Redacción: El Día
Las escuelas infantiles recibirán hasta 30 alumnos divididos en grupos por edades y durante un máximo de seis horas | Las mochilas serán sustituidas por bolsas de tela.
Los educadores y alumnos de las escuelas infantiles no podrán acceder a los centros con zapatos de calle y tendrán que utilizar calcetines antideslizantes. Esta es una de las medidas que se tendrán que cumplir a partir del lunes, cuando está previsto que reabran seis de las 13 escuelas infantiles dependientes del Gobierno de Canarias, con un máximo de 30 alumnos por centro. La Consejería de Derechos Sociales ha establecido un protocolo ante la reapertura escalonada de las guarderías que tiene como objetivo «facilitar la toma de decisiones sobre las medidas preventivas a implementar en este importante ciclo educativo».
De este modo, el documento establecido para las escuelas que reabrirán el lunes -cuatro de ellas se encuentran en Tenerife- indica que «los zapatos se dejarán en un lugar habilitado fuera de las instalaciones del centro o serán las familias quienes deberán hacerse cargo de los mismos». El protocolo indica que «esta medida es especialmente importante en este nivel educativo de 0 a 3 años, cuando -los niños- todavía se desplazan mucho por el suelo».
Los menores volverán a las escuelas en grupos de cinco para los pequeños de hasta un año; en grupos de diez para niños de entre 1 y 2 años; y de hasta 15 alumnos para los niños de 2 a 3 años. Solo habrá un turno de menores por grupo y las jornadas serán de un máximo de seis horas al día. Además, se establecerán turnos de entrada y salida por diferentes accesos para evitar aglomeraciones.
La recogida de los alumnos no podrá realizarse por parte de los abuelos y, aunque cada centro valorará cómo se realiza la recogida y entrega de los menores, lo habitual será que solo los educadores accedan a las escuelas para crear así grupos estancos ya que el documento indica que «se debe evitar el tránsito de personas ajenas a la actividad docente por el centro y en el patio».
Los niños tendrán que ir a la escuela después de haberse tomado la temperatura en casa, y las familias deberán llevar una bolsa desechable o lavable con mudas de ropa, zapatos deportivos, pañales e instrumentos para el consumo de líquidos. Y es que la entrada con mochilas no estará permitida en esta primera fase.
El protocolo para la reapertura escalonada de estos espacios contempla que los menores deberán mantener una distancia de dos metros entre ellos y las escuelas tendrán que fomentar las actividades al aire libre. Así, el protocolo indica que es recomendable establecer «turnos con el fin de que el patio exterior esté ocupado por algún grupo durante las seis horas que dura la jornada».
Limpieza de los centros
En cuanto a la limpieza de los centros, este documento de la Consejería de Derechos Sociales establece que los aseos deberán limpiarse «en función de la intensidad de uso y, al menos, tres veces al día». Además, los juguetes que pertenezcan a la escuela se tendrán que limpiar dos veces al día y no se podrán compartir. Los menores no podrán traer otros muñecos desde sus casas y los equipos de las escuelas tendrán que evitar el uso de parques infantiles. Por todo ello, el documento busca que se fomenten alternativas de juego libre y deporte que posibiliten las medidas de distanciamiento y que necesiten los mínimos elementos compartidos.
Las escuelas infantiles dependientes del Gobierno de Canarias cuentan con una capacidad para 978 niños de entre 0 y 3 años. En la primera fase de reapertura que comenzará el lunes y se prolongará hasta el 18 de junio se pondrán en marcha el EI Añaza, EI Anaga, EI Aguamansa y EI Niño Jesús, en Tenerife; y el EI La Fuente y EI Aridamán, en Gran Canaria.
Fuente: https://www.eldia.es/sociedad/2020/06/06/educadores-alumnos-tendran-descalzos-abran/1084489.html