Page 11 of 17
1 9 10 11 12 13 17

El cambio climático obliga a las niñas a casarse

Por: Estrella Digital

Además de todas las consecuencias medioambientales que pueden derivar del calentamiento global, el aumento de la desigualdad y de la discriminación contra las mujeres son otros de los problemas que este fenómeno puede acarrear.

Los efectos del cambio climático no sólo se centran en problemas medioambientales como el aumento de las temperaturas, del nivel del mar y de la frecuencia e intensidad de los desastres naturales, sino que podrían provocar y de hecho, ya lo están haciendo, serias consecuencias en las poblaciones de los países en vías de desarrollo, especialmente a las mujeres.

La brecha de la desigualdad entre hombres y mujeres, la discriminación contra ellas, el matrimonio infantil y otros factores, como la desnutrición, son algunas de las trabas a las que las féminas de los países más pobres deben enfrentarse. Esta situación se ve agravada considerablemente por los efectos del cambio climático, pues ante la escasez de recursos naturales o de trabajo, las primeras víctimas son las mujeres.

“La consecuencia es una doble discriminación para las niñas y las adolescentes, por género y edad. Son especialmente vulnerables de sufrir explotación, violencia física y sexual, matrimonio infantil o embarazos tempranos por culpa del cambio climático. Esto agranda la brecha de género entre niños y niñas, restringiendo los derechos de las jóvenes y obstaculizando su derecho a la educación”, explica Emilia Sánchez, directora de comunicación de Plan Internacional, organización que lucha por los derechos de la infancia y la igualdad de las niñas.

Tal y como explica Sánchez, ante la escasez que provoca el calentamiento global, las mujeres también sufren “tasas más altas de desplazamiento, abandono escolar, más riesgo de desnutrición, mortalidad…”. En las familias que sobreviven a la pobreza, la reducción de la producción de comida y víveres, provoca que, en los núcleos familiares, los niños tengan más acceso a los alimentos que las niñas. Además, esa necesidad convierte el casar a las niñas en una opción considerable, al conseguir así una boca menos que alimentar.

Las soluciones, tanto a la continuidad del cambio climático, como a sus consecuencias sociales y humanitarias, están tardando en estudiarse y en aplicarse. La necesidad de que los gobiernos adopten políticas relativas a este problema es realmente urgente, pero por el momento, y pasado más de un mes desde la última Conferencia sobre el Cambio Climático de 2017 de las Naciones Unidas (COP23), la implantación de nuevas medidas brilla por su ausencia.

“Es necesario que los gobiernos de todo el mundo hagan políticas y programas de adaptación al cambio climático enfocados en la infancia y género”.

Un año después del acuerdo de París, la COP23 busca proporcionar seguros de riesgo climático a unos 400 millones de personas pobres y vulnerables para el año 2020, y con este objetivo trabajan decenas de organizaciones no gubernamentales, “para instar a los gobernantes a que tomen medidas al respecto”, apunta Emilia Sánchez.

“Poner énfasis en las políticas de género para desarrollar un Plan de Acción de Género, asegurar fondos y acciones necesarias a fin de cerciorar la asistencia inmediata a las niñas y adolescentes afectadas por el cambio climático o garantizar la integración de informaciones sobre cambio climático en las políticas educativas y en los currículos escolares” son algunas de las medidas que Plan Internacional estima necesarias para frenar la realidad a la que se enfrentan miles de niñas y mujeres en todo el mundo.

Fuente: https://www.estrelladigital.es/articulo/mundo/menores-obligadas-casarse-culpa-cambio-climatico/20171228130841338331.html

Comparte este contenido:

Madres adolescentes de Cotonou (Benín), víctimas de abuso y rechazo, encuentran acogida en la Maison du Soleil

Benín/14 diciembre 2017/Fuente: Telecinco

Vanessa es beninesa, tiene 16 años y es madre de un bebé de 9 meses, Aicha. Se marchó de su casa para vivir con su tía y así tener un futuro mejor pero su vida se truncó cuando fue violada por un vecino y expulsada por su propia tía de la casa, al quedarse embarazada.
La joven recuerda su historia casi en un susurro. «No sabía a dónde ir y un hombre me habló del servicio de protección del menor», relata. Desde allí la trasladaron a la Maison du Soleil de Cotonou, una casa de las salesianas cuya construcción ha financiado Manos Unidas y donde viven un total de 10 niñas menores de 18 años, que han sido víctimas de abusos y violencia, con embarazos precoces y no deseados y que viven en una situación de desprotección y dificultad extrema. En la actualidad, tres de las menores acogidas han sufrido incesto, procediendo el abuso sexual, sobre todo, de los nuevos cónyuges de sus madres y de sus abuelos.
A través de la labor de psicólogos, asistentes sociales y médicos se ofrece a las jóvenes asistencia sanitaria, psicológica, educación sexual, asistencia jurídica -por ejemplo, para reclamar la paternidad–, se les enseñan sus derechos, cómo defenderse de sus agresores y se trabaja en su reinserción familiar, según explica el director de la casa, Micdadou Coulibaly.
Las jóvenes son acogidas durante su embarazo y con sus bebés, durante un periodo aproximado de 6 a 9 meses, hasta que se consigue garantizar su estabilidad. El problema aparece cuando llega el momento de ser reinsertadas y algunas de ellas no pueden por casos de malos tratos u otras dificultades familiares. «Me gustaría volver con mi madre pero hay muchos problemas», explica Vanessa entre lágrimas, al pensar que dentro de poco tiempo tendrá que abandonar esta casa que se ha convertido en su «hogar». En estos casos, alargan el periodo de estancia e intentan sensibilizar a la familia, según precisa Coulibaly.
A Vanessa le gustaría en un futuro poder montar su propio restaurante, al igual que Olga, de 18 años y madre de un niño de 18 meses, que ha conseguido levantar su propio negocio de jabonería tras pasar por la Maison du Soleil y por la Maison de l’Esperance. Olga se quedó embarazada y el padre del niño no quiso hacerse cargo, así que acabó en la casa de acogida de las salesianas de Cotonou. En abril se reintegró en su familia, en casa de su madre y dice que le va «genial» con su negocio, vendiendo jabones a sus familiares y a peluquerías.
«Hay esperanza», asegura Olga desde la Maison du Soleil a la que a veces vuelve para contar su testimonio a las demás chicas. Cuando sus coetáneas le preguntan sobre si es una vergüenza estar allí acogidas, ella niega rotundamente con la cabeza y anima a las jóvenes a seguir adelante junto a sus hijos, que durante esos primeros nueve meses de vida duermen seguros, comen, ríen, corren y juegan felices.
Olga es un ejemplo de lo que estas madres adolescentes y otros muchos niños y niñas de la calle pueden conseguir gracias a la Maison de l’Esperance (Casa de la Esperanza), ubicada junto a la Maison du Soleil, donde se ofrecen cursos de pastelería, panadería, jabonería y cocina. La directora de esta casa, Fanny Ogoun, explica que unos 60 niños y jóvenes de 14 a 20 años pasan cada año por estos talleres que tienen una duración de nueve meses, más otros tres de prácticas. Tras este periodo, reciben un diploma y les ayudan a redactar su currículo y a buscar empleo. Ogoun asegura que en torno a un 70 por ciento obtienen un trabajo.
VENDIDA PARA TRABAJO DOMÉSTICO
Por esta formación también pasó Abla, una joven de 17 años originaria de Togo que trabaja como pastelera en Benín. En el año 2008, cuando tenía 9 años, la secuestraron junto a su hermano y les vendieron en Nigeria. Ella fue comprada por una mujer para la que estuvo realizando durante cuatro años trabajos domésticos sin salir de la casa. Cada año, miles de niños son víctimas de trata y transportados fuera de las fronteras de Benín para realizar trabajos forzosos y peligrosos.
Algunas de ellas consiguen escapar de esta vida gracias a proyectos como el internado de las salesianas de Don Bosco en Benín, que en todos sus proyectos de acogida han ayudado a unas 20.000 menores en los últimos 16 años. Con su internado, cuya ampliación ha sido financiada por Manos Unidas, ofrecen un hogar a niñas de hasta 17 años que han sido víctimas de trata, explotadas o que han sufrido maltrato y abusos, hasta que encuentran a sus familias.
En el caso de Abla, fue el Servicio de Protección del Menor de la Policía de Benín el que entró en contacto con las salesianas de San Juan Bosco para contarles su caso. Así es como entró en el internado, donde ha vivido desde entonces hasta que este año localizaron a sus padres. Las salesianas habían recorrido once localidades y habían puesto anuncios en la radio. Al poco tiempo, el padre de la joven llamó al teléfono que escuchó a través del transistor. Llevaban buscándola desde 2008.
El pasado 27 de noviembre -que han acordado como el cumpleaños de la joven, ya que la familia no recuerda su fecha exacta de nacimiento–, se produjo el reencuentro en Benín, con dificultades de comunicación ya que la madre solo habla una lengua local que la menor no conoce. Si bien, de momento Abla solo quiere pasar un mes con su familia en Togo y volver a Benín, pues es allí donde tiene su trabajo como pastelera.
Además, teme que a su edad, si vuelve con sus padres, estos puedan concertarle un matrimonio forzado, otro de los principales problemas a los que se enfrentan las niñas beninesas. Este tipo de arreglos matrimoniales ocurren en un 34 por ciento de casos entre las jóvenes menores de 18 años de Benín. Además, el 8 por ciento de las menores de 15 años están casadas, según UNICEF.
En 2015, el Parlamento beninés aprobó el nuevo Código del menor que, entre otras cuestiones, pone fin a la impunidad de los matrimonios infantiles y juveniles y desarrolla líneas de actuación para sensibilizar sobre este problema. Sin embargo, ONG y religiosos que trabajan en el sector denuncian que el Gobierno no está destinando medios y recursos suficientes.

Fuente noticia: http://www.telecinco.es/informativos/sociedad/Madres-Cotonou-Benin-Maison-Soleil_0_2482726056.html

Fuente imagen: http://img.europapress.net/fotoweb/fotonoticia_20171213153648_500.jpg

Comparte este contenido:

Los docentes son primordiales para toda respuesta eficaz a la violencia de género en el entorno escolar (Parte I)

UNESCO/ Autor: Informe GEM / Fuente: Blog de la Educación Mundial

La violencia escolar puede ser física, sicológica o sexual; puede tener lugar dentro de la escuela, en el camino entre la casa y la escuela o en el ciberespacio; y puede comprender acoso, castigos corporales, abuso verbal y emocional, intimidación, acoso y agresiones sexuales, actividad pandillera y la presencia de armas entre los alumnos. Entre los diversos factores que contribuyen a la violencia escolar dirigida a los niños y adolescentes, la dimensión de género es uno de los más destacados. La violencia de género afecta negativamente los resultados del aprendizaje. Esta es el primero de dos blogs que se publican como respaldo a la campaña de 16 días para acabar con la violencia.

Las escuelas no pueden aislarse socialmente de sus comunidades

Las ideas preponderantes pueden excusar a los chicos u hombres por sus manifestaciones de agresión, violencia, poder sexual y homofobia. Por el contrario, de las chicas y mujeres se espera deferencia a los hombres y chicos, sumisión y pasividad. Así pues, el comportamiento de los docentes puede ser un reflejo de los prejuicios que existen en las sociedades en un sentido más amplio. Por tanto, los docentes, tanto hombres como mujeres, necesitan formación para comprender y reconocer sus propias actitudes, percepciones y expectativas relacionadas con la cuestión de género, de tal forma que sus interacciones con los alumnos no influyan negativamente en las experiencias y logros del aprendizaje de los chicos y chicas. En Turquía, por ejemplo, un curso corto de formación de docentes antes del empleo sobre la equidad de género produjo mejoras considerables en cuanto a las actitudes relativas a los roles de género.

En algunos casos son los docentes los que cometen abusos y explotación de tipo sexual

quote 1Sin embargo, aunque los docentes deben actuar para hacer frente a la violencia de género en el entorno escolar, algunos son a su vez los que cometen los abusos y la explotación de tipo sexual, con frecuencia impunemente, tal como demostró un documento de políticas del Informe GEM. En 42 escuelas primarias de Uganda, el 54% de los alumnos denunció actos de violencia física cometidos por miembros del personal.

Una encuesta de 2010 del Ministerio de Educación Nacional de Côte d’Ivoire determinó que el 47% de los docentes había tenido relaciones sexuales con alumnos. En Sudáfrica, una encuesta nacional reciente concluyó que el 8% de las alumnas de secundaria había sufrido violaciones o agresiones sexuales graves el año anterior en la escuela.

2En el marco de la encuesta del SACMEQ de 2007, el 39% de los directores de escuela afirmó que en sus instituciones habían ocurrido casos de acoso entre profesores y alumnos. Esto variaba ampliamente entre los sistemas educativos, concretamente de aproximadamente una quinta parte de las escuelas encuestadas en Mauricio y Mozambique, a más de tres cuartos en Seychelles (Gráfico 1).

Los estudios de otras regiones confirman que la violencia sexual en las escuelas no es un fenómeno que se limita a África Subsahariana. Un estudio en los Países Bajos demostró que el 27% de los alumnos había sido víctima de acoso sexual por parte del personal escolar. En el Reino Unido, se estima que un tercio de los jóvenes de 16 a 18 años ha experimentado contacto sexual no deseado en las quote 2escuelas. Las chicas de la República Dominicana, Guatemala, Honduras, México, Nicaragua y Panamá sufren frecuentemente acoso sexual en la escuela y “chantaje sexual” por las calificaciones. Ciertos estudios a pequeña escala en Bangladesh, la India, Nepal y Pakistán también informan sobre gestos sexuales por parte de los profesores hacia las chicas. Una encuesta sobre la violencia de género en las escuelas en Malawi determinó que aproximadamente una quinta parte de los docentes decía estar al tanto de que ciertos colegas presionaban a las chicas para tener relaciones sexuales, o las obligaban.

Las relaciones entre la pobreza, la violencia y las desigualdades de género complican la cuestión. En la República Unida de Tanzania, el 41% de los directores de escuela de los 3planteles más pobres informaron sobre acoso sexual de los docentes hacia los alumnos, en comparación con el 20% en los más ricos. No obstante, en otros países, como Lesotho, Namibia y Mozambique, se informó sobre más casos de acoso de profesores a alumnos en las escuelas más ricas. En Sierra Leona, las chicas que no pueden pagar los gastos relativos a la escuela suelen ser obligadas por los profesores a tener relaciones sexuales.

Dicho esto, los ejemplos presentados en este blog reflejan actos de una minoría y no de la parte más considerable de los docentes. La mayoría, como hemos demostrado en numerosas ocasiones, son los pilares de un sistema educativo en funcionamiento, y su propia motivación, dedicación e innovación son, en muchos casos, la clave del éxito de un niño en la escuela.

Además, no puede ignorarse la influencia de las normas sociales, en lo relativo a la autoridad y los roles de género, en las actitudes de los docentes en la escuela, a pesar de que sus efectos indirectos no pueden nunca excusarse. Este vínculo muestra de manera muy clara la necesidad de cambiar el enfoque de los debates normativos, pasando de la equidad de género a la igualdad de género.

Al considerar hasta qué punto deberán participar los docentes en el establecimiento de las normas de género, también deberá tomarse en cuenta que el contenido con el que trabajan en el aula transmite con frecuencia mensajes negativos sobre la igualdad de género, como ha demostrado nuestra investigación. En 10 países de África oriental y meridional, un examen a fondo de los planes de estudio reveló que muchos no tenían en cuenta la violencia por motivos de género y en la pareja. Además, mientras que un gran número se centraba en los derechos humanos, pocos trataban cuestiones como los derechos sexuales o la diversidad sexual. El tema del matrimonio infantil se omitía o no se abordaba adecuadamente en muchos países donde era frecuente, como Kenya, Lesotho y Malawi.

El papel fundamental de los docentes como vehículos del cambio, y algunas veces como autores del mismo, requiere que se les considere parte de la solución. La mala aplicación de la legislación, los códigos de conducta inadecuados, los sindicatos de docentes débiles, y la falta de formación sobre la violencia sexual contribuyen a que las normas de género nocivas sigan pasando inadvertidas, y con frecuencia permiten que los responsables actúen impunemente, como demostrará nuestro próximo blog. La rendición de cuentas, tal como concluirá, puede resultar útil.

Fuente del Artículo:

https://educacionmundialblog.wordpress.com/2017/12/05/los-docentes-son-primordiales-para-toda-respuesta-eficaz-a-la-violencia-de-genero-en-el-entorno-escolar-parte-i/

Comparte este contenido:

La trsite correlación entre el calentamiento global y el matrimonio infantil

Por: Pousta

Improbable pero cierto.

Cada sociedad tiene una idea fija del impacto que puede generar el cambio climático en su cultura y estilo de vida. La preocupación en Chile radica principalmente en la pérdida de los glaciares milenarios del extremo sur del país y cómo el aumento de las temperaturas puede afectar la agricultura en un futuro cercano.

Sin embargo para muchas naciones del mundo, la imagen del calentamiento global se traduce en miles de niñas obligadas a la maternidad cuando no han cumplido siquiera 14 años al ser puestas en venta por sus propias familias como un fin para salir de la hambruna causada por monzones y sequías.

El cambio climático está creando una nueva generación de niñas que deben contraer matrimonio como única forma de supervivencia, y te equivocas si crees que se trata de un problema de países de África Subsahariana o del Medio Oriente.

En Estados Unidos se han casado más de 200 mil menores de edad en un periodo de 15 años, incluyendo tres niñas de 10 y un niño de 11 años. Países como Arabia Saudita permiten que la edad para contraer matrimonio sea como cada familia lo estipule, y en México se legisla recién esta semana para que en algunos lugares de su territorio los menores de edad no puedan casarse.

“Esposas del Sol”, organización que comienza a visibilizar la relación del matrimonio infantil con el cambio climático –específicamente en Malawi- afirma  que cada día más de 37 mil niñas son obligadas a contraer matrimonio en el mundo y la situación va en aumento según advierte la entidad.

Agnes Mposwa de de 15 años, conversó con los miembros de la organización mientras sostenía a su hija de dos años en los brazos. Su vida en una sencilla aldea de Malawi se vio completamente truncada cuando sus padres –granjeros de tabaco- vieron sus ingresos limitados luego de una fuerte sequía que azotó el interior del país.

Si el clima no hubiese cambiado, en este momento estaría estudiando. Mis padres hicieron todo lo posible para evitar la situación, pero finalmente, no hubo otra alternativa” aseguró al sitio.

La correlación entre el aumento de las temperaturas y el matrimonio infantil se refleja también en Afganistán, país cuya economía se basa principalmente en el cultivo de amapolas para posteriormente extraer  heroína.  En el país un 57% de las mujeres contrae matrimonio antes de los 19 años por factores que van desde la estructura familiar hasta la religión, agregando la alicaída situación de la agricultura insostenible en un clima de contrastes que se acentúa al extremo debido al calentamiento global. En consecuencia, las familias venden a sus hijas  intentando alejarlas del hambre.

La situación es incluso peor en Bangladesh, donde el 30% de las mujeres en el país se casa antes de cumplir 15 años. Mientras el nivel del mar sube y el agua destruye los recursos, las familias sienten una presión aún mayor por casar a sus hijas y poder apalear los costos de las pérdidas causadas por los monzones.

Unicef también ha dicho que de los 15 millones de matrimonios infantiles que ocurren al año, un 18% corresponden a varones. Esto equivale a 2 millones y medio de “niños esposos”.

Fuente: https://pousta.com/calentamiento-global-matrimonio-infantil/

Comparte este contenido:

El matrimonio infantil sigue siendo un grave problema en Indonesia

Por: Agencia Anadolu

Actualmente, una de cada siete niñas contrae matrimonio en Indonesia antes de llegar a los 18 años.

A la edad de 14 años, Ika (quién decidió no dar su nombre verdadero), se casó y ahora, con 18 años, es madre de un niño y una niña.

“A mis padres les asustaba que yo cayera en el adulterio así que el matrimonio era visto como una forma de evitar que eso sucediera. Yo nunca dejaría que mi hija se casara a tan corta edad, eso me dolería. Quiero que ella estudie y reciba educación”, le dijo Ika a la Agencia Anadolu en una visita a la aldea de Ancolmekar en Java Occidental.

El matrimonio infantil es un tema serio en Indonesia, el séptimo país en el mundo que presenta los mayores números de matrimonios de este tipo. Se estima que una de cada cada siete niñas contrae matrimonio en ese país antes de llegar a los 18 años, la edad recomendada para casarse según las organizaciones internacionales de derechos humanos.

La pobreza, falta de educación y, hasta cierto punto, las normas culturales, son algunos de los factores que contribuyen a la prevalencia del matrimonio infantil en Indonesia. De acuerdo con un estudio liderado por la Agencia de Estadísticas de Indonesia y la Unicef, el 30,5% de las niñas en Java Occidental están comprometidas. El estudio cubrió el periodo del 2010 al 2015.

Ika junto con otras docenas de mujeres y niñas, hacen parte de un encuentro bimensual organizado por Bale Istri, que significa “la sala de las esposas”. El encuentro informal fue impulsado en sus inicios por el Instituto Sapa, una plataforma de comunicación y educaciónpara mujeres respaldada por el Gobierno local, en 2007.

En su décimo año, Bale Istri es auto sostenible, ofrece con regularidad discusiones, reuniones y sesiones de terapia abiertas a todos sus miembros. Una vez al mes, se reúnen para leer el Corán, escogiendo versos específicos para empoderar a las mujeres.

“Las actividades que se realizan en Bale Istri son dirigidas a todas las mujeres, tanto para madres, como para jóvenes y niñas que aún no se han casado. El matrimonio infantil es una cadena que se tiene que romper y aquí, los padres aún son los actores que toman las decisiones en la casa, así que esperamos influenciarlos y hacerlos cambiar de parecer”, le dijo a la Agencia Anadolu Dindin Syaripudin, coordinador del programa en el Instituto Sapa.

Igualdad de género para generar un cambio

Una de las agendas que tiene Bale Istri es mantener las discusiones abiertas acerca de la igualdad de género esperando que así se puedan reducir los casos de violencia que viven las mujeres a nivel local, incluyendo en este punto, el matrimonio infantil.

Dindin no duda en ponerle la etiqueta de víctimas a las novias jóvenes. Dice que en efecto, ellas son víctimas en la medida en la que les quitan múltiples derechos cuando son obligadas a contraer matrimonio.

“Muchas de ellas han tenido que dejar sus estudios desde la secundaria, tampoco pueden disfrutar de su niñez como lo merecen”, explicó Dindin.

Muchos residentes locales comparten ese mismo pensamiento y llevan a cabo sus protestas de manera personal en contra del matrimonio infantil.

 

 Ruslan, un oficiante de matrimonio en la aldea, se rehúsa completamente a solemnizar algunas uniones. Ruslan es firme en su obligación de supervisar que la novia y el novio sean mayores de edad.

“Moralmente no me siento bien, así que termino rechazando a las parejas adolescentes que se quieren casar. Por supuesto, recibo una multa por esto. Otro oficial puede hacer la ceremonia para ellos”.

Se cree que detrás del matrimonio infantil hay varios problemas sociales como violencia doméstica, altas tasas de mortalidad tanto en madres como en niños, divorcio e incluso tráfico humano. De acuerdo con la Ley de 1974 de Matrimonio en Indonesia, es legal que las niñas que tengan de 16 años en adelante se casen, aunque en el caso de los hombres, deben tener mínimo 19 años. Esto va en contra de la ley de protección a la infancia del 2002, la cual define que un niño es considerado tal hasta haber cumplido los 18 años.

Enfoque en cinco provincias

Un programa del Ministerio del Empoderamiento de Mujeres y Protección a la Infancia (PPPA) hizo a principios de noviembre un llamado para poner fin a la práctica del matrimonio infantil.

El programa, denominado “Gerakan Bersama Stop Perkawinan Anak” está enfocado en cinco provincias (Islas menores de la Sonda occidentales, Java Occidental, Java Central, Java Oriental y Célebes Meridional) en donde se encontraron las mayores cifras referentes a las novias niñas.

La idea es ambiciosa. Busca cambiar la mentalidad del público y resaltar las penurias a las que una novia niña se debe enfrentar de por vida.

“Estamos llegando a la raíz del problema al querer poner fin al matrimonio infantil. Únicamente después de esto, podremos tratar de reducir la tasa de mortalidad en madres y niños, mejorar la calidad de la educación y el índice de desarrollo humano”, le dijo a la Agencia Anadolu Lenny Rosalin, viceministra para el crecimiento infantil del PPPA.

De acuerdo con la Unicef, ponerle fin al matrimonio infantil sigue siendo una tarea para Indonesia como parte de los Objetivos de Desarrollo Sostenible para el año 2030. Ellos creen que la educación es una estrategia que ha probado ser exitosa en cuanto a la reducción del número de matrimonios infantil a nivel global.

“Apoyar a las niñas para completar sus estudios de secundaria ha comprobado ser un factor importante en el esfuerzo de prevenir el matrimonio infantil”, dijo Emilie Minnick, especialista de protección infantil en Unicef Indonesia.

“La educación secundaria contribuye a brindarle a las niñas el conocimiento y habilidades que necesitan para evaluar decisiones importantes, así como incrementar oportunidades de empleo, lo cual podría ayudar a reducir la pobreza”.

Además de esto, la Unicef también emprende iniciativas para poner fin al matrimonio infantil al involucrar directamente a los jóvenes en tales esfuerzos y en asegurar su participación en temas que los afectan a ellos.

En las últimas tres décadas, Indonesia notó una disminución de más del doble en la prevalencia del matrimonio infantil.

Sin embargo, reportes de la Unicef-BPS evidenciaron que la tendencia se ha visto estancada y que los números únicamente han disminuido en un 7% en los últimos siete años. Actualmente, las cifras de matrimonios infantiles en Indonesia siguen siendo unas de las más altas en la región Oriental de Asia y del Pacífico.

Fuente: http://www.semana.com/educacion/articulo/el-matrimonio-infantil-sigue-siendo-un-grave-problema-en-indonesia/548667

Comparte este contenido:

Matrimonio infantil en México conlleva pobreza, violencia sexual y limitado acceso educativo: ONU

México/20 de Noviembre de 2017/Vanguardia

En México más de un millón 200 mil menores de edad están casados, de los cuáles la mitad son pobres y más del 70 % no va a la escuela, y se encuentran expuestos a la violencia sexual.
Itzel tiene quince años y se casó a los catorce. Su esposo, Jesús, tiene diecisiete. Se conocieron en San Quintín, en el norteño estado de Baja California, cuando la madre de ella fue a trabajar al campo y se la llevó.  “Lo conocí y me enamoré”, relata la joven. Los adolescentes pasaron dos meses juntos y decidieron casarse, tras lo cual se mudaron a casa de los padres de él, en el sureño Oaxaca. “Se siente raro estar casada, cuando estaba sola salía a divertirme y ahora no se puede”, lamenta.

Jesús sale todos los días a cuidar a los animales y hacer el mandado, mientras Itzel realiza las labores del hogar, donde pasa mucho tiempo en soledad, lo que le hace recordar a su madre, a quien dejó sola porque ella era su única compañía. “A otros adolescentes que quieren casarse yo les diría que lo piensen porque tampoco está bien, uno se separa de su familia y ahora digo, ¿por qué lo hice si yo tenía la oportunidad de estudiar?”, confiesa la menor en un testimonio para la organización de protección a la infancia, Save the Children.

En México, una de cada cinco mujeres contrajo matrimonio antes de cumplir la mayoría de edad, de acuerdo con un reporte del organismo, basado en estadísticas del INEGI sobre nupcialidad. Tan sólo en 2015 se casaron o unieron en el país 300 mil niños, niñas y adolescentes, si bien el número de uniones en menores de edad ha ido en descenso: en 2015 pasó de 48,112 niñas de entre 15 y 17 años a 20,177, y de 2,835 a 606 en menores de 15 años.

La mayoría de estos jóvenes viven en situaciones de vulnerabilidad: 80 % de los niños trabajan con poca o nula preparación y el 70 % de las niñas se dedica al cuidado del hogar y la familia, sin posibilidad de crecimiento, advirtieron investigadores en un foro sobre Matrimonio infantil realizado en la Ciudad de México. La mitad del total de menores casados vive en situación de pobreza, y 72 % de los niños casados no asisten a la escuela.

Las niñas además enfrentan la inequidad de género, lo que las vuelve aún más vulnerables: sufren 49 % más violencia física, 68 % más violencia sexual y 16 % más violencia económica que las que se casaron siendo mayores de edad. También hay importantes diferencias con sus pares varones: en 2010 se casaron 100 niños menores de 15 años y 10,529 de entre 15 y 17, reduciendo el número hasta llegar a 10 y 3,545 respectivamente en 2015. Esta dramática diferencia se debe a que las niñas suelen contraer matrimonio con hombres mayores que ellas: hasta 65 % se casó con un hombre que le llevaba más de 10 años, según Estela Rivero, investigadora de la organización Investigación en Salud y Demografía (INSAD).

Fuente: http://www.vanguardia.com.mx/articulo/matrimonio-infantil-en-mexico-conlleva-pobreza-violencia-sexual-y-limitado-acceso-educativo

Comparte este contenido:

El matrimonio infantil en la India

India/06 noviembre 2017/Fuente: Kienyke

n India, la edad legal para contraer matrimonio es 18 años. Sin embargo, la violación conyugal no se consideraba delito: un hombre podía tener relaciones sexuales con su esposa aún si ella es menor de edad. Hasta ahora la Corte Suprema de India anuló esa cláusula legal.

La sentencia determina que las niñas menores de 18 años podrían acusar a sus esposos de violación, siempre y cuando reporten el hecho dentro de un año de haber sido forzadas a tener relaciones sexuales. “Los derechos humanos de una niñas están vivos y coleando esté casada o no y merecen reconocimiento y aceptación”, señalaron los jueces que participaron en el histórico fallo.

En India 26,6 millones de mujeres menores de 18 años contrajeron matrimonio o algún tipo de unión marital, lo que convierte a este país con el mayor número de casamientos en el mundo. Adicionalmente está entre los 10 primeros países donde es más común el matrimonio infantil.

A las mujeres indias las consideran una carga económica, por ello desde su nacimiento sus padres tratan de arreglar matrimonios lo antes posible para desprenderse de esa responsabilidad, que pasa al marido y su familia. Además el objetivo de los casamientos tempranos es minimizar el deshonor asociado a la conducta sexual inapropiada de la mujer, debido a que el matrimonio es un pilar fundamental en India.

Hasta este momento el gobierno de ese país ha dicho que la práctica del matrimonio infantil es un obstáculo para el desarrollo, porque es más difícil erradicar la pobreza y el hambre, lograr la educación primaria universal, promover la igualdad de género, proteger la vida de los niños y mejorar la salud de las mujeres.

Como el caso de una mujer que se casó a los 10 años y su primer hijo lo tuvo a los 12. Ahora tiene seis hijos y ninguno va al colegio por su familia es muy pobre para darle educación a los niños.

Los jueces del Alto Tribunal también mostraron su preocupación por los matrimonios ilegales, por esto les hizo un llamado a las autoridades estatales para disminuir estos casos.

El tema que todavía no ha sido abordado por los magistrados es la violación entre dos adultos, una práctica que no es un delito en India. Para el gobierno indio el concepto de violación marital no puede aplicar al “contexto indio”porque ese contexto determina que la esposa debe mantener sexo con su marido y tener muchos hijos, es decir, predomina la percepción de que la mujer debe cumplir con el papel de cónyuge y madre.

Después de que una mujer cumpla los 18 años la ley no considerará violación ya no se tendrá en cuenta la sentencia del Tribunal Supremo.

De esta manera es difícil saber si las mujeres se van a atrever a denunciar por lo que son empujadas a guardar silencio cuando sufren violencia sexual, sin contar el temor a las represalias, la presión social y familiar que reciben cuando denuncian.

Fuente: https://www.kienyke.com/historias/menores-india-violacion

Comparte este contenido:
Page 11 of 17
1 9 10 11 12 13 17