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Reciclar pilas y baterías, una tarea pendiente

Por: EducaBolivia/24-02-2017

Las pilas, las baterías o los acumuladores funcionan a base de muchos elementos químicos que, al reaccionar, producen la corriente eléctrica;  contienen metales y sustancias químicas tóxicas: el mercurio, el cadmio o el plomo que son peligrosos para la salud y el medio ambiente,  si no se tratan de forma adecuada. Son muy útiles, pero cuando se gastan pueden ser muy nocivas, no pasa nada malo mientras el dispositivo está en buenas condiciones; pero como todo, en algún momento dejan de servir.

Por ejemplo las pilas son residuos muy pequeños que con frecuencia se acumulan en los hogares o se tiran a la basura como si fueran un residuo orgánico. Al no deshacerse de ellas en el contenedor específico, acaban en vertederos. Este hecho puede repercutir de forma directa en la madre tierra, no solo por la liberación de compuestos indeseados, sino también porque no se podrán recuperar los metales que contienen.

Las pilas y baterías de los aparatos eléctricos que utilizamos son un elemento constante en nuestro día a día, que estamos acostumbrados a utilizar pero no siempre sabemos cómo eliminar, una vez que ha cumplido su vida útil. Por ello, te damos algunas recomendaciones:

•    Opta por las pilas recargables, pues pueden sustituir a 300 desechables

•    Evita el uso de pilas y baterías, siempre que sea posible. Todas la pilas, unas más que otras son nocivas para el medio ambiente si no se reciclan adecuadamente.

•    Usa y promueve productos que funciones con cuerda, energía solar y energía eléctrica.

•    Cuando se gaste una pila o una batería no la tires a la basura, puesto que en poco tiempo el revestimiento de la misma se acaba destruyendo en poco tiempo y los metales pesados del interior acaban llegando al medio ambiente.

•    No permitas la incineración de pilas y baterías, ya que los compuestos tóxicos acaban liberados en la atmósfera. Por otra parte, si los metales pesados acaban entrando en la cadena alimentaria, pueden llegar a acumularse en grandes cantidades en nuestros alimentos, llegando a ser potencialmente tóxicos.

•    No entierres las pilas, ya que contaminan la tierra, el subsuelo y el agua  una vez que se oxida su cubierta de metal.

•    Si tienes pilas agotadas en tu casa, puedes guardarlas en envases de vidrio o plástico, lo más densos posibles, bien sellados y fuera del alcance de los niños, bajo ningún concepto lo tires a la basura.

Que tenemos que hacer?

Es necesario que tomemos conciencia del verdadero problema que significa e implica para nuestro futuro, nuestra salud y nuestros hogares la no implementación de políticas tendientes al tratamiento de residuos generado por pilas y baterías; en este sentido, debería haber una política nacional implementada por los distintos niveles de gobierno que ayuden a mitigar este efecto que ocasiona un daño irreparable a la madre tierra.

También es  absolutamente necesario que comencemos el verdadero cambio por nuestro círculo de acción más íntimo, en nuestra casa, en nuestros trabajos, en nuestra familia y principalmente en nuestros hábitos más arraigados y cotidianos.

Adoptar el hábito de colocar pilas y baterías gastadas en un recipiente para llevarlas al contenedor adecuado, es saludable para todos y resulta muy sencillo; además, con esta acción estarás contribuyendo a cuidar nuestro planeta.

Fuente: http://www.educabolivia.bo/index.php/estudiante/actualidad-y-estudios/4687-importancia-de-reciclar-pilas-y-baterias

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El espejismo del «reciclaje»

Por: Ecoportal/18-02-2017

El reciclaje del plástico no funciona y no es una solución sostenible. Es un montaje que nos hace sentir bien y nos aleja de las soluciones verdaderas.

La triste realidad es que cuando pones un plástico en un contenedor de reciclaje nadie se responsabiliza de que vaya a ser empleado para nada.

En realidad, las posibilidades de que sea convertido en otro objeto de plástico similar (es decir reciclado de verdad como el metal o el vidrio) son mínimas por no decir que nulas.

Lo normal es que los plásticos terminen en la basura o en el medio ambiente, con un costo terrible para el planeta y la salud humana, no sólo ahora, sino para muchas generaciones futuras.

El mal uso intencionado de la palabra “reciclaje”

Poner un plástico en un contenedor especial no es “reciclar”, ya que nadie garantiza que se vaya emplear para nada, y mucho menos que vaya a ser reciclado de verdad.

Por razones técnicas y económicas el plástico es muy caro y complicado de reciclar de verdad, es decir, en ciclo cerrado como el metal o el vidrio.

Salvo algunas excepciones, lo mejor que le puede pasar al plástico que ponemos en un contenedor es que sea convertido en otros objetos no reciclables (lo que se llama downcycling),  plásticos de inferior calidad, textiles… Es decir, que sólo estamos retrasando su llegada al basurero.

Además, el downcycling no frena la necesidad de fabricar millones de toneladas de plástico nuevo para fabricar cada vez más objetos desechables. Y en el supuesto de ciencia ficción de que consiguiéramos someter a “downcycling” el 100% de los plásticos que se fabrican, ¿qué haríamos con los objetos generados? ¿Tapizar el mundo entero con tejidos de forro polar?

La falacia de los triángulos de reciclaje

Otra falacia notable es los símbolos triangulares de “reciclaje” con flechas que vemos dibujados o grabados en los plásticos y que llevan un número dentro. Esos triángulos con flechitas en absoluto quieren decir que ese plástico sea reciclable. Los números son una manera de agrupar en 7 clases las más de 80.000 resinas plásticas que hay en la actualidad, y las flechitas no quieren decir absolutamente nada, simplemente están ahí para engañar al consumidor. Muchos grupos llevan años pidiendo que esos símbolos engañosos sean eliminados.

¿Sorprendido?  Los secretos sucios del “reciclaje” del plástico no acaban ahí.

Los ciudadanos ponemos plástico en los contenedores de reciclaje pensando que serán reciclados en objetos similares. Sin embargo la mayor parte del plástico que ponemos en los contenedores es arrojado al basurero, incinerado, o exportado a países como China.

En 2011 la UE exportó  3.4 millones de toneladas de basura de plástico, sobre todo a China, para ser incinerada aprovechando que las normativas ambientales son más laxas, o para que sea convertida en objetos no reciclables (downcycling), todo ello en condiciones ambientales y de salubridad deplorables. Canadá, EEUU y otros países ricos también exportan sus desechos plásticos a Asia.

En algunos de los países con mayores tasas de “reciclaje” del mundo, como Alemania, más del 50% del plástico que se recupera es quemado directamente en incineradoras, con un terrible impacto  en la salud de las personas y en el medio ambiente.

Mirando todo esto, poner plástico en contenedores especiales no debería llamarse “reciclar”.  Estamos más bien ante un negocio opaco y engañoso, diseñado para que nos quedemos con la conciencia tranquila y sigamos enganchados a los plásticos de usar y tirar, los cuales permiten beneficios millonarios a unos pocos, a costa de la salud y del medio ambiente de todos. (fuentes de datos)

El falso “éxito” del reciclaje en Europa

Años de adoctrinamiento y de un enorme gasto de dinero público han dado lugar  a sofisticados sistemas de recuperación de algunos tipos de plástico (como el PET) en varios países europeos.

La industria menciona estos sistemas como ejemplos de que el reciclaje de plásticos es una solución verdadera y sostenible y los gobiernos les secundan en esta falacia para no tener que dar explicaciones ante los ciudadanos por haberse convertido en basureros al servicio de una de las industrias más poderosas del mundo. Veamos lo que ocurre en realidad.

Según las propias cifras de la industria, en Europa se recuperan sólo en torno al 25% de los plásticos que se producen. Dentro de ese 25%, en términos de residuos generados por los consumidores europeos, en 2011 se recuperaron 14.3 millones de toneladas, un 58%.  Parece que no está mal como cifra, pero ¿a dónde va todo este plástico recuperado? Un 25% de esa cantidad, 3.4 millones de toneladas, se exportan, casi todo a China. (fuentes)

¿ Y qué pasa con el resto?  En países como Alemania o los países nórdicos más de la mitad es quemado en incineradoras. Osea que de cada cuatro plásticos que el consumidor europeo pone en un contenedor “para reciclar”, dos son quemados, y uno exportado a China (donde será quemado o usado en downcycling sin garantías ambientales ni laborales). ¿Y qué pasa con el 25% restante?  Dependiendo del tipo de plástico (¡hay miles!) y del lugar donde sea recuperado, pueden ocurrir tres cosas: que vaya directamente al basurero (lo más normal), que sea convertido en algo no reciclable (textiles, plásticos de baja calidad, etc) o, lo más raro de todo, que efectivamente sea convertido en un objeto parecido y que, que a su vez, sea reciclable de nuevo.  Este porcentaje mínimo residual sería la verdadera tasa de reciclaje real de Europa.  Una realidad  muy diferente a lo que quieren hacernos creer cuando nos animan a “reciclar”.

Esta es la lamentable verdad del reciclaje que nadie, ni los gobiernos, ni la industria, ni los que se lucran con todo esto quieren que sepamos.

¿Qué pasa en los países en vías de desarrollo, donde vive el 85% de la población mundial?

En EEUU el porcentaje de plásticos recuperados (que no es lo mismo que reciclados) frente a los producidos apenas supera el 7%. En Europa es de un 25%. Ya hemos visto que dos tercios de estos plásticos se exportan a países pobres o se incineran, y el resto, salvo una pequeña parte, terminan en los basureros.

Imagina ahora cuáles son los porcentajes de recuperación de plásticos en los países en vías de desarrollo, donde vive el 85% de la población mundial. Estos países se están ahogando en una marea de plástico por carecer de medios para gestionar los desechos generados por la cultura de “usar y tirar”. Además, Europa, EEUU y Canadá exportan millones de toneladas de sus desperdicios de plástico a países más pobres.

Es hora de despertar del espejismo del “reciclaje”

Poner cosas en contenedores de colores nunca será “reciclar” en tanto no existan mecanismos económicos o legales que garanticen un ciclo cerrado para esos productos.

Es hora de tomar decisiones basadas en la realidad de los hechos y en el impacto intolerable de los plásticos sobre el medio ambiente y la salud.  Decisiones que también tengan en cuenta al 85% de la población mundial que vive en países en vías de desarrollo y que se están ahogando en residuos de plástico.

La verdadera solución es usar el sentido común:

Romper con nuestra adicción a los plásticos de usar y tirar. Reducir tanto embalaje redundante e inútil, diseñar productos sostenibles, emplear envases reutilizables, y elegir materiales realmente reciclables, como vidrio, metal y papel.

En lugar de emplear dinero público para convertir a sociedades enteras en gestores de basura al servicio de grandes corporaciones, los propios fabricantes deberían ser los responsables legales del ciclo de vida completo de cada producto, incluso tras la venta.

En la actualidad, los fabricantes en general se  lavan las manos una vez han vendido el producto, y hacen a los ciudadanos y a los gobiernos responsables de gestionar la ingente cantidad de residuos que  generan con sus decisiones insostenibles de embalaje y diseño, a costa de la salud y del medioambiente de todos.

Si los fabricantes fuesen responsables de pagar por los residuos que generan veríamos cambios radicales en la manera que los productos se diseñan, envasan y distribuyen.

En Febrero de 2013 un grupo internacional de científicos hizo una petición formal a los gobernantes de todo el mundo para que el plástico sea declarado residuo tóxico y peligroso.

Ecoportal.net

El Plástico Nata

http://elplasticomata.com/

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Fundación Endesa convoca los Premios a la Ecoinnovación educativa a colegios de toda España

España/04 de Febrero de 2017/ABC Familia

El periodo de inscripciones está abierto hasta el 28 de febrero de 2017.

Dirigido a estudiantes y centros docentes de toda España, el Premio a la Ecoinnovación educativa convocado por Fundación Endesa tiene por objeto promover la cultura ecológica entre los más jóvenes. Esta organización muestra así su compromiso por contribuir e impulsar proyectos que transformen e innoven la educación, y el propósito de potenciar los conocimientos y competencias de los estudiantes en materia de sostenibilidad del sector energético. Begoña Muñoz de Verger, directora de proyectos de Fundación Endesa, recuerda que la apuesta de la Fundación Endesa por la promoción de la cultura ecológica a través de este tipo de iniciativas educativas es firme: «Estamos muy orgullosos de poder contribuir a fomentar buenas prácticas en medioambiente entre lo más jóvenes».

En concreto los citados galardones, dirigidos a estudiantes y centros docentes de educación Secundaria, Bachillerato y Formación Profesional de Grado Medio de España, tienen como objetivo principal identificar actitudes innovadoras y comprometidas con la conservación de la naturaleza y el medio ambiente; destacar el protagonismo de los jóvenes en el fomento de la cultura ecológica: conocimientos, valores, actitudes, comportamientos, y despertar el interés social por el medio ambiente a través de los centros educativos.

¿Conoces y entiendes la Naturaleza? ¿Tienes ideas y proyectos emprendedores para solucionar algunos de los problemas de tu entorno? ¿Quieres mejorar las condiciones medioambientales de tu ciudad y de tu país? La primera edición de los Premios Fundación Endesa a la Ecoinnovación Educativa es, desde ahora, un espacio abierto donde estudiantes, profesores y centros podrán volcar sus inquietudes ecológicas y medioambientales. Sus organizadores conocen el interés de la comunidad educativa por preservar, a través de la ecología, nuestras riquezas naturales; por asumir con responsabilidad la administración y el cuidado de lo que nos rodea; y, por participar activamente, a través de la educación, en el fomento de una ciudadanía responsable desde el punto de vista ecológico.

Los premios

La dotación de los Premios Fundación Endesa será de 16.000€ que se distribuirán de la siguiente manera:

Categoría 1 y 2: se darán tres galardones por categoría y un apoyo económico de 2.000€ cada premio, que permita seguir desarrollando las iniciativas ambientales del centro.

Categoría 3: se entregará un galardón acompañado de un apoyo económico de 4.000€ para desarrollar las imitativas ambientales en el centro.

Fundación Endesa ha puesto en marcha esta iniciativa para fomentar, a través de la educación, la cultura ecológica de los españoles. Impulsando y seleccionando los proyectos escolares que reflejen el compromiso de nuestros educadores, centros y estudiantes con la preservación y cuidado del entorno medioambiental, ambas fundaciones procurarán reconocer y premiar los valores, actitudes, conocimientos y pautas de comportamiento relacionados con el cuidado del medio ambiente, entendido en sentido amplio.

Este proyecto parte de un trabajo previo de investigación, el Ecobarómetro 2016, que ha señalado las carencias y debilidades de nuestra sociedad en materia de cultura ecológica y propone, a través de los Premios, no solo paliar sus efectos sino fortalecer e incrementar la toma de conciencia en este ámbito.

¡Inscríbete y participa en los Premios a la Ecoinnovación educativa de Fundación Endesa!

Más información: http://ecoinnovacion.fundacionendesa.org/

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Innovative Recycle Contest Rewards Nigerian Students with Laptops

Nigeria/30 de Enero de 2017/Allafrica

Resumen: Recientemente, algunos voluntarios de GE, el grupo One GE en Nigeria, se asociaron con el Clúster Eyinmba para un Mes Mundial de Servicios para iniciar una competencia «Reciclar y Ganar» dirigida a educar a los estudiantes de secundaria y, Las instalaciones disponibles para el reciclaje en Nigeria.

Since 2005, GE Volunteers (GEV) has spent more than 12-million hours with external organisations on 52,000 volunteer projects across 61 countries, all for the greater good. GE’s focus on volunteerism started in 1981 and evolved 11 years ago to encourage broader participation through community organisations around the world. The company now has 262 GEV Councils encouraging the spirit of volunteerism in the  environment, education, community-building and health sectors.

Recently, the One GE group in Nigeria teamed up with the Eyinmba Cluster for a Global Month of Service with a Recycle and Win competition that aimed to educate secondary school students and, by extension, their communities about recycling and the facilities available in Nigeria.

The campaign to educate the community through learners was set up as a competition which involved 12 schools (six in Lagos, five in Port Harcourt and one in Abuja). The students who brought in the highest number of recyclables in each of the schools would win a tablet sponsored by GE, which was preloaded with educational material and apps.

The school with the highest  average number of recyclables would get 20 laptops donated by GE’s IT for  Charity division. At GE’s Nigeria office, 12 teams were set up and one team was assigned to each of the 12 schools to help with their recycling efforts.

The total student population that was estimated to have been engaged as a result of this project was 10,000 to 12,000 with a total number of 24,000 people having been reached by extension.

Each of the GE team members also contributed $3 towards the prizes for the schools. «We feel it’s vitally important  to get involved in community initiatives and to share our knowledge, and expertise with the public,» said Jay Ireland, GE Africa CEO and President.

«GE has a long history of volunteering and giving back to communities and this year, we felt it would be great to do something with school learners who could share their knowledge with other community members too. The Recycle and Win competition was a great  success,» said Ireland.

Fuente: http://allafrica.com/stories/201701130561.html

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Chile: Escolares de Antofagasta crean productos reciclados en base a residuos tetra pack y pañales desechables

América del Sur/Chile/Octubre de 2016/Fuente: El Dínamo

El colegio Santa Emilia de Antofagasta destacó por la iniciativa de sus alumnos: adolescentes de tercero medio son los creadores de dos proyectos de alto impacto social que son finalistas del concurso Innova2 de la Universidad Católica del Norte.

Ambos están orientados a ser amigables con el medioambiente y que sean de bajo costo para la población. El primero, llamado “Tetra”, se trata de ladrillos hechos en base a envases tetra pack, ligero, aísla el sonido y es de bajo costo de elaboración por lo tanto lo hace más asequible.

La idea surgió por una inquietud: los estudiantes Kevin Villarroel, Rodrigo Diaz e Ivania Arenas vieron cómo se amontonaban cerca de 300 cajas día a día en la basura, sin darle ninguna utilidad. Así que se les ocurrió hacer algo productivo con ellas.

“Vida Gel”, por su parte, nació con el objetivo de disminuir la cantidad de desechos en pañales que existe en la comunidad de Antofagasta, a través de la re-utilización del gel del pañal que contiene la orina. Este gel se extrae del pañal y es mezclado con tierra de hoja, se deja reposar la mezcla hasta alcanzar un nivel óptimo para que la uría y el ácido úrico puedan actuar y hacer crecer los cultivos.

Diego Bugueño, Benjamín Seura y Pía Robles son los alumnos creadores del nuevo fertilizante, que ya ha sido puesto a prueba y destaca por su frondosidad del cultivo, rapidez y disminución del tiempo de los cultivos, además del hecho de ser 100% orgánico.

Por último destacan que este fertilizante necesita menor cantidad de agua ya que el gel del pañal concentra mayor cantidad de humedad y por mayor tiempo, por lo tanto es ideal para gente que quiere tener huertos y que tiene poco tiempo para dedicarle a estos.

Fuente: http://www.eldinamo.cl/ambiente/2016/10/14/escolares-productos-reciclaje-tetra-pack-panales/

 

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Estudiantes colombianos producen toallas higiénicas y pañales con residuos de maíz

América del sur/Colombia/01 Octubre 2016/Fuente: Ecoportal

Con el uso de residuos del maíz en la fabricación de pañales y toallas higiénicas, tres estudiantes de la Universidad Nacional sede Medellín encontraron la forma de aportar al desarrollo sostenible y a la preservación del medio ambiente.

Este proyecto es uno de los 10 finalistas del Premio Latinoamericano Gabriel Betancourt Mejía, en el cual compiten frente a otros de Argentina, Cuba y Brasil, elegidos entre casi 100 propuestas.

El equipo presentó en Bogotá el proyecto ante expertos que lo evaluarán para escoger los tres mejores. Esta propuesta, la cual se encuentra en su etapa inicial, nació en un semillero de investigación como un trabajo conjunto de Verónica Valencia y Sindy López, estudiantes de la Universidad Nacional sede Medellín, y Juan Pablo Vélez, del Instituto Tecnológico Metropolitano.

“Identificamos una falencia muy fuerte en Latinoamérica, porque según la FAO ningún país supera el 15 por ciento de material reciclado cada año, por lo que se generan muchos residuos orgánicos que son desaprovechados, pues aunque tienen un ciclo de degradación muy bajo no se utilizan para otros procesos”, explicó Alejandro Valencia, docente del semillero de investigación que acompaña a los estudiantes. Asimismo, se dieron cuenta de que los productos de higiene generan graves problemas ambientales por su largo proceso de degradación.

Según Valencia, en sus primeros dos años de vida, un niño puede usar en promedio de dos a cuatro pañales diarios, y una mujer puede utilizar 9.100 toallas higiénicas en toda su vida, pero una sola puede tardar hasta 500 años en descomponerse.

Los jóvenes decidieron producir estos elementos con residuos agroindustriales y eligieron el maíz porque de él se puede extraer buena cantidad de celulosa, elemento indispensable para la fabricación de pañales y toallas. “De la hoja se puede obtener el 40 por ciento de celulosa, y sabemos que la hoja no se usa para nada más”, añadió Valencia.

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España: Ecoembes lanza la Red de Colegios EducaEnEco

Europa/España/Septiembre de 2016/Fuente: Compromiso RSE

Ecoembes puso en marcha este viernes la primera fase de su programa de educación ambiental “Red de Colegios EducaenEco”. El proyecto, que se desarrollará durante el curso 2016/2017 y que comenzará en Madrid, Castilla y León, Extremadura y Canarias, tiene un objetivo claro: que el reciclaje esté presente en el día a día de más de mil colegios españoles. Este programa se integra en las acciones de educación que realiza Ecoembes y da un paso más allá al implicar a toda la comunidad educativa. El reto es que tanto alumnos como profesorado y personal no docente trabajen juntos para conseguir un colegio más sostenible.

Para ello, se facilitarán las herramientas necesarias para que todos los centros puedan reciclar y concienciar sobre la importancia de este gesto para cuidado del medio ambiente. Una de las claves es la combinación de formación con la distribución de más de 38.000 papeleras amarillas (envases de plástico, latas y briks) y azules (papel y cartón) en los colegios participantes, así como cartelería y otros materiales para poner en práctica los conocimientos adquiridos.

Para el desarrollo del programa y consciente de que cada centro tiene necesidades específicas en esta materia, Ecoembes desplegará una red de educadores ambientales especializados que asesorarán de manera personalizada a cada colegio sobre la ubicación más adecuada de las papeleras y ofrecerán formación a todos los profesionales del centro, ya que la participación de todos es fundamental para la consecución de los objetivos planteados.

Óscar Martín, consejero delegado de Ecoembes, ha destacado que “el planteamiento de este programa supone un paso importante en la evolución de los proyectos educativos que hemos desarrollado hasta ahora. Desde hace muchos años venimos elaborando recursos educativos, luego comenzamos con los talleres en aula y ahora, dando respuesta a la demanda de los propios centros, les dotamos de recursos materiales y ampliamos la formación”.

Cooperación de todos

En este sentido, el educador ambiental asesorará a conserjes, equipo de limpieza, bedeles, personal de comedor y cocina, entre otros, para ayudarles a integrar correctamente la separación de residuos en sus tareas diarias. Y es que el personal no docente es un agente clave en la gestión de los residuos de un colegio y, por tanto, su participación será determinante para el éxito del programa.

Por otro lado, con el profesorado y el equipo directivo se desarrollará formación para repasar estrategias de concienciación en materia de reciclaje, así como ideas y recursos para integrar el medio ambiente en el aula.

Además, el programa de Ecoembes se completará con actividades adaptadas al currículum escolar en todos los cursos de educación primaria. Con ayuda del educador ambiental, se mostrará a los niños los beneficios que tiene el reciclaje para el cuidado del medio ambiente y el impacto de sus gestos diarios en la conservación del entorno. Estas sesiones se ajustarán a los diferentes niveles para que los alumnos de todas las edades puedan comprender y asumir los valores medioambientales.

Por último, también se contactará con las Asociaciones de Madres y Padres de Alumnos (AMPAS) para que puedan recibir formación si lo desean y llevar así el reciclaje del aula al hogar.

Fuente de la Noticia:

http://www.compromisorse.com/rse/2016/09/19/ecoembes-lanza-la-red-de-colegios-educaeneco/

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