www.amnesty.org/03-08-2016/Informe
La defensora iraní de los derechos humanos Narges Mohammadi, presa de conciencia, puso fin a su huelga de hambre el 16 de julio, al cabo de 20 días, cuando se le permitió hablar por teléfono con sus hijos durante 30 minutos. El fiscal asociado le ha entregado un documento por el que se compromete a permitirle llamar a sus hijos una vez a la semana.
Estaba en huelga de hambre desde el 27 de junio como protesta por la negativa de las autoridades a permitirle hablar con sus hijos. Los gemelos se fueron a vivir con su padre al extranjero el 17 de julio de 2015, pues no había nadie que pudiera cuidar de ellos en Irán tras la detención de su madre.
Narges Mohammadi padece varios problemas graves de salud, entre ellos un trastorno neurológico, y necesita medicación diaria, así como atención médica especializada constante, que no pueden prestarle en la prisión. Su estado físico empeoró aún más durante la huelga de hambre. El 9 de julio la sacaron de la prisión de Evin para llevarla a un centro médico de Teherán, porque sufría palpitaciones y una bajada de tensión.
- Descargue el informe completo en el siguiente link: MDE1345782016SPANISH