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Los resultados de PISA destacan las presiones en los sistemas educativos

Europa/Belgica/PrensaIE

Los resultados recientemente publicados del Programa para la Evaluación Internacional de Estudiantes (PISA) han llevado a los sindicatos de la educación a reflexionar sobre los sistemas escolares y el futuro de la educación.

En Alemania, el Reino Unido (Reino Unido), España y Australia, los sindicatos de la educación han destacado sus principales conclusiones de la encuesta PISA publicada por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) el 3 de diciembre. El PISA mide la capacidad de los jóvenes de 15 años de usar sus conocimientos y habilidades de lectura, matemáticas y ciencias.

Créditos: Gobierno de la Isla del Príncipe Eduardo

Una educación de clase mundial por el hombre que debería saber, por John Bangs

La Asociación Nacional de Maestros de Escuelas Sindicato de Maestras (NASUWT), una afiliada de la IE en el Reino Unido, dijo que «asegurar altos estándares de enseñanza y aprendizaje depende de tener maestros altamente motivados y comprometidos que tengan condiciones de trabajo que les permitan enfocarse en la enseñanza en el salón de clases. Los resultados de PISA de este año muestran que los maestros están haciendo un gran trabajo, pero a menudo en circunstancias difíciles ”. El sindicato advirtió contra el uso de los resultados de PISA para clasificar países o jurisdicciones.

El sindicato agregó que, en términos de bienestar, los estudiantes del Reino Unido parecen ser menos «propensos a decir que están satisfechos en la vida que casi cualquier otro país». Expresó la preocupación de que «el miedo al fracaso y la enorme presión ejercida sobre los niños y los jóvenes por la naturaleza de responsabilidad de las pruebas en las escuelas en el Reino Unido puede ser un factor importante en este hallazgo».

EE. UU .: los sistemas escolares funcionan

En los EE. UU., La Federación Estadounidense de Maestros (AFT) relacionó el aumento del activismo docente exigiendo más inversión pública y una disminución en las pruebas de alto riesgo con «un aumento en los resultados de PISA en los Estados Unidos». El presidente de la AFT, Randi Weingarten, dijo: “Cuando intentas satisfacer las necesidades educativas y socioemocionales de los estudiantes y escuchas a los educadores y a los padres, en lugar de penalizarlos en función de los puntajes de los exámenes, puedes comenzar a mover la aguja.

“Aún así, debemos ser cautelosos con las tablas de clasificación de la OCDE que comparan manzanas con naranjas y naciones de pozo entre sí. En lugar de clasificar a los países con contextos educativos muy diferentes, deberíamos centrarnos en la investigación subyacente que muestra el funcionamiento de los sistemas escolares cuando los maestros están bien preparados y respaldados, y cuando a los estudiantes no solo se les presentan estándares, sino que se les dan las herramientas para cumplirlos. «

Alemania: se necesita más inversión en escuelas desfavorecidas

En Alemania, la Gewerkschaft Erziehung und Wissenschaft (Unión Alemana de Educación / GEW) expresó su preocupación por la falta de apoyo otorgado a las «escuelas en situaciones difíciles». Dada la fuerte correlación probada por PISA entre el rendimiento académico y los antecedentes sociales y económicos de los alumnos, el afiliado alemán de EI pidió más inversiones en escuelas en vecindarios socialmente desfavorecidos. Una disminución en la calidad de la educación también podría atribuirse a la falta de maestros, dijo. El sindicato está pidiendo un esfuerzo a nivel nacional para atraer y retener nuevo personal calificado.

El GEW también destacó el bienestar de estudiantes y maestros, y advirtió contra el uso de los sistemas de educación chino y coreano como ejemplos basados ​​únicamente en sus buenos resultados.

España: medidas de austeridad impactadas en la calidad

En relación con España, el sindicato de educación FECCOO vinculó el bajo rendimiento de los estudiantes españoles directamente con la reforma educativa conservadora de su ley, LOMCE (Ley Orgánica para Mejorar la Calidad de la Educación). El sindicato ha pedido que se revise LOMCE y que se establezca un nuevo marco que ponga el aprendizaje efectivo en su núcleo y evite la segregación y la discriminación. Las medidas de austeridad y la reducción de la inversión en infraestructura y personal habían afectado la calidad general del sistema educativo, dijo el sindicato. Pidió al gobierno socialdemócrata recientemente elegido que diseñe una nueva propuesta para remediar la situación.

Australia: un sistema de ‘tener y no tener’

La Unión de Educación de Australia (AEU) también lamentó el impacto de las medidas de austeridad y los recortes en la educación en su país. Dijo que PISA destacó las brechas de fondos propios del gobierno federal para las escuelas públicas. La presidenta de AEU, Correna Haythorpe, dijo que el informe PISA no tenía sorpresas para los maestros que trabajaban en entornos desfavorecidos. «Las brechas de recursos son evidentes en la arquitectura de financiamiento escolar del gobierno de Morrison y esto tiene un gran impacto a nivel escolar en términos de dotación de personal y programas de aprendizaje», dijo Haythorpe. «La política del gobierno de Morrison de inequidad en el financiamiento de las escuelas está modificando brevemente a una generación de estudiantes australianos al crear un sistema de» los que tienen y los que no «.

Según el informe, la brecha entre los alumnos con el mayor y menor rendimiento en las escuelas australianas era mucho mayor que el promedio de la OCDE. «Nuestros maestros hacen un trabajo superlativo al enseñar a todos los estudiantes, pero PISA muestra que persiste una brecha en el desempeño de los estudiantes de entornos socioeconómicos más altos en comparación con los entornos socioeconómicos más bajos», dijo Haythorpe. «Los recursos de enseñanza adicionales que estarían disponibles al garantizar que todas las escuelas estén financiadas al 100 por ciento del estándar de Estándar de Recursos Escolares (SRS) es clave para cerrar esta brecha de rendimiento».

Fuente: https://ei-ie.org/en/detail/16574/pisa-results-highlight-pressures-in-education-systems

 

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Ideas para la democratización del SNTE

*Rogelio Alonso

La democracia, como es bien sabido, no se limita únicamente al ámbito de elección de alguna autoridad o representante, sino que va más allá: debería permear en el funcionamiento de la estructura misma de una organización. El Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), sin duda, debe pulir muchos elementos tanto de sus procesos electorales, como de la dinámica misma de la organización. Para reflexionar sobre ello, en cuanto al primer aspecto, se retomará la forma en que se eligen a los Comités Ejecutivos Seccionales, mientras que en el segundo, el papel de los Representantes de Escuela y los Comités Ejecutivos Delegacionales.
En cuestión electoral, las prácticas del SNTE tienen que buscar la manera de perfeccionar dos aspectos: la forma en que se emiten los sufragios y el valor que tiene cada uno de ellos. Hay una situación que ilustra ampliamente el primer aspecto: los miembros de un Comité Ejecutivo Seccional saliente tienen derecho a participar y votar individualmente en el congreso en el que se elige a la nueva dirigencia sindical, por el contrario, el resto del magisterio tiene que depositar sus intenciones electorales en un intermediario: un comité delegacional. Así pues, los miembros de los Comités Ejecutivos Seccionales tienen el privilegio de sufragar directamente, mientras que el resto del magisterio tiene que hacerlo de manera indirecta a través de un intermediario.
El depósito de las intenciones de voto en un delegado puede traer además otro riesgo. En términos democráticos, existe un vicio al cual se le conoce como “tiranía de las mayorías”: cuando los intereses de las mayorías se imponen, anteponiendo precisamente el principio de las mayorías, pero además, someten y erradican a los de las minorías. Algo similar sucede cuando los trabajadores eligen delegados para que sean ellos quienes con su voto representen sus intenciones. Esto trae consigo un riesgo inminente para la democracia sindical: la intrascendencia de los intereses electorales diferentes a los del conjunto de delegados. Así pues, sólo por ejemplificar, puede que en una delegación de 500 trabajadores, 200 no simpaticen con las preferencias electorales de los delegados y, al votar éstos en función de lo que diga la mayoría de su delegación, los 200 trabajadores en cuestión (que fungen como minoría) serán ignorados electoralmente. De este modo, las prácticas electorales sindicales, en algunos de sus niveles, favorecen prácticas tiránicas de las mayorías.
Como se mencionó anteriormente, las prácticas electorales del SNTE también, en algunos niveles, representan un agravio a un principio democrático elemental: la igualdad en el valor de los sufragios. Así pues, por ejemplo, en las elecciones de los nuevos Comités Ejecutivos Seccionales, las intenciones electorales de un miembro del comité saliente tiene valor de un voto, mientras que la del resto del magisterio, se aglutinan en un voto depositado por el delegado o conjunto de delegados.   De este modo, surge un cuestionamiento evidente: ¿por qué la intención de un miembro del Comité vale un voto, mientras que la intención de decenas de maestros tiene el mismo valor al ser emitida por el voto de un delegado o un conjunto de delegados? De este modo, se puede decir que en algunas prácticas electorales sindicales (no en todas), el voto de algún integrante del Comité Seccional tiene un valor infinitamente superior al de un profesor de la base.
La situación anterior deriva además en una condición poco favorable para la vida democrática: dificultades para suscitar procesos de alternancia. Al tener un peso mayor el de los integrantes de los miembros de los Comités Ejecutivos Seccionales salientes, quienes tienen pase directo a los congresos extraordinarios para elección de autoridades sindicales y votan de manera individual y directa, es evidente que tienen mayor trascendencia en la decisión electoral que la organización tome. De esta manera, el interés de este grupo tendrá mayor peso en las urnas que el de los trabajadores de la base, lo que lógicamente podría traer consigo la continuidad excesiva en los puestos de gobierno sindical por personas afines a un mismo grupo. Los sanos procesos de alternancia de una institución democrática, sin duda se pudieran alcanzar, entre otros factores, mediante la práctica del voto individual y directo en la elección de las más altas jerarquías de gobierno sindical.
Uno de los pilares de la democracia es la participación activa de la mayor cantidad posible de los miembros de una organización, de modo que el diálogo, las decisiones y las acciones no siempre estén centralizadas en las altas jerarquías de gobierno sindical. En cuanto a esto, vale la pena que la dinámica organizacional del SNTE revitalice dos instancias básicas: los Representantes de Escuela y los Comités Ejecutivos Delegacionales. En cuanto a los primeros, actualmente algunos miembros del Comité Ejecutivo Seccional han usurpado algunas de las atribuciones que de acuerdo al Estatuto vigente de la organización tienen los representantes de centros escolares, tales como servir de enlace entre sus representados y los órganos de gobierno sindical. Aunado, a lo anterior, se han descuidado y, en algunos casos, prácticamente olvidado, algunas funciones trascendentales de los Representantes de Escuela, tales como la participación en reuniones bimestrales con sus homólogos de otros planteles y el Comité Ejecutivo Seccional, además de celebrar reuniones de trabajo con sus compañeros de plantel.
En relación a los Comités Ejecutivos Delegacionales, desafortunadamente su participación en el funcionamiento de la organización se ha ido limitando hasta, en algunos lamentables casos, servir únicamente para la organización de eventos sociales. En algunos casos, esta instancia sindical ha dejado de ejercer facultades importantes que le adjudican el Estatuto sindical, tales como la atención y trámite de asuntos y conflictos de trabajo, la gestión de plazas, prestaciones laborales y profesionales destinadas a los miembros de la Delegación, la creación de grupos de estudio, culturales o científicos, la demande de la eficiencia de los servicios médicos para los miembros de la agrupación, etc. Así pues, se observa que, contrario a los principios democráticos, las facultades importantes de algunas instancias de la organización sindical, tales como los Representantes de Escuela y los Comités Ejecutivos Delegacionales, han sido arrebatadas por miembros de la misma organización sindical. La vida democrática y la participación dentro de la dinámica organizacional del SNTE no debe iniciar desde las más altas jerarquías, sino a la inversa, debiendo replantearse de modo que las instancias de representación más cercanas a las bases tengan una trascendencia real en el funcionamiento de la organización.
En suma, considerando situaciones como las que en este escrito se han enunciado, es evidente que si se pretende hablar de un sindicato democrático, el SNTE debe subsanar algunas prácticas que impiden una democratización plena de la organización. Lo anterior sin duda pasaría no sólo por la modificación de los estatutos sindicales, sino, además, por la vigorización de los ya existentes. En materia electoral, deben buscarse los mecanismos para hacer que el voto individual y directo de cada miembro de la organización sea el vehículo para la elección de autoridades sindicales de alta jerarquía.  Si bien la figura de un delegado es –o debería ser– importante en diversas tareas sindicales, no debería ser el depositario de los votos de la base, pues éstos se simplifican en un solo sufragio perdiendo drásticamente su valor matemático y, además, corriendo el riesgo de contaminación de los intereses de las mayorías.  Al practicar el sufragio individual y directo, se estaría también eludiendo uno de los efectos negativos de la vida democrática: la tiranía de las mayorías, es decir, la relegación de quienes piensan diferente a los grupos mayoritarios.
En cuanto al funcionamiento de la organización sindical se deben fortalecer y hacer valer las facultades que tienen las diferentes instancias de representación, sobre todo aquellas más cercanas a las bases, tales como los Representantes de Escuela y los Comités Ejecutivos Delegacionales. De esta manera, al ampliar las posibilidades de acción para más actores, sin duda la vida democrática del sindicato se acrecentaría, evitando la centralización del diálogo y la toma de decisiones en los más altos puestos de gobierno y así generando un mayor interés de la base en el acontecer de la vida sindical.
*Rogelio Javier Alonso Ruiz. Docente colimense de Educación Primaria (Esc. Prim. Distribuidores Nissan No. 61 T.V.) y de Educación Superior (Instituto Superior de Educación Normal del Estado de Colima). Licenciado en Educación Primaria y Maestro en Pedagogía. 
Twitter: @proferoger85
REFERENCIAS
SNTE. Estatuto. México: Autor, 2013.
Fuente del Artículo:
http://www.educacionfutura.org/ideas-para-la-democratizacion-del-snte/
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Educación y los sindicatos vuelven a sentarse a hablar.

Por: Noticiasdealava.com

La consejera de Educación, Cristina Uriarte, anunció ayer que convocará el miércoles la Mesa Sectorial junto a los representantes de los trabajadores de la enseñanza pública vasca con el objetivo de llegar a un acuerdo que evite más huelgas en el sector. Uriarte visitó ayer un nuevo centro de educación infantil en Basauri, donde reiteró la disposición al diálogo de su Departamento con los sindicatos, en aras a evitar la convocatoria de nuevas movilizaciones.

“Estamos dispuestos y con ganas de trabajar” para lograr un acuerdo, dijo la consejera sin revelar si la oferta que lleve a la mesa ayudará a desbloquear el conflicto. El pasado martes día 12, la mayoría de los trabajadores de la enseñanza pública vasca no universitaria -más del 75 %, según los convocantes, y cerca del 60 %, según el Gobierno vasco- secundaron la huelga convocada por todos los sindicatos con representación en el sector, dentro de las movilizaciones que vienen programando desde el curso pasado en demanda de mejoras laborales y una educación de calidad.

Los sindicatos reclaman un incremento de la inversión, de las plantillas y los recursos en educación, una reducción de las tasas de temporalidad y del número de alumnos por aula, así como el fin de los “recortes” aplicados en salarios, sustituciones y bajas. ELA, LAB y Steilas también reivindican un modelo de inmersión en euskera que permita un alumnado euskaldun y plurilingüe, así como dejar a un lado la normativa estatal Lomce y los decretos educativos Heziberri. Estos sindicatos han advertido de que intensificarán las movilizaciones a la vuelta de las vacaciones navideñas si el departamento de Educación continúa sin dar respuesta a las demandas sindicales.

Precisamente, el sindicato Steilas advirtió ayer de que no abandonará las movilizaciones “hasta lograr algo real” y exigió “unos presupuestos dignos” porque “un año más, el gasto educativo disminuye” en el proyecto de 2018. Durante el Consejo Nacional, máximo órgano entre congresos, celebrado ayer en el Palacio Europa de Gasteiz, los congregados analizaron las últimas movilizaciones desarrolladas en los distintos sectores de la enseñanza pública. En su opinión, la valoración es “positiva, visto el apoyo y seguimiento que han tenido las diferentes convocatorias”. Por esta causa, y visto que la comunidad educativa “se ha volcado” en las movilizaciones no ha descartado continuarlas “en tanto en cuanto la Administración no plantee algo real y factible que nos devuelva, como mínimo, donde estábamos en 2009”

Fuente: http://www.noticiasdealava.com/2017/12/17/sociedad/educacion-y-los-sindicatos-vuelven-a-sentarse-a-hablar

Imagen: http://static.noticiasdealava.com/images/2017/12/17/bin_24257620_con_12919818_21511_1.jpg

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La violencia contra las mujeres vuelve a estar en el punto de mira por diversos casos

Prensa Internacional de la Educación

La oleada de casos de acoso y abuso sexual a mujeres de todos los ámbitos que ha salido a la luz recientemente supone un punto de inflexión en la lucha contra la violencia por motivos de género, y dicho esfuerzo empieza en las aulas de todo el mundo.

Este año, el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer está recibiendo la atención y el protagonismo que merece. Gracias al foco global en el acoso y abuso a la mujer tanto en la esfera pública como privada, como muestra la campaña en redes sociales #yotambién (#metoo), es un buen momento para que todas las sociedades den un gran salto adelante en su lucha para solucionar de forma significativa la violencia, el acoso y los abusos por motivos de género.

No obstante, la violencia de género se suele sufrir habitualmente a una edad temprana y en un entorno educativo o similar. Se propaga a través de normas y estereotipos de género muy arraigados, y se manifiesta a través de dinámicas de poder desiguales.

«Cada vez somos más conscientes de que la violencia real, o incluso la amenaza de la violencia, en el ámbito educativo es un reto muy importante que debemos superar», declaró Haldis Holst, Vicesecretaria General de la Internacional de la Educación (IE). «El 25 de noviembre representa un día clave anualmente en el que podemos volver a reafirmar nuestro compromiso para acabar con la violencia de género en nuestras escuelas, facultades, universidades y sociedades enteras».

Es hora de que los trabajadores lideren esta lucha

En medio de la oleada de casos de abusos que han salido a la luz, también considera que estamos en un momento crítico para que el movimiento sindical dé ejemplo con sus actos.

«Resulta fundamental que los sindicatos demuestren que cuentan con las políticas, herramientas y recursos para tomar medidas y apoyar al número desproporcionado de mujeres víctimas de la violencia, los abusos y el acoso, que ahora están encontrando el valor para contar sus experiencias», continuó Holst. «Da igual dónde tenga lugar; la violencia de género supone un impacto extremadamente negativo en las vidas de sus víctimas, tanto dentro como fuera del trabajo. Como representantes de los trabajadores, los sindicatos deben contar con una clara política de tolerancia cero ante cualquier tipo de violencia dentro de o en relación con el ámbito laboral.

En 2016, la IE aprovechó el 25 de noviembre para pedir a los gobiernos que apoyaran una norma estándar vinculante de la OIT, un Convenio con Recomendación asociada, sobre laViolencia y el acoso contra las mujeres y los hombres en el mundo del trabajo. Por desgracia, su objetivo aún no se ha alcanzado, así que los sindicatos educativos deben continuar con sus movimientos de presión.

El Objetivo 4 de la Agenda 2030 de Naciones Unidas sobre Desarrollo Sostenible (ODS4) expone una motivación valiente y amplia: una educación inclusiva, equitativa y de calidad, así como oportunidades de aprendizaje durante toda la vida para todos. El ODS4 también lucha por la existencia de entornos de aprendizaje seguros, no violentos, inclusivos y efectivos para todos.

La Internacional de la Educación pide a sus organizaciones y miembros que presionen a los representantes de parlamento y asamblea nacional para garantizar que el gobierno apoye un Convenio con Recomendación de la OIT centrado en la violencia de género en el entorno laboral.

MÁS INFORMACIÓN EN INTERNET

Visita la web de la Confederación Sindical Internacional (CSI) para acceder a una ficha técnicaactualizada y a su kit de recursos para la campaña.

Fuente; https://www.ei-ie.org/spa/detail/15546/la-violencia-contra-las-mujeres-vuelve-a-estar-en-el-punto-de-mira-por-diversos-casos

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16 Días de activismo contra la violencia de género 2017.

Por: Internacional de la Educación.

La campaña de este año se centra en eliminar la violencia de género en la educación gracias al impulso y los objetivos logrados a lo largo de un año en el que más de 700 organizaciones en 92 han manifestado su apoyo.

El 25 de noviembre no solo marca el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, sino que también es el primer día de la campaña anual internacional “16 Días de activismo contra la violencia de género”, que se celebra desde 1991. Los 16 días terminan el 10 de diciembre, el Día Internacional de los Derechos Humanos, para destacar que la violencia contra la mujer es una cuestión de derechos humanos.

Este año, bajo el tema ‘¡Juntos/as podemos terminar con la violencia de género en la educación!’, el activismo se ha centrado firmemente en las herramientas y el marco de derechos humanos existentes en la labor de promoción mundial para contar con leyes, políticas e instituciones más eficaces que prevengan y aborden eficazmente la violencia en los entornos educativos y alrededor de ellos. Esto refleja el énfasis renovado del Center for Women’s Global Leadership (CWGL) – el cual coordina la campaña de los 16 Días de activismo – en utilizar el marco de derechos humanos no solo para concienciar sobre la violencia de género, sino, lo que es más importante, para impulsar su erradicación.

Los sindicatos de la educación toman medidas

El programa conjunto ‘Los sindicatos de la educación toman medidas para poner fin a la violencia basada en el género en la escuela’, puesto en marcha en 2016 por la Internacional de la Educación (IE) y la Iniciativa de las Naciones Unidas para la Educación de las Niñas (UNGEI), cuenta con la participación de siete organizaciones miembro de la IE de cinco países en África Oriental y Meridional, y tiene por objeto mejorar la capacidad de los sindicatos y sus afiliados/as para contribuir a eliminar la violencia de género en las escuelas.

Gracias al apoyo del Gobierno de Canadá, el programa brinda una oportunidad única para que los sindicatos pongan a prueba, reproduzcan y divulguen enfoques innovadores de la acción sindical para abordar la violencia en y alrededor de las escuelas en Etiopía, Kenia, Uganda, Sudáfrica y Zambia. El programa ya ha arrojado información sobre retos fundamentales y ha revelado ejemplos valiosos de prácticas sindicales eficaces y datos empíricos que muestran el cambio de comportamiento entre los/las afiliados/as. El programa también ha puesto de relieve el papel importante que pueden desempeñar los sindicatos de la educación a la hora de abordar la violencia de género y aumentar la seguridad de los/las niños/as, jóvenes y docentes en entornos educativos.

¡16 días en los que los sindicatos de la educación hablan!

‘¡Los sindicatos de la educación hablan!’ es una serie de podcasts, vídeos y blogs sobre los viajes personales de cambio de afiliados/as a algunos de los sindicatos que participan en el programa. Abarcan cuestiones como obtener la voluntad política y movilizar apoyo en los sindicatos para convertir la violencia de género en las escuelas en una prioridad sindical, interactuar con las comunidades y crear nuevas alianzas, todo ello con el objetivo común de eliminar la violencia de género en las escuelas.

Visiten el sitio web, la página en Facebook y el canal en YouTube de la IE y síganos en Twitter durante los 16 Días para ver y escuchar algunas de las enseñanzas extraídas por los/las sindicalistas participantes del sector de la educación que están haciendo una gran contribución para eliminar la violencia en y alrededor de los entornos educativos.

Fuente: https://www.ei-ie.org/spa/detail/15547/16-d%C3%ADas-de-activismo-contra-la-violencia-de-g%C3%A9nero-2017

Imagen: https://www.ei-ie.org/resources/views/admin/medias/timthumb.php?src=https://www.ei-ie.org/media_gallery/original_9b38b.jpg&w=1200&h=530&zc=1

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“Quieren hacer del trabajo docente algo fácilmente sustituible”

Uruguay / 24 de septiembre de 2017 / Autor: Juan Dal Maso / Fuente: La Izquierda Diario

Pablo Messina trabaja estrechamente con organizaciones sindicales del Uruguay en el análisis de presupuestos y problemas económicos. En esta entrevista abordamos algunos de los temas sobre los que viene investigando, relacionados con el avance de las reformas capitalistas en la educación pública.

¿Qué son las políticas de reforma educativa?

Hay una suerte de agenda neoconservadora a nivel global que va a por la educación pública. Siempre se presentan como salvadores de una crisis. El primer argumento es “la educación pública está en crisis”. Y esa educación pública en crisis va a ser “salvada” por estas propuestas de reforma, que en general tienen un fuerte componente mercantil y privatizador, conjugando una diversidad de propuestas de política según los distintos momentos de implementación.

Hablando de eso ¿se puede hacer una periodización de los distintos momentos por los que han transitado estas políticas?

La periodización que a mí más me convence es la que dentro de la agenda neoliberal distingue tres períodos. Uno de la década de los ’80 donde la reforma educativa es indisociable de los procesos de ajuste estructural típicos del advenimiento del neoliberalismo en el mundo. Otro período que abarca las reformas de los ’90 que son las que más se llamó neoliberales, pero no necesariamente van acompañadas de procesos de ajuste, hay diferencias según el lugar, y tienen dos ejes fundamentales. Uno es continuar con los avances mercantilizadores, a través de la descentralización y municipalización del gasto. Esto genera diferencias regionales muy fuertes. Por ejemplo si uno mira el gasto por matriculado en Neuquén, que es una zona vinculada con la extracción petrolera y lo compara con el gasto en matriculado en Jujuy, las diferencias son muy importantes. El otro eje es la “autonomía del centro” o sea que cada centro educativo sabe cuáles son sus prioridades y puede gestionar por sí mismo los recursos. Entonces las direcciones pasan a jugar un rol de administración y en vez de ser un compañero de trabajo con una responsabilidad diferencial, la idea es que el director sea alguien que pueda contratar docentes, calificar para despedir o recontratar, cambia drásticamente su rol. Y eso en los ’90 en general si bien se quiso hacer no logró avanzar, principalmente por la resistencia de los sindicatos docentes.

Uruguay venía de un proceso de ajuste muy fuerte desde la dictadura en el gasto educativo que casi no cambió en la reapertura democrática, siguió un proceso de descenso en la ejecución presupuestal hasta el año ’96 que es el año de instrumentación de la reforma educativa, conocida como la “Reforma Rama” y en realidad significó una inyección de recursos muy fuerte. Aunque hubo resistencia sindical, el principal actor uruguayo que intentó resistir la reforma en los ’90 fue el movimiento estudiantil. Esto es interesante, porque si bien uno puede pensar que en la medida en que degrada las condiciones docentes en el mediano y largo plazo podía significar ajuste la reforma, no necesariamente es así en su fase instrumental. Uruguay no es el único caso pero es un caso bien paradigmático.

Y la tercera fase, desde fines de los ’90 hasta ahora se caracteriza por un mayor énfasis en el cambio del rol docente. Los que presentan la reforma, dicen que “hay que cambiar la educación, hay que centrarla en el estudiante, los estudiantes no necesitan aprender determinadas cosas sino que tienen que aprender a aprender, tienen que aprender en un mundo que está en permanente cambio, tienen que aprender a navegar en la incertidumbre”. Eso en Argentina suena mucho pero en todos lados se dice más o menos parecido. Yo diría que su interés principal no son los estudiantes sino los docentes: cambiar el trabajo docente tal cual lo concebíamos, “proletarizándolo” de alguna forma, volviéndole cada vez más un aplicador de manuales de texto, un ejecutor de planes de estudio y de programas sin capacidad de elaboración propia ni de crítica, incluso volviéndole alguien fácilmente sustituible por talleristas. En Uruguay desde que el Banco Central cambió su carta orgánica y tiene la formación financiera como un eje central, cada vez es más común ver que a los estudiantes les suspendan las clases de matemática, historia o filosofía y que vengan unos talleristas vinculados a ONG o funcionarios del Banco Central a dar clases de educación financiera. Aunque todavía es algo marginal muestra el objetivo que persiguen.

¿Quiénes son los que promueven la reforma?

Hay vínculos muy fuertes entre algunos organismos internacionales como la OCDE – yo diría que es el más importante- y grupos empresariales o de poder económico como Pearson, una transnacional que genera contenidos educativos, es la que diseña las “pruebas PISA” y tiene alianzas empresariales a partir de las cuales fomenta ciertos colegios, por nombrar una de las más importantes. Hay instituciones muy metidas en la educación, en créditos estudiantiles, como el Banco Santander. Hay empresas creadas en Gran Bretaña que tienen redes internacionales de escuelas privadas de bajo costo, como las “escuelas garage” que en países como Argentina y Uruguay no tienen mucha manifestación, pero sí en el caso peruano, también tienen mucha presencia en la India o algunos países del África subsahariana. O sea que los que las promueven son organismos multilaterales de diversa índole y algunas empresas de las que destacaría Pearson y Banco Santander por ser las que tienen más incidencia en nuestro continente.

¿Qué rol jugaron los gobiernos posneoliberales latinoamericanos en relación con estas reformas?

Aprovechando un momento particular de bonanza, de aumento de las materias primas, implicaron aumentos presupuestales importantes incluyendo en general aumentos de salario docente o inversión en infraestructura.

Pero sea por acción o por omisión, la privatización de la educación, que venía de antes, continuó avanzando.

La excepción es Bolivia porque tuvo una expansión presupuestal y de la matricula muy fuerte, que no redujo la privada, pero ésta no se expandió tanto y se expandió más la pública. El caso chileno es un caso vidrioso porque había sido punta de lanza de las reformas neoliberales desde larga data y ha habido un mínimo retroceso.

En el caso argentino, la privatización tiene una trayectoria histórica muy fuerte, desde el año ’47 se subsidia a la educación privada, entonces tiene un peso muy importante, llegando a más del 50% de la matricula privada en Buenos Aires. Es algo anterior a la “era progresista” pero no ha retrocedido durante ésta de ninguna forma. Después hay casos donde el avance privatizador ha sido incremental pero constante como el caso brasilero en los últimos 20 o 25 años y en la era posneoliberal tampoco se modificó y así podríamos citar otros ejemplos.

Uruguay tiene una doble particularidad. La privatización educativa es menor al promedio del continente y menor a la argentina, pero su incremento tiene un carácter híbrido. Por un lado hay un fomento a la privatización de larga data, que viene de la Constitución del ’34, de la dictadura de Terra, que habilita no el subsidio pero sí la exoneración fiscal de todo tipo de impuestos a la educación privada. En los ’90 se la exonera además de los aportes patronales. Ese es un rasgo histórico del fomento a la educación privada en Uruguay, pero que tiene en los gobiernos progresistas algunos avances importantes. Muchos quedaron en el intento, por ejemplo la idea de pagar salarios por productividad que se quiso hacer de modo experimental con el Plan Pro-Mejora primero y después hubo intentos en 2015 de volver a poner en el convenio salarial los salarios por productividad, ambos frenados por la resistencia sindical.

Pero buena parte de las medidas que implican mayores avances privatizadores en la educación los últimos 20 o 25 años las tomó el gobierno de Mujica. Con la Ley de Presupuesto del año 2010 modifica una vieja ley de mecenazgo y donaciones especiales que podía usarse solamente para donar recursos a la educación pública, habilitando que se done a instituciones privadas. Esto implica que sobre todo a partir de 2011 empiezan a proliferar una serie de escuelas charter, escuelas públicas de gestión privada que cada vez son más y que tienen un gasto por matriculado de más del doble de la educación pública y el monto de las exoneraciones fiscales que financian eso también es bastante mayor que lo que se gasta por matriculado en la educación pública. Ahora hay una propuesta de la fundación Ceres para generar 136 liceos con 80.000 matriculados con esta modalidad, lo cual implicaría básicamente un 26 o 27% de la matricula en secundaria bajo escuelas públicas de gestión privada. Todavía no se instrumentó, hay experiencias más bien piloto que fueron alentadas y promovidas por el gobierno de Mujica en connivencia con grandes grupos de poder económico, que redobló la apuesta en 2013 habilitando que el monto de las donaciones que hacen las empresas sea mayor que lo dispuesto en 2010.

El otro elemento es la ley de participación público-privada de 2011 que habilita que la construcción de escuelas y liceos así como otras cuestiones de infraestructura pública se pueda hacer por constructoras privadas. En el período de Mujica esto se hizo solamente para la construcción de una cárcel. Pero a partir de 2015, en el segundo gobierno de Tabaré Vázquez empezaron a hacerse licitaciones para la construcción de escuelas y liceos bajo esta modalidad publico-privada que de hecho implica construcciones mucho más costosas, como dicen todos los analistas sobre casos donde ya se vienen implementando esta modalidad hace más de 30 años, como en Inglaterra. Pero además implica la tercerización o privatización de todo lo que se llama “servicios conexos”: portería, vigilancia, mantenimiento, limpieza, comedor, todo eso estaría por fuera del sistema educativo y pasa a ser tarea de la empresa constructora que recibe un canon que va desde los 20 a los 35 años. Por otro lado habilita a las empresas constructoras, en algunas licitaciones, a que haya horarios en que esa institución pública sea de gestión mixta, por ejemplo que pueda ponerse clases particulares después del horario escolar, todo pago y rentabilizando valor para el constructor. Por eso en Uruguay hay una suerte de consenso en los sindicatos de la educación en el balance de que los gobiernos progresistas han implicando aumentos en la privatización de la educación de Mujica hasta ahora.

Una cosa llamativa es que en los planes de estas reformas se incluyen muchos temas que de entrada parecen progresistas como la «doble escolaridad» o la «inclusión», así como la idea que se implementan por consenso ¿es así?

Llamar “progresista” a la doble escolaridad o la inclusión es opinable. La idea de “aumentar el tiempo pedagógico” (como dicen los reformadores) no es a priori necesariamente mala o buena. La discusión, desde una perspectiva crítica, radica en qué es lo que vas a hacer en ese tiempo extra. Pero incluso uno podría afirmar que hay muchas formas y lugares donde se aprende y la educación no sólo transita en la institución escuela. Por lo tanto querer centrar toda la esfera formativa de la vida en una sola institución puede ser al menos problemático. Con la inclusión también tiene mucho que ver en qué se los incluye, cómo se los incluye y cuánto tiene esa inclusión de segregación. Muchas veces la inclusión tiene un correlato de formación para pobres, escuela para pobres y para ricos que difícilmente se podrían considerar aceptables desde una perspectiva de izquierda. Esto es parte de los debates que siempre están detrás de la implementación de estas reformas y son parte de sus características.

Sobre lo otro, si bien en general se habilita cierta participación y consenso no en todos lados es así. Quizás el caso más paradigmático es el de México donde la reforma es una reforma manchada de sangre y la criminalización de los docentes y los estudiantes llega hasta el asesinato. Después hay casos donde la participación docente incluso la participación popular en términos más amplios es importante. Por poner un caso uruguayo, el Congreso Educativo del 2008 tuvo participación barrial, docente, estudiantil, sindical, fue muy fuerte la participación. El movimiento popular logró de alguna forma apropiarse del proceso de discusión, después lo que pasó es que no necesariamente se instrumentaron aquellas cosas que se proponían desde el campo popular.

¿Se puede pensar en un modelo de educación alternativo a los que promueven los gobiernos, las empresas y los organismos internacionales? Contame sobre las experiencias que se dieron en Uruguay en ese sentido…

Yo creo que sí se puede y que además es fundamental. En la década del ’60 si uno se ponía como defensor a ultranza de la educación pública y se definía de izquierda era visto a lo sumo como un socialdemócrata. Esto era porque se consideraba que la escuela pública en última instancia era una institución reproductora de las contradicciones sistémicas del capitalismo. Pero lo cierto es que con los avances mercantilizadores y privatizadores de los ’80 hasta hoy y más en América Latina donde la privatización de la educación es la más alta del mundo, la defensa a ultranza de la educación pública ha sido una seña identitaria de una política de izquierda y está bien que sea así. Pero desde una perspectiva transformadora habría que decir que uno tiene que defender la educación pública y al mismo tiempo ir transformándola. Y ahí el asunto es ¿cómo se transforma?

El movimiento pedagógico uruguayo de los ’40 fue un movimiento más reformista que revolucionario pero tiene algunos aspectos metodológicos que son bien interesantes, para pensar desde el campo popular un proyecto de reforma educativa.

En primer lugar, estaba liderado por las y los docentes. Ahí hay personajes múltiples como Julio Castro, Reina Reyes, Jesualdo Sosa y podríamos citar otros.

El segundo elemento es que tenían una consigna que ya venía de los ’30, que es muy fuerte y es común a toda la pedagogía crítica que es “la escuela sola no puede”. O sea, las instituciones escolares no pueden de ninguna forma resolver solas los problemas del mundo ni de la humanidad pero ni siquiera los problemas educativos. Por lo tanto es necesario un enfoque que vaya más allá de lo educativo reducido al proceso de enseñanza-aprendizaje dentro del aula. Los docentes que lideraban este proceso también generaban teoría pedagógica general, tomando distintas experiencias, corrientes de distinto tipo, algunos influenciados por el marxismo y la mayoría por el “escolanovismo” pero todos con un pensamiento propio, situado en el Uruguay.

El tercer elemento destacable es que generaron algunos movimientos como las “misiones pedagógicas” que trascendían a los docentes e involucraban a la comunidad y el estudiantado. Un movimiento que mostraba en los hechos que “la escuela sola no puede”, ampliando los sujetos en lucha para disputar el sentido de la educación y la sociedad en que se vive.

Por último, fueron punta de lanza de la denuncia de las condiciones de vida de los “pueblos de ratas”, de los rancheríos, Frente a un Uruguay que se creía la tacita de plata, ellos entraron a mostrar que ese Uruguay era meramente discursivo, existían contingentes muy importantes de la población viviendo en condiciones absolutamente deplorables. Y ese movimiento pedagógico, no es el único actor pero sí uno muy importante, que pelea por la reforma agraria, que pone en la agenda la reforma agraria.

Tal vez los temas no tengan que ser hoy todos los mismos, aunque muchos siguen vigentes, pero son esos cuatro elementos los que se pueden tomar para decir desde el punto de vista metodológico qué cosas deberíamos pensar para impulsar un movimiento pedagógico en la actualidad.

Fuente de la Entrevista:

https://laizquierdadiario.com/Quieren-hacer-del-trabajo-docente-algo-facilmente-sustituible

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Manual sobre renovación sindical en Educación disponible ahora en español

Por Internacional de la Educación

Con los vientos de cambio que están soplando en el mundo sindical, un nuevo manual sobre renovación y estrategias sindicales puede ayudar a los sindicatos de educación a reforzar sus posiciones en tiempos de importantes cambios políticos en América Latina.

La última publicación de Howard Stevenson y Nina Bascia con la Internacional de la Educación (IE), “Sindicalizar al personal docente: desarrollar la fuerza de la profesión”, ya está disponible en español. El estudio examina los retos a los que se enfrenta el personal docente y sus organizaciones en el mundo actual, a través de siete estudios de casos de siete países distintos.

El estudio analiza cuestiones como la presión para mejorar las puntuaciones de las evaluaciones; las fuerzas de la competencia económica global que están provocando una “carrera por el último puesto” en lo que respecta a las condiciones de trabajo del personal docente; el hecho que los docentes tengan que soportar unas cargas de trabajo cada vez mayores; y el constante debilitamiento del criterio profesional de los docentes. Stevenson y Bascia han llegado a la conclusión de que los políticos son los que pretenden, cada vez más, decir a los docentes lo que tienen que enseñar, cómo lo tienen que enseñar y como se evalúa lo enseñado.

Ante estas circunstancias, los sindicatos de docentes de todo el mundo están definiendo nuevas estrategias que permitan empoderar a sus miembros y hacer que la voz de la profesión docente se escuche en el proceso de búsqueda de una educación de calidad para todos.

El caso de Argentina

La Federación Nacional de Docentes Universitarios CONADU, miembro de la IE en Argentina, va a incorporar y difundir el estudio en el marco de una serie de cursos de formación para sus afiliados. El primero de ellos tendrá lugar el 23 de agosto en la Universidad de La Rioja, un hito importante de renovación sindical en el país, gracias a que SINDULAR, afiliado de CONADU, ha conseguido sortear una importante crisis interna y reformar su estructura de manera transparente y democrática.

Carlos De Feo (Secretario General de CONADU) hablará de las principales conclusiones del informe junto con Yamile Socolovsky (Secretaria de Relaciones Internacionales de CONADU y Directora del Instituto de Investigación del sindicato), en una mesa redonda titulada “Challenges faced by trade unions in higher education” (Retos que afrontan los sindicatos en la educación superior). Socolovsky y De Feo harán hincapié en la importancia de la investigación que conecta los diferentes niveles dentro del sindicato, desde la base hasta la cúpula, y de los sindicatos a escala nacional e internacional, en sus esfuerzos estratégicos y su labor de sindicalización.

“Creemos que para nuestros afiliados y afiliadas es importante darse cuenta de que hay una práctica común que incluye retos en contextos diversos, complejos y cambiantes, por todo el mundo. Esta perspectiva internacional fortalecerá nuestra propia identidad y nuestras estrategias”, comenta Sokolovsky al hablar de la publicación de la versión española del estudio.

El programa de formación también se llevará a cabo en otras provincias del país, como San Juan, San Luis, Florencio Varela, Avellaneda y Quilmes.

Para descargar la versión en español del estudio “Sindicalizar al personal docente: desarrollar la fuerza de la profesión”, hagan clic aquí.

Fuente: https://www.ei-ie.org/spa/detail/15324/manual-sobre-renovaci%C3%B3n-sindical-disponible-ahora-en-espa%C3%B1ol

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