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Así es el regreso de las mujeres a las universidades de Afganistán

Las aulas de clases volvieron a ser divididas entre mujeres y hombres.

La situación en Afganistán se empieza a ordenar bajo las normas de los Talibán. La academia empieza a mostrar sus primeros cambios en medio de la propuesta educativa del grupo al mando. Se trata de las mujeres que aunque no han sido obligadas a dejar los estudios, se dividió el aula de clase entre hombres y mujeres.

La situación se hizo viral en redes sociales, que por medio de fotografías, dan cuenta de lo que ocurre en el país, incluso tras la retirada de Estados Unidos. De esta forma, entre las nuevas normas se encuentra la separación de los estudiantes universitarios entre hombres y mujeres.

afganistán

 

Entre tanto, El Ministerio de Educación Superior de Afganistán, dirigido por los Talibán, aprobó la propuesta que dicta las medidas que deberán cumplir los estudiantes para el nuevo semestre que comienza el lunes. Entre las normas se encuentra:

  1. Todas las estudiantes, profesoras y empleadas deben llevar el hiyab, según como dicta la Sharía
  2. Las mujeres y hombres deben entrar en la universidad por entradas separadas.
  3. Las clases mixtas solo se permiten cuando el número de alumnas es inferior a 15
  4. El aula debe estar dividida por una cortina
  5. Las nuevas clases en las universidades privadas deben estar separadas para hombres y mujeres, indica la propuesta.

Según la propuesta, “todas las universidades están obligadas a designar una zona separada para que las estudiantes realicen sus oraciones“.

Fuente: https://www.agenciapi.co/noticia/mundo/asi-es-el-regreso-de-las-mujeres-las-universidades-de-afganistan00

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Argentina: Por el viento, suspendieron las clases en los colegios preuniversitarios

América del Sur/Argentina/10-09-2021/Autor(a) y Fuente: www.diariodecuyo.com.ar

Luego de la llegada del fuerte viento Sur, desde la Universidad Nacional de San Juan informaron que se decidió la suspensión del dictado de clases en los colegios preuniversitarios. Según manifestaron, esto se da debido al alerta meteorológico por la llegada del frente frío del sector de sur, emitido por Defensa Civil. Rige desde las 13.

La medida responde a la recomendación sanitaria realizada por el Comité Central de Higiene y Seguridad de la Universidad Nacional de San Juan.

Además, las actividades en las Facultades y Escuela de Ciencias de la Salud quedan a criterio de la respectiva autoridad.

Fuente e Imagen: https://www.diariodecuyo.com.ar/sanjuan/Por-el-viento-suspendieron-las-clases-en-los-colegios-preuniversitarios–20210907-0052.html

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El Salvador: Jóvenes exigen a Bukele que pague 600 becas atrasadas desde enero

América Central/El Salvado/03-09-2021/Autor: Milton Rodríguez/Fuente: www.elsalvador.com

Son beneficiarios de la Fundación Forever, una institución que no ha podido cubrir los costos de las becas desde hace 8 meses. Los jóvenes están cursando cuarto y quinto año de sus carreras universitarias y piden al gobierno erogar los fondos que les fueron asignados dentro del Presupuesto.

(Cientos de jóvenes becarios de la Fundación Forever expresaron su preocupación ayer frente al Monumento al Salvador del Mundo, en una protesta pacífica pero firme. Fotos EDH / René Quintanilla)

Los ocho meses sin pagar sus cuotas universitarias de este año han ocasionado una serie de dificultades a cientos de jóvenes de la Fundación Forever que se concentraron ayer en la plaza del Divino Salvador del Mundo para exigir a Nayib Bukele el desembolso de $300,000 para el pago de 600 becas atrasadas en 13 universidades del país.

Estos jóvenes forman parte del proyecto denominado “Integrando El Salvador” que ha beneficiado a miles de jóvenes durante 10 años.

Según el presidente de la Fundación, Alejandro Gutman, ya llevan 20 años trabajando en El Salvador y durante ese tiempo ha ayudado más de 50,000 personas.

El aseguró que están al margen de cuestiones partidarias puesto que se han juntado con todos los partidos durante todo este tiempo y lo que solicitan es el apoyo para continuar con su política en favor de la juventud salvadoreña.

La Asamblea Legislativa aprobó en el presupuesto 2021 $2 millones para cubrir 40 proyectos sociales, entre ellos el que brinda apoyo a universitarios. Sin embargo, a la fecha no han recibido el desembolso por lo que solicitan al menos $300,000 para pagar las cuotas de los 600 becarios.

¿Cómo afecta a los becarios?

José Lino cursa el cuarto año de la licenciatura en administración de empresas en un universidad privada del país, y explicó a este medio las dificultades que ha enfrentado por el impago de ocho cuotas.

“En estos meses hemos visto la irregularidad que no podemos ingresar al sistema, incluso el periodo de inscripción se atrasa, las clases del nuevo ciclo comienzan y nosotros sin poder inscribir asignaturas, ya que las mensualidades todavía no están siendo pagadas. Incluso a veces los catedráticos nos dicen que si no estamos solventes no podríamos realizar los parciales”, relató.

Jairo Lobato es otro becario que vive la misma situación de incertidumbre y preocupación. Estudia quinto año en el Instituto Especializado de Profesionales de la Salud (Ieproes).

Explicó que la institución le ha dado un tiempo de espera para hacer sus pagos pendientes lo más pronto posible.
“A nosotros que estamos en el último año no se nos va a dar la oportunidad de egresar, se nos acumularía y nos atrasaríamos en el proceso de graduación, ahorita ellos (Ieproes) están esperando que nosotros paguemos las mensualidades que no se han cancelado”, comentó con preocupación.

Al igual que estos dos becarios llegaron a la plaza capitalina cientos de jóvenes afectados en sus estudios debido a esta situación. Ellos son originarios de comunidades en riesgo y provienen de familias de escasos recursos, por lo que dichas becas representan la posibilidad de hacer realidad sus sueños e integrar un mejor país en el futuro.

“Me rehúso rotundamente al hecho de perder años de universidad de la noche a la mañana sin antes haber luchado por conservarla”, se leía en el cartel de una joven.

Pero, ¿qué pasaría con el futuro de estos jóvenes si no se solventa con prontitud esta situación? Jairo Lobato explicó que “en el caso mío, sino se logra resolver, pues por lo pronto ya no seguiría con mis estudios. Venimos de lugares donde hay pocas oportunidades, y ya no seguiría estudiando, me atrasaría, tendría que buscar un empleo para poder costear los estudios y terminar la carrera”.

Lo mismo sucedería con José Lino. “En mi caso si algún día me dicen que ya no me presente a la Universidad, yo sí dejaría de estudiar y así muchos más jóvenes que yo creo que se frustrarían, porque el sueño de todo joven es ser profesional y que el día de mañana nos corten esas alas creo que sería muy perjudicial para todos y para nuestras familias también”, manifestó.

Una de las representantes de la organización agregó que incluso han tenido que acercarse a las universidades a pedir que se permita que los beneficiarios puedan continuar estudiando, pese a las ocho cuotas que no han podido pagar por falta de recursos.

“Por ahora no tenemos ni el 10% de esos fondos. Esperamos que podamos tener respuesta positiva de la Comisión de investigación de los fondos de las oenegés y que puedan proceder a entregarnos estos fondos”, añadió.

Gutman hizo referencia además a que son 40 proyectos de integración desarrollados por la Fundación los que están en riesgo.

De hecho, además de los jóvenes también se hicieron presentes al lugar varios padres de familia y algunos ancianos que forman parte de los proyectos en ejecución.

“Señor presidente: necesitamos que cumpla con lo prometido, está en riesgo los sueños de nuestros hijos de ser profesionales y gente de bien para nuestros país, porque somos de bajos recursos”, decía el cartel de un padre de familia.

Según expuso el presidente de la Fundación Forever, la ayuda económica se detuvo por la decisión de la comisión especial de la Asamblea que investiga el financiamiento de las ONGs, ya que congeló los fondos destinados a estos proyectos mientras investiga las supuestas irregularidades en algunas organizaciones que recibieron dinero público.

“Les rogamos porque hay una necesidad inmediata de salir adelante. Si quieren yo voy y me espero en la cárcel, por las dudas de que salga algo mal, aunque ya han dicho que todo está bien y hemos hecho auditoría; pero necesitamos que suelten el dinero para pagar los proyectos”, dijo Gutman.

Al preguntarle qué siente al ver la incertidumbre de miles de jóvenes que se enfrentan ala posibilidad de perder sus becas de estudio, respondió que “solo por pudor no me pongo a llorar, una enorme tristeza”. Al respecto, Eduardo Escobar, de Acción Ciudadana, cuestionó en su cuenta de tuiter “¿cuanta responsabilidad tiene la bancada de Nuevas Ideas en esto?”.

Fuente e Imagen: https://www.elsalvador.com/eldiariodehoy/fundacion-forever-el-salvador-alejandro-gutman-asignacion-de-fondos-600-becas-proyecto-sociales-jovenes/873429/2021/

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Joan-Carles Mèlich: «La palabra educación tiene que ver con una relación existencial y para que esta se dé debe haber cara a cara, el rostro, la piel, el olor»

Por: Txema Seglers

  • Joan-Carles Mèlich es doctor en Filosofía y Letras y profesor de Filosofía de la Educación en la UAB. Acaba de publicar La fragilidad del mundo.

Cada vez que Joan-Carles Mèlich (Barcelona, 1961) cita un libro o un clásico, sus ojos crepitan tras las gafas graduadas. De hecho, Mèlich contempla la vida desde lo que él llama una filosofía literaria. Quizás, por ello, este doctor en Filosofía y Letras y profesor de Filosofía de la Educación en la UAB, cita libros y clásicos con tanta admiración. Con una extensa bibliografía, Mèlich publica La fragilidad del mundo (Tusquets Editores, 2021), una reflexión sobre la complejidad y las ambivalencias del mundo, el imperio de la técnica, el vértigo de nuestros días. Y en medio de toda esta turbación, Mèlich aún rescata una pequeña luz, la del sentido, frágil y precaria, bastante intensa, sin embargo, para curarse de la tormenta.

La pandemia ha puesto de manifiesto que somos frágiles. Pero, ¿por qué la fragilidad es un bien que hay que cuidar y proteger?

El punto de partida es la finitud del ser humano. Finito significa que morimos, y también, que somos contingentes y relacionales. Pero, por esta condición finita, no podemos esquivar nuestra relación con el mundo, con la alteridad de los otros humanos, de las cosas y de la naturaleza. Y por lo tanto, nuestra relación con el mundo es necesariamente poco firme, poco sólida. De hecho, sólo protegiendo la fragilidad, tenemos cuidado de la condición humana.

En una conferencia tuya en el Palau Macaya de la Fundació ‘La Caixa’ hablabas del cuidado de la existencia. Ahora bien, ¿podemos crear desde la fragilidad?

Sí, y también descrear. La fragilidad también tiene problemas, como la angustia, la melancolía o el pánico. Yo hablo de tres desestructuraciones con el mundo, y la fragilidad también tiene formas de rotura, de crisis. La fragilidad es ambigua. De hecho, una de las tesis del libro es que la relación del ser humano con el mundo es disonante, un término musical que me permite ilustrar cómo nos movemos adelante y atrás, en positivo y en negativo, siempre inconclusos. El ser humano nunca podrá cruzar las puertas del paraíso.

Por suerte, ¿no?

Sí, por suerte, pero puede cruzar las puertas del infierno.

Eso sí. ¿Por ejemplo, las puertas de Auschwitz?

Exacto. Si cruzamos el paraíso, perdemos la finitud. De hecho, la mía no es una ética del bien, sino de la experiencia del mal.

El bien cuesta construirlo, no sabemos con exactitud qué es. Pero el mal, sí que toma formas evidentes y muy concretas.

Sí. Zygmunt Bauman decía que el bien y el mal no están al mismo nivel.

¿Por qué negamos el mal? ¿Por qué nos cuesta aceptar que podemos hacer daño a los demás? Pienso en la banalización del mal.

Una de las otras palabras clave del libro es vértigo. Vértigo significa que vivimos y estamos situados casi en la punta límite del acantilado. En este punto, nos es más fácil vivir olvidando esta dimensión oscura, de desazón, de vértigo. Queremos olvidar la cara oculta de la luna, como si la luna no tuviera una Dark Side, ¿no?

Esto me recuerda a Pink Floyd.

Me encanta Pink Floyd.

¿La sociedad del like pretende ocultar esta dark side of the moon ?

Sí, porque buscamos aparentarlo todo magníficamente e intentamos olvidar esa cara oculta y oscura de la luna para decir que tenemos que ser positivos, ser optimistas y que no podemos llorar. Ahora bien, es importante saber que no toda la luna es oscura. El Eclesiastés lo dice perfectamente: hay un tiempo para reír y un tiempo para llorar, un tiempo para labrar y otro para recoger lo sembrado, un tiempo para vivir y un tiempo para morir.

De acuerdo, pero en el tiempo de las pantallas, esta gestión de los ritmos vitales parece rota. ¿Cuál es el agravio de las prisas, de la trepidante velocidad que nos atenaza?

Nietzsche y Wittgenstein sólo piden algo a sus lectores: tiempo. Piden que los lectores lean sus obras lentamente. Lo más importante en la vida necesita tiempo. En mi libro La fragilidad del mundo defiendo que vivimos en el imperio de la prisa. El problema no es la velocidad, sino la prisa. La prisa es la patología de la velocidad; del mismo modo que la tecnología no es la técnica, sino un sistema social-simbólico poderosísimo que ha colonizado el mundo y que nos obliga a vivir en la lógica de la prisa. Las relaciones humanas (familia, la amistad, la educación, la lectura, la meditación…) han entrado, por eso mismo, en una crisis profunda y el mundo se ha empobrecido. Siempre que ha habido ser humano, ha habido técnica. Pero la tecnología es un producto de la modernidad. Yo cifro la revolución tecnológica a principios del siglo XX, cuando algunos autores vieneses como Robert Musil, hablan de la matematización del mundo, de la colonización de la tecnología. Dicho de otro modo, cuando la técnica deja de ser un instrumento y se convierte en un sistema social, una forma de vida. Y para mí, eso es un empobrecimiento del mundo, porque rompe la dimensión frágil que decíamos antes.

Me recuerda a El mundo feliz de Huxley.

Sí.

¿Cree que la lógica tecnológica empobrece la democracia?

Totalmente, porque la lógica tecnológica empobrece la gramática que el mundo es. Piensa en 1984 de Orwell y la neolengua. Si lees el libro en clave tecnológica, te das cuenta que la neolengua simplifica el matiz, porque, por ejemplo, prohíbe los antónimos. Si llamas bueno, no puedes decir malo, sino que tienes que decir ‘no bueno’. El lenguaje se va reduciendo. Pero otro aspecto muy importante se deriva de esta colonización: la crisis de la memoria.

Suena inquietante.

Un ordenador no tiene memoria. La computadora almacena datos, informaciones, pero no es la memoria de un ser finito.

Explíquemelo, por favor.

La memoria no es recuerdo, sino recuerdo y olvido. El ejemplo es Proust o Joyce. La memoria irrumpe, y nunca dos personas recuerdan igual, porque es personal, atraviesa por dentro de tus vivencias. La memoria es narrativa. La crisis actual de la memoria se manifiesta en la pérdida del peso del pasado. Vivimos en una civilización que da mucha importancia a la actualidad, pero no se la da al presente. Pero hay que tener cuidado porque no hay presente sin pasado. La actualidad, en cambio, puede obviar el pasado, no le interesa nada. Las consecuencias educativas de esta crisis de memoria son evidentes y trágicas. La actualidad ha devorado el presente y, en consecuencia, se ha roto la secuencia temporal (pasado, presente, futuro).

Vivimos ahogados de actualidad, como si siempre fuéramos ‘fuera de tiempo’.

Exacto. El presente cuida del pasado, pero la actualidad no necesita el pasado, porque nace y muere. Walter Benjamin lo explica muy bien en El narrador. De hecho, leer un libro no es lo mismo que leer las noticias, que caducan al cabo de un instante. Por ejemplo, vas al quiosco y pides el diario de ayer, y ya no lo tienen. La tecnología trabaja con la actualidad, pero no con el presente. También sucede en las tertulias de televisión o los programas de opinión.

Entiendo, sin embargo, que no está en contra de la actualidad.

No, no lo estoy. Yo estoy en contra de la colonización actual del presente, es decir, cuando la actualidad ‘se come’ el presente. Y esto, de hecho, lo he visto en la universidad. Por ejemplo, yo ahora estoy haciendo la guía docente con las directrices recomendadas, que me señalan que incorpore elementos digitales. Ahora bien, yo defiendo el libro como objeto, la materialidad de los cuerpos, los espacios de silencio, la lectura lenta, la utilidad de lo inútil, como dice Nuccio Ordine. La tecnología y las redes no te dan esto.

En este sentido, usted ha dicho que la educación, si no es presencial, no es educación .

A ver, puede haber instrucción en línea, aprendizaje, pero la palabra educación incluye el aprendizaje y la instrucción, al tiempo va mucho más allá. La palabra educación tiene que ver con una relación existencial, más profunda, tiene que ver con el estudio, la lectura y la escritura, tiene que ver con la relación con un maestro. Y para que haya esta relación existencial debe haber cara a cara, el rostro, la piel, el olor. Porque, ¿qué es la presencialidad?

¿El ambiente? ¿El calor? ¿El contacto con el otro?

Sí, y también es la atmósfera.

Somos unas criaturas muy extrañas y curiosas los humanos. ¿Por qué nos cuesta tanto aprender?

Bueno, la existencia es un aprendizaje que no se aprende nunca, porque es a posteriori, es a trompicones. Por eso, soy tan crítico con las competencias, porque tú no puedes saber cuál es la respuesta antes de tener el problema. O como en una entrevista. De hecho, tú puedes preparar las preguntas y yo las respuestas, pero cuando nos encontramos, somos dos personas en una situación concreta, y cada situación es diferente. Todo lo que había previsto, de repente, no funciona, y entonces, improvisamos. De hecho, tenemos que aprender a improvisar, que significa aceptar que el ser humano no puede esquivar la contingencia.

Con el término musical de la disonancia, antes hacía referencia a nuestra condición inconclusa. Ahora, desconozco la razón, habla de la improvisación y pienso en los músicos de jazz.

Yo he puesto este ejemplo, sí, el de un músico de jazz que sabe improvisar porque conoce las escalas y las armonías. Keith Jarrett lo ilustra muy bien. De hecho, a mis estudiantes les cuento que tienen que hacer lo mismo que Keith Jarrett: improvisar sin manual de instrucciones. Él explora.

En esta exploración, pero buscamos el sentido, y por ello, empalabramos el mundo. Pero no todos los relatos son iguales. ¿Cuáles son los relatos peligrosos?

Los relatos que eliminan la ambigüedad, que defienden las ideas claras y distintas. En la existencia humana hay inicio, pero no hay ni origen; nacemos en una historia, en un relato que otros han iniciado, heredamos una gramática, un conjunto de signos, de símbolos, de gestos y de normas… y tenemos que aprender a vivir en este escenario en el que las relaciones con los demás (humanos y no humanos) resultan inesquivables. Un relato es peligroso cuando tiene la pretensión de explicarlo todo, cuando quiere tener la primera y la última palabra.

La aparición de Internet, de las redes, se decía que ofrecerían la oportunidad de una verdadera democracia participativa. Vemos que no es así. ¿Cree que hay relación entre el mundo tecnológico y el incremento de un populismo que insulta vía tweets?

Diría que sí, pero tengo que reconocer que no es un tema que tenga bastante elaborado. Debería pensar en ello más.

En todo caso, parece que vivimos en una sociedad de individuos atomizados. En este sentido, el otro supone un reto y las relaciones entre las personas son complejas. Ahora bien, ¿cree que sustituimos la comprensión de las relaciones con el otro por la moral del grupo?

Siempre he dicho y he escrito que la moral es inesquivable por los seres finitos. La moral radica en la gramática que hemos heredado. No podemos existir sin moral. Pero tampoco podemos existir sólo con moral. Los seres finitos también vivimos en zonas oscuras, por lo que la incertidumbre es inesquivable. Es lo que llamo zona oscura de la moral. Y esto es la ética. La educación no puede darse sin estas zonas oscuras, no se puede educar sin ética, sin incertidumbre, sin vergüenza, sin mala conciencia.

Al inicio de esta entrevista hemos hablado de cómo la pandemia ha puesto de manifiesto nuestra fragilidad. Pero también la pandemia está comportando pérdida. Usted ha trabajado sobre este tema. Una última pregunta. ¿Cómo podemos gestionar el duelo de los seres queridos?

Cada uno debe ver cómo gestiona su duelo. Recomiendo leer algunos libros sobre esto. Si me pides que recomiende sólo uno, este sería La muerte de Iván Ilich, de León Tolstoi. Es un libro que releo a menudo. Es una obra espectacular, como todos los clásicos. Homero, los trágicos griegos, la Biblia, Shakespeare, Cervantes, Montaigne, Flaubert, Dostoievski, Freud, Kafka, Virginia Woolf, Joyce, Proust, Rilke, Beckett… Esto es lo que recomiendo, porque son ellos, y sus libros venerables, los que nos muestran que la vida es incierta y que no hay píldoras que nos digan lo que tenemos que hacer ni cuál es el camino correcto.

Fuente e Imagen: https://eldiariodelaeducacion.com/2021/07/30/joan-carles-melich-la-palabra-educacion-tiene-que-ver-con-una-relacion-existencial-y-para-que-esta-se-de-debe-haber-cara-a-cara-el-rostro-la-piel-el-olor/

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El cambio climático y la universidad

Por: Miguel Ángel Casillas

El 7 de agosto se difundió el reporte del Panel intergubernamental sobre cambio climático de la Organización de las Naciones Unidas, 2021: Climate Change 2021: The Physical Science Basis. Contribution of Working Group I to the Sixth Assessment Report of the Intergovernmental Panel on Climate Change.

En ese reporte se analiza con datos y referencias científicas la evolución del cambio climático que experimenta la Tierra como producto de las actividades humanas y presenta un modelo de evolución climática donde se hace observable la ruptura de todo equilibrio en los últimos 50 años, desde que el impulso a la industrialización y la ampliación del comercio han tenido consecuencias funestas para el planeta, que ponen en riesgo su existencia y con ella también la del género humano.

El informe tiene como base empírica un conjunto de indicadores. Se observa un incremento en la concentración de gases con efecto invernadero y de aerosoles producidos por las actividades humanas. Ha aumentado el dióxido de carbono, el metano, el óxido de nitrógeno. Se constata un aumento de la temperatura global del planeta. Hay un cambio en los patrones de lluvias acusando un importante incremento en en siglo XX. Hay un cambio en los niveles de salinidad del mar, su acidificación y sus niveles de oxígeno. Ocurre un intenso derretimiento de nieves y glaciares. Aumenta el nivel del mar y se desatan fenómenos climáticos extremos: temperaturas muy altas y muy bajas, desertificación, intensificación en el número y la fuerza de ciclones y tormentas tropicales.

El grupo de expertos de la UNU formula diversos escenarios, pero en general se anuncia la catástrofe hacia 2050 y peor hacia 2100. Si no se hace nada la temperatura puede aumentar todavía más, hasta en 5 grados centígrados y si realmente proyectáramos una modificación profunda de la vida social, aún así el mundo seguirá calentándose por el efecto acumulado de la actividad humana. En el peor escenario de aumento superior a 4 grados, las consecuencias pueden ser terribles: por ejemplo América Central y casi toda Sudamérica sufrirían un proceso de desertificación, mientras que las lluvias se concentrarán en demasía en África, Asia menor y en los polos donde no habría más hielo. Hacia 2150 el mar habría aumentado hasta 8 metros su nivel, desbordando diques y costas.

El informe de la ONU es contundente, no deja lugar a medias tintas: las actividades humanas ligadas a la industrialización y la ampliación del consumo han generado una situación catastrófica que es necesario detener y hacerlo de manera urgente. Urge un cambio civilizatorio que modifique radicalmente los patrones de producción, el consumo de energías, las formas industrializadas de agricultura, los niveles de consumo de mercancías, el uso de medios de transporte, las maneras en como cuidamos y conservamos el medio ambiente.

Las universidades están obligadas a contribuir en la lucha contra el cambio climático. Ya se hacen muchas cosas, pero es todavía insuficiente su contribución. Hay que ampliar sus capacidades de investigación y de producción de nuevo conocimiento sobre los efectos locales del cambio climático; tienen una enorme responsabilidad en la difusión y concientización de la sociedad entera; disponen de una agenda de acciones que favorecen el ahorro y el reciclaje; muchas de las instituciones participan en proyectos de protección y restauración ambiental. Sin embargo, hasta la fecha no se ha modificado el contenido de la enseñanza profesional ni se han generado procesos de socialización suficientemente efectivos como para hacer de los universitarios agentes del cambio social requerido para salvaguardar el planeta.

En las universidades recientemente se ha desdibujado la lucha contra el cambio climático bajo el eufemismo de la responsabilidad social universitaria, que confunde y oculta el fundamento radical que se necesita en la transformación. Al mismo tiempo se construyen enormes aparatos burocráticos que tienden a disociarse de las comunidades y a generar sus propios espacios de poder. Urge replanter las prioridades y las formas de impulsar un cambio profundo en el sentido del trabajo universitario.

Las profesiones y las disciplinas deben reformular sus prácticas y contenidos; no pueden seguir formando egresados que reproduzcan los patrones de producción y consumo que nos están llevando a la ruina. Desde la universidad debemos luchar por cambiar las prácticas profesionales y las maneras de trabajar. Es inadmisible que las universidades sigan fomentando el consumo de energías no renovables, que se fomente la industrialización desmedida y el consumo de combustibles fósiles en todas las carreras de ingeniería, que no se consideren los impactos ambientales y sociales de seguir promoviendo la industrialización de la producción agropecuaria, que se desconozcan los impactos ambientales de los procesos económicos y que las carreras sigan promoviendo la cultura del negocio por encima de los criterios de conservación y protección del patrimonio natural.

Las universidades son el espacio privilegiado para la investigación y el desarrollo de energías limpias. Tienen ante sí el reto de comprender y brindar soluciones a los impactos específicos a escala regional del cambio climático: en la agricultura y la producción de alimentos, el agua, el aumento del nivel mar, y los riesgos meteorológicos. Pero también las universidades, en tanto agencias culturales, deben construir una nueva socialización que sostenga nuevas maneras de ser y vivir, reduciendo la dinámica global de consumo, de desperdicio y de gasto inútil; cuidando el impacto ambiental de las acciones humanas y reduciendo los efectos de la reproducción humana sobre el planeta; cuidando, conservando y restaurando los ecosistemas.

Fuente: http://www.educacionfutura.org/el-cambio-climatico-y-la-universidad/

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Pilar Benejam: «El que no cree en la formación de maestros no cree en la democracia»

Por: 

  • Geógrafa, pedagoga, maestra y, sobre todo, maestra de maestros, Benejam afirma que «lo más importante de todo es la formación del profesorado, lo he creído toda la vida y moriré diciéndolo». Desde los movimientos de renovación luchó para que esta formación tuviera el máximo rango universitario, y de ello habla en el libro que acompaña la exposición ‘Per una educació en llibertat’ (Por una educación en libertad).

Una maestra y dirigente sindical me dijo una vez que había una persona a la que se le tenía que hacer un homenaje más pronto que tarde. Se lo comento a Pilar Benejam el día que la entrevisto en su casa y me dice que ya le han hecho muchos, que no se necesitan más. De hecho, aún le hacen encargos, porque Benejam (Ciutadella, Menorca, 1937) firma el último capítulo, dedicado a la formación del profesorado, del libro Per una educació en llibertat. El libro lo ha editado el Ayuntamiento de Barcelona para acompañar la exposición del mismo nombre que se puede ver (o, mejor dicho, que hay que ver) en el Born Centro de Cultura y Memoria hasta marzo de 2022. Una exposición que parte de un acto tan poco poético como es la aprobación de un presupuesto municipal, pero que de este modo nos recuerda la importancia capital de los recursos para sacar adelante los cambios sistémicos.

Cuando preguntamos en el Born con quién podríamos hablar de la exposición nos sugieren a Pilar Benejam, lo que nos llena de alegría. Porque ya la entrevistamos en 2014, cuando publicó ¿Qué educación queremos? (Rosa Sensat), pero entonces todavía no nos habían hecho ver que, como publicación de comunidad, teníamos una deuda pendiente con ella. O sea que valga esta entrevista también de pequeño homenaje.

¿Qué encontraremos, en la exposición?

Es la historia de la educación en Barcelona de 1908 a 1979. De todos modos, de la parte final hay poca cosa, prácticamente se acaba en la Barcelona de la posguerra. El Ayuntamiento ha tenido interés en mostrar que siempre ha tenido una inquietud por la educación, lo cual no es nada sorprendente porque si crees en la democracia, o se cuida de la educación o no se es demócrata. Para votar se debe hacer de forma cuerda y, para hacerlo, debes tener cultura. Ahora hay todo un movimiento que encuentra que los ayuntamientos deberían participar mucho más en la escuela, sobre todo en infantil y primaria, donde tradicionalmente siempre habían participado.

Me parece que ya quieren y lo mejor es que no les dejan.

Está claro que la Generalitat tiene las competencias, pero a mí me parece que los ayuntamientos deberían meterse más en la educación, más allá de su presencia en los consejos escolares.

¿Qué mensaje deja la exposición?

Recupera todo este presupuesto extraordinario de cultura de 1908, porque fue muy rompedor. Era un momento de una gran actividad (e inestabilidad) social. Había grandes enfrentamientos políticos, pero este presupuesto extraordinario lo pudieron hacer porque llegó al Ayuntamiento la Solidaridad Municipal, en donde se encontraban republicanos, catalanistas, radicales… Pero quienes realmente defendieron el presupuesto extraordinario fueron los republicanos catalanistas, la Lliga desertó al final, y los radicales de Lerroux también, una por demasiado izquierdista y, el otro, por imponer el catalán. Hubo mucha discusión, sobre todo, en lo que afectaba a la educación, porque tocaba dos intereses muy importantes: primero, quería dar cultura al pueblo, y eso es darle poder, y después había quienes no estaban de acuerdo con que el catalán fuera la lengua de la escuela. Promovía una educación universal, gratuita, mixta y con neutralidad religiosa, imagínate si era moderno, y por eso el cardenal Casañas se opuso frontalmente, y la Lliga se acabó echó atrás y no votó el presupuesto.

Foto: Pol Rius

La Iglesia casi tenía el monopolio de la educación…

Que la escuela debía ser universal ya lo había dicho la ley Moyano, que es de 1857, si bien en ese momento la primaria era de los 6 a los 9 años. Pero, como sabes, en España siempre hay leyes, pero no se cumplen nunca, porque esta escuela que llamamos universal y gratuita no la hemos tenido hasta 1982. Por ello, el hecho de que este presupuesto quisiera impulsar esta educación universal en una ciudad donde el analfabetismo era del 50%, significaba que había que hacer mucha escuela pública.

¿Y gratuita?

Bueno, lo pagaban los ayuntamientos. Y ya sabes aquel dicho que dice que pasas más hambre que un maestro, porque los ayuntamientos pagaban muy mal y lo hacían cuando querían. Y, además, todos los alumnos que podían ayudar, pagaban una cuota voluntaria.

El presupuesto extraordinario de 1908 fue muy rompedor, porque quería dar cultura al pueblo, y eso es darle poder, y promovía una educación universal, gratuita, mixta y con neutralidad religiosa

¿Cuándo deja de ser verdad que los maestros pasan hambre?

Cuando la competencia pasó al Estado y se fijó un salario, que igualmente durante el franquismo fue muy bajo. Ahora ya no lo es. Con toda la eclosión de la renovación pedagógica se consiguieron tres cosas: unos sueldos dignos para los maestros, un trabajo estable por quienes hacen oposiciones, y un horario racional. Aquí (por Catalunya) todavía no hay jornada intensiva pero, por ejemplo, en Baleares, de donde yo soy, hacen de 9h a 14h. Y una ratiode escolaridad que también es adecuada, entre 20 y 23 alumnos por aula.

De hecho son 25 y, a veces, alguno más.

Sí, como máximo debería ser 25. ¡Yo he tenido 60! Lo que pasa es que con la inclusión en clase se tienen niños y niñas con otras dificultades que necesitan ayuda específica. Al final, lo que se necesita es que todo el mundo llegue al nivel básico, porque no se puede suspender nadie. Esto es lo que yo he defendido toda la vida.

¿A nadie?

No, claro, ¿Cómo vas a suspender a la gente que ha de votar? La educación general básica ha pasado de 9 años a 10, de 10 a 12, de 12 a 14, de 14 a 16, y nosotros decíamos que debe pasar a 18, porque a los 16 no pueden trabajar.

Me está hablando de la educación obligatoria.

Pues obligatoria, la que es para todos. Si es obligatoria para todos los ciudadanos, ¿quién es un ciudadano? Una persona que vota y decide. Por lo tanto, esta persona, ¿cómo puede suspender? O el profesor no tiene suficiente habilidad o conocimientos suficientes, o la organización no funciona, o algo pasa, pero cómo es posible que suspenda un ciudadano que debe votar.

Pues es bien posible porque pasa cada día.

Entonces que no voten. Claro, el gran problema de la educación es el fracaso y el abandono escolar.

¿Qué haces, pues, con los alumnos que no alcanzan el nivel mínimo de conocimiento que fija el currículo?

Antes de estar en la universidad, yo estuve en primaria y en secundaria, durante 10 años. Y no suspendí a nadie.

¿Y todos aprendían?

Todos tenían el nivel básico. Los currículos son muy excesivos, no los hace nadie que haya estado en la escuela. Por lo tanto, tú debes tener suficiente conocimiento para decir que, de todo esto que me piden. yo hago nueve lecciones. Así lo hacía yo, cuando daba geografía, una lección cada mes. Yendo de excursión, pateando la ciudad, haciendo entrevistas, haciendo no sé qué… a los alumnos que tiraban mucho les ponía trabajos extraordinarios. Aquí no es el alumno quien es malo, es la enfermedad que es muy grave. Hay niños y niñas a los que no puedes salvar, porque la enfermedad es tan grave que no puedes, pero con gente que no tiene una enfermedad tan grave, pueden aprobar todos. Si haces lo básico y si no pretendes la excelencia, porque excelente no lo es nadie, todos podemos ser mejores. Entonces hay gente que llega al nivel básico fundamental, y que puede sacar un 5, y hay gente que es muy capaz, porque le interesa mucho, o porque tiene mucha inteligencia lógica deductiva o lo que sea, y que puede rendir más y ser un 10. Bueno, eso de las notas es otra cosa que en tiempos de la República no se hacía nunca.

Foto: Pol Rius

Usted se ha dedicado mucho a la formación del profesorado. ¿Cree que su mensaje ha cuajado?

No, ¡un fracaso total! Yo siempre digo que me dan muchos premios y muchas medallas y luego nadie hace lo que digo. Yo estuve en todo el momento aquel de la renovación pedagógica, en la que aprendimos mucho de los demás, porque había personas como Alexandre Galí, que había sido profesor durante la República, y otros, como la propia Marta Mata, que había sido alumna durante la República. Y esta gente comenzó a finales de los 50 a hacer unas escuelas, pequeñitas, con el apoyo de una cierta burguesía ilustrada, en las que los padres pagaban lo que podían y los maestros cobrábamos lo que necesitábamos para subsistir. Y estas pequeñas escuelas pudieron sobrevivir también gracias al apoyo de la Iglesia, porque en ese momento había un movimiento dentro de la Iglesia. Y entonces, cuando en 1971 se crea la UAB yo entro como profesora de Geografía, y allí yo ya digo que lo más importante de todo es la formación del profesorado, lo he creído toda la vida y moriré diciéndolo. Y entonces en la UAB se crea en 1972 una pequeña escuela de maestros, impulsada por Josep Pallach y Maria Rúbies. Y yo les dije: «¿Cómo se puede hacer una escuela de maestros que no va a la escuela? ¿Qué es esto de una escuela de maestros sin prácticas?». Y me dijeron, «pues organízala tú». Y entonces organicé las prácticas, buscando escuelas que pudieran realmente formar y fueran alternativas y serias. Y al año siguiente se crea la Facultad de Pedagogía, y Pallach me llama y me dice que ellos pasan a Pedagogía y que me haga yo cargo de la escuela de maestros hasta que no venga un nuevo director de Zaragoza. Y realmente me hice cargo y no inventé nada, cogí lo hecho desde el año 1908, en la República, la Mancomunidad, la Escuela Nueva… todo ello, que es nuestra mejor tradición pedagógica.

Yo le había preguntado qué era lo más importante…

Primero, hacer un buen equipo, porque la educación se hace en equipo. Una maestra sola puede hacer muchas cosas, pero, para dar coherencia a un proyecto, hay un equipo y la eficacia es infinitamente mayor. Segundo, quiero una escuela universitaria, no quiero una escuela de pizarrín; la formación de los maestros es muy seria, porque deben ocuparse de la formación de todos los ciudadanos del país. Y es la condición básica de la democracia. Si no crees en la formación de maestros no crees en la democracia. Porque con cualquier cosa engañas a las personas que no tienen cultura. En el último capítulo del libro yo pido que hagan una carrera, la que sea, para que sepan lo que es el conocimiento, que es una construcción social que se hace con el tiempo. Esto significa que cambia, que no hay una verdad absoluta, sino que el conocimiento se va haciendo. El conocimiento es complejo, por cualquier cosa hay muchas variables, y además es muy ideológico, es decir, hay razones muy intencionales y, luego, el conocimiento es alternativo, las cosas tienen posibilidad de cambio y, por eso, es universitario. En la universidad se debe estudiar algo con profundidad. Yo les enviaría a todos primero en estudiar una carrera.

Hoy día para formar maestros en la universidad primero debes tener una tesis doctoral y luego publicaciones, el hecho de que hayas sido maestro no tiene ningún valor

Por lo tanto, primero, un equipo; segundo, nivel universitario, y tercero, una escuela democrática, y eso quiere decir que la gente puede opinar, que las cosas se tienen que discutir y, además, que los alumnos también tienen valor y tienen voto, deben participar. Y también escuela catalana. Todo lo hacíamos en catalán, a pesar de que estaba prohibidísimo. Y como el profesor de catalán no era oficial, entonces un industrial de Sabadell muy catalanista, que se llamaba señor Forrellad, nos pagó las clases. Como Franco se moría, fueron los años más felices de mi vida. Nosotros hacíamos didáctica, que tenía una parte teórica, pero muy relacionada con la práctica; íbamos y veníamos de la escuela y yo, toda la vida, para mantener este principio, incluso siendo catedrática de universidad, daba clase en la universidad y los viernes los alumnos y yo íbamos a la escuela, y yo daba clase a los niños, y los alumnos también. Hacíamos grupos y ellos se sentaban con los grupos de niños y trabajaban, y claro, aprobaban todos.

Diría que hoy en día los catedráticos -y los no catedráticos- no participan en los practicums.

Aquí está. Porque para enseñar primero tienes que saber qué quieres enseñar. Hoy el gran problema que tenemos en la universidad es que quienes quieren entrar a ser profesores lo primero que les valoran es la tesis doctoral. Si no tienen tesis doctoral no entran. ¡Pero cómo van a hacer una tesis si aún no han formado maestros y no saben qué problemas hay! La tesis doctoral se debería hacer cuando tienes la experiencia y un problema importante. En segundo lugar, se valoran las investigaciones y las publicaciones, sobre todo, en inglés. Pero si dicen que han sido maestros, eso no tiene ningún valor.

¿Ha seguido la polémica sobre la PAP (prueba de aptitud personal instaurada en Catalunya para acceder a los grados de magisterio)?

Sí. Y escribí una carta felicitando a Josep Maria Cornadó (coordinador del PAP). Ya es hora de que se diga que no se selecciona bien el profesorado.

Pero si él dice que precisamente con la PAP esta selección sí se hace, porque un maestro para ser buen maestro debe tener una cultura básica.

Y tiene mucha razón. Una pregunta de esta prueba es que dijeran un libro que habían leído el último año, título y autor. Y el 50% no supo responder. También les pusieron un texto y muchos no lo entendieron. Después les pedían que explicaran una experiencia, había faltas, una falta de estructura en el escrito…

O sea, que aplaude la existencia de la PAP.

Mira, nosotros tenemos una tradición, que es la República. Ese presupuesto de 1908, que fue aprobado pero no aplicado, después lo aplicó la República, sobre todo durante los años de la guerra con el CENU [Consejo de la Escuela Nueva Unificada]. Entonces los maestros hacían un cursillo para ver cómo hablaban, cómo se relacionaban, cómo escribían, y aconsejaban muchísimo que la gente que se presentaba para hacer este cursillo hubiera ido a colonias escolares, a un club de fútbol… es decir, que tenido una relación con niños. Para ver si realmente la relación con criaturas les llenaba la vida, porque te tienes que dedicar mucho. Nadie puede dedicar la vida a una profesión liberal si no está enamorado. Un maestro que no cree que la educación es capaz de darle, primero, una razón de vida, y, luego, tener una razón social, no puede ser maestro.

Foto: Pol Rius

El otro día un maestro me comentaba que él hacía siempre 5º y 6º, y que un día, siendo director, tuvo que hacer una sustitución en un aula de infantil y no sabía qué hacer.

Yo tampoco. De infantil no sé nada, porque no he dado nunca.

Y también me dijo que 1º era el curso más complicado.

Es así, porque vienen de infantil y vienen con un nivel de conocimientos muy diferentes.

En 2014 usted publicó ¿Qué educación queremos?. A modo de testamento profesional. Han pasado siete años y muchas cosas en el ámbito educativo, ¿qué cambiaría de ese libro?

Podría añadir algunas cosas, porque hemos tenido esta pandemia y también una introducción muy fuerte de las nuevas tecnologías, pero en cuanto a las ideas fundamentales, hace años que defiendo lo mismo, que es la importancia de la formación del profesorado. Primero que el profesor domine la materia y, segundo, que sepa enseñar. Nosotros luchamos mucho por las didácticas, y uno de los pocos méritos que tengo es que fui mucho a Madrid -con el apoyo, evidentemente, de Marta Mata- y crearon el área de didácticas. Porque antes, cuanto se enseñaba a un maestro, era Geografía y su didáctica, Matemáticas y su didáctica… y a su didáctica no llegábamos nunca. Y las prácticas no tenían ninguna importancia.

Para formar una mente hay que emplear diferentes métodos, porque ninguno es perfecto, y para el método de proyectos hay que dominar mucho la materia y la didáctica. Se puede enseñar poco o mucho, pero disparates no

La pregunta iba más hacia la irrupción de Escola Nova 21 y todo el debate que ha generado. ¿Cómo lo ha visto?

Yo estuve contenta de esta iniciativa porque, al menos, se movía algo. En los 60, 70 y principios de los 80, gracias al empuje de los movimientos de renovación pedagógica, la educación era muy importante. ¡Y con la democracia hubo un desencanto tan grande! Porque en la democracia, en vez de coger lo que se había hecho en su defensa, volvieron a unas leyes medio franquistas. Y algunos nos mantuvimos porque tenemos un carácter determinado, pero hubo un desencanto muy grande por el esfuerzo que se había hecho. Se había luchado mucho. Siempre ha habido grandes maestros y siempre ha habido escuelas buenas, y esto hay que decirlo pero, una cosa es que haya minorías y, la otra, que el sistema funcione. Los 90 y todo lo que llevamos desde el 2000 hasta ahora ha sido un desierto. Por lo tanto, está bien que se muevan cosas, pero que tengan cordura.

¿Qué quiere decir con esto?

Quiero decir que Escolar Nova 21 ha promocionado muchísimo el método de proyectos. Primero, de métodos no hay ninguno perfecto. Y, para formar la mente, se deben emplear diferentes métodos. A veces es muy interesante hacer una buena observación, a veces un buen debate, a veces una hipótesis… Es decir, hay diferentes métodos en didáctica, y todos son importantes si lo utilizas en el momento adecuado para la materia adecuada. Y ellos se han fijado sólo en el método de proyectos. Yo no he hecho muchos, proyectos, y trabajar con proyectos pide dos cosas: primero, dominar muy bien la materia del proyecto, porque tienes que saber hacer relaciones con todo lo demás, por lo tanto, requiere una cultura amplia para poder hacer relaciones, y, después, necesita mucha didáctica para que los niños se interesen mucho por aquella cuestión, y les dé cuerda para aprender todo. Hay proyectos que se han hecho bien, pero los maestros no siempre están bien preparados. Se puede enseñar mucho o poco, lo que no se puede es enseñar es mal. Disparates no se pueden enseñar. Por ejemplo, fui a una charla y uno de los proyectos era que durante todo el curso se planificaba un viaje al Sol. Y habían estado trabajando las distancias, el tiempo que tardarían, lo que llevarían durante el viaje, el uniforme que tenían que llevar, en qué época tenían que salir y desde dónde… Pero ¿es que no sabe que es una estrella? ¡A una estrella no se puede viajar! Por favor, ¡vaya a Marte!

Fuente e Imagen: https://eldiariodelaeducacion.com/2021/07/15/pilar-benejam-el-que-no-cree-en-la-formacion-de-maestros-no-cree-en-la-democracia/

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Perú: San Marcos y MIMP plantean crear programas contra el acoso sexual en universidades

América del Sur/Perú/20-08-2021/Autor(a) y Fuente: www.andina.pe

Ministra de la Mujer, Anahí Durand, y la rectora de la UNMSM, Jeri Ramón, se reunieron para enfrentar problema.

La Universidad Nacional Mayor de San Marcos (UNMSM) y el Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables (MIMP) plantearon la creación de programas de acompañamiento contra el acoso sexual en las universidades que concreticen las acciones que se vienen aplicando a nivel nacional.

En una reunión realizada hoy en las instalaciones del Centro Cultural de San Marcos (CCSM), la titular del Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables, Anahí Durand, y la rectora de la UNMSM, Jeri Ramón Ruffner, coincidieron en la importancia de impulsar este tipo de iniciativa que desarrolla el Programa Nacional para la Prevención y Erradicación de la Violencia contra las Mujeres e Integrantes del Grupo Familiar (Aurora).
Ambas autoridades también dialogaron sobre la necesidad de atender el cuidado de las madres en los ambientes universitarios, como el lactario, el acceso a la educación superior de personas con habilidades especiales, y la igualdad de género.

La UNMSM cuenta con el Reglamento de Prevención y Sanción y Sanción del Hostigamiento Sexual, documento que establece las normas y los procedimientos a seguir ante cualquier forma de violencia sexual ejercida dentro de la comunidad sanmarquina.
Este reglamento aprueba la conformación de un comité de intervención frente al hostigamiento sexual, el que será responsable de recibir las denuncias, realizar la investigación preliminar y emitir un informe de precalificación al órgano instructor pertinente para la realización del proceso administrativo disciplinario.
En cuanto a las medidas de protección de la víctima, el comité pondrá a disposición los canales de atención médica y psicológica con los que cuente, así como la información sobre las instancias competentes en la materia a donde puede acudir.
Además, podrá actuar de oficio o a solicitud de parte, para cambiar de lugar o suspender al hostigador, así como solicitar al órgano competente una orden de impedimento de acercamiento, entre otras medidas, hasta el fin de la investigación.
Fuente e Imagen: https://www.andina.pe/agencia/noticia-san-marcos-y-mimp-plantean-crear-programas-contra-acoso-sexual-universidades-858015.aspx
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