democrático y que no antepone la competitividad de las empresas al bienestar de los ciudadanos de una nación.

Fuente: http://elpais.com/elpais/2014/12/10/contrapuntos/1418224298_141822.html?rel=mas

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Argentina: El Gobierno va a tener que entender que el sindicato más importante de Mendoza tiene una nueva dirigencia

Argentina/Junio de 2017/Fuente: La Izquierda Diario

Esta mañana, la conducción electa del SUTE dió su primera conferencia de prensa en el local central del gremio, luego de haber ratificado su triunfo en las elecciones del sindicato docente de Mendoza. .

El FURS, se impuso en las elecciones del sindicato con el 36% de los votos, superando al Frente Azul-Naranja, que sacó el 34%. Por último, frente Celeste de Gustavo Maure quedó en tercer lugar con el 30% de los votos. El FURS, además se impuso en las seccionales de Ciudad, Las Heras, Tunuyán, Guaymallén, Godoy Cruz y Luján de Cuyo.

Sebastián Henríquez, flamante Secretario General del sindicato, remarcó que el mismo ahora es de todos los trabajadores y trabajadoras de la educación. También destacaron desde la nueva conducción que las decisiones que se tomen para enfrentar los ataques del gobierno provincial a la educación pública, serán tomadas en asambleas de escuela y en plenarios.

Henríquez, además declaró que «la primera tarea ahora es construir un sindicato con verdadera participación de las bases. Otra es dejar de naturalizar las condiciones precarias en las que trabajan docentes y celadores y que los gobiernos dejen de maltratar y de culparlos a ellos de la crisis del sistema educativo«.

Al concluir la conferencia, delegadas y activistas de todas las agrupaciones que conforman el FURS cantaron desde el escenario las consignas de salario Igual a la canasta familiar, contra el al ítem aula y por la reincorporación de Paola Vignoni, perseguida por el gobierno provincial por criticar en su escuela el Operativo Aprender.

Precisamente Paola Vignoni, referente de la Corriente Nacional 9 de Abril y flamante Secretaria de Finanzas de la seccional Guaymallén, también recuperada de la conducción celeste, destacó que: «ayer ha sido un día histórico, porque recuperamos el sindicato para todos los trabajadores y trabajadoras. Después de 20 años, hemos sacado a la burocracia sindical de nuestro sindicato». Además, en relación a los dichos del gobernador Cornejo sobre la victoria de la izquierda en el sindicato, Paola remarcó que «Está claro que las bases no quieren el Ítem Aula, el gobierno va a tener que entender que el sindicato más importante de la provincia ahora tiene una nueva dirigencia

Fuente: http://laizquierdadiario.com/Sute-El-gobierno-va-a-tener-que-entender-que-el-sindicato-mas-importante-de-la-provincia-ahora

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Colombia: Secretarías de Educación definirán calendario para reponer clases

América del Sur/Colombia/18 Junio 2017/Fuente y Autor: El tiempo

Cada entidad determinará si durante las vacaciones los niños y jóvenes deberán ir al colegio.

Entre las incertidumbres que han tenido los padres de familia durante los 37 días del paro nacional de maestros están la reposición de las horas de clase perdidas y qué pasará con las vacaciones.

Como respuesta a estas dudas, en el marco de la firma del acuerdo con Fecode, el Ministerio de Educación aseguró que les solicitaron a las secretarías de Educación del país hacer las modificaciones al calendario escolar para que se garantice la recuperación de las clases que se dejaron de dictar por el paro.

En cuanto a las vacaciones, se mantiene la misma directiva y también serán las secretarías de Educación las encargadas de determinar si durante estas vacaciones de mitad de año se dictarán las clases.

Según Fecode, para llegar a la decisión, los sindicatos de maestros regionales se reunirán con los funcionarios para tomar las medidas acertadas.

 

Fuente de la noticia: http://www.eltiempo.com/vida/educacion/reposicion-de-clases-por-paro-de-maestros-sera-definido-por-secretarias-de-educacion-99970

Fuente de la imagen: http://www.setab.gob.mx/fotos/1877.jpg

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Adolescentes chilenos ganan medalla en Olimpiada Mundial de Genios en Nueva York

América del Sur/Chile/18 Junio 2017/Fuente y Autor: latercera

Jóvenes, que pertenecen al Colegio Andrés Bello de Talca, dieron a conocer su descubrimiento: un antibiótico natural.

Dos adolescentes de 15 años, Felipe Islas y Luciano Imas, obtuvieron una medalla de plata en la Olimpiada Mundial de Genios, realizada en Nueva York, Estados Unidos.

Los jóvenes, que cursan segundo medio en el instituto Andrés Bello de Talca, viajaron con su profesor de Química Fredy Segura.

En el certamen dieron a conocer su descubrimiento: un antibiótico natural a partir de hojas de olivo. Con ello, alcanzaron podio entre 750 proyectos participantes.

“Es primera vez que chilenos participan de estas olimpiadas y ahora estamos en Manhattan porque vamos a celebrar”, dijo su profesor.

Fuente de la noticia: http://www.latercera.com/noticia/adolescentes-chilenos-ganan-medalla-olimpiada-mundial-genios-nueva-york/

Fuente de la imagen: http://d2vpb0i3hb2k8a.cloudfront.net/wp-content/uploads/sites/7/2017/06/16/Sin-título-113-820×385.jp

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