Estados Unidos/Abril de 2017/Autor: Ricardo Sanchez Silva/Fuente: El Tiempo Latino
La concentración estaba pautada a la 1:00pm frente a la Casa Blanca, para realizar una protesta contra las políticas de deportación masivas del Presidente Trump. A diferencia de cualquier otra manifestación, esta sería llevada a cabo por lo más pequeños afectados: los niños.
Un grupo de padres y activistas empezaba a organizarse para la actividad, mientras que un peculiar trovador preparaba su micrófono y guitarra para entonar cantos infantiles de protesta y ayudar a que llegaran al interior de la Casa Blanca las voces de más de cien niños, hijos de inmigrantes indocumentados, que vinieron a Washington DC, para entregar un mensaje a Trump. Media hora más tarde, comenzaron los cantos. El grupo de infantes se sentó en una gran lona circular en la que se leía el lema de la campaña “We Belong Together”, que agrupa a diversas organizaciones de apoyo a inmigrantes en los EE.UU., dirigida por la Alianza Nacional de Trabajadores Domésticos.
La caravana de autobuses inició su recorrido en Miami, para luego hacer escala en Atlanta y Carolina del Norte, donde se sumaron más activistas a la causa. Una vez en el lugar de destino, también llegaron manifestantes de New York, New Jersey, Maryland y Virginia.
“El mensaje es que podemos ser fuertes y pelear por nuestras familias, porque yo creo que soy la voz de nuestros niños. Las deportaciones tienen que parar. No quiero ver niños que estén tristes porque su familia se tiene que ir. No quiero que mi mamá se vaya”, dijo Leah, quien prefirió reservarse su apellido por seguridad, ya que su mamá tiene orden de deportación y se encuentra refugiada en una iglesia de Miami. Con una frase contundente, la infante de padres nicaragüenses dejó claro su objetivo. “Yo tengo temor, pero estoy dispuesta a luchar”.
Al borde del círculo que se formó para levantar las voces y “permanecer juntos”, los pequeños activistas tuvieron la oportunidad de presentar sus discursos al son de consignas que llamaban a la unión y reforzaban el sentido de pertenencia hacia la tierra estadounidense.
Sheila Arias forma parte de “Mamás con Poder”, una de las organizaciones que participa en el evento y cree que la noble causa justifica la participación de los niños, pues están conscientes de la gravedad del problema. “Los niños que han sido afectados saben lo que es el estrés, que pueden regresar de la escuela y no ver a sus padres. Los estamos ocupando de forma positiva, usando sus voces. La manera correcta es que expresen sus sentimientos y opinión. Los niños son el futuro”.
Además de las consignas, la protesta se tornó en un espacio para que los niños expresaran su sentir de diferentes formas, con cantos y bailes. Tal fue el caso de dos hermanos que llegaron con trajes típicos de Bolivia, el país de origen de sus padres, quienes son inmigrantes indocumentados y actualmente residen en Virginia.
Hixander Salvatierra, uno de los bailarines de 8 años, está claro en que su presencia en el evento, tuvo un objetivo: alzar la voz por los derechos de los suyos. “Estoy aquí para defender a mi padre y madre para que no los deporten. Quiero decirle a Trump que pare las deportaciones”.
“La gente que siempre se alza deja la semillita plantada en las siguientes generaciones. Nosotros ya llevamos cuatro años aquí en el activismo y siempre se logra un cambio”, dice Madai Ledezma, oriunda de México, acompañada por su hija, Heather, quien afirma que no le teme a Trump. Ambas luchan de la mano de la organización de apoyo a inmigrantes, CASA.
El evento finalizó con una foto grupal frente a la Casa Blanca y la promesa de que vendrán más acciones de calle contra las políticas de deportación del gobierno de USA.
Fuente: http://eltiempolatino.com/news/2017/apr/21/ninos-activistas-defendieron-los-derechos-de-sus-p/