Estados Unidos/13 de Marzo de 2017/Al Día Dallas
La mayoría de los problemas en el DISD se debe a falta de personal, barreras del idioma y procesos poco claros, dice estudio.
Los niños hispanos del DISD batallan para recibir los servicios de educación especial que necesitan debido a las barreras del idioma y a otros problemas de comunicación, indica el resumen de una evaluación externa difundido el viernes.
Pero los consultores no encontraron indicios de que el distrito estuviera excluyendo a propósito a ningún niño de la educación especial, según el superintendente adjunto Iván Durán.
El DISD ordenó el estudio en vista de los señalamientos que se han hecho sobre los servicios de educación especial en Texas.
Las autoridades federales están investigando al estado luego de que algunos estudios parecían indicar que un supuesto tope de matriculación estaba haciendo a las escuelas negar servicios a los alumnos.
En el DISD la mayoría de los problemas se deriva de falta de personal, barreras del idioma y un proceso poco claro, de acuerdo al estudio.
Los padres dicen que no siempre se les daba una traducción adecuada para entender las necesidades de sus hijos y para poder pedir los servicios; y en algunos casos, las familias pensaban que tenían que escoger entre inglés como segundo idioma (ESL) y servicios de educación especial porque no se les aclaró que sus niños tenían derecho a ambos.
Mientras que el 13% de los alumnos de todo el país están inscritos en educación especial, Texas se impuso una meta de matriculación de 8.5%.
Se dijo que la intención era evitar que se catalogara a cualquier niño como acreedor a esos servicios.
A lo largo de la historia, los niños minoritarios, especialmente los afroamericanos, han sido colocados incorrectamente en educación especial, donde no siempre se pedía cuentas a los responsables de su educación.
Dallas ha tenido uno de los índices de matriculación en educación especial más bajos del estado en los últimos años.
Actualmente el 7.9% de los alumnos están clasificados como en necesidad de educación especial, del 7% en 2014.
Si el DISD aumentara ese nivel al 10%, se atendería a 3,511 estudiantes más, señala el estudio.
Los niños afroamericanos del distrito continúan estando sobrerepresentados en el área de educación especial.
A pesar de que constituyen el 22.5% del alumnado del DISD, los niños afroamericanos conforman el 31.7% de los alumnos en educación especial.
Por el contrario, los niños hispanos han estado subrepresentados, ya que aunque conforman el 70% del distrito escolar, representan solo el 60% de la matrícula de educación especial.
El estudio encontró algunos avances en esos dos segmentos.
El DISD ha ido reduciendo la sobrerepresentación de los niños afroamericanos en educación especial y la subrepresentación de los niños hispanos desde 2010.
El estudio concluye que el 44% del estudiantado tiene un manejo limitado del inglés, pero que estos alumnos ocupan solo el 35% de la matrícula en educación especial, una discrepancia de representación que no ha hecho más que crecer en años recientes.
Para cerrar totalmente esas brechas, el distrito tiene que hacer una mejor detección de niños que necesitan esos servicios y corregir el proceso para que pasen por el sistema más rápido, agregó Durán.
“Primero que nada tenemos que procurar que todo el personal sepa cómo son referidos los alumnos a educación especial, y aclarar el proceso para que todo mundo sepa”, dijo Durán.
“Y una vez que los niños eran puestos en la fila, por así decirlo, a veces tardaban mucho en recibir lo que necesitaban”.
Una de las recomendaciones es contratar más personal para ayudar a los alumnos, e incluso un encargado de servicios de educación especial bilingüe.
Los consultores entrevistaron a padres, maestros, directores y a otros integrantes del personal docente para elaborar su evaluación; pero no entrevistaron a personas que ya no forman parte del equipo, dijo Durán.
En diciembre, dos exempleados del DISD dijeron a funcionarios federales que hacían un recorrido por el área que vieron de primera mano cómo el distrito complicaba intencionalmente a las familias el acceso a la educación especial.
Uno –un psicólogo que habla español– dijo que le pidieron dejar de gestionar con demasiada insistencia la incorporación de alumnos.
Eventualmente lo dejaron fuera de las juntas, y los padres quedaron solos y sin poder entender lo que estaba pasando.
El otro –un exadministrador– dijo que el estado parecía más interesado en verse bien ante el estado que en brindar servicios.
Durán dijo que nada en el informe indica que el personal estuviera tratando intencionalmente de excluir a los niños de la educación especial, pero reconoció que había muchos malentendidos sobre el proceso.
Agregó que el distrito quiere seguir investigando dónde se están dando fallas.
“Tenemos que depurar nuestro mecanismo de referencia y asegurarnos de que de veras estamos atendiendo individualmente a los alumnos y sus necesidades”, dijo Durán.
Hasta el viernes en la tarde ni el presidente de la mesa directiva Dan Micciche ni el vocal Miguel Solís habían visto el informe. Los vocales recibirán una exposición del estudio el jueves.
Micciche dijo que todos los niños, contando a los que reciben educación especial, merecen recibir una educación de calidad.
“El distrito tiene que hacer todo lo posible por garantizar que los niños en educación especial reciban una educación excelente y que se asignen los recursos apropiados para lograr ese objetivo”, dijo.
Solís dijo que no le sorprendería saber de la subrepresentación de los niños que están aprendiendo inglés.
“En términos generales, los alumnos que no dominan el inglés son un grupo tan diverso y dinámico que, en muchos casos, es difícil localizar los factores subyacentes que los están retrasando, porque ya de por sí es difícil ayudarlos a aprender inglés”, dijo Solís.
Fuente: http://www.aldiadallas.com/2017/03/07/excluyen-a-ninos-que-requieren-educacion-especial-debido-al-idioma-dice-reporte/