Por: Educación 3.0
Fortalece el vínculo entre adultos y menores o desarrolla la inteligencia emocional. Estos son algunos de los beneficios del hábito lector entre los niños según Mercedes Bermejo, psicóloga y directora de la colección ‘Senticuentos’ y ‘Crecicuentos’ en la editorial Sentir.
El instinto de leer no nos viene dado por naturaleza, como pueden ser el de comer o dormir. Por ello, cualquier tipo de aprendizaje en la infancia va a venir influenciado por la actitud de la familia, especialmente en la lectura, donde el modelaje es fundamental, es decir, los niños imitan a sus padres.
Los psicólogos infantiles recomendamos desde el primer año de vida poner en contacto a los más pequeños con la fantasía, las historias, ilustraciones, y como no, con los cuentos.
Los beneficios de la lectura entre los pequeños
La lectura aporta diferentes beneficios que, por ejemplo, nunca proporcionará la tecnología. Son los siguientes:
- Fortalece el vínculo entre adultos y menores. Los primeros siete años del niño la lectura debe ser acompañada. De este modo, el menor cuenta con el apoyo, compañía y afecto de los adultos para afianzar este hábito.
- Mejora el rendimiento intelectual del pequeño. En aspectos como la memoria, la imaginación, el lenguaje, el razonamiento abstracto…
- Desarrolla la inteligencia emocional. Con ella se fomenta la capacidad de empatizar con otros, así como la autoconciencia, la motivación y la capacidad de autorregulación.
- Promueve la autoestima y su autoconcepto. A través de los cuentos, el niño imagina diversas situaciones donde desarrolla su autoconocimiento.
- Amplía el conocimiento del niño. Tanto del mundo que le rodea como de su mundo interior. El menor imagina los futuros posibles y entrena para la vida, pero desde lo simbólico.
- Familiariza al menor con la lectura, de cara al futuro.
Elementos esenciales de la literatura infantil
Es importante que el cuento esté adaptado a la etapa evolutiva del pequeño, que sea atractivo, interactivo y promueva el desarrollo intelectual y emocional del menor. Muchos son los estudios centrados en la revisión de la literatura infantil, de los que destaco algunas conclusiones:
- La gran mayoría de autores de cuentos publicados no pertenecen al ámbito de la psicología y la pedagogía. Cabe destacar que la formación académica y profesional del autor es un requisito muy favorable para diseñar y desarrollar cuentos que cumplan una función pedagógica, más allá del simple entretenimiento.
- En muchos cuentos, no se tiene en cuenta la etapa evolutiva de los niños. Este es un aspecto esencial para que el niño interiorice lo tratado en el relato. Elementos que garanticen al pequeño disponer del tiempo necesario para trabajar de forma dinámica, animada e interactiva; hecho que puede originar reflexiones a las que el niño no podría llegar a través de la simple escucha o lectura del cuento.
- Ausencia de guías pedagógicas. Otra cosa que falta en la mayoría de los libros infantiles son las guías pedagógicas las cuales permiten orientar a familias o tutores a abordar el tema que su hijo necesita trabajar o considerar con una orientación más pedagógica.
Función de los cuentos
Los cuentos tienen una doble función: para el disfrute de la literatura, pero también como instrumento de intervención terapéutica. Por ello, recomiendo publicaciones adaptadas a las diferentes etapas de desarrollo emocional e intelectual donde a través de las historias el lector es protagonista, junto a un personaje, de los relatos en los que se explican diversas situaciones. Esto permite a los más pequeños comprender e, incluso, prevenir diferentes cuestiones que pueden surgir en su día a día.
En definitiva, resulta esencial transmitir el entusiasmo hacia la lectura, ofreciendo libros de calidad. Esto permitirá al menor dejar volar su imaginación y acompañar a los personajes a través de multitud de aventuras.
Fuente e Imagen: https://www.educaciontrespuntocero.com/opinion/beneficios-de-la-lectura/