Michiko Amano. Cuando estoy triste, abro un libro y se alegra el mundo

61a5155941adc033f76fa2c898e5eaf5Hoy, cuando son cada vez menos los niños, niñas y jóvenes que se apasionan por la lectura, encuentro una esperanza en mi camino llamada Michiko Amano Mora, una joven extrovertida de 13 años de edad que estudia 8vo grado en el Instituto Escuela Maracay y que promueve entre sus amigas la lectura de diferentes libros.

Michiko, inició su hábito de la lectura desde muy temprana edad, con libros como “El Principito”, “Teresa, en sus diversas versiones”, “El Buho que no podía ulular”… posterior a esos, los libros más dirigidos a adolescentes como: “La saga de los juegos del hambre”, “la del Hobit”, “la de Divergente”, “Ciudades de Papel” y otras más.

Nos menciona que un día se dijo, “si leo lo que todo el mundo lee, entonces pensaré lo que todos los demás piensan”, después que había leído algo de Haruki Murakami. Entonces, desde ese momento decidí viajar en una lectura diferente a la que mis amigos leen. Por ello, me enamoré de Gabriel García Márquez (Gabo) y ya creo que me he leído todos sus libro, pero el que me atrapó fue “El Coronel No Tiene que le Escriba”, ya que, “el libro demuestra como la esperanza es la base del desarrollo. El coronel es más que un personaje, es un alma delirante que con sus personajes, logra que esta historia contenga esa gama de colores de la vida. La esperanza en su representación más sólida, es sin duda alguna, la del gallo, debido a que es donde existe una conexión en lo que es el pasado y el futuro del coronel… esta novela fue un viaje increíble para mí”, en esta orientación, se leyó “Doña Bárbara”, “Cien años de soledad”, “La Ilíada” y muchas más.

Otro día, buscando algo más que leer, me regalaron un libro que se llama “El Mundo de Sofía”, me fascino ese libro porque me enseño el mundo de la filosofía con cierta amenidad para mi edad por la narración donde la joven fue conociendo su propia identidad mientras desvela la capacidad humana de hacer preguntas sobre todo lo que está a su alrededor.

Una vez leí algo de Eduardo Galeano que me gustaría compartir, hasta lo tengo en mi Instagram y dice “Los científicos dicen que estamos hechos de átomos, pero a mí un pajarito me contó que estamos hechos de historias” y esto es muy cierto, solo hablamos de lo vivido.

“Mi sueño es tener una biblioteca gigante, como esas de película, donde tenga libros desde el techo hasta el piso y me tenga que montar en esas escaleras de madera rodantes para agarrar algún libro”, amo los libros.

Michiko, ¿La escuela fue quien propició que leyeras cómo lees hoy?, “me gustaría que fuese la escuela, pero más bien en la escuela solo memorizamos, repetimos lo que están en los libros de las materias, son pocos los profesores que nos hacen pensar, hacer análisis y esas cosas. Es un fastidio tener que aprender al caletre cada palabra de un libro para presentar un examen”. Quienes hicieron que me empezaran a gustar los libros fue mi tía Yumie y una señora que iba a la tienda, ellas me regalaban los libros y mi curiosidad por saber que contenía cada uno de ellos.

La historia de Michiko nos trae a la reflexión del papel de la escuela para la promoción de la lectura y para potenciar en los y las estudiantes el aprender a pensar, es por esa razón, debemos de re-pensar nuestro hacer docente en las escuelas y universidades, ¿Qué estamos haciendo para impulsar otras significaciones en cada uno de nuestros(as) estudiantes?, ¿Qué lectura promovemos para la re-creación?, ¿Es más importante que nuestros(as) estudiantes se aprendan literalmente lo que dicen los libros o es más importantes que ellos(as) comprendan los temas socializados?, sin fin son muchas las interrogantes que debemos hacernos para re-pensar nuestro quehacer pedagógico.

Hagamos la escuela incluyente, divertida e interesante, donde todos y todas se sientan dibujados(as) en cada una de sus partes.

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Maria Magdalena Sarraute

Doctorado en Ciencias de la Educación, Magíster en Desarrollo Curricular, Licenciada en Relaciones Industriales.Diseñadora y evaluadora curricular. Docente – Investigadora Educativa del CIM y reconocida por el PEII en la Categoría B, Coordinadora General del CNIE, Integrante de la SVEC e Integrante Fundadora de la Red Global/Glocal por la Calidad Educativa.