Por: Alexandra Mendoza.
Un antiguo autobús escolar recorre diferentes albergues para inmigrantes en Tijuana para llevar educación a niños que llegaron con sus padres a la frontera en búsqueda de asilo político.
Se trata de una iniciativa de la organización Ángeles de la Frontera en conjunto con Schoolbox Project, agrupación que anteriormente ha realizado esta actividad en diferentes ciudades que albergan a niños refugiados.
La primera parada de esta escuela rodante fue este jueves en el albergue Misión Evangélica Roca de Salvación, ubicado en las faldas del Cerro Colorado de Tijuana.
El grupo conformado de tres voluntarias llegó con regalos para los menores, desde ropa y juguetes hasta artículos higiénicos. Por los próximos tres meses, estos niños provenientes de otros estados de México y de Centroamérica recibirán clases de educación física, artes, matemáticas básicas, lectura y redacción.
“Tijuana tiene un flujo constante y muy grande de población migrante, connacional y extranjera, y no podemos ponernos una venda en los ojos ante la problemática que está sucediendo aquí”, explicó Andrea Rincón, coordinadora del programa para Ángeles de la Frontera.
Los niños reciben este apoyo con los brazos abiertos, pues lamentablemente, son muchos los ratos de ocio.
“Es entendible que no puedan ir a la escuela. No saben si se van a quedar, si se van a regresar o si van a tener el asilo”, añadió Rincón.
El hijo de Doris Martínez debería estar cursando el tercer grado de primaria, pero las amenazas de organizaciones criminales los obligó a dejar su natal El Salvador para solicitar asilo en Estados Unidos.
Martínez y su pequeño de nueve años, se presentaron ante las autoridades estadounidenses en abril pasado pero tuvieron que regresar a México para esperar su fecha en una corte de inmigración, como parte del programa conocido como Remain in Mexico (MPP).
Desde entonces, han esperado en el albergue Roca de Salvación en Tijuana. La mujer agradeció el apoyo de las organizaciones detrás de esta iniciativa, pues le inquietaba que su hijo no fuera a la escuela.
“Me alegré mucho”, confesó.
“Estos niños empiezan a formarse y a interactuar con otros niños, muchas actividades que tal vez ellos hacían en la escuela y habían dejado de hacerlo”, agregó.
La próxima semana, Martínez tendrá su tercera audiencia frente a un juez de inmigración en Estados Unidos, y salvadoreña no pierde la esperanza de que la dejarán continuar su proceso al lado de su hermana, quien los espera en Los Ángeles, California.
Su mayor deseo es que su hijo retome la escuela y poco a poco, regrese a una vida normal.
El camioncito recorrerá también los albergues Juventud 2000 y Embajadores de Jesús, y en total, se estima que brindarán servicio a unos 150 niños a la semana.
Salvador Zepeda, director del albergue Roca de Salvación enalteció que este proyecto permitirá que los menores no pierdan lo que les fue arrebatado por los problemas sociales que aquejan a sus países de origen.
En este refugio se encuentran 42 niños de entre 2 y 18 años. Algunos han esperado en el sitio por casi cuatro meses.
Sin embargo, este camioncito que es llamativo por sus colores y a su interior, se asemeja a una escuelita por sus sillas y escritorios, les ha dado un motivo para sonreír y compartir con otros menores que están pasando por la misma situación.
“De eso se trata, de que eso que se ha perdido, lo vuelvan a encontrar”, concluyó Zepeda.
Fuente de la reseña: https://www.sandiegouniontribune.com/en-espanol/primera-plana/articulo/2019-08-02/este-camioncito-lleva-educacion-a-tres-albergues-de-inmigrantes-en-tijuana