Por: CLADE.
Fuente: CLADE
Respuesta: Hablaré de educación inclusiva, del liderazgo necesario para garantizarla y de cómo debe ser el perfil del líder educativo para promover el necesario cambio inclusivo. Voy a estar acompañada por el director de una escuela rural que es un ejemplo de cómo la escuela inclusiva conlleva una transformación social: Juan Antonio Rodríguez, el director del CEIP Ramón y Cajal de Alpartir (Zaragoza), un docente comprometido y un gran amigo. Así que podemos decir que nuestra charla va a estar centrada en un liderazgo inclusivo en la escuela rural en la que iremos alternando teoría y práctica para evidenciar que este cambio es posible.
“La educación inclusiva es una educación transformadora que va más allá de la alfabetización “
La educación inclusiva es un derecho. Por ello, en la charla se aclararán conceptos, puesto que todavía existe confusión entre integración e inclusión. Seguimos transitando entre los dos términos con tal despropósito que yo hablo del interregno de la inclusión y de una inclusión descafeinada. Hablar de inclusión no es hablar de un alumnado concreto, ni únicamente del profesorado de apoyo; hablar de inclusión es hablar de todo el alumnado y de todo el profesorado para garantizar la presencia, la participación y el progreso de todos los estudiantes mediante prácticas transformadoras que permitan desarrollar al máximo las capacidades de todas las personas. Es, por lo tanto, una educación que no excluye, que no deja en los márgenes a nadie, que no normaliza las injusticias. Hablamos entonces de equidad y calidad como dos aspectos indisociables a la inclusión.
R: La experiencia del CEIP Ramón y Cajal de Zaragoza es un ejemplo de cómo una escuela contribuye al desarrollo de una sociedad no solo más justa e inclusiva, sino una sociedad que transforma a las personas. Los docentes pueden llevar a la práctica las propuestas de este centro, aplicar en sus aulas y en sus centros las medidas organizativas, metodológicas, curriculares y sociales que deben formar parte de un centro inclusivo y que allí se explicarán.
P: ¿Por qué se define como ‘activista de la educación inclusiva’?
R: Por la implicación personal, el compromiso y la disponibilidad constante para lograr transformar la educación y garantizar una educación inclusiva, equitativa y de calidad a todo el alumnado en nuestros centros educativos.
P: ¿Cuáles son las claves de la educación inclusiva en la escuela actual?
R: Diría que los docentes tendríamos que referirnos a la ética, a las altas expectativas, a una mirada centrada en las fortalezas que permitan que todo el alumnado se sienta querido y respetado. Y en torno a la administración diría que se necesitan compromisos serios con la inclusión real y dejar de habitar en el interregno.
La educación inclusiva es una educación transformadora que va más allá de la alfabetización; es una educación que capacita al alumnado a seguir aprendiendo y que lo motiva para hacerlo. Es una educación que se centra en la persona, en el desarrollo de su calidad de vida. Es una educación que ofrece situaciones de aprendizaje ricas y variadas para todos los estudiantes con un diseño universal. Transforma las prácticas e innova para incluir. En definitiva, transforma la vida de las personas, porque no es el niño o la niña quien tiene que cambiar, sino que son los contextos los que se deben modificar. Y esto implica analizar en el aula las barreras a la presencia, a la participación y al progreso para eliminarlas.
-Diseñar la práctica con un enfoque universal pensando desde el inicio en todo el alumnado y eliminando las barreras al aprendizaje.
-Crear ambientes de aprendizaje flexibles que permitan trabajar con aulas diversificadas.
-Compromiso y disponibilidad
Fuente: https://www.educaciontrespuntocero.com/simo-educacion/coral-elizondo-educacion-inclusiva-no-normaliza-injusticias/115483.html
América del Sur/ Bolivia/ 08.10.2019/ Fuente: redclade.org.
Fortalecer organizaciones estudiantiles para mejorar el acceso y la calidad educativa en municipalidades bolivianas. Este fue el objetivo de la Campaña Boliviana por el Derecho a la Educación (CBDE) al realizar, con el apoyo de UNICEF, una formación sobre el modelo educativo socio productivo para técnicas y técnicos regionales del país.
La formación, realizada los días 5 y 6 de septiembre, fue gestionada con la participación de distintas instituciones del país, como el Órgano Electoral Plurinacional y la Coordinadora Nacional Comunitaria de los Consejos Educativos de Pueblos Originarios de Bolivia (CNC-CEPOs), entre otras.
En los días de formación, se hizo la presentación, el análisis y la puesta en práctica del Manual de Liderazgo, guía elaborada por la CBDE que contiene un conjunto de herramientas y técnicas para el abordaje de talleres prácticos con adolescentes y jóvenes, respecto a temas, como autogobierno, liderazgo, sexualidad y prevención del embarazo no planificado.
“Hemos dado mucha fuerza al tema de prevención de embarazo no planificado, pero tomando en cuenta la voz de los y las adolescentes. Ellas y ellos reciben información de métodos anticonceptivos, pero falta profundizar la información sobre el ejercicio de sus derechos sexuales y reproductivos y la soberanía sobre sus cuerpos, desde una pedagogía participativa y dinámica que supere el trabajo cognitivo y pueda trabajar también sentires y toma de decisiones responsables; esto es lo que se propone el Manual”, afirmó Jully Calle, de la CBDE, que presentó la publicación.
Durante la formación, se trabajó también la prevención contra violencias en el ámbito educativo, desde el análisis de las distintas políticas existentes.
“Se tiene que apoyar para que todos los niños y niñas vayan a la escuela, y tengan acceso a una educación de calidad. Para eso, conformamos, ayudamos y coadyuvamos a que se conformen los consejos educativos, que es nuestro propósito principal. Obviamente, detrás de una educación de calidad está la prevención de las violencias”, afirmó Adán Pari, especialista en Educación de Unicef Bolivia.
También se pudo contar con la presentación de las guías de procedimientos electorales en formato de cartillas, las cuales serán distribuidas por el Órgano Electoral Plurinacional en distintos municipios, para promover distintas formas de democracia. Así mismo, junto a representantes de los CNC-CEPOs, se pudo reflexionar sobre la participación de adolescentes en la conformación de los Consejos Educativos Sociocomunitarios Productivos, para que los mismos tengan mayor protagonismo y puedan ejercer un rol activo en la toma de decisiones en la comunidad educativa.
Desde la promulgación de la Ley de Educación Nº 070 “Avelino Siñani- Elizardo Pérez”, se viene promoviendo en Bolivia la implementación del Modelo Educativo Socio Productivo. Una de las características de este modelo es el permanente diálogo y construcción conjunta de propuestas entre gobierno e instituciones y organizaciones de la sociedad civil.
Fuente de la noticia: https://redclade.org/noticias/bolivia-campana-realiza-formacion-sobre-modelo-educativo-socio-productivo/
Por: CLADE.
La coordinadora general de la CLADE participó en un debate sobre currículos inclusivos y evaluación educativa, en el marco del Foro Internacional sobre Inclusión y Equidad en la Educación de la UNESCO
“Es motivo de preocupación que prevalezcan sistemas de evaluación de resultados de aprendizajes, internacionales o nacionales, que no reconocen los contextos, la diversidad de lenguas, culturas y singularidades de diferentes localidades y territorios”, afirmó Camilla Croso, coordinadora general de la Campaña Latinoamericana por el Derecho a la Educación (CLADE) durante su participación en la mesa de diálogos “Currículos inclusivos y evaluación para acompañar a estudiantes en su diversidad”.
El debate tuvo lugar en el segundo día del “Foro internacional sobre inclusión y equidad en la educación”, realizado por la UNESCO – en alianza con el Ministerio de Educación de Colombia y la Alcaldía de Cali – del 11 al 13 de septiembre.
También participaron en la mesa: María Figueroa, Directora del Instituto de Evaluación de la Educación de Colombia (ICFES); Seamus Hegarty, ex presidente de la Asociación Internacional para la Evaluación de Logro Educativo (AIE); Hugo Labate, director de la Coordinación Nacional del Ministerio de Educación, Cultura, Ciencia y Tecnología de Argentina; y Georgine Obura, directora de Studio de Lenguaje de Señas en Kenia.
En el diálogo, se analizaron y discutieron estrategias para asegurar la elaboración y aplicación de currículos y materiales didácticos inclusivos e interculturales que respondan a situaciones y necesidades diversas a lo largo del ciclo educativo. Además, se examinó el modo por el cual se han revisado los métodos de evaluación para apoyar y acompañar a estudiantes provenientes de diferentes contextos, con distintas culturas, lenguas, habilidades y necesidades educativas.
“Cuando se diseñan sistemas de evaluación estandarizados y se los pone como el centro de las políticas educativas, se condiciona, desde las pruebas, todo el corazón de los sistemas educativos: los currículos, los procesos pedagógicos, las relaciones entre estudiantes y docentes, las relaciones en el interior de las escuelas y entre las escuelas”
En su intervención, la coordinadora general de la CLADE, subrayó que, aunque la Agenda de Educación 2030 esté anclada en la perspectiva de los derechos humanos, su contenido ha resultado de una fuerte presión de la sociedad civil durante los debates y negociaciones sobre la Agenda, cuando algunos actores defendieron fuertemente un foco casi exclusivo en resultados mensurables de aprendizaje, y su verificación desde la aplicación de pruebas estandarizadas. “Aunque en el texto de los ODS [Objetivos de Desarrollo Sostenible] y en la Agenda 2030 pudimos avanzar hacia una perspectiva de la educación como derecho humano, todavía persiste, especialmente en lo que toca a los indicadores del ODS 4 [Objetivo de Desarrollo Sostenible 4, referido a la educación], una gran prioridad en los resultados de aprendizaje desde un enfoque que estandariza”, afirmó.
Desde su punto de vista, “cuando se diseñan sistemas de evaluación estandarizados y se los pone como el centro de las políticas educativas, se condiciona, desde las pruebas, todo el corazón de los sistemas educativos: los currículos, los procesos pedagógicos, las relaciones entre estudiantes y docentes, las relaciones en el interior de las escuelas y entre las escuelas”.
Camilla Croso añadió que las prácticas que se promueven en consecuencia de los procesos de evaluación estandarizada, muchas veces condicionan el financiamiento de las escuelas a resultados en estos tests, y así profundizan las brechas sociales, a la vez promueven competencia, afectan los salarios docentes y la salud psicológica de estudiantes, resultando además en un reduccionismo curricular y el empobrecimiento de la experiencia educativa.
Según la coordinadora general de la CLADE, es necesario superar este modelo homogeneizador de educación, y plantear nuevas propuestas de evaluación y educación que valoren la diferencia y la diversidad de contextos, realidades, trayectorias y condiciones de las y los estudiantes, involucrando al conjunto de sujetos de la comunidad educativa en el diseño de su sentido y contenido.
El mismo día, Camilla Croso moderó los diálogos del evento paralelo al Foro de UNESCO, intitulado “Inclusión y educación en América Latina y el Caribe: temas críticos y desafíos”. El encuentro fue organizado por el Informe de Seguimiento de la Educación en el Mundo de la UNESCO (GEM).
En la ocasión, se discutieron datos y tendencias que se presentan en la formulación de una edición especial regional del Informe, que será lanzada el año entrante: el GEM 2020 sobre el Derecho a la Educación e Inclusión en América Latina y el Caribe.
Carlos Vargas, de OREALC/UNESCO: “Lo que este informe va a revelar tiene que ver con cuáles son las barreras para la inclusión, que son múltiples y se interseccionan. Va a relevar las barreras y cuáles son las causas de vulnerabilidad de distintos grupos poblacionales, como los que se encuentran en situación de pobreza, indígenas, afrodescendientes, las mujeres, la diversidad sexual y las personas privadas de libertad, etc.”
Se abordaron temas, como la situación de la atención a personas excluidas de la educación, por razón de género, desplazamiento, migración, origen étnico, idioma, pobreza, discapacidad u otras características. El Informe hará un análisis de leyes, políticas y prácticas educativas, observando distintas causas que impiden la plena inclusión de todos y todas en y desde la educación, entre ellas causas estructurales de discriminación y desigualdad.
Fuente de la reseña: https://redclade.org/noticias/camilla-croso-necesitamos-evaluaciones-formativas-que-reconozcan-a-las-diversidades-y-los-diferentes-contextos/
Asia/Líbano/29-09-2019/Autor: Armando Reyes Calderín/Fuente: Prensa Latina
Bajo calor o frío, Beirut presenta una imagen deprimente con niños agolpados en las esquinas que venden servilletas, caramelos o mendigan para conseguir el sustento diario.
La situación económica libanesa cada vez más cercana a la bancarrota, según cálculos de los especialistas, arrojó los menores a las calles, en la mayoría de casos, y a negocios, en los menos.
Otras modalidades del trabajo infantil consisten en ser recaderos de comercios, recoger basura o ser conserjes de edificios que disfrutan de una mejor cobertura de los que día a día soportan los rigores del clima, sea verano o invierno, con la esperanza de obtener una migaja alimentaria.
‘No aceptaremos ninguna industria a menos que esté libre de trabajo infantil’, declaró Abu Faour.
La presidenta de la organización no gubernamental Lucha por los humanos (Nidal Li Ajel al-Ensan, en árabe), Rima Saliba, precisó que siete por ciento de los niños libaneses forman parte de la fuerza laboral.
Se trata de un fenómeno peligroso, añadió, pues hace siete años el porcentaje era de 1.9.
Un informe de la ONU emitido en noviembre último da cuenta que seis por ciento de los menores libaneses y 6.7 de los sirios en edades de cinco a 17 años, integraban la fuerza laboral del país.
Esa cifra supera el porcentaje regional, estimado en 2.9 puntos porcentuales por la Organización Internacional del Trabajo, aunque está por debajo del promedio mundial de 9.6.
El reporte del organismo mundial refiere que el trabajo infantil en El Líbano, aumentó en los últimos 10 años ante el impacto de la crisis siria que influye en la economía nacional.
Entre los sirios, según la ONU, la imposibilidad de alcanzar residencia legal exacerbó la situación, a causa del temor de los adultos a ser detenidos y buscar alternativas en el trabajo de sus hijos.
La ley libanesa prohíbe el empleo de niños menores de 14 años, y el ministro del Trabajo pretende aumentarla hasta 15 y ser más estricto al aplicar lo estipulado en la legislación.
Para prohibir el trabajo infantil, necesitamos crear mejores circunstancias sociales y económicas para la familia, porque nadie quiere que su hijo o hija trabaje a menos que se encuentre en una situación miserable, apuntó el titular de Asuntos Sociales.
La directiva de la ong Lucha por los humanos consideró que el gobierno podría organizar capacitación para dueños de negocios, reuniones con niños trabajadores, divulgar servicios disponibles y crear escuelas para menores en situación económica crítica.
‘Quizás los ministerios por sí solos no pudieran hacer nada y tampoco nosotros, como ong, pero un plan con todos juntos, podría marcar la diferencia’, subrayó Rima Saliba.
Centroamérica/Costa Rica/26 Septiembre 2019/Prensa Latina
La investigación precisa que en 2006 y 2009 las niñas alcanzaron tasas de escolarización del 99 por ciento, pero a partir del 2012 comenzó un descenso significativo, hasta llegar a 93,6 por ciento en 2016.
Al comentar esos resultados, la ministra de la Condición de la Mujer y presidenta ejecutiva del Inamu, Patricia Mora, afirmó que su entidad ve ‘estos datos de forma alarmante. Debe determinarse si esta situación obedece a falta de cobertura educativa o porque estas niñas están trabajando desde tempranas edades’.
Pero, subrayó Mora, lo cierto del caso es que el único lugar en el cual deberían estar estas niñas es en un aula. ‘Los datos arrojan que la socialización de género y la imposición de roles promueven la inequidad y la exclusión de las mujeres del sistema educativo’, apuntó.
La ministra sostuvo que resulta fundamental reforzar medidas que garanticen la permanencia de las adolescentes en el sistema, entre ellas, una educación libre de estereotipos y prejuicios de género, así como el mejoramiento de las condiciones del entorno educativo para que adolescentes y niñas madres o embarazadas puedan dar continuidad a sus estudios.
Tras señalar que históricamente el Estado costarricense ha hecho innumerables esfuerzos por garantizar el derecho a la educación de toda su población, logrando convertirse en líder en la región en esta materia, el Inamu indica que para las mujeres la esfera educativa sigue representando un espacio de contradicciones y desigualdad.
América del Sur/Ecuador/22.09.2019/lahora.com.ec
A Ivis Pinto, quien tiene 11 años, le diagnosticaron diabetes tipo 1 cuando tenía 10. Padecer una enfermedad catastrófica la ha obligado a estar lejos de sus compañeros, pero eso no significa que esté perdiendo clases. Ella aprende todo lo que puede en el Baca Ortiz, donde funciona el programa de aulas hospitalarias, dirigido por el Ministerio de Educación, en convenio con el Ministerio de Salud.
El día en que se inauguró el año lectivo, disfrutó la presentación de un grupo de danza, que escogió la canción ‘Bajo el mar’ de la película ‘La Sirenita’.
Cada vez que necesita recibir tratamiento, Ivis y su madre Karina Jiménez, de 38 años, viajan desde Riobamba (Chimborazo), para que la niña reciba tratamiento en Quito. Esto, porque en su ciudad no hay diabetólogos infantiles.
Jiménez señala que la estancia de su pequeña en el hospital siempre es indeterminada. “Hay veces que se estabiliza y luego, en cuestión de horas o minutos, se descompensa”.
A pesar de su situación, a Ivis le motiva no perder clases, aunque con una sonrisa entristecida indica que extraña a sus amigos. Como ella, cerca de 14.000 estudiantes se educan bajo esta modalidad.
Fernanda Yépez, subsecretaria de Educación de Quito, señala que el objetivo es que los niños y jóvenes no tengan un retraso al integrarse a sus instituciones.
Apoyo familiar
“Como mamá es muy difícil estar aquí. Yo paso aquí desde las 07:00, hasta las 19:00”, cuenta Lizeth Romero, madre de una pequeña de 10 años, quien tuvo una perforación intestinal a causa de una peritonitis.
14 casas de salud de la ciudad ofrecen este servicio.
Romero valora las clases que se imparten en los hospitales, porque ayudan a que los chicos sobrelleven sus enfermedades y no pierdan tantas clases. Agrega que el apoyo emocional de los padres también es indispensable.
Jiménez comparte este criterio, pues considera que la labor no es únicamente de los docentes. Para que su hija esté al día, ella viaja constantemente a Riobamba para dejar las tareas. “Es complicado, pero nos estamos adaptando”, dice mientras abraza a Ivis para ayudarle a que se ponga de pie. (AVV)
Clases a domicilio
° El programa de aulas hospitalarias también se ejecuta de forma ambulatoria y domiciliaria. Como parte de este componente, las docentes van a las habitaciones u hogares de los pacientes que, por distintas razones no pueden movilizarse, y ahí refuerzan las materias que sean necesarias. Para esto, se requiere una evaluación por parte de la trabajadora social.
Dependiendo del diagnóstico médico, el Distrito también asigna un docente domiciliario.
El trabajo en conjunto con las instituciones educativas de los niños es fundamental, para que las docentes y sicólogas de los hospitales sepan los temas en los que deben trabajar.
Cifras
La iniciativa
° Hay 78 aulas hospitalarias a escala nacional
° Desde 2006, cerca de 62.000 niños y adolescentes se han beneficiado del programa.
° 12.000 niños fueron atendidos en 2018.
Fuente e imagen: https://lahora.com.ec/quito/noticia/1102273709/aulas-que-ayudan-a-chicos-en-hospitales