México / 26 de noviembre de 2017 / Autor: Martín Catalán Lerma / Fuente: La Jornada Zacatecas
- Necesario, proyecto estratégico y estructural para resolver crisis de varias universidades
- Opina que la decisión del Gobierno Federal de no apoyarlas refleja que “estamos en la situación más dramática que hemos vivido”
- Respecto a la huelga de hambre anunciada por Rector de la UAZ, sugiere que “no haga una solución personal, ni siquiera de grupo”
- Plantea que sobre la base del acuerdo que ya han tomado en la Anuies, convocar a las universidades a definir una alternativa programática, una solución financiera
México es el país con mayor tendencia a la privatización de la educación superior en todo el mundo, por lo que se requiere un proyecto estratégico y estructural para resolver la crisis financiera en que se encuentran varias universidades, opinó Axel Didriksson Takayanagui, investigador del Instituto de Investigaciones sobre la Universidad y la Educación de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
“México es el país que tiene el grado de privatización y mercantilización de la educación superior más alto del mundo, con 46 por ciento. Ningún país lo tiene, ni en Asia, ni Latinoamérica, ni África e incluso ni Estados Unidos que es un país muy privatizador”, informó.
Además, el tema de la desigualdad en México es muy grave, pues los jóvenes que integran el grupo de edad con ingresos más altos tienen 70 veces más oportunidades de estudiar el nivel superior en relación a jóvenes de la misma edad pero con condiciones económicas desfavorables.
“Ese es un dato increíble. Es decir, tenemos una condición crítica, estructural, de las peores del mundo, y además no hay una definición de política de Estado hacia la educación superior considerándola como el valor agregado más importante del desarrollo económico, social y cultural”, indicó.
Señaló que tampoco hay una propuesta de Sistema Nacional de Investigación e Innovación, lo que significa que no hay articulación de los conocimientos que se generan con la industria, la sociedad, las comunidades o con los sectores productivos, y además hay recortes presupuestales cuando es evidente que hay millones de pesos que se van a ganancias personales, a la burocracia, la impunidad y la corrupción, y no a la atención de problemas educativos.
Por otra parte, Didriksson Takayanagui señaló que la respuesta desfavorable del Gobierno Federal a las demandas de las universidades que se encuentran en crisis financiera, entre ellas la Universidad Autónoma de Zacatecas (UAZ), dijo, fue inverosímil y “en ningún país he visto que la respuesta de un gobierno sea tan obtusa, ciega y ajena a lo que significa la universidad en una sociedad del conocimiento”.
Puntualizó que la crisis en que se encuentran algunas universidades del país no es reciente, sino que se ha acumulado por mucho tiempo, por lo que la decisión del Gobierno Federal de no apoyarlas refleja que “estamos en la situación más dramática que hemos vivido”.
Respecto a la propuesta de Enrique Grouer, Rector de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), de crear un fondo para contingencias de las universidades públicas, dijo que es una solución inmediata, pero además se requiere desarrollar una alternativa programática y estratégica de largo plazo orientada al cambio organizacional.
“No podemos dar una solución real a una situación crítica utilizando las mismas bases y las mismas variables que hemos utilizado para estar en crisis. Como decía Albert Einstein, no puedes tener una solución diferente si utilizas las mismas coordenadas y variables. Entonces si queremos que la UAZ sea una universidad sustentable, digna, con proyecto académico de futuro y que tenga un enorme impacto en la sociedad; necesitamos transformarla, no puede seguir igual”.
Didriksson Takayanagui, también coordinador de la Cátedra Unesco Universidad e Integración Regional, manifestó que la sociedad del futuro depende de que haya universidades transformadas, que tengan reconocimiento social, que tengan impacto por su trabajo académico y producción del conocimiento, lo que implica no solamente una solución parcial o inmediata, sino un proyecto alternativo de universidad.
Para tal efecto, dijo que en las próximas semanas y meses debe convocarse a las universidades que se encuentran en condición de crisis, con la presencia de la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior (Anuies), la UNAM, la UAM y el IPN, para desarrollar un modelo alternativo de universidad.
En relación a la idea del Rector de la UAZ, Antonio Guzmán Fernández, se realizar una huelga de hambre, para exigir recursos extraordinarios, sugirió “que no haga una solución personal, ni siquiera de grupo, y que sobre la base del acuerdo que ya han tomado en la Anuies, se pueda convocar a las universidades a definir una alternativa programática, una solución administrativa-financiera, orgánica y de reforma académica para los próximos años”.
Mencionó que la situación de algunas universidades es dramática, por ejemplo la Autónoma del Estado de Hidalgo, donde el gobierno de esa entidad envió un contralor no solamente para intervenir en las finanzas de la institución, sino también para revisar planes y programas de estudio, formas de gobierno, proyectos de investigación, entre otras cosas violatorias de su autonomía. Afortunadamente un juez otorgó un amparo para evitarlo.
Por último, Didriksson Takayanagui puntualizó que las universidades y los universitarios deben ser transparentes y responsables respecto al ejercicio de los recursos, porque es inaudito que dependencias federales hayan contratado proyectos simulados a las universidades y “nadie sabe a dónde se fueron los recursos”.
“Todas las universidades tienen la responsabilidad de entregar cuentas. La transparencia, la evaluación, la acreditación de lo que hacemos debe ser absolutamente nítida, cristalina, porque somos beneficiarios de la sociedad”, concluyó.
Fuente de la Entrevista:
http://ljz.mx/2017/11/25/mexico-pais-con-mayor-tendencia-a-privatizar-educacion-superior-en-todo-el-mundo-didriksson/