Page 105 of 213
1 103 104 105 106 107 213

Lo efímero del Nuevo Modelo Educativo

México / 3 de septiembre de 2017 / Autor: Observatorio del Derecho a la Educación y la Justicia / Fuente: Educación Futura

La historia reciente en México parece mostrar que en cada periodo presidencial se repite la creación y presentación de una propuesta educativa que invariablemente anuncia que en el mediano y largo plazo se harán posibles los avances educativos que el país demanda, y aunque, no parece ser suficientemente claro qué es lo que el país demanda, la población no deja de tener esperanza en que la educación posibilita una mejor calidad de vida. Con ello entramos a un círculo, no precisamente virtuoso, donde los avances siguen siendo insuficientes al carecer de una visión crítica e histórica.

Un punto central en el documento oficial del Nuevo Modelo Educativo es el perfil de egreso del estudiante, mismo que muestra once fines, con metas específicas para cada uno de ellos y para cada uno de los niveles educativos desde el preescolar hasta la educación media superior.

Entre los fines y ámbitos se enmarcan contenidos que corresponden a las siguientes temáticas:

  • Lenguaje y comunicación.
  • Pensamiento matemático.
  • Exploración y comprensión del mundo natural y social.
  • Pensamiento crítico y solución de problemas.
  • Habilidades socioemocionales y proyecto de vida.
  • Colaboración y trabajo en equipo.
  • Convivencia y ciudadanía.
  • Apreciación y expresión artística.
  • Cuidado del medio ambiente.
  • Habilidades digitales.

Esta temática no presenta mucha novedad si la comparamos con la propuesta curricular de la Reforma Integral de la Educación Básica (RIEB), que se enfocaba en:

  • Elaboración de proyectos didácticos.
  • Situaciones problemáticas orientadas a la indagación y la formulación de argumentos que validen los resultados.
  • Procedimientos formativos basados en el diálogo, la reflexión crítica, los proyectos de trabajo, el desarrollo del juicio ético, la participación.
  • Secuencias didácticas relacionadas con el arte, el lenguaje, además del entorno natural y social (SEP, 2011).

La RIEB integraba un enfoque socio-cultural y cognitivo basado en una epistemología de pensamiento crítico y científico (SEP, 2011). Fue resultado de un proceso que inició en 1993 y se consolidó a finales de 2006 mediante acuerdos entre los sectores interesados.

El nuevo modelo educativo es sin duda resultado de la sistematización de diversas perspectivas sociales propuestas por el CIDE (2016), sin embargo, el momento en que se presenta e intenta poner en operación no parece estar en su favor. Por un lado, surge de un mandato autoimpuesto a través del artículo transitorio número 12 de la versión 2013 de la Ley General de Educación (Diario Oficial de la Federación, 2013) que a la letra dice: “a efecto de dar cumplimiento a la obligación de garantizar la calidad en la educación, las autoridades educativas deberán proveer lo necesario para revisar el modelo educativo en su conjunto, los planes y programas, los materiales y métodos educativos”. Por otro lado, se anuncia como respuesta a los problemas detectados al inicio del periodo gubernamental, con los tiempos políticos operando en contra, después del cuarto año del sexenio, en el ocaso del actual gobierno federal.

Aunque se llega a aceptar que los cambios de un modelo educativo, cualquiera que sea, implican una visión de largo plazo, no parece considerarse la necesidad de un proceso de apropiación cultural por parte de los docentes y la sociedad, mismo que requiere mayor tiempo y cuidado, lo cual seguramente va más allá de los tiempos sexenales.

El hecho es que los modelos educativos siguen más vinculados a las necesidades y oportunidades de los gobiernos de turno que a lo propiamente educativo. Se proponen verticalmente versiones recicladas que no aportan mayor espacio a la construcción desde la escuela. Una muestra está en el asunto de la autonomía que, aunque es un concepto usado en el discurso y normativa oficial desde hace bastantes años, no deja de ser en la práctica un intento pobre. Está reducida a que la escuela y su director tengan ahora la “oportunidad” de gestionar recursos materiales y económicos, poniendo así en evidencia la carencia de recursos que enfrenta la propia Secretaría de Educación para cumplir con los mandatos constitucionales y limitando el tiempo del director para dar un seguimiento creciente a los procesos educativos de su escuela.

El actual modelo educativo, como anteriores modelos, no deja de ser un documento general, con poca posibilidad de efectividad, pero aún más frágil a diferencia de otros por el tiempo en que se promulga, a menos de dos años de terminarse el sexenio 2012-2018, y con poca posibilidad de continuidad por parte del partido en el poder.

De esta manera se puede afirmar que la relación entre gobierno, escuela y sociedad, sigue sin encontrar un carácter verdaderamente constructivo. Los mecanismos para concertar siguen sin ser relevantes y la verticalidad no deja de estar presente. Incluso, lo que se llegó a pensar como un buen medio para el desarrollo de los centros educativos y su vínculo con su contexto cercano, los llamados Consejos de Participación Social, siguen siendo una posibilidad latente. Por otra parte, lo que podría ser un espacio de crecimiento de la autonomía escolar, como son los Consejos Técnicos Escolares, no dejan de ser un espacio de trabajo mensual dedicado a seguir puntualmente lineamientos preestablecidos por autoridades a nivel federal, dando poco margen de acción a directores y docentes para decidir de manera más autónoma y con base en su experiencia y las necesidades del contexto donde se ubica su escuela.

Las escuelas de educación básica continúan siendo asumidas por las autoridades como un elemento operario de las decisiones centrales sin mayor margen de autoría por parte de quienes integran las comunidades escolares (docentes, directivos, padres de familia, etc.). Ante esto cabe preguntarse, ¿qué se puede esperar de este Nuevo Modelo Educativo? ¿cuál es la autoría que le imprimirán los maestros? ¿o se trata más de lo mismo? ¿será sólo un problema de confianza en los subalternos o será también que los intereses políticos y económicos atados a lo educativo no quieren ser trastocados? ¿no es tiempo ya de dar paso a lo propiamente educativo sin estructuraciones apresuradas?

Referencias

CIDE (2016). Consulta sobre el modelo educativo. Disponible en línea en: https://www.cideconsultamodedu2016.info/

Diario Oficial de la Federación (2013). Decreto por el que se reforman, adicionan y derogan diversas disposiciones de la Ley General de Educación. Disponible en línea en: http://www.dof.gob.mx/nota_detalle.php?codigo=5313841&fecha=11/09/2013

SEP (2011). Plan de estudios 2011. Educación básica. Disponible en línea en: https://www.gob.mx/sep/documentos/plan-de-estudios-educacion-basica-en-mexico-2011

SEP (2017). Modelo educativo para la educación obligatoria (2017). Disponible en línea en: https://www.gob.mx/cms/uploads/attachment/file/198738/Modelo_Educativo_para_la_Educacio_n_Obligatoria.pdf

Fuente del Artículo:

Lo efímero del Nuevo Modelo Educativo

Comparte este contenido:

República Dominicana: Lanzan campaña sobre 20 mil becas disponibles en programas de excelencia para estudiar educación

República Dominicana / 3 de septiembre de 2017 / Autor: De Sociales y Mas Digital / Fuente: Youtube

Publicado el 3 sep. 2017
Esta iniciativa demuestra el compromiso del presidente Danilo Medina con la mejoría de la calidad de la educación dominicana SANTO DOMINGO.- En el marco de la meta presidencial de tener las aulas llenas de profesores motivados y bien formados, el Ministerio de Educación junto al Ministerio de Educación Superior, Ciencia y Tecnología (MESCYT) y el Instituto Nacional de Formación y Capacitación del Magisterio (INAFOCAM), lanzó hoy la campaña “Docentes de Excelencia” para atraer jóvenes estudiantes a la carrera magisterial.
Comparte este contenido:

Del presente al pasado. La enseñanza de la Historia en el IEMS-CDMX

México / 3 de septiembre de 2017 / Autor: Observatorio Pedagógico del Valle de México / Fuente: Revista El Arcón de Clío

“Es preciso, y esto transtorna todavía más nuestros hábitos, tomar en cuenta el hecho de que la reflexión histórica es regresiva,
de que funciona normalmente a partir del presente, en sentido inverso del fluir del tiempo, y que ésta es su razón de ser fundamental.”  Jean Chesneaux

Este bachillerato, que nació en la Ciudad de México hace 18 años, se planteó un nuevo modelo educativo en el que los estudiantes adquirieran una formación científica, crítica y humanista. El nuevo modelo por ende significó también un nuevo plan de estudios, y la Historia impartida en él igualmente sería distinta, pues se basó en la Nueva Historia.

En el IEMS las materias de Historia se estudian en los cuatro últimos semestres y se da la opción de un quinto curso, una optativa que es la de la Historia de la Ciudad de México, ya que es de interés para quienes habitamos en ella.

Cuando el IEMS empezó se pensó que la Historia debía hacerse atractiva a los estudiantes, acercándola a sus intereses, por lo que la forma de abordarla sería del presente al pasado y estudiando al mismo tiempo México y el mundo, pues en México tradicionalmente se ve la Historia de nuestro país separada de la del mundo, digamos que en distintos semestres, por lo que este enfoque no sólo era novedoso sino un reto para los docentes, puesto que no se tenía la preparación previa para impartirla desde esa perspectiva.

El presente debía ser cuestionado y a partir de la observación de él, se suponía que los estudiantes buscarían las raíces en el pasado, así Historia I abarca los procesos de la Guerra Fría y la Posrevolución Mexicana, pero dado que esta materia era la introducción al nuevo enfoque se trabaja también la parte teórica -en la que se aborda la cuestión historiográfica a fin de entender y conocer el sustento teórico de esta forma de ver la Historia y la parte metodológica, pues se les dan las bases para que desarrolle una investigación histórica.

En Historia II se aborda la primera mitad del siglo XX y todo el siglo XIX, tomando como ejes los movimientos revolucionarios de ese periodo, mundiales y mexicanos. En Historia III se revisa del siglo XVIII al V, básicamente en occidente, así como el periodo colonial de México. Por último, en Historia IV se estudia la Antigüedad clásica y un poco de prehistoria -el proceso de sedentarización y los inicios de la urbanización- y se da una rápida mirada al periodo prehispánico de América. No obstante, dado que los semestres son bastante cortos (más bien debíamos hablar de trimestres), y que las bases con las que llegan los estudiantes a los cursos de Historia son casi nulas, lamentablemente casi no hay oportunidad de profundizar en los procesos, por lo que es muy importante no perder de vista los objetivos de la materia.

La dificultad para impartir Historia con esta nueva orientación ha sido grande, si bien todos tenemos mínimamente la formación de licenciados en Historia, ésta es muy heterogénea (venimos de diferentes escuelas con concepciones distintas sobre ella), y a eso le sumamos que ya en el IEMS no se nos preparó como docentes para trabajar con este enfoque, por lo que partimos únicamente de la experiencia previa individual.

En mi caso, dado que me dedico a la Historia Oral, se me han facilitado algunos cursos, como los de Historia I y la Optativa, pero aquellos de mis compañeros con una concepción historicista tienen grandes dificultades para, incluso, la aceptación del modelo.

Esta forma de abordar la Historia me ha planteado muchos retos, llegando a la conclusión de que lo más importante es que los estudiantes aprendan a ubicarse en tiempo y espacio y que adquieran una conciencia histórica a fin de que construyan herramientas de análisis, no obstante, una de las mayores dificultades han sido las escasas bases con las que los estudiantes llegan a estas prepas. En general su desconocimiento de la geografía tanto del país como la mundial es verdaderamente sorprendente, cuesta trabajo pensar que no saben dónde están los continentes, los océanos, los puntos cardinales, etc., y que, por el otro lado, tampoco ubican nada en el tiempo, incluso ignoran en qué siglo nacieron o en qué siglo viven, por supuesto que para ellos el proceso de la Revolución Mexicana (1910-1940) es tan lejano como la prehistoria, ya que es un pasado que ni a sus abuelos les tocó vivir.

Y si a eso le sumamos que los estudiantes no tienen hábitos de lectura, ni saben cómo estudiar, y que finalmente la mayoría son adolescentes con escasos recursos por lo que frecuentemente faltan a sus clases pues también trabajan, la situación se va poniendo crítica y las escasas dos sesiones por semana -cada una de hora y media- no son suficientes para lograr los objetivos mínimos que se buscan con la impartición de las materias de Historia en el IEMS.

Ser parte de una institución que se planteó educar con un nuevo modelo ha sido un reto muy enriquecedor en muchos sentidos, me ha llevado a prepararme teóricamente más a fin de entender lo que se busca con este enfoque histórico, no obstante, pienso que la discusión sobre él entre todos los docentes de Historia del IEMS es necesaria (pues somos 20 preparatorias y en cada una de ellas hay en promedio 5 personas impartiendo estas materias) con la finalidad de que esta Historia que es presente y que pretendemos enseñar de manera integral (México y el mundo) sea de ayuda para nuestros estudiantes.

 

María Concepción del Consuelo Hernández Ramírez

Licenciada en Historia por la UNAM

Docente de Historia del IEMS-CDMX

Integrante del Observatorio Pedagógico del Valle de México

Pasante de Maestría en Historia de México por la UNAM con

Tésis en elaboración sobre los exilios latinoamericanos en México

mconher130@yahoo.com.mx

 

Fuente del Artículo:

Del presente al pasado. La enseñanza de la Historia en el IEMS-CDMX

Comparte este contenido:

Libro: El Fraude de la Reforma Educativa, Reflexión Crítica

México / 3 de septiembre de 2017 / Autor: Manuel Bartlett Díaz y Luis G. Benavides Ilizaliturri / Fuente: Dominio Ciudadano

En su libro los autores presentan una reflexión crítica de la más reciente Reforma Educativa utilizando argumentos asociados a la concepción de la propia Educación, a la fundamentación del modelo educativo, al papel que juegan los organismos internacionales en su orientación, y a los procesos seguidos para su legitimación política y social.

El Dr. Manuel Bartlett es Doctor en Ciencias Políticas por la UNAM; fungió como secretario de Gobernación (1982-1988), Secretario de Educación Pública (1988-1992) y Gobernador del Estado de Puebla (1993-1999). Actualmente se desempeña como Senador de la República. Mientras que Luis Gonzaga Benavides Ilizaliturri, es Doctor en Pedagogía por la Universidad de Salamanca (España) y en Ciencias Religiosas por la Universidad Lateranense de Roma, así como, asesor de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, la Organización de los Estados Americanos y de la Secretaría de Educación Pública.

Fuente:

http://iide.ens.uabc.mx/index.php/477.php

Fuente de la Imagen:

http://dominiociudadano.org/el-fraude-de-la-reforma-educativa/

Link de descarga:

http://dominiociudadano.org/wp-content/uploads/2016/11/FRAUDEcif.pdf

 

Comparte este contenido:

Entrevista a Facundo Manes: “Tenemos que preparar a los alumnos para manejar la incertidumbre, y no estoy seguro de que la escuela esté preparando para eso»

31 agosto 2017/Fuente: Diario de la Educación

Facundo Manes es un importante neurocientífico argentino que ha estado en Madrid presentando el Observatorio Iberoamericano sobre Neurociencia y Educación. Hablamos con él de la relación entre ambas.

Facundo Manes (Quilmes, 1959) es un neurocientífico argentino que hace unos días estuvo en España para la presentación del Observatorio Iberoamericano de Neurociencia y Educación, creado por su Fundación Ineco en colaboración con la Fundación Telefónica.

Es un hombre afable, capaz de responder sin dudar mientras mira el móvil que, intuímos, no puede dejar un momento. Preside la Fundación que montó, en la que investiga, da clase en universidades americanas y australianas es un investigador prestigioso en diferentes centros internacionales de investigación.
¿En qué consiste el Observatorio?
Yendo al foco de tu pregunta, primero tengo que explicar qué es la neurociencia. Es una área que estudia el sistema nervioso. La neurociencias cognitivas, estudian los procesos mentales.
En las últimas décadas ha habido muchos avances porque hay miles de investigadores conectados porque las preguntas que intentamos resolver son difíciles como para hacerlo aisladamente.

La educación es, básicamente, reforzar el aprendizaje. Y también es y se da entre dos cerebros. Y resulta obvio pensar que entender el cerebro impactará en la educación. Entender el cerebro es entender cómo el cerebro aprende. Y también entender cómo dos cerebros se comunican.

Hay un problema. Neurociencia y eduación son dos mundos diferentes. Uno de los desafíos es trabajar, sin jerarquías, entre docentes y neurocientíficos o neurólogos o psiquiatras. La neurociencia y sus avances, en mi opinión, van a impactar en todo lo que hacemos puesto que desde respirar hasta resolver los dilemas morales complejos, todo, lo hacemos con el cerebro.

Para mí sería un error, y esa es una de las funciones del Observatorio, que todos estos datos que puedan transmitirse de la neurociencia a la docencia, sean unidireccionales. Tienen que ser discutidos. La neurociencia tienen que aportar datos de su área a la educación y los educadores tienen que aportarnos datos a nosotros.

De eso se trata ese observatorio entre la Fundación Telefónica y la Fundación Ineco, que en Latinoamérica haya un debate entre educadores y neurocientíficos sin jerarquía, codo a codo, para discutir los aportes actuales, los mitos que circulan.

¿Qué mitos son esos?
Pues, por ejemplo, que hay técnicas de aprendizaje con el cerebro derecho o el izquierdo, basadas en cada hemisferio. Eso no tiene una evidencia científica. Hay escuelas que aseguran educar con cierta lateralidad. Hace décadas, a gente con epilepsia intratable se le cortaba la conexión entre ambos hemisferios, el cuerpo calloso. Los investigadores estudiaron a esos pacientes y vieron que el cerebro izquierdo tenía funciones más lógicas y el derecho más holísticas. Pero la mayoría de nosotros vivimos con ambos hemisfeios unidos, con un solo cerebro. Otro mito es el de que usamos el 10% del cerebro. No hay evidencia científica.

¿Cómo aprende el cerebro?
Sabemos desde la ciencia que nuestro cerebro fundamentalmente aprende cuando algo nos inspira, nos motiva y nos parece un ejemplo.

Y en esta época el docente se encuentra ante un desafío. Cuando muchos de nosotros éramos chicos, el docente tenía información que nos pasaba y esto generaba un respeto. Hoy la información está disponible. Un chico que tiene un celular y acceso a Internet, tiene más información de la que tenía el presidente de Estados Unidos cuando decidió conquistar la Luna.

La información era lo que daba poder al docente, y hoy está disponible y cada vez va a estar más disponible. Pero eso no quiere decir que el docente va a desaparecer, porque hoy sabemos desde la ciencia que el factor humano es clave para el aprendizaje.

Hubo un experimento en Estados Unidos, con chiquitos de 4 o 5 años, que nunca habían estado expuestos a otro idioma que no fuera el inglés. Los dividieron en tres grupos. El primero, con un chino, en contacto con ellos, les enseñaba chino con una técnica determinada, durante cierto tiempo. Al segundo grupo, con el mismo chino, la misma técnica, el mismo tiempo, pero por televisión. Al tercer grupo, el mismo chino, la misma técnica,el mismo tiempo, pero con auriculares. Quienes tuvieron contacto personal con el chino podían diferenciar palabras como chiquitos de su edad en Pekín. Los otros dos grupos no aprendieron nada.

El contacto personal es clave, y por eso la educación a distancia, que es importante, no reemplazará el contacto humano. Como neurocientífico te puedo decir que la educación acabará siendo mixta, a distancia, pero también personal. No desaparecerá el docente, el mentor.

Estas son las cosas que queremos hablar en este observatorio en América Latina. Queremos hablar desde las evidencias científicas hasta de los mitos que no tiene sentido tenerlos presentes.

La idea es generar en España y América Latina un foro donde se una más gente, se haga debate y se genere una mezcla de especialidades.

¿Entre los docentes falta mucha formación e información sobre neurociencia?
Sí, pienso que es así. Mi grupo de investigación hizo un trabajo sobre los mitos y los docentes en América Latina, que muestra que falta información, pero también que hay mucho interés sobre qué sabemos y qué no sabemos…

¿Qué sabemos hoy?
Muchas cosas, por ejemplo, que una alimentación adecuada es muy importante para el cerebro. La desnutrición, sobre todo en muchos países de América Latina, produce atrofia cerebral. Si queremos educar, primero tenemos que tener un cerebro bien nutrido.

Vivir en un contexto de pobreza genera conductas que perpetúan la pobreza. Sabemos desde la ciencia que aunque uno coma bien, si vive en un contexto de pobreza, esta y el contexto generan conductas que perpetúan la pobreza. Hay un sector que no puede jugar el partido de la educación.

Hay un sector que tiene que nutrirse bien y tiene que mejorar el contexto de pobreza, no solo porque es inmoral, sino también porque esos chicos no van a tener las aptitudes como alguien bien nutrido y en un contexto más positivo.

También el ejercicio físico es importante para el cerebro. Esto ya lo sabe el docente intuitivamente, o por experiencia, pero hoy sabemos que genera nuevas conexiones neuronales, baja la ansiedad, mejora el ánimo, refuerza el pensamiento creativo. Dormir bien… el sueño es clave para consolidar la memoria. Cuando uno duerme mal, está irritable, tiene menos atención… Evitar el estrés. Las situaciones de estrés no permiten aprender de forma óptima.

También sabemos que fomentar la lectura es algo importante para el cerebro y generar un contexto positivo. Los contextos son muy importantes. Sabemos que aprender una nueva lengua es bueno para el cerebro, más allá de tener otro idioma, porque mejora ciertos controles ejecutivos del lóbulo frontal.

Otra de las cosas que sabemos es que jugar es muy bueno, jugar, inclusive cuando somos adultos. No jugamos y hay que jugar. Y los chicos tienen que hacerlo, es muy importante para el aprendizaje.

Hablabas de contextos, ¿las aulas son el mejor sitio para aprender?
Si agarrás este celular (un iPhone) y uno de hace 15 años, son totalmente diferentes. Un auto actual y uno de hace 15 años. El docente y las clases son iguales. Todavía hay aulas donde están todos los chicos sentados. Esto tiene que ver con la revolución industrial, donde todo era seriado. Creo que eso tiene que ser revisado.

Volviendo al docente, tiene que reinventarse, porque la información ya está disponible, y básicamente transmitía informacón; pero ahora ya está libre, y lo estará más. Tenemos que reinventar al docente. Nunca va a desaparecer pero tendremos que reinventarlo para que, a partir de la información que ya está, enseñe, inspire, o motive para que se genere nueva información, para que se trabaje en equipo, para presentar la información, para comunicar la información… El docente tiene un rol, pero el de transmitir la información necesita un cambio, como el de la colocación de las aulas.

Todavía no sabemos a dónde ir, pero sabemos que nuestros hijos (yo tengo dos hijos de 11 y 8 años) van a tener 6 o 7 trabajos que todavía no han sido inventados. ¿Te acordás del fax, te acordás de Blockbuster (tienda de alquiler de vídeos y DVD que quedró)?.

Tenemos que preparar a los chicos para manejar la incertidumbre, para generar nuevos trabajos. Y no estoy seguro de que la escuela esté preparando para eso. Sabemos que el docente tiene que motivar, inspirar. Y hoy el docente no sabe cómo hacerlor. Es un tema con el que tenemos que ayudar entre todos.

En los últimos años ha habido muchas reformas basadas en evaluaciones como PISA. Las administraciones, ¿han mirado hacia la neurociencia? ¿le hacen suficiente caso a lo que podéis aportar en educación?

No tengo claro qué está pasando en cada sistema educativo, pero mi intuición es que la presión viene del docente. Cuando el docente se da cuenta de que necesita nuevas técnicas, conocimientos, reinventarse, busca la neurociencia como una herramienta. Y nuestro rol, desde el Observatorio, va a ser decirle que no todas las respuestas pueden venir de la neurociencia.

¿Cómo consige el docente inspirar a sus alumnos?
No tengo la respuesta, pero los alumnos tienden a aprender más cuando están intrínsecamente motivados por lograr algo. Esa es una tarea que tiene que hacer el docente.

Otro aspecto es que la inteligencia no es algo fijo con lo que uno nace, innato, que tiene un destino. El esfuerzo es muy importante. En muchos lugares está el concepto de: “Alguien es muy inteligente, porque no estudió y le fue bien”. Esto es un error que genera un sesgo mental negativo. Cuando alguien tiene una habilidad, que puede ser para la matemática, para la música, para las ciencias, y le va bien, es un error de la familia o el docente decirle: “Qué bien, sos inteligente”. Hay que valorar el esfuerzo, más que la habilidad innata.

Hay muchos casos que chicos que rendían bien en matemáticas en séptimo grado, con el tiempo decayeron, porque se confiaron en su inteligencia. Sabemos que hay que enfocar en el esfuerzo, y este, es hacer sentir al alumnos intrinsecamente motivado por lograr algo.

Recalcar o felicitar una habilidad es un error. La inteligencia y las habilidades requieren esfuerzo, y no ideas fijas de que alguien puede o no. Esto puede ser tóxico. La inteligencia se modula, como la creatividad. Que por cierto, también sabemos en qué contextos se produce.

¿En cuáles?
Primero, necesita preparación. Esto puede llevar años.

Cuando yo era chico pensaba que antes de morirme iba a tener una idea que iba a influir en la humanidad. Esto no va a pasar si no hay ciertos procesos previos. Lo primero es tener preparación. Preparación en un tema o en varios, porque el conocimiento se genera en equipo.

Luego hay que tener una obsesión en el dilema, que puede ser una pintura, una melodía musical, una fórmula matemática, en un experimento científico, una programacón de software. Lo que sea. Pero hay que obsesionarse con un dilema. El pensamiento obsesivo, no ser obsesivo compulsivo, correlaciona con creatividad.
Luego hay que relajarse. Los momentos “eureka” o “ajá”, suceden cuando estamos dormidos, entre dormidos… en un taxi, en el tren. Además de estar un poco loco, no mucho pero un poco.

Y, también, hay que estar preparado para equivocarse. Equivocarse es necesario y acá tenemos un problema porque la educación estigmatiza el error: “Uy me equivoqué, me voy a equivocar. Uy, se va a equivocar”. Hay que equivocarse. Mucho.

Y hay que vivir en un contexto creativo. ¿El Renacimiento qué fue? Un contexto creativo; por eso Miguel Ángel, por eso Leonardo. Silicon Valley ¿por qué produce tanta tecnología? Porque hay un contexto creativo.

Paul McCartney soñó la melodía de Yesterday. Y se despertó y la escribió. Ahora, yo puedo dormir 30 años y no voy a soñar la melodía de Yesterday, porque no soy músico, no tengo preparación. Él sí; además estaba obsesionado en las últimas semanas con una melodía que no salía,estaba en periodo de incubación. Luego se relajó y cuando el cerebro se relaja procesa información que adquirió cuando estaba atento. Y luego surgió el momento “eureka”.

Si bien no sabemos bien cómo se genera la creatividad sabemos qué procesos son necesarios para que surja o tengamos más chance de ser creativos. Y sabemos que el azar favorece a las mentes preparadas.

Otro aspecto, y ya creo que no hay más aspectos, es el impacto de la tecnología. Tenemos recursos cognitivos limitados y cambiar de tarea permanentemente como hacemos de Twitter, WhatsApp, mail, diario 1, diario 2, Instagram, Facebook… nos hace menos productivos y nos estresa, nos agota mentalmente. La tecnología es fantásticas pero hay recursos limitados y cuando hacemos cambios de tarea rápidos, hay un impuesto mental tremendo.

¿La parcelación del conocimiento en asignaturas debería cambiar?
Yo creo que estamos en una revolución educativa en el mundo, una revolución 4.0 y necesitamos una revolución de la educación. Si bien, no creo que la neurociencia tenga la respuesta, puede ser una de las herramientas para pensar cómo hacer este cambio que necesitan todas las sociedades. Todo el mundo necesita un cambio del paradigma educativo.
Lo que tenemos que hacer básicamente es preparar a los chicos paramanejar la incertidumbre, para generar nuevo conocimiento a partir de la información que tenemos y sabemos que hay que aprender toda la vida.

Este es otro de los aspectos en que puede ayudar la neurociencia: hoy sabemos que el cerebro nunca se tiene que jubilar de lo que le gusta. Hasta el último día de la vida hay que vivir apasionado y aprendiendo cosas. Si no, hay un impacto en el cerebro. Tenemos que estar educándonos toda la vida.

Hoy sabemos que la educación es un factor de protección cerebral. Mi padre me decía: “Estudiá, estudiá”, yo no sabía para qué me decía, pero igual le hice caso. Estudiar genera mayor conexión cerebral, motivación, perspectivas de futuro… de verdad que es un buen protector cerebral la educación.

Fuente: http://eldiariodelaeducacion.com/blog/2016/11/07/tenemos-que-preparar-a-los-alumnos-para-manejar-la-incertidumbre-y-no-estoy-seguro-de-que-la-escuela-este-preparando-para-eso/

Comparte este contenido:

Se prepara educación indígena para la atención de nuevos retos en México

América del Norte/México, 30 de agosto de 2017.  Fuente: www.elsoldetlaxcala.com.mx

En cumplimiento a lo establecido en la reforma y Nuevo Modelo Educativo, el subsistema de educación indígena se prepara para enfrentar distintos retos durante el ciclo escolar 2017-2018, entre los que destaca el inicio de la evaluación de su personal docente, así como la integración de las acciones de preservación de las lenguas nativas como el Nahuatl y el Otomí, a los planes y programas de estudio.

Al respecto, el jefe del departamento de educación indígena en la Unidad de Servicios Educativos de Tlaxcala (USET), Miguel Reyes Tepal González, señaló que en el próximo proceso evaluativo, iniciará el registro para los maestros del subsistema, quienes en el apartado de lengua adicional, serán evaluados en el manejo de lenguas maternas.

Destacó que buscarán que el 100 % de los maestros de educación indígena sean sometidos a la evaluación, pues prevén la participación de los 260 docentes que trabajan en este subsistema en la entidad.

Por lo anterior, resaltó que a través de talleres en el que reciben capacitación supervisores, comenzarán a apoyar al resto de los trabajadores del subsistema, para enfrentar de forma satisfactoria, la evaluación docente

Por otra parte, aseguró que a raíz del programa federal implementado para que los alumnos de educación básica que eran atendidos por el Consejo Nacional de Fomento Educativo (Conafe), formen parte de escuelas regulares, el subsistema de educación indígena, en preescolar y primaria, ha captado a los niños “que se estaban quedando sin escuela”.

Agregó que “por la desaparición del Conafe” la matrícula de las escuelas indígenas en Tlaxcala creció un 10 %, al pasar de cinco mil 400 alumnos a más de seis mil estudiantes.

Precisó que educación indígena en Tlaxcala opera con 56 escuelas, de las cuales 22 son de educación inicial, 20 en preescolar y 14 en primaria, servicios que aún son demandados en algunas regiones, pero que por la presencia de instituciones estatales y federales no pueden apertura nuevos planteles.

Mencionó que durante el ciclo escolar 2017-2018, retomarán las actividades de implementación del nuevo modelo educativo, en el que el personal docente tendrá que enfocar acciones para mantener la identidad de la comunidad indígena, principalmente para la conservación de las lenguas nahúatl y otomí.

Agregó que en la comunidad de San isidro Buen Suceso, perteneciente al municipio de San Pablo Apetatitlán, es en donde trabajan en la preservación del náhuatl y en Ixtenco el Otomí, como las regiones con mayor presencia de comunidades indígenas.

Refirió que con el apoyo de los padres de familia, el subsistema continúa los trabajos de preservación de las características y costumbres de estas regiones, principalmente de las lenguas nativas.

Comentó que a través del programa de fortalecimiento curricular, el subsistema labora con su personal docente, de ahí que ya prevén acciones de capacitación para integrar las costumbres de cada región a los planes y programas de estudio.

Señaló que en el nivel primaria, a través de actividades como el Concurso Nacional de Narraciones, fortalecen la preservación de las lenguas indígenas, de ahí que buscarán que este tipo de actividades continúen a lo largo del ciclo escolar.

El jefe del departamento de educación indígena en la Unidad de Servicios Educativos de Tlaxcala, Miguel Reyes Tepal González, destacó que buscarán que el 100 % de los maestros de educación indígena sean sometidos a la evaluación, pues prevén la participación de los 260 docentes que trabajan en este subsistema en la entidad.

Fuente noticia: https://www.elsoldetlaxcala.com.mx/local/694482-se-prepara-educacion-indigena-para-la-atencion-de-nuevos-retos

Comparte este contenido:

Entrevista a Raúl Céspedes: “La transformación en la educación debería surgir del cambio de mentalidad del profesorado”

28 agosto 2017/Fuente: Educación Tres Punto Cero 

Doctor en Educación, Máster en Investigación e Innovación en Educación Infantil y Educación Primaria, maestro de Educación Primaria e investigador de la Universidad de Murcia, Raúl Céspedes Ventura, reflexiona en este artículo sobre la evolución que debería seguir la educación para una innovación eficaz. En su opinión, es imprescindible primero investigar para no realizar un cambio sin base ni sentido. 

Vivimos en una época caracterizada por el cambio, un fenómeno que define nuestra sociedad al igual que lo hace la información, la tecnología o el conocimiento. Sin embargo, hay que puntualizar que ese cambio es recurrente y, aunque parezca que es el momento perfecto para evolucionar, precisamente lo que nos envuelve es un entorno inestable de constante generación de información y proliferación descontrolada de propuestas de mejora. Hoy todo el mundo se apunta al cambio: youtubers con aspiraciones de influencers que dan consejos sobre cómo introducir la innovación en el aula o bloggers que se convierten en expertos en Aprendizaje Basado en Proyectos, Flipped Classroom o cualquier otro movimiento educativo o tuiteros con hashtags ingeniosos que hacen correr como la pólvora asuntos como la insufrible temperatura en las aulas, el bullying o el estrés del profesorado.

Aunque parezca que es el momento perfecto para evolucionar, lo que nos envuelve es un entorno inestable de constante generación de información

Este entorno afecta de lleno a nuestra educación, que en términos del psicólogo estadounidense Urie Bronfenbrenner se considera un ecosistema en el que organismos vivos interdependientes (alumnos, docentes, administradores y políticos) comparten el mismo hábitat intelectual, formativo o educativo, formal o informal. Innovar, en mi opinión, requiere analizar ese ecosistema educativo en profundidad y establecer estrategias y acciones encaminadas a mejorar. Pero ¿qué mejora, por ejemplo, introducir una metodología que, aun siendo muy vistosa y altamente atractiva para las redes sociales, multiplica el trabajo de los profesores y no produce aprendizajes evidentes en un porcentaje considerable de los alumnos?

Cuando se le pregunta a los docentes por los aspectos a mejorar en la educación, estos apuntan a la enseñanza tradicional y la dependencia al libro de texto; los horarios estancos que no posibilitan la realización de proyectos; la falta de tiempo para poder organizar actividades centradas en el alumno; la cantidad excesiva de contenidos en el currículo; la falta de coordinación entre niveles y etapas; la falta de formación del profesorado en materia de innovación y la falta de consenso entre el colectivo docente sobre el enfoque de cualquier innovación. Todos estos factores en conjunto tienen sentido si consideramos la escena educativa como el complejo ecosistema que propone Bronfenbrenner, no podemos eliminar el libro de texto y el estilo de enseñanza tradicional porque es lo que funciona con el actual sistema, el currículo, la organización y diría que hasta con la arquitectura de centros y aulas. Todo esto forma parte de un engranaje perfecto depurado en el tiempo.

Los centros deben tomar el control para poder realizar proyectos reales, globales, no encorsetados por un currículum cerrado y asfixiante

Los centros deben tomar el control para poder realizar proyectos reales, no encorsetados por un currículum cerrado y asfixiante. Para ello, debe haber un planteamiento que respalde esa capacidad y libertad de actuación, y que a su vez esté respaldado por evidencias de investigaciones realizadas tanto por agentes externos como por los propios centros. Es un objetivo bastante alto, que se presenta como una alternativa a la negligencia que se observa en las aulas. Seguramente pensáis que introducir, por ejemplo, la realidad aumentada en el aula no perjudica a los alumnos, pero ¿y si utilizo solo unas tabletas y la participación de alguno de mis alumnos es mínima o prácticamente nula?

Debemos abandonar la idea del cambio y unirnos a la de la investigación, ya que el cambio vendrá como consecuencia, de forma natural. Los centros deben tener la capacidad de reclutar a docentes con ideas comunes, que puedan trabajar en equipo, aportando cada uno su especialidad. Personalmente, abogo por una evolución, no por una revolución. Para ello propongo un cambio natural que debe surgir de la transformación de la mentalidad del profesorado. Los docentes deben coger fuerza y dotar de rigor, eficiencia y eficacia su práctica en el aula para lograr los objetivos al máximo rendimiento, con el mínimo esfuerzo y uso de recursos, sin quemarse, guiando de manera activa el curso de la evolución educativa, es decir, no dejando que las cosas pasen solas pero tampoco forzando el cambio. Lo que propongo es una evolución activa de la educación.

Hay que repensar y calmar un poco esta vorágine de innovación que nos rodea y aplicar una buena dosis de actitud crítica

Solo con una programación y planificación real, sin fugas pedagógicas, con acciones basadas en evidencias científicas y una buena evaluación podremos detectar las verdaderas necesidades y por tanto demandarlas al resto del ecosistema educativo. Hay que repensar y calmar un poco esta vorágine de innovación que nos rodea hoy en día, aplicar una buena dosis de actitud crítica, dar paz y tranquilidad a los docentes y valorar su capacitación, experiencia, potencial y ganas de trabajar, al fin y al cabo como ya dijo hace veinticinco siglos Platón: “La educación de los niños es algo tan importante que no puede ser confiado a cualquiera”. Oiga, no somos cualquiera, somos docentes.

Fuente: http://www.educaciontrespuntocero.com/opinion/raul-cespedes-transformacion-educacion-cambio-mentalidad-profesorado/52409.html

Comparte este contenido:
Page 105 of 213
1 103 104 105 106 107 213