Redacción: Prensa Latina
El dispositivo que comenzará la semana próxima busca evitar los despidos masivos en empresas que verán reducida su actividad, y consiste en la entrega del 84 por ciento del salario a los trabajadores y el reembolso del 80 a las entidades.
Las condiciones para este beneficio serán que las horas de desempleo no excedan un 40 por ciento para cada asalariado y la existencia de un convenio colectivo mayoritario.
De acuerdo con estimados oficiales, el desempleo superaría en Francia un 10 por ciento de su fuerza laboral al terminar el año, al menos dos puntos por encima del comportamiento del indicador en 2019.
Por otra parte, el mecanismo de desempleo parcial utilizado durante la cuarentena, al cual se acogieron más de 13 millones de trabajadores del sector privado, tendrá desde el 1 de octubre otro tratamiento, consistente en el pago del 72 por ciento del salario neto y una compensación del 60 a las empresas, por un período inicial de tres meses, prorrogable una sola vez por otros tres.
En la actualidad, los beneficiados en una entidad afectada por la Covid-19 reciben el 84 por ciento de los ingresos netos.
Aunque en la agenda del mandatario estaban otros temas que generan mucha expectativa, como el seguro de los parados, la formación profesional y el acceso a puestos de trabajo por los jóvenes, la prioridad se centró en el empleo parcial, a partir del complejo panorama imperante.
Según medios de prensa, los sectores de la aeronáutica y el automotor fueron los modelos tomados, los cuales intentan volver a funcionar en un entorno desafiante.