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LA EDUCACIÓN DESDE EL PENSAMIENTO SOCIAL: HUGO ZEMELMAN

Estas líneas constituyen un ejercicio de imaginación reflexiva, en el sentido de intentar mirar un pensamiento social como una posibilidad de trazar lineamientos y propuestas para el mundo educativo. En este caso, trataremos de leer en clave de posibilidades educativas a Hugo Zemelman. Es una forma de invitar también a los lectores a beber directamente en los aportes de este intelectual y actor social que tiene aún muchas cosas que decirnos en su vasta obra.

Tal vez es necesario decir que, ante la dimensión de este artículo, es de seguro inevitable que forcemos una síntesis demasiado apretada de un pensador de la amplitud y el alcance de Hugo Zemelman, y que nuestra interpretación de sus textos sea a la vez parcial y tendenciosa. Pero nos aliviaría si consideráramos este ejercicio de imaginación reflexiva como una apertura a ideas y planteamientos susceptible de ser enriquecida y corregida más adelante por lectores y lectoras.

Planteamientos centrales de Hugo Zemelman (breve y apretada síntesis):

Zemelman intenta retomar la tradición racionalista, enriqueciendo las formas de pensar hasta sus límites. Ello pasa por razonar en toda la escala en que lo real se muestra: lo inmediato y mediato, lo dado y lo no dado, lo determinado y lo indeterminado, lo producido y la potencialidad (Zemelman, 1992). Lo anterior se traduce en riqueza de la relación gnoseológica, en el sentido de la apertura de espacios de creatividad.

No se trata sólo de transformar la realidad en objeto de explicación, sino en objeto de la experiencia. La dimensión de la conciencia histórica ha de incorporarse a la problemática del conocimiento, puesto que ella impone posibilidades de sentido (ib.).

El conocimiento está unido a la acción, por lo que se extiende la capacidad del hombre de reactuar sobre sus circunstancias. Mientras el conocimiento es de opciones de construcción, la práctica sirve para impulsar una construcción en la dirección desarrollada por el conocimiento.

Ontológicamente, la realidad histórica es un campo de enorme vastedad, siempre más rico que cualquier teoría (Zemelman, 1989). El problema, a fin de cuentas, es desarrollar las potencialidades de la consciencia histórica como consciencia del dándose, más allá de cualquier reduccionismo (Zemelman, 1989).

Cuando se transforma la realidad en contenido de una construcción por un sujeto, ello obliga a la ampliación de la experiencia y subjetividad de ese sujeto (ib.). La realidad cumple, pues, una función epistemológica. La reconstruccción del problema rompe con su tendencia a identificarlos con objetos teorizados, transformándolos en un campo de problemas posibles de ser teorizados (Zemelman, 1989).

El pensar obliga a ir más allá de lo establecido. Es necesario ver cada fenómeno con base a la idea de totalidad; es necesario abrirse a la inclusividad de los procesos inacabados. El razonamiento dialéctico pretende una reconstrucción que sintetiza lo dado y lo virtual.

La educación desde la mirada de Zemelman

La educación, desde la perspectiva de Zemelman, está llamada a la búsqueda del enriquecimiento de las formas de pensar, de la ampliación de los horizontes de la razón. Ello pasa por la problematización y la superación del conocimiento dado. Es necesario incorporar en la experiencia educativa diaria categorías tales como: lo inmediato-mediato, lo dado y lo no dado; lo determinado y lo indeterminado; lo producido y la potencialidad.

Este enriquecimiento del pensar ha de ser absolutamente significativo para los sujetos humanos, de lo contrario sería vacío, inútil. Por ello, es imprescindible incluir en el ejercicio del pensamiento la consciencia histórica, pues la realidad histórica es siempre más amplia y de mayor riqueza que cualquier teoría.

Las instituciones educativas, desde esta mirada, han de abrir espacios para la diferencialidad, en el sentido de propiciar el desarrollo de diversos modos de construir lo real, según los condicionantes sociales y las potencialidades cognitivas de educandos y trabajadores de la educación. En ello puede ser propicia la generación de espacios de creatividad, de condiciones para el desarrollo libre del pensamiento, interpretando los cuerpos teóricos existentes, no cristalizándolos o sobredeterminándolos.

En todo momento hay que considerar el papel protagónico de los seres humanos en el desarrollo del pensamiento y en la realización de acciones, polos que se imbrican en un proceso único. Profesores y estudiantes han de proyectarse desde y hacia la vida social para potenciar la realidad objetiva con la práctica, transformando la realidad en contenido de una construcción, cosa que viene a ampliar la experiencia y subjetividad del sujeto. En este sentido, las instituciones escolares han de de proveer ambientes altamente sistematizados para el pensar y el actuar, en la línea de propiciar la inclusividad, la dialéctica de articular cada fenómeno con la idea de totalidad, de la síntesis de lo dado y lo virtual.

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Zemelman, H (1989) «En Torno al Razonamiento y sus Formas». Lenguas Modernas 16. Universidad de Chile.
————- (1992) Los Horizontes de la Razón II: Historia y Necesidad de Utopía. México: Anthropos

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Discurso en la entrega del Premio de Justicia Social otorgado por el Proyecto Democrático Paulo Freire de la Universidad de Chapman

Discurso en la entrega del Premio de Justicia Social otorgado por el Proyecto Democrático Paulo Freire de la Universidad de Chapman

Luis Bonilla – Molina

Buenas tardes

Quiero agradecer al Proyecto Democrático Paulo Freire por esta importante distinción, especialmente a las profesoras Anaida Colon-Muniz, Lilia D. Monzó, al maestro de pedagogos críticos Peter McLaren y a todo el equipo///

Agradezco a:

  • la Facultad de educación de la Universidad de Chapman por cobijar la iniciativa que me otorga este galardón ///
  • Melody González a quien le tocara la tarea de traducir mis palabras///
  • Por supuesto a los y las compañeros del Fondo en Pro de la Justicia Social del Condado de Orange quienes luchan por los derechos de los y las inmigrantes y que hoy también reciben el premio colectivo de Justicia Social ///
  • A los y las maestras de América Latina y el mundo quienes inspiran nuestro trabajo ///
Agradecer al pueblo venezolano que sufre las consecuencias terribles del criminal bloqueo económico contra nuestra nación por parte de las potencias imperialistas ///

También quiero agradecer a quienes soportan mi ritmo de trabajo, especialmente a Luz y a mis hijos, cuatro de los cuales están hoy regados por el mundo en condición de inmigrantes ///

Recibir un premio tan prestigioso como el que otorga el Proyecto democrático Paulo Freire es motivo de inmensa alegría rebelde. /// Lo entiendo como un reconocimiento al trabajo colectivo, un mensaje de estímulo a los numerosos equipos de trabajo con los cuales estoy vinculado, y muy especialmente al Centro internacional de Investigaciones Otras Voces en Educación (CII-OVE) de Venezuela, a la Cooperativa de Educadores(as) e Investigadores(as) Populares Histórica (CEIP-H) de Argentina, al Movimiento Autónomo por la Emancipación  (MAEEC) de Oaxaca México, la Universidad de Panamá, la Campaña Latinoamericana por el Derecho a la educación (CLADE), el Aquelarre de las Insumisas, el Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales (CLACSO)  y los gremios docentes que forman parte del movimiento internacional  en defensa de la educación pública y contra el neoliberalismo educativo, con quienes organizamos en medio de la pandemia, en septiembre de 2020, el Congreso Mundial de Educación. ///

Durante el año 2020 vivimos la más brutal ofensiva de las últimas décadas, del capital contra la educación pública, contra la escuela presencial. /// La pandemia del COVID-19 ha sido usada –y sigue siendo usada- para impulsar un modelo tecnocrático de educación virtual que dejó en solo un año, a millones de seres humanos sin posibilidad de continuidad del vínculo pedagógico. ///

Ahora, desde los foros económicos mundiales y el capital trasnacional, se nos habla de un reseteo o reinico educativo, una adaptación de los procesos de enseñanza aprendizaje a la nueva lógica del capital. /// Reinicio que amenaza a dividir al mundo educativo entre quienes tienen acceso al mundo tecnológico y quienes escasamente pueden acceder a un pupitre. /// El derecho a la educación va mucho más allá del consenso de los poderosos expresado en el ODS-4.

El año 2021 comienza en América Latina con el llamado a la vuelta a las aulas, algo que ya había ocurrido en algunos lugares a finales del 2020. /// Se habla del inicio de un modelo híbrido de enseñanza que combinará la presencialidad con la virtualidad. /// Pero esta vuelta se hace en condiciones terribles de profundización de las diferencias por origen de clase social, pues las escuelas a las cuales asisten los/las/les hijos(as) de los/las trabajadores(as), migrantes, madres de los sectores populares, no cuentan con la infraestructura mínima para enfrentar los desafíos educativos del siglo XXI. ///

La pandemia también nos mostró la importancia de la escuela pública PRESENCIAL y de sus maestros y maestras. La relación pedagógica en las aulas y en las educaciones populares demanda el encuentro, el diálogo y el aprendizaje compartido, algo que hacen millones de docentes en todos los territorios del mundo. /// Ninguna conexión, computadora ni inteligencia artificial puede sustituir el encuentro creativo que ocurre en las escuelas, ni la construcción conjunta de conocimientos. ///

Sin embargo, los y las educadores populares, los y las pedagogas críticas tenemos el reto de abordar de manera crítica nuestros enfoques previos sobre lo tecnológico, lo digital, lo virtual. /// No todas nuestras premisas eran correctas y eso nos invita al cambio /// La educación emancipadora demanda una epistemología crítica del mundo digital, desde la cual aproximarnos creativamente a lo nuevo, rompiendo con la instrumentalización que nos quieren imponer las trasnacionales de la tecnología y los gobiernos con mentalidad capitalista. ///

Este año se celebran los 100 años del nacimiento de Paulo Freire. ///Los trabajos del pedagogo brasileño iluminan a quienes trabajamos la ruptura con la reproducción cultural, tanto en la escuela como fuera de ella. /// Con Freire aprendimos a valorar el diálogo, el encuentro y la importancia de reconocer la voz de las personas explotadas y oprimidas. /// El esfuerzo de alfabetización de Freire sigue siendo monumental; una iniciativa para dominar los códigos del lenguaje escrito en la ruta para subvertir la dominación. ///

Hoy urge una nueva cruzada de alfabetización, tanto de la palabra escrita en clave de comprensión de la realidad opresora para transformarla y conseguir justicia social, como de los algoritmos digitales para evitar la prisión del instrumentalismo del consumo virtual. /// Esto no es fácil por la cultura instalada entre quienes resistimos al capital, de distancia respecto a lo tecnológico. /// Resistir al capitalismo cognitivo exige una alfabetización digital de los sectores explotados y oprimidos y en esa tarea los y las pedagogas críticas tenemos que llevar la iniciativa. ///

Muchos de los análisis críticos de la educación desestiman el impacto de las revoluciones industriales en lo educativo. /// El grueso de la producción teórica alternativa valora a la escuela y las educaciones en el marco de la primera y segunda revolución industrial. /// La reflexión pedagógica crítica sobre el impacto de la tercera revolución industrial era aún incipiente cuando nos sorprendió el inicio de la cuarta revolución industrial, que implica un giro de 180 grados en la dinámica educativa.  /// Esto se vio de manera nítida en la crisis cognitiva que se generó con el paso abrupto a la virtualidad en el contexto del COVID-19. /// Muchos no sabíamos cómo actuar en un contexto tan distinto

Necesitamos un debate renovado sobre la escuela emancipadora en el contexto específico de la tercera década del siglo XXI y en el marco de la cuarta revolución industrial. /// Eso sí, nuestro lugar de enunciación para abordar este tema, tiene que ser el de les pobres, los y las marginadas(os), los excluidos, las feministas que luchan contra el patriarcado, quienes luchan por el derecho a la tierra y el agua, contra el extractivismo, … todo ello en oposición a quienes plantean narrativas educativas funcionales al capital y las grandes corporaciones. ///

Tenemos que pasar de la crítica al currículo reproductor a la descurricularización de las escuelas. /// Y eso es más fácil decirlo que hacerlo, porque el sistema lleva años convirtiéndonos en administradores curriculares, en pedagogos a quienes muchas veces se nos dificulta trabajar sin un currículo preestablecido.  /// Descurricularizar la escuela es liberar los poderes creadores del trabajo compartido en el aula, como antídoto a la liberalización neoliberal.  /// Ello demanda búsquedas urgentes de enfoques didácticos, evaluativos, de planeación, gestión y definiciones curriculares que sean armoniosos entre si y acaben con el Frankenstein de modelos contrapuestos que inundan nuestras escuelas, despedagogizando lo educativo. ///

El modelo de formación docente, de formación de formadores actual … esta caduco.  ///Necesitamos una nueva formación de maestros y maestras que se fundamente en la lógica de los colectivos pedagógicos, del debate, la sistematización, la recuperación de los saberes pedagógicos y el diálogo con todos los integrantes de la escuela. /// Por ello la importancia de generar un encuentro armonioso entre pedagogías críticas y educaciones populares (en plural) para la formación crítica del magisterio. ///

De hecho, es un momento increíble de fusión entre los horizontes teórico-prácticos de las educaciones populares y las pedagogías críticas. /// La unidad del pensamiento educativo alternativo se muestra en lo escolar y lo comunitario, potenciando las posibilidades de encontrar las claves que nos permitan contribuir desde la educación, a cambiar las mentalidades, a transformar el sentido común de la sociedad del consumo, la competencia la mercantilización. /// Parafraseando a Freire decimos que lo importante es cambiar las prácticas de los hombres y mujeres que cambiarán al mundo. ///

La unidad de los gremios, sindicatos y pedagogos críticos en el 2020, para enfrentar al neoliberalismo educativo ha sido profundamente esperanzador.  /// Es posible detener al monstruo de la lógica del capital con la unidad del magisterio.  Están floreciendo caminos de unidad y esperanza en todo mundo. En hora buena. ///

Soy un discípulo de Simón Rodríguez y de Paulo Freire, dos gigantes de las educaciones populares que vivieron en distintos momentos históricos y enfrentaron a los poderosos de su tiempo. /// Ambos coincidieron en reivindicar el amor, la ternura, la risa, el abrazo, el juego libre, la solidaridad, la voz que increpa la injusticia en la educación.  /// Es precisamente desde esa mirada que realmente nos podemos acercar a una noción de justicia social contemporánea. ///

Este premio que me otorga el Proyecto democrático Paulo Freire es un soplo maravilloso de aliento para seguir navegando en el mar de las resistencias anticapitalistas.  Muchas gracias

 

Autor: Luis Bonilla – Molina

Fuente de la Información: https://luisbonillamolina.wordpress.com/2021/02/24/discurso-en-la-entrega-del-premio-de-justicia-social-otorgado-por-el-proyecto-democratico-paulo-freire-de-la-universidad-de-chapman/

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Venezuela: Gremios: existe casi 70% de ausentismo laboral en el estado

Los bajos salarios, aunado a las dificultades para conseguir efectivo para la movilización, han influido para que gran parte de los trabajadores no puedan volver a sus puestos con normalidad durante la flexibilización de la cuarentena por Covid-19. Al menos así lo dieron a conocer representantes de varios sectores que hacen vida en la región.

De acuerdo con el presidente de la Federación de Trabajadores del estado Anzoátegui (Fetranzoátegui), Tito Barrero, esta situación ha llevado a muchos a reducir su asistencia a sus lugares de labores a tres días a la semana, en vez de cinco.

“En el sector público es donde se nota más el ausentismo, por la miseria de salario que perciben. Casi 70% aplica esta modalidad, porque no les da para ir más días. El problema es que no tienen recursos”.

Barrero calculó que si una persona paga un pasaje diario para ir a su trabajo y retornar, tiene que desembolsar un millón de bolívares, cuando percibe Bs 1.200.000 al mes, aunque el gobierno nunca ha publicado la gaceta oficial actualizando el salario mínimo a ese monto.

“Si no unificamos al sector sindical, entonces no vamos a poder lograr el beneficio de los trabajadores”, instó Barrero.

Según Giovanni Yaguaracuto, secretario ejecutivo del Sindicato de Trabajadores de la Salud (Sintrasalud) y directivo de la Federación de Trabajadores del estado Anzoátegui (Fetranzoátegui), de los 80 mil empleados afiliados y agrupados en 120 sindicatos, deben quedar como 30 mil.

“Solamente en el sector público, como lo es educación y salud, se ha ido la mitad y la Federación abarca al sector construcción y hasta a la economía informal. En el hospital de El Tigre se han ido casi todos”, mencionó.

Además de que algunos asalariados se han marchado del país, el dirigente sindical destacó que ha crecido la modalidad de trabajar a domicilio por el pago en dólares, como es el caso de las enfermeras.

“Lamentablemente en Anzoátegui, las autoridades, tanto el gobernador como los diputados, no quieren tomar cartas en el asunto”.

El secretario de reclamos del Sindicato Único Nacional de Empleados Públicos del Sector Salud (Sunep-SAS) en el estado, Luis Reyes, apuntó que tras la circular que envió el ministerio, sobre la reincorporación a los puestos de trabajo, estas incomodidades fueron planteadas a los jefes de departamento.

“No les estamos diciendo a los trabajadores que no asistan, sino que nombremos una mesa de trabajo, tanto el patrón como los empleados, y lleguemos a un acuerdo para ver cómo podemos asistir y cubrir todos los puestos que están desocupados, porque hay una merma del personal”.

Estima que a nivel estadal, entre 2 y 3 mil empleados del sector se han marchado del país o abandonaron sus puestos por el “pírrico” sueldo que perciben actualmente.

Cuantificación
En el caso de educación, la presidenta regional del Sindicato Venezolano de Maestros (Sinvema), Maira Marín, manifestó que junto a la coalición sindical magisterial se encuentran cuantificando el impacto de la deserción laboral, y otros factores, que están incidiendo en la desmejora de la calidad de vida del educador.

“No solamente han dejado de ir a trabajar para ocuparse de otras labores. Tampoco van más a las escuelas, porque los salarios que devengan no alcanzan ni para pagar el transporte, mucho menos para cubrir otras necesidades”, dijo.

Marín recalcó que además de la falta de condiciones de bioseguridad y calidad de servicios que mencionó, son amenazados con despidos si no se reincorporan.

“En el estado hay personas que tienen hasta un año con el sueldo suspendido y nadie sabe por qué”, aseveró.

Fuente: https://eltiempo.com.ve/2021/02/25/gremios-existe-casi-70-de-ausentismo-laboral-en-el-estado/

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Venezuela: Ecologistas entregan propuestas en defensa de la Madre Tierra

América del Sur/Venezuela/26-02-2021/Autor(a) y Fuente: ultimasnoticias.com.ve

El sector Ecologista presenta las diferentes propuestas de Fomento y Gestión del Ecosocialismo en el Congreso Bicentenario de los Pueblos, con el objetivo de impulsar los principios de los Derechos de la Madre Tierra, refiere VTV en su página web.

Así lo destacó el ministro del Poder Popular para el Ecosocialismo, Oswaldo Barbera, quien estuvo acompañado de los diputados de la Comisión Permanentes de Ambiente, Recursos Naturales y Cambio Climático de la Asamblea Nacional  (AN) y los movimientos sociales ecologistas.

A través del Fomento y Gestión del Ecosocialismo se consideran las variables del desarrollo sostenible y las necesidades de mitigar y adaptarnos al cambio climático como parte de los retos, además, la protección de la biodiversidad, las fuentes hidrográficas de las montañas y elevar en la militancia una teoría de consumo más acorde con la naturaleza, como ejemplo, la utilización de los reciclajes.

“Desde el ministerio somos un instrumento para estructurar el discurso y las propuestas para nuestro pueblo. “No somos rectores y tampoco somos una institución dominante, no estamos aquí para estructurar el discurso de nuestro pueblo y debatir propuestas junto a los jóvenes y adultos que aman a la naturaleza y a la vida”.

Fuente e Imagen: https://ultimasnoticias.com.ve/noticias/mas-vida/ecologistas-entregan-propuestas-en-defensa-de-la-madre-tierra/

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SOBRE FORMACIÓN DOCENTE

No es manía de volver al pasado, sino un ejercicio de memoria histórica, especialmente cuando lo que dijimos en algún momento continúa en plena vigencia. Por ejemplo, en el Nº 119 de Cuadernos Educación del Laboratorio Educativo (1984) publicamos Redes Pedagógicas, una experiencia venezolana de formación docente. Lo hicimos en compañía de Yelixa Riera y María Mercedes Alejo. Hablamos allí de un ensayo nacido y avalado por el CEPAP-UNESR, con escuelas de las parroquias Caricuao y Antímano. En esta publicación relatamos la experiencia e intentamos teorizar un poco. Se trataba de establecer en las escuelas grupos de maestros en proceso de aprendizaje permanente, que mediante la reflexión y la transformación de su práctica cotidiana, acompañados/as por personal docente universitario conocedores del método de proyectos, pudiese también optar a la licenciatura en educación.

Sin ánimo de contar aquí tan interesante experiencia, podemos decir que las premisas que sustentaban este proceso aún son relevantes en la Venezuela de hoy. Por ejemplo: 1) Sólo se puede formar un/a educador/a reflexivo/a, transformador/a, humanista, en la medida que experimente en su vida y en su praxis una filosofía transformadora desde una ética solidaria. 2) Sólo se puede transformar la escuela venezolana en la medida que el personal docente pueda abrir espacios para reflexionar, criticar, revisar, proponer y desplegar proyectos práxicos y tenga libertad para acompañarse mutuamente (entreayudarse, al decir de Simón Rodríguez) y sustentar la vigilancia crítica de este proceso. 3) Sólo podemos mejorar la calidad educativa si las escuelas y las universidades abren un profundo diálogo de saberes, sincero, democrático, en igualdad de condiciones, para generar conjuntamente teorías y propuestas de acción pertinentes y factibles.

Finalmente, otro aspecto a destacar de este proceso era la utopía de conformar equipos de reflexión-acción en cada escuela, pero también en contacto permanente con escuelas cercanas, generando redes de formación permanente, de modo de iniciar y sostener un espiral virtuoso que generara un movimiento pedagógico de avanzada.

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Deforestación y minería ilegal alimentan focos de malaria en Venezuela

Fuentes: scidev.net/ [Foto: Cortesía de Jorge E. Moreno]

La minería ilegal de oro es la causante de la deforestación de vastas áreas en el sureste de Venezuela. La vegetación se socava para la extracción del mineral y deja lagunas artificiales.

Venezuela aumentó más de 10 veces los casos de malaria desde 2009 a 2019, y la mayor parte de los casos se concentran en áreas donde han aumentado la deforestación y la minería ilegal para la extracción de oro en los últimos años, según un estudio.

Estos hotspots o puntos calientes, localizados al sur del río Orinoco, son las parroquias San Isidro y Dalla Costa, en el municipio Sifontes del estado Bolívar, que reúnen más de 60 por ciento de los casos de la última década.

En cifras, Venezuela pasó de 41.943 casos de malaria en 2009 a 467.421 casos en 2019, “un crecimiento epidémico explosivo debido a una falta significativa de programas de control”, indica el estudio publicado en PLoS Neglected Tropical Diseases y realizado por investigadores venezolanos y extranjeros.

“El minero, al deforestar para extraer oro, genera lagunas artificiales, hábitats para el mosquito anófeles, transmisor de la malaria”. (María Eugenia Grillet, Instituto de Zoología y Ecología Tropical de la Universidad Central de Venezuela)

Sifontes ha perdido, desde 2007, más de 3.058 hectáreas de bosques debido sobre todo a la minería ilegal. “El minero, al deforestar para extraer oro, genera lagunas artificiales, hábitats para el mosquito anófeles, transmisor de la malaria”, explicó a SciDev.Net María Eugenia Grillet, investigadora del Instituto de Zoología y Ecología Tropical de la Universidad Central de Venezuela y autora principal de la investigación.

El análisis, que utilizó información epidemiológica y geográfica, encontró que en las zonas deforestadas había mayor cantidad de casos de malaria que en áreas cercanas y que las infecciones, tanto por Plasmodium falciparum como por Plasmodium vivax —las dos especies más frecuentes del parásito de la malaria en el país—, se incrementaron allí al tiempo que dismuyó la vegetación.

Los datos también muestran que la mayoría de los afectados fueron hombres entre 21 y 40 años, y que aproximadamente seis  de cada 10 de estos pacientes se dedicaban a la minería.

Como muchos trabajadores de otras regiones de Venezuela se han desplazado a Bolívar por la crisis económica para dedicarse a esta actividad, la enfermedad también se ha expandido hacia otros estados del país donde alguna vez estuvo erradicada.

El cuadro se hace aún más complejo cuando se le suma la migración masiva que se ha producido desde Venezuela, pues también afecta los esfuerzos para el control de la enfermedad de países vecinos como Brasil, Colombia y Guyana.

El Informe Mundial sobre Malaria en 2020 de la Organización Mundial de la Salud indicó que el progreso logrado en las Américas contra la enfermedad ha sufrido por el incremento de la epidemia en Venezuela, donde se registran 53 por ciento de los casos del continente.

El reconocimiento de la emergencia humanitaria por parte del estado venezolano, que permitió a organizaciones de asistencia humanitaria ingresar a las zonas maláricas, hace esperar una reducción de las cifras de la enfermedad.

Sin embargo, Grillet apuntó que lograr un verdadero control pasa por reconstruir el ahora desmantelado Programa Nacional de Malaria, que alguna vez fue ejemplo en la región.

El médico Juan Carlos Gabaldón, investigador de la española Universidad de Navarra, especializado en malaria, dijo a SciDev.Net que la detección de puntos calientes de la epidemia puede ayudar a que la inversión para controlarla tenga impacto, pese a los recursos limitados.

“Sin embargo, por priorizar ciertas áreas no deberían descuidarse otras. Por ejemplo, la malaria en comunidades indígenas, que no está concentrada en Sifontes sino en otros municipios, también amerita atención”, señala.

La estrategia de control también debería incluir la activación de centros para el monitoreo y la atención de salud de los migrantes durante su tránsito, y para ello hace falta cooperación transfronteriza, añadió Grillet.

Fuente: https://www.scidev.net/america-latina/news/deforestacion-y-mineria-ilegal-alimentan-focos-de-malaria-en-venezuela/

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Venezuela: Aproximación al tema de los Movimientos Sociales y la Educación Popular

Aproximación al tema de  los Movimientos Sociales y la Educación Popular

Lourdes Velásquez de Urbáez

Introducción

 Acercarse al tema de los Movimientos sociales y más aún a la Educación Popular, requiere de una investigación documental y de campo que permita contrastar la experiencia con la teoría y, si es posible, teorizar de nuevo esta temática.

Sin embargo, en este ensayo se ha abordado el tema, de la mano de especialistas como Luis Rigal y Mario Garcés quienes poniendo a disposición algunos artículos muy serios y rigurosos han permitido entender un poco el fenómeno sociológico de los Movimientos Sociales, tan arraigados en la historia viva de los pueblos y de quienes teniendo la vivencia en alguno que otro, no los hemos estudiado.

Estos movimientos acompañan al hombre en el devenir de historia acelerando, en muchos casos, procesos liberadores que con otro instrumento, bien sea de carácter  político, social, no se hubieran alcanzado.

Acá se recorrerán la trayectoria del Movimiento de los Sin Techo de Brasil, de los Piqueteros de Argentina y de los Campesinos e Indígenas de Bolivia, movimientos que cambiaron la historia de sus respectivas naciones al punto de hacer retornar el Peronismo en Argentina y llevar al gobierno de Bolivia al indígena Evo Morales.

El auge de los Movimientos Sociales Latinoamericano en el Siglo XXI le plantea nuevos retos al sector educativo por cuanto su fuerte tendencia pedagógica y la emergencia de la Educación Popular requiere de un nuevo docente, nuevos espacios, nueva manera de hacer docencia, repensar la educación, en fin, nuevas políticas educativas.

Este, viene a constituirse en un campo de investigación y de propuestas necesarias en la construcción de un sistema educativo más coherente con las demandas de los pueblos.

Desarrollo

Las grandes crisis son madres de grandes retos y grandes alternativas en la búsqueda de salidas a dichas crisis que tocan al pueblo en colectivo con una misma insistencia y con una única intención: la dominación.

Por ello, el hombre, ser social por excelencia, se agrupa con sus semejantes en la búsqueda no sólo de la solución, sino, además en la manera de hacerlo, en torno a cuál idea y con beneficios al mayor número de colectivos en miras a la a la ruptura con el yugo opresor y a la emancipación.

Ander –  Egg (2013) en su Diccionario de sociología expresa:

“Los movimientos sociales de la segunda mitad del S. XX surgen como reacción crítica frente a algunos problemas que afectan la vida cotidiana, como las consecuencias del deterioro del medio ambiente a causa de la industrialización, como forma de lucha por las discriminaciones en razón del sexo, etc.” (p. 251).

En esta definición se observa cómo es el momento crítico que trae en consecuencia el movimiento social, diciendo con su voz y sus acciones que sí hay salida: la organización, la participación; la búsqueda de la alternativa es en la cotidianidad, desde la cotidianidad y para la cotidianidad.

América Latina ha sido prolija en los Movimientos sociales que han surgido como luces en medio de la oscuridad que las sociedades contemporáneas atraviesan, destacándose en ellos el tema de la lucha, la emancipación y la ética de lo colectivo, observándose que todas estas cualidades persisten en estos primeros años del Siglo XXI.

En este sentido, Revilla Blanco (2010) expresa en su artículo América Latina y los Movimiento Sociales, su mirada a estos colectivos:

“Si nos detenemos en el análisis de los últimos 30 años en la región, el período en el que los países de América Latina retomaron la democracia y la vieron consolidarse como sistema de gobierno, podemos observar que los movimientos sociales fueron claves tanto en la oposición a las dictaduras como en la transición a las democracias.” (p. 53)

Es importante destacar la persistencia en la lucha de estos movimientos en sus acciones de calle, que visibilizaron a quienes estaban anulados en la sociedad y sus voces calladas, incluso representadas por personeros políticos que nada tenían que ver con ellos.

Esta específica circunstancia trae en consecuencia una manera, un estilo diferente por cuanto, de acuerdo a lo expresado por Luis Rigal en su artículo Gramsci, Freire y la Educación Popular, a propósito de los Nuevos Movimientos Sociales:

“Este proceso, complejo y contradictorio, de disolución – reconstrucción del tejido social y de la organización social y de pérdida de legitimidad de los actores colectivos tradicionales, estuvo signado también por la aparición de nuevos actores – trabajadores desocupados; fábricas recuperadas; asambleas en barriales; ambientalistas – y por el fortalecimiento de otros movimientos sociales – campesinos, derechos humanos.” (p. 2)

La misma circunstancia crítica que viven los pueblos, hacen surgir nuevos actores sociales que toman la palestra en la vida pública con discurso y acciones sociales políticas y culturales que hacen nuevo todo el acontecer de la vida ciudadana, pues dan origen a una nueva ciudadanía, a un nuevo modo de entender la condición de ciudadano.

Algunos rasgos que caracterizan a los movimientos sociales son los siguientes de acuerdo a Calderón (1986) citado en Garcés:

“a. Una estructura participativa resultado de su propia experiencia de participación y lucha.

  1. Su propia temporalidad definida por su acción frente al sistema de relaciones históricas.
  2. Un desarrollo en forma multilateral y heterogénea en el espacio, con desarrollo desigual de la conciencia, la organización y la economía.
  3. Efectos sociales específicos sobre las relaciones sociales y la sociedad.” (p. 59)

Evidentemente, estas características tienen que ver con la manera cómo surgieron estos movimientos, que no por decretos, sino jalonados por el momento histórico.

Las atroces dictaduras que vive la región en la década de los sesenta y en muchos casos, disfrazados de democracia, las solapadas atrocidades de los cuerpos represivos, las persecuciones a las ideas y a las voces disidentes, fueron despertando en esos nuevos actores que ya mencionara Luis Rigal: mujeres, jóvenes, indígenas, campesinos, cristianos, esas necesidades de asociarse, y surge, por ejemplo, una mirada diferente de leer el  Evangelio desde la vida, desde el presente, desde el trabajo, la escuela, el barrio y ni sólo desde el púlpito.

Toda esta situación conflictiva, unida a la Revolución Cubana, orienta hacia allá la mirada de estos nuevos actores que comienza a ver su utopía realizable y su sueño realizable en otro nuevo mundo posible.

Surgen del seno de la Iglesia Católica las Comunidades Eclesiales de Base, movidas por el espíritu del Concilio Vaticano II y los Documentos producidos en las Conferencias de Medellín y Puebla en la que se expresa de manera clara y diáfana la opción preferencial por los pobres.

Con sus características específicas en cada país de la región, estas comunidades, haciendo vida en el corazón de los barrios, de los necesitados y excluidos de siempre, se convirtieron en semilleros de nuevos movimientos sociales que se fueron esparciendo por todas partes haciendo visibles a los tullidos, los ciegos y los leprosos del Evangelio que no son más que los mismos rostros conocidos de la vida cotidiana.

En este sentido  las Comunidades Eclesiales de Base despertaron y siguen despertando un espíritu de liberación en los pueblos, dejando un saldo organizativo que ha dado pie a que mujeres, negros, indígenas, estudiantes, en fin nuevos actores sociales se agrupen en la búsqueda de nuevos caminos de participación y lucha por sus derechos y el derecho de los pueblos a la libertad, soberanía, autonomía.

Se destacan en América Latina movimientos sociales con una fuerte incidencia en la liberación de sus naciones. Garcés enfatiza tres grandes movimientos que han impactado la vida en sus países y en toda la región; estos son el Movimiento de los Sin Tierra en Brasil, el de los Piqueteros en Argentina y el de los Campesinos e Indígenas en Bolivia. De la mano de este autor se revisarán estos tres movimientos.

El Movimiento de los Sin Tierra nació con los campesinos brasileros que habían sido expulsados motivado al proceso de modernización de la agricultura. Ante esta situación deciden quedarse en el campo y desde allí emprender la lucha por la tierra; así nació el movimiento, con una base social dispuesta a luchar, a no emigrar hacia las ciudades, ni tampoco a ser colonizados.

Este movimiento, además de tener una raíz de orden económica y hasta laboral, tiene también una raíz ideológica cristiana a través de la creación de la Comisión Pastoral de la Tierra, según lo señala Joao Pedro. Esta comisión estaba liderada por la Teología de la Liberación que le fue dando forma ideológica a este movimiento tan importante.

Este autor resalta el carácter popular del movimiento por cuanto da apertura a la participación de la familia extendida completa y porque, además de ello, participan hombres y mujeres de la ciudad que también luchan por la tierra.

El Movimiento de los Sin Tierra une a la lucha campesina, la lucha de clases, lo que le da fortaleza y cohesión con otros colectivos revolucionarios. La conquista de la tierra no es el objetivo único del movimiento; espacio que se conquista, es un espacio que se consolida en salud, educación, vivienda, empleo y servicios.

Los integrantes de este movimiento tienen su organización interna, su disciplina y la formación de sus propios cuadros. Este movimiento se somete regularmente a autoevaluaciones y reajustes a través de encuentros, congresos y jornadas que realizan cada cierto tiempo.

Entre sus componente más fuertes se destaca la educación realizando cursos de capacitación para los educadores de los asentamientos, seminarios y encuentros que les permite visualizar cuál es la educación que requiere el movimiento agrario, de acuerdo al desarrollo del país y las necesidades planteadas por las comunidades. También estos eventos educativos se encaminan a la formación ideológica de los cuadros del movimiento.

El movimiento de los Piqueteros en Argentina, surge  en los años 90 como salida de lucha de los desempleados, quienes a manera de protesta, cierran las rutas para exigir que sus voces sean escuchadas. Se le sumaron, a sus reclamaciones, las comunidades organizando piquetes y asambleas populares demandando empleo para los desocupados. Sus demandas pronto se convirtieron en la expresión del descontento con el gobierno como lo expresa con tanta claridad, Garcés:

“El resultado fue que de desempleados se transformaron en piqueteros, de negados en la sociedad fueron ganando paulatinamente en visibilidad… Entonces fueron un actor social relevante en la crisis de la sociedad argentina del 2001 que hizo visible el descontento con el sistema político con su consigna ¡Que se vayan todos!.” (p. 63)

El movimiento social entonces pasa de ser una búsqueda de solución a una problemática puntual, a ser la voz de todo un pueblo que comparte la misma suerte, la misma opresión pero también la misma esperanza libertaria. De esta lucha el resultado fue la salida del gobierno de Fernando de la Rúa.

El Movimiento de los Piqueteros ha dado origen a otros movimientos y a otras organizaciones sociales agrupando no sólo a los trabajadores, sino también a los más pobres.

En Bolivia, en la primera década del S.XXI, surge un Movimiento o Movimientos Campesinos e Indígenas que estremecen el país y hasta se logra llevar al gobierno al indígena Aimara Evo Morales, transformando el estado Boliviano a través de un proceso constituyente que le ha costado una fuerte lucha desde su partido creado por ellos, el MAS.

Nuestro autor, Garcés, citando a Chávez y Mokrani (2007) expresa:

“En los movimientos sociales en Bolivia se distinguen varios Hitos:

  1. La marcha por el territorio y la dignidad, que protagonizaron en 1990, los pueblos indígenas de las Tierras Bajas….
  2. La marcha en 2002 de los pueblos de las Tierras Bajas por la Asamblea Constituyente….
  3. La Guerra del Agua en Cochabamba en la que participaron varias organizaciones sociales…
  4. Control de las carreteras y de los espacios conquistados por los indígenas en el año 2000 a través de movilizaciones continuas…
  5. La Guerra del Gas entre el 2000 y el 2003 en el que todas la organizaciones y movimientos sociales reclamaban por la manera cómo la clase elitista manejaba el tema de los recursos naturales…” (p. 65)

Es decir, este movimiento Social ha vivido de  lucha en lucha pero también de logro en logro, dando pasos agigantados hacia la definitiva emancipación.

Estos tres movimientos que Garcés tomó sabiamente de ejemplo, al igual que otros importantes que acá no se mencionan, otorgan gran importancia a la educación, pues ésta garantiza la permanencia de sus valores en  las nuevas generaciones y fortalece ideológicamente a los cuadros para que sigan liderando las luchas que el día a día comunitario va presentando.

En estos nuevos movimientos sociales, la cuestión educativa tiene características que en cierta medida pudieran llamarse alternativas que apuntan a una educación que responda a grupos  en constante lucha por sus reivindicaciones y con la determinación de resguardar no sólo sus conquistas, sino también su cultura.

Rigel, en su artículo sobre los movimientos sociales y la educación señala a los Movimientos sociales como espacios educativos ya que observa en ellos una centralidad en la educación y una práctica política unida a la práctica pedagógica en la lucha por la hegemonía.

Los Movimientos Sociales reconocen la importancia de los saberes construidos comunitariamente por los colectivos, con sus tradiciones, creencias y en la resolución de sus problemáticas locales y nacionales; pero al mismo tiempo perciben la demanda de una educación, en cierto modo, formal, por lo que sienten la necesidad de la alfabetización y la emprenden a través de talleres y de los métodos más creativos, de educación lo que los aproxima, en la realidad a los planteamientos de Freire.

En este sentido, Rigel afirma:

“Esta perspectiva freiriana, estrictamente una perspectiva político – pedagógica, puede ser entendida como una pedagogía para las clases subalternas:

  • en lo político, defiende una opción de transformación social, denunciando los componentes opresivos del orden establecido y defendiendo un modelo más igualitario y más justo.
  • en lo pedagógico, critica frontalmente las concepciones tradicionales (verticalistas, abstractas y acríticas) de enseñanza – aprendizaje y promueve propuestas dialógicas, con circulación de los roles de educador y educando, basadas en la recuperación y revalorización crítica de los saberes del conjunto de los involucrados en el acto educativo y promueve una mirada crítica de la realidad concreta.” (p. 5)

En los Movimientos Sociales, la educación promueve una reflexión de la realidad circundante a fin de transformarla de acuerdo a las aspiraciones de los colectivos, en una relación dialógica entre los diversos actores del hecho pedagógico.

Todos los espacios de los Movimientos Sociales son percibidos como espacios pedagógicos, al mismo tiempo que espacios de lucha; también la lucha por los saberes se libra en buena lid en estos movimientos.

Es una educación que sale del espacio escolar, de lo meramente académico, de lo extremadamente vertical y riguroso, una educación más bien humana y humanizadora, emancipada y emancipadora, una Educación Popular.

Conclusiones

Lo que se ha hablado hasta acá, de la mano de quienes se han dedicado a estudiar la temática permite concluir que:

Los Movimientos sociales han sido en la historia punta de lanza de los grandes cambios que ha vivido la humanidad; estos aunque influidos por alguna ideología, son respuestas espontáneas y rebeldes a la cultura de dominación.

Su esencia es una lucha por la emancipación, por un nuevo orden social que vislumbran posible, por una utopía que exigen ver realizada.

En América Latina recobraron fuerza en la década de los 70 para dar respuesta a los regímenes militares, a las democracias ocultadoras de dictaduras y a la acción colonizadora e imperial de fuerzas extranjeras.

Son movimientos que agrupan, mujeres, trabajadores, desempleados, campesinos, indígenas, en fin, colectivos que deciden organizarse desde su experiencia de grupo.

Esto no implica que se cierren a la participación de otros colectivos, más bien se enriquecen en la diversidad y se abren de lo local a lo nacional.

La Educación Popular, que emerge de los movimientos sociales es un claro ejemplo de la Pedagogía Emancipadora, humanista, cercana, creativa, dialógica.

En estos movimientos se entrecruza lo político con lo social y cultural y por supuesto, lo educativo. Acá lo pedagógico es fundamental y busca adecuarse a las propias características del colectivo, reconociendo la importancia de los saberes comunitarios y al mismo tiempo la búsqueda de una educación formal. Puesto que “el elemento popular siente, pero no siempre comprende o sabe; el elemento intelectual sabe, pero no siempre comprende y, especialmente, siente.” Gramsci.

Bibliografía

Ander Egg. Diccionario de sociología. Centro Internacional Miranda. Caracas 2013.

Revilla Blanco María. América Latina y los Movimientos Sociales: El presente de la Rebelión del coro. Revista Nueva Sociedad 227. 2010 www.nuso,org.

Artículos:

Garcés, Mario. Movimientos Sociales y Educación Popular.

Rigal, Luis. Gramsci, Freire y la Educación Popular.

 

Autora: Lourdes Velásquez de Urbáez

Fuente: CII OVE

 

 

 

 

 

 

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