Page 2011 of 2678
1 2.009 2.010 2.011 2.012 2.013 2.678

Promesas o amenazas.

Por: Carlos Cortés.

En la reciente incorporación tecnológica nada es lejano ni ajeno generando, gracias a la comunicación, lealtad o cercana lejanía equivalente a volver al futuro entre los pueblos del mundo. Cobran vida promesas y amenazas con creciente crisis de incredibilidad, producto de contradicciones y afirmación de condiciones impuestas por el poder.

El protagonismo delincuencial erige conclusiones y formula cuestionables propósitos para el desarrollo humano, que durante gran espacio del Siglo XX abrieron vertientes de diálogo para la comprensión hacia la equidad a partir del esfuerzo unánime. Ideologías como el comunismo y el socialismo no alcanzaron las metas volviendo a los principios democráticos expuestos en la creación de la Organización de las Naciones Unidas ONU cuyos propósitos pretendió encuentro de balance en la denominada Organización del Tratado del Norte OTAN.

En este momento, fuerzas y debilidades siguen senderos por parte de Rusia y Estados Unidos, atentos ambos al desarrollo Oriental, que sin soslayar el vigor de Japón eleva el potencial de China, poseedora de enorme población con sustento ideológico milenario, marco de disciplina que esparce en tratos y tratados comerciales sobre los que ha puesto atención México.

El contexto internacional luce complicado, con promesas y amenazas para el desarrollo sustentable y armónico entre las naciones; lo que hace imprescindible la observación inteligente y cuidadosa de las propias fuerzas, debilidad y vecindades. Caso muy particular de nuestro país colindante con el gobernado por un personaje del que se han desprendido expresiones desfavorables y de complicada conciliación por parte nuestra.

Entre los factores que gravitan en el futuro cercano al interior de los senderos políticos nacionales, en México se cuenta la ausencia de unidad para la elección sensata y convincente del o los personajes dotados de capacidad y honestidad, comprobadas para alcanzar la credibilidad por parte de la población atenta a la comunicación masiva cuestionada eventualmente y la directa a través de las redes sociales distractoras de atención hacia proyectos hacia desarrollo sólido, de acuerdo a las circunstancias impuestas en el mundo del Siglo XXI.

La distancia actual es tan cercana como la tecnología, y con ésta las múltiples y constantes mutaciones con modificación permanente a los parámetros vigentes pocos años atrás, meses, días y horas. En este sentido es imprescindible la actualización educativa y su eficaz conducción hacia todas las clases sociales, como está mencionado por la autoridad en esta materia, de acuerdo a la Reforma propuesta por el Poder Ejecutivo con el respaldo del Legislativo.

Es imprescindible reiterar la Unidad entre los sectores políticos y empresariales para enfrentar con éxito las condiciones en términos de identidad nacional con su proyección económica conducente a la seguridad de paz y tranquilidad.

Dios nos guarde de la discordia.

Fuente: http://opinion.informador.com.mx/Columnas/2017/03/05/promesas-o-amenazas/

Imagen: https://cdn.forbes.com.mx/wp-content/uploads/2016/07/paola.jpg

Comparte este contenido:

Repensar el aula.

Por:  Eduardo López H.

En la sociedad del conocimiento y de la información en que vivimos, la educación requiere un replanteamiento serio, dado que el conocimiento está entrando  en la obsolescencia de forma vertiginosa, pero también los educandos del siglo XXI son una generación digital que depende mucho de lo virtual. En ese sentido, se vuelve una imperiosa necesidad el acompañarlos para facilitarles los aprendizajes con significatividad  y pertinencia, de forma tal que la praxis educativa no se vuelva un círculo vicioso, sino más bien de carácter sustancial con resultados cualitativos y que por el contexto en que se desenvuelve, forme para la vida, tal y como dice Paulo Freire: “por medio de la misma vida”.

El espacio inmediato formal donde se practica el ejercicio educativo es el aula. Ahí se da el encuentro cotidiano de maestros y alumnos para desarrollar el aprendizaje, que como un proceso dialéctico del conocimiento, deberá estar siempre en permanente construcción, apuntando a lo epistémico-ontológico, pero sin desconectarse de la realidad.  De ese modo, juntos, maestros y alumnos, construyan propuestas novedosas y que el aula sea un círculo virtuoso como lo demanda el contexto contemporáneo.

¿Está el aula en crisis? Depende como la gestionemos los docentes, pero uno de los factores que hoy complejiza la acción educativa es la sociedad del conocimiento en que vivimos en la actualidad, y en particular del mundo virtual que forma parte de los útiles escolares de los estudiantes. Estos están enfrentando  un proceso de transición inevitable entre  la enciclopedia y la información global, empoderándose de esta última sin ningún obstáculo, incluso, este tipo de ventaja cognoscitiva, los puede llevar a romper  con el conocimiento, fragmentado antes que los docentes, que seguimos -en el caso de la educación superior- sumergidos en compartimientos estancos, es decir, desde nuestros departamentos como pozos tiradores, en una tercia académica y “científica”, de dolorosas consecuencias presentes y futuras para la educación.

En todos los niveles de educación se debe repensar el aula, desde el preescolar, donde se sientan las bases de la formación, hasta la universidad, que es el producto final, en este sentido, los esfuerzos que se realizan en materia educativa en nuestro país, para establecer un vínculo orgánico entre los diferentes subsistemas, constituye un paso estratégico de invaluable importancia, encaminado a dar esos saltos de calidad que tanto necesitamos, además repensar el aula pasa necesariamente por desarrollar procesos de innovación y emprendimiento desde la infancia, hasta la formación técnica y profesional.

En definitiva, es una necesidad apremiante reflexionar y actuar ante los retos presentes y futuros que debe enfrentar la educación a todos los niveles y repensar el aula implica en términos estratégicos, el desarrollo de  aprendizajes de calidad a lo largo de toda la vida, como indica la declaración de Incheon, solo de esa manera nos encaminaremos por la senda del crecimiento y del desarrollo integral tanto humano como nacional.

Fuente: http://www.elnuevodiario.com.ni/opinion/420776-repensar-aula/

Imagen: http://cátedrafuturo.nariño.gov.co/wp-content/uploads/2016/09/IMG_8838-1024×575.jpg

Comparte este contenido:

La educación necesita del compromiso de todos.

Por: Domingo Peppo.

Considero que la educación es fundamental para el crecimiento personal, es el único capital que tiene una persona para defenderse en su vida.

Cuando asumimos el gobierno, lo hicimos con el compromiso de lograr calidad educativa en todos los niveles. Sabemos que alcanzarla es un proceso que lleva tiempo, mucho esfuerzo y por sobre todo compromiso de las familias, los docentes, los estudiantes y el Estado, como responsable de ejecutar las políticas públicas que garanticen inclusión y equidad.

Nuestro objetivo es que cada chaqueño tenga las mismas oportunidades para lograr su crecimiento, y en esto la educación es la base fundamental. En un mundo cada vez más competitivo, la formación es necesaria para lograr progreso; y si no tenemos un desarrollo en calidad educativa, no vamos a tener futuro como provincia o nación.

La persona que aprende en un contexto sano es capaz de cuidar su salud y la de quienes lo rodean; le resulta más fácil conseguir empleo, e incluso generar sus propios emprendimientos; se mantiene alejada de la delincuencia y de los consumos problemáticos. La educación comprometida y consciente crea ciudadanos plenos, críticos frente a las arbitrariedades y solidarios con sus pares.

Por ello, considero que la educación es fundamental para el crecimiento personal, es el único capital que tiene una persona para defenderse en su vida.

Aquí es donde debemos preguntarnos cuál es el rol de cada uno, desde el lugar que nos toca estar, para aportar a la construcción de una sociedad formada y preparada para nuevos desafíos. Debemos tener como premisa fundamental el derecho de los niños y niñas a aprender, a estar en la escuela y formarse en el tiempo que deben hacerlo, según su edad que está marcada por los distintos ciclos educativos.

La educación no sólo es responsabilidad de los docentes, que son los que están al frente de las aulas. También tiene que ver con los valores que se inculcan en los hogares; el esfuerzo que pone cada alumno, que debe estar motivado con crecer; el aporte que hace el club, la iglesia, y las organizaciones barriales para contener a los niños y jóvenes; y sobre todo la presencia activa de un Estado que genere condiciones para que estos actores se encuentren y trabajen por el mismo objetivo.

Con ese espíritu convocamos 13 Foros Educativos durante 2016 a lo largo de todo el territorio provincial, donde nos concentramos en dar especial hincapié a temas urgentes de la actualidad: la formación en seguridad vial, concientización sobre consumos problemáticos, educación sexual, familia y cuidado del ambiente. En estos foros, todos aportaron desde su mirada pero con el mismo objetivo de que alcancemos efectivamente la calidad educativa.

Es así que llegamos a este Compromiso Educativo, en el cual llamamos a padres, docentes, alumnos y el propio Estado a ser parte activa en el proceso de educación y acompañar a los alumnos no sólo en el jardín, sino estar presentes en todos los niveles.

Como Estado, tenemos el compromiso de invertir en mantenimiento de la infraestructura escolar. Actualmente tenemos 24 obras en ejecución y la meta para este año es alcanzar 120 obras. Crearemos un fondo de infraestructura de 100 millones de pesos para refacción y mantenimiento de las escuelas. Además, nos ocuparemos de generar espacios de intercambio entre distintos niveles educativos y entre áreas de gobierno para generar políticas integrales de una manera articulada. También proyectamos incorporar nuevas currículas, para ampliar los conocimientos de los alumnos y se formen como ciudadanos activos.

Pero además reafirmaremos el compromiso con los trabajadores, defendiendo y manteniendo el nivel adquisitivo de los docentes. Reforzaremos el acompañamiento a las familias, los clubes y las entidades sociales para que continúen inculcando buenos valores en los más pequeños.

Este es el desafío que emprenderemos. Un camino que tendrá resultados a largo plazo, y marcará las bases sólidas para lograr una sociedad preparada.

Fuente: http://www.chacodiapordia.com/opinion/noticia/120233/la-educacion-necesita-del-compromiso-de-todos

Imagen: http://www.larednoticias.info/panel/archivos/1488717488_peppo(22).jpg

Comparte este contenido:

La pedagogía musical sirve de ejemplo a la investigación educativa.

Los métodos de aprendizaje a través del descubrimiento derivan de filósofos como Froebel, Dewey o Motessori y han sidos impulsados por las teorías evolutivas de Piaget y Bruner.

Por: Cristina Goas.

A finales del siglo XIX y comienzos del XX se produce un proceso de renovación pedagógica: aparecen numerosos métodos de enseñanzas. Músicos pedagogos como Orff, Kodàly Dalcroze, Wards, Chevais o Edgar Willems son referencia de escuelas, academias y conservatorios de música. Este movimiento fue general en todas las materias, por lo que numerosos pedagogos musicales se cuestionaron la forma tradicional de enseñar la música. Defendieron que la educación musical debía realizarse en las escuelas, en un ambiente de juego y confianza, desarrollando la creatividad. Así surgieron algunos métodos activos, así denominados por favorecer la participación del niño, quien llegaría al conocimiento teórico a partir de la experimentación y la ciencia musical.

Los métodos de aprendizaje a través del descubrimiento derivan de filósofos como Froebel, Dewey o Motessori y han sidos impulsados por las teorías evolutivas de Piaget y Bruner.

En el campo musical han compartido esta postura tanto filósofos como pedagogos. Ya en el siglo XVIII Rousseau defendía que la experiencia musical es la precursora de la alfabetización musical.

La misma idea encierra la siguiente frase de Sloboda: » No hay que proporcionar información. La información ya esta en la música. Hay que ayudar al alumno a tomar conciencia de ello».

La pedagogía musical trata la relación entre la música y el ser humano. En las civilizaciones más antiguas (India, China, Egipto, etc…) la música estaba ligada a funciones de gran importancia en las ceremonias, su enseñanza estaba controlada por las más altas autoridades civiles o religiosas.

Las perspectivas de la educación, de la formación, de la enseñanza y del aprendizaje forman parte de la pedagogía musical. En la pedagogía musical debe distinguirse la enseñanza teórica de la enseñanza práctica.

Existen infinidad de estudios, como las recientes investigaciones sobre los efectos de transferencia de la pedagogía musical. Este último enfoque no trata el ámbito musical en sí, sino los efectos que produce en la personalidad y en la identidad de las personas.

Los estudios a largo plazo intentan demostrar que la práctica y la educación musical fomentan las habilidades cognitivas, creativas, estéticas, sociales, emocionales y psicomotrices.

Según los nuevos estudios interdisciplinares de los ámbitos de la investigación cerebral, la psicología y la pedagogía, se puede suponer, por ejemplo, que el contacto con la música es más efectivo, eficaz y tiene más sentido si tiene lugar en las etapas más tempranas de la vida y en todos los niveles de su aprendizaje.

La hermenéutica intenta comprender la realidad actual de la práctica de la pedagogía musical e interpretarla desde el marco de su desarrollo histórico. No obstante, la base de esta investigación es el contacto artístico-práctico, teórico-analítico e histórico con la música.

Sin aptitudes ni conocimientos musicales, a la investigación le faltaría la base. El punto de partida de un estudio podría ser la pregunta ¿qué es la música? Otras preguntas clave son: ¿cómo funciona?, ¿qué significa?, ¿qué función tiene? Sin su respuesta, no se puede decir cuál es la mejor forma de transmitir o impartir la música.

Junto a la formación de las habilidades musicales prácticas, como cantar o tocar un instrumento, ha adquirido importancia en la pedagogía musical el concepto de formación estética.

En este contexto se considera la música como una comprensión del mundo, como cultura, como lenguaje y como sentido de la vida. La formación musical solo es posible según la opinión de los pedagogos musicales  cuando se vive una experiencia musical. Saber de música implica practicarla, sentirla (escucharla) y reflexionar sobre ella: hay que entenderla.

Fuente: http://www.mundiario.com/articulo/sociedad/pedagogia-musical-ejemplo-investigacion-educativa/20170305165342081247.html

Imagen: http://www.mundiario.com/media/mundiario/images/2017/03/05/2017030516380966831.jpg

Comparte este contenido:

Bullying.

América del Sur/Bolivia/07.03.2017/Autor y Fuente:http://correodelsur.com/

El acoso escolar campea en los recintos educativos fiscales y particulares. De acuerdo con un estudio realizado en julio de 2014 por el Ministerio de Educación en 252 unidades educativas rurales y urbanas de Bolivia, cinco de cada 10 estudiantes han sido víctimas de algún tipo de violencia dentro de la comunidad educativa. Es un mal que los alumnos deben aprender a enfrentar, con el apoyo de los padres, maestros y la sociedad.

La investigación se hizo a través de encuestas aplicadas a 25.040 estudiantes, de los niveles inicial, primaria y secundaria, además de maestros y padres de familia.

En otro estudio, la UNICEF se refiere a la realidad en América Latina y destaca, entre otros aspectos, que la violencia entre los estudiantes parece estar aumentando en la región, ya que entre el 50 y el 70% han sido testigos de actos de bullying. Señala que este fenómeno ocurre en las escuelas públicas y privadas, pero las formas más sofisticadas de acoso, que son la humillación y la exclusión, predominan en las privadas.

“En Bolivia no se cuenta con datos estadísticos actuales y globales sobre esta temática, pero en otros países como Colombia o España se observó que la distribución es similar, con una leve predominancia de los hombres”, informa el psicólogo clínico y educativo Iván Salinas.

ECOS conversó con varios estudiantes de los niveles primaria y secundaria de distintos colegios y todos siempre identifican a un agresor o un grupo de agresores en su curso, ya sean hombres o mujeres. Dicen que estos molestan durante todo el año a los demás, especialmente a determinados compañeros.

Pese a esto, son contados los casos que llegan en forma de denuncia a las Direcciones Distritales de Educación; la gran mayoría de las víctimas y los testigos prefiere el silencio y los hechos quedan sin sanción.

Fuera de entrevista, funcionarios de las Direcciones Departamentales de Educación de Chuquisaca y Potosí coinciden en indicar que el acoso escolar está presente tanto en recintos fiscales como privados. También en advertir situaciones de discriminación entre compañeros por razones de estatus o posición económica.

En algunos casos, los directores se vieron obligados a expulsar del colegio a los agresores.

Un problema frecuente

Salinas explica que el término anglosajón “bullying” se traduce como “acoso escolar” y es un problema muy frecuente en las escuelas y→ →colegios. Al respecto, hay tres personajes que interactúan en una serie de situaciones violentas: un agresor o grupo de agresores (en estos suele haber un líder), una víctima y un público.

En muchos casos, las acciones que violan la integridad física, psicológica o social de la víctima son constantes y el público refuerza esta situación con risas, burlas u otro tipo de comportamiento, empeorando el daño de la víctima.

Los agresores por lo general gozan de algún tipo de ventaja sobre sus víctimas; puede ser física, social, intelectual, económica, de popularidad o de otro tipo. Además, el acoso escolar no distingue género: hombres y mujeres pueden estar involucrados en este tipo de hechos.

“Una persona puede encontrarse en cualquiera de los tres roles: ser víctima, agresor o público, puesto que la dinámica de las relaciones sociales en las escuelas es cambiante y depende mucho del contexto. No se puede hablar de acoso escolar si el episodio violento se da en una sola ocasión o es producto de otro tipo de circunstancias que no reflejen una relación de desigualdad y un abuso de la misma”, aclara Salinas. •

¿Es violencia escolar o violencia social?

Se denomina ‘violencia escolar’ porque la escuela suele ser el contexto de las principales relaciones sociales entre niños y adolescentes; sin embargo, no se debe olvidar que la escuela es un espacio donde no solo se va a aprender sobre aspectos académicos, sino también cómo uno puede relacionarse con los demás. “Aunque muy a menudo padres y profesores pierden de vista esta perspectiva”, señala el psicólogo clínico y educativo Iván Salinas.

¿Cómo actúan los acosadores en las escuelas o colegios?

“No existe un perfil único de acosador; en realidad, cualquier persona puede involucrarse en este rol. De hecho, es muy probable que una eventual víctima se convierta en acosador en algún momento. Sin embargo, la persona que ejerce acoso lo hace en situaciones que no son evidentes para los profesores o el personal de las unidades educativas y, además, suele justificar su comportamiento con la conducta de la víctima, diciendo por ejemplo: “por qué no se defiende” o “es un mimado”. Rara vez asume abiertamente la responsabilidad de sus actos.

El acoso, ¿cómo afecta la vida de la víctima?

No todas las víctimas reaccionan de la misma manera. Depende de su personalidad, las habilidades para controlar sus emociones, presencia o ausencia de otros grupos asociativos o el grado de apoyo y sobreprotección por parte de los padres, entre otros.

Sin embargo, a menudo el acoso escolar produce desajustes emocionales y conductuales que, dependiendo de los factores mencionados, pueden ser más o menos importantes en su vida. De todas maneras, es necesario indagar sobre el ambiente escolar de los hijos.

¿Es aconsejable que la víctima se cambie de colegio?

Lo primero que debe hacer la víctima es hablar sobre lo que le pasa con alguien de confianza. Si la unidad educativa cuenta con un psicólogo, es la persona más indicada. También conviene que lo converse con un adulto de su entorno cercano.

Salinas dice que el cambio de colegio debería ser la última opción contemplada; para ello, debe haber un problema crónico, es decir, tomar en cuenta el tiempo que lleva la víctima en esa dinámica y considerar los intentos de solución.

“Los programas más exitosos en el acoso escolar se centran en intervenciones que apuntan a la conciliación y trabajan con los tres involucrados en acoso escolar (víctima, agresor y público), dando especial énfasis a la intervención con el público. Un ejemplo de este tipo de intervenciones es el programa KIVA, creado en Europa; para este tipo de intervenciones se debe validar la presencia de profesionales que formen a estudiantes y docentes al respecto”, añade el profesional consultado por ECOS.

¿Cómo apoyar a las víctimas de acoso escolar?

Según el experto, es recomendable permitir el desahogo emocional de las víctimas y brindarles apoyo sin caer en sobreproteccionismos o inversión de roles. Si se procura beneficiar excesivamente a la víctima, se pueden enviar mensajes equivocados a los niños y jóvenes. Lo ideal es prevenir generando un ambiente en el que se fomente la tolerancia y el respeto, con reglas claras, sanciones coherentes y consistentes, que se cumplan sin excepción para los buenos y malos comportamientos.

Lo ideal es que en esta tarea participe toda la comunidad. Pero para ello se debe modificar las estructuras típicas del funcionamiento escolar, como la cantidad de estudiantes por aula, los horarios para las reuniones y la asignación de personal que se dedique de manera constante a estos temas.

Para relativizar un comportamiento agresivo es importante que todas las personas hablen en los mismos términos. Los adultos deben tener un discurso coherente entre ellos y promover el respeto como valor constante a lo largo de la educación de los niños y adolescentes.

¿Cómo actúan los maestros frente al acoso escolar?

De acuerdo a las características del ambiente escolar, como el número de estudiantes, la saturación de horas o el desgaste laboral, a veces ocurre que los maestros no pueden dar una respuesta inmediata a la situación. Por esta razón se requiere de un cambio importante en las políticas educativas, que deberían enfocarse en reducir la masificación de los procesos educativos.

En otras ocasiones, los estudiantes agresores son muy hábiles para que no los descubran. Entretanto, muchos profesores tratan de generar ambientes de tolerancia y respeto entre los alumnos a su cargo. “La motivación interna de cada docente y el reconocimiento a la labor que desempeñan suelen ser factores de mucha importancia para determinar las posibles reacciones, ya sean de respuestas coherentes o de apatía ante el acoso escolar”, sostiene el psicólogo.

“Probablemente el acoso escolar sea un reflejo de lo violenta que es nuestra forma de vivir; del estrés y los problemas sociales en nuestra vida. Por eso, en lugar de cuestionar a la institución educativa debemos cuestionar la manera cotidiana en que vivimos y resolvemos nuestros problemas con las personas”, finaliza Salinas.

Tipos de acoso

Es muy improbable que el acoso escolar se manifieste de una sola manera. Suele empezar con una agresión psicológica-moral o social.

Físico: En el que hay agresiones físicas como golpes o daños específicos a bienes del estudiante.

Psicológico-moral: Se producen agresiones que mellan la dignidad emocional y moral de la persona, como burlas, apodos y humillaciones.

Social: Se minan las relaciones de una persona. Por ejemplo, la dejan sin amistades, todo el grupo deja de hablar con la víctima, o se inventan rumores que afectan su dignidad.

Ciberbullying: Es una forma más solapada de agresión, puesto que se produce de manera virtual mediante publicaciones degradantes en diferentes tipos de redes sociales como Facebook, Whatsapp, Snapchat, Twitter o aplicaciones similares.

Señales de que un alumno está sufriendo acoso escolar

No quiere ir a la escuela, se pone de mal humor y no le interesan los temas académicos.

Se niega a participar en actividades sociales típicas de su edad.

Se niega a hablar sobre los sucesos ocurridos en la escuela.

Tiene baja autoestima en temas sociales, dice que no es bueno para hacer amistades o que siempre comete torpezas.

Tiene síntomas de ansiedad o depresión, problemas para dormir, pesadillas y puede presentar enuresis (hacerse pis).

Alteraciones del apetito (deja de comer o come mucho más de lo habitual).

Se queja de dolores o molestias corporales (dolor de cabeza, espalda, estómago o nauseas), especialmente cuando se avecinan los lunes.

Es irritable y tiende a aislarse.

Consejos para padres

Muchas veces el comportamiento de su hijo en el colegio no es el mismo en casa; cuénteles sobre cuando eran estudiantes.

Presten atención a los nombres de los compañeros de su hijo y cómo se comportan.

Enséñenle a su hijo a reconocer cuándo es prudente defenderse hablando y cuándo es mejor ignorar lo que sucede.

Eviten ser sobreprotectores y actúen demostrando constantemente confianza en la capacidad de su hijo.

Si su hijo les comenta sobre hechos de violencia en su curso, escuchen antes de actuar, eviten las acciones precipitadas.

Pidan asesoría si se enteran de la posibilidad de que su hijo sea una víctima.

No se precipiten en castigar a su hijo si es acusado de agresiones, traten de ser coherentes.

Consejos para niños y adolescentes

Si alguien te molesta, no es tu culpa. Y si insiste, habla con un adulto de tu confianza al respecto; no es malo quejarse.

Siempre trata de resolver la situación hablando. Reconoce que a veces una burla “inofensiva” puede lastimar a otros.

Si te sientes mal por cosas que ocurren en tu casa o en el colegio, busca conversar con alguien.

Aprende a no reírte si alguien se burla de otros. El respeto es la base de la convivencia.

Para profesores

Fomenten espacios de tolerancia y respeto estableciendo reglas simples, claras y que se puedan cumplir.

Den espacios para hablar acerca de cómo se viven las relaciones entre los alumnos en el curso.

Traten de hablar siempre en privado con los estudiantes cuando cometan una falta.

No es malo pedir consejo si no se sabe cómo manejar una situación así.

Testimonio de un padre conmovido

Roberto (nombre ficticio) es un muchacho que dentro de poco cumplirá 20 años. Su familia y él mismo están contentos porque logró ingresar a la Universidad, después de haber perdido el año en dos oportunidades cuando estaba en primero de secundaria.

En 2010, la familia de Roberto se radicó en Sucre por una situación laboral de su padre; hasta entonces, él nunca había tenido problemas en el colegio: era un estudiante dedicado y buen deportista que también tocaba la guitarra y aprendía a hablar inglés, por lo que gozaba de cierta popularidad entre sus pares. Sin embargo, ese año, los cambios propios de la adolescencia hicieron mella en él.

Ingresó a estudiar a un colegio privado de Sucre y desde el primer día de clases, según cuenta su padre, fue el blanco de burla de cuatro compañeros.

Este es su relato emocionado de su padre para ECOS:

“Le hicieron la vida imposible a mi hijo, especialmente dos de ellos; los otros dos les seguían la corriente en todo. Cuando aparecía mi hijo, se reían de él delante quien sea, le criticaban su ropa, sus lentes, su bigote…; le pusieron un apodo muy humillante, cada vez le empujaban o le trancaban el paso, le quitaron toda la moral y las ganas de estudiar.

Hablé con los padres de los changos, que, en vez de hacer algo por reflexionar a sus hijos, más bien se alteraron diciendo que mi hijo exageraba las cosas y que tampoco no era ningún santito; tuvimos muchos conflictos.

También hablé con sus profesores, con la directora del colegio… Pese a que mostraron toda la predisposición para arreglar la situación, al final no hicieron nada.

Mi hijo perdió el año por sus bajas calificaciones. No quería ir al colegio, apenas comía, dormía mal, había perdido el interés por todo.

Al siguiente año opté por cambiarlo de colegio; aun así, continuó mal en sus estudios. Los profesores dijeron que si seguía así, perdería el año y así fue.

Finalmente aceptó ir al psicólogo; eso le ayudó mucho en su vida, le devolvió el entusiasmo y las ganas de vivir. Poco a poco mejoró sus notas y este año nos dio, a su mamá y a mí, la satisfacción de aprobar el ingreso a la Universidad. Estamos orgullosos por eso. Perdió dos años, pero no por su culpa, sino por culpa de cuatro mequetrefes, de los que sé, no solo han dañado a mi hijo sino a otros chicos más”.

Fuente:http://correodelsur.com/ecos/20170219_bullying.html

Imagen:http://correodelsur.com/img/notas/20170219/nota54367_imagen0_x5.jpg

Comparte este contenido:

¿Hasta cuándo?

Por: Marta Elena Bedoya R.

Bernard Hugonier, de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), en el Foro nacional de la Calidad educativa en el 2010, hizo especial énfasis en la necesidad que tiene Colombia a disminuir la brecha educativa que existe entre las élites y las clases menos favorecidas que no tienen acceso a educación y el cuidado desde edades tempranas.

Desde 1994, la Ley General de Educación y los decretos que la reglamentan, señalan que la educación preescolar, la educación que se debe impartir a los niños, antes de iniciar la educación básica y la cual,  comprende tres grados: Pre-jardín para los niños de tres años, Jardín para los niños de cuatro años y Transición o Preescolar para los niños de cinco años, este último un obligatorio constitucional y la cual se prestará en forma gradual, de acuerdo con los planes de desarrollo, una vez,  esté cubierto el 80 por ciento del preescolar, y al menos el 80 por ciento de la educación básica.

Ese “al menos” que es el llamado de atención para nuestros gobernantes, se quedó por siempre, pues, han pasado 23 años de expedición de la norma y las cifras sobre cobertura educativa de los niños entre 0 a 6 años, corroboran en que es muy poco lo que se avanzado en la Educación Inicial, a pesar de la estrategia de “Cero a Siempre” que impulsa el actual gobierno, que a diciembre de 2014, señala que de los 4.3 millones de niños menores de 5 años en situación de vulnerabilidad, tan sólo alrededor de 925.529 mil, reciben atención integral. (Revista Dinero, mayo 29-2015-Nº470)  Por el contrario, las noticias que nos llegan con frecuencia son las amenazas de huelga de las madres comunitarias, además, de las cifras preocupantes de las altas tasas de desnutrición infantil y muerte por la ausencia y abandono del Estado.

 Así, en la encuesta Nacional de situación Nutricional en Colombia (ENSIN), realizada en el 2010, el 3.4% de los niños menores de 5 años, tenían desnutrición global (deficiencia de peso para la edad) y 13.2% desnutrición crónica (deficiencia de altura para la edad). Deplorable las cifras en la población indígena, de 7.5% y 29.5%. (Revista Dinero, mayo 29-2015-Nº470) La inversión de más impacto para reducir la pobreza y la desigualdad, en las condiciones de vida de las familias, es la que se haga en los niños. Colombia invierte anualmente $2.8 millones por niño en un centro de desarrollo Infantil y $2.1 millones en modalidad familiar, que cubre: el 70%  nutrición, vacunación y propuesta pedagógica. ¿Esperar hasta cuando la atención al 100 % de niños?

Fuente: http://www.eldiario.com.co/seccion/OPINION/hasta-cu-ndo-1703.html

Imagen: http://delaurbe.udea.edu.co/wp-content/uploads/2015/04/Educaci%C3%B3n.jpg

Comparte este contenido:

No habrá pacto educativo.

Por: Jose Manuel Reinares.

En los albores de la democracia educativa, cuando se estaba gestando la LOGSE y los que ahora peinamos canas éramos unos profesionales imberbes, se oía con frecuencia la expresión de que «cuando la política entra en la escuela, la educación sale por la ventana». Conste que, con posterioridad, la he seguido oyendo.

Hace unos años fui invitado a un desayuno con un candidato a presidente autonómico, en el cual después de la presentación del programa electoral con el que concurría, se permitieron preguntas por escrito del público asistente. Yo le hice una pregunta concreta de si estaba a favor de un pacto educativo en su comunidad y me contestó, no sin cierta sorpresa por mi parte: «¿Pacto educativo?, ¿con quién?, ¿para qué?».

Sirvan estos dos ejemplos para apreciar la opinión no favorable que, en sentido contrario, tiene el mundo educativo de la clase política y de la utilización partidista que ha hecho de la Educación, como de aquélla hacia la necesidad de consenso para superar el enfrentamiento que tradicionalmente ha existido en este campo.

Por ello se debe permitir el escepticismo que nos invade cuando la subcomisión del Congreso de los Diputados ha comenzado en este mes los trabajos para intentar consensuar las bases para el primer pacto educativo de la democracia, fruto más de la fragmentación política que existe ahora en el Congreso, que obliga llegar a acuerdos, que de la auténtica voluntad de los partidos políticos de ponerse de una vez por todas de acuerdo en una ley Educativa que nazca del consenso.

Y es que, como coloquialmente se dice, en la cuestión del pacto educativo «llueve sobre mojado» si nos remontamos sólo a siete años antes, pues es preciso recordar que en 2010 el ministro Ángel Gabilondo, procedente del mundo universitario y despojado por ello de las ataduras partidistas, viendo que la materia de su competencia no se arreglaba con confrontación, sino con acuerdo, impulsó el «Pacto Social y Político por la Educación» entre todos los sectores que tenían algo que decir y, a este respecto, ANPE apostó decididamente por dicho pacto, apoyando firmemente y sin titubeos al ministro en su loable pretensión.

Al final, haciéndonos merecedores del mensaje que transmite el cuadro de Goya «Duelo a garrotazos», el pacto se frustró ante la incredulidad de muchos que creíamos en él, por el enrocamiento de algún partido en un tema clave (el principio de libertad de creación de centros), así como por la oposición a cualquier acuerdo por parte de la cúpula del mismo partido ante la inminencia de las Elecciones Generales de 2011.

También a nivel autonómico han existido intentos fracasados, como el pacto que anunció el exconsejero Abel Bayo en el Parlamento Riojano a comienzos del curso 2015-16 y del que nunca más se ha sabido.

De ahí que estimemos que los fracasos en el consenso educativo se originan cuando los Gobiernos o partidos políticos se empeñan en fijar de antemano el contenido del mismo de acuerdo a los principios que configuran su ideario político, sin estar abiertos o ceder ante posiciones razonables del contrario o ante aportaciones contrastadas y lógicas de expertos, organizaciones sociales y de padres y madres, etc., es decir, a mi entender el fracaso ha venido por querer dirigir el pacto desde arriba, a diferencia de si éste fluye desde la base de la comunidad educativa que sólo quiere tener estabilidad para desarrollar o ejercer el servicio educativo.

Desde nuestro punto de vista urge, por ello, ponerse de acuerdo en cómo remediar los principales defectos de nuestro sistema educativo: la prioridad de la enseñanza pública como garante de la cohesión social y del principio de igualdad de oportunidades, sin que se descuide por ello a la red concertada; el fracaso y abandono escolar temprano; la vertebración y cohesión a nivel nacional; la reversión de los recortes; la formación inicial del profesorado y el acceso a la función pública docente; la protección de profesores y alumnos en caso de conflictos de convivencia en los centros, etc.

Para finalizar, retomando el título de este artículo, pensamos que no habrá pacto educativo si la clase política se empeña en defender exclusivamente su programa electoral, pero, en cambio, si sabe escuchar al contrario o sabe ceder en sus posiciones maximalistas, es probable que se pueda llegar a una nueva Ley Educativa que goce del consenso de todos, tal como ansía el mundo educativo.

Fuente: http://www.larioja.com/opinion/201702/23/habrapacto-educativo-20170223002140-v.html

Imagen:http://cadenaser00.epimg.net/emisora/imagenes/2016/09/20/radio_madrid/1474376600_574020_1474378511_noticia_normal.jpg

Comparte este contenido:
Page 2011 of 2678
1 2.009 2.010 2.011 2.012 2.013 2.678