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El país necesita de las escuelas normales superiores para mejorar la educación rural

Por: Ángel Pérez Martínez

La Colombia de clases medias y altas que educan a sus hijos en colegios y universidades de calidad debe saber que 3 meses después de iniciado el año escolar, algunos niños del sector rural aún no han empezado clases o han sido suspendidas por falta de maestros y otros problemas.

En el país, según el MEN, hay 3.782 centros educativos rurales con menos de 50 estudiantes y 1.240 centros con 51 a 150 estudiantes; el 19% de los docentes del área rural son provisionales; el 51% de las sedes educativas rurales son multigrado; el promedio de años de educación de la población urbana es de 9,2 años, mientras que el de la población rural solo alcanza 5,5 años; los bachilleres del sector urbano obtienen en promedio 252 puntos, los del sector rural 233; los jóvenes del sector rural se retiran o no asisten a la escuela, la cobertura en educación media es del 27,4% y el tránsito inmediato a la educación superior de los bachilleres en el área urbana alcanza el 41%, en el sector rural el 22%.

Fue un acierto del acuerdo de paz cuando estableció que el acceso a la tierra es una condición necesaria para la transformación del campo, pero no es suficiente, por lo cual deben establecerse planes nacionales financiados y promovidos por el Estado destinados al desarrollo rural integral para la provisión de bienes y servicios públicos, uno de ellos es educación.

Sin embargo, podemos hacer el mejor plan nacional para el desarrollo de la educación rural, pero primero el MEN y las secretarías de educación, junto con los rectores de los colegios con sedes educativas ubicadas en el sector rural deben resolver problemas básicos, como lograr que ningún niño deje de asistir al aula escolar por ausencia o falta de un docente. No podemos olvidar que detrás de los líos estructurales o de la ineficiencia en la gestión del sector educativo, y de los problemas entre los adultos, están los niños y los adolescentes más pobres, quienes más y mejor educación requieren.

El MEN, las secretarías de educación, los sindicatos y la comunidad deben reconocer que las características de la ruralidad no permiten estandarizar acciones de política educativa. El entorno juega duro en las condiciones de formación y en los procesos educativos de los docentes, por ello cada escuela y cada docente tiene retos diferenciados, según el tipo de ruralidad. Por ejemplo, en el caso de la ruralidad más profunda, los niños realizan su educación inicial y la primaria en una escuela que tiene 1 o 2 salones, donde los docentes educan en aula multigrado con sólo 6 u 8 estudiantes, con diferentes edades y grados escolares. En Colombia en estas escuelas hay mayor ausentismo de los docentes.

Son varias las deudas que tenemos con los niños del sector rural, pero la más importante tiene que ver con los docentes en temas como: conseguir y formar docentes de muy buena calidad para que trabajen de manera específica en el sector rural; establecer concursos sólo para docentes, con formación en aulas multigrado, modelos educativos flexibles y proyectos productivos, entre otros, y además que quieran ir a trabajar al sector rural, por lo menos 5 años continuos, en regiones o zonas apartadas de las cabeceras municipales o de pequeños caseríos; determinar procesos especiales para que los rectores puedan remplazar de manera exprés las vacantes de los docentes que se ausenten por menos de 15 días por incapacidad o por otros inconvenientes (los rectores deben contar con los instrumentos legales, recursos y requisitos para proveer este tipo de vacantes) y para las secretarias de educación para proveer las vacantes cuando el docente se retira de manera definitiva por traslado, renuncia o pensión y; lo más difícil, lograr que no falten recursos financieros en las entidades territoriales más débiles para nombrar los docentes del sector rural.

Sucede que los docentes que se  presentan a concursos para ingresar a las plantas oficiales de departamentos como Nariño o Cauca quieren estar ubicados lo más cerca posible de Pasto o Popayán, pero cuando conocen que su nombramiento es para ir a escuelas ubicadas en la Costa Pacífica  o en áreas rurales, en escuelas localizadas a más de 6 horas del casco urbano más cercano (áreas pobres, violentas y con economía ilegal), ellos no aceptan o en algunos casos empiezan a trabajar, pero a los 2 o 3 meses renuncian o se hacen trasladar; igual sucede en varias regiones de Colombia, como en el departamento de Bolívar donde los docentes quieren laborar cerca de Cartagena pero no en el sur de Bolívar, región pobre y aún con violencia paramilitar y guerrillera, además de economía ilegal. Esta situación es más compleja en los departamentos como los de la Orinoquia que tienen más territorio, menos población y mayor dispersión de la población.

La solución al problema de cómo lograr docentes bien formados y estables en las escuelas rurales está en parte en las normales. El país cuenta con 137 escuelas normales superiores autorizadas por el MEN para ofrecer programa de formación complementaria en modalidad presencial, la mayoría de ellas están ubicadas en municipios o regiones con entornos rurales, donde profesores y estudiantes tienen una apropiación de la vida y la cultural de la ruralidad, el país requiere fortalecerlas y planear el desarrollo de licenciaturas en educación en algunas de ellas, de acuerdo con las necesidades del sector rural, en convenio con universidades acreditadas. Los estudiantes que aspiran ser profesores podrían tener dos años de formación en educación superior en la normal, un año de prácticas en instituciones rurales y luego regresar a completar la licenciatura, con el compromiso de ir a trabajar a escuelas rurales por lo menos 5 años continuos.

Fuente: http://www.dinero.com/opinion/columnistas/articulo/escuelas-normales-superiores-para-educacion-rural-angel-perez/245001

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Hacia una pedagogía del cuerpo vivido: la corporalidad como territorio y como movimiento descolonizador

Facundo Ferreirós

I.

Había una vez un cuerpo (platónico). Cuerpo accidente, estorbo, cárcel. Cuerpo mortal, mundano, no inteligible. Cuerpo como elemento de distorsión, contaminante y perturbador para el alma -su contracara- aquella de la que depende todo conocimiento genuino, aquella que es de naturaleza divina, a diferencia del cuerpo que es de naturaleza física. En este relato, el cuerpo engaña al alma, la cual por sí sola alcanza la verdad, pero para lo cual necesita alejarse del cuerpo. El desenlace, un dualismo radical: un dualismo que inclina todos los valores jerarquizados a favor del alma y en disfavor del cuerpo.
Había una vez un cuerpo (cartesiano). Cuerpo como extensión, como sustancia con naturaleza propia y distinta a la del alma. Cuerpo que no es yo, porque yo es pensamiento, res cogitans. Cuerpo-máquina, comparable a los relojes, las fuentes artificiales y los molinos. Pero creada por Dios, por lo tanto perfecta, por lo tanto incomparable a las creadas por el hombre, aunque máquina al fin. Cuerpo como conjunto de órganos (partes extensas) que se unen y funcionan mecánicamente. El desenlace, nuevamente se valora más lo que el alma-pensamiento puede hacer por sí sola, porque el instrumento, aunque posibilita, también interfiere y puede distorsionar la intención y pureza originaria de las iniciativas del pensamiento.
El efecto de la introducción del poder a la vida (es decir al cuerpo y a la eugenesia) ha sido la creación de una sociedad normalizadora. Y la función principal de la educación en esta sociedad ha sido justamente la normalización. Y en lo que al cuerpo respecta, la gestión de la escuela ha estado desde sus inicios volcada a la producción de “cuerpos dóciles”: desde la educación propiamente física, hasta los pupitres, la limpieza, la compostura, el habla y el silencio, el orden, la distribución de los alumnos en el tiempo y el espacio, etc.
El cuerpo, preso del biopoder, atravesado por una praxis que lo abandona a la razón de ser mero instrumento, o que lo invisten disciplinándolo en pos de su explotación, parece sin salida. Pero es el mismo cuerpo que nos vuelve a interpelar. El cuerpo que quisimos reprimir, aquietar, administrar, se suelta de sus amarras y nos toma de rehenes, nos obliga a hacernos cargo, a tomar posición.
El cuerpo no es un objeto, sino que accedemos al cuerpo a partir de nuestro experimentarlo, nuestro vivir el cuerpo. Es decir, que si el cuerpo no es un objeto, no podemos apresarlo, aislarlo, sino simplemente vivirlo.
¿En qué sentido este análisis nos es útil a los fines de pensar al cuerpo como desafío para la educación? En primer lugar, tendríamos que empezar a pensar a partir del cuerpo, nuestra conciencia, ya no es una conciencia separada del mundo, de naturaleza distinta a nuestro cuerpo (no son dos sustancias separadas), sino que nuestra conciencia es siempre corporal. Somos cuerpo, y nuestro cuerpo es nuestra experiencia del cuerpo.
El primer desafío que surge es el de pensar la educación desde una pedagogía del cuerpo vivido, es decir, se trata de pensar la educación como el resultado más el proceso de la experiencia corporal. Experiencia que se da en el mundo y con los otros (cuerpos), es decir, nuestra experiencia es siempre intersubjetiva. Entonces, nuestro cuerpo ya no será el objeto a reprimir, sino la conciencia que conoce porque la conciencia es siempre conciencia corporal.
Un segundo desafío que se presenta es el de pensar el cuerpo ya no desde la anatomía o la fisiología -este es el cuerpo orgánico- al cual accedemos a través de nuestro entendimiento; distinto es pensar el cuerpo desde el cuerpo vivido, desde la experiencia vivida como cuerpo que somos. En definitiva el cuerpo ya no es una máquina inerte, sino una unidad intencional y significativa. Ese cuerpo que es registro de todas mis experiencias vividas y por tanto posibles. Ese cuerpo que es desafío para pensarnos como sujeto-cuerpo pedagógico.
Entonces vamos a recuperar la experiencia para la educación, experiencia que no es mera información, sino que es experiencia de nuestro propio cuerpo. La experiencia está en el cuerpo, como huella y como posibilidad. Experiencia como cuerpo vivido.
Queremos recuperar el cuerpo, pero para esto hay que liberarlo de las tecnologías que lo acechan en el afán del poder de controlar la vida. El biopoder busca disciplinar el cuerpo para administrar la vida y la muerte (El cuerpo no sólo como instrumento que le obstruye el conocimiento al alma, sino también como productor de fuerzas, útil al trabajo y a la guerra).
El sujeto pedagógico ya no es una conciencia que aprende y otra que enseña, sino cuerpos que intersubjetivamente están deseosos de aprender y pueden no sólo enseñar saberes acerca del cuerpo, sino construir conocimientos corporales. Porque el cuerpo conoce. Cuerpos que, como sabemos, no son sólo los cuerpos orgánicos que tenemos sino también las vivencias que somos. Queremos construir conocimiento sobre nosotros, sobre los demás y sobre el mundo, queremos aprender a vivir el mundo, por eso necesitamos una pedagogía del cuerpo vivido.
II.
Desempupitrar los cuerpos. No se trata únicamente de aprender saberes sobre el cuerpo, sino de posibilitar que el cuerpo conozca. La apuesta es atravesar por experiencias corporales, sentir con el cuerpo y no sólo pensar y hablar acerca del cuerpo. El cuerpo se transforma así en toda una sistematización de nuestros conocimientos y los comunica de manera fehaciente.
El cuerpo es expresión: práctica textual.
El cuerpo es vivencia del presente: habitamos corporalmente este tiempo y este espacio, somos el movimiento y los desplazamientos de este presente.
Es memoria histórica: todo tipo de huellas están inscriptas en nuestro cuerpo: las prácticas ancestrales, la herida colonial, la explotación capitalista, el patriarcado. Todo nuestro pasado está cuidadosamente presente: el cuerpo revive la memoria larga de la Historia y la corta de nuestras propias experiencias.
Es cuerpo de posibilidades: prefiguración de nuevas realidades, nuevos tiempos y espacios -nuevos movimientos-. Inédito viable.
El cuerpo es cartografía y constelación.
El cuerpo horizontaliza las relaciones, nos dispone al conocer de otros y otras. Es apertura a las sensibilidades, estremecimientos, a las afectaciones mutuas. Es territorio de encuentro: con nosotras y nosotros mismos, con los otros y otras, y con el mundo. El cuerpo es diferencia e igualdad. “Abrirnos e inscribir en nuestro cuerpo saberes que no pasan por cánones científicos de poder; aprender de los maestros constructores, de maestras cerrajeras, de mecánicos, cocineras, cargadores aprender de nuestra madre naturaleza, podrían salvarnos de pensar que todo se reduce a relaciones de objetos (fetiche) y llevarlos a un plano de sujetos.” (Julio César Mita).
El cuerpo como territorio y movimiento descolonizador. Desvela la teoría cuando es mera farsa. Nos dice qué posturas, qué alimentos, qué sustancias, nos habitan desde siempre, y cuáles nos son extrañas. Nos alerta de los tiempos y los espacios coloniales que someten nuestros calendarios, nuestros relojes, nuestros desplazamientos. Se rebela contra el sedentarismo, contra la mera intelectualidad, se levanta contra la alienación producto de la disociación entre la fuerza de trabajo y la alegría.
Una pedagogía que jerarquice el cuerpo o, mejor dicho, que no jerarquice entre la mente, el cuerpo y las emociones, es una pedagogía que se levanta contra el logocentrismo parametralizante. “Partir de nuestros cuerpos para llevar una micropolítica que otorgue sentido a nuestro pensamiento.” (Violeta Montellano Loredo). Una otra pedagogía y una otra episteme que entienden lo educativo como una práctica poblada de palabras, emociones, sensaciones, movimiento, contra aquellas pedagogías y epistemologías que suponen que “el silencio es salud”, que “el cuerpo es la cárcel del alma” y que las emociones entorpecen el camino al conocimiento, y que por lo tanto, es necesario aprender a controlarlas.
Fuente del articulo: http://descolonizarlapedagogia.blogspot.com/2016/04/hacia-una-pedagogia-del-cuerpo-vivido.html
Fuente de la imagen: https://3.bp.blogspot.com/-hAI5ue3VnNE/VwsNrcaFOPI/AAAAAAAAJno/V5_UwZLl2XUlI6oGdFxci9h-Q1a7zdSrw/s1600/cuerpo2.jgp
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¿Estudiar para ganar sueldo mínimo?

Edgar León

Según las autoridades en la educación como el Dr. Ken Robinson, autor con fama mundial por sus ideas innovadoras sobre reforma educativa y el Dr.  Tony Wagner, de la Universidad de Harvard, la educación en América está en crisis.  Esto nos incluye a nosotros debido a que Puerto Rico está obligado a seguir el patrón educativo de la nación norteamericana.

Pero realmente, ¿cuál es el problema?

Por primera vez, existen unas condiciones mundiales que nunca antes habían aparecido a la misma vez para afectarnos de cerca.  Por ejemplo, hacen falta nuevas destrezas por trabajar, hace falta un aprendizaje continuo y conocimiento pleno sobre la sociedad moderna y cómo funciona.

Los estudiantes de hoy no tienen las destrezas necesarias y están condenados a los empleos con salario mínimo aun con un bachillerato. La mayoría de los empleos que están disponibles y que están floreciendo son los de salario mínimo y pocos beneficios.

Las nuevas empresas requieren trabajadores con destrezas diferentes a las de antes.  En Puerto Rico, seguimos enseñando las destrezas y programas académicos del 1950, como cuando éramos líderes en la aguja y la industria agrícola.  Estamos llenos de programas de carreras cortas que solo darán un salario mínimo al que se gradué.

A esta nueva generación de estudiantes se le conoce como la generación Net.  Esta generación se motiva de manera diferente a la que estábamos acostumbrados.  Esto ha cambiado tan rápido y nuestras universidades y programas han sido tan lentos que ya no son relevantes ni motivan al estudiante de forma efectiva.

No sabemos cómo enseñar a esta nueva generación las nuevas destrezas necesarias para conseguir los nuevos empleos disponibles que paguen un buen salario disponibles en todo el mundo.  Esto requiere una manera diferente de enseñar y de evaluar.  A la misma vez tenemos que trabajar juntos con los estudiantes.

Existen siete destrezas de sobrevivencia para que los estudiantes puedan triunfar en los nuevos trabajos.

1.  Pensamiento crítico y solución de problemas

2. Colaboración por medio de las redes y dirigiendo por influencias

3. Adaptabilidad y agilidad

4. Tener iniciativa y ser emprendedor

5. Comunicación escrita y oral efectiva

6. Acceder y analizar información

7. Curiosidad e imaginación

Según Wagner (2016) en su libro. «The Global Achievement Gap, en estos momentos existe una brecha educativa global debido a que las escuelas públicas y universidades no están enseñando lo suficiente para que los estudiantes obtengan las destrezas necesarias para un trabajo, para ir a colegio ni para ser un ciudadano informado en el siglo 21.

Para poder resolver el problema hay que entender la Generación Net.  Estos nuevos estudiantes necesitan la gratificación al instante, usan la web para extender sus amistades, para dirigirse por sí solos, para aprender por sí mismos, y para expresarse.  Ellos están constantemente conectados, creando y haciendo tareas múltiples en todos lados excepto en la escuela.  Le tienen menos miedo a la autoridad, están acostumbrados a aprender de sus amigos, quieren “coaching”,  pero de parte de adultos que no los vean como algo inferior.  Esta generación Net desea hacer la diferencia, desean hacer un trabajo importante y que valga la pena.

Hasta que nos demos cuenta que hay que eliminar el sistema educativo actual que no funciona, que se dedica a dar exámenes y a la memorización de datos inútiles, seguiremos patinando en la ignorancia y gastando millones de dólares en vano, castigando y aburriendo a nuestros niños en la escuela.

interrumpir una huelga no equivale al cese de una lucha ineludible.

la universidad pública de las malas mañas del partidismo

desmantelar un centro de saber

Referéndum, auditoría, paros relámpagos y más… Roberto Alejandro traza una posible ruta para acciones inmediatas ante la encrucijada de la UPR y el Gobierno en quiebra

Fuente del articulo: http://www.elnuevodia.com/opinion/columnas/estudiarparaganarsueldominimo-columna-2319124/

Fuente de la imagen: http://encuestam.info/wp-content/uploads/2014/10/JOVENES-1.jpg

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La tolerancia necesaria y urgente

Leonardo Boff

Hoy en el mundo y también en Brasil impera mucha intolerancia frente a algunos partidos como el PT o los de base socialista y comunista. Intolerancia severa, a veces criminal, que algunas iglesias neo-pentecostales alimentan y propagan contra las religiones afro-brasileras, satanizándolas e incluso invadiendo y damnificando los «terreiros» (los lugares destinados al culto, considerados obviamente sagrados), como ocurrió en Bahia hace algunos años. Hay intolerancia que lleva a crímenes especialmente contra el grupo LGBT. Víctima de intolerancia es también el Papa Francisco, atacado y calumniado hasta con carteles pegados en los muros de Roma, porque se muestra misericordioso y acoge a todos, especialmente a los más marginalizados, cosa que los conservadores no están acostumbrados a ver en las figuras tradicionales de los papas.

El cristianismo de los orígenes, de la Tradición de Jesús histórico –contrariamente a la intolerancia de la Inquisición y de una visión meramente doctrinaria de la fe– era extremadamente tolerante. Jesús enseñó que debemos tolerar que la cizaña crezca junto con el trigo. Solo en la cosecha se hará la separación. San Pedro, ya apóstol, seguía las costumbres judías: no podía entrar en casa de paganos ni comer ciertos alimentos, pues eso lo haría impuro. Pero, al ser convidado por un oficial romano de nombre Cornelio, acabó visitándolo y constató su profunda piedad y su cuidado por los pobres. Entonces concluyó: “Dios me mostró que ningún hombre debe ser considerado profano e impuro; ahora reconozco verdaderamente que en Dios no hay discriminación de personas, le agrada quien en cualquier nación reverencia a Dios y practica la justicia” (Hechos 10,28-35).

De ese relato se deduce que el diálogo y el encuentro entre las personas que buscan una orientación religiosa, como en el caso del oficial romano, invalidan el prejuicio y el tabú de cohibir algún contacto con el diferente.

Del hecho resulta también que Dios es encontrado infaliblemente allí donde “en cualquier nación haya reverencia ante lo Sagrado y se practique la justicia”, poco importa su pertenencia religiosa.

Además Jesús enseñó que la adoración a Dios va más allá de los templos, porque “los verdaderos adoradores han de adorar al Padre en espíritu y en verdad. Estos son los que el Padre desea” (Jn 4,23). Existe, por lo tanto, la religión del Espíritu, es decir, todos los que viven valores no materiales y son fieles a la verdad están seguramente en el camino que conduce a Dios. Cada uno, en su cultura y tradición, vive a su manera la vida espiritual y se orienta por la verdad. Este merece ser respetado y positivamente tolerado.

Sospecho que no hay mayor tolerancia que esta actitud de Jesús, abandonada a lo largo de la historia por la Iglesia-poder institucional (parte de la Iglesia-pueblo-de-Dios) que discriminó a judíos, paganos, herejes y a tantos que llevó a la hoguera de la Inquisición.

En Brasil tenemos el caso clamoroso del padre Gabriel Malagrida (1689-1761) que misionó el norte de Brasil pero por razones políticas fue muerto por la Inquisición en Lisboa por “garrote, y después de muerto, sea su cuerpo quemado y reducido a polvo y ceniza, para que de él y de su sepultura no haya memoria alguna”.

Este es un ejemplo de completa intolerancia, hoy actualizada por el Estado Islámico (EI) que degüella a quien no se convierte al islam fundamentalista practicado por él.

En fin, ¿qué es la tolerancia tan violada hoy?

Hay, fundamentalmente, dos tipos de tolerancia, una pasiva y otra activa.

La tolerancia pasiva representa la actitud de quien permite la coexistencia con el otro no porque lo desee y vea algún valor en eso, sino porque no lo puede evitar. Los diferentes se hacen entonces indiferentes entre sí.

La tolerancia activa es la actitud de quien convive positivamente con el otro porque le respeta y consigue ver sus riquezas, que sin el diferente jamás vería. Entrevé la posibilidad de compartir y hacerse compañero y así se enriquece en contacto y en la convivencia con el otro.

Hay un hecho innegable: nadie es igual a otro, todos tenemos algo que nos diferencia. Por eso existe la biodiversidad, los millones de formas de vida.

Lo mismo y más profundamente vale para el nivel humano. Aquí las diferencias muestran la riqueza de la única y misma humanidad. Podemos ser humanos de muchas formas. El ser humano debe ser tolerante como toda la realidad lo es. La intolerancia será siempre un desvío y una patología y así debe ser considerada. Produce efectos destructivos por no acoger las diferencias.

La tolerancia es fundamentalmente la virtud que subyace a la democracia. Esta sólo funciona cuando hay tolerancia con las diferencias partidarias, ideológicas u otras, todas ellas reconocidas como tales. Junto con la tolerancia está la voluntad de buscar convergencias a través del debate y de la disposición al compromiso que constituye la forma civilizada y pacífica de resolver conflictos y oposiciones. Este es un ideal a ser buscado todavía.

Fuente del articulo: http://www.servicioskoinonia.org/boff/articulo.php?num=819

Fuente de la imagen: http://www.elpais.cr/wp-content/uploads/2017/02/INTOLERANCIA.jpg

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Crítica y ética, una alianza favorable

Yasel Toledo Garnache

Algunos la hacen por impulsos, porque algo les molesta, por simularse valientes… La percibo en parques, guaguas, coches, en barrios y centros laborales.

Nace de la mente de muchos o todos, porque criticar es inherente al ser humano y hasta saludable, cuando no significa excesos ni “malaleche”.

Alguien me dice que implica conocimiento y responsabilidad, y tiene razón. Sin embargo, eso no significa que esté prohibido decir simplemente “no me gusta”.

El momento, el lugar, la forma y la función social del emisor son determinantes. Suele provocar dolor y baja autoestima, manifestados en llantos y aislamientos.

Con frecuencia, repetimos que debemos ser “críticos y autocríticos”, hasta constituye una especie de elemento para la evaluación en asambleas estudiantiles, y se incluye en avales, con el sonido imaginario de los aplausos en el fondo. Es favorable que en verdad lo seamos, para avanzar y disminuir errores.

Sin embargo, requiere mesura, aunque haya por ahí quien repita “soy tan feo como tan franco”. Siempre recordaré a un compañero de aula que, después de llegar a la beca, lloró durante varios minutos, por la dureza de ciertas expresiones.

Algunos andan siempre con los ojos bien abiertos, para ver, en especial, los “grises”. Entonces apuntan con el dedo y disparan balas verbales, que intentan convertirlo casi todo en negro.

Critican a uno y a otro, a esto y aquello, al jefe y al seleccionado como mejor trabajador…, pero nunca hablan de frente. En las reuniones, “cuchichean” algo al de al lado, y jamás alzan la mano. A veces, hasta mandan papelitos, firmados por Anónimo, un ser indefinible que, con frecuencia, solo quiere dañar.

Juzgar implica un alto grado de subjetividad y, en ocasiones, no conocemos cuántos problemas personales o de otro tipo sufre quien, en determinado momento, es blanco de los disparos de palabras.

Tampoco se trata de asumir personajes de víctimas cada vez que nos señalen. Las deficiencias y otros aspectos mejorables se deben asumir con valor y conciencia, sin pretextos ni máscaras. Hay que decir: “Es cierto”, y lo más importante: caminar hacia la eterna superación. Es preciso que nadie la “coja” contra el emisor, sino contra el problema.

Confirmo: criticar es una actitud favorable para todos, cuando pretende ayudar y empujar hacia el bien individual y colectivo, no destruir ni herir sensibilidades.

Los estudiosos refieren que su origen está en el latín  criticus y constituye una opinión, examen o juicio formulado en relación con una situación, servicio, propuesta, persona u objeto.

Tal vez, usted imagine a una vecina, colega de trabajo o amiga (puede ser del sexo masculino), que emite sus criterios de forma espontánea y parece traer una cuchilla en la lengua, siempre enunciando los defectos de otros. Esas personas casi nunca ven la paja en sus ojos, y no comprenden que su actitud es también reprochable.

Quienes tienen la posibilidad de difundir sus opiniones en publicaciones impresas, por micrófonos, cámaras…, deben ser exigentes con ellos mismos en cuanto a su ética profesional, sin influencias emocionales, aunque resulte bastante difícil.

Deben privilegiar la ecuanimidad y el respeto a lo juzgado y a sus autores. Se recomienda reconocer también lo positivo y fundamentar cada dificultad con argumentos sólidos, sin dogmatismos y conscientes de que expresan sus percepciones y no una verdad absoluta.

Jamás renunciemos a la crítica constructiva. Com­pren­damos que su mejor compañera es la ética, siempre con valor profesional y personal, con espíritu constructivo y deseos de aportar desde la utilidad.

Fuente del articulo:http://www.granma.cu/opinion/2016-06-03/critica-y-etica-una-alianza-favorable-03-06-2016-01-06-47

Fuente de la imagen:http://letralia.com/209/etica.jpg

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Comprender, respetar, aceptar: aprender

Lisandra Fariñas Acosta

La escuela no puede estar divorciada de la ideología de la Revolución, de ese sentido de responsabilidad colectiva que es lo que nos da capacidad de independencia, es lo que nos permite emanciparnos como seres humanos

«Maestro. Maestra: Palabras sagradas».

Así comienza su diálogo con Granma la doctora en Sociología y directora del Centro Nacional de Educación Sexual (Cenesex), Mariela Castro Espín, para quien la 10ma. Jornada cubana contra la homofobia y la transfobia, nos coloca en esta ocasión frente a la oportunidad de mirar (nos) un espacio trascendental de la sociedad como lo es la escuela.

De los prejuicios que pueden subsistir en el escenario de aprendizaje social por excelencia, y cuánto hemos podido avanzar como país en materia de políticas públicas, y en la visión y la transformación de la opinión ciudadana y política sobre la población LGBT (lesbianas, gays, bisexuales, transexuales), habla la entrevistada.

El hecho de que este año se hayan escogido los espacios escolares como escenario fundamental de la décima Jornada, dijo, no guarda relación directa con estudios cuantitativos o estadísticas al respecto sino con algunas investigaciones cualitativas e informes del Servicio de Orientación Jurídica del Cenesex, subrayó la experta.

«Cuba se encuentra entre los países que menos situaciones de violencia escolar vive, según estudios regionales. Sin embargo también en investigaciones nuestras, que no son muchas y se necesitan incrementar, se describen algunas expresiones concretas de violencia hacia las personas LGBT.

«Hay problemas, y aunque no contamos con suficientes estudios, los identificados bastan para visibilizar el tema y fortalecer las estrategias de prevención y atención. Nuestras escuelas son uno de los lugares más seguros en la vida de las niñas, los niños, los adolescentes y jóvenes, por eso debemos velar porque este tipo de situaciones no ocurran».

Para la doctora Castro Espín, «en la escuela se aprende el sentido de ciudadanía, que es entenderte como sujeto con deberes y derechos. Es importante saber que los derechos entrañan deberes, porque cuando no comprendes tus responsabilidades sociales, podrías entonces violar los derechos de otras personas, y vulnerar los tuyos.

Ello, expresó, se aprende además en la familia, en los diferentes entornos comunitarios, en la televisión y diversos medios. «Por tanto el Programa Nacional de Educación y Salud Sexual tiene el deber de sintonizar todos estos ámbitos con una responsabilidad educativa, en tanto trasmiten valores, conocimientos, cultura, y facilitan el aprendizaje de estos mensajes. «La escuela no puede estar divorciada de la ideología de la Revolución, de ese sentido de responsabilidad colectiva que es lo que nos da capacidad de independencia, es lo que nos permite emanciparnos como seres humanos», significó. Por eso el Ministerio de Educación trabaja para prevenir todas las formas de violencia y de manera específica el acoso ( bullying ) homofóbico y transfóbico.

«Mediante la educación se pretende movilizar un proceso de transformación de las conciencias y de la realidad de manera coordinada para generar mecanismos efectivos para prevenir y atender la violencia basada en la orientación sexual e identidad de género en las escuelas. Defendemos el fortalecimiento de valores basados en los principios de igualdad y no discriminación en nuestra sociedad».

Este año, subrayó, los mensajes están dirigidos, sobre todo, a las niñas y niños en las escuelas, a sus maestras y maestros, al personal en general que labora en las instituciones escolares pues todos tienen una responsabilidad educativa, y con su actitud transmiten valores.

ROMPER ESTIGMAS

«Alguien nos dijo un día, cuando suene la corneta china y los tambores todos saldrán a la calle. Y así fue», cuenta Mariela, que habla de la Conga santiaguera, con un entusiasmo cómplice, y asegura que luego de diez años de jornadas se ha avanzado en la toma de conciencia de las personas con relación a la necesidad de trabajar el respeto a los derechos por orientación sexual e identidad de género; y ello se aprecia en todo el país.

«Todas han sido maravillosas. Cada jornada le sube la parada a la anterior. Antes de ir a Santiago, hubo quien comentó tener cuidado porque era muy fuerte la cultura homofóbica y machista; y en Santiago se realizó una de las mejores jornadas con todo el apoyo de las autoridades locales».

«Con la conga salió todo el mundo a la calle. Tenían motivación, interés en entender qué era lo que queríamos comunicar», dice y en ese punto se detiene para afirmar con determinación: «La Conga cubana contra la homofobia y la transfobia, que ha ido ganando en organización en todo este tiempo, es una manera alegre y autóctona de presentar nuestros mensajes y reflexiones para que la población se involucre en los diferentes escenarios de diálogo. No es una provocación».

Para la experta, «en la medida en que las campañas de bien público se han perfeccionado a lo largo de cada jornada, unas dirigidas a los espacios familiares, otras a los laborales, y actualmente a las escuelas, se han articulado mejor los mensajes y fortalecido el Programa Nacional de Educación y Salud Sexual (Proness)».

Asimismo, dijo, el proceso de organización de las jornadas es muy democrático, y parte de las propuestas de las instituciones, organizaciones y activistas que participan en el comité organizador, en cuanto a las actividades y mensajes que se presentarán.

«Cada país tiene culturas muy ricas –e independientemente de que coincidamos en el mismo objetivo, que es involucrarnos en la sensibilización de toda la población para garantizar los derechos sexuales en general, y los derechos por orientación sexual e identidad de género– creo que cada uno puede aportar de una manera auténtica a este tipo de celebraciones. Realmente me parece muy aburrido uniformarnos en una sola forma de presentar el tema».

«La manera en que lo hacemos es divertida, creativa. Me da satisfacción cultural, espiritual, que lo hagamos buscando en los propios recursos tradicionales de nuestra cultura. Hay países que tienen muchos más años de vida que la nación cubana, con una riqueza cultural más amplia y antigua, que recurren a sus tradiciones para presentar mensajes hacia la población. Hay mucha alegría pero sobre todo un alto sentido de responsabilidad.

«Me parece excelente que se tomen como referencia los sucesos de Stonewall en New York, generalmente reconocidos como el catalizador del movimiento moderno pro-derechos LGBT en esta nación y en todo el mundo, pues constituyó un valioso espacio de lucha por las libertades civiles».

«Recuerdo cuando me recibió el secretario de Harvey Milk en San Francisco, y me contaba: “aquí corrió mucha sangre. Ahora se ve alegría, banderas multicolores, la gente celebrando, pero aquí se sufrió mucho, y hubo que luchar”. Allí, en un pequeño museo que tienen en la calle Castro, que incluso ha sido atacado, se ve claramente cómo la lucha por los derechos LGBT han estado estrechamente ligadas a movimientos sociales más amplios por las libertades civiles que reclamaban las mujeres, las poblaciones originarias, afroamericanas e inmigrantes, los sindicatos, entre muchas otras. Es no solo más poderoso, sino más orgánico», refirió. «Porque no tiene sentido luchar solamente por un tipo de problemática sin mirar al lado. La solidaridad es indispensable para desmontar los mecanismos que generan discriminación y exclusión social», aludió la entrevistada que acto seguido ejemplifica como parte de las Jornadas se sumaron a la lucha internacional por la libertad de los Cinco y aún se integran en el repudio al bloqueo de Estados Unidos hacia Cuba.

¿Avances? Para la sexóloga cubana, la formación de activistas por los derechos sexuales, que no solo involucra a personas LGBT sino a toda la población interesada en la tarea, es una de las principales fortalezas que se han logrado, además de la respuesta articulada del Partido, el gobierno, salud, educación, junto a otras instituciones del Estado y organizaciones de la sociedad civil que en cada provincia participan; en la búsqueda también de resultados de investigaciones científicas como sostén de los mensajes.

TRANSFORMAR CONCIENCIAS Y REALIDADES

De aquel 17 de mayo de 2007, «de aquel recorrido desde el Cenesex hasta el cine 23 y 12 en que salimos por primera vez a celebrar el día internacional contra la homofobia y la transfobia. De aquel frío acusador de la mirada, del miedo que pueden provocar las expresiones desagradables, de desaprobación», habla Mariela satisfecha, también de lo diferente diez años después.

«Entonces la reacción de las personas no fue agresiva físicamente, pero sí incisiva, cuestionadora, molesta. El objetivo nuestro no fue molestar, sino generar comprensión, solidaridad e interés por pensar en la realidad que viven las personas LGBT».

Sonríe mientras recuenta que incluso, «en las primeras congas donde empezamos a llevar carteles, yo observaba mucho los diversos rostros de la población, sus miradas, y me llamaba la atención cómo leían y se quedaban pensando y comentando. Nos dimos cuenta de que el recurso educativo funcionó, y le dedicamos entonces mucho tiempo a la selección y elaboración de los lemas que le presentamos. La conga se convirtió para nosotros en un recurso educativo y comunicacional».

Pero, afirmó, tenemos que continuar buscando diferentes soportes para comunicar y espacios de divulgación para que llegue a la mayor cantidad de personas posibles de todas las edades; así como lograr una mejor articulación de trabajo con las organizaciones de masas y especialmente las estudiantiles y juveniles, en la construcción colectiva de ideas que nutran las campañas.

«Enviar un mensaje y abrir una puerta de diálogo. Nuestro objetivo es ese, porque en el diálogo se construye el conocimiento, en el diálogo se construye el consenso, la unidad de un pueblo para transformarse y enriquecerse espiritual y culturalmente, y encontrar mejores caminos ante las contradicciones que se viven», apuntó.

Resulta muy raro que en Cuba ocurran crímenes de odio homofóbico y transfóbico, lo cual no quiere decir que no existan expresiones de incomprensión, exclusión, discriminación, gente que prefiere segregar, excluir, apartar a estas personas como en otros tiempos se hacía con los negros o los pobres, o las mujeres. Seguimos reproduciendo, muchas veces sin tener conciencia de ello, esos mismos mecanismos de discriminación hacia otras personas, que además generan injusticia social», ejemplificó.

Si un saldo positivo ha dejado cada una de las jornadas anteriores es, a juicio de la entrevistada, la oportunidad de fortalecer los vínculos del Programa Nacional de Educación y Salud Sexual (Proness), y del Cenesex con organizaciones como la Central de Trabajadores de Cuba, «donde recibimos todo el apoyo del compañero Ulises Guilarte, su secretario general, en la pasada campaña dedicada a los espacios laborales.

«Este año hemos trabajado de conjunto con el Ministerio de Educación y pretendemos visibilizar y fortalecer el programa de educación sexual en las escuelas que forma parte y es uno de los más importantes del Proness. La campaña pretende impactar de manera especial en las carreras pedagógicas y las escuelas formadoras de maestros y maestras, y el espacio de diálogo de las escuelas con la familia».

Asimismo, mencionó que la Unesco ha tenido un liderazgo importante en investigaciones y proyectos en el mundo para visibilizar las problemáticas del bullying homofóbico y transfóbico, que constituyen un importante referente metodológico para esta campaña.

DIÁLOGO Y PENSAMIENTO COLECTIVO

«Queremos que el profesorado asuma un mayor protagonismo creativo en el Programa nacional de educación sexual en la escuela», señaló la doctora Castro Espín, quien significó el hecho de que hoy en los seminarios metodológicos los maestros y las maestras solicitan otros recursos educativos de referencia.

En ese sentido, explicó que el Proness ha ido identificando sus fortalezas y debilidades y uno de los retos es justamente perfeccionar el trabajo en las carreras pedagógicas y las escuelas formadoras de maestros.

«Con este trabajo pretendemos aportar otros elementos al diálogo de la escuela con la familia, que es una figura insustituible en la vida de un ser humano, en tanto es la institución fundamental, sobre todo en las primeras etapas de la vida, y a lo largo de esta, desde su lugar protector, educador, contenedor. La familia necesita herramientas educativas y la escuela como una de las instituciones culturales más importantes de la comunidad, tiene el deber de aportarle a la familia recursos educativos. Ser familia, madre y padre es muy difícil, es una responsabilidad que también se aprende», refirió la experta.

«La familia y la escuela tienen cada uno su rol propio y no se deben confundir. Una cosa es que en condiciones excepcionales el maestro asuma un rol más abarcador, de apoyo emocional a niñas y niños que vienen de hogares disfuncionales, que sea una figura muy especial, significativa… pero ello no quiere decir que sustituya a la familia, y la palabra maestra, maestro es muy importante en la vida de un ser humano».

Un buen ejemplo de esos roles no confundidos, dice, es Martí. «Rafael María de Mendive fue transcendental en la vida del Apóstol, pero Martí tenía a su mamá que fue fundamental y a su papá, con quien tenía grandes contradicciones pero lo amaba y respetaba, y lo admiraba por ser un hombre honesto».

«La escuela y la familia son espacios fundantes de la psiquis humana y vehículos educativos fundamentales encargados de proporcionarnos herramientas de pensamiento, y debe cada una jugar su papel»

La entrevistada insistió en que la población entienda que «la campaña que se está llevando a la escuela y junto con la educación de la sexualidad, no pretende ponderar la homosexualidad, sino dar conocimientos, valores, para que todas las personas se sientan felices, en paz, no sientan culpa; y sobre todo para que cada niño o niña se sienta orgulloso de su capacidad solidaria de ponerse en el lugar de otro, de comprender y respetar a cada persona de acuerdo con sus características singulares. Es un ejercicio de aprendizaje de lo que significa la ciudadanía, que todas las personas nacemos con derechos y aprendemos nuestros deberes».

«La sociedad no puede interpretarse en blanco y negro, dentro de los extremos de los rígidos arquetipos de lo masculino y lo femenino hay matices, y por eso ninguna persona es inferior. Aprender a respetar, comprender, es sumamente importante, nos hace mejores personas. Eso sí, vivir la sexualidad plenamente es hacerlo con sentido de responsabilidad», concluyó.

Fuente del articulo: http://www.granma.cu/cuba/2017-05-05/comprender-respetar-aceptar-aprender-05-05-2017-00-05-58

Fuente de la imagen: http://www.granma.cu/file/img/2017/05/medium/f0084309.jpg

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¡Hemos aprendido a pronunciar el sonido de la jota solo con ‘James’!

Jairo Valderrama V.

Cuando son frecuentes y cercanos, los errores del idioma tienden a pasar como expresiones correctas. “Lo importante es que se entienda”, dicen algunos facilistas. “Hací, hezoz hazuntoz del hidioma no deven hinquietar ha nadie”, escribiríamos nosotros para respaldar tan “admirable” afirmación. ¿Cierto que me entendieron? Aun así, ¿les parece adecuada la forma en que se escribió la última oración entre comillas?

La ortografía desacertada, ese “mal aliento de la escritura”, como anotó el periodista Héctor Abad Faciolince, aumenta porque la premura en la comunicación y la celeridad impuesta por la tecnología de estos tiempos, entre otras causas, llevan a escribir más con el instinto, o el afán, que con la razón.  A pesar de ello, califican de “progreso” esa masificación encarrilada del pensamiento en los desordenados mensajes de texto.

En esta oportunidad, vamos a recordar los usos de los verbos que se escriben con las letras ge y jota. Muchos lectores y escribientes suponen que el “corrector” del computador se encarga de “esos asuntos”, y que aprender ciertas reglas idiomáticas constituye solo una pérdida de tiempo.

Sin embargo, contrariando la inmensa lucidez de quienes así imaginan, de esos omnisapientes dioses, pasemos a precisar algunos detalles muy sencillos al respecto:
Los verbos terminados en las sílabas “ger” y “gir” se escriben siempre con la letra ge, con “la de gato”. Se exceptúan los verbos tejer, crujir, brujir y grujir.

Acerca de esto, citemos algunas precisiones que parecen obvias, pero recordando los errores en esta materia parecen no serlo tanto. El sonido de la ge y la jota con las letras “i” y “e” es el mismo: “Jerónimo”, “gema”; “jirafa”, “girón”. Quizás, por eso rescatamos en plena forma nuestra colombianísima (¿o “colombianada”?) expresión en el Mundial de Fútbol de 2014 para referirnos a la estrella de nuestro balompié: “James”.

Ahora a nadie, ni por asomo de broma, se le ocurre pronunciar “yeims”; pero no pasa lo mismo con “Jenny”, que se encuentra como “Jeni”, “Yeny”, “Jennita”, y pocos dejan de decir “Ye-ni”. ¡Los colombianos hemos aprendido a pronunciar el sonido de la jota solo con “James”!

En cambio, con las vocales “a”, “o” y “u” el sonido sí cambia cuando preceden a la ge y a la jota: “jamás”, “garantía”; “jovial”, “gotera”; “jueves”, “gutural”. Aquí parece todo muy claro; los usuarios frecuentes del idioma rara vez incurren en faltas de esta naturaleza, a pesar de que me he encontrado con “gitarras”, “gineas” y “gerras”.

Planteadas esas aclaraciones, va la norma: solo se escriben con jota (repitamos) los verbos tejer, crujir, brujir y grujir. Todos los demás se escriben con ge, “con la de gato”.
Cuando se busca “brujir” en un diccionario, hay una remisión a la palabra “grujir”.

Grujir —dice la Real Academia de la Lengua— es “igualar con el grujidor los bordes de los vidrios después de cortados estos con el diamante”. Quizás si se cortan los vidrios con un material distinto al diamante ya no se dirá “grujir”. En cuanto a los significados de los otros verbos, es común su conocimiento.

Relaciono una lista de verbos con esas terminaciones: elegir, proteger, corregir, recoger, converger, fingir, emerger, dirigir, escoger, surgir, exigir, acoger, afligir, sumergir, infringir, urgir, regir, infligir, erigir, sobrecoger.

Y esta inquietud por plantear estas normas surgió porque en un diario nacional, que ha circulado por más de un siglo en el país, encontré estos titulares de prensa: “Elijen [sic] alcalde de Aratoca” (15 de marzo de 2005); “A elejir [sic] el barrio más navideño” (12 de diciembre de 2001); “A protejerse [sic] del sarampión” (19 de mayo de 2002).

Acerca de la caída de un árbol, un redactor cuenta: “…de un momento a otro, sintieron un crugido [sic] y el techo se les vino encima” (30 de marzo de 2009). Y sobre el avalúo catastral, se dice en otra nota de prensa: “…nuevos formularios a los dueños de predios cuyo avalúo fue actualizado el año pasado, para correjir [sic] la supuesta equivocación” (13 de abril de 1999).

De esta manera, para las personas que escriben con descuido “…les enviamos nuestros sentimientos de condolencia, que aflije [sic] en estos difíciles momentos a sus familias” (27 de junio de 1995).

Fuente de la articulo: http://www.eltiempo.com/vida/educacion/hemos-aprendido-a-pronunciar-el-sonido-de-la-jota-solo-con-james-en-defensa-del-idioma-87144

Fuente de la imagen:

http://images.etn.eltiempo.digital/files/article_main/files/crop/uploads/2017/04/24/58fe2bdeca58b.r_1494564834003.0-306-2508-1560.jpe

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