Page 6 of 20
1 4 5 6 7 8 20

‘Handia’, Platino al Cine y Educación en Valores

Los premios del Cine Iberoamericano se celebraron entre alegatos a favor de la igualdad

Los Premios Platino del Cine Iberoamericano, que se celebraron recientemente en Cancún, otorgaron el Premio Cine y Educación en Valores a Handia, el largometraje dirigido por Jon Garaño y Aitor Arregi. La cinta vasca que narra la historia real de Miguel Joaquín Eléicegui, El Gigante de Altzo, que ya triunfó en los Goya con diez galardones;en los Premios Feroz, ganando el premio a mejor música y cartel, y en el Zinemaldia, de donde salió con el premio especial del jurado y premio cine vasco.

Tras haber luchado en la Primera Guerra Carlista, Martín vuelve a su caserío familiar en Guipúzcoa y allí descubre con sorpresa que su hermano menor, Joaquín, es mucho más alto de lo normal. Convencido de que todo el mundo querrá pagar por ver al hombre más grande sobre la Tierra, ambos hermanos se embarcan en un largo viaje por Europa en el que la ambición, el dinero y la fama cambiarán para siempre el destino de la familia. Una historia inspirada en hechos reales.

En la quinta edición de los Premios Platino, la película más galardonada fue la coproducción chileno-española Una mujer fantástica, ganadora de cinco estatuillas, entre ellas la de mejor película iberoamericana de ficción, mejor dirección, para Sebastián Lelio, y mejor intérprete femenina, para Daniela Vega.

En esta edición se estrenó la categoría de actores en las series y fue Blanca Suarez, protagonista de Las chicas del cable, quien se llevó el premio a la mejor interpretación femenina.

El encargado de conducir la gala fue Eugenio Derbez, director, productor y guionista mexicano. Los premios fueron retransmitdidos por 18 canales de televisión para más de ochenta millones de hogares y en la gala se lanzaron alegatos por la igualdad, el rechazo a la diferencia y a la falta de oportunidades.

La actriz, directora, productora y formadora, Adriana Barraza fue premiada por su trayectoria, así como por su faceta docente con el Platino de Honor. – A. Valle

Fuente: http://www.deia.eus/2018/05/01/ocio-y-cultura/cultura/handia-platino-al-cine-y-educacion-en-valores

Comparte este contenido:

Los premios del Cine Iberoamericano se celebraron entre alegatos a favor de la igualdad y la educación

Por: deia.eus

‘Handia’, Platino al Cine y Educación en Valores

Los Premios Platino del Cine Iberoamericano, que se celebraron el pasado fin de semana en Cancún, otorgaron el Premio Cine y Educación en Valores a Handia, el largometraje dirigido por Jon Garaño y Aitor Arregi. La cinta vasca que narra la historia real de Miguel Joaquín Eléicegui, El Gigante de Altzo, que ya triunfó en los Goya con diez galardones;en los Premios Feroz, ganando el premio a mejor música y cartel, y en el Zinemaldia, de donde salió con el premio especial del jurado y premio cine vasco.

En la quinta edición de los Premios Platino, la película más galardonada fue la coproducción chileno-española Una mujer fantástica, ganadora de cinco estatuillas, entre ellas la de mejor película iberoamericana de ficción, mejor dirección, para Sebastián Lelio, y mejor intérprete femenina, para Daniela Vega.

En esta edición se estrenó la categoría de actores en las series y fue Blanca Suarez, protagonista de Las chicas del cable, quien se llevó el premio a la mejor interpretación femenina.

El encargado de conducir la gala fue Eugenio Derbez, director, productor y guionista mexicano. Los premios fueron retransmitdidos por 18 canales de televisión para más de ochenta millones de hogares y en la gala se lanzaron alegatos por la igualdad, el rechazo a la diferencia y a la falta de oportunidades.

La actriz, directora, productora y formadora, Adriana Barraza fue premiada por su trayectoria, así como por su faceta docente con el Platino de Honor. – A. Valle

*Fuente: https://www.deia.eus/2018/05/01/ocio-y-cultura/cultura/handia-platino-al-cine-y-educacion-en-valores

Comparte este contenido:

Fraternidad escolar

Por: Jerónimo Alayón Gómez

Maestro y discípulo constituyen una unidad. Es imposible pensar el uno sin el otro. Cuando el docente se hace condiscípulo de su alumno, permite que este pueda devenir en copedagogo. Se trata de una operación que involucra la identidad del conjunto, con lo cual el hecho pedagógico consigue alcanzar altas cotas en su dimensión antropológica. Desde esta perspectiva, enseñar viene a ser no solo un modo de aprender, sino un método humanizador del saber, puesto que es construido en el seno mismo de la fraternidad escolar.

Estamos tan acostumbrados a pensar que el conocimiento es un constructo casi exclusivo de ciertas cofradías académicas e intelectuales que parecería una herejía suponer siquiera algún grado de iniciativa productiva entre estudiantes. Son ellos, sin embargo, quienes están llamados a asumir la primigenia intelectual, a imprimir el sello de los nuevos tiempos a la sapiencia. Cuando el maestro se hace uno con el discípulo, por sobre lo diverso de cada cual surge un saber en el que se cumple la máxima de Ortega y Gasset: «El progreso no consiste en aniquilar el ayer, sino en conservar aquella esencia del ayer que tuvo la virtud de crear ese hoy mejor».

Dicha fraternidad escolar no significa la anulación de las diferencias en pro de una unidad artificial, fundada solo en las similitudes y coincidencias. El encuentro auténtico con la otredad entraña el diálogo entre las diversidades. El dialogismo de los símiles ha sido no pocas veces génesis del pensamiento único. Al inicio de las dictaduras suele habitar la premisa de sobrevalorar el discurso gemelo. Hacernos uno con el otro es tanto más exigente cuanto que supone entendernos en nuestras desigualdades y desencuentros. Allí radica el verdadero esfuerzo y reto de toda fraternitas asumida con autenticidad.

A menudo alumno y maestro confrontan grandes disimilitudes, que se profundizan aun más por el abismo generacional. Aquí no hay lugar para la teoría del rompecabezas, no se puede soñar con los laterales ideales que habrán de concatenar a la perfección. En todo caso, la fraternidad escolar es un puzle orgánico, cuyas piezas cambian continuamente de forma y tamaño, de manera tal que se hace indispensable reinventar a cada tanto el juego con el objeto de lograr finalmente el dibujo definitivo del saber. Las diferencias no solo constituyen el fundente de un diálogo maduro, sino que son el motor vigoroso de una fraternitas sembrada en el respeto al Otro.

En consecuencia, la fraternidad escolar es profesar el amor, más que ejercitar la tolerancia. Esta, por así decirlo, es un amor empobrecido por la resistencia al Otro. El amor, por el contrario, supone una atracción hacia la otredad, fundada en hacer de ella y sus diferencias una aventura. El que ama está siempre atento al cambio y a los modos de amar que ello implica. La novedad de la alteridad, que deviene a cada tanto en alguien parcialmente distinto de quien era, impone al amor interrogarse sobre sus posibilidades de realizarse en lo diverso. Amar debe ser, indefectiblemente, un acto creador.

Este amor del que hablamos es ciertamente de una textura distinta y se llama dilección. Se establece en torno de la mutua admiración. Proviene del logos y no del pathos, esto es, halla su origen más cerca de la razón que de la pasión. No es pariente del eros sino del ágape, por lo tanto no está atento a la pulsión sexual: su expectativa es la trascendencia de la palabra, el poder seductor de una inteligencia esbelta. Por ello nunca envejece. Tal era el sentido que correspondía a aquella expresión ya olvidada por los docentes de hoy: el alumno dilecto.

La fraternidad escolar, por consiguiente, descansa sus columnas sobre estas prerrogativas. La unidad maestro-discípulo es posible casi exclusivamente cuando el amor la habita intrínsecamente. En su defecto solo habrá la pasajera asociación entre un emisor de conocimientos y sus correlativos receptores, esto es, un acto burocrático de pedagogía institucional. ¿Cuántas veces hemos sido burócratas de la educación? ¿Cuántos podríamos asegurar que amamos a nuestros estudiantes, y que somos amados por ellos? ¿Acaso vale la pena impartir siquiera un ápice de conocimiento divorciados de la fraternitas que nos debía mover hacia el Otro, ese que cree tanto en nosotros como para recibir a manera de don el saber que atesoramos?

Fuente: https://www.viceversa-mag.com/fraternidad-escolar/

Comparte este contenido:

La educación es la clave.

Por: Judith Araújo de Paniza.

Requerimos un compromiso firme con la educación si queremos cosechar frutos diferentes: educación en nosotros mismos, en el hogar, en las instituciones educativas y en la sociedad.

Nuestra educación personal, o reeducación, implica que estemos constantemente revisando nuestros frutos y nuestras acciones. Si no nos gustan los frutos, cambiemos nuestras actuaciones. Si el ambiente que propiciamos es de pesimismo, tensión, amargura, necesitamos revisar nuestros pensamientos, sentimientos y acciones para que al transformarlos desde el interior, podamos generar optimismo, serenidad y alegría. Y así, en cada situación de nuestra vida, tomar el timón de nuestra existencia, con la ayuda de Dios, e ir dirigiéndola en pos del bien en concordancia con nuestras aspiraciones, sueños y deseos para ir cambiando la realidad propia y de quienes nos rodean.

En el hogar también el asunto de la educación es trascendental, el buen ejemplo, mucho amor, compartir las realidades de los miembros de la familia y normas claras para que se vayan interiorizando los hábitos que nos conducen a vivir de acuerdo a las virtudes y valores que podemos ir fortaleciendo con la ayuda de la gracia. Unión, amor, atención y respeto, son factores importantes para que el hogar sea fuente de aprendizaje positivo. Saber ofrecer, y pedir perdón cuando nos equivocamos, ayuda a que las relaciones se fortalezcan.

Las instituciones educativas también son muy importantes en este proceso, nunca podrán suplantar a la familia como fuente primera de la educación para la vida, pero sí pueden, si tienen las condiciones necesarias, ser un complemento indispensable y de apoyo tanto para los estudiantes como para los padres de familia. Es fundamental que como sociedad le demos la prioridad que merecen, si de verdad queremos progresar. Requieren toda la atención para que sean ambientes físicos, emocionales, espirituales, científicos, artísticos, deportivos que estimulen el desarrollo humano en todos los órdenes. Necesitamos hacer un esfuerzo colectivo si de veras queremos progresar como comunidad. Muchas de nuestras escuelas no tienen lo básico para funcionar bien.

La sociedad también es un espacio educativo o antieducativo cuando se viven antivalores. Necesitamos recobrar el norte poniendo a la integridad, la justicia, el respeto, la higiene, la honestidad, la solidaridad y demás valores, como prioritarios y  trabajarlos con intensidad para reeducarnos y transformar nuestras realidades.
Abramos la mente y el corazón al Espíritu Santo* para que nos guíe en esta tarea y asumamos la educación como la clave de los avances personales, familiares y sociales.

Fuente: http://www.eluniversal.com.co/opinion/columna/la-educacion-es-la-clave-13373

Imagen: https://static.iris.net.co/semana/upload/images/2015/4/20/424766_10945_1.jpg

Comparte este contenido:

Película: El caso de Cristo

Reseña: Un investigador que bebe compulsivamente mientras conecta con cordeles datos y fotografías enganchados a un corcho no es la primera imagen que a uno le viene a la cabeza cuando se habla de “cine espiritual”. Sin embargo, es precisamente el núcleo de El caso de Cristo, una suerte de thriller en la onda de Zodiac Todos los hombres del presidente que utilizará la tensión de un proceso detectivesco para hablar de la fe.

El protagonista, periodista galardonado y ateo declarado, pone todas sus habilidades en juego cuando su mujer se convierte al cristianismo: no puede concebir que ella crea una mentira. El director Jon Gunn y los guionistas Brian Bird y Lee Strobel presentarán esta historia de intriga y drama matrimonial que surge a partir de una sugerente premisa: ¿puede la fe superar la prueba del racionalismo cerril?

Fuente: https://www.cinemanet.info/2018/01/9-peliculas-de-cine-espiritual-a-tener-en-cuenta-en-2018/

Comparte este contenido:

Película: El pez y yo

Reseña: El pez y Yo es la película más corta ya producida, gracias al talento de Babak Habibifar, director y productor iraní .

El rotero, la dirección y la música, son de Babak, que también es el protagonista. Rodada en 2014, demoró 30 minutos para ser realizada y tiene 1 minuto y 30 segundos de contenido. Al mejor estilo del cine mudo, deja un mensaje subliminal sobre la importancia que representa la vida: «de los demás.

Link: http://www.uypress.net/auc.aspx?83898,90

Comparte este contenido:

Colombia: Semilleros para fomentar valores en las Instituciones Educativas

Colombia/24 de Febrero de 2018/El Tiempo

65 semilleros de cultura ciudadana iniciaron actividades en 55 Instituciones Educativas de Cali.

En una apuesta por rescatar la identidad cívica del municipio, la Alcaldía de la ciudad, a través de la secretaría de Paz y Cultura Ciudadana, sigue adelantando estrategias encaminadas a fomentar la confianza entre sus ciudadanos y la participación efectiva de las comunidades en el desarrollo social de la ciudad.

A través de la subsecretaría de Prevención y Cultura Ciudadana, se ha puesto en marcha la estrategia de semilleros de cultura ciudadana, espacios para promover relaciones interpersonales de calidad, fundamentadas en el respeto y el reconocimiento de la diversidad como elemento característico de Cali.

El objetivo es implementar un proceso formativo con estudiantes de quinto a noveno grado, que impulse el intercambio de experiencias de cultura ciudadana, donde la interacción de la ciudadanía se traduzca en acciones e iniciativas colectivas destinadas a intervenir en problemáticas propias del territorio; prevenir violencias, motivar el respeto por las normas, procurar el uso correcto del espacio público y el cuidado del medio ambiente, inculcar la resolución pacífica de conflictos, son algunos de los ejes temáticos que sustentan este ejercicio de construcción de paz en la capital del Valle.

«Sembrar cultura ciudadana a través de los semilleros es pensar cómo a mediano y largo plazo podemos hacer contracultura por medio del diálogo de saberes con nuestros niños, niñas y jóvenes, brindando elementos que alimenten su proyecto de vida, su consciencia temprana como ciudadanos y la importancia de la autonomía para definir una identidad de lo que quieren ser y quieren darle a su ciudad cuando sean adultos”, expresó Carolina Campo Ángel, subsecretaria de Prevención y Cultura Ciudadana de Santiago de Cali.

En el año 2017 la estrategia llegó a 19 Instituciones Educativas que facilitaron la conformación de 15 semilleros en diez comunas y cuatro corregimientos, vinculando a un total de 400 estudiantes que voluntariamente se integraron a las actividades orientadas desde el arte, la cultura y la lúdica, para el desarrollo de habilidades socioemocionales, construcción de ciudadanía activa y diseño de proyecto de vida, haciendo énfasis en la importancia del trabajo en equipo, el poder de las acciones colectivas, la coexistencia, la promoción de espacios de diálogo, y la sensibilización acerca de problemáticas como matoneo, el acoso escolar y los malos tratos el aula de clase.

“Ha sido una excelente iniciativa para reforzar los procesos educativos de nuestros estudiantes, ya que por ser un espacio extracurricular, pueden sacar a flote toda su creatividad y asimismo, empoderarse y formarse como líderes de cultura ciudadana, siendo ejemplo no solo para la comunidad educativa sino también para sus barrios y territorios”, indicó Alberto Valencia, coordinador de la jornada de la tarde del colegio Pedro Antonio Molina.

Para el 2018, el trabajo de los semilleros de cultura ciudadana se verá multiplicado gracias a la implementación del programa “Mi comunidad es escuela”; proyecto de la Alcaldía que integra los esfuerzos de la Secretaría de Deporte y Recreación, las Secretarías de Cultura y la Educación y la Secretaría de Paz y Cultura Ciudadana; con el objetivo de fortalecer la calidad y pertinencia de los procesos educativos de las instituciones educativas oficiales rurales y urbanas de Santiago de Cali.

La meta es llegar a 1125 estudiantes a través de 65 semilleros de cultura ciudadana en 55 Instituciones Educativas, integrando a las acciones deportivas, culturales y pedagógicas, la movilización de imaginarios, actitudes y prácticas individuales que fortalezcan la cultura ciudadana, la convivencia y la construcción de paz a partir de las experiencias que dejan los aprendizajes de la vida cotidiana en la casa, el barrio y el aula de clase.

Se espera igualmente que la acción de los semilleros pueda trabajar de manera conjunta con las mesas de cultura ciudadana y los grupos de culturas urbanas de la ciudad, que también son acompañados por la Alcaldía a través de la Secretaría de Paz y Cultura Ciudadana, de tal modo que se pueda promover la unión de comunidad, escuela y administración municipal para el progreso de Cali.

Fuente: http://www.eltiempo.com/colombia/cali/semilleros-para-fomentar-valores-en-las-instituciones-educativas-182096

Comparte este contenido:
Page 6 of 20
1 4 5 6 7 8 20