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Literatura para viajar: 7 libros para escapar de la rutina con la lectura

Por: Lucas Méndez Chico-Álvarez

Una variada lista de recomendaciones para experimentar ese placer tan íntimo que supone viajar a través de las páginas de un libro

No corren buenos tiempos para los viajeros. Los diferentes grados de restricciones entre países y los cierres de fronteras se han convertido en las principales medidas para contener la pandemia. De hecho, en los momentos más duros, apenas se ha podido viajar dentro de un mismo territorio. En el último año y medio, lamentablemente nos hemos acostumbrado a escuchar palabras como «confinamiento» o «cuarentena», y la necesidad de dejar atrás la rutina y oxigenar la mente con nuevos horizontes, paisajes y experiencias se ha vuelto uno de los placeres mas codiciados, todavía más durante el verano.

Como la posibilidad de viajar con la libertad anterior al coronavirus se antoja aún lejana, proponemos una opción mucho más cercana y accesible en la que todo es posible: la literatura. Los libros de viajes son capaces de jugar con nuestra imaginación y evocarnos remotos lugares y épocas, con el realismo de una experiencia individual vivida a través de los ojos de otro. Gracias a la lectura podemos desafiar los límites físico-temporales y volver a sentir la sensación de explorar lo desconocido. Por eso, tanto si has podido disfrutar de unas siempre cortas vacaciones como si has tenido que quedarte en casa este verano, aquí va una variada lista con recomendaciones para experimentar ese placer tan íntimo que supone viajar a través de las páginas de un libro.

Viajero solitario, Jack Kerouac

Literatura para viajar: 7 libros para escapar a través de la lectura

Viajero solitario de Jack Kerouac, edición de Cajanegra Editora

«Viajero solitario es una recopilación de artículos unidos por un mismo tema: el viaje. Los viajes comprenden los Estados Unidos desde el sur hasta la costa este, y de ahí a la costa oeste y el noroeste, aparte de México, Marruecos, París, Londres, los océanos Pacífico y Atlántico recorridos en barco y diversas ciudades y personas interesantes. Empleo en el ferrocarril y como marinero, montañas, misticismo, lascivia, solipsismo, desenfreno, corridas de toros, drogas, iglesias, museos, calles, una aleación de vida como fue vivida por un libertino orgulloso, educado e indigente que va a ninguna parte. Su alcance y su propósito son sencillamente la poesía, o la descripción natural». Jack Kerouac.

El escritor beat por excelencia es bien conocido por su novela En el camino, donde narra su viaje de punta a punta de los Estados Unidos. Sin embargo, Viajero solitario condensa la mayoría de las rutas que marcaron su vida y, por tanto, inevitablemente su obra. La lectura de este libro conserva el ritmo altamente adictivo y estimulante que te engulle desde el inicio con su espíritu aventurero y genuinamente vitalista.

Diarios de bicicleta, David Byrne

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Diarios de bicicleta de David Byrne, edición de Reservoir Books

El líder de los Taking Heads es un firme defensor de la bicicleta como modo de transporte y a lo largo de su vida ha tenido el privilegio de visitar algunas de las ciudades más impresionantes del mundo. Berlín, Estambul, Buenos Aires, Manila, Sidney, Londres, San Francisco y Nueva York forman parte de este recorrido a dos ruedas en el que David Byrne aprovecha para reflexionar sobre la vida urbana, la globalización, la arquitectura o la moda. A modo de W.G. Sebald en Los anillos de Saturno, el libro trata de conectar ideas, reflexiones y anécdotas en una especie de diario/blog a través de un paseo en bici, una mirada curiosa y un gran sentido del humor.

Los llanos, Federico Falco

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Los llanos de Federico Falco, Anagrama

Otro tipo de viaje muy explorado en épocas de crisis como la que estamos viviendo ahora es el del retiro campestre. En Los llanos, un escritor en pleno proceso de duelo amoroso se autoexilia en una casa rural como un método de huída, pero también de reencuentro. Refugiado en su dolor, reflexiona sobre el pasado en una especie de pausa prolongada gracias a la diferente concepción de tiempo que existe en el campo con respecto a la ciudad. A través del cultivo de la huerta que tiene en la casa, el escritor experimenta un proceso íntimo y personal en el que el viaje hacia la soledad culmina en la reconciliación con uno mismo gracias a la calma que envuelve al entorno rural.

Al filo de la navaja, W. Somerset Maugham

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Al filo de la navaja de W. Somerset Maugham. Debolsillo

El viaje espiritual también ha sido siempre uno de los más fascinantes. Ambientada principalmente en la Europa de los años 20, la novela aborda un tema tan universal y humano como el sentido de la vida. Larry Durrel es un joven estadounidense que combatió en la Primera Guerra Mundial y renuncia a una vida cómoda y un matrimonio con la mujer que ama, para viajar, conocer y explorar el mundo en busca de un dios que pueda dar valor a su existencia. Maugham escribe este relato en condición de testigo para ilustrar la dicotomía entre el materialismo y la espiritualidad a través de los distintos ambientes en los que se desarrolla el libro y las diferentes culturas que conoce en boca del enigmático personaje de Larry. Con un estilo bello pero sencillo y temas profundos pero cercanos, las historias entrelazadas de Maugham completan un microcosmos perfectamente conectado para viajar en el tiempo y el espacio a través de la condición humana.

Viaje al fin de la noche, Louis-Ferdinand Céline

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Viaje al fin de la noche de Louis-Ferdinand Céline. Edhasa

Sin embargo, viajar no tiene por qué ser siempre una experiencia positiva o reveladora (en el buen sentido de la expresión); el recorrido de Ferdinand Bardamu por tres continentes: Europa-África-América dista bastante de cualquier tipo de idealización aventurera que se pueda imaginar. La vivencia contada en primera persona por Bardamu, con rasgos autobiográficos del propio Céline, refleja el rechazo al patriotismo heroico de la guerra, la crueldad de la esclavitud y la estafa del capitalismo en el sueño americano. Céline muestra a través de su historia la trastienda del progreso occidental en el que se esconde la basura de la civilización. Su lenguaje natural, crudo e irónico está desprovisto de cualquier tipo de pudor o decoro y expone sin tapujos su perplejidad ante un mundo hostil y decadente en el que no es capaz de sentirse más que un superviviente.

Viaje al sur, Juan Marsé

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Viaje al sur de Juan Marsé. Lumen.

El legado de Juan Marsé se extiende más allá de su vida y prueba de ello es este Viaje al sur publicado póstumamente el año pasado. Una historia que quedó relegada al anonimato por la presión de la censura y la falta de fondos. Se trata de una crónica de la Andalucía de los años 60 a través de una travesía por las provincias de Sevilla, Cádiz y Málaga con su amigo Antonio Pérez y el fotógrafo Albert Ripoll Guspi. El libro intercala fo­tografías, titulares de la prensa franquista y el relato profundamente realista de Marsé a modo de diario, que se infiltra incisivamente en la propaganda y el silencio impuestos por el régimen franquista. Una historia que, a día de hoy, funciona como un valioso documento histórico, antropológico y literario de aquella España no tan remota.

Los senderos del mar: un viaje a pie, María Belmonte

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Los senderos del mar: un viaje a pie de María Belmonte. Acantilado.

Y del sur de Marsé, al norte de María Belmonte. En concreto, esta lectura está acompañada por el salino frescor del Cantábrico oriental en la costa vasca. Un viaje que, como reza el propio título, no exige otro requisito más allá de los propios pasos para disfrutarlo. El camino elegido para esta historia trata sobre el redescubrimiento de los paisajes de la infancia gracias a la capacidad para cambiar la mirada a través de la observación y la reflexión. El trayecto es tan sinuoso como el litoral que recorre, lleno de atajos, rodeos y extravíos y el ritmo sosegado del paseo se acompasa con la lectura tranquila y sin prisas que va tejiendo con paciencia un relato formado por referencias históricas, naturales, culturales y anecdóticas.

Fuente de la información e imagen:  https://insurgenciamagisterial.com/literatura-para-viajar-7-libros-para-escapar-de-la-rutina-con-la-lectura/

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En verano: leer para no desaprender

Por: ABC

La mejor actividad que pueden hacer los niños durante sus vacaciones es leer un rato cada día para eludir el fenómeno llamado «pérdida estival».

Tras diez meses en las aulas, los alumnos afrontan un largo paréntesis vacacional que redunda en una pérdida de conocimientos motivada por el parón que, en términos de aprendizaje escolar, supone el período de descanso. ¿Qué hacer para contrarrestar este efecto? «La mejor medicina contra la «pérdida estival» es leer un ratito cada día», argumenta Héctor Ruiz Martín, investigador en psicología cognitiva del aprendizaje, director de la International Science Teaching Foundation (ISTF) e impulsor de los proyectos educativos Science Bits y Math Bits.

Este fenómeno de «desaprendizaje» lleva a los alumnos a experimentar cierta regresión respecto a lo aprendido durante el curso. «Y es una pérdida que afecta a todos los alumnos. Según los estudios disponibles, lo hace especialmente en tres aspectos: en cuestiones de cultura general, en matemáticas y en competencia lectora. Sobre todo, en estos dos últimos», Añade Ruiz.

Recientemente, la International Association for the Evaluation of Educational Achievement (IEA) advertía, a través de un informe realizado entre 600.000 niños de 9 y 10 años de todo el mundo, para medir su rendimiento en matemáticas y ciencias, que los alumnos españoles se encuentran, desde hace años, medio curso académico por detrás de la media de países de la OCDEUn aspecto que puede afectar severamente su desarrollo profesional futuro y que se ve agravado por la «pérdida estival».

Leer acorta diferencias

«Lo más preocupante –razona el experto de referencia en ámbito educativo– es que diversos estudios reflejan que la pérdida en el ámbito de la lectura es la que más afecta de manera desigual a los alumnos, en función de sus oportunidades y hábitos».

Al contrario, estudios como el Summer Learning and the effects of schooling de Barbara Heyns revelan que los niños que leen más libros en verano son los que más desarrollan su competencia lectora, sean del grupo socioeconómico que sean. «Asimismo, el uso de las bibliotecas públicas es el mejor predictor de las ganancias en vocabulario», añade Héctor Ruiz.

Más aún, el estudio de 2014, Scholarly culture and academic performance in 42 nations, basado en los datos obtenidos en las pruebas PISA muestra que uno de los mejores predictores de la competencia lectora de los niños es la cantidad de libros que tienen en casa. «Este factor es predictivo, incluso cuando se tienen en cuenta las diferencias socioeconómicas y el nivel educativo de las familias. De hecho, es el factor con mayor poder de predicción de los anteriores», argumenta el investigador.

Un experto de referencia

Héctor Ruiz es un experto de referencia en el ámbito educativo. Autor de varios libros sobre psicología cognitiva del aprendizaje, ha sido docente tanto a la secundaria como la Universidad. Su carrera científica se ha desarrollado en centros de investigación de los EE. UU. como la Universidad de Washington o el Jet Propulsion Laboratory de la NASA (California).

En los últimos 15 años ha liderado proyectos de didáctica y comunicación de la ciencia, así como de tecnología educativa, que han impactado en centenares de miles de alumnos en Europa y América. Además, ha sido asesor educativo de varios gobiernos e instituciones educativas en España, Asia y Latinoamérica.

Fuente e Imagen: https://www.abc.es/familia/educacion/abci-verano-leer-para-no-desaprender-202108200045_noticia.html

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La era del papel

Como nunca antes, es fundamental un amplio acceso al conocimiento y a la información.

El saber es poder: indiscutible verdad de la cual se desprende -desde los inicios de la Historia- toda clase de estrategias para vedar a las grandes mayorías el pleno acceso al conocimiento, con el simple propósito de mantenerla en la ignorancia y así consolidar los mecanismos de control social. Simple y llana como esta argucia política es la intención de manipular el pensamiento y alimentar a las masas desde plataformas informativas de alcance masivo, cuyos contenidos son cuidadosamente elaborados para reforzar conceptos e idearios afines al poder.

Por eso es tan importante retomar la ruta de la lectura y del intercambio de ideas mediante una búsqueda consciente e informada de las fuentes más confiables. Para ello -y gracias al inmenso caudal de recursos que nos ofrecen tanto los libros y otras publicaciones en papel como el mundo virtual- es preciso separar la paja del grano y comenzar a reflexionar seriamente en tejer redes de discusión, consolidar espacios de reflexión y construir, de manera amplia y constructiva, una nueva forma de relacionarnos con distintos grupos de la sociedad.

Aun cuando la era del papel impreso ha perdido cierta predominancia frente a los medios virtuales, de ningún modo significa un reemplazo inevitable, en especial en sociedades de escasos recursos en las cuales el acceso a la tecnología se mantiene aún reducido a ciertos sectores de mayores ingresos y en entornos adecuados gracias a una mejor infraestructura. En estas sociedades, sin embargo, y por motivos estrictamente políticos, tanto la escolaridad como el acceso al conocimiento se han visto entorpecidos, por decisión de sus élites, con la intención de frenar toda forma de disenso desde las bases de la pirámide social.

De ahí la gran relevancia de los eventos literarios, como las ferias del libro, que se realizan en distintos países del continente y el mundo. Estas plataformas ofrecen -de manera gratuita- el acceso a un amplio abanico de experiencias capaces de abrir nuevas formas de entender el mundo que nos rodea. Una de ellas es la Feria internacional del libro, Filgua, organizada por la Gremial de Editores de Guatemala y la cual este año será celebrada en septiembre como homenaje al bicentenario de la independencia de ese país. Este evento, además, ha sido dedicado a la escritora guatemalteca Ana María Rodas, Premio Nacional de Literatura y una de las mayores exponentes de la poesía latinoamericana.

Como parte esencial del programa de la primera versión virtual de la Feria Internacional del Libro en Guatemala, acompañando a la presencia de relevantes exponentes de la literatura, provenientes de Guatemala y otros países, sus organizadores ponen especial énfasis en un amplio repertorio de actividades dedicadas a la niñez y la juventud, como una forma de incentivar la lectura y el acceso al conocimiento universal, mecanismos imprescindibles para reforzar el crecimiento intelectual de las nuevas generaciones de ciudadanos.

Guatemala, un país rico en cultura y tradiciones, ha debido enfrentar enormes obstáculos, a lo largo de su historia, en sus esfuerzos por hacer del conocimiento un patrimonio de libre acceso para todo su pueblo. Gobernantes y élites económicas, empecinados en frenar toda iniciativa en ese sentido han cercenado, a través de los siglos, sus oportunidades de desarrollo. La apertura hacia la educación es, todavía, uno de los más grandes desafíos para sus habitantes; por lo tanto, cualquier evento en esa dirección merece el apoyo de toda la sociedad. La lectura no es solo un pasatiempo, sino un recurso vital para el desarrollo.

Fuente: https://rebelion.org/la-era-del-papel/

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La lectura es una tarea imprescindible en verano

Por: ABC

Fomentar la costumbre de leer es algo muy positivo para los niños, pero es una gran lucha que tienen los padres actualmente.

El verano ya está aquí y como dice la canción «arriba las vacaciones, abajo el estudiar, los libros a los rincones y los niños a jugar». Pero el hábito lector es algo que no debe abandonarse en verano, ya que es uno muy beneficioso para los más pequeños. Fomentar la costumbre de leer es algo muy positivo para los niños, pero es una gran lucha que tienen los padres actualmente. Normalmente la lectura es una actividad que se relaciona solamente con el colegio, con las actividades escolares, sin embargo, la lectura es algo que trae muchos beneficios a los niños.

Estudiotec, una academia madrileña que trabaja de forma personalizada con niños y jóvenes de distintas características y capacidades desde el 2008, explica los grandes beneficios que trae la lectura a los niños: «Fomentar la lectura en los niños significa enseñarles a organizar la realidad, ayudarlos a madurar, desarrollar sus sentimientos, sensaciones, emociones, estimular su creatividad, fortalecer su personalidad, su cultura, aumentar la habilidad de análisis, fortalecer su seguridad y confianza, reflexionar, deducir y pensar de forma más lógica, concentrarse mejor, aumentar su vocabulario e inteligencia y muchas más capacidades. Estas son las grandes ventajas que hemos podido observar en nuestros alumnos que tienen el buen hábito de leer con frecuencia», apuntan.

Por lo tanto, como se puede ver, la lectura es algo muy positivo e incluso necesario para los niños, sin embargo, fomentar esta buena costumbre es algo que debe venir de familia. La familia, según los expertos de Estudiotec, es una parte imprescindible en la educación de los niños. « Es muy importante que los padres dediquen tiempo a la lectura de los niños, hagan una investigación y búsqueda de libros recomendables para cada edad y localizar libros que puedan interesarles a los niños. La lectura debe ser algo que les divierta y entretenga, no una obligación tediosa», recuerdan.

Así, sugieren que «si por ejemplo el niño va a hacer una excursión a la naturaleza, lo que el padre puede hacer es recomendarle leer un libro sobre insectos, animales salvajes, ríos, etc. O si por ejemplo los niños van a visitar una nueva ciudad pueden leer un libro sobre su historia, sociedad, etc. La lectura es una actividad individual, pero eso no significa que los padres deben darles el libro a los niños y desentenderse».

Se trata, concluyen desde Estudiotec, «de realizar esa actividad juntos, compartir pensamientos y reflexiones y, sobre todo, hacerlo con calma y tranquilidad, de forma entretenida y sin estresar al niño. Esta actividad es una lúdica, en la que se le da rienda suelta a la imaginación. La lectura digital es una opción para los niños de hoy en día, que han nacido con una pantalla en la mano. Una opción interesante sería un e-book, pero siempre es más ventajoso leer desde un libro real, de papel».

Fuente e Imagen: https://www.abc.es/familia/educacion/abci-lectura-tarea-imprescindible-verano-202107230120_noticia.html

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Llegó el verano. ¿Cómo fomentar la lectura entre nuestros hijos?

Si quieres que los niños no se pasen las vacaciones pegados a las pantallas, la lectura puede ser una solución entretenida y didáctica para el verano. Te contamos cómo fomentar este hábito

Además de los juegos y deportes, que son un must del verano, existe otra actividad que los niños pueden disfrutar y que les hará entretenerse en las muchas horas libres que tendrán en la época vacacional. Se trata de la lectura y fomentar este hábito entre nuestros hijos es parte de la responsabilidad de los padres. «Debemos transmitir a los niños que la lectura es buena en sí misma. Que no hay un “para qué” en la lectura, y reafirmar así que el tiempo de verano (ese que llamamos tiempo libre) es el más importante del año, porque uno es libre para hacer lo que desea, para aquello a donde el corazón se nos va cuando lo dejamos suelto», afirma Pablo Velasco Quintana, editor de CEU Ediciones.

Leer al aire libre

Pero ¿y si además de leer y culturizarse, los niños pueden disfrutar del buen tiempo reinante en verano? Es entonces cuando la lectura al aire libre toma sentido. Solo tienen que meter un libro en la maleta y buscar el lugar apropiado para comenzar a leer al aire libre. Al preguntar a nuestro experto, Pablo Velasco, acude a sus recuerdos de la infancia: «Un campo de Castilla, la sombra de un castaño, y no poder despegarme de aquel libro. Ah, y el partido de fútbol que había jugado antes fue antológico».

La lectura en el jardín o en la playa pone en contacto directo con la naturaleza a los niños. Y una buena idea es leer en voz alta (tanto ellos como nosotros), ya que estimula la mente de los niños y fomenta su creatividad. Además, la lectura ejercita el cerebro de nuestros pequeños y fomenta su creatividad y habilidades lingüísticas.

Actualmente, la competencia que tiene el libro es dificil de igualar porque la televisión, los videojuegos y las tabletas estimulan también otros sentidos. Solo podremos transmitir a nuestros hijos la pasión por la lectura si nosotros mismos la amamos. Tenemos que dedicarle horas y compartir este hábito con ellos: ahí está la clave del éxito. Tenemos que implicarnos más para que la lectura sea una actividad elegida por ellos y que además la vivan de manera natural, sin forzar.

«Tradicionalmente ha funcionado eso de poner los libros «a tiro». Así, como quién no quiere la cosa uno se encuentra con Huckleberry Finn y se le transforma el verano», comenta el editor de CEU ediciones. « También es un planazo lo de ir toda la familia a una librería los primeros días de vacaciones, y elegir cada uno una lectura», añade.

Elegir un libro adaptado para cada etapa y edad es una buena forma de que se sientan cómodos con la actividad. Si además, dentro de los libros que se adapten a su edad, ellos mismos pueden seleccionarlo, se sentirán partícipes de la elección y estarán más motivados con la lectura.

«Desgraciadamente se ha puesto de moda un tipo de libro que responde a ‘lo que un adulto piensa que le gusta a un niño’, y se han obviado o retirado algunas grandes historias. Es decir, que muchas coloridas novedades de literatura infantil y juvenil tratan a estos lectores (que según las estadísticas son el grupo más numeroso) de tontos. Y desde luego que no lo son. Tienen un corazón que sabe perfectamente detectar aventuras apasionantes y verdaderas. ¡Qué momento tan bueno es el verano para echar la vista atrás y proponer a nuestros hijos esas lecturas que a nosotros nos fascinaron!», concluye Pablo Velasco Quintana.

Fuente de la información  e imagen:  https://www.abc.es/

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Activista jamaicana de alfabetización pone más libros en manos de niños aislados por restricciones por COVID-19

Por: Emma Lewis
Traducido por: Gabriela Garcia Calderon Orbe

«Debemos centrarnos siempre en el aspecto de la inclusión».


Con la mayoría de escuelas de primaria y secundaria de Jamaica cerradas desde marzo de 2020, cuando el país registró su primer caso de COVID-19, la pandemia ha dado a la educación un fuerte golpe. Los niños, sobre todo los niños de bajos recursos, han enfrentado problemas de conectividad por falta de conexión inalámbrica, dispositivos o ambos, y aprender se les ha vuelto más difícil si las circunstancias de su casa no son las adecuadas.

En su reciente informe parlamentaria, la ministra de Educación, Fayval Williams, reconoció que pese a los tremendos esfuerzos para no “perder” estudiantes con diversas iniciativas, más de 120 000 niños se han retirado del proceso educativo desde que la pandemia empezó.

Editora y presidenta saliente de la Asociación de la Industria del Libro de Jamaica (BIAJ), Latoya West-Blackwood. Foto por cortesía de West-Blackwood, utilizada con autorización.

Las clases presenciales se retomaron el 10 de mayo en más de 350 escuelas, que se limitaron a estudiantes que rendían exámenes. Se espera que las escuelas reabran en septiembre, pero no hay garantías de eso. El impacto que esta situación tiene en la alfabetización hizo que la presidenta saliente de la Asociación de la Industria del Libro de Jamaica (BIAJ), la editora Latoya West-Blackwood, empezara una iniciativa para alentar a los niños a leer, por placer.

A inicios de mayo, BIAJ se asoció con la Fundación Comunitaria GrassROOTS de Estados Unidos para donar 500 “paquetes de alfabetización” a 12 escuelas de primaria de Jamaica. En entrevista por correo electrónico, West-Blackwood explicó más del proyecto y su visión por la lectura.

Emma Lewis (EL): ¿Por que crees que promover el amor por la lectura en los niños es especialmente importante en este momento?

Latoya West-Blackwood (LWB): Una cultura nacional de la lectura y el conocimiento siempre ha sido importante. La pandemia acaba de poner en la mira algunas cosas que siempre hemos necesitado abordar como sociedad. Desde 2011, la BIAJ, a través del Festival del Libro de Kingston, ha hecho campaña para fomentar la lectura por placer. La experiencia cultural podría haber hecho que los niños conocieran los libros y vieran la lectura como algo para “gente brillante”, o un medio para un fin cuando se trata de obtener buenas calificaciones o aprobar un examen.

Hemos organizado actividades […] para demostrar que las historias tienen un poder real. Los cuentos profundizan la comprensión del mundo desde todos los ángulos: el ambiente, las culturas, la gestión de conflictos y el autocuidado, o hasta una buena carcajada. Nuestra preocupación actual es por los niños que antes de la pandemia tenían un acceso limitado a la literatura, y que ahora han estado aislados durante más de un año de las bibliotecas o de adultos afectuosos que alimentaban el amor por la lectura.

Para quienes tienen la suerte de tener hogares seguros y acceso a los libros, la lectura ha sido una fuente de consuelo, alegría y un escape a las dificultades que ahora enfrentamos. Estamos agradecidos por asociaciones como la que hemos formado con la GrassROOTS Community Foundation […] que nos han permitido llegar a los niños de toda Jamaica.

Niños del Centro de Lectura de Trench Town leen un libro sobre Nelson Mandela en 2013. Algunas de las donaciones de paquetes de alfabetización se hicieron a los niños de la comunidad de Trench Town. Foto de Emma Lewis, utilizada con autorización.

EL: ¿Crees que se ha producido suficiente material de lectura para niños de color en el Caribe? Y si no, ¿qué falta?

LWB: ¿Nunca habrá suficientes libros? Para mí, no. Mi sueño sería que se produjeran muchos más títulos al año, se incorporara la última tecnología digital para ofrecer una experiencia emocionante y envolvente en todos los géneros, especialmente en rubros como historia, matemáticas, ciencia y cultura. La representación importa y hay muchas historias que contar: las que enseñan, las que inspiran y las que nos hacen reír sin grandes lecciones morales.

Publicar es un negocio y hay mucho espacio para que crezca una industria propia de Jamaica y el Caribe […] que fusione la pasión con el beneficio. Hay algunos libros bien producidos por editoriales como Blue Banyan Books y el Premio CODE Burt de Literatura para adultos jóvenes. Necesitamos más programas […] que impulsen el descubrimiento de nuevos talentos con la financiación y los esfuerzos de ventas necesarios para apoyarlos.

Voluntaria empaca libros para los paquetes de alfabetización. Fotografía por cortesía de Latoya West-Blackwood, utilizada con autorización.

EL: ¿Pero hay lectores jamaicanos?

LWB: Me preguntan eso a menudo y a veces parece que hemos creído el estereotipo [de que los jamaicanos no leen]. No tenemos una sólida cultura nacional de la lectura, pero ¿hemos examinado por qué? La lectura es un hábito. La lectura es mágica, sí, pero definitivamente no es difícil averiguar por qué hay dificultades con la lectura en nuestro país.

¿Cómo presentas a los niños con los libros? ¿Tienen acceso independientemente de su clase o sus capacidades? ¿Cuántas escuelas primarias de Jamaica tienen un espacio dedicado a la lectura y al debate? ¿Cuántas comunidades cuentan con bibliotecas bien provistas, con bibliotecarios formados y una lista regular de programas y actividades para involucrar a los ciudadanos? ¿Cómo esperamos que se fomente el pensamiento crítico? ¿Con exámenes? Las respuestas a estas preguntas serán aún más relevantes ahora, cuando se produzca una alteración masiva de la educación, un aumento de la desigualdad y un énfasis en el pensamiento y las habilidades de orden superior en un mundo impulsado por la tecnología.

EL: ¿Cómo ha impactado en los niños y la lectura el aprendizaje en línea? ¿Los dispositivos aumentan o restan a la alegría?

LWB: El aprendizaje en línea ha dado una plataforma segura para seguir aprendiendo mientras esperamos que se reabran las escuelas de forma segura. También está el desarrollo de nuevas habilidades digitales para profesores, estudiantes, padres y otros interesados. Veo que un sistema híbrido es el camino del futuro.

Para los niños que antes leían y siguen teniendo acceso a los libros, las páginas han sido un lugar seguro frente a la pandemia. Para otros, la situación ha empeorado; esos son los alumnos que nos preocupan. Hará falta un esfuerzo colectivo y sostenido para volver a atraer a esas mentes, porque no hay duda del lugar que ocupan los lectores en la era de la economía global impulsada por el conocimiento. No podemos dejar rezagado a ningún niño.

Por último, no hay competencia entre los libros o contenido impreso y la tecnología. Es una mentalidad regresiva enfrentarlos, hasta con fines comerciales. La tecnología sigue moldeando y transformando cómo experimentamos el mundo. Lo mismo ocurre con la edición. Tenemos que centrarnos siempre en el aspecto de la inclusión.

Centro de Lectura de Trench Town en 2013, estas niñas leen un libro de la editorial local Blue Banyan Books. Se enviaron varios paquetes de alfabetización a la comunidad de Trench Town. Foto de Emma Lewis, utilizada con autorización.

EL: ¿Cuál es tu visión para la alfabetización en Jamaica? ¿Cómo se le puede dar un gran impulso en los próximos diez años?

LWB: Una parte fundamental de mi visión de la alfabetización en Jamaica se relaciona con el aumento de la financiación estratégica y la mejora de los resultados de aprendizaje de los niños, con dar a los alumnos de los primeros años (aquí es donde tiene que empezar el cambio) programas de alfabetización de calidad y basados en datos, en la escuela y fuera de la escuela. Tuve la suerte de trabajar con la doctora Jean Beaumont y su equipo EduConnect del proyecto Latinoamérica y el Caribe Leen, que ha dado a Jamaica y a otros países de la región un modelo de programas y evaluaciones de lectura eficaces (el Ministerio de Educación desempeña aquí el papel principal). También es necesario revisar y renovar la formación de los profesores (los profesores que no leen no pueden motivar a los alumnos para que lean bien), y la acción comunitaria (movilizar a los padres y otros interesados para que apoyen a los niños fuera del aula y hagan que la lectura sea divertida con materiales culturalmente relevantes). También es mi sueño ver a Kingston como Capital Mundial del Libro de la UNESCO.

Fuente: https://es.globalvoices.org

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Acciones educativas de lectura y escritura deben convertirse en prácticas sociales y políticas

Por: Erick Juárez Pineda

Las prácticas de lectoescritura con las y los niños se deben poner al centro de los planes educativos, no solo como estrategias pedagógicas, sino como prácticas sociales y de incidencia.

Esto lo señaló Luz María Moreno Medrano, investigadora de la Universidad Iberoamericana y Directora del Instituto de Investigaciones para el Desarrollo de la Educación  (INIDE), donde agregó que deben existir puentes entre la investigación educativa y los movimientos sociales para amplificar las mejores prácticas e incidir en la toma de decisiones en la materia.

En el marco del II Coloquio Internacional sobre Prácticas Letradas en clave Interseccional y Postcolonial, Moreno Medrano explicó que este tipo de incidencia se pudo reflejar en el Proyecto Educativo Autónomo Otomí en la Ciudad de México, en el cual desarrolló una serie de estrategias, en colaboración con la Comunidad Otomí organizada en la Ciudad de México, a través del Concejo Indígena de Gobierno (CIG), con el fin de atender las necesidades educativas de un grupo de niñas en edad escolares que habitaban en el campamento de la colonia Juárez, en la Delegación Cuauhtémoc de la Ciudad de México, donde se tomaron las instalaciones del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas.

Explicó que durante esta intervención se logró contribuir al seguimiento a los procesos de aprendizaje de la lectoescritura a través de distintos mecanismos con el uso de tabletas electrónicas, material impreso y didáctico.

«Durante este proyecto, las y los niños pudieron tener experiencias gratificantes de lectura y escritura. A través de ellas pudieron expresar y entender su realidad y crearon lazos afectivos de experiencias académicas», señaló.

De esta experiencia, destacó que se deben poner al centro las prácticas letradas como prácticas sociales y políticas, a fin de incidir en la mejora del ejercicio del derecho a la educación, además, de enriquecer las visiones del mundo a través de la experiencia de los menores, a fin de comprender los diversos contextos en los que se desarrolla.

El pasado octubre del 2020, integrantes de la Comunidad Otomí organizada en la Ciudad de México tomaron las instalaciones del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas para que se garantice su derecho a la vivienda, al trabajo, educación y servicios de salud. Ante ello, este grupo sufrió una serie de desalojos violentos de sus campamentos y los menores no tienen garantizado el acceso a la salud, educación y vivienda.

Fuente e imagen:  https://www.educacionfutura.org

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