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UNICEF: En Yemen, una niña pasa de sentarse en el suelo a ser la primera de la clase

UNICEF- Yemen/ 27 de septiembre de 2016/Por Ansar Rasheed/ Fuente: http://www.unicef.org/

En la comunidad marginada de Muhamasheen, en Yemen, los niños y las familias viven en la pobreza, están al margen de la sociedad y deben enfrentarse a la discriminación día tras día. Rania está decidida a superar esos obstáculos, y se esfuerza para seguir siendo la primera de la clase en la escuela.

Rania, que está en octavo curso en la escuela Al-Seddek, en Aden, es una increíble niña de 13 años. A pesar de diversas dificultades y presiones como la marginación y la pobreza, esta niña no ha dejado de ir a la escuela ni en los peores momentos del conflicto que hay en Yemen. Aunque sus compañeros a veces se burlan de ella y otras veces debe sentarse en el suelo si la clase está llena, es la primera de la clase.

La familia de Rania pertenece a la comunidad marginada de Muhamasheen, estancada en lo más profundo del espectro social de Yemen. Las expectativas de empleo son bajas para los miembros de esta comunidad, que los únicos trabajos que encuentran son como jornaleros con poca seguridad. Estas normas sociales prevalecen incluso durante el conflicto existente.

En la actualidad, el padre de Rania está desempleado y su madre trabaja de sirvienta. Su madre y su abuela se encargan de hacer todo lo posible para garantizar que Rania tenga el mejor comienzo de vida posible.

Imagen del UNICEF
© UNICEF Yemen/2016
Rania con su abuela. “Ella es la que cree en mí, la que me apoya”, dice Rania.

“Haré todo lo que pueda para que mi nieta siga yendo a la escuela. Me veo reflejada en ella y no quiero que acabe como yo. Quiero verla ir a la universidad, conseguir un trabajo respetable y formar una familia feliz”, sostiene su abuela, Hajjah Halima. “Es muy lista y le va muy bien la escuela. Admiro su capacidad de superación y el valor que se ve en sus ojos, la paciencia para enfrentarse a todas las dificultades que se le presentan por ser una niña pobre y marginada”.

Regreso a la escuela

A finales de septiembre comienza el nuevo curso y, aunque muchos de sus compañeros han crecido en circunstancias más fáciles, algunos ya han abandonado la escuela y otros siguen siendo analfabetos. El primer día de clase, Rania estará ahí como siempre, con la mochila y los lápices proporcionados por UNICEF.

En la actualidad, UNICEF está llevando a cabo su campaña anual de Regreso a la escuela para ayudar al mayor número de estudiantes posible a regresar a las clases normales. El conflicto existente sigue causando estragos en la educación de los niños, por lo que esta iniciativa facilita clases de recuperación, materiales de aprendizaje y espacios educativos temporales en zonas donde las escuelas han quedado dañadas o destruidas por el conflicto.

Al final del pasado año académico, más de dos millones de niños habían abandonado la escuela. Muchos necesitarán apoyo psicosocial intensivo para poder sobrellevar los horrores de la guerra y no dejar de ir a la escuela.

Gracias a la generosa ayuda y la financiación de diversos donantes como la fundación “Educa a un niño” de Qatar y el Gobierno de Japón, UNICEF garantiza que los niños reciban los materiales de aprendizaje y la ayuda psicosocial que necesitan para seguir yendo a la escuela a pesar del conflicto.

A muchos niños como Rania, esta situación solo les aumenta las ganas de continuar. “Quiero recibir una educación para llegar a ser una profesora, educar a otros niños y tratarlos bien”, sostiene. “Quiero ir a la universidad y ser diferente de las niñas de donde yo vivo. Me encanta leer libros y escribir. Todos los niños deberían ir a la escuela, y no lo contrario”.

> Aquí puede obtener más información sobre las necesidades humanitarias de los niños de Yemen

Fuente de la Noticia:

http://www.unicef.org/spanish/infobycountry/yemen_92760.html

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Al borde de la hambruna: la tragedia de más de un millón de niños desnutridos por la cruenta guerra de Yemen

Asia/Yemen/22 de septiembre de 2016/Fuente: bbc

ADVERTENCIA: Algunas de las imágenes de este video pueden herir tu sensibilidad.

http://www.bbc.com/mundo/noticias-internacional-37434766

A principios del año pasado, el gobierno de Yemen fue derrocado por fuerzas rebeldes.

Desde entonces, una coalición liderada por Arabia Saudita -respaldada por países de Occidente y de la región- ha llevado a cabo una campaña militar para destituir a los rebeldes.

Más de 3.500 civiles han muerto por causa del conflicto.

Yemen siempre ha sido muy pobre, pero la guerra ha empeorado la situación y ahora el país está al borde de una hambruna.

Más de dos millones de personas están desnutridas. Un millón y medio son niños.

La corresponsal del servicio árabe de la BBC Nawal al Maghafi visitó una zona en donde las agencias de ayuda humanitaria más importantes han dejado de operar por los constantes ataques.

Fuente: http://www.bbc.com/mundo/noticias-internacional-37434766

Imagen: ichef.bbci.co.uk/news/1024/cpsprodpb/85CC/production/_91325243_p048m2b8.jpg

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La ONU pide investigar la violación de derechos humanos en Yemen

Asia/Yemen/30 de agosto de 2016/Fuente: swissinfo.ch

La ONU reclamó este jueves la creación de un organismo internacional independiente para investigar las violaciones de los derechos humanos en Yemen, donde una guerra ha causado más de 6.600 muertos en 17 meses.

En un informe publicado en Ginebra, el Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos denuncia los ataques contra mercados e instalaciones médicas y escolares, el uso de minas terrestres y de bombas de racimo y el reclutamiento de niños para convertirlos en soldados.

«Los civiles de Yemen sufren de forma insoportable desde hace años por conflictos armados», declaró el alto comisionado de la ONU para los derechos humanos, Zeid Ra’ad Al Hussein, en un comunicado.

«Y siguen sufriendo sin ninguna justicia (…) mientras prevalece la impunidad para las personas responsables de las violaciones y de los atropellos cometidos contra ellos», declaró el alto comisionado de la ONU para los derechos humanos, quien ha pedido una «investigación internacional independiente para realizar investigaciones exhaustivas sobre Yemen».

El 23 de agosto se contabilizaban 3.799 civiles muertos y otros 6.711 heridos en el conflicto, la mitad de ellos en ataques aéreos de la coalición dirigida por Arabia Saudita. El informe estima que al menos 620 niños murieron y 758 quedaron mutilados desde julio de 2015.

En marzo de 2015, Riad se puso a la cabeza de una alianza árabe para frenar el avance de los rebeldes hutíes, respaldados por Irán y partidarios del expresidente Ali Abdalá Saleh, que progresaban en Yemen tras haber conquistado la capital, Saná, y obligado a huir al presidente Abd Rabo Mansur Hadi.

El informe del alto comisionado señala que al menos 7,6 millones de personas, entre ellos tres millones de mujeres y niños, sufren de desnutrición y penuria de agua potable, y al menos tres millones de personas se vieron obligadas a huir de sus hogares en este país, el más pobre de la península arábiga.

El Gobierno yemení creó en septiembre de 2015 una comisión nacional de investigación, pero el informe de la ONU lamenta que no haya contado «con la cooperación de todas las partes» ni abarcara todas las zonas de Yemen.

Fuente:http://www.swissinfo.ch/spa/la-onu-pide-investigar-la-violaci%C3%B3n-de-derechos-humanos-en-yemen/42397850

Imagen: www.swissinfo.ch/image/42397852/3×2/640/426/d5ead59cb247d218b3f1611331095313/Tf/image-doc-fl6uv.jpg

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«Diez años y divorciada»: La traumática historia de un matrimonio forzado

Asia/Yemen/27 de agosto de 2016/Fuente: lavanguardia

La directora yemení Khadija Al-Salami retrata la dura situación de las niñas de su país que son obligadas a casarse.

Nojoom es una niña yemení de diez años que sueña con tener una muñeca con la que jugar. Su familia, de origen humilde, no tiene ni para pagar el alquiler de una vivienda decente donde pueda vivir la menor junto a sus padres y sus hermanos. Su progenitor tiene dos esposas, no encuentra trabajo y la única vía de escape que ve para subsistir durante un tiempo es casar a la pequeña de la casa con un hombre de 30 años. El acuerdo es legítimo y la dote ofrece a la familia una renta pequeña y una boca menos que alimentar. Esta situación, tan normal en Yemen, es de las que dejan al espectador con cara de asombro, incapaz de asumir tal atrocidad sin sentir un escalofrío por todo el cuerpo. ¿En qué lugar queda el derecho de esa niña a ser simplemente una niña, a poder jugar con sus amigas y llevar una vida digna?

El caso de Nojoom, recogido por la directora yemení Khadija Al-Salami en su película Diez años y divorciada, no es solo el retrato de un matrimonio forzado y la pesadilla que le toca experimentar a una niña que es arrancada de los brazos maternos y de su sonrisa infantil para convertirse de un día a otro en mujer de alguien que truncará para siempre sus sueños, golpeándola y abusando sexualmente de ella. La propia Al-Salami vivió tan traumático episodio a la edad de once años, cuando fue forzada a contraer matrimonio pese a su corta edad. Ella tuvo la suerte de poder cambiar el rumbo de su destino gracias al apoyo de su madre, una mujer que también fue obligada a perder su niñez a los 8 años. Decidida a mandar al traste los arcaicos valores familiares de la sociedad de su país, finalmente Al-Salami abandonó a su marido y se fue a Estados Unidos a estudiar cine con una beca.

 Gracias a su propia experiencia y a la de Noyud Ali, una niña yemení que consiguió que un juez se apiadara de su trágica situación familiar y le concediera el divorcio, la realizadora se ha dedicado en cuerpo y alma a difundir un discurso potente contra este tipo de injusticias. Y es que en Yemen no hay ningún requisito de edad para el matrimonio y más de la mitad de las niñas se casan antes de cumplir los 18 años, muchas de las veces con hombres mucho mayores que ellas y que tienen otras esposas, según un estudio de la Universidad de Sanaa.
La joven protagonista de 'Diez años y divorciada'
La joven protagonista de ‘Diez años y divorciada’ (Splendor Films)

El Parlamento yemení intentó aprobar una ley en 2008 que situaba la edad mínima para casarse en 17 años. Sin embargo, la propuesta no salió adelante porque muchos diputados argumentaron que violaba la ‘sharia’ o ley islámica. Y aquí nos preguntamos ¿cómo puede ser posible que ocurra algo tan cruel y nadie haga nada al respecto?.

Al-Salami cree que la única manera de luchar contra esta terrible situación es a través de la educación. El matrimonio infantil afecta cada año a 15 millones de niños en todo el mundo y al hecho de que todavía siga vigente contribuye la pobreza, el analfabetismo, la falta de leyes y una mala interpretación de la religión y las tradiciones. “Hay que concienciar sobre lo que ocurre y la educación es una herramienta de cambio. Si atacas a la gente, es muy difícil cambiar las cosas. Yo no quería que hiciera la película alguien que no conoce esa cultura”, aseguró la cineasta el pasado mes de abril en San Sebastián, donde su filme ganó el Premio del Público del Festival de Cine y Derechos Humanos.

La narración que describe la realizadora es de las que golpea conciencias y no deja a nadie indiferente. Una película de visión obligada que pasó no pocos problemas durante su rodaje: desde impedimentos técnicos hasta un bombardeo de Al Qaeda en un edificio cercano al de la filmación.

“Nunca he olvidado lo que me pasó. Sé lo que sienten las niñas, la soledad, el trauma, el dolor físico y psíquico. Muchas no sobreviven a su noche de bodas y, si lo hacen, pueden morir al dar a luz. No están preparadas para tener sexo ni para ser madres”, explicó la primera directora de cine de Yemen.

Al-Shalami ha podido dejar atrás un capítulo oscuro de su vida porque no se resignó a seguir con una horrible tradición. Hoy en día vive en Francia, ha recibido numerosos galardones y es autora de 25 documentales que retratan los roles de las mujeres y jóvenes de su país. La lucha continúa.

Fuente: http://www.lavanguardia.com/cine/20160826/404187912818/diez-anos-y-divorciada-matrimonio-infantil-forzado.html

Imagen: www.lavanguardia.com/r/GODO/LV/p3/WebSite/2016/08/25/Recortada/img_astrid_20160825-161440_imagenes_lv_otras_fuentes_10anos1-kBlH-U404187912818fDE-992×558@LaVanguardia-Web.jpg

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De regreso en la escuela tras luchar en el conflicto de Yemen

Yemen/28 de julio de 2016/Fuente: UNICEF

En mayo de 2015, durante la escalada de las hostilidades en Yemen, Ahmed, de 16 años, fue reclutado a la fuerza para luchar en uno de los bandos del conflicto. Después de unos meses en el frente de batalla, se escapó y regresó a casa. Ahora ha reanudado sus estudios y se está esforzando mucho para ponerse al día con todo lo que ha perdido.

ADÉN, Yemen, – La habitación estaba en silencio, con la única iluminación de una lámpara recargable colocada en una esquina gracias a la cual Ahmed*, de 16 años, leía sus libros. Desde que en marzo de 2015 Yemen se sumió en un brutal conflicto, la electricidad ha sufrido graves daños en todo el país, incluido el distrito de Crater, en la provincia de Adén, al sur del país, donde vive Ahmed.

Ahmed estaba sentado tranquilamente, inclinado para leer sus libros. Estaba estudiando para los exámenes de fin de curso. Su madre le compró una lámpara recargable para ayudarlo a ponerse al día con la escuela y recuperar el tiempo perdido durante el conflicto. Ahmed aseguró estar convencido de querer continuar sus estudios.

>> Aquí puede leer el informe de UNICEF: Niños al borde del abismo

Esquivando balas

El conflicto fue una amenaza no solo para su educación, sino también para su vida. Ahmed nos contó que una noche de mayo de 2015, cuando el conflicto se intensificó en Adén, un grupo de hombres jóvenes llamó a su puerta. Cuando la abrió, le lanzaron una pistola y le dijeron que actuara como un hombre y los siguiera. Confuso y enfadado, no tuvo otra elección , ya que carecía de poder alguno en ese momento. En lugar de estar en la escuela, se encontró a sí mismo esquivando balas y combatiendo en una guerra de la que no era responsable.

Hasta ahora, Ahmed no se acordaba (o no quería acordarse) de las horribles situaciones que presenció durante el conflicto. El sonido de armas muy potentes, las balas pasando a su alrededor y largos viajes con el estómago vacío son solo algunas de las terribles experiencias de las que habla con reticencia.

Imagen del UNICEF
© UNICEF Yemen/2016/Rasheed
Niños de la escuela de Manssorah, en Adén, siete meses después de que esta reabriera sus puertas tras el cierre por el conflicto.

Regreso a la escuela

En todo este tiempo, Ahmed nunca ha renunciado al sueño de retomar su vida normal y regresar a la escuela. En diciembre del año pasado, logró escaparse del campamento militar y volvió con su familia. Recuerda que, cuando iba de camino a casa, vio a otros niños que aún siguen con los combatientes.

“Me encontré con varios controles de seguridad atendidos por niños flacos de mi edad y más jóvenes, todos cargados con armas que pesaban más que ellos”, aseguró. “Vi el miedo en sus ojos. Sé muy bien lo que es el miedo y cómo te hace sentir”.

Sus padres lo han apoyado mucho. Lo recibieron en casa con los brazos abiertos y lo están ayudando con su educación.

La madre de Ahmed contó que, cuando reclutaron a su hijo y durante el periodo en que estuvo allí, ella lloraba y rezaba por que regresara. Ahora que ha vuelto a casa, ella hará todo lo posible por ayudarlo a seguir con sus estudios y alcanzar sus sueños.

Orgulloso de mostrar las notas que sacaba antes en la escuela, Ahmed demostró que, hasta ahora, le está yendo bien. Uno de sus profesores, que se identificó como Adel, confirmó que Ahmed está progresando muy bien en su clase. Adel aseguró estar orgulloso de tener a Ahmed de nuevo en la escuela y lo describió como un “estudiante muy trabajador y educado”.

Ahora, asentado de nuevo en su hogar, Ahmed no puede ni imaginarse tener que volver al conflicto. “Debemos decir no a la guerra”, afirmó. “Ya hemos tenido suficiente”.

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Desde la escalada del conflicto de Yemen en marzo de 2015, las Naciones Unidas han registrado y confirmado que hay más de 1.000 niños reclutados por los bandos del conflicto. UNICEF está trabajando con el Ministerio de Educación para rehabilitar las escuelas y proporcionar materiales de aprendizaje y enseñanza por todo el país, de modo que los niños puedan retomar y continuar su escolarización.

>  Aquí puede saber más sobre las necesidades humanitarias de los niños de Yemen

Fuente: http://www.unicef.org/spanish/infobycountry/yemen_92016.html

Imagen: http://www.unicef.org/spanish/infobycountry/images/13356ibc1.jpg

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Escuelas inaccesibles para millones

Londres/09 de Junio de 2016/hrw.org

Por: Human Rights Watch

La adopción de leyes y políticas discriminatorias, y la falta de voluntad política para dar cumplimiento a obligaciones básicas en materia de derechos humanos por países de todas las regiones del mundo, impiden que millones de niños y adolescentes puedan asistir a la escuela, señaló Human Rights Watch en un informe difundido hoy. Altos funcionarios gubernamentales del área de educación, responsables de políticas globales y agencias de financiamiento se reunirán en Noruega del 13 al 16 de junio para adoptar medidas que mejoren el acceso a la educación de calidad a nivel mundial.

El informe de 89 páginas, denominado “The Educaction Deficit: Failures to Protect and Fulfill the Right to Education in Global Development Agendas» [Déficits en materia educativa: ausencia de medidas de protección y cumplimiento del derecho a la educación en las agendas globales de desarrollo], sostiene que, dos décadas atrás, los gobiernos de países de distintas regiones del mundo expresaron el compromiso de eliminar los obstáculos a la educación para las generaciones venideras. Sin embargo, Human Rights Watch evidenció que, en muchos países, las leyes y prácticas discriminatorias, los aranceles elevados, la violencia y otros factores excluyen a niños y adolescentes de las escuelas. El informe se elaboró a partir de investigaciones   llevadas a cabo por Human Rights Watch en más de 40 países, a lo largo de casi dos décadas. La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, UNESCO,  ha informado que 124 millones de niños y adolescentes no asisten a la escuela.

“Es inconcebible que, en 2016, se niegue el derecho a la educación a millones de niños y adolescentes de todo el mundo”, manifestó Elin Martínez, investigadora de derechos del niño de Human Rights Watch. “La escasa supervisión gubernamental y la carencia de políticas que prohíban de manera absoluta la discriminación a menudo permiten que los funcionarios del área educativa tengan atribuciones ilimitadas para decidir quiénes pueden entrar a una escuela y quiénes quedan afuera”.

La totalidad de los 196 países miembros de la ONU han asumido obligaciones jurídicas frente a todos los niños en su territorio. La Convención sobre los Derechos del Niño, que ha sido ampliamente ratificada, así como varios otros tratados internacionales y regionales, estipulan requisitos detallados para proteger el derecho a la educación. En septiembre de 2015, los gobiernos acordaron trabajar conjuntamente con el fin de “garantizar una educación inclusiva y de calidad para todos» para el año 2030, como parte de los Objetivos de Desarrollo Sostenible impulsados por la ONU, y establecieron así como meta global el acceso a la educación secundaria por primera vez. Los objetivos de desarrollo anteriores, los Objetivos de Desarrollo del Milenio, procuraron asegurar en forma plena el acceso a la educación primaria y su finalización, aunque todavía no han sido alcanzados no han sido alcanzados.

A pesar de la obligación de eliminar los aranceles en la escuela primaria y otros costos asociados, que se encuentra en numerosos tratados internacionales, muchos países —como la República Democrática del Congo y Sudáfrica— aplican aranceles que las familias no pueden solventar. Los aranceles y costos asociados de la educación secundaria impiden que millones de adolescentes en Bangladesh, Indonesia y Nepal, por ejemplo, puedan completar al menos nueve años de educación.

“Mi último año de escuela fue el primer semestre del primer año de la escuela media. Deseaba realmente continuar estudiando, pero la verdad es que no tenía el dinero necesario”, contó Endah, que abandonó la escuela en Indonesia para emplearse en el servicio doméstico cuando tenía 15 años. “El arancel de la escuela era de 15.000 rupias (USD 1,10) por mes. Pero lo que realmente no podía pagar era el ‘arancel edilicio’ y el uniforme. Tenía un valor de 500.000 rupias (USD 37)… Luego, cada semestre teníamos que comprar libros”.

La violencia en contextos escolares afecta a más de 246 millones de niños, según indica el organismo de la ONU para la infancia, UNICEF. Los castigos físicos en las escuelas —una práctica que equivale a tortura y trato degradante, y afecta negativamente la capacidad de aprendizaje de los niños— es lícita o sigue siendo generalizada en países como Tanzania, Sudáfrica y muchos estados de EE. UU.

Entre los factores que propician que las jovencitas a

bandonen la escuela, se incluyen el carácter extendido de los abusos sexuales y la violencia por parte de docentes y pares, pruebas físicas de virginidad abusivas e irrelevantes, pruebas de embarazo obligatorias, y políticas que excluyen a jovencitas embarazadas de las escuelas. Las condiciones insalubres e inadecuadas en escuelas, incluida la falta de instalaciones donde atender los cuidados relativos al ciclo menstrual con privacidad y en forma digna, provocan que muchas adolescentes, incluidas jóvenes con discapacidad, tengan una asistencia irregular o abandonen los estudios. El matrimonio infantil es, a la vez, una causa y una consecuencia de la falta de acceso a educación de calidad en países como Bangladesh, Nepal, Tanzania y Zimbabwe.

Millones de niños con discapacidad en China y Sudáfrica, así como niños de diversos grupos étnicos, idiomáticos o religiosos en la India, sufren habitualmente discriminación por parte de funcionarios gubernamentales cuando intentan inscribirse en escuelas. Una vez que ingresan a las escuelas, muchos de estos niños son asignados a aulas segregadas, donde reciben educación de calidad inferior. Muchos niños con discapacidad abandonan la escuela debido a la ausencia de docentes especialmente preparados, falta de apoyo o porque no son admitidos para pasar a niveles más avanzados de educación. En Rusia y Serbia, por ejemplo, existe una cantidad desproporcionada de niños con discapacidad confinados en instituciones, que con frecuencia solo reciben educación de baja calidad, o directamente ninguna educación.

Una cantidad cada vez mayor de niños que viven en contextos de crisis humanitarias y conflicto a largo plazo no pueden hacer valer su derecho a la educación, dado que las escuelas son inaccesibles o inseguras. Los ataques a escuelas y la ocupación de estas instituciones con fines militares han impedido que millones de niños en Afganistán, Nigeria, Palestina, Ucrania y Yemen pudieran ir a la escuela.

También en países de ingresos medios y altos se crean obstáculos a la educación, a través de prácticas discriminatorias contra minorías, refugiados, migrantes y niños LGBT.

Todos los gobiernos deberían garantizar que la educación primaria sea verdaderamente gratuita y obligatoria, y que la escuela secundaria sea gratuita. Los gobiernos deberían eliminar las políticas o reglamentaciones discriminatorias que permiten que las escuelas excluyan a niños y adolescentes, y asegurar que las escuelas atiendan las necesidades de las jovencitas, los niños con discapacidad, los niños que pertenecen a minorías y los niños LGBT.

Los gobiernos deberían abolir por ley los castigos físicos y adoptar medidas más rigurosas para garantizar que los niños estén seguros frente a violencia, abusos y hostigamiento en las escuelas.

Los donantes —incluidas las instituciones financieras multilaterales como el Banco Mundial y la Alianza Mundial para la Educación— y los organismos internacionales que ayudan a los gobiernos a implementar sus planes educativos, deberían observar los estándares de derechos humanos y no hacer ningún tipo de concesiones ante abusos que excluyan de las escuelas a niños y adolescentes.

El Secretario General de la ONU y la UNESCO deberían garantizar que los “países líderes” —que encabezan iniciativas globales en materia de educación— cumplan sus propias obligaciones de derechos humanos y pongan fin a los abusos en sus propios sistemas educativos.

“No debería haber ningún grado de tolerancia ante el incumplimiento de estas obligaciones, cuando de lo que se trata es de garantizar el acceso a la educación a todos los niños y adolescentes del mundo”, apuntó Martínez. “Los niños no pueden esperar otros 15 años, ni tampoco otro año lectivo, para que sus gobiernos garanticen plenamente su derecho a prepararse para el futuro”.

Citas extraídas del informe

“La mayoría [de los alumnos en] las principales escuelas no tienen que pagar. Pero nosotros sí tenemos que pagar los aranceles. Muchos padres que tienen hijos con discapacidad no podemos trabajar, y debemos ocuparnos de ellos las 24 horas. Las escuelas nos escriben para preguntarnos por qué no hemos pagado, pero no entienden nuestra situación”.
–Padre de un joven de 8 años con autismo, Johannesburgo, Sudáfrica

“Mi prima y yo somos las únicas niñas sirias de la clase. Los demás alumnos se confabularon en contra nuestra y andan diciendo que hablamos mucho y que nos portamos mal. El maestro nos envió al fondo del aula. Todos los maestros me tratan mal porque soy siria. Cuando uno de los maestros le pregunta algo a una niña jordana y ella responde correctamente, le dice ‘¡Bravo!’. En cambio, cuando soy yo quien contesta bien, no me dice nada”.
–Hadeel (seudónimo), 11, Al-Zarqa, Jordania

“Me golpeaban cuando el maestro no los veía, y como mi maestro no veía lo que pasaba no hacía nada para impedirlo. Mi padre se presentó ante el director de la escuela para quejarse, y este le dijo: ‘Si le preocupa, entonces no debería seguir mandándola a la escuela…’. En Siria me encantaba ir a la escuela. Tenía amigos. Me gustaba muchísimo aprender”.
–Fatima, 12, Turgutlu, Turquía

“Un [maestro] intentó persuadirme para que tuviera relaciones sexuales, y entonces yo no quería avanzar a Nivel 2 para evitar tener que pasar por eso. Dejé de ir [a educación física]. Lo hice porque temía que si me encontraba con él, me llevara a algún sitio para hacerme cosas. Me sentía mal y [los maestros] me llamaron para decirme que no me estaba concentrando o estudiando y que entonces mi desempeño no era bueno… Decidí dejar la escuela y no seguir malgastando el dinero de mis padres”.
–Ana, 16, Mwanza, Tanzania

“El sistema educativo japonés es realmente muy estricto con el tema del género. Les inculca claramente a los alumnos adónde pertenecen y adónde no; en los años más avanzados, cuando la división de géneros es más marcada, los niños transgénero comienzan realmente a sufrir. Tienen que ocultar su realidad y mentir, o actuar como ellos mismos y exponerse así al hostigamiento y la exclusión”.
–Docente transgénero de escuela secundaria, Japón

“Mis tíos me obligaron a contraer matrimonio con un hombre que tenía edad suficiente para ser mi abuelo. Yo iba a la escuela y estaba en sexto grado. Me gustaba la escuela. Si hubiera tenido la posibilidad de terminar los estudios, no habría tenido estos problemas; no estaría trabajando de mesera y separada de mi esposo”.
–Akur L., casada a los 13 años, Sudán del Sur

“Quedé embarazada el año pasado, cuando tenía 14. Tuve que dejar de ir a la escuela ese mismo año porque mi madre, que trabaja como empleada doméstica y cobra un salario de USD 50 por mes, no podía cubrir el costo de que yo fuera a la escuela. Tuve una relación sentimental con un hombre mayor que estaba casado. Fui al hospital y di a luz un niño que murió pocos minutos después… Quisiera volver a la escuela porque todavía soy una niña”.
–Abigail C., 15, Zimbabwe

“[El ejército] disparó contra mi escuela con un tanque… Cuando huí corriendo, un shabiha [miembro de milicia apoyada por el Estado] me tomó por el hombro, pero tras forcejar conseguí escaparme. El shabiha entró a la escuela y disparó contra las ventanas y rompió las computadoras. Luego de eso, solamente volví para rendir mis exámenes”.
–Rami, 12 años, refugiado procedente de la gobernación de Daraa en Siria, entrevistado en Ramtha, Jordania.

Fuente: https://www.hrw.org/es/news/2016/06/09/escuelas-inaccesibles-para-millones

 

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Cuba: A propósito de la jornada estudiantil por los 53 años de la Unión Africana

Cuba/13 de Mayo de 2016/Sierra Maestra

El 53 aniversario de la creación de la Organización de la Unidad Africana, hoy Unión Africana, a celebrarse el venidero 25 de mayo, es una fecha trascendental para los jóvenes de diversas nacionalidades que cursan estudios de educación superior en Cuba, quienes realizarán una amplia jornada conmemorativa.

Organizada por el Comité de Estudiantes Africanos en esta ciudad, la celebración comenzará hoy con la Copa Deportiva “Nelson Mandela” -que comprende futbol sala, voleibol y basquetbol- y se extenderá hasta el día 27.

Visitas a diferentes sitios de interés histórico, muestra de cine africano en la Casa del África, varias conferencias magistrales sobre oralidad e influencia de esa nación en la cultura santiaguera, y la intervención social del proyecto Esperanza en el hogar de ancianos “Corazones Contentos” conforman el programa de actividades.

Baile, poesía, trajes y platos típicos serán exhibidos en la exposición “Esta es nuestra África”, a realizarse el día 25 en el parque Serrano desde las 9:00a.m. hasta las 7:00p.m. Como cierre de la jornada está prevista una gran gala cultural el 27, dedicada al 90 cumpleaños de Fidel Castro, cuyo sitio aún no se ha definido.

“Dentro de nuestra unidad, cada país presenta su propia cultura e identidad, entonces realizamos la jornada como motivo de integración, para conocernos mejor y llevar al pueblo santiaguero una pequeña muestra de quiénes somos.”, comentó Pedro Augusto Mussole, Presidente del Comité.

Unos 370 estudiantes africanos residen en la provincia, desde la Universidad de Oriente y la Universidad de Ciencias Médicas se forman como futuros profesionales que servirán en Angola, Nigeria, Guinea, Togo, Guinea Conacri, Guinea Bisau, Namibia, Niguer, Zambia, Madagascar, Djibuti, Uganda, Ghana, Yemen, Tanzania y la República de Arabia Saudita.

Hablan más de 30 dialectos entre todos, aunque sus lenguas oficiales son el inglés, el portugués, el español y el francés indistintamente. Ellos rompen con las barreras culturales e idiomáticas para mostrar que África está aquí.

Fuente: http://www.sierramaestra.cu/index.php/titulares/7756-a-proposito-de-la-jornada-estudiantil-por-los-53-anos-de-la-union-africana

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