Por: Educación 3.0.
Conocer las propias emociones, saber cómo gestionarlas y disponer de autonomía emocional puede ser de utilidad para evitar el bullying en las aulas. Begoña Ibarrola reflexiona acerca de la inteligencia intrapersonal enumerando las competencias que incluye y cómo trabajarlas en el aula.
Cuando en el año 1980 el profesor Howard Gardner realizó en la Universidad de Harvard un estudio sobre el potencial humano se hizo una trascendental pregunta: “¿Por qué algunas personas con un coeficiente intelectual muy alto fracasan miserablemente en sus vidas personales?”.
Este psicólogo e investigador nació en 1943 en Scranton, (Pennsylvania). Estudió en la Universidad de Harvard y sus líneas de investigación se han centrado en el análisis de las capacidades cognitivas en menores y adultos, a partir del cual formuló la teoría de las ‘Inteligencias Múltiples’ (Frames of Mind, 1983).
Sus ideas han impulsado a muchos profesionales e intelectuales a repensar numerosos asuntos relativos al aprendizaje y las capacidades humanas que se creían bien resueltos. Por eso, a día de hoy y gracias a sus investigaciones, es posible hablar de una noción no-cognitiva de la inteligencia referida a las habilidades de manejo emocional, personal y social, paralelas a las habilidades cognitivas conocidas.
En su propuesta, dos tipos de inteligencia llamaron la atención a la vez que generaron bastante controversia: la inteligencia intrapersonal y la inteligencia interpersonal, dos caras de la misma moneda que darán como resultado el concepto conocido como inteligencia emocional, y que más tarde divulgó el psicólogo y escritor Daniel Goleman.
El desarrollo de la inteligencia intrapersonal para prevenir el acoso escolar
La inteligencia intrapersonal es la capacidad para comprenderse a sí mismo, acceder con facilidad a la propia vida emocional, reconociendo las emociones y sentimientos. Ésta implica tener claridad sobre las razones que llevan a reaccionar de un modo u otro y a comportarse de una manera que resulte adecuada a las necesidades, metas y habilidades personales. También permite el acceso al mundo interior, para luego aprovechar la información que aporta y orientar la experiencia.
Pero, ¿puede el desarrollo de este tipo de inteligencia servir como elemento de prevención del bullying? Numerosos estudios e investigaciones así lo han corroborado, pero también han señalado la enorme importancia que se está dando a la detección de casos de acoso escolar y a la puesta en funcionamiento de los protocolos de actuación, que supera con creces las actuaciones dirigidas a su prevención y que implica intervenir antes de que se produzca.
En este sentido la educación emocional se convierte en una forma de prevención primaria inespecífica de los problemas de convivencia, teniendo en cuenta que se centra en el desarrollo de competencias intrapersonales e interpersonales, siempre en este orden.
Competencias emocionales de la inteligencia intrapersonal
Siguiendo el modelo pentagonal del doctor y psicólogo especializado en educación emocional Rafael Bisquerra podemos hablar de tres competencias emocionales que desarrollan la inteligencia intrapersonal y que son, como veremos, factores de prevención de acoso o bullying: conciencia emocional, regulación emocional y autonomía emocional.
-Conciencia emocional
Consiste en conocer las propias emociones y las emociones de los demás. Se consigue mediante la observación del propio comportamiento así como el de los otros e implica distinguir entre pensamientos, emociones y acciones. También supone comprender las causas de lo que sentimos, evaluar su intensidad y utilizar tanto el lenguaje verbal como la comunicación no verbal, con el fin de expresarlas. La clave de la autoconciencia está en saber sintonizar con la abundante información interna nuestras sensaciones, sentimientos, valoraciones, intenciones y acciones, de que disponemos sobre nosotros mismos.
-Regulación emocional
Trata de dar una respuesta adecuada a las emociones, expresarlas de manera correcta, pero sin confundir regulación con represión. Algunos componentes importantes de esta competencia son la tolerancia a la frustración, el manejo de la ira, la capacidad de demorar la gratificación, el control del estrés, la asertividad, etc…
-Autonomía emocional
Consiste en tener una serie de habilidades que promueven la independencia emocional, el no verse influenciado por los demás. Requiere una sana autoestima, autoconfianza, automotivación, capacidad de esfuerzo, percepción de autoeficacia, responsabilidad, actitud positiva ante la vida, entre otras cuestiones. Esta competencia es importante como elemento de prevención ante cualquier tipo de adicción y dependencia emocional.
¿Qué es lo que falta para erradicar el acoso escolar en los centros?
Existen estudios que señalan un perfil definido tanto de la víctima como del agresor. En el caso de la víctima se destacan los siguientes aspectos: bajas conductas prosociales, falta de atención, conductas inmaduras, ansiedad, evitación, baja autoestima, autoconcepto negativo, inseguridad, depresión, insatisfacción con las relaciones de los compañeros y docentes, dificultad de aprendizaje, bajo rendimiento académico, abandono escolar, mayor sensibilidad al rechazo y mayor riesgo de problemas psiquiátricos en la adultez.
Mientras que, por otra parte, las características que definen al agresor son las siguientes: bajos niveles de habilidades sociales en la comunicación y negociación de los deseos, de autocontrol y de empatía, conductas de imposición, justificación de sus acciones por la necesidad de lograr sus objetivos y dificultad para comprender las emociones y sus causas.
Además es importante añadir que existen evidencias científicas que demuestran que, tanto la regulación emocional como la expresión de emociones, pueden ser predictores de victimización. Conocer el mundo emocional personal y aprender a expresarlo, el desarrollo de la autoestima y el autocontrol, son competencias de la inteligencia intrapersonal, y son necesarias para construir después una convivencia sana con los demás. Una cuestión que permitirá al estudiante establecer relaciones sociales satisfactorias.
Así, el problema que se plantea en algunos planes de convivencia de los centros educativos y que convendría revisar es que centran su atención en el desarrollo de habilidades interpersonales, como la empatía, la resolución de conflictos, etc.. casi de forma exclusiva. Sin embargo, en mi opinión, una temprana y precipitada salida al mundo del otro, lo que el informe Delors llamaba ‘aprender a convivir’ sin unas sólidas bases de seguridad en uno mismo, autoestima y autonomía, es decir sin ‘aprender a ser’, puede traer consecuencias nefastas para el desarrollo de la personalidad del estudiante, que le llevará a ‘tolerar’ sin comprender, a ‘respetar’ sin respetarse, a ‘querer’ sin quererse generando un falso mundo de valores, apoyado más en las propias necesidades por cubrir que en los valores de realización personal.
Fuente del artículo: https://www.educaciontrespuntocero.com/opinion/asi-influye-inteligencia-intrapersonal-prevencion-bullying/110978.html