Page 59 of 471
1 57 58 59 60 61 471

Algoritmos alternativos. Una estrategia de Tlaxcala para México

Por: Alberto Salvador Ortiz Sánchez

«Vivimos una encarnizada lucha entre quienes decían que fuéramos “hábiles” en el calculo mental, por citar un ejemplo, y quienes decían que no importaba lo que tardáramos, si encontrábamos la respuesta correcta…»

A lo largo de nuestra formación y desempeño profesional, no hemos sido pocos los que hemos escuchado y advertido que, de alguna manera, casi misteriosa pero explicable hasta cierto punto, a una gran parte de nuestros alumnos (docentes también desde luego) no les gustan o no les agradan las matemáticas. Es de conocimiento público que para mucha gente esta materia suele ser más que un reto…hasta tabú para muchos otros más. Y sin embargo, es imposible vivir sin convivir con los números. Dominan cada momento de nuestra existencia y sin duda son artífices del avance constante de la humanidad.

Muchos le tuvimos temor a las matemáticas ya sea porque tuvimos maestros poco comprometidos, otros porque nuestros padres nos enseñaron a su manera y modo y en un momento dado hubo un choque con lo que íbamos aprendiendo en la escuela, algunos más nos acercamos de manera intuitiva o autodidacta y no menos representan el bloque de quienes les apasionan y divierten los números no como conceptos abstractos, sino como lo más natural y lógicamente coherente en el universo.

Nuestros planes y programas también han sufrido esa vorágine pues pasamos de sistemas de enseñanza basados en el aprendizaje memorístico de números u operaciones sin una conexión lógica a modelos inspirados en la reflexión y análisis más allá de lo que hemos conocido como la aritmética. Vivimos una encarnizada lucha entre quienes decían que fuéramos “hábiles” en el calculo mental, por citar un ejemplo, y quienes decían que no importaba lo que tardáramos, si encontrábamos la respuesta correcta, ya nos podíamos dar por bien servidos. Otra lucha había cuando nos pedían explicar “el procedimiento” por el cuál encontramos nuestras respuestas. Si atinábamos al del docente, ya teníamos un punto adicional, si no era así, éramos mecedores de taches y llamadas de atención porque “no era posible” encontrar una respuesta sin escribir un procedimiento.

Mucha de esta polémica sigue estando viva y es evidente que en el corto plazo no podremos dar por ganador a unas u otras posturas metodológicas, pues al final del día tenemos una guía curricular que, acorde a los tiempos modernos, no se basa exclusivamente en la memoria o el razonamiento por sí mismos o aisladamente trabajando uno con otro, sino que parte del concepto del aprendizaje situado.

Sirve recordar lo que dice el marco curricular. De acuerdo con el Plan de estudios 2011 “los avances logrados en el campo de la didáctica de la matemática en los últimos años dan cuenta del papel determinante que desempeña el medio, entendido como la situación o las situaciones problemáticas que hacen pertinente el uso de las herramientas matemáticas (…) así como los procesos que siguen los alumnos para construir conocimientos” (SEP. Programas de estudio. Guía para el maestro 3er grado. 2011)

Por su parte, el Plan 2017 conocido también como de Aprendizajes clave para la educación integral, considera que “las matemáticas son un conjunto de conceptos, métodos y técnicas mediante los cuales es posible analizar fenómenos y situaciones en contextos diversos (…) así, comprender sus conceptos fundamentales, usar y dominar sus técnicas y métodos y desarrollar habilidades matemáticas (…) tiene el propósito de que los estudiantes identifique, planteen y resuelvan problemas, estudien fenómenos y analicen situaciones y modelos en una variedad de contextos” (SEP. Aprendizajes clave para la educación integral. 1er grado. 2017)

Nótese como ambos marcos curriculares conciben a las matemáticas (y más específicamente el pensamiento matemático) como un algo en constante crecimiento y desarrollo, no meramente memorístico o abstracto y que como docentes debemos ayudar a desarrollar en cada uno de nuestros alumnos no forzando etapas del pensamiento.

En la zona escolar 019, la compañera Karen Citlaly Rugerio Gómez ha desarrollado con sus alumnos una estrategia novedosa denominada “Algoritmos alternativos”, la cual fue incluso tema de un programa de Aprende en Casa edición Tlaxcala (puede verse en la siguiente liga: https://youtu.be/9bmEO7WQ11A). A continuación, la maestra Karen nos explica su trabajo.

“¿Qué es un algoritmo?… dice Fernández (2005), “se identifica en el conjunto de una secuencia de pasos operativos para la realización de una tarea o la resolución de un problema” (p. 32). Si bien esta definición resulta sencilla, podemos encontrar otras que completan su significado: … serie finita de reglas a aplicar en un orden determinado a un número finito de datos para llegar con certeza (es decir, sin indeterminación ni ambigüedades), en un número finito de etapas, a cierto resultado, y esto, independientemente a los datos. (Buendía, Fernández y Rico, 1990, p. 51) … sucesión finita de reglas elementales, regidas por una prescripción precisa y uniforme, que permite efectuar paso a paso, en un encadenamiento estricto y riguroso, ciertas operaciones de tipo ejecutable, con vistas a una resolución de los problemas pertenecientes a una misma clase (Gallardo, 2004). Para Ñabraña (2002) un algoritmo permite obtener resultados sin tener que justificar los pasos dados; exige rigor, orden, concentración y práctica; puede ser popularizado ya que no es necesario comprender por qué funciona, basta con saber cómo funciona.

Desde un punto de vista matemático un algoritmo es un método sistemático que te ayuda a resolver operaciones numéricas, y a su vez consta de un conjunto finito de pasos guiados por unas reglas que nos facilitan el cálculo, según el punto de vista, y llegar a un resultado exacto.

Ventajas de algoritmos alternativos

Atendiendo a las necesidades de un cambio no solo curricular si no de pensamiento, a lo largo de los años, lo que ha traído consigo causa que según Pérez (2005) basa en:

  • Cuestionamiento de otros algoritmos en los currículums.
  • Renovación pedagógica de los 50 con inspiración constructivista.
  • Uso social en el que cada vez menos se hacen cuentas con lápiz y papel.
  • Movimientos a favor de la abolición de los algoritmos tradicionales que piden más estrategias para cálculo mental y uso de la tecnología: calculadora)

Es preciso destacar que “Es bueno que los niños conozcan más de un algoritmo para una misma operación, de modo que puedan elegir según las cantidades implicadas, el tiempo disponible, etc.” (Bermejo et al., 2009). De esta manera los estudiantes pueden realizar conexiones a partir de vida cotidiana o su contexto a diferencia del algoritmo tradicional.

Desde el punto de vista de diferentes autores las ventajas más significativas de conocer desarrollar o aprender un algoritmo alternativo son:

  • Cálculo mental (Iglesias, 2005; Martínez, 2001).
  • Estimación (Martínez, 2001).
  • Uso y construcción de materiales (Meavilla y Oller, 2014).
  • Procedimientos personales: aproximación por redondeo, búsqueda de puntos de referencia por exceso y defecto, descomposiciones, intuición de proporcionalidad (Fernández, 2005; Iglesias, 2005; Meavilla y Oller, 2014).

Todas las ventajas que se desarrollan anteriormente tienen un sentido de pertenencia e identificación con la finalidad de conocer las operaciones básicas y no solo conocer el algoritmo que las define.

Sustracción

La sustracción: La resta no es una operación independiente. Para saber restar es necesario saber sumar. La operación de restar se estudia principalmente, en la educación primaria, como sustracción y como complementariedad la representación matemática de esta operación como sustracción no es fácil para el niño, debido a que el sustraendo se representa como cantidad distinta, sin serlo.

Esto nos lleva a una descripción, no solo a partir de una definición de la sustracción, también atenderlo desde una reflexión de su propósito y el manejo que el estudiante le puede dar al algoritmo de sustracción, es preciso identificar el uso de esta operación en el ámbito escolar, así como en la vida cotidiana. Esto es, ir más allá de saber resolver el algoritmo de una forma mecánica, y en cambio alcanzar a entender el sentido de cada uno, para poder aplicarlo en problemas de la vida cotidiana de una manera efectiva.

De esta manera defino “resta por eliminación de valor común” como un algoritmo alternativo (diferente al algoritmo tradicional establecido), aplicado posterior a la metodología de las regletas Cuisenaire, como se explica a continuación:

Metodología de la sustracción por eliminación de valor común.

  • Tener una operación de sustracción.

  • Identificar cada uno de los elementos o partes que integran una sustracción

  • Identificar los valores del sustraendo

  • Descomponer el sustraendo

  • Descomponer minuendo de tal manera que estén presentes los números que integran el sustraendo

  • Eliminar los valores comunes del sustraendo que se encuentren en el minuendo.

  • Sumar los valores del minuendo restando


Bibliografía

Buendía Eisman, L.; Fernández Cano, A. y Rico Romero, L. (1990). Algoritmos y estrategias en la enseñanza del cálculo básico. Revista de investigación educativa, RIE, 8(15), 51-62.

Fernández Bravo, J.A. (2005). Avatares y estereotipos sobre la enseñanza de los algoritmos en matemáticas. Unión: revista iberoamericana de educación matemática, 4, 31-46.

Gallardo Romero, J. (2004). Diagnóstico y evaluación de la comprensión del conocimiento matemático. El caso del algoritmo estándar escrito para la multiplicación de números naturales (Tesis Doctoral no publicada). Málaga: Departamento de Didáctica de la Matemática, de las Ciencias Sociales y de las Ciencias Experimentales, Universidad de Málaga.

Iglesias Pérez, J.M. (2005). Los algoritmos tradicionales y otros algoritmos. Unión: revista iberoamericana de educación matemática, 4, 47-49.

Martínez Montero, J. (2001). Los efectos no deseados (y devastadores) de los métodos tradicionales de aprendizaje de la numeración y de los algoritmos de las cuatro operaciones básicas. Epsilon: Revista de la Sociedad Andaluza de Educación Matemática “Thales”, 49, 13-26.

Meavilla Seguí, M. y Oller Marcén , A.M. (2014). Gaspar de Texeda y los algoritmos de la multiplicación. Suma: Revista sobre Enseñanza y Aprendizaje de las Matemáticas, 75, 61-73.

Ñabraña, A. (2002). Algoritmos e Matemáticas. Eduga: revista galega do ensino, 34, 147-166.

Pérez, A.J. (2005). Algoritmos en la enseñanza y el aprendizaje de las matemáticas. Unión: revista iberoamericana de educación matemática, 1, 37-44.

Roa Guzmán, R. (2007). Algoritmos de cálculo. En Castro Martínez, E. (Ed.), Didáctica de la matemática en la Educación Primaria (pp. 231-256). Madrid: síntesis.

Fuente e Imagen: https://profelandia.com/algoritmos-alternativos-una-estrategia-de-tlaxcala-para-mexico/

Comparte este contenido:

El Salvador: Choque entre ministra de Educación y gremial de docentes por pregunta en prueba para maestros

América Central/El Salvador/05-11-2021/Autor: Carlos López Vides/Fuente: www.elsalvador.com

Según los docentes, un ítem medía si «en general, está satisfecho por la forma en que el país es gobernado». Mientras que la titular del ministerio dice que esa pregunta «no existe» en el examen para optar a plaza de trabajo.

El Frente Magisterial Salvadoreño, agrupación que aglutina a docentes del sector educativo público en el país, lanzó una denuncia en redes sociales el domingo por la noche, donde cuestionó una de las preguntas que aseguran se incluyó en la prueba para elegir a nuevos docentes que ocuparán plaza en el Ministerio de Educación.

La publicación de denuncia fue: “Señora Ministra de Educación, consideramos que el Ítem 189 de la prueba psicométrica que reza textualmente: “¿En general, está satisfecho por la forma en que el país es gobernado?”, no debe ser tomado en cuenta como parámetro de medida para establecer la idoneidad del Docente que busca una plaza laboral, ya que atentatorio al derecho Constitucional de la libertad de pensamiento”.

Detalle de la pregunta número 189 en la prueba, según la denuncia de los docentes. / Cortesía

Agregaron también que “nuestros agremiados que son parte del sector profesional docente de psicología nos manifiestan que no es una pregunta adecuada para un test psicométrico, así mismo porque también lo consideramos antiético”.

Foto EDH / Jessica Orellana

Carla Hananía de Varela, ministra de Educación, reaccionó la mañana de este lunes en entrevista con Radio YSKL, y comentó: “Quedé sorprendida por el nivel de negatividad que tienen. En Twitter sacaban una serie de preguntas que decían que preguntábamos de la forma en que la prueba se está haciendo, esa pregunta no existe”.

La titular de Educación defendió la elaboración de la prueba y matizó que “la gente que estaba acostumbrada como el sistema de antes, tomando decisiones discrecionales, no está contenta y es normal, todos los cambios generan estas reacciones, muchas personas no pasaron la prueba y creen que porque ellos la reprobaron, tiene defectos”.

Insistió Hananía de Varela en que esta prueba se ha hecho con la auditoría de dos empresas externas, para garantizar que su elaboración y resultados sean veraces y confiables.

“Las personas que participaron en el diseño de las pruebas firmaron una carta de confidencialidad. Además las empresas auditoras están comprometidas a dar resultados sobre el sistema”, subrayó la ministra.

Diversos sectores del magisterio están en desacuerdo con palabras recientes expresadas por la ministra Hananía de Varela, e incluso ya pidieron a Casa Presidencial que se le destituya de inmediato, pues consideran que ha sido ofensiva con los profesores, al cuestionar su preparación académica y hasta su capacidad para expresarse.

Ante esto, la funcionaria aprovechó para comentar: “Sobre el tema del desprestigio al sector docente; mis palabras fueron sacadas de contexto, yo estaba hablando del proceso de concurso de plazas, y hablaba del problema de los candidatos para entrar, los cuales eran signos preocupantes. En ningún momento dije ‘todos’ (los docentes). Porque los que están adentro nos estamos encargando de darles la especialización. Yo hablaba de los que están concursando a plazas”.

Fuente  e Imagen: https://www.elsalvador.com/noticias/nacional/ministerio-de-educacion-ministro/895736/2021/

Comparte este contenido:

‘El Juego del Calamar’ no es el único: estos contenidos tampoco son para menores

Por:

‘Fornite’, ‘Stranger Things’ o ‘La Casa de Papel’ son algunos de los contenidos que muchos menores conocen y visualizan a pesar de no ser aptos para su edad. Una psicóloga educativa y un docente de Primaria nos explican las razones por las que no deberían consumirlos.

Desde hace unas semanas, la serie surcoreana ‘El Juego del Calamar’ está causando revuelo en el ámbito educativo debido a la reproducción de los violentos juegos de la ficción por parte de algunos estudiantes de Primaria en los patios de los colegios. Te lo contamos aquí.

No obstante, y al hilo de esta polémica, son muchas las familias y docentes que han comentado en redes sociales la problemática que surge con otros contenidos audiovisuales (series, películas, videojuegos…) a los que los menores también tienen acceso.

Un ejemplo ya clásico es la serie de televisión ‘Bob Esponja’, muy conocida entre niños de todas las edades, y que cuenta las aventuras de una esponja cuadrada y amarilla, Bob, y de su mejor amigo Patricio en el fondo del mar. Aunque en la actualidad está catalogada para mayores de siete años, lo cierto es que esta serie animada es una de las ficciones que más quejas ha recibido por parte de la audiencia en TVE (se emite en el canal de dibujos Clan y en Netflix) debido al lenguaje malsonante o la ‘violencia’ que se produce entre los personajes. Tanto es así que en el año 2015, RTVE tuvo que reconocer que no era apta para menores de siete años, y aún así, las quejas no han dejado de sucederse en años posteriores.

Bob esponja

Pero, ¿cuáles son los contenidos que más visualizan los niños a pesar de que no están indicados para ellos? Hemos consultado a una psicóloga educativa y a un docente de Primaria para que nos cuenten, de primera mano, cuáles son los contenidos audiovisuales más populares entre algunos estudiantes y las razones por las que no deberían verlos.

Videojuegos populares, pero no aptos para niños

En la lista de María Jesús Campos, psicóloga educativa y formadora, se encuentran varios videojuegos muy populares como Fornite, Grand Theft Auto o Call of Duty, a los que juegan pequeños y adolescentes. ¿Los principales problemas de todos estos contenidos? La violencia y el sexo implícitos o la aparición de comportamientos o vocabulario no aptos para niños. “Uno de los motivos por lo que los menores no deben visualizar estos contenidos se debe a su madurez cognitiva, que no está preparada para las acciones que aparecen en ellos”, destaca Campos.

videojuegos no aptos menores
  • Fornite. Catalogado para mayores de 12 años, este juego es, para Campos, no recomendable para menores por las acciones y el fin del propio videojuego: “Sobre todo en el modo competitivo del juego (Battle Royale), en el que el jugador tiene que ser el último superviviente del grupo. Además, jugar en modo online supone estar en contacto con personas que en ocasiones son desconocidas, suponiendo un peligro para los niños al no identificar algunos de los riesgos de la red y aportar datos personales mientras se está en las salas de espera del juego”.

Además, destaca las razones por las que atrae poderosamente a los niños: “Por la estética y los famosos bailes, pero también porque es un juego retador ya que hay que ‘acabar’ con los demás para garantizar la supervivencia. Y aquí es donde la madurez de los menores no es adecuada para gestionar y controlar muchos de los comportamientos, vocabularios y exigencias del juego”.

  • Grand Theft Auto. El popular GTA cuenta la historia de diferentes criminales y está recomendado para mayores de 18 años. No obstante, y tal y como indica Campos, juegan menores y adolescentes: “Es muy violento y durante el mismo se desarrollan acciones como violaciones, atracos, atropellos, robos, ‘matar por matar’… Se puede hacer lo que se quiera para cumplir con tu misión. El vocabulario y las imágenes son muy violentas ya que son acciones que el jugador decide realizar, por lo que hay que saber separar la realidad de la ficción”.
  • Call of Duty. También recomendado para mayores de 18 años, es un videojuego de estilo bélico y de disparos en primera persona. Campos destaca el alto contenido de violencia verbal, conductual y sexual. “Muchos niños se pasan horas jugando por el nivel de excitación que proporciona el juego. Esto repercute en sus acciones y expresiones a nivel emocional, de tensión y comportamientos. A nivel madurativo y de desarrollo cognitivo, el cerebro no está preparado para toda esa estimulación, ni para ver y gestionar esas imágenes”.

¿Y cuáles son las series no recomendadas?

Guillermo Buedo, docente de Primaria, destaca que los principales contenidos que visualizan sus alumnos (de 5º y 6º) son series muy populares (independientemente de si se emiten en abierto o en plataformas de streaming) y, curiosamente, también ‘realities’ de televisión. Por su parte, Campos ha añadido a la lista una serie reconocida a nivel mundial y exclusivamente para adultos.

Series de tv no aptas niños
  • Stranger Things y Padre de familia. Buedo destaca el miedo y el terror como los principales motivos por los que Stranger Things (para mayores de 16 años) no es apta para pequeños. La desaparición de un menor en extrañas circunstancias y los fenómenos que ocurren alrededor del mismo son dos de los factores por los que los estudiantes de Buedo la visualizan. El alumnado comenta al propio docente que, incluso, van a verla a casa de un amigo si en la suya no le dejan. Por otro lado, ‘Padre de Familia’ se trata de una ficción de animación creada para adultos que los menores también conocen. Pero Buedo destaca tres elementos no aptos para ellos. “En ella hay violencia, sexo y machismo”.
  • La que se avecina. Las aventuras de la comunidad de vecinos de Montepinar están calificadas para mayores de siete años, por lo que muchos de los alumnos de Buedo la conocen y la ven porque “es lo que hay puesto en la tele y es lo que está viendo la familia en ese momento”. Para el docente, hay razones por las que no verla con menores: “machismo, sexo o clasismo son algunos de ellos”.
  • Élite. Catalogada para mayores de 16 años, esta serie también es conocida por los estudiantes de Buedo. En su opinión, la violencia y el sexo implicitos o la aparición del suicidio son los motivos por los que considera que esta ficción, que relata el día a día de unos jóvenes en un colegio exclusivo para estudiantes adinerados, no debería ser vista por los más pequeños.
  • La Casa de Papel. Para mayores de 16 años, esta serie se ha convertido en todo un éxito a nivel mundial. Campos señala que la estética es uno de los principales motivos por los que atrae a los niños. “La estética y los disfraces (que han surgido después) ha llevado a los menores a visualizar la serie para comportarse (y jugar) como algunos de los personajes”.

Buedo también incluye en su lista un reality, ‘La isla de las tentaciones’, recomendado para mayores de 16 años y que, en su opinión, recoge elementos relacionados no solo con el sexo, sino también con el machismo. Asimismo, subraya que los estudiantes lo ven por ‘estar a la moda’ y porque las redes sociales influyen en ello. “En TikTok (que muchos tienen) parodian series o momentos que hacen crecer la curiosidad por ver todos estos contenidos”. Unas cuestiones en las que la psicóloga Campos coincide y por las que lanza una recomendación a las familias: “No hay que dejarse llevar por las modas y porque los menores les digan que todos sus amigos o compañeros lo ven. Es importante que las familias conozcan esos contenidos, indaguen sobre ellos y pongan límites”, concluye.

Fuente: https://www.educaciontrespuntocero.com/noticias/contenidos-no-menores/

Comparte este contenido:

‘El juego del calamar’: Lo que los padres pueden hacer para «matar» la curiosidad de sus hijos

Por: ABC

El equipo docente del colegio de Infantil y Primaria ‘Teresa de Calcuta’ de San Sebastián de los Reyes (Madrid) ha enviado una circular a todas las familias advirtiendo que han detectado entre los estudiantes «actitudes y juegos» relacionados con la serie ‘El juego del calamar’ y para frenar esta ola de imitación y difusión han decidido prohibir disfraces relacionados con ella para las próximas fiestas de Halloween. Como en éste, en otros colegios se han detectado situaciones similares que preocupan a los padres, ya que la serie contiene escenas de violencia que los más pequeños acaban por normalizarlas.

En declaraciones a Ep Televisión, el exdefensor del Menor y doctor en Psicología y en Ciencias de la Salud, Javier Urra, ha explicado que la serie tiene una violencia «muy clara y gratuita con ideas perversas» y que en ocasiones prohibir «puede ser pedagógico». En este sentido, ha recordado que la serie dice que es para mayores de 16 años y ha apelado a la responsabilidad de los padres.

«El problema de la serie es que es atractiva porque son juegos, por lo que los niños con 7 años en muchos coles ya juegan a ello», ha señalado a la vez que ha destacado que un joven de 16 años «tiene criterio pero uno de 11 no», y que por lo tanto no deben ver la serie.

En esta línea, el Urra ha explicado que lo «más inteligente» podría ser enseñar un trozo de la serie para que maten la curiosidad y no busquen escenas por su cuenta. «Explicarles por qué está mal, de algo tóxico y negativo hacerlo educativo».

Fuente e Imagen: https://www.abc.es/familia/educacion/abci-juego-calamar-padres-pueden-hacer-para-matar-curiosidad-hijos-202110190106_noticia.html

Comparte este contenido:

Conversatorio virtual: «¿libertad de enseñanza o derecho a la educación?». Chile

América del Sur/Chile/29-10-2021/Autor(a) y Fuente:www.colegiodeprofesores.cl

El Departamento de Educación y Perfeccionamiento del Colegio de Profesoras y Profesores desarrolló este espacio de conversación e intercambio sobre educación, libertad y proyectos educativos disidentes, junto a Evelyn Carrasco, de la Escuela Viva Peumayen; Roberto Pérez, de la Escuela Ruka Kimche; y Carlos González, profesor, científico e investigador. Aquí, la grabación íntegra de la instancia.

Fuente e Imagen: https://www.colegiodeprofesores.cl/2021/10/26/conversatorio-virtual-libertad-de-ensenanza-o-derecho-a-la-educacion/

Comparte este contenido:

Efrén Carbonell: «Absolutamente todos los alumnos con discapacidad pueden ir a una escuela ordinaria»

Por:

  • El hasta ahora director de la Fundación Aspasim, que apenas se acaba de jubilar, considera que el Síndic de Greuges se queda corto cuando pide una reducción del 70% del alumnado de la escuela especial. Y piensa que, para avanzar, hace falta voluntad política y recursos, pero también «poner ganas y creérselo», como hacían a finales de los 90 las escuelas con las que Aspasim comenzó a trabajar las primeras experiencias de inclusión.

Efrén Carbonell es uno de los referentes de la educación inclusiva en Cataluña. Y es, como tantos otros aquí y en el resto del mundo, un psicopedagogo que viene de la escuela especial. Y que predica, desde hace muchos años, que las escuelas especiales se deben cerrar. A los 17 años tenía intención de estudiar Filología, pero a última hora cambió de parecer y se inscribió en Psicología, pensando que tal vez así podría ser más útil a su hermana Merçè, que tenía síndrome de Down. Merçè entonces estaba escolarizada en un centro de educación especial llamado Aspasim, que dirigía Vicenta Verdú, y a su padre le habían hecho presidente de la asociación de familias. Efrén Carbonell acabaría entrando en esa escuela como maestro a principios de los 80, y diez años después, y durante los últimos 30, ha sido su director.
Ahora se jubila, lo que no quiere decir que se retire, advierte, ya que piensa seguir dando guerra. A lo largo de estos años, Carbonell ha impulsado varias jornadas sobre educación inclusiva, ha llevado a Barcelona expertos de la talla de Gordon Porter, ha cofundado y presidido Dincat, ha sido un miembro muy activo de la Plataforma por la Escuela Inclusiva y de la asociación LADD (la Asociación en Defensa de las Personas con Discapacidad). Y ahora pasa a ser “un voluntario más” de la Fundación Aspasim, aparte de haber accedido a formar parte de otros proyectos, como la Federación Catalana de Voluntariado o la Asociación de Maestros Rosa Sensat. También está ultimando un libro, que se titulará Aprender a voces. Hacia cien años de educación diferenciada, que será continuación y complemento del que publicó en 2017: Escuelas inclusivas, escuelas de futuro (Rosa Sensat).

Siempre me ha sorprendido que haya directores de centros de educación especial que defiendan que se deben cerrar.

Nosotros somos una escuela especial que quiere cerrar, pero lo quiere hacer cuando la escuela ordinaria sea capaz de dar la misma calidad educativa a alumnos con discapacidades graves. Piensa que en estos momentos en nuestra escuela, de todo su alumnado, sólo el 15% está en la escuela especial, el resto están en escuelas ordinarias.

¿En qué momento Aspasim hizo este clic?

El cambio de filosofía de la escuela surge de una reflexión que hacemos en 1987. Empezamos a decirnos que la escuela lo tiene todo menos la normalidad, y decidimos empezar a llamar a la puerta de escuelas ordinarias, y así es como empezamos a hacer escuela compartida con algunos centros (Solc, Xiprers, Nabí…) Alumnos que estaban matriculados en la escuela especial y pasaban unas horas en la escuela ordinaria. Había una inspectora muy potente, que era María Teresa Rodríguez, que nos impulsó a transgredir la ley. Y eso nos decía: «Para que la ley cambie, hay que transgredirla».

Pero las jornadas compartidas no son el punto final. ¿O sea que hubo una evolución?

Correcto, nosotros la hacemos entre 1987 y 1998, y entre el 94 y el 98 tuve la suerte de poder participar en un proyecto Comenius de la UE, como representante de la Generalitat. Y allí conocí lo que se llamaba la integración. Y en el año 98 nos enviaron al distrito londinense de Newham a conocer la experiencia de la inclusión. Allí es donde vi que cualquier alumno, absolutamente cualquiera, independientemente de su discapacidad, podía estar en la escuela ordinaria. Cuando ves esto ya no puedes echar marcha atrás. Allí hacía 10 años que habían comenzado un plan de reconversión de todos sus centros de educación especial, que eran ocho o nueve, y el objetivo era cerrarlos todos, de tal manera que el profesional podía optar por irse a casa o bien por recolocarse en los centros ordinarios que había o bien en el centro de referencia que crearon para aquel distrito. Al final no se cerraron todas las escuelas, quedaron dos, que todavía existen, y son las que tenían los alumnos con más problemática de trastorno mental. Pero el resto de alumnos está en escuelas ordinarias. ¿Qué había? Voluntad política.

Perdone que se lo haga repetir. ¿Realmente piensa que absolutamente todos pueden pasar en la escuela ordinaria?

La cuestión no es focalizarnos en el problema del alumno, sino ver qué hace la escuela para adaptarse a cada uno de sus alumnos. El problema nunca es el alumno, sino la transformación que tiene que hacer toda escuela para dar una respuesta educativa de calidad a este alumno. En Newham había alumnos con discapacidades muy graves -que aquí están en centros muy especializados- en escuelas ordinarias, porque allí había enfermeras y otros profesionales necesarios. Un alumno no es un problema, es una oportunidad que tú tienes de transformación.

¿Qué pasa cuando vuelve de conocer esta experiencia?

Pues que vuelvo y le digo a la escuela Xiprers que por qué no ponemos en su escuela los recursos de la escuela especial que tenemos para los cuatro alumnos que teníamos en compartida. Y dicen que vale. ¡Fue un proyecto fantástico! Y así seguimos con las escuelas Costa i Llobera, Vila Olímpica, Bellesguard… hasta que en el año 2012 se ve que a la Generalitat eso que hacíamos no les gustó y nos apartó. Tuvimos que ir a la justicia y el juez terminó dándonos la razón. ¡Funcionaba bien y estaba amparado por la LEC [Ley de Educación de Cataluña]! A partir de ahí estos apoyos los empezamos a hacer con un convenio experimental que aprobó el propio gobierno catalán y más adelante hicimos la concertación, cuando aún no se llamaba CEEPSIR.

Foto: Pol Rius

El síndic de Greuges ha recomendado el cierre de centros de educación especial hasta conseguir la reducción de un 70% de su alumnado. Esto ha alarmado un poco, pero entiendo que para usted todavía sería una medida tímida.

¡Por supuesto! Y también me lo parecían los planteamientos de la ministra Celáa, que por otro lado ha sido una gran ministra y en el País Vasco fue una gran consejera de Educación, y por eso allí la mayor parte de los alumnos con discapacidad están en la escuela ordinaria con los recursos adecuados y poniendo el porcentaje del PIB que toca. Pero las 84 páginas del informe del Síndic dicen muchas más cosas y se tienen que leer atentamente. Tiene que ser un orgullo para la escuela especial poder ayudar a transformar la ordinaria, y la normativa de los CEEPSIR es buenísima, porque te da todo el abanico que quieras para transformar la escuela ordinaria.

Cuénteme qué es un CEEPSIR de forma sintética.

Un CEEPSIR no son manos, no es una legión de monitores de apoyo, un CEEPSIR es conocimiento, que tienes que aprovechar no sólo para este niño, sino por toda la escuela. Y nosotros, con esta resolución podemos intervenir en toda la escuela, para ayudar a transformar. La idea básica de un CEEPSIR es crear una situación educativa que permita que aquel alumno tenga el máximo nivel de autonomía y mínima dependencia posible y, para eso, deberás tener en cuenta a los otros 24 alumnos que hay en el aula.

Un CEEPSIR no son manos, no es una legión de veladores, un CEEPSIR es conocimiento, que tienes que aprovechar no sólo para este niño, sino por toda la escuela

Con el Consorcio de Educación de Barcelona llevamos años trabajando la metodología del CEEPSIR. El Consorcio es el que debe asignar el CEEPSIR, a partir de las propuestas que hacen los EAP. Se cuantifica, se hace una graduación de más a menos necesidad, la comisión del Consorcio se reúne y asigna los seis CEEPSIR que hay en estos momentos en Barcelona.

¿No le parece que esto va muy lento? Toda su vida laboral la ha dedicado prácticamente a esto…

Y estoy muy contento, porque cientos de alumnos se han beneficiado, y no sólo ellos, sino también los miles que han podido estar con ellos y a los que ha impactado. Esta es la esencia de la escuela inclusiva, que no es una finalidad en sí misma, sino una palanca para transformar la realidad social y que todos tengamos un espacio.

De acuerdo, pero le preguntaba si las cosas no avanzan a paso de tortuga.

Lo que veo es que, desde el año 1984, que sería el momento en el que llega la integración en Cataluña, hemos ido oscilando. Y, paradójicamente, ahora que finalmente tienes todo el marco jurídico y legal correcto, ahora falta la voluntad. La voluntad política, la voluntad educativa y, evidentemente también, faltan las ganas de la escuela especial para entrar en este sistema. Esta es una parte del problema que no se debe olvidar. Una causa de esta lentitud es la actitud de la escuela especial, que muy a menudo está desobedeciendo la ley. Es decir, yo, escuela especial, no puedo coger q un alumno de 3, 4 y 5 años. Puedo aceptar alumnos a partir de unas edades y de unas características. Por lo tanto, si el alumno que me llega no tiene estas características, yo le tengo que decir al EAP que este alumno no puede venir a esta escuela porque es ilegal. Este alumno debe estar en la escuela ordinaria y yo, como escuela especial, te ayudaré. Envíame como CEEPSIR e iremos donde esté ese alumno. A los EAP, Josep Maria Jarque les llamaba los «guardagujas del sistema», esta descripción siempre me pareció magnífica.

El decreto catalán 150/2017 dice que en la escuela especial sólo deben estar los alumnos con discapacidad intelectual grave o muy grave.

Los documentos de acompañamiento hacían la previsión de que 2.400 alumnos con discapacidad intelectual leve y moderada tenían que pasar a la escuela ordinaria, y no sólo no lo han hecho, sino que ahora tenemos 1.000 alumnos más.

Algunas escuelas especiales a menudo desobedecen la ley porque cogen alumnos que no tienen que coger. Le tienen que decir al EAP que este alumno no puede venir aquí, que vaya a la ordinaria y yo le ayudaré

¿Ve menos voluntad política ahora que antes, o es que nunca ha habido mucha?

Recuerdo como buenas épocas la de Carme Laura Gil, que hizo el primer plan director, y la de Ernest Maragall. Y eran de colores políticos distintos. Y naturalmente también la época de Carme Ortoll y Mercè Esteve, directora y subdirectora general cuando se está elaborando el decreto de escuela inclusiva.

Cuando trabaja con escuelas ordinarias por primera vez, ¿cuáles serían los primeros consejos que da?

Es que depende de la escuela. Las hay en las que todo viene absolutamente rodado. Un factor importante es el maestro, otro es el equipo directivo, que se lo crean. La cultura de la escuela es un factor importante. Si ves que tienen muy claro que delante tienen alumnos y no diagnósticos, a partir de ahí todo sale adelante. Por eso les contamos que el CEEPSIR no somos manos, somos cabeza, somos un instrumento y nos tienen que utilizar y les ayudaremos a poner miradas diferentes, como intervenir en un problema de conducta, por ejemplo. Nos encontramos a menudo con la típica frase “con este niño no sabemos qué hacer”, y lo primero es entender que los problemas de comportamiento no surgen porque sí, no conozco a nadie que se comporte mal porque sí. Tiene que haber una causalidad y, sobre todo, una funcionalidad, y normalmente también hay un problema de comunicación. Si intentamos entender por qué hace lo que hace, muy a menudo llegaremos a la conclusión de que es porque no nos habíamos anticipado. Si tú trabajas con sistemas de anticipación y, sobre todo, de prevención verás cómo los problemas de comportamiento mejoran.

¿Pero el origen muy a menudo no es algún tipo de trastorno mental?

Algunos sí, y entonces es otra historia, pero la mayoría no. Un problema de comportamiento de un alumno con TEA habitualmente tiene que ver con que no te entienden. Si quieres que te entienda debes intentar ponerte en su nivel, intenta mirar cuál es su código de comunicación, y si tú le vas avanzando las cosas y le vas creando unos calendarios para que vea cómo será cada día, verás cómo la angustia y el estrés de ese alumno bajan, porque sabe lo que tiene que hacer, y se acaban los problemas de conducta. Otro problema es pensar que estás tú solo con 25 en el aula. No lo estás, plantéate trabajar más con tus compañeros. Para mí es muy importante que se redescubra el valor de trabajar juntos.

¿Se ha encontrado alguna vez que una escuela con un alumno como CEEPSIR les haya dicho que este alumno mejor que el curso siguiente pase al CEE?

Directamente no, indirectamente sí. Lo intuyes, por ejemplo, cuando algún profesional de EAP te comenta «escucha, de este alumno tendremos que hablar». ¿Qué debemos hacer? Detectarlo y empezar a darle la vuelta para que esto no ocurra. Este alumno no tiene ningún problema, al contrario, es un valor. También nos hemos encontrado con escuelas que nos llaman para decirnos que tienen barreras. ¿Qué barreras… dos escalones? En Xiprers había escaleras y en tres meses lo arreglaron con una silla. Esto son excusas.

Foto: Pol Rius

¿Las primeras escuelas con las que trabajó eran inclusivas por convencimiento y ahora hay demasiadas que lo son o lo hacen ver por obligación?

En los años 70, en Italia, fueron las escuelas ordinarias las que dijeron «estos niños deben estar con nosotros». Cuando nosotros empezamos con este grupo de escuelas que lo tenían clarísimo ¡transgredimos la ley! Con proyectos muy bonitos y muy cuidados. Y, efectivamente, lo hacíamos por convicción.

A eso me refería: ahora ya hay un derecho reconocido, pero parece que la convicción haya desaparecido.

Pues no sé qué debemos hacer… O sí lo sé: que se aplique la ley en la escuela especial. ¿Cómo puede haber escuelas que hayan creado unidades de educación infantil? Nosotros tenemos un convenio con el IMEB [el organismo del ayuntamiento de Barcelona del que dependen las escuelas 0-3 públicas], y este año tenemos asignados 24 alumnos de una veintena de escuelas infantiles municipales. Lo que hacemos es formar a los educadores de estas escuelas para que sean capaces de dar respuesta a estos alumnos. Y es una formación en la que los educadores gravan a los alumnos, y así todos vemos qué pasa, ponemos en común lo que sabemos y entre todos construimos. Mano de santo. Y estos alumnos terminan en un 90% en escuelas ordinarias. Por tanto, no hagas unidades de educación especial. Dota de recursos a la escuela donde está este alumno, y estos recursos no son tan humanos como formativos. Al final, el maestro no quiere teorías, quiere saber qué tiene que hacer con aquel chaval al que le pasa esto o aquello. Tenemos gente que hace muchos años que trabaja y sabe lo que se debe hacer, y tenemos un espacio donde nos encontramos cada quince días y compartimos conocimiento. Eso sí, a las 6 de la tarde.

El maestro no quiere teorías, quiere saber qué tiene que hacer con aquel chaval al que le pasa esto o aquello. Tenemos gente que lo sabe y tenemos un espacio donde nos encontramos cada quince días y compartimos conocimiento

Uno de los argumentos más repetidos es que no hay recursos para que la escuela sea inclusiva. ¿Está de acuerdo?

En el libro que tiene que salir cuento mi primera experiencia como maestro en un aula con 5 alumnos, de quienes lo desconocía todo. Una se autolesionaba y tiraba del cabello constantemente, otra tenía síndrome de Down pero no caminaba y sólo se arrastraba por el suelo, tenía otro que estaba todo el día moviéndose, se hacía caca y embadurnaba las paredes, otra tenía crisis epilépticas muy a menudo… ¿Qué hacía yo con ellos? Me busqué la vida. Y hacíamos salidas. La que caminaba empujaba la silla de la que no. ¿Qué quiero decir? Que al final lo más importante es ponerle ganas. Y más ahora, con el conocimiento que hay. Nosotros no teníamos internet, los materiales nos los hacíamos nosotros, aprovechábamos el trabajo que habían hecho a mano María Mullerat y Vicenta Verdú, buscábamos publicaciones en los mercadillos… Ahora en Internet lo tienes todo. ¿Faltan recursos? Sí, pero voluntad y actitud también. Está claro que el PIB del 3,6% no es lo que dice la LEC, pero hay que preguntarse qué puedo hacer con lo que tengo. En mi recorrido vital me ha ayudado mucho un autor austríaco que se llama Peter Drucker, y que siempre decía lo mismo: tú puedes estar en dos lugares, en el problema o en la solución. Elige.

¿Tampoco compra, por lo tanto, el argumento de la falta de formación?

En el siglo XXI tienes la formación que quieras. Cada día el Consorcio de Educación te envía una batería de formaciones que se hacen. Tienes la formación que quieras en técnicas para implementar una escuela inclusiva, de diseño universal del aprendizaje, de trabajo cooperativo… lo que quieras y más. Eso sí, debes querer formarte. ¿Tú crees que un médico cuando termina la carrera está formado? Tienen que formarse constantemente. Pues los maestros, también.

Carbonell y el entrevistador. Foto: Pol Rius

¿Qué miedos y preocupaciones detecta en los maestros?

Uno de los peores aliados que tienes es el miedo y la angustia del maestro. Y este miedo es lo que tienes que combatir, y normalmente es un miedo a que no harás lo suficiente por ese alumno. El miedo se combate haciendo ver al maestro que no está solo. Y de ahí también la importancia del plan individualizado, que es una herramienta muy importante. Con él ayudas al maestro a marcar objetivos, y le enseñas que con ese alumno no hay que marcar treinta objetivos, sino tres. Entonces el maestro se tranquiliza, y pierde el miedo al “no lo sabré hacer”. La gente quiere herramientas, no quiere discursos.

Este es uno de los miedos, pero también está el miedo a que te desmonte la clase.

Esto sería el alumnado que tiene comportamientos disruptivos. Aquí también entramos nosotros, damos herramientas y pautas y paulatinamente este comportamiento se minimiza. Pero esto son técnicas. Una de las premisas de nuestro proyecto educativo es el apoyo conductual positivo, es decir, entender el problema de comportamiento desde un prisma multifuncional. En un tema de comportamiento lo primero que tienes que descartar es que no haya un problema orgánico, porque una de las causas más habituales es que haya un sufrimiento físico. Por lo tanto, descarta primero que haya un problema orgánico.

¿Quiere decir que un malestar físico que el niño no sabe explicar es lo que causa los problemas de comportamiento?

Pasa a menudo. En segundo lugar, tienes que buscar todas las acciones preventivas posibles desde el entorno. Es decir, tú tienes que intervenir en el entorno. Tienes que mirar todos aquellos elementos del entorno que pueden posibilitar un problema de comportamiento. Y entonces tienes que dar herramientas y habilidades al alumno que le permitan que con lo que le enseñarás obtenga lo mismo que con la conducta problemática. El apoyo conductual positivo es una herramienta fantástica, para cualquier maestro, porque es preventiva.

Fuente e Imagen: https://eldiariodelaeducacion.com/2021/10/25/efren-carbonell-absolutamente-todos-los-alumnos-con-discapacidad-pueden-ir-a-una-escuela-ordinaria/

Comparte este contenido:

Perú: El SUTEP frente a la desesperación de los divisionistas

América del Sur/Perú/29-10-2021/Autor(a) y Fuente: sutep.org

Cuando surge un nuevo gobierno en el Perú, aparecen oportunistas de todo pelaje. No importan principios ni decencia política. Por eso, no extraña que ahora salte a la palestra un segundón que, amparado por el presidente de la república, vocifera que el SUTEP no cuenta con los requisitos exigidos para mantenerse como sindicato y, por lo tanto, él y su grupúsculo, exigen al Ministerio de Trabajo “una reunión para tratar este asunto”. (Expreso, 24/11/21, p. 7).

En casi 50 años de lucha, varios han sido los intentos por desaparecer al SUTEP. Nunca triunfaron.

Pedido sin sentido

Resulta hasta cómico que los dirigentes de la organización pro patronal, fundada por el mandatario de la república, quien funge de presidente y dirigente a la vez, hable de someter a revisión la vigencia y legalidad del histórico SUTEP, un sindicato con casi 50 años de lucha e intachable trayectoria, cuando ellos recibieron partida de nacimiento entre gallos y medianoche.

El país no olvida que a 24 horas de instalada la administración Castillo, el ministro Íber Maraví Olarte, opaco personaje de cuestionados vínculos, legalizó a la organización pro patronal, la misma que en dos ocasiones no alcanzó inscripción en el Registro de Organizaciones Sindicales del Sector Público – ROSSP, precisamente por no cumplir con los requisitos exigidos por la norma vigente: bases, representación y, por su carácter de federación, la confluencia de dos o más sindicatos de alcance nacional.

Pedro Castillo e Íber Maraví son los padres de la organización sin representatividad que hoy quiere la nulidad del SUTEP.

El vocero de las pretensiones divisionistas del magisterio ha dicho sin ambages que condicionan su apoyo a Pedro Castillo: “Nosotros vamos a seguir respaldando al presidente; pero en el momento que veamos que van postergando los anhelos –como es el cambio de la Constitución- nosotros ya tendremos que dejar ese respaldo”.

Fracasos anteriores

Horacio Zevallos y los maestros dirigentes del SUTEP, luego de recuperar su libertad tras la persecución de la dictadura militar.

No es ninguna novedad que segundones y lacayos gobiernistas pretendan desaparecer al SUTEP. Recordamos que el gobierno militar vociferó: ¡El SUTEP o la revolución! Creó su propio sindicato SERP y encarceló a los dirigentes en una prisión para criminales, la colonia penal “El Sepa”. Después persiguió y trasladó a los maestros que asumieron las huelgas heroicas del 78 y 79. Por ejemplo, los maestros luchadores del Colegio Guadalupe fueron trasladados a escuelas de Lima provincias por “convenir al servicio”.

El poder militar y sus sirvientes no pudieron derrotar a los maestros y al pueblo que los respaldaba en la lucha por la democracia y mejores condiciones de vida y trabajo para las grandes mayorías. Hoy el SUTEP se apresta a celebrar 50 años de existencia junto al pueblo.

El SUTEP y el pueblo

Nuestro sindicato siempre se ha caracterizado por luchar al lado del pueblo.

¿Por qué el SUTEP resistió y derrotó los intentos de desaparecerlo? El magisterio nacional consideró que la unidad y el vínculo con el movimiento popular organizado era vital para enfrentar al poder gubernamental de turno, asumiendo el principio de independencia política de clase. Los maestros rechazan los sindicatos pro patronales,como la impulsada por Castillo y sus aliados.

No olvidemos la práctica de tres valores esenciales en el movimiento sindical clasista: solidaridad, desprendimiento y, sobre todo, dignidad. Sobre los tres, el SUTEP puede dar testimonio, los divisionistas solo hablar desde la utopía.

Aquello de pedir la revisión de la vigencia del SUTEP al Ministerio de Trabajo no es más que una clara muestra de desesperación por parte de los divisionistas, pues no tienen afiliados porque el magisterio los rechaza por ser pro patronal. Ahora, pretenden acudir a leguleyadas sin sentido, tratando de ejercer presión política con el silencio cómplice de quien debe actuar como presidente de todos los peruanos y no como patrocinador de su feudo sindical. ¡Los divisionistas, no pasarán!

Fuente e Imagen: https://sutep.org/articulos/el-sutep-frente-a-la-desesperacion-de-los-divisionistas/

Comparte este contenido:
Page 59 of 471
1 57 58 59 60 61 471