Page 415 of 428
1 413 414 415 416 417 428

Entrevista: La calidad educativa pasa por mejorar continuamente las competencias del profesorado

Entrevista a Federico Malpica,
Doctor en Ciencias de la Educación, fundador y director del Instituto Escalae para la Calidad de la Enseñanza-Aprendizaje.

¿Qué necesidades formativas tiene el profesorado? (metodologías innovadoras, competencias básicas, gestión y organización…)

Eso depende mucho de cada colega, pero en general, la mayoría de los que damos clase tenemos una muy clara visión de lo que es una clase magistral, trasmisivo-verbal, pues la hemos vivido muchísimas veces (ya que a muchos nos enseñaron así desde que éramos pequeños), en cambio, no tenemos tan claro cómo desarrollar clases activas, donde el alumno esté en el centro y sea el protagonista y nosotros como docentes tengamos un rol de facilitadores en su propio aprendizaje. Por tanto, nos cuesta hacer una buena observación de nuestros alumnos y alumnas para ofrecerle a cada quien el apoyo que necesita, evaluar el desarrollo de sus competencias en el tiempo que los tenemos en el aula y hacer todo esto sin que se nos desmonte la clase. La teoría de todo esto puede que la sepamos, pero en muchos casos nos faltan modelos para traducirlo a nuestra clase y, sobre todo, práctica suficiente para incorporarlo en nuestra actividad docente.

¿Cuáles son los principales retos de la formación continua del profesorado?

Básicamente la formación continua del profesorado no está funcionando. Es muy difícil que un docente se atreva a desarrollar nuevas formas de trabajo en el aula simplemente por asistir a un cursillo, taller, seminario o atender un curso online. Y es que las personas no aprendemos así. Quiero decir, que si quisiéramos aprender a bailar tango, tampoco nos bastaría con este tipo de actividades formativas. Necesitaríamos ver buenos modelos del baile, con pasos graduados de lo más simple a lo más complejo y sobre todo, necesitaríamos practicar en la pista de baile con alguien que nos ayudara en los pasos, pensar en lo que hacemos mientras bailamos hasta que poco a poco nos fuera saliendo de forma natural.

Lo digo porque lo mismo pasa en la formación docente. El reto está en que la formación se base en la observación de modelos prácticos y después contar con el suficiente tiempo, apoyo y recursos para practicar en nuestra clase, con alguien que nos ofrezca retroalimentación al dar los primeros pasos. El reto es ir dejando formaciones generalistas y descontextualizadas, para centrarnos en aprendizajes más situados, modelos donde seamos capaces de aprender unos de otros en nuestra propia institución educativa y con otros colegas de profesión.

¿Cómo se evalúan las competencias profesionales de los docentes?

Como cualquier otra competencia, se deben evaluar en la práctica, a partir de una serie de descriptores muy claros acerca de cómo debe enseñarse, que deben ser conocidos y aceptados por los propios docentes. Estos descriptores no pueden ser arbitrarios, sino que deberían estar basados en prácticas efectivas en función del aprendizaje que se quiera conseguir en los alumnos y alumnas.

¿Considera que es necesario mejorar los sistemas de evaluación del profesorado durante el ejercicio de su profesión?

No podemos pretender desarrollar profesionales estratégicos si el conjunto de evaluaciones que se realizan son sólo de resultados de aprendizaje de los alumnos o el conjunto de encuestas de satisfacción. El problema de este tipo de pruebas es que no indican por qué se obtienen estos resultados, ni señala aquello imprescindible para mejorarlos, por tanto, no deja de ser una evaluación sancionadora, muy poco práctica para mejorar la práctica profesional. Los sistemas de evaluación del desempeño deberían estar relacionados con la idea de dar soporte y apoyo al profesorado para mejorar de forma continua su práctica, con indicadores precisos sobre la forma de enseñar y deberían ampliarse las fuentes de información para obtener datos sobre aquello que realmente ocurre en las aulas. Una fuente puede ser el autodiagnóstico periódico del propio profesional y otra puede ser un sistema de revisión y observaciones entre los propios colegas.

¿Qué repercusión tiene la formación continua del profesorado en la calidad de la enseñanza?

Está claro que la calidad de una institución educativa (como de un sistema educativo) no llega más allá de la capacidad de sus docentes para desarrollar prácticas educativas adecuadas. Por tanto, la calidad educativa pasa por mejorar continuamente las competencias del profesorado. Hay muchos datos al respecto, por ejemplo, en un estudio reciente con escuelas secundarias, se encontró que el tener una clase con un profesor efectivo tenía un impacto 14 veces mayor de tener una clase con cinco estudiantes menos. En otro estudio se verificó que la diferencia entre el rendimiento de un estudiante asignado a un docente de primer cuartil (en su desempeño docente) promedió 10 puntos porcentuales más que cuando se asignó a un profesor de último cuartil, en pruebas estandarizadas.

Por tanto, podemos afirmar que la mejor inversión en calidad es invertir en el desarrollo de los docentes.

TeachersPro es una plataforma de aprendizaje que tiene como objetivo desarrollar las habilidades docentes, compartir experiencias y transferir los aprendizajes a la práctica profesional. ¿Qué ventajas supone para el docente respecto a otras plataformas de formación continua?

Básicamente, TeachersPro permite hacer una transferencia entre la teoría y la práctica profesional. Hemos cuidado mucho en el diseño de esta herramienta que los docentes encuentren todas las posibilidades para llevar a su práctica real de aula el aprendizaje realizado en la Plataforma. Esto se logra con un modelo que invita a desarrollar prácticas concretas y compartirlas como evidencias de buenas prácticas con otros colegas alrededor del mundo.

Una de las principales innovaciones del proyecto es el uso de la gamificación y una estructura basada en desafíos. ¿Cómo funciona?

Los usuarios tienen la posibilidad de ver reconocido su esfuerzo mediante un exclusivo sistema de insignias con base en 16 competencias y más de 100 habilidades para la docencia. La manera de enfocar la Plataforma es a partir de Desafíos de aprendizaje docente. Así, el usuario debe elegir entre diferentes desafíos de las metodologías más innovadoras actualmente (trabajo por proyectos, aprendizaje basado en problemas, habilidades del pensamiento, aprendizaje cooperativo, inteligencias múltiples, evaluación por competencias, etc.). Cada Desafío activa unas competencias concretas y un conjunto de habilidades que el usuario deberá desarrollar poco a poco y ganando insignias conforme se desarrolla profesionalmente.

Además, los usuarios pueden ganar puntos de Reputación en función de la actividad que desarrollen en la plataforma y las oportunidades de aprendizaje que vayan aprovechando (revisión de evidencias de otros, habilidades conseguidas, conversaciones mantenidas con otros colegas, etc.).

¿Qué importancia tiene la personalización del itinerario de aprendizaje en el proyecto?

Es muy importante porque la mayoría de formación docente no se adapta a las necesidades de cada profesional. Son cursos o programas generales. En cambio, en TeachersPro, una vez elegido el Desafío, el docente pasa por un test que permite a la herramienta aprender sobre sus necesidades específicas y presentarle un itinerario formativo a medida, además de algunos datos sobre sus competencias profesionales actuales. Este proceso de reflexión inicial permite un aprendizaje más eficaz y una mejor experiencia en el usuario.

¿Cómo se certifican las competencias docentes adquiridas en TeachersPro?

En TeachersPro los usuarios pueden obtener insignias de cada habilidad que desarrollan, en función del Desafío elegido. Para ello, sus evidencias de buenas prácticas pasan por la evaluación de otros usuarios en un proceso de peer-review o revisión entre iguales, como se hace con los artículos científicos. Pero además, los usuarios podrán obtener una certificación de competencias profesionales por parte de instituciones de educación superior reconocidas internacionalmente. Con ello, los usuarios podrán generar mayor empleabilidad, además de un justo reconocimiento profesional y social por su esfuerzo de superación y por su desarrollo competencial.

Fuente: http://www.educaweb.com/noticia/2016/04/14/entrevista-federico-malpica-monografico-formacion-profesorado-9339/
Imagen: http://images2.listindiario.com/imagen/2015/07/09/380/379514/680×460/201507090116021/transformacion-en-la-docencia-universitaria.jpeg
Comparte este contenido:

Entrevista: El profesor que te ayuda a aprobar selectividad desde YouTube

Miles de estudiantes superarán estos días los exámenes gracias al ‘profe’ de ciencias David Calle.

Entramos en su buhardilla de Madrid. Con una cámara y una pizarra imparte clases gratuitas que ya se han visto 84 millones de veces.

El calor del flexo y el desasosiego estudiantil en las madrugadas de estos primeros días de junio hacen que alguna gota de sudor caiga sobre el teclado. El futuro universitario Diego no estudia con libros. Encima del escritorio tiene una calculadora y un folio blanco donde hace una y otra vez los ejercicios que le indica el hombre con gafas que sale en la pantalla de su ordenador. El miércoles tendrá que aplicar las lecciones de su profesor online en los exámenes de matemáticas y física de Selectividad.

«Yo y mis compañeros llevamos todo el curso aprobando gracias a David. Explica el temario mejor que los profesores de ciencias del colegio y además responde siempre a cualquier duda concreta que tengamos». Este futuro estudiante de Física de 18 años habla agradecido sobre su profesor youtuber. Al igual que seguramente lo hagan los 30 millones de alumnos que David Calle dice tener por todo el mundo. Desde la ESO hasta los primeros años de carrera, especialmente los estudiantes de bachillerato, conocen al tipo simpático que con sus vídeos de Youtube da lecciones de matemáticas, física, química y tecnología. Su canal, llamado Unicoos, que tiene más de 570.000 suscriptores y 84 millones de visitas, es la mayor plataforma educativa en nuestro país y la tercera de habla hispana en el mundo. Todas sus clases -cada tutorial dura cerca de 10 minutos– son online. Y gratis.

Por ello, y porque mañana empieza la última prueba de Selectividad -tal y como la conocemos hoy-, este periódico entrevista al rey youtuber español en educación, David Calle, un ingeniero de telecomunicaciones de 43 años, que desde la buhardilla de su chalé en Madrid ayudará a aprobar a muchos de los 200.000 alumnos que se presentarán este año.

A media mañana, David nos abre la puerta de su casa en el municipio de Velilla de San Antonio. Buena presencia, amplia sonrisa, jersey ceñido, 1,85 de altura… Se entiende por qué muchos de sus alumnos le llaman «el profesor cachas». Vive junto a su mujer, María José, y su hija Marta, de 13 años. En el tercer piso tiene una buhardilla de 50 metros cuadrados. Aquí, durante los cinco años que lleva de youtuber, ha grabado 700 vídeos. Al fondo tiene una amplia pizarra, una cámara réflex y un gran foco, cortesía de YouTube, que se lo regaló cuando llegó a los 100.000 seguidores. Al lado hay un amplio escritorio con dos ordenadores, donde prepara las clases. «Desde aquí contesto unos 100 mensajes cada día que me escriben los alumnos para que les resuelva las dudas», cuenta David, que asegura que los chavales le paran por la calle para hacerse fotos con él y darle las gracias por ayudarles a aprobar.

«Hola, chicos, gracias por venir a clase». Con esta frase empieza todos sus tutoriales. Para Crónica graba uno especial sobre funciones trigonométricas. «El vídeo más visto que tengo es uno sobre la matriz inversa con un millón de reproducciones», afirma David, que antes de ser profesor trabajaba como consultor de radiofrecuencia para una empresa de Florentino Pérez. Cuando se quedó en paro montó una academia -que mantiene en la actualidad, abierta todas las tardes, con 50 alumnos presenciales- y empezó a dar clases de física, química y matemáticas.

«Llegaba todos los días frustrado a casa porque no me daba tiempo a explicar a los chicos todo lo que necesitaban saber. Entonces, mi mujer, que estaba enganchada a un canal de belleza en Youtube, me dio la idea de abrir un canal en la web y resolver las dudas pendientes de clase», explica David. «Empecé con 25 seguidores y a los seis meses ya tenía 3.000. Pasó de ser un hobby a convertirse en mi profesión».

En mayo de 2011 abrió Unicoos, su plataforma digital, donde se pueden encontrar todos sus vídeos. Las listas de reproducciones están divididas por cursos, asignaturas y temario. David hace de community manager, graba y edita los vídeos. Pero también tiene un equipo formado por un ingeniero y dos profesores, todos voluntarios, que en el foro de la página web le ayudan a resolver las dudas académicas de los alumnos. «Hemos respondido a más de 20.000 mensajes en estos años. El 40% de nuestros suscriptores son españoles y el resto de Sudamérica. Es gracioso, porque hay conceptos que cambian. Por ejemplo, aquí existe el Teorema del Sándwich y allí lo llaman del Emparedado».

En la página de Unicoos los alumnos van dejando también sus opiniones. Rescatamos una de las últimas. La chica que la escribe se llama Patri: «Desde cualquier parte del mundo puedes ir a clase. Yo soy de Bruselas y gracias a Unicoos he conseguido entender química por primera vez en casi dos años».

David nos comenta, en tono de confidencia, algunas de las «frases cariñosas» que le dedican muchas de sus alumnas. En su improvisada aula tiene, fuera de cámara, dos máquinas de abdominales y unas pesas. La tabla periódica destaca colgada en la pared, al igual que dos cuadros de Pulp Fiction y Star Wars. Algunos juguetes de su hija Marta están por el suelo. «Ella ya se ve algunos de mis vídeos para sus deberes. Aprovecho para grabar por las mañanas, cuando está en el colegio».

-Con tantos millones de alumnos y de visitas, ¿saca mucho dinero como profesor youtuber?

-Contando con que todo lo que enseño es gratis, no llego a los 1.000 euros al mes en publicidad. Estos dos últimos años me he reunido con muchas multinacionales potentes buscando financiación. A ellos se les llena la boca diciendo que apuestan por el progreso y la educación, pero luego prefieren aparecer en canales menos educativos de otros youtubers. No buscan la calidad.

-¿Qué opina de otros compañeros como El Rubius?

-Yo doy un contenido educativo que llega a todo el mundo. Pero sé que si no tengo 50 millones de visitas todos los meses no soy importante. Él [El Rubius] ha tenido suerte, pero el problema está en que muchos chavales ahora dicen que quieren ser youtuber porque te haces rico. Es mentira, sólo se llenan los bolsillos los diez más importantes.

En Youtube, el dinero que David gana es por la publicidad que aparece antes de darle al clic en sus vídeos. Un euro se lleva por cada 1.000 visitas. «Mi sueldo verdadero es el de la academia que tengo por las tardes. Ésta es mi pasión».

Lo que más le gusta enseñar es física. En algunos de sus tutoriales pone escenas de películas como la de El Señor de los Anillos para que los alumnos vean cómo era el sistema de los orcos para abrir la puerta de Mordor con una palanca.

-Mañana empieza la Selectividad. ¿Qué recomienda a sus chicos?

-Que piensen el temario que peor llevan, enciendan el ordenador, lo busquen en mi página y vean los vídeos en los que resuelvo sus ejercicios. Una clase particular, sin salir de casa, gratis y que les ayudará a aprobar.

Fuente: http://www.elmundo.es/cronica/2016/06/05/5752b91e268e3e431f8b458e.html

Imagen: http://e01-elmundo.uecdn.es/assets/multimedia/imagenes/2016/06/04/14650390851020.jpg

 

Comparte este contenido:

Entrevista: “Los alumnos son los que tienen el papel activo en la mejora de la convivencia”

Entrevista a Tiina Mäkelä,
Coordinadora del Programa Kiva en España y América Latina de Instituto Escalae.
“Los alumnos son los que tienen el papel activo en la mejora de la convivencia. Confiamos en su capacidad para cambiar las cosas ”

Un estudio elaborado por la ONG Save the children muestra que un 9,3% de los estudiantes españoles encuestados afirma que ha sufrido acoso en los dos últimos meses. ¿Qué estamos haciendo mal en nuestra sistema educativo (la detección, la prevención…)?

El porcentaje está cerca del promedio internacional. El acoso escolar es un fenómeno universal sobre el cual los sistemas educativos deberían trabajar de manera sistemática con programas basados en la investigación y evidencia. Hace falta acción preventiva, protocolos de intervención y seguimiento. Lamentablemente muchas veces no es así.

En base a su experiencia, ¿cómo se podría mejorar la detección de los casos de acoso?

Primero hace falta concienciación. Toda la comunidad escolar (dirección, equipo docente, personal no docente, padres y alumnos…)  tiene que saber identificar el acoso escolar. Es importante saber distinguir incidentes no repetitivos o conflictos entre iguales del acoso, que es una agresión sistemática y repetida hacia una persona que tiene dificultades de defenderse. En segundo lugar, hay que crear un ambiente de responsabilidad compartida. Si vemos un caso sospechoso de acoso, todos tenemos la responsabilidad de actuar. En tercer lugar, las escuelas deben tener herramientas para recoger esta información de manera sistemática y un equipo que lo analice.

 ¿A qué edad deberían empezarse las acciones de prevención del acoso escolar?

En Finlandia trabajamos de manera sistemática a partir del primer año de primaria, el año en que los niños cumplen 7 años. Pero como en los países como España los niños entran habitualmente en el ámbito escolar institucional cuando cumplen 3 años, es posible que sea necesario empezar antes. De todos modos, hace falta adecuar las medidas pensando en el nivel de desarrollo psicosocial de los niños.

¿Cuáles son las principales dificultades de convivencia a las que hace frente un docente en su día a día?

Esta es la pregunta que seguramente los docentes saben contestar mejor que yo (llevo ya años sin trabajar diariamente en los colegios). No todas las dificultades de convivencia tienen que ver con el acoso escolar. Hay conflictos y peleas entre alumnos, sentimientos heridos por un mal entendido y simples incidentes de agresividad. En los casos de acoso escolar continuo, lo más frecuente es el acoso verbal, pero también hay acoso físico, material (como romper o robar las cosas de la víctima) y sexual. A veces el acoso puede ser más invisible, como es en el caso de exclusión social, la manipulación o las amenazas. Continua existiendo el acoso en el recreo, comedor, etc. de manera tradicional, pero además, las comunidades escolares se enfrentan el problema de ciberacoso, acoso en formato digital.

¿Cree que es necesaria una formación específica del profesorado para hacer frente a la violencia escolar y mejorar la convivencia? ¿Existen formaciones de este tipo en España?

Obviamente. Hace falta, por ejemplo, entender bien el fenómeno y conocer las medidas más eficaces para luchar contra el acoso. No es suficiente intentar resolver los casos utilizando métodos «caseros» que carecen un base científica. Además, muchas veces no hay coherencia entre los docentes, en su manera de actuar. Es muy importante que toda la comunidad escolar, opinemos y actuemos con coherencia ante una situación de acoso. Existen muchas ideas erróneas del acoso, como «fortalece el carácter» o «sólo son niños bromeando» que tenemos que corregir.

No conozco con todo detalle la oferta formativa sobre el acoso escolar en España, pero si, existe. El Instituto Escalae, un instituto para la calidad de la enseñanza-aprendizaje imparte en colaboración con EduDesign Finland, consultoría especializada en la adaptación y la implementación de soluciones educativas finlandesas en España y América Latina, formaciones relacionadas con la implementación de programa anti acoso escolar finlandés denominado KiVa.

¿Qué otros agentes, aparte de la escuela y la familia, deberían estar implicados en las acciones anti-acoso?

Como en la educación en general, hace falta más y mejor colaboración entre la escuela, la familia y la sociedad. Las escuelas no hacen su trabajo en balde. Todos debemos unirnos en la lucha contra el abuso de poder hacia los más vulnerables, algo que no sólo ocurre en la escuela….Es necesaria colaboración con los servicios de salud y expertos externos como terapeutas, trabajadores sociales, la policía, grupos de investigación, gobierno, organizaciones no-gubernamentales…Personalmente pienso que el papel de los medios de comunicación es importantísimo. Pueden apoyar en la sensibilización y también crear cierta presión para crear los cambios. Creo que en España está sucediendo esto en estos momentos.

Una de las acciones concretas para reducir el acoso escolar es el Programa Kiva, ¿en qué consiste? ¿A quién va dirigido?

El programa KiVa es un programa finlandés anti acoso escolar financiando por el Ministerio de Educación y diseñado por la Universidad de Turku, Finlandia. Consta de tres componentes principales. Primero, las acciones universales preventivas son dirigidas a todos los alumnos de una escuela. Pretenden influir en las normas del grupo, enseñar maneras constructivas de comportarse y ayudar a los alumnos a asumir su responsabilidad en cuanto a no fomentar el acoso y apoyar a las víctimas. Las acciones consisten, por ejemplo, en lecciones no solo sobre el acoso escolar sino también sobre cómo crear un ambiente escolar seguro, las relaciones humanas, la comunicación, las emociones, la inclusión y cómo superar la presión del grupo. También se ofrecen charlas para los padres y una guía en formato online. Las acciones focalizadas de intervención son el segundo componente de KiVa. Cada colegio tiene un equipo KiVa compuesto por profesionales como psicólogos y psicopedagogos. El equipo KiVa es responsable de resolver los casos en que se sospecha que existe acoso escolar. El tercer componente de KiVa es el monitoreo y seguimiento de casos a nivel escolar. Además de registros sobre los casos de acoso escolar mantenidos por el equipo KiVa, anualmente, se implementa una encuesta virtual sobre la convivencia y acoso escolar para estudiantes.

En Finlandia el proyecto se dirige a todas las escuelas a nivel nacional. En la primera fase de implementación en España y América Latina (a partir del año 2015) va dirigido a las escuelas de educación primaria que tienen un buen nivel de inglés, puesto que los materiales no están aún traducidos a las lenguas locales. Son escuelas que, además, buscan maneras de innovar en su Plan o Programa de Convivencia y que están interesados en el proyectos de desarrollo de valores y principios relacionados con la convivencia entre su alumnado. Ven la participación como una oportunidad de formar parte de una red de colegios y colocarse en la vanguardia en cuanto a la implementación del exitoso programa en los países de habla hispana.

¿Cuántos centros participan actualmente en esta iniciativa?

En Finlandia aproximadamente 90% de las escuelas de educación primaria y secundaria implementan KiVa. Como he dicho, estamos muy al inicio en la implementación del programa en España y América Latina. De momento ningún centro público participa, los primeros colegios son escuelas concertadas o privadas. En el País Vasco, la asociación Ikastolen Elkartea acaba de firmar un contrato para traducir los contenidos al euskera para implementar el proyecto en sus 52 escuelas, a partir del año 2017. ¡Esperamos que haya movimiento en otras regiones!

¿Cómo se adapta el modelo finlandés del programa Kiva a las dinámicas escolares de España?

La duración mínima de las lecciones sobre la convivencia son 2 sesiones de 45 minutos al mes (duración típica de una clase en Finlandia). Se puede aprovechar, por ejemplo, las clases de tutoría. La mejor manera de llevar a cabo las acciones es integrarlas con los contenidos y temarios curriculares existentes de manera transversal; coincide con contenidos y actividades ya existentes. Esto es también una buena manera de incrementar el trabajo colaborativo entre docentes de diferentes áreas. El programa KiVa se puede integrar perfectamente a los programas/planes de convivencia y otros programas relacionados. Luego hace falta elegir el/la coordinador/a y el equipo KiVa de intervención, preferiblemente personal que no tiene su propia clase, por ejemplo, el equipo de orientación que ya trabaja con temas de este tipo.

Se trabaja utilizando pedagogías activas y actividades versátiles centradas en el alumnos. No es el docente quien da las respuestas correctas, sino los mismos alumnos buscan soluciones concretas. Hay mucha autoevaluación y reflexión. Los juegos digitales ofrecen, además, simulaciones de situaciones autenticas que ayudan al alumnado a transferir el aprendizaje a su vida fuera de las clases.

Además de los contenidos sobre convivencia, el proyecto ofrece una oportunidad de aprender de las pedagogías activas finlandesas, aplicables a cualquier asignatura. Es posible, sin embargo, que el profesorado necesite apoyo pedagógico para interiorizar estas maneras de enseñar.

¿Cómo se logra la participación del alumnado en las iniciativas anti-acoso escolar? ¿Y de las familias?

En los programas como KiVa, los alumnos son los que tienen el papel activo en la mejora de convivencia. Confiamos en su capacidad de cambiar las cosas. Les damos protagonismo. Se trata de crear un ambiente basado en la confianza y responsabilidad compartida y cambiar las actitudes hacia el acoso. Si hace falta imponer castigos, tienen que ser constructivos, algo que realmente sirve para cambiar el comportamiento no deseado. No es un trabajo que se hace en una noche, sino un trabajo constante entre todos. Es importante que la escuela y las familias compartan las mismas ideas sobre este tema. Que colaboren tanto en el caso de que su hijo sea la víctima, como si ha participado en el acoso o sea testigo. Hace falta informar los padres, organizar charlas, animarlos a hablar de estos temas en casa también de manera preventiva.

Fuente: http://www.educaweb.com/noticia/2016/05/11/entrevista-tiina-makela-coordinadora-programa-kiva-convivencia-escolar-9390/

Imagen: http://www.guiainfantil.com/uploads/educacion/nina-acosada-cole-triste-p.jpg

Comparte este contenido:

Axel Rivas, director del Programa de Educación del Cippec: «Justicia pedagógica es creer que todos los alumnos son capaces»

El investigador se refirió a tres modelos. “Uno de ellos, el meritocrático, es muy injusto”, dijo. Si bien advirtió que sería “absurdo” eliminar el valor del esfuerzo, indicó que el desafío es crear prácticas de enseñanza que favorezcan el aprendizaje en la diversidad.

 Sábado 04.06.2016 |Mariela Goy

Axel Rivas estuvo en mayo en Santa Fe para disertar en el Instituto Nº 8 Alte. Brown, en una actividad organizada por el diputado Paco Garibaldi. También visitó El Litoral. 

El modelo meritocrático, que hoy está siendo tema de debate educativo, “premia los esfuerzos del alumno pero castiga mucho las diferencias de contexto; ignora o aprovecha que existen grandes desigualdades”. Lo dice Axel Rivas, máster en Ciencias Sociales y Educación, y al frente del área de Educación del Cippec, una organización apartidaria que se ocupa de analizar y promover políticas públicas para la equidad y el crecimiento en la Argentina.

El especialista -que recientemente fue seleccionado por la Fundación Konex como una de las 100 personalidades destacadas de la última década en las Humanidades Argentinas- se refirió a los tres modelos de justicia educativa que “están insertos en las prácticas escolares, en las creencias y no se presentan de forma pura, por lo cual tenemos que hacerlos conscientes y explícitos para poder tomar decisiones”.

“Todos nuestros alumnos son infinitamente capaces de hacer muchas cosas. Nuestro trabajo como docentes es explorar y expandir ese potencial. Nuestras creencias de justicia tienen que estar en relación a sentir que todos nuestros alumnos son capaces”, definió Rivas.

—¿Cuáles son esos tres modelos de justicia educativa?

—Uno de ellos es el “modelo meritocrático”, en el cual básicamente los alumnos son responsables de su aprendizaje y los docentes, de enseñar. Por lo tanto, si un docente cumple en enseñar los contenidos, toda la responsabilidad por aprender, aprobar y avanzar es de los alumnos. La meritocracia premia los esfuerzos del alumno pero castiga mucho las diferencias de contexto. Esas desigualdades se manifiestan en los resultados de los aprendizajes, con lo cual es un modelo muy injusto. También es muy tentador y a veces cómodo para el docente porque sólo se responsabiliza de enseñar.

El segundo es el “modelo compensatorio”, que empieza a surgir en los últimos 25 años, y que tiene una gran ruptura con el anterior porque se hace responsable de los alumnos. Trata de dar más oportunidades a los que tienen peor contexto social o alguna situación de desventaja. El sistema educativo ha creado muchas prótesis: becas, apoyos escolares, horas extraturno, tutores, comedores, planes de apoyo a las escuelas más vulnerables. Todo eso ayuda y construye mejores condiciones de justicia, más oportunidades para los desaventajados, pero muchas veces evita la discusión pedagógica.

Eso nos lleva al tercer modelo, el de “justicia pedagógica”, en el cual no podemos mantener la misma enseñanza homogénea, ritualizada y memorística para grupos de alumnos extremadamente diversos y dispares. Por el contrario, es necesario crear pedagogías diferenciadas; es decir, tener distintas trayectorias de enseñanza que puedan favorecer a todos los alumnos, no en escuelas y aulas diferenciadas, sino en aulas compartidas, comunes, donde la diversidad enriquezca el aprendizaje.

Es un gran desafío porque es muy difícil desarrollar pedagogías diferenciadas, que se acerquen más a las trayectorias de los alumnos, que los reconozcan como sujetos, que puedan ser creativas, aprender de su propia experiencia y no repetirse ritualmente. Requiere de mucha capacidad de los docentes, tiempo y buenos salarios. Y a veces hay una brecha entre el ideal y las posibilidades concretas.

“No anularnos como educadores”

—Una de las observaciones que haría un docente a este tercer modelo es que en aulas con más de 30 alumnos es difícil aplicar una pedagogía diferenciada…

—Hay dos planos que todos los docentes deben distinguir. Uno, el de los contextos de vida de los alumnos, que son a veces muy difíciles y diversos, y de las condiciones de trabajo: infraestructura, salarios, falta de tiempo. Esas condiciones son, en definitiva, las que más deciden lo que ocurre dentro de las aulas, las que más inciden en los aprendizajes.

La otra dimensión es el margen de intervención de la propia práctica institucional de las escuelas y de los docentes. Que las condiciones externas de los alumnos sean reconocidas como las que más inciden en los aprendizajes, no debe generar el efecto de excusa de que no es posible mejorar y trabajar con esos alumnos. No creo que tengamos que convertir a los educadores en héroes que salen de la realidad sociológica para cambiar la vida de los alumnos -eso sería irreal y mentiroso-, pero tampoco tenemos que anularnos como educadores y pensar que ya está todo decidido. El trabajo del educador es ampliar márgenes, no justificar la imposibilidad de hacer su trabajo.

Los educadores deben salir de un cierto clima de derrota, de estar como fuera de eje, fuera de época. Hoy nuestros niños y jóvenes tienen más acceso al conocimiento que nunca, pero desorganizado y disperso. Las escuelas tienen el potencial de aprovechar el acceso a Internet, y crear nuevas visiones de aprendizaje, más disfrutables. (Axel Rivas, Cippec)

—¿Cuál es su postura sobre la vuelta de las notas 1, 2 y 3 como aplazos en Buenos Aires?

 —Hay que salir del debate muy simplificado de posiciones enfrentadas. La práctica pedagógica siempre es compleja, es una combinación y no una toma de posición única. Es necesario mantener siempre un sentido de valor del esfuerzo -sería absurdo e injusto eliminarlo- así como todo tipo de rituales, de varas, de reglas, de medidas que disciplinan el aprendizaje. Pero creo que tienen que tener mucho menos peso del que tenían tradicionalmente. Hay que reemplazarlos con nuevos conductores de aprendizaje: no a partir de la orden exterior al miedo, a la falta o al castigo, sino al revés: a partir de apasionar a los alumnos y hacerlos a ellos mismos constructores del conocimiento. Reitero que el gran desafío es cómo crear prácticas de enseñanza que favorezcan el aprendizaje en la diversidad, y evaluaciones que funcionen.

La “buena” evaluación

—¿Cuál sería una buena evaluación?

—Es aquella que trabaja junto a la enseñanza, que acompaña, que es casi imprescindible, que permite una retroalimentación constante. Una evaluación de procesos y no esa prueba final, ritual, que de alguna manera pone todo el peso del aprendizaje en el alumno. El docente tiene un gran desafío: mantener la vara meritocrática sólo que subsumida a una vara de justicia pedagógica. Es decir, que el ordenador tiene que ser el potenciar a cada alumno, el reconocer sus dificultades, apoyarlo, crear distintas trayectorias para llegar a cada uno, a su forma de participar.

—¿La evaluación debe considerar también el contexto del alumno, su acceso al capital simbólico?

De una forma tal que uno pueda potenciar a ese alumno, porque el riesgo siempre es caer en una visión de “promoción social” donde uno reconoce una situación desfavorable y por compasión no mantiene la vara de lo que ese alumno tiene que aprender. La pregunta típica que se hace el docente es: ¿enseño para el promedio del curso o bajo la vara para que todos puedan aprobar aún cuando los aventajados no aprendan mucho más?. Es una pregunta errada y mal planteada en términos pedagógicos: la cuestión es cómo uno se enriquece a partir de la diversidad y cómo uno plantea un proyecto de enseñanza que genere trayectos paralelos y sinérgicos. El ejemplo es el “multigrado” de las escuelas rurales, donde un docente tiene chicos de 6, 10 y 15 años y no se le ocurre decir: “no les puedo enseñar porque ustedes son muy distintos”. Lo que hace es crear una trayectoria acorde a su edad, a su nivel de desarrollo y, por otro lado, hace actividades compartidas. Esto no es un aula degradada, que no funciona, muy al contrario.

—¿Cómo opera la calidad allí?

— Dependerá mucho de la capacidad que tengan los docentes de llevar adelante un programa curricular, de entender cómo se contecta aquello que tienen que enseñar con la vida de los alumnos. El gran desafío de un docente es ser él mismo un apasionado del conocimiento, que tenga ganas de enseñar aquello que sabe, de transmitir el valor por aquello que aprendió. Eso es mucho más importante que el aplazo sí o no, que mantener la vara o bajarla.

El secundario es el bastión más complejo del sistema educativo. Fue diseñado para seleccionar “a los mejores” pero en los últimos 20 ó 30 años, se avanzó en un nuevo paradigma. El problema es que eso no se traduce en una nueva organización de la escuela secundaria, que sigue teniendo muchas materias, exámenes, y pruebas de obstáculos para los alumnos. (Axel Rivas, Cippec)

– ¿Qué pasa con el nivel secundario que incluyó a más alumnos pero sigue sin encontrar la fórmula?

 – Claramente, el secundario es el bastión más complejo del sistema educativo, siempre fue diseñado para elegir “a los mejores”, y en los últimos 20 ó 30 años -especialmente desde el retorno de la democracia-, con distintos hitos y hasta la ley de educación nacional que lo hace obligatorio, se avanzó de distintas formas en un nuevo paradigma. El problema es que eso no se traduce en una nueva organización de la escuela secundaria, que sigue teniendo muchas materias, exámenes y pruebas de obstáculos para los alumnos. Por más que creemos apoyos, tutorías, intentos de hacerla más inclusiva, será muy difícil lograrlo sin cambiar la matriz.

 Entonces ahí hay un desafío de política muy complejo de ser abordado. Hay que crear un equipo institucional con pertenencia a la escuela -no de profesores “taxi”- y un proyecto de mejora institucional. También hay que abordar una dimensión crítica de la enseñanza tradicional; si no lo hacemos, todo lo demás va a ser un retoque, un paliativo que nunca va a alcanzar a tocar lo de fondo. ¿Qué es lo de fondo? Cómo proyectamos en nuestro alumnos la ciencia, la matemática, qué preguntas les generamos a ellos, cómo los involucramos en el conocimiento, cómo los sacamos de una trayectoria extremadamente ajena, de un recorrido por contenidos que ellos no saben para qué sirven ni para qué están ahí.

 – ¿Qué se puede hacer para revivir las aulas, que es el título de uno de sus últimos libros?

 – Hay un plano de la política educativa, donde vienen los cambios más profundos en la participación del Estado, en la distribución de los recursos, en el planeamiento educativo, en crear políticas para fortalecer la docencia, para crear programas de mejora en cada escuela. Por otro lado, está el plano más propio de los educadores, de las escuelas, de las aulas, donde también hay mucho para hacer.

 Para este último, tiendo a usar el esquema simple de las “cuatro C”. Fortalecer la C del Colectivo: del trabajo institucional con los colegas, de crear una cierta mística y un clima de trabajo institucional para sentirse acompañado y que vale la pena. La segunda C es de las Creencias: cuáles son nuestras ideas de justicia, cómo defendemos a nuestros alumnos desde lo que creemos, porque lo que pensamos sobre nuestros alumnos, tiene un efecto sobre ellos. Con lo cual, cuando pensamos que un alumno es incapaz, estamos proyectando en ellos esa incapacidad y probablemente generemos una desventaja en ellos. No podemos pensar que está decidido su destino, que son por definición, por naturaleza, por genética o por crianza, incapaces, disminuidos o que no tendrían que estar ahí.

 La tercera C es de las Capacidades: tiene que ver con tener herramientas pedagógicas, de la propia experiencia porque los años de la trayectoria docente dan muchas herramientas, pero también lo da el diálogo con colegas, la lectura, la capacitación, el ejercicio de reflexión sobre la práctica. La cuarta C es la del Coraje: que es una forma de expresar un plus, un extra que hoy es más importante en las escuelas y que es el entusiasmo, las ganas, el poner el sentimiento de que vale la pena estar ahí. Y no sentirse derrotado. Esto a veces es más importante que todo lo otro.

 – ¿Usted dice que el docente puede poner todo esto en práctica al margen de las políticas educativas que a veces acompañan y otras veces no llegan a las escuelas? ¿El docente, la escuela sola lo puede hacer?

 – Claramente las condiciones de trabajo de los docentes a veces son difíciles; la vida de los alumnos nos pone en juego, muchas veces de forma para las que no estábamos preparados. El trabajo de uno está en tensión, poniéndose en juego uno mismo, y es un trabajo rodeado de humanidad en todo sentido: estamos rodeados de niños, de jóvenes; también estamos todo el tiempo bajo juicio de los alumnos, padres, colegas, con lo cual es un trabajo muy difícil.

Pero, al mismo tiempo, tenemos que tener la capacidad de salir, como colectivo de educadores, de un cierto clima de derrota, de estar como fuera de eje, fuera de época. Me parece que al contrario: hoy nuestros niños y jóvenes tienen más acceso al conocimiento que nunca, pero desorganizado y disperso. Las escuelas tienen el potencial de aprovechar el acceso a Internet, y crear nuevas visiones de aprendizaje, más disfrutables, que sean apasionantes para los alumnos. Antes, la escuela era donde empezaba y culminaba el conocimiento. Ahora, esas fronteras son ilimitadas pero tenemos que ayudarlos a navegar ese mundo y apasionarlos para que quieran navegarlo, y hacer del mundo del conocimiento su propia vida, su propio destino.

– De ahí nos vamos a la formación docente ¿hay un déficit?

– Sí, es uno de los grandes desafíos. Hay un camino muy complejo por delante para lograr la institucionalización de una política nacional y federal de organización, de crear una verdadera carrera de formación docente. Hoy es muy dispar, tenemos más de 1.300 institutos formadores. Lo veo como un desafío que no está ajeno a la visión general de para qué se forman los docentes, cómo se los convoca, cómo se logra tener una carrera profesional atractiva. Los salarios son fundamentales para tener una carrera docente. Si uno ofrece un salario bajo, va a reclutar a personas que no están interesadas en el mismo.

 – ¿Qué opina de la idea del gobierno nacional de crear un Instituto de Evaluación Educativa?

 – La creación de una instancia de evaluación, que por ahora es una secretaría, es un avance. Necesitamos una política sólida de evaluación de la calidad integral que no mire solamente los aprendizajes si no toda las dimensiones de la escuela. Que permita que los alumnos y docentes participen de una autoevaluación institucional. La evaluación de los aprendizajes tiene que ser censal, para todos; hasta ahora lo era sólo para el último año de la secundaria. Pero no para publicar y crear rankings por escuelas, porque sería una forma equivocada de comunicar. Las escuelas se pueden ver perseguidas, en un momento en el cual ya se sienten tensionadas, tratadas peyorativamente por la sociedad y los medios. No hay que generar más ataques a las escuelas, sino diagnosticar, devolver resultados, hacer un plan de mejoras y ser muy críticos, honestos y sinceros sobre lo que aprenden los alumnos para mejorar. Ahí me parece que una instancia como la que se está creando puede ayudar.

Fuente: http://www.ellitoral.com/index.php/id_um/131157-justicia-pedagogica-es-creer-que-todos-los-alumnos-son-capaces-axel-rivas-director-del-programa-de-educacion-del-cippec

Comparte este contenido:

Entrevista a Jesús de la Gándara:»Eso de que las nuevas tecnologías nos aíslan es mentira»

05 Junio 2016/Fuente: 20Minutos/Autor: Mara Mariño

Jesús de la Gándara, doctor en Medicina y Cirugía, especialista en Psiquiatría y jefe del Servicio de Psiquiatría y Salud Mental de Burgos, es el autor de Cibernícolas (2016, Plataforma) un libro, que en palabras del propio autor «no va de las nuevas tecnologías sino de cómo vivir bien en el mundo moderno».

La capacidad de adaptación, la habilidad tecnológica o una empatía flexible son, para el psiquiatra, algunas de las claves para vivir cómodamente en la nueva sociedad hipermoderna.

¿Qué es un ‘cibernícola’?

Una persona que vive en la cueva virtual de las nuevas tecnologías. ‘Ciber’ significa timonel. Los hombres ahora somos habitantes de un mundo especial y la palabra que más lo describe es lo ‘ciber’, porque estamos rodeados de tecnología y todo eso influye en la convivencia, forma de ser…

Un ‘cibernícola’ es una persona que vive en el mundo hipermoderno, utiliza todas las opciones, ventajas y Tic (tecnologías de la información y la comunicación) del mundo hipermoderno y les saca partido. Es un concepto positivo porque es capaz de adaptarse a ese mundo y vivir bien sacándole provecho. Lo contrario sería un ‘ticópata’, que vive en el mundo virtual pensando que es jauja y puede hacer de todo sin salir de su ordenador, piensa que es feliz, entra en riesgo de abuso a las nuevas tecnologías.

¿Estamos más aislados que nunca?

Eso de que las nuevas tecnologías nos aíslan es mentira. Estamos aumentando la relación con las tecnologías pero no nos quedamos en casa, salimos muchísimo, viajamos más que nunca… Las nuevas tecnologías nos permiten quedar y relacionarnos, no son incompatibles. Algunas personas ticópatas, pocas, no son capaces de relacionarse adecuadamente. Ya no lo eran y con las nuevas tecnologías han creado un mundo artificioso.Incluso en esos casos antes iban a peor porque ahora al menos se pueden relacionar.

¿A qué se debe la «vida veloz»?

Vivimos muy rápido porque los medios técnicos y mecánicos lo permiten. La vida es más rápida y la velocidad puede ser una ventaja o un inconveniente. Si la vives como un estrés es un inconveniente, si la vives como una rapidez es una ventaja. La rapidez se puede convertir en un ‘vicio’ que es la prisa. Si somos capaces de ir deprisa pero sin prisas no tenemos ningún problema.

Si tengo mucha atención multitarea y soy capaz de manejar mucha información muy rápido, no me estreso. Si me abruma porque veo que no puedo estoy agobiado. Por ese motivo la velocidad es un riesgo para algunas personas, porque significa estrés. Por otra parte vivimos en una sociedad muy apresurada. El apresuramiento es un vicio social, otro es el posesionismo. ‘Intelegancia’ significa mirar hacia fuera y elegir adecuadamente

¿Cuáles son las nuevas virtudes de la sociedad hipermoderna?

«Intelegancia’, inteligencia, que es mirar hacia dentro, saber lo que uno quiere, lo que uno puede, lo que uno debe y elegancia que es saber elegir. ‘Intelegancia’ significa mirar hacia fuera y elegir adecuadamente aquello que mi inteligencia me dice que me interesa porque vivimos en un mundo lleno de opciones.

La segunda es la ‘telempatía’, vivimos a través de las pantallas parte de nuestra vida y empatizamos con eso, pero enseguida desempatizamos porque viene otra noticia. Como todo es tan rápido, tenemos que desarrollar una empatía que sirva para empatizar a través de las pantallas, informaciones o medios de manera verdadera o auténtica. En tercer lugar está la ‘ciberprosexia’, ‘ciber’ significa timonel y ‘prosexia’ atención, que debe ser adecuada a los medios o a las nuevas tecnologías: muy rápida, ‘flexiveloz’ para adaptarse rápidamente a la cantidad de información que recibimos porque si no nos agobiamos.

Y finalmente la ‘ticopraxia’, ser habilidosos en el uso de las nuevas tecnologías, habilidad que va desde cómo manejas los dedos en el teclado o el ratón hasta saber hacer buen manejo de las nuevas tecnologías. Empieza con una cuestión puramente mecánica y acaba con una ética. ‘Ticopraxia’ significa usa bien las nuevas tecnologías, porque si las usas bien harás el bien para ti y para los demás y si no las usas bien acabarás siendo un maleducado de las redes, de esos que insultan a tontas y a locas.

¿Qué necesitamos para vivir en la era de la infosaturación?

Aprender a gestionarla, adaptarnos, no negarlo ni criticarlo porque sí, no demonizar los medios. Los medios no son buenos ni malos, somos nosotros los que somos buenos o malos, por lo tanto utilizar las cuatro virtudes de la sociedad hipermoderna.

¿Quién decide lo que es o no meterse demasiado en la cueva del ‘cibernícola’?

Si tuviéramos una buena ética, podríamos tener límites. Ese cibernícola que se pasa en la cueva toda la vida va a acabar desolado. También puede acabar enfermo como les pasa a los hikikomori. Un niño debe tener un móvil cuando tenga uso de razón y cuando lo use adecuadamenteSegún el Estudio de Hábitos y Motivaciones en Navidad, realizado por LG Electronics y Smart Calls, el regalo más deseado por los niños entre 8 y 12 años fue el Smartphone.

¿Cree que se deben poner límites al uso de las TIC a ciertas edades?

Deben tener límites, como todo. Si un niño te pide una guadaña no se la vas a regalar, creo que hay que tener sentido común. Un niño debe tener un móvil cuando tenga uso de razón y cuando lo use adecuadamente. Pero eso depende de los padres, de que sean capaces de dialogar con ese hijo y establecer qué, para qué, cuánto, cómo, cuándo, etc. No soy partidario de las recomendaciones tontainas que hay por ahí de no dejes que tu hijo use el ordenador solo, quédate con él mientras entra en internet. No seamos sosos, eso es imposible. Si le compras la tablet es precisamente para que el hijo entre y no tengas que estar atendiéndolo.

Sí que deben tener límites, ¿pero cuál es el límite? El del sentido común y el de la ética ‘cibernícola’. El del sentido común a veces lo tenemos y a veces no, depende de cada uno. Y el de la ética ‘cibernícola’ nadie porque no la hemos desarrollado aún y nos falta ese paso grandísimo que es el de desarrollar una ‘ciberética’. Los selfies, la exposición constante del yo, el empeño de mostrar en las redes lo mejor de nosotros…

¿Las redes nos hacen pasarnos de ególatras?

De ególatras no, de histéricos, de lucirse. Digamos que se ha facilitado mucho por las redes sociales. Yo cuando veo a alguien en seguida distingo si esa persona está haciendo una comunicación o una exposición, si está haciendo una información o un espejismo.

Hay muchas personas que son histéricas que utilizan las redes para manifestar su modo de ser superficial, voluble, narcisas… Si haces eso eres tonto, pero si tú has hecho una foto preciosa y la comunicas, estás compartiendo la belleza. Eso es bueno, no es histérico.

¿Hemos pasado de necesitar la aprobación social personal a necesitarla digitalmente?

Mucho, hasta el punto de que es posible describir lo que podríamos llamar depresión de las redes o The Facebook Depression que es una persona que ha perdido los apoyos subjetivos como consecuencia de sus relaciones en Facebook. Antes, en el mundo social, una persona se deprimía por la pérdida de relaciones significativas: los amigos, el novio…Por ejemplo, para una mujer, la pérdida de relaciones significativas emocionalmente es una principal causa de depresión mientras que para un hombre es la pérdida del estatus o de las relaciones sociales. En las redes ocurre lo mismo.

Es malo en la vida real o en la virtual porque se sufre mucho y hay personas muy sensibles que están enfermas por esto. Hay casos que se dan en jóvenes, especialmente en chicas, porque son más sensibles a la pérdida de apoyos emocionales. La mayor parte de las cosas que hacemos en las redes son buenas pero debemos tomarlo con calma

¿Cuáles serían los pecados capitales que podemos cometer en la red?

El principal es no pensar las cosas, dejarse llevar por la inmediatez. Si la gente fuera menos apresurada y tuviera más moderación seguramente utilizaría las redes más para beneficios que para prejuicios. La mayor parte de las cosas que hacemos en las redes son buenas pero debemos tomarlo con calma. Somos la inmensa mayoría los que la usamos con educación, cordura y mesura.

Fuente de la entrevisa: http://www.20minutos.es/noticia/2744160/0/jesus-de-la-gandara-cibernicolas-vicios-virtudes-de-la-vida-moderna-libro/#xtor=AD-15&xts=467263

Fuente de la imagen: http://cdn.20m.es/img2/recortes/2016/05/23/286772-600-338.jpg?v=20160523130914

Comparte este contenido:

Entrevista a Laia Jané: «La escuela debe estar también presente durante la enfermedad»

05 Junio 2016/Fuente:Redem/Autor: Thiching.com

Laia Jané; Psicóloga de la asociación AFANOC (Asociación de Familiares y Amigos de Niños Oncológicos de Catalunya).

La psicóloga Laia Jané piensa que lo más grande que puede desear un niño o niña es ser feliz. Esto y una guitarra, eso sí, que es el regalo que ella recuerda con más emoción de su infancia.

¿Cómo se aborda socialmente el cáncer infantil?
El cáncer en la infancia es una enfermedad compleja que tiene que ser abordada desde distintas especialidades y con múltiples perspectivas, pues como muy bien indica el nombre, afecta a una persona que está desarrollándose y que requiere estar acompañada por sus familiares. Por lo tanto, las intervenciones van dirigidas al niño pero inevitablemente se trabaja con toda la familia que lo rodea y su entorno más próximo.

¿Cómo cree que se aborda el tema desde las escuelas?
Depende de la escuela. Por un lado, está el aspecto del seguimiento académico, que está cubierto desde los departamentos de educación, con el programa de atención domiciliaria en el que profesionales de la educación garantizan que el niño o niña pueda seguir con sus estudios mientras no puede ir a la escuela.
Por otro lado, está el aspecto más relacionado con la sensibilización y la explicación de lo que está pasando para que la comunidad escolar pueda acompañar a la familia de una forma adecuada. También será necesario en el caso de que haya hermanos. En este aspecto, cada escuela lo afronta en función de su experiencia, de si ha pasado por situaciones similares, de si hay más participación por parte de las familias, etc… Se pueden realizar charlas informativas o bien mantener un contacto con los tutores o responsables del centro, asesorando en aquellos aspectos que se requiera.

Son muchas las iniciativas que se llevan a cabo en los hospitales para hacer a los niños más llevadera la enfermedad.

¿Qué relación existe entre el estado de ánimo y la recuperación?
Como en cualquier enfermedad, es muy importante que la persona pueda seguir manteniendo una calidad de vida que le permita disfrutar incluso estando enferma.

El estado de ánimo pasará por distintos momentos, y todos están bien mientras la persona no se quede anclada en uno de ellos. Reacciones de tristeza, de miedo, de rabia… son normales que se den, pero es importante ayudar a la persona a expresarlas y reconocerlas. De esta manera podrá tener también momentos de alegría, de motivación y de ilusión, para poder afrontar lo que se está viviendo. Lo que se tendrá que tener en cuenta es la edad, pues no es lo mismo lo que necesita un niño de 3 años que un adolescente. En cada etapa del desarrollo habrá distintas necesidades que se tendrán que tener en cuenta para poder ofrecer actividades y recursos adecuados.

¿Cómo cree que debería abordarse este tema en las aulas?
Creo que es importante tener información realista y una actitud de acompañamiento y presencia. Hace falta poder entender por lo que está pasando este niño y su familia, para poder dar respuestas útiles y sensatas. Entender cuál es la enfermedad (hay muchos tipos de cáncer infantil), los posibles efectos secundarios de los tratamientos o las secuelas de la propia enfermedad. Si hay miedo, es importante poder hablarlo dentro del equipo educativo y, si hace falta, buscar el asesoramiento adecuado, ya sea en los hospitales o bien en las asociaciones y fundaciones que nos dedicamos al cáncer infantil.

¿Qué papel juegan los profesores y los compañeros de clase en la recuperación de un niño o niña que padece cáncer?
Desde el inicio de la enfermedad, se pregunta a la familia si ha hablado con la escuela. Es importante por un lado activar la atención domiciliaria y por el otro, que los compañeros y profesores estén enterados de lo que le está pasando a su amigo y alumno.
En referencia a la atención domiciliaria, solo se cubre en la franja de educación obligatoria (6 a 16 años), por lo que para los niños menores de 6 y los mayores de 16 se planteará, si se considera necesario, un apoyo escolar por parte de voluntarios formados y preparados para ello.
Es fundamental que la escuela esté presente durante todo el transcurso de la enfermedad, pues es larga y con tratamientos complejos, y el niño o adolescente necesitará saber que la escuela está allí.

¿Debe trabajarse en clase el proceso de la enfermedad con los compañeros?
Sí, con más o menos profundidad, pero definitivamente sí, a no ser que la familia no autorice a dar nada de información, algo con lo que no me encontrado nunca. Es importante que los compañeros entiendan lo que está pasando pues si no, pueden malinterpretar o tener una idea errónea, que puede llevar a malentendidos con el compañero enfermo. Los niños tienen derecho a tener cierta información para poder dar respuestas adecuadas y sensibilizarse con las dificultades de los demás.

¿Cómo debe prepararse el regreso de un compañero ya recuperado?
Si la relación se ha mantenido durante toda la fase aguda del tratamiento (normalmente vía telefónica, o bien por internet…) será mucho más fácil la reincorporación del compañero, pues sus amigos tendrán información más realista de cómo está, de si tiene pelo o no, de si va con silla de ruedas, de si le han realizado una amputación o tiene una cicatriz… Se tendrá que preparar, pero simplemente explicándolo unos días antes, pues quizá muchos amigos ya lo sepan.
Pero si durante toda la enfermedad ha habido pocos contactos, o no se ha informado de los acontecimientos, será más complejo, ya que puede haber un cambio importante de imagen y eso puede ser impactante para los compañeros y para el mismo niño que se tiene que incorporar.
Por lo tanto, siempre recomendaremos que se piense un poco a largo plazo para prevenir, precisamente, situaciones de este tipo.

¿Cómo podemos abordar con niños y niñas un desenlace negativo: el fallecimiento de un compañero?
Informando en los momentos adecuados y con mucho respeto y sinceridad. Es importante que el equipo educativo se prepare un tiempo antes, cuando ya se sabe que la enfermedad no está curando y que probablemente, su alumno fallecerá. Es recomendable que se asesore de cómo informar y cómo tratar este tema, en función de las edades y del tipo de vínculo con el niño enfermo. Por un lado, en el caso de que haya hermanos en su clase, serán los que quizá requieran más apoyo. Pero no se puede olvidar al resto de alumnos y sus familias. Por lo tanto, cada escuela tendrá que pensar cómo se prepara para vivir esta difícil experiencia, y qué pasos realizará (cómo informarán a las familias, si se asistirá al funeral o entierro, si se hará algún acto de despedida en la escuela…). Será recomendable, si es posible, una comunicación fluida y respetuosa con la familia del niño enfermo, para poder ver cuál es la mejor manera de acompañarlos. No se puede protocolizar una situación de este tipo. Se tiene que personalizar y pensar bien como se quiere hacer.
También es útil ofrecer un espacio a los maestros más implicados, pues será una experiencia difícil y muchos necesitan poderlo hablar y compartir.

¿La sociedad está suficientemente concienciada de la importancia de la investigación?
Hay una parte de la sociedad que quizás sí, pero normalmente la gente se conciencia cuando conoce un caso más cercano, o cuando lo vive directamente en su familia. Es importante mantener los esfuerzos de sensibilización, y precisamente el trabajo en las escuelas tiene una repercusión importante pues llega a muchas familias que, a su vez, lo podrán transmitir a otros conocidos.

¿Y sobre las donaciones (de órganos, de sangre, en este caso de médula ósea)?
Exactamente igual, son muy importantes las campañas informativas y los actos festivos en los que se da a conocer esta necesidad. Hace falta tener presencia en los medios de comunicación y espacios dedicados a hablar de estas realidades.

 

Fuente de la entrevista: http://www.redem.org/la-escuela-debe-estar-tambien-presente-durante-la-enfermedad/

Fuente de la imagen: http://www.redem.org/wp-content/uploads/2015/11/Laia-Jane-Tiching.jpg

Comparte este contenido:

Entrevista a Jimmy Wales: «El nuevo analfabetismo no es no saber cosas, es no saber usar la información»

05 Junio 2016/Fuente y Autor:El Mundo

El fundador de la Wikipedia: Jimmy Wales (Premio Princesa de Asturias de la Cooperación Internacional), augura un cambio necesario en el modelo educativo

A Jimmy Wales (Alabama, 1966) le asiste el carisma que siempre acompaña a los visionarios. Cuesta llevar la contraria a un hombre que ya ha demostrado que tiene razón. Por lo menos una vez. Y a lo bestia. En 2001 tuvo un sueño. En realidad no era nuevo. Digamos que él volvió a tener la misma idea que los ilustrados del siglo XVIII. ¿Y si organizamos el conocimiento humano de forma que esté disponible y al alcance de todos? ¿Y si lo hacemos en todas las lenguas del planeta? ¿Y si no castigamos a las familias del mundo a comprar unos gruesos tomos que doblan las estantería de casa? Y, en efecto, cosas de internet, nació la Wikipedia. Pues bien, 14 años después, la Wikipedia, con más de 37 millones de artículos escritos en 288 idiomas (incluido el bable) por voluntarios de todo el planeta, es mucho más que un simple archivo de conocimiento. Es, sencillamente, el signo de los tiempos.

“Se trata de un conocimiento abierto y comunitario, pero, y esto es lo importante, riguroso. Soy un obsesionado de la exactitud“, dice desde el claustro del hotel Reconquista de Oviedo el destinado a recoger el Premio Princesa de Asturias a la Cooperación Internacional. En realidad, el galardón es para la Wikipedia, no para su creador. Su declaración corre a cuenta de la primera y obligada pregunta por los errores que dicen acumula su invento. Ya se sabe, tendemos a pensar, y más en un país tan estirado y con tantas academias como España, que sólo los viejos y los sabios tienen la llave del saber.

“Está demostrado por los estudios más reputados”, sigue, “que la Wikipedia no tiene más errores que cualquiera de las enciclopedias tradicionales. Con el tiempo hemos mejorado las herramientas de corrección y revisión. Además, las enciclopedias tradicionales, incluida la Británica, no son ni la mitad de infalibles que ellas creen que son”. Lo último, por si no lo han notado, era una puya a la ‘intelligentsia’.

Sea como sea, lo cierto es que la Wikipedia se ha convertido en el lado amable de una Red que cada día que pasa suscita más dudas. Snowden demostró que nos espían y Wikileaks insiste. “Soy un optimista incorregible y creo que, pese a todo, Internet es una oportunidad única que ha cambiado la humanidad como pocos descubrimientos en la historia han hecho. Por lo demás, y pese a ser ciertas las amenazas, la seguridad está creciendo a un ritmo exponencial. En los dos últimos años, el tráfico encriptado y seguro ha crecido del 30% al 60% y en poco tiempo, casi todo será seguro. Snowden, con su denuncia, ha hecho que mejoremos. Y tendríamos que estarle muy agradecidos. Yo se lo estoy”.

-¿No cree que sea un delincuente como su Gobierno?

-En absoluto. No lo es. Al revés.

Sea como sea, dentro de todos los cambios que Internet en general y la Wikipedia en particular han introducido en nuestras vidas, Wales prefiere detenerse en el que considera fundamental: la educación. No en balde, visita un país extraño donde con cada Gobierno asistimos al carnaval de un nuevo sistema, un nuevo recorte, una nueva sospecha; un país donde la educación de todos se encuentra fragmentada en tres modelos (público, privado y concertado) tan original en el planeta como difícilmente traducible.

“Lo fundamental ahora, y eso lo mantienen todos los expertos del mundo, es concentrarse en que los alumnos sean competentes en el manejo de la información. Hasta ahora, y desde la Ilustración de la que la Wikipedia es heredera, se trataba de almacenar, racionalizar y memorizar datos, conocimientos… La sociedad es otra y lo básico es saber organizar y manejar la información que está a mano”, dice, se toma un segundo y concluye con un ejemplo: “Basta mirar lo que ocurre en medicina. Todo está al alcance de cualquiera, pero lo importante es saber qué materia puedes o no usar en función de tu competencia, de tu especialización, de tu necesidad y de tu práctica… El conocimiento ya es otra cosa y los planes educativos deberían ser muy conscientes de ello. El analfabetismo del futuro es no saber utilizar bien internet“.

Y claro, cuando habla un visionario, a lo mejor debería escuchar algún ministro. Ya se sabe, quien acierta una vez corre el peligro de acertar más.

Fuente de la entrevista:http://www.redem.org/fundador-de-wikipedia-el-nuevo-analfabetismo-no-es-no-saber-cosas-es-no-saber-usar-la-informacion/

Fuente de la imagen:http://www.redem.org/wp-content/uploads/2016/01/jimmy-wales.jpg

Comparte este contenido:
Page 415 of 428
1 413 414 415 416 417 428