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Embarazos forzados de niñas y jóvenes, una epidemia normalizada en Guatemala

Los embarazos forzados de niñas y adolescentes se han convertido en una epidemia normalizada que no se ha logrado combatir en Guatemala, pese a ser uno de los países de América Latina con las tasas más altas de fecundidad en adolescentes.

Según datos del Observatorio en Salud Sexual y Reproductiva de Guatemala (OSAR), solo en los dos primeros meses de 2022, 12.379 niñas y adolescentes de entre 10 y 19 años dieron a luz en todo el país. Una cifra que se elevó hasta 72.077 en 2021.

«La situación de embarazos forzados en Guatemala es escalofriante, especialmente en el caso de las niñas. No lo digo yo, lo dicen las estadísticas. Las políticas no están del lado de las niñas, así que este flagelo trunca sus proyectos de vida y no hay acciones concretas de parte del Estado para frenarlo. Más bien, esto se vuelve un factor fabricador de pobreza», explica a Efe el oficial senior de programas de Planned Parenthood Global en Guatemala, José Ros Silvestre.

El especialista señala que la mayoría de estos embarazos, empezando por los de las niñas de 10 a 14 años, son producto de la violencia sexual que sufren, especialmente dentro de su hogar o comunidad. «En 2018 hubo 5.680 denuncias de violencia sexual contra niñas y adolescentes, 16 por día, y en 2019 se registraron 7.365 niñas que se habían convertido en madres», agrega.

Mirna Montenegro, directora de OSAR, cree que los casos de violencia sexual pueden ser mucho mayores. «Los promedios a veces esconden las realidades de algunos departamentos. Al año hay 2.400 nacimientos de niñas o niños cuyas madres tienen menos de 14 años. Y la covid, la violencia, el hacinamiento, menos acceso a servicios y menos acceso a denuncias también ha hecho que la violencia sexual se incremente», subraya.

«EPIDEMIA» DE EMBARAZOS FORZADOS

Montenegro sostiene que los embarazos forzados se han convertido en una «epidemia» tal y como refleja el «incremento desmedido» que ha habido en los 14 años que OSAR lleva realizando estos monitoreos en el país.

Solo entre 2015 y 2019, las cifras de embarazos en niñas y adolescentes aumentaron de 103.937 a 114.858, según datos recopilados por la organización.

Estos embarazos, explica Ros Silvestre, se registran «tanto en niñas que viven en áreas urbanas como en las áreas rurales». «Esto es porque hay patrones culturales, sociales, religiosos y económicos que hacen que se perpetúe la violencia hacia ellas», agrega.

Ambos especialistas coinciden en que, pese a avances legislativos y normativos, los problemas se centran en el nulo acceso a la Justicia y a la educación sexual integral.

«Aún es un tabú hablar sobre la sexualidad con los niños, las niñas y las adolescentes. Hay comunidades en donde es considerado pecado hablar sobre sexualidad, entonces no conocen su cuerpo, cómo funciona y tampoco tienen herramientas para reconocer si alguien está vulnerando sus derechos», dice el representante de Planned Parenthood Global.

Además, «los servicios integrales de salud sexual y reproductiva están ausentes sobre todo en el área rural. Estas barreras de acceso a la educación y a la salud forman un caldo de cultivo peligrosísimo para la violencia contra las mujeres y las niñas y limitan su posibilidad de acceder a una reparación digna», agrega.

Según un estudio del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), las niñas y mujeres son aún más vulnerables a la violencia sexual cuando los espacios en los que viven están controlados y disputados por las pandillas y el narcotráfico.

Con respecto al acceso a la Justicia, la directora de OSAR asegura que solo el 2 % de los casos llegan a una sentencia: «Y no es que todo sea condenatorio, muchas veces los dejan en libertad». Con el otro 98 % «es como si no pasara nada. No cambia la vida de la niña, no hay un proceso de investigación», añade.

EL CASO DE FÁTIMA

La normalización de la violencia y los obstáculos antes expuestos han impedido que supervivientes como Fátima, violada por un profesor cercano a su familia cuando tenía 12 años y obligada a tener al bebé, puedan conseguir justicia y acceder a un aborto para no convertirse en madres cuando aún son niñas.

«Ha sido un proceso muy difícil porque el sistema de justicia está muy sucio. Desde que puse la denuncia siempre tuve una respuesta negativa porque ¿cómo una niña iba a denunciar a su profesor? Todo surge de la desconfianza que se le tiene a la palabra de una niña porque es niña», explica a Efe Fátima.

La joven, que gracias al apoyo de organizaciones no gubernamentales ha logrado rehacer su vida, vivió en carne propia la discriminación que existe hacia las menores que quedan embarazadas, pese a ser víctimas de violencia sexual.

«Cuando utilicé el servicio público de salud (los médicos) me hicieron comentarios que atentaban contra mi integridad. En el sistema educativo también sufrí bullying. Yo no podía estudiar porque no estaba casada y porque iba a ser madre», recuerda.

Rememora que, además, dentro de la Fiscalía se perdía la evidencia que llevaban sus abogadas y que la información se filtraba para favorecer al agresor, que nunca fue detenido.

«Fue un proceso que marcó mi vida porque a una corta edad tuve que ser madre y no lo pedí. Me costó mucho comprender que (el bebé) era parte de mí, a pesar de que no lo quise desde un inicio. No me gustaría que más niñas pasen por esto y por eso he decidido alzar la voz», afirma.

Su caso, que es el de miles de niñas que son abusadas y quedan embarazadas cada año en la región, ha llevado a Guatemala ante el Comité de Derechos Humanos de la ONU.

LOS SUEÑOS SE ROMPEN

Los embarazos forzados «rompen los sueños» de las niñas y adolescentes y muchas veces hasta sus vidas, remarca Fátima.

«Muchas de estas niñas y adolescentes que quedan embarazadas toman la decisión de suicidarse, pero no es una decisión individual, es colectiva porque implica ir cerrándoles la posibilidad de llevar a cabo sus proyectos de vida», confirma Ana Lucía Ramazzini, investigadora de Flacso Guatemala, que lideró un estudio denominado «Vidas silenciadas».

Entre los hallazgos más importantes del informe se encuentra el «continuum de violencia» que sufren las mujeres a lo largo de su vida. «La mayoría de ellas vivió violencia con las parejas con las que estuvieron involucradas o con familiares cercanos. Las violan desde los cuñados hasta los padrastros», dice Ramazzini.

No obstante, la ausencia de datos concretos sobre los suicidios de embarazadas ha impedido que se conozca el panorama real. «La última información que tuvimos del Ministerio de Salud es que entre 2020 y 2021 hubo 14 casos de muerte materna por suicidio, la misma cantidad de casos que nosotras documentamos en una década, entre 2009 y 2019. Esto sigue dándose y no podemos dejar de verlo», agrega la investigadora.

Según el estudio, los embarazos derivados de la violencia sexual provocan ansiedad, desesperación, y la sensación de estar «encerradas sin salida», ante la imposibilidad de poder acceder al aborto.

En Guatemala, la ley permite una interrupción del embarazo por razones terapéuticas, para evitar un riesgo a la vida de la mujer. A pesar de eso, las niñas siguen arriesgando sus vidas con embarazos forzados, sin una respuesta adecuada del Estado.

UN FUTURO DE RESISTENCIA

Montenegro cree que la situación no va a cambiar en los próximos años ya que, asegura, «los antiderechos han encontrado tierra fértil» en Guatemala.

Un ejemplo de ello, dice, es su reciente declaración como «Capital Iberoamericana Provida» dentro de un congreso cristiano en el que participó el presidente Alejandro Giammattei, y la aprobación de una polémica ley denominada «Para la Protección de la Vida y la Familia», que días después fue archivada por el Congreso. La normativa buscaba combatir el aborto y prohibir el matrimonio igualitario.

Pero, aunque ya está archivada, José Ros cree que la sociedad civil «tendrá que mantener la atención y la vigilancia para evitar cualquier retroceso o intento de reactivar» la iniciativa.

«Ahora lo que nos toca es resistir. No habrá avances, pero tampoco retrocesos. Tenemos que seguir con los marcos legales que tenemos y siempre señalando el tema de la prevención de la violencia y de las situaciones que viven las niñas que ponen en riesgo su vida», concluye Montenegro.

(Este reportaje forma parte de una serie que cuenta con el apoyo de Planned Parenthood Global. El contenido editorial de Efe es independiente de las posiciones de esta organización.)

Fuente: https://www.swissinfo.ch/spa/guatemala-embarazos–reportaje-_embarazos-forzados-de-ni%C3%B1as-y-j%C3%B3venes–una-epidemia-normalizada-en-guatemala/47548934

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Mundo: El asombroso número de embarazos no deseados revela un fracaso en el respeto de los derechos de las mujeres

Casi la mitad de todos los embarazos son no deseados. La falta de métodos anticonceptivos disponibles, las guerras y otras crisis solo agravan la situación, según un nuevo informe publicado el miércoles por la agencia de salud sexual y reproductiva de la ONU.

Cerca de la mitad de todos los embarazos, que suman 121 millones cada año en todo el mundo, no son deseados. Esta es la asombrosa conclusión del último informe del Fondo de las Naciones Unidas para la Población (UNFPA).

“Este informe es una llamada de atención”, dijo la directora ejecutiva del Fondo, Natalia Kanem, y agregó que esa cifra “representa un fracaso mundial en la defensa de los derechos humanos básicos de las mujeres y las niñas”.

El innovador Informe Visibilizar lo Invisible: La necesidad de actuar para poner fin a la crisis desatendida de los embarazos no intencionales, advierte que esta crisis de derechos humanos tiene “profundas consecuencias para las sociedades, las mujeres y las niñas y la salud mundial”.

La falta de información o de conciencia sobre la salud sexual y reproductiva dio lugar a un embarazo no deseado de una adolescente de 18 años en Timor-Leste.

Fondo de Población/Ruth Carr
La falta de información o de conciencia sobre la salud sexual y reproductiva dio lugar a un embarazo no deseado de una adolescente de 18 años en Timor-Leste.

“No hay opción en absoluto”

Más del 60% de los embarazos no deseados terminan en aborto y se estima que el 45% de todos los abortos son inseguros, lo que representa entre el 5% y el 13% de todas las muertes maternas registradas, según el Informe del Estado de la Población Mundial 2022 del UNFPA.

Esto también está teniendo un gran impacto en la capacidad del planeta para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible en su fecha límite que es 2030.

Además, se espera que la guerra en Ucrania, y otros conflictos crisis impulsen un aumento de los embarazos no deseados, ya que se interrumpe el acceso a la anticoncepción y aumenta la violencia sexual.

“Para las mujeres afectadas, la opción reproductiva que más cambia la vida ya sea quedar embarazada o no, no es una opción”, dijo la responsable del UNFPA.

Empujada al embarazo

El informe destacó que la desigualdad de género y el estancamiento del desarrollo generan altas tasas de embarazos no deseados.

Por ejemplo, se estima que 257 millones de mujeres en todo el mundo que desean evitar el embarazo no utilizan métodos anticonceptivos modernos y seguros.

Y donde hay datos disponibles, casi una cuarta parte de todas las mujeres se sienten incapaces de decir que no a las demandas de sexo.

Una variedad de factores también contribuye a los embarazos no deseados, incluida la falta de atención médica sexual y reproductiva; los anticonceptivos que no se adaptan a las circunstancias de la mujer; las normas dañinas que rodean a las mujeres y controlan sus propios cuerpos; la violencia sexual y la coerción reproductiva; así como el sentimiento de vergüenza en los servicios de salud.

Todo esto refleja la presión que las sociedades ejercen sobre las mujeres y las niñas para que se conviertan en madres.

Pie de foto: La falta de información o conciencia sobre la salud sexual y reproductiva provocó un embarazo no deseado de una joven de 18 años en Timor Leste.

En los días, semanas y meses posteriores al inicio de una crisis, los servicios de protección y salud sexual y reproductiva salvan vidas, directora del UNFPA

Los embarazos aumentan durante las crisis

Las crisis y los conflictos privan a las mujeres de su autonomía en todos los niveles, lo que aumenta drásticamente el riesgo de embarazos no deseados.

Las mujeres a menudo pierden el acceso a los anticonceptivos y la violencia sexual aumenta, según el informe, que cita estudios que muestran que más del 20% de las mujeres y niñas refugiadas se enfrentarán a la violencia sexual.

“Si tuvieras 15 minutos para salir de tu casa, ¿qué te llevarías? ¿Tomarías tu pasaporte? ¿Comida? ¿Recordarías tu método anticonceptivo? preguntó la doctora Kanem.

Lo cierto es que, después de que comienza una crisis, los servicios de salud y protección sexual y reproductiva salvan vidas.

“En los días, semanas y meses posteriores al inicio de una crisis, los servicios de protección y salud sexual y reproductiva salvan vidas, protegen a mujeres y niñas de cualquier daño, y previenen embarazos no deseados. Son tan vitales como la comida, el agua y el refugio”, observó la directora del Fondo.

Una mujer ucraniana en estado avanzado de su embarazo que salió de Odessa con su madre y su hijo recibe un kit de dignidad en un centro de acogida en la capital de Moldova, Chișinău.

Fondo de Población Moldovia/Adriana Bîzgu Edit
Una mujer ucraniana en estado avanzado de su embarazo que salió de Odessa con su madre y su hijo recibe un kit de dignidad en un centro de acogida en la capital de Moldova, Chișinău.

Actuar contra la desigualdad

El informe muestra con qué facilidad los derechos más fundamentales de las mujeres y las niñas quedan relegados a un segundo plano tanto en tiempos de paz como durante la guerra.

El informe hace un llamado a los tomadores de decisiones y a los encargados de los sistemas de salud para que ayuden a prevenir embarazos no deseados al mejorar la accesibilidad, la aceptabilidad y las opciones anticonceptivas, al tiempo que insta políticos y líderes comunitarios a empoderar a las mujeres y las niñas para que tomen decisiones afirmativas sobre sexo, anticoncepción y maternidad.

Si se hace esto, las mujeres y las niñas podrán contribuir plenamente a la sociedad con las herramientas, la información y el poder para decidir por sí mismas si tener hijos o no.

“Al poner el poder de tomar esta decisión tan fundamental directamente en manos de las mujeres y las niñas, las sociedades pueden garantizar que la maternidad sea una aspiración y no una inevitabilidad”, concluyó la directora del Fondo de Población.

Efecto Ucrania

También es probable que la guerra en Ucrania provoque un aumento de los embarazos no deseados, dijo Monica Ferro el miércoles, portavoz del Fondo, a los periodistas en Ginebra.

Prevemos que 265.000 mujeres están embarazadas en Ucrania y en los próximos tres meses, 80.000 personas darán a luz. Por lo tanto, si no hay un centro de salud para dar a luz, para tener un parto con personal calificado, o si no tienen acceso a la atención médica, esto aumentará, como sabemos, la mortalidad y la morbilidad materna”.

A principios de este mes, un hospital de maternidad fue blanco de bombardeos en la ciudad costera afectada de Mariupol. Como parte de la respuesta de la ONU, el UNFPA ha enviado medicamentos esenciales y servicios, y suministros de salud sexual y reproductiva que salvan vidas a Ucrania.

Fuente: https://news.un.org/es/story/2022/03/1506472

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Mundo: Una nueva guía sobre atención del aborto busca evitar la muerte de 39.000 mujeres cada año

Los decesos son el saldo de los más de 25 millones de abortos inseguros que se practican en el mundo. La mayoría de los decesos ocurren en países de renta baja, 60% en África y 30% en Asia. La agencia sanitaria mundial destaca la importancia del acceso a un aborto seguro y publica las directrices para brindar ese tipo de atención vital.

Unas 39.000 mujeres mueren cada año como resultado de los más de dos millones de abortos inseguros que se practican en el mundo, la mayoría de ellos en países de renta baja, informó este miércoles la Organización Mundial de la Salud (OMS) al presentar una nueva guía, que tiene el objetivo de ayudar a los países a ofrecer ese tipo de atención crucial a las mujeres y las niñas.

El organismo de la ONU asistirá a los Estados interesados en la implementación de las directrices y el fortalecimiento de las políticas y programas nacionales de anticoncepción, planificación familiar y servicios de interrupción del embarazo.

La OMS afirmó que el acceso al aborto seguro es fundamental para proteger la salud de las mujeres y las niñas y para prevenir miles de muertes evitables.

“Casi todas las muertes y lesiones que resultan del aborto inseguro son totalmente prevenibles. Por eso recomendamos que las mujeres y las niñas puedan acceder a los servicios de aborto y planificación familiar cuando los necesiten”, dijo el director interino de Salud e Investigación Sexual y Reproductiva de la Organización.

Craig Lissner añadió que obtener un aborto seguro “es una parte crucial de la atención sanitaria”.

Procedimiento sencillo y seguro

La OMS explicó que el aborto es un procedimiento sencillo y seguro cuando se realiza con un método adecuado para la etapa del embarazo y por una persona con las información y capacitación necesarias.

Lamentablemente, sólo la mitad de las intervenciones de este tipo practicadas en el planeta cumplen con estas condiciones, provocando así decenas de miles de muertes y millones de mujeres hospitalizadas por complicaciones.

Los datos desagregados de la OMS muestran que más del 60% de los fallecimientos sucede en África y el 30% en Asia, siempre entre las mujeres más vulnerables.

Con el fin de acabar con los procedimientos inseguros, las nuevas directrices incluyen la práctica clínica, la prestación de servicios de salud y las intervenciones legales y políticas para respaldar la atención del aborto de calidad.

Manifestaciones  a favor de la legalización del aborto en Buenos Aires, Argentina
Unsplash/Matias Hernan Becerrica
Manifestaciones a favor de la legalización del aborto en Buenos Aires, Argentina

Servicios centrados en la persona que los solicita

Las más de 50 recomendaciones que componen la guía se basan en evidencia científica y centran los servicios en las necesidades de la persona atendida.

Entre esas pautas destacan las intervenciones simples a nivel de atención primaria que mejoran la calidad de la atención del aborto, como son garantizar el acceso a las píldoras abortivas y ofrecer información precisa sobre la atención disponible para las mujeres que la requieran.

Incluyen también recomendaciones para el uso de la telemedicina, una herramienta que ha ayudado a respaldar el acceso a los servicios de aborto y planificación familiar durante la pandemia de COVID-19.

Obstáculos políticos y legales

Junto con las directrices clínicas y de prestación de servicios, la OMS recomienda eliminar las barreras políticas médicamente innecesarias para el aborto seguro, como la penalización, los tiempos de espera obligatorios, el requisito de que terceras personas o instituciones den la aprobación, y los límites de tiempo para realizar un aborto.

El organismo de la ONU argumentó que dichas barreras causan retrasos críticos en el acceso al tratamiento y colocan a las mujeres y niñas en mayor riesgo de sufrir abortos inseguros, estigmatización y complicaciones de salud, además de que aumentan las interrupciones en la educación y en la capacidad para trabajar.

Aunque la mayoría de los países permiten la interrupción voluntaria del embarazo en circunstancias específicas, unas 20 naciones lo consideran ilegal en cualquier caso. Asimismo, más del 75% de los países imponen sanciones legales que pueden incluir largas penas de prisión o multas muy altas para las personas que se someten o ayuden con el procedimiento.

Según la responsable de la Unidad de Prevención del Aborto Inseguro de la OMS, Bela Ganatra, es imperativo que este procedimiento sea médicamente seguro, pero también debe respetar las decisiones y necesidades de las mujeres y las niñas y garantizar que se les trate con dignidad y sin estigmas ni juicios.

“Nadie debe estar expuesto a abusos o daños como ser denunciado a la policía o encarcelado por haber buscado o proporcionado servicios de aborto”, subrayó Ganatra.

Restringir el acceso no reduce el número de abortos

La experta enfatizó que las pruebas han mostrado que restringir el acceso no reduce el número de abortos que se practican sino al contrario, cuando existen restricciones, las mujeres y niñas recurren a procedimientos inseguros con resultados a menudo trágicos.

Especificó que en los países con más restricciones, sólo el 25% de los abortos se practica en condiciones seguras, mientras que en los lugares donde el procedimiento es legal, los abortos seguros alcanzan el 90%.

“La evidencia es clara: si desea prevenir embarazos no deseados y abortos inseguros, se debe ofrecer a las mujeres y niñas un paquete integral de educación sexual, información y servicios precisos de planificación familiar y acceso a servicios de aborto de calidad”, puntualizó Ganatra.

Fuente: https://news.un.org/es/story/2022/03/1505312

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Opinión | Tres temas ausentes en la educación sexual básica

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Hay todo un temario con cuestionamientos de salud vitales más allá de la prevención del embarazo.

La educación sexual en las escuelas siempre ha sido un tema sensible, este año ha sido especialmente rocoso con debates como el del pin parental y los derechos reproductivos. Las grandes conversaciones acerca del tema han sido sobre quién, cuándo y cómo tiene el derecho de instruir a niños y jóvenes sobre la sexualidad. Se ha hablado mucho de la facultad de enseñar este rubro pero son pocos los espacios en los que se discuten los contenidos que se están enseñando.

El eterno protagonista del curriículum es la prevención del embarazo; en un país como México con altísimos niveles de abuso sexual infantil y una epidemia de embarazos adolescentes no podía ser de otra manera. Son estos los asuntos que deben ser el centro de cualquier currículum de educación sexual, pero no por esto deben de ser los únicos. La salud sexual de niños, jóvenes y adultos depende de un conocimiento más pleno de contenidos relacionados, tales como:

El virus del papiloma humano

Si hablamos de enfermedades venéreas, el SIDA es la que normalmente se lleva la mayoría de los incisos en el currículum educativo. Si bien se cataloga como una de las de índice de mortalidad más alto, no es la más común. El Centro de documentación del Instituto Nacional de las Mujeres calcula que aproximadamente el 80 % de la población mexicana está infectada con el virus del papiloma humano. Hay más de 100 tipos diferentes y la mayoría de estos no generan problemas de salud, pero existen algunos que pueden causar verrugas en el área genital o cáncer de cuello uterino.

Ambos efectos de los tipos de virus son tratables, pero las cifras de mujeres con cáncer consecuente del virus del papiloma humano son alarmantes. A partir del 2018 el cáncer cervicouterino se catalogó en México como la cuarta causa de muerte de mujeres por cáncer a nivel nacional. Un número indignante tomando en cuenta que este tipo de cáncer es uno de los más fáciles de prevenir.

Además del uso del condón y del tratamiento de lesiones pre cancerosas, el cáncer de cuello uterino puede ser prevenido con una vacuna contra el virus del papiloma humano. Esta medida se recomienda especialmente para adolescentes, tanto mujeres como hombres, que también están expuestos al desarrollo de otros tipos de cáncer tras la infección.

Cáncer de mama

Contamos con todo un mes para la visibilización y concientización sobre el cáncer de mama. En octubre, internet se pinta de rosa, los equipos de fútbol mexicano sacan playeras de edición especial para conmemorar la fecha y destinar los fondos a la lucha contra este tipo de cáncer. Pero habría que preguntarse, ¿sería necesario todo este esfuerzo si tuviéramos una mejor educación para prevenirlo desde la escuela?

El cáncer de mama es el tumor maligno más frecuente en las mujeres a nivel mundial y la primera causa de muerte por cáncer para las mujeres en México. La detección temprana es clave para establecer un diagnóstico favorable con alta tasa de supervivencia. El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) emitió recomendaciones generales para prevenir el cáncer de mama. Entre ellas se cuentan una dieta balanceada, ejercicio diario no menor a 30 minutos, disminuir azúcares y grasas, evitar el cigarro y el alcohol, autoexploración mensual y acudir al médico para mastografías periódicas. Estas deben ser cada dos años a partir de los 40 años (o 34 si se tienen antecedentes familiares de cñancer). Si se tiene de 50 en adelante, la frecuencia debe ser anual.

Climaterio y menopausia

Si nos referimos a educación sexual, se nos vienen a la mente temas relevantes para el presente de jóvenes y adolescentes, pero la salud sexual es un aspecto que afecta diferentes etapas de la vida humana, no solamente la juvenil. Para cuando llega la edad de una siguiente fase en el desarrollo sexual de las mujeres son pocas las que están preparadas, y puede decirse lo mismo del aparato social alrededor de ellas.

El climaterio y la menopausia representan un momento importante en las fases de desarrollo sexual de las mujeres y personas menstruantes. La menopausia se define como el cese de la menstruación y la capacidad reproductiva de mujeres y personas menstruantes, sostiene la Asociación Argentina para el estudio del climaterio. Al rango de años antes de este cambio se le conoce como premenopausia, mientras que el climaterio se refiere al período de transición en la vida de las personas menstruantes, e incluye el antes y el después de la menopausia. Las anteriores fases se distinguen por alteraciones hormonales y en el ciclo, así como en la salud física y mental de pacientes que pasan por este proceso; tales como bochornos, depresión u osteoporosis. No hay una edad exacta para entrar a la menopausia que aplique en todos los casos, pero tiende a presentarse entre los 40 y 50 años de edad. Es recomendable consultar a un médico especialista ante la sospecha de premenopausia o menopausia. Para garantizar una transición digna, a nivel personal y las políticas más adecuadas para asegurar el futuro laboral de quienes experimentan la menopausia y sus fases, la educación formal dentro de un programa escolar es clave.

La educación sexual está ligada a muchos temas de dignidad humana y derechos básicos de salud. Es necesario un programa completo que acompañe a niños, adolescentes y adultos en las diferentes etapas de su vida, brindando información crucial. Enseñanzas como la forma de identificar y prevenir el abuso sexual infantil, los embarazos juveniles, las enfermedades venereas. La concientización sobre los periodos y sus fases, cómo gestionarlos en favor de la salud integral y no de la invisibilización de los cuerpos menstruantes. Nociones básicas como la definición y aplicación del consenso, de los derechos reproductivos, de la paternidad responsable, entre otros.

Todos los aspectos que cubre un currículum de educación sexual completo y efectivo no pueden acumularse en un par de clases entre quinto de primaria y tercero de secundaria, la necesidad de una instancia seria de instrucción del rubro se requiere con prontitud, bajo el marco de conmemoraciones como el mes de la sensibilización sobre el cáncer de mama (octubre) y el Día mundial de la Menopausia (18 de octubre). Esperemos que en un futuro próximo se incorpore a los programas escolares una intención didáctica que reduzca las necesidades de asignar días o meses a problemas de salud totalmente prevenibles.

¿Qué piensas del currículum de educación sexual en tu escuelas? ¿Piensas que es suficiente? ¿Que debería incluir los temas anteriores o algún otro? Cuéntanos en los comentarios.

Fuente e Imagen: https://observatorio.tec.mx/edu-news/faltantes-educacion-sexual

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China dice que restringe los abortos para promover la igualdad de género. Los expertos se muestran escépticos

Durante décadas, las autoridades en China impusieron estrictos límites a la cantidad de hijos que las familias podían tener, obligando a millones de mujeres a abortar embarazos considerados ilegales por el Estado.

Esa dura práctica se ha vuelto menos común desde que China relajó su política de hijo único en 2015. Por eso, cuando esta semana surgió la noticia de que el gobierno quiere reducir los abortos por «razones no médicas», la reacción fue rápida y furiosa.

Las redes sociales chinas se inundaron de comentarios de mujeres hartas de lo que consideran esfuerzos del gobierno por controlar sus cuerpos, describiendo el aparente giro de 180 grados sobre el aborto como un intento desesperado de impulsar las menguantes tasas de natalidad del país.

«El cuerpo de la mujer se ha convertido en una herramienta», decía uno de los principales comentarios en Weibo, la plataforma china similar a Twitter. «Cuando (el Estado) quiere que tengas un hijo, debes hacerlo a toda costa. Cuando (el Estado) no lo quiere, no se te permite dar a luz ni siquiera con riesgo de muerte».

El plan del gobierno para la igualdad de género

La política sobre el aborto se incluyó en un amplio plan del gobierno para promover los derechos de la mujer durante la próxima década, que abarca ámbitos que van desde la educación hasta el empleo, y que los medios de comunicación estatales presumieron que mejoraría la igualdad de género «hasta un nivel superior en la nueva era».

La medida sobre el aborto forma parte de una sección más amplia sobre salud reproductiva que incluye disposiciones como el aumento de la educación sanitaria y el acceso a medios anticonceptivos. Sin embargo, más allá de esa breve frase, no se proporcionó ningún otro detalle, como la forma en que se aplicaría la restricción del aborto o los criterios que tendrían que cumplir las mujeres.

Pero el hecho de que se mencione en el amplio plan de 10 años es preocupante, y podría formar parte de la campaña del gobierno para aumentar la tasa de natalidad, ya que se enfrenta a una creciente crisis demográfica, dijo Leta Hong Fincher, autora de «Betraying Big Brother: The Feminist Awakening in China».

El aborto, en la política nacional

«Esto, por supuesto, no es una alerta roja de prohibición del aborto en todo el país, que crearía un enorme revuelo», dijo. «Pero, de hecho, es más obvio de lo que había previsto porque viene en forma de este documento emitido por el Consejo de Estado, un documento de política nacional».

A pesar de su brevedad, la línea es «una declaración de la política del gobierno central, y envía una señal a todos esos cuadros de nivel local (del Partido Comunista) de que ésta es una prioridad del gobierno central», añadió.

El aborto se ha practicado ampliamente en China durante décadas. Bajo la política del hijo único, introducida en 1979, millones de mujeres al año se veían obligadas a interrumpir embarazos «ilegales». La tradicional preferencia por los hijos varones también condujo a un aumento de los abortos selectivos por sexo, ya que las familias solían optar por abortar a las niñas. Esto ha contribuido a que la proporción entre los sexos esté muy sesgada: el censo de 2021 reveló que había casi 35 millones más de hombres que de mujeres en este país de 1.400 millones de habitantes.

Cambios en las restricciones para las familias

Sin embargo, en la última década, China cambió completamente de rumbo cuando empezó a tener en cuenta las consecuencias de su política de hijo único: un rápido envejecimiento de la población y una reducción de la mano de obra que amenazan el crecimiento económico del país.

Para elevar la caída de la tasa de fertilidad, China promulgó la política de dos hijos en 2016, y luego la de tres hijos en agosto de este año. El gobierno también lanzó una agresiva campaña de propaganda instando a las mujeres a tener más hijos, y algunas autoridades locales incluso ofrecen incentivos financieros para las familias.

Hasta ahora, sus esfuerzos han tenido una respuesta tibia en el mejor de los casos. Muchas mujeres, que ahora disfrutan de mayores oportunidades educativas y profesionales que en el pasado, son reacias a ampliar sus familias, especialmente con otros obstáculos como el alto costo de la vida y las arraigadas normas de género que relegan el cuidado de los hijos a las madres.

Los abortos también han seguido siendo elevados, incluso después de que se flexibilizara la política del hijo único y de que el gobierno penalizara las interrupciones por selección de sexo. Entre 2014 y 2018 se realizaron una media de 9,7 millones de interrupciones al año, según Reuters, citando datos de la Comisión Nacional de Salud de China.

En respuesta, las autoridades han expresado cada vez más su preocupación por los abortos, y los medios de comunicación estatales advirtieron que eran «muy perjudiciales» y que podían causar «graves trastornos psicológicos» en las mujeres solteras. En 2018, la provincia de Jiangxi prohibió los abortos por razones no médicas después de la semana 14, uniéndose a varias otras provincias con normas similares en vigor.

«Toda la historia de la planificación de la población en China (…) ha sido increíblemente abusiva y coercitiva», dijo Hong Fincher. «Así que creo que hay muchas razones para estar muy preocupados por este completo giro de 180 grados en el énfasis que viene del gobierno central, diciendo que ahora, China necesita reducir el número de abortos no médicos».

Muy pronto para medir el impacto

Algunos expertos, sin embargo, advierten que es demasiado pronto para decir cuál será el impacto – especialmente porque no es la primera vez que el gobierno ha señalado tales intenciones. El último plan decenal para el desarrollo de la mujer, publicado en 2011, también pretendía «reducir la tasa de abortos» y de embarazos no deseados en general, mejorando la educación sexual y el acceso a la anticoncepción.

China natalidad Xinjiang

Tras décadas bajo una política de hijo único, el gobierno de China permite ahora tener hasta tres niños por familia. (Crédito: Getty Images)

«Esta no es una política nueva», dijo Feng Yuan, académica y activista feminista. «Actualmente no vemos ninguna razón para una (aplicación) más estricta».

Además, añadió, varios otros países también restringen las interrupciones de los embarazos más allá de las 14 semanas por motivos de salud y seguridad. La razón por la que la política está suscitando un debate ahora es «porque la atención y el enfoque de la cuestión han cambiado, y la gente está preocupada por los límites de su derecho a controlar su cuerpo», afirmó.

El gobierno probablemente también se mostrará muy cauto en este asunto, dijo Hong Fincher. Las autoridades son conscientes de que se trata de un tema delicado y controvertido que podría provocar reacciones públicas, sobre todo por la creciente conciencia de las mujeres sobre sus derechos y su capacidad corporal.

Pero aún así, si se considera en el contexto de la acelerada presión del gobierno por los niños -así como su fuerte represión del movimiento feminista chino en los últimos años-, la política desvelada el lunes no parece augurar nada bueno para las mujeres del país.

«Existe esta retórica de que el Partido Comunista se fundó sobre la base de la igualdad de género… está literalmente consagrada en la Constitución», señaló Hong Fincher.

«Pero el hecho es que, si observamos las pruebas de los últimos años, el movimiento del gobierno se ha opuesto a la promoción de los derechos de la mujer y a la igualdad de género. Creo que la dirección está clara ahora».

Fuente: https://cnnespanol.cnn.com/2021/10/01/analisis-china-abortos-promover-igualdad-genero-trax/

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Ecuador: Niñas de diez años han muerto dando a luz en Ecuador, dice la ministra de Educación, María Brown

Una educación sexual óptima es una herramienta para reducir el número de embarazos adolescentes y la mortalidad materna.

Cinco niñas de 10 a 14 años de edad y 136 adolescentes que tienen entre 15 y 19 años son madres cada día en Ecuador, según la última encuesta con resultados finales del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC).

La cifra es referida por la ministra de Educación, María Brown, en entrevista con este Diario el lunes 30 de agosto último, vía Zoom, para evidenciar las consecuencias de una política pública de educación sexual que está en revisión y que requiere de ajustes, asegura.

Adelanta que el enfoque, con el fin de prevenir embarazos adolescentes y casos de violencia sexual en menores de edad, estará apegado a la evidencia científica y a lo que ha dado resultado a nivel internacional con el asesoramiento de las distintas agencias del sistema de Naciones Unidas.

¿Cuáles son las consecuencias de una educación sexual que no es efectiva?

Hay costos asociados a la omisión en inversión en salud sexual y reproductiva en Ecuador. Son 10.487 adolescentes que abandonan sus estudios por embarazo (cada año), según el último estudio del 2015, que tiene datos sobre esta temática en particular. Son 36.871 años de escolaridad perdidos en todas estas niñas y adolescentes, lo que representa un aproximado de $ 728,5 millones, que es el costo de omisión en trabajar estos temas de salud sexual y reproductiva, educación integral en sexualidad, en el momento más pertinente, que es durante el proceso educativo y que prevenga que esto suceda. En muchas comunidades del país se considera normal que niñas de 14, 15 y 16 años sean madres. En algunas comunidades se normaliza incluso que existan familiares o parientes muy cercanos que tengan relaciones sexuales con estas niñas. En Ecuador, la norma es clara: mantener relaciones sexuales con menores de edad es un delito y no existe el consentimiento informado.

Está claro en la aplicación cuando son menores de 15 o 14 años de edad, pero la ley es más laxa cuando pasan de 15…

Menores de 15 años es un delito y no hay mayor investigación necesaria: simplemente, tener relaciones sexuales con jóvenes menores de 15 ya es un delito. Pasados los 15 años, pues, se hace una investigación de cómo se da el hecho, pero el tema más preocupante es que se ha normalizado. A esto se suman indicadores durante la pandemia, como el incremento de la violación sexual e intrafamiliar, producto de la normalización de esta violencia sexual en las familias y en la comunidad. El rato que no tienes educación presencial, estas estudiantes están en sus casas, en sus comunidades, entonces, esta violencia se justifica. Nos enfrentamos a un contexto pospandemia en el cual debemos abordar la temática con mucha responsabilidad.

¿Habrá cambios en la estrategia de educación sexual?

Hay que repensar esta estrategia intersectorial, que ya fue diseñada y creada en el pasado. Hay que repensar el cómo se ha manejado y cuáles son las acciones que se dan alrededor del Programa Interinstitucional de Reducción, Erradicación y Prevención del Embarazo en Niñas y Adolescentes. Es una estrategia que involucra a los ministerios de Salud Pública, Secretaría de Derechos Humanos, de Inclusión Económica y Social, y tiene que ver también con el sistema educativo, pero no únicamente. Tenemos que trabajar en una nueva hoja de ruta en la que las cuatro instituciones no planteen acciones aisladas o separadas, sino que haya una mayor articulación, tanto en las mesas de prevención a nivel territorial como en la implementación de manuales y procedimientos para la atención integral en salud y prevención en el sistema educativo, erradicación de todas las formas de violencia sexual; y, finalmente, todo esto se complementa con el abordaje de educación integral en sexualidad, que tiene además una connotación vinculada a lo determinado por la Corte Interamericana de Derechos Humanos en función del caso de Paola Guzmán Albarracín (víctima de violencia sexual por parte del rector de una institución pública de Guayaquil).

¿Pero qué se hace mientras se repiensa la estrategia?, porque el problema no se detiene…

La educación integral en sexualidad se complementa con algunos procesos de formación. Conjuntamente con algunas agencias del sistema de Naciones Unidas se ha conformado un equipo interinstitucional para asesorar al Estado sobre educación integral en sexualidad, con el fin de reducir el índice de embarazo adolescente y de violación sexual. Hemos mantenido las primeras reuniones con el comité liderado, por el momento, por el Fondo de Población de Naciones Unidas y la Unesco, al que se suma Unicef y la OPS/OMS. Se ha desarrollado ya un primer ejercicio de capacitación a familias, tanto en el ámbito de educar en familia como a los docentes. Se generó una guía sobre cómo, dentro de cada una de las asignaturas, los docentes pueden topar estas cifras (de embarazo adolescente) y sensibilizar a los estudiantes. Y ser transparentes también sobre cuál es la problemática. El fin es una transformación de la normalización de este fenómeno en la sociedad y que exista la conciencia de que es un delito con sus rutas y protocolos. Se ha desarrollado un curso abierto que se denomina “Prevención y atención de la violencia en el sistema educativo”, que está disponible desde el 2019 y ha reportado la formación de 90.884 profesionales del sistema nacional de educación. Estos contenidos están en constante revisión, son estrategias que vienen de años anteriores, muchas de ellas positivas, pe

ero algunas de ellas requieren ajustes. Las guías de atención integral en sexualidad y los cursos formativos que se están realizando junto con Unesco y el Fondo de Poblaciones hasta julio del 2021 registra la capacitación de 6.789 docentes y 137 profesionales de consejería estudiantil. Fueron elaborados de manera participativa con los docentes y los directivos de las instituciones y las familias para poder ver dónde están los principales tabúes, cuáles son los elementos donde existe mayor resistencia; a lo mejor hay un deseo de que parte de estos temas se trate en la familia

En los debates en el aula se evidencian incluso ideas machistas, como que quienes deben cuidarse son las chicas y no los varones. ¿Cuál debe ser la mejor guía del profesor en esos casos?

Siempre se ha planteado en la educación en general el no ocultar información a los niños. Los docentes tienen que tener en consideración cuál es la visión que tienen los padres que conforman su entorno educativo. Esto es parte de la educación personalizada que buscamos. No todos los niños aprenden igual o tienen las mismas habilidades o dificultades. No todos vivimos en el mismo contexto y entorno. Una vez que se hace el diagnóstico y sabemos en qué comunidades estamos, pues, tener investigada información que sabemos que va a surgir; son preguntas previsibles, no sorprenden, solo pueden incomodar porque los adultos somos víctimas de sentirnos incómodos frente a conversaciones que tienen que ver con la sexualidad y el placer. Podemos prepararnos con respuestas adecuadas, podemos tener reuniones con los padres de familia para conocer su propio abordaje y hacer ejercicio de educación de padres para sensibilizar sobre las cifras de embarazo adolescente y sobre la normativa legal, para que sepan las consecuencias, que es un delito. No es un tema unidireccional, este es un tema de comunidad, todo con absoluta transparencia. Lo que sí no está permitido en el sistema educativo es la posibilidad de entregar información errada; cuando nos sentimos incómodos, decir cosas que no están pegadas a la ciencia y a la realidad. Un ejemplo básico: sobre cómo es el embarazo y que te hablen de cosas como la cigüeña, para ir a un extremo, esto no es recomendable, porque genera desconocimiento. Una pregunta requiere a veces una respuesta de menor complejidad. A veces la respuesta más corta es la que satisface y los estudiantes quedan tranquilos; decir lo más básico, la esencia, es suficiente.

¿La interacción se redujo en la educación pública con el aprendizaje en línea a través de fichas?

Las preguntas se han reducido al tener menor nivel de contacto entre jóvenes y docentes; a todos les incomoda más la pregunta. Lamentablemente, las conversaciones sobre este tema a lo largo de la pandemia se han reducido. A lo mejor han aumentado en el interior de algunas familias, que con base en el texto tienen la conversación que en otro contexto no hubiesen tenido. Pero más bien se ha reducido. Al no tener la posibilidad de estar cara a cara con los docentes, simplemente se dejan de plantear estas preguntas que pueden ser incómodas, y por lo tanto quedan sin respuesta interrogantes que siguen en la cabeza de los estudiantes. La idea es dar datos certeros: lo que es legal e ilegal, cuáles son los mecanismos para denunciar cuando se vulneran los derechos.

Una de las afirmaciones de las niñas en la clase es que con la menstruación ya pueden quedar embarazadas.

Efectivamente, ante ello, dar la información adecuada. Pero inclusive en la parte anatómica, hay que decir que los embarazos en edad temprana son de alto riesgo, pese a que el cuerpo está cada vez más listo para albergar una vida y engendrar, esto no quiere decir que no sea un mayor riesgo, no solo en la parte emocional, sino también para la salud. Los índices de muerte materna se han incrementado durante la pandemia, y en niñas es un riesgo todavía mayor. La cantidad de abortos que existen, que a veces son clandestinos y terminan en el fallecimiento de una joven. Todo esto da cuenta de que el contexto y el entorno no eran los adecuados, que tu desarrollo cognitivo todavía tiene aún camino por recorrer. Y lo principal es el plan de vida, tenemos que avanzar hacia maternidades deseadas y responsables, al igual que paternidades deseadas y responsables, porque otro de los elementos es que “los hombres no se tienen que cuidar”. Entonces pueden ir por la vida embarazando, cuando la realidad no es esa. Hay responsabilidades no solo de carácter ético y moral, sino legales respecto a la paternidad; lograr establecer esta corresponsabilidad de los hombres, que sepan lo que involucra en el cuerpo y la salud de una mujer, pero también lo que implica para ellos, tanto en lo legal y en su propio plan de vida. Una de las principales causas del abandono de la educación básica superior y bachillerato es el embarazo, y no solo en niñas. Muchos niños dejan de estudiar bachillerato porque han formado una familia y empiezan a tener hijos, muchas veces antes de los 16 años. Hay que transparentar las cifras. No podemos seguir teniendo casos elevados de embarazos adolescentes, ya tenemos casos de muerte materna por parto en niñas de hasta diez años de edad, esto es algo inconcebible, ya hay casos de niñas que mueren dando a luz a los diez años de edad. Esa es la muestra de que si dejamos esa conversación para después, pues, puede ser muy tarde.

¿La educación sexual puede ser una herramienta para blindarse de los posibles casos de violación sexual en menores de edad?

Es la principal herramienta. Un elemento es que se hable de las distintas formas de violación. Tocar una parte del cuerpo sin penetración también es una forma de violencia. Hay la violencia psicológica, vinculada a los elementos sexuales, de género, que es considerar a la mujer inferior y darle funciones encasilladas. Pero no todo es responsabilidad exclusiva de las instituciones educativas, no es responsabilidad solo de las familias, hay mensajes que tienen que ver con la sexualidad en los medios, esto pasa por las redes sociales, los medios de comunicación masiva, que educan para bien o para mal; eso no debemos olvidar. La programación de la televisión y radio puede tener contenidos que refuercen estereotipos basados en género y comportamientos violentos. En algunas comunidades hay este falso espíritu de cuerpo en el que se encubre a un violador, se protege al abusador porque es el tío, hermano o es el profesor compañero. La sociedad en su conjunto tiene que estar educada íntegramente en sexualidad, y parte de eso es aprender a denunciar y a concebir como delito a estos actos de violencia sexual.

¿Los rectores y las directivas de las entidades educativas tienen claros estos conceptos?, porque hay casos en los que callan y no se denuncia…

Ellos están cada vez más informados, más de 90.000 docentes han recibido capacitación, pero hay brechas del propio contexto en el que fueron criados los docentes. Estos son cambios culturales que toman tiempo, cambios idiosincráticos que tenemos que impulsar como sociedad, a veces un curso, una maestría no cambiará del todo esta ideología. Las soluciones en este caso y casi todo lo que involucra educación no son inmediatas, son procesos que a veces son más largos de lo que quisiéramos. No es una fórmula mágica, siempre hay que tomar en consideración que los docentes han recibido capacitación, pero también muchos se cuestionan cuál debe ser el abordaje, cuál es el rol de la familia, hasta dónde deben llegar los docentes. Esto se tiene que construir en la comunidad. Una de las cosas que impulsamos en el Gobierno del Encuentro es salir de la concepción de que la educación es responsabilidad única del garante del derecho a la educación. El Estado es el garante, pero existe una corresponsabilidad de todos quienes conformamos la sociedad, es una corresponsabilidad activa. No podemos caer en esto de pensar como padres que “deposito a mi hijo y allí verán qué hacen, y me lo entregan cuando sale del bachillerato”. No funciona así.

El objetivo de la estrategia intersectorial era facilitar el acceso a métodos anticonceptivos de los menores que ya son sexualmente activos, para evitar los embarazos. ¿Esto se mantendrá?

Estamos actualizando la estrategia de erradicación del embarazo en niñas y adolescentes con los ministerios y la Secretaría de Derechos Humanos (SDH), y con el liderazgo de esta última hacemos la estrategia para la reducción de la violencia sexual en el ámbito escolar. Estas dos revisiones nos darán la pauta, cuál será el enfoque. El enfoque como cartera de Estado que planteamos es uno armónico, coherente, que no sea cada ministerio haciendo acciones pequeñas, separadas, inconexas, sino que las unas estén vinculadas a las otras… No hay una postura oficial sobre estos elementos, porque todo está en construcción (procesos de reforma y aprobación de leyes).

¿Para cuándo tendrán listos los enfoques de las dos políticas en revisión?

La de centros educativos, en aproximadamente cien días, es el tope… La del embarazo espero que esté validada en un mes y medio…

Hay críticas y temores acerca de que la política pública en esta temática acoja ciertos conservadurismos según la creencia del actual presidente de la República, Guillermo Lasso.

Tenemos un presidente que ha demostrado que es respetuoso de las distintas creencias que tienen las comunidades y familias; que escucha y valora la evidencia científica; que ha sabido escuchar y valorar los avances dados a nivel internacional, sobre los distintos elementos; que es claro y transparente sobre cuál es su postura personal, pero una postura personal y de familia es distinta a una visión de política pública, y él tiene claridad de esta diferencia entre la política pública y la vida privada. Siempre habrá espacio para debatir. Pero no hay creencia ni costumbre que pueda estar por encima de los derechos y las leyes. Hay cosas que son inaceptables porque están en la ley. (I)

Fuente: https://www.eluniverso.com/noticias/informes/ninas-de-diez-anos-han-muerto-dando-a-luz-en-ecuador-dice-la-ministra-de-educacion-maria-brown-nota/

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Zimbabue: nuevas leyes para garantizar la educación a las adolescentes embarazadas

Tener hijos a corta edad es un hándicap para la formación de las mujeres en toda África. Alrededor de uno de cada ocho casos de abandono escolar registrados en este país africano fue motivado por matrimonio o gravidez.

Cassey Simbanai iba a hacer sus exámenes finales el pasado diciembre. Esta joven zimbabuense de 17 años, una de las estudiantes más prometedoras de su clase, soñaba con convertirse en profesora de ciencias. Sin embargo, durante meses, no estuvo en el aula ni jugando a su querido rugby en el campo de al lado, sino preparando la comida para su familia política en la cocina de la casa de esta en Hauna Growth Point, una aldea de las montañas del este de Zimbabue, cerca de la frontera con Mozambique. Simbanai pasaba la mayor parte del tiempo haciendo tareas domésticas para su nueva familia mientras esperaba a dar a luz a su hijo.

En abril de 2020, pocas semanas después de que Zimbabue impusiera un estricto confinamiento nacional para frenar la propagación de la covid-19, la joven se quedó embarazada. “No pasábamos mucho tiempo juntos porque yo siempre estaba en el instituto”, dice refiriéndose al que ahora es su marido, un empleado de 24 años de una fábrica de procesamiento de tabaco con el que llevaba tres años de relación. “Pero cuando empezó el confinamiento… teníamos mucho tiempo y pasó. Tuvimos relaciones sexuales sin protección”.

Las tiendas de Zimbabue estuvieron cerradas durante parte del confinamiento, lo cual limitó muchísimo el acceso a los anticonceptivos para los habitantes de zonas rurales, como Simbanai y su marido. “Cuando se enteró de que estaba embarazada, me pidió que me casara con él”, cuenta la joven arrodillada en una estera de paja en casa de sus suegros. Aunque el matrimonio infantil está prohibido, la pareja se fugó.

Antes de la pandemia, en Zimbabue no se permitía que las niñas embarazadas siguiesen yendo al colegio. Pero, debido al confinamiento de todo el país, que dejó a los niños sin escuela durante seis meses, las tasas de embarazo adolescente y matrimonio infantil se dispararon. Entonces, el Gobierno retiró la prohibición. Los defensores de la educación infantil han celebrado la medida, que se ha extendido a todo el continente africano, como un acontecimiento para la vida de las niñas y las mujeres de Zimbabue, a las que ahora les resulta más fácil seguir educándose y progresar económicamente.

“El confinamiento tuvo consecuencias imprevistas, entre ellas el matrimonio infantil. Hay que reconocer que las escuelas desempeñan un papel importante como refugio seguro para nuestros niños”, afirma Taungana Ndoro, director de comunicaciones y promoción de Ministerio de Educación Primaria y Secundaria.

Ahora, las madres adolescentes tienen protección legal en Zimbabue, pero los defensores de los derechos de las niñas temen que no se sientan bienvenidas cuando vuelvan a clase

En agosto pasado, el presidente de Zimbabue, Emmerson Mnangagwa, modificó la Ley de Educación del país al firmar otra que ilegalizaba la expulsión de las niñas embarazadas del colegio. Sierra Leona anuló una prohibición similar en marzo. Tras recibir un crédito del Banco Mundial, Tanzania se comprometió a facilitar el acceso a la educación a las niñas embarazadas, pero no llegó a readmitirlas en todo el país. En julio, el presidente de Kenia, Uhuru Kenyatta, ordenó que las estudiantes que se quedaron embarazadas durante el confinamiento fuesen admitidas “incondicionalmente” en la escuela y se les diese acceso a atención prenatal gratuita.

Según las estadísticas del Ministerio de Educación, en 2018, alrededor de uno de cada ocho casos de abandono escolar registrados en Zimbabue fue motivado por el embarazo o el matrimonio. En casi todos ellos se trataba de niñas.

El matrimonio infantil, ilegal pero frecuente

Aunque Zimbabue lo prohibió en 2016, el matrimonio de menores de 18 años sigue siendo habitual. Una encuesta realizada en 2019 por el Instituto de Estadística del país a 8.000 mujeres adultas descubrió que casi una tercera parte ya estaba casada a los 18, como Simbanai. Manicaland, donde ella vive, no ha logrado acabar con el matrimonio infantil. Por ejemplo, las familias de las sectas apostólicas cristianas, que constituyen la religión dominante en la zona, tienen la tradición de casar a las niñas de la familia durante los encuentros anuales de su iglesia.

Aunque todavía se están confeccionando las estadísticas de todo el país, los datos del Gobierno muestran que, desde que empezó la pandemia, en la provincia de Manicaland, a la que pertenece Hauna Growth Point, 450 estudiantes han abandonado la escuela porque se han quedado embarazadas, se han casado, han enfermado o tienen dificultades económicas. Según los funcionarios, la cifra supone un aumento importante en comparación con el año anterior.

En otras partes del país, los habitantes de Bulawayo, la segunda ciudad más grande de Zimbabue, quedaron conmocionados por el suicidio de una estudiante de 17 años que, según información de los medios de comunicación locales, ingirió insecticida cuando estaba en las primeras fases de embarazo. Evitar casos como este es uno de los objetivos de esta nueva ley.

A pesar de haberse casado en mayo, Nancy Nyazungu, de 17 años, regresó a la escuela. Estaba embarazada de ocho meses y se presentó a los exámenes de diciembre. Terminar su educación es importante para ella. De lo contrario, teme convertirse en un ama de casa con pocos medios para llegar a ser económicamente independiente.

“Así sé que no seré sumisa con él y que no podrá controlarme”, dice de su marido. En cuanto se gradúe, la joven quiere conseguir un trabajo. Le gustaría que fuese en enfermería para poder ayudar a otras chicas embarazadas que se enfrentan a la dolorosa decisión de seguir sus estudios o abandonarlos.

“No culpemos a las niñas cuando se quedan embarazadas”

MWARADZIKA MAKAZOUYA, PROFESORA

Su escuela, al igual que otras de todo el país, ofrece ahora a Nyazungu asesoramiento en el marco de una iniciativa nacional encabezada por el Ministerio de Asuntos de la Mujer, Comunidad y Pequeña y Mediana Empresa para ayudar a las adolescentes en estado a terminar su educación.

“No culpemos a las niñas cuando se quedan embarazadas”, dice Mwaradzika Makazouya, directora del Instituto de Secundaria Sahumani de Honde Valley al que asiste Nyazungu. “Las aceptaremos”, remacha.

La ministra Sithembiso Nyoni anunció que se iba a permitir que las niñas embarazadas sustituyesen el uniforme escolar de falda azul y blusa blanca a juego por ropa de calle, eliminando así otro posible obstáculo cuando su cuerpo cambie de forma y aumente de volumen. El Ministerio también ha creado un programa de tutoría que empareja mujeres mayores jubiladas con adolescentes embarazadas en todo el país.

“Tenemos que seguir apoyándolas para que vayan a la universidad y empiecen a trabajar, porque tener un hijo no significa que, a partir de entonces, seas discapacitada o no puedas hacer mucho en la vida”, declaró Nyoni en octubre en el Parlamento. Ahora, las madres adolescentes tienen protección legal en Zimbabue, pero los defensores de los derechos de las niñas temen que no se sientan bienvenidas cuando vuelvan a clase.

RURAMAI MUSEKIWA

“Algunas chicas con las que hemos trabajado han manifestado su preocupación por el hecho de que, aunque ellas estén deseando volver a la escuela, temen que las discriminen y las estigmaticen”, informa Florence Mutake, coordinadora de programas de la organización a favor de los derechos de las niñas Shamwari Yemwanasikana.

La madre de Simbanai rogó a su hija que volviese a la casa de su infancia y siguiese con sus estudios, pero ella se negó por miedo a que sus compañeros la tachasen de “promiscua” si no se casaba. “No tenía muchas opciones”, lamenta.

Nyazungu cuenta que sus compañeras de clase no dejaban de mirarle el vientre cuando volvió al instituto, pero ahora se han acostumbrado a tener una embarazada de compañera. La educación impedirá que esté expuesta al maltrato, reflexiona la joven mientras se abre paso a través de su nueva vida de mujer casada.

Ninguna de las dos puede escapar a la dura realidad de la peor crisis económica de Zimbabue en una década. La nueva ley no puede corregir la causa fundamental de las altas tasas de embarazo adolescente: las consecuencias económicas de la covid-19. Actualmente, este país del sur de África sufre una inflación de tres dígitos y escasez de combustible y electricidad.

Cuando hay más pobreza y más hambre, las tasas de matrimonio infantil aumentan, señala James Maiden, jefe de comunicaciones de Unicef Zimbabue. “A menudo, el matrimonio infantil es una estrategia de alivio de la pobreza para las familias vulnerables… pero pone en peligro el desarrollo de las niñas con poca educación y escasa formación vocacional, lo cual refuerza el sesgo de género de la pobreza”.

Durante las primeras semanas de confinamiento, el marido de Simbanai ayudó a mantener a flote a la familia de esta dándole dinero para alimentos y otros bienes de primera necesidad. Los ingresos de la familia de la joven se han visto gravemente mermados por las consecuencias económicas de la pandemia. Aunque Nyazungu y Simbanai se casaron en contra del deseo de sus padres, reconocen que las familias de sus maridos les proporcionaron una situación financiera más estable.

Al igual que muchas chicas de las zonas rurales que han abandonado los estudios, Simbanai pasa la mayor parte del tiempo realizando tareas domésticas. Pero lo que quiere desesperadamente es volver a la escuela. Echa de menos leer novelas y aprender de sus profesoras, que “la trataban como si fuera su hija”. La joven explica que la familia de su marido accedió a pagarle los gastos de escolarización en 2021, y que él le permitirá que vuelva. Se siente afortunada. Muchas otras, piensa, no tendrán esa oportunidad.

Fuente: https://elpais.com/planeta-futuro/2021-06-21/zimbabue-nuevas-leyes-para-garantizar-la-educacion-a-las-adolescentes-embarazadas.html

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