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¿Para qué sirven los insumos para el Taller Intensivo de Formación?

POR: ABELARDO CARRO NAVA

«¿Cuál es la propuesta de la SEP para la elaboración de un planeación didáctica por proyectos?»

 

Preocupa la ligereza con la que, la Secretaría de Educación Pública (SEP), a través de la Dirección de General de Desarrollo Curricular, brinda a las maestras y los maestros, la información para el Taller Intensivo de Formación Continua para Docentes y, desde luego, para Supervisores y Directores de Educación Básica. Y digo que preocupa porque, un tema trascendental como lo es la construcción de lo que se ha llamado Programa Analítico en la implementación del Plan de Estudios 2022 para preescolar, primaria y secundaria, se aborda a través de un video que poco aporta a la comprensión de lo que se pretende, que desarrollen los docentes, cuando éste entre en vigor.

Menciono esto debido a que, si se revisa con detenimiento el video, que forma parte de los insumos que se han puesto a disposición del profesorado mexicano para dicho Taller programado del 2 al 6 de enero de 2023, específicamente, la cápsula que contiene la participación de Xóchitl Leticia Moreno Fernández, Directora General de Desarrollo Curricular, cuya duración es de 6 minutos con 37 segundos, se podrán observar ciertas generalidades sobre el tema que me ocupa, el de los Programas Analíticos, que bien podrían traducirse en ambigüedades. Me explico.

Como ya se sabe, para este ciclo escolar, la SEP contempló ciertos espacios de “formación” sobre el Plan de Estudios 2022; para ello, los Consejos Técnicos Escolares (CTE) se convertirían en los espacios idóneos para que, tanto docentes como las demás figuras educativas que en éstos concurren, puedan reflexionar, analizar y dialogar sobre ciertos temas con propósitos específicos. No obstante, como también sabemos, la información sobre el referido Plan de Estudios, así como los demás elementos que son parte de éste para su implementación, se han dado a conocer a “cuentagotas”, motivo por el cual, la zozobra o incertidumbre ha sido una constante entre el magisterio mexicano.

De esta forma, y después de los primeros CTE, en donde se abordaron algunos aspectos generales sobre la conformación del Plan de Estudio 2022, toca el turno, según la propia SEP, de seguir profundizando para lograr su comprensión y posterior aplicación; luego entonces, como también es conocido, a través de sus canales oficiales se ha informado sobre los insumos que serán parte de este proceso “formativo” – aunque muchas veces se llegan a conocer por otros medios – sin que, hasta el momento en que cierro estas líneas, la SEP haya presentado un proyecto de formación propiamente dicho, que vaya más allá de lo que significaría “formar” a un docente en razón de un Plan de Estudios. En fin.

Volviendo al tema que me ocupa, considero necesario mencionar que, hace unos meses, se conoció el Acuerdo 14/08/22 por el que se establece el Plan de Estudios para la educación preescolar, primaria y secundaria, así como también, el Anexo correspondiente, mismo que, para el Taller intensivo de Formación Continua programado para los primeros días del mes de enero de 2023, aparece como uno de los insumos.

Si se analiza dicho Anexo se podrá observar, sobre los programas de estudio (8.3), que éstos se entienden como el organizador curricular que despliega los elementos centrales en torno al qué y cómo se enseñan los objetos de aprendizaje señalados en los campos formativos… son el punto de partida para el trabajo en las escuelas de educación preescolar, primaria y secundaria dentro del proceso de contextualización a cargo de las maestras y los maestros; por tanto, el programa analítico se puede ver como una segunda etapa que se fundamenta en el conocimiento del plan de estudios y en el análisis sistemático tanto de las condiciones institucionales como del conjunto de experiencias docentes frente a los temas que se intenta desarrollar… un programa analítico es pertinente si se articula con los planteamientos del plan de estudios y, sobre todo, si se adecua a las condiciones concretas en las que se realizan los procesos de enseñanza y aprendizaje, a las particularidades de la enseñanza de las profesoras y profesores, así como a las necesidades, estilos y ritmos de aprendizaje de los estudiantes (SEP, 2022).

No obstante, lo anterior, curiosamente, en ninguna parte de este documento aparece lo que la SEP ha denominado Programa Sintético, pero que sí se ha venido trabajando en los CTE dada la relevancia que, como tales, significan para la construcción de esa segunda etapa que intenta articular los planteamientos del Plan de Estudios con las condiciones concretas con las que se realizan los procesos de enseñanza y de aprendizaje; entonces, ¿por qué no se incluyó tal cuestión en el Anexo dada la importancia que, por ejemplo, se le asignó en la Sesión 1 de dichos CTE?

De hecho, si se revisa los insumos o documentos que, para esa Sesión (la número 1) la SEP elaboró, se observará que en éstos se afirma que un programa sintético, es aquel que organiza los contenidos que los estudiantes deben aprender, pero que es necesario contextualizar para atender a la diversidad intercultural y social en su acción pedagógica… Plantea que las maestras y los maestros decidan qué enseñar y cómo enseñar tomando en consideración a la comunidad y sus saberes, a sus estudiantes y sus conocimientos, y el programa de estudios que define los contenidos nacionales comunes (SEP, 2022). ¿No es esta concepción en sí misma un elemento necesario a considerar pues, como se ha leído, el programa sintético juega un papel fundamental en el momento en que el profesor decida planear sus actividades de enseñanza y aprendizaje?, ¿no acaso dicho programa sintético tiene la función de organizar los contenidos que los estudiantes deban aprender por fases, campos formativos y grados propuestos por la propia SEP?, ¿no acaso la misma SEP señaló que el programa sintético se estructura por campo formativo y éste se conforma por una descripción general, finalidades del campo para la educación básica, especificidades del campo formativo para la fase y contenidos y procesos de desarrollo de aprendizaje del campo formativo?, ¿no acaso la misma SEP señaló que el enfoque didáctico de los programas sintéticos está centrado en procesos de contextualización y aprendizajes significativos a través de la integración de contenidos entre sí y construcción de proyectos o métodos globales, que indican procesos de codiseño de contenidos curriculares?

Visto desde esta perspectiva, parece ser, que el video de la Directora de Desarrollo Curricular, poco ofrece a la comprensión de estos dos momentos, el del Plan de estudios, así como de la razón o razones de la existencia de un programa sintético. Cierto, habrá quién me diga que existe una cápsula, donde Rosa María Torres aborda el tema de los referidos programas sintéticos, sin embargo, pienso que, al no aparecer tal cuestión en el Plan de Estudios, no es clara la relevancia que tiene para la conformación de un programa analítico.

Ahora bien, regresando al tema que abordo en estas líneas, el CTE propuesto para los primeros días del mes de enero, plantea realizar un ejercicio, denominémosle “supuesto”, mediante el cual, los profesores iniciarán con un proceso de codiseño con base en la problematización, reflexión y diálogo acerca de los componentes centrales del Plan de Estudios y de los Programas Sintéticos, aunque estos últimos sigan en “proceso de construcción”, por lo que, hasta el momento en que cierro estás líneas (26 de diciembre), no se han subido a la plataforma correspondiente (en mi caso, solo tengo los que se filtraron en las redes sociales en el mes de enero de este año).

Luego entonces, ¿de qué manera iniciar con un proceso de codiseño sin programas sintéticos terminados?, ¿de qué manera construir un programa analítico sin tener a la mano uno de los elementos fundamentales que implica otro proceso, más fino, como lo es la planeación didáctica que los maestros realizan?, ¿por qué, en el caso de la Directora de Desarrollo Curricular, no le dio el valor que merece dicha planeación didáctica cuando, se sabe, que los docentes emplean distintos recursos, como los documentos referidos, y otros, como los libros de texto o el libro del maestro, para planear sus actividades y/o proyectos de enseñanza y de aprendizaje?, ¿no acaso la planeación didáctica, independientemente de que se trate de proyectos o no, es el eje donde se concretan los “supuestos” establecidos en un plan de estudios y/o programa sintético?, ¿por qué la ligereza con la que se tomó este tema, el de la planeación didáctica? Peor aún, ¿acaso no se sabe que planear por proyectos tiene sus propias especificidades que, como tales, implica un trabajo fincado en la intencionalidad didáctica, mediante la cual, se puedan propiciar los aprendizajes?, ¿acaso los docentes tendrán que planear conforme a sus propios referentes, saberes o conocimientos un proyecto integrador que sería parte de ese programa analítico, mismo que se revisaría en cada CTE?, ¿sabrá la SEP cuáles serán esos referentes, saberes o conocimientos del profesorado mexicano?, ¿cuál es la propuesta de la SEP para la elaboración de una planeación didáctica por proyectos?

Y es que, como se sabe, la planeación didáctica, tiende a orientar los procesos de enseñanza y aprendizaje, por tanto, dicha planeación debe considerar una secuencia didáctica puesto que éstas constituyen una organización de las actividades de aprendizaje que realizan los alumnos y para los alumnos con la finalidad de crear situaciones que les permitan desarrollar un aprendizaje significativo… (entonces) la línea de una secuencia didáctica está integrada por tres tipos de actividades, apertura, desarrollo y cierre (Díaz Barriga, 2013). Ello obliga a pensar que, si bien es cierto que un proyecto como tal se planea considerando su respectiva secuencia didáctica, también es cierto, que las distintas sesiones que se planean para desarrollar dicho proyecto deberán contener esa línea de secuencia didáctica a la cual alude Ángel Díaz Barriga en la cita que he expuesto. Entonces, ¿verdad que el proceso de planeación de un proyecto no es tan sencillo como pudiera pensarse?, ¿verdad que no solo es pedirle a las maestras y maestros que llenen un formato de planeación que cumpla con ciertos requisitos sin considerar que, en su seno, una planeación didáctica va más allá de un simple llenado de apartados?, ¿verdad que planear un proyecto considerando los elementos que se van a evaluar, mediante la elaboración de entregables, requiere de un proceso más fino que solo el hecho de colocar ciertos indicadores que recuerden el tema de las competencias vistos en anteriores planes de estudio?

Cierto, habrá quién refiera que, en el documento: “Avance del contenido para el libro del docente, el diseño creativo” (SEP, 2022) se refieran algunas de las respuestas a las interrogantes que he planteado, sin embargo, si se analiza detenidamente dicho insumo se podrá observar, que éste contiene generalidades que, si bien es cierto dan o brindan una idea sobre los elementos que se deberán tomar en cuenta al momento de construir un programa analítico (y por ende la planeación didáctica) tales como el contexto socieducativo de la escuela, la contextualización, el codiseño o lo didáctico, también es cierto que terminan siendo eso: generalidades.

Espero que, más adelante, la SEP se tome en serio las propuestas que ésta realice y proponga para las maestras y maestros, puesto que, desde mi perspectiva, podríamos estar en la antesala de eso que en el medio se conoce como teléfono descompuesto, y no la construcción de aprendizajes considerando la diversidad de saberes y conocimientos de los docentes.

Al tiempo.

Referencias.

Fuente de la información: https://profelandia.com
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CNTE, 43 años

Por: Luis Hernández Navarro

Este diciembre se cumplen 79 años de la fundación del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) y 43 del nacimiento de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE).

El SNTE es la organización gremial que agrupa a la gran mayoría del personal educativo al servicio de la Secretaría de Educación Pública (SEP), los docentes de los gobiernos de los estados y trabajadores de organismos descentralizados de la enseñanza pública.

La CNTE es una fuerza de trabajadores de base de la educación, que se enfrenta contra el charrismo dentro del SNTE. Es independiente y autónoma del gobierno, los partidos políticos y las iglesias. Además de defender los intereses gremiales del magisterio, lucha por la democratización del sindicato, de la enseñanza y del país. Así lo ha hecho desde 1979.

Más allá de la fecha formal de su nacimiento, la coordinadora expresa una corriente viva del magisterio, clasista y comprometida con causas emancipatorias, que arranca, al menos, desde hace un siglo. Una tendencia que toma forma con la fundación de la primera normal rural en lo que hoy es Tiripetío en 1922, y que unas veces corre como un caudaloso río subterráneo y otras emerge a la superficie con vigorosas protestas y experiencias de educación alternativas.

La CNTE es heredera y continuadora de la labor pedagógica de grandes educadores que forjaron la enseñanza rural en el país, como José Santos Valdés, Raúl Isidro Burgos e Isidro Castillo. Retoma el legado de los maestros comunistas y cardenistas que impulsaron la reforma agraria, la lucha contra el fanatismo religioso y la organización de sindicatos obreros, y que fueron asesinados, empalados y desorejados por neocristeros y latifundistas.

Mantiene viva la tradición de los docentes othonistas que organizaron el Movimiento Revolucionario del Magisterio (MRM), en las jornadas de lucha de 1956-60. Da continuidad al esfuerzo de los profesores que participaron en el movimiento estudiantil-popular de 1968. Se nutre de la experiencia y el esfuerzo de quienes se comprometieron con la transformación revolucionaria del país (y fueron víctimas de la guerra sucia) y que aparecen en su logotipo: Arturo Gámiz, Lucio Cabañas, Genaro Vázquez Rojas y Misael Núñez Acosta. Recoge la estafeta de quienes promovieron en los 70 los Comités Coordinadores de Lucha en la Ciudad de México, fundaron escuelas populares en el Valle de México y colectivos como el Movimiento de Liberación Político-Sindical en Michoacán o el Frente Magisterial Independiente Nacional (FMIN) en varios estados.

Desde su constitución en Tuxtla ­Gutiérrez, Chiapas, han sido asesinados más de 200 integrantes de la CNTE. Literalmente, el magisterio democrático vivió una guerra sucia en su contra. ­Durante el periodo de Enrique Peña Nieto fueron violentamente ultimados los profesores Claudio Castillo, David Gemayel Ruiz y Antonio Vivar Díaz, y se perpetró la sangrienta masacre de Nochixtlán. Varias decenas de maestros han sido perseguidos, apresados y recluidos en penales con reos de alta peligrosidad. Centenares han perdido sus empleos como represalia por su participación en los movimientos.

A sus 43 años, la coordinadora enfrenta uno de los momentos más difíciles de su historia. Después de tener 18 mesas de diálogo con el presidente Andrés Manuel López Obrador, éstas se suspendieron hace dos años y no se han restablecido. En cambio, la 4T le ha abierto importantes espacios de interlocución al charrismo sindical del SNTE, encabezado por Alfonso Cepeda. Autodeclarado como “ejército intelectual de AMLO”, juegan en la sucesión presidencial apoyando a Claudia Sheinbaum.

Las expectativas de democratizar el sindicato se esfumaron pronto. La mafia de Cepeda sigue al frente de la representación formal del SNTE sin empacho alguno. Las elecciones para cambiar dirigentes seccionales son una mascarada en que, con el aval del Tribunal Federal de Conciliación y Arbitraje y la Secretaría del Trabajo, se permiten comicios amañados y megafraudes, y se legitima que un reglamento de elecciones, ilegal, antidemocrático y excluyente, esté por arriba del estatuto sindical, una norma de mayor jerarquía.

Aunque en Guerrero y Oaxaca se ha renovado la dirigencia con una camada de líderes jóvenes, se ha incorporado a las escuelas una generación de profesores, no necesariamente normalistas, que ven la docencia como actividad de paso, mientras hallan un empleo mejor remunerado. Su visión del mundo, mucho más individualista que la de los trabajadores de la educación de otros años, los lleva a pasar del mundo gremial, al que ven como una pérdida de tiempo. Convencerlos de organizarse democráticamente para remontar su precariedad es un enorme reto.

Las demandas insatisfechas de la CNTE no son pocas. La reforma constitucional educativa aprobada por la 4T limó las espinas más filosas del erizo neoliberal de la reforma de Peña, pero dejó intacto su espíritu. La federalización de la nómina educativa ha quedado, en muchos casos, en palabras. La decisión gubernamental de privilegiar la expansión del servicio educativo por encima de la formación continua del magisterio y el apoyo a las escuelas multigrado, dejó fuera de las políticas públicas (y del presupuesto) planteamientos centrales de los profesores democráticos. En los hechos, la Nueva Escuela Mexicana no es más que la fachada de un edificio inexistente. Enmarañada por la verborrea de alguno de sus promotores, la reforma curricular, que retoma algunos puntos de la propuesta de educación alternativa de la coordinadora, carece de pistas de aterrizaje y de consenso entre los docentes.

Los maestros de la CNTE saben que en la lucha por democratizar su sindicato, la enseñanza y el país no hay atajos. Fieles a su historia y sus principios se disponen a seguir adelante.

Fuente de la información:  https://www.jornada.com.mx

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SEP: Libros de Texto y Políticas Editoriales

Por: Juan Carlos Miranda Arroyo

Más que una productora de libros, hoy, la Conaliteg (SEP) es una compradora/consumidora gigantesca de obras, señala Juan Carlos Miranda Arroyo en su columna.

Este 4 de diciembre estuvimos en el cierre de la Feria Internacional del Libro de Guadalajara (FIL-GDL, 2022). Ese fue prácticamente el último día del evento. Fue un domingo por la tarde. Bella como siempre la Perla Tapatía y su gente.

Ahí, como es costumbre, observamos que la variedad de publicaciones es explosiva, abrumadora e impresionante. Dos grandes pabellones o patios enormes con libreros nacionales e internacionales componen la FIL, aparte de salas de eventos y demás recintos diseñados para profesionales de la industria editorial. Me pregunto ¿Cómo sobrevive esta industria si el libro no es un producto de la canasta básica en México?

Como sucede en cada edición anual de la feria del libro en la perla de occidente, pudimos observar una gran oferta de publicaciones donde la palabra escrita y el diseño gráfico fueron (y son) los protagonistas; sin embargo, lo que más nos sorprendió durante la visita fue la participación ciudadana en el recinto expositor. Además, una buena noticia: Había una gran cantidad de niñas, niños y jóvenes.

Al salir del recinto, por ejemplo, nos tocó ver una fila de más de 200 jóvenes y niñas-niños con sus familias en espera para obtener la firma de un libro, de esos que están de moda, de aventuras y personajes con dibujos.

La oferta de libros de todas las variedades, temas, contenidos, tamaños, colores, formas y diseños se vivía con emoción en cada uno de los sitios (stands) donde se exhibían las obras. Durante el caminar por horas rodeados de libros surgieron preguntas, como parte de la magia editorial de este año (la FIL/GDL es considerada, por cierto, una de las más grandes ferias de libros en América Latina y el Caribe). ¿Cuál es la situación de los libros de texto gratuitos y de las políticas editoriales de la Secretaría de Educación Pública (SEP), ejecutadas a través de la Comisión Nacional de Libros de Texto Gratuitos (Conaliteg)?

Según la página oficial de la SEP: “La Comisión Nacional de Libros de Texto adquiere o produce, en su propia planta o a través de terceros, los libros de texto gratuitos para la educación básica en México. Así es como los libros que la Subsecretaría de Educación Básica de la SEP edita conforme a los planes y programas de estudio son entregados oportunamente cada año a las autoridades educativas de los 32 estados, para que éstas a su vez los hagan llegar a los estudiantes desde el primer día de clases.”

Así continúa la información de la dependencia educativa: “La Conaliteg cuenta con una imprenta en Querétaro donde se producen alrededor de 30 millones de libros al año. Los programas de preescolar, primaria y telesecundaria requieren de la producción de cerca de 140 millones de libros. Los que no se producen en la planta se hacen con las empresas de artes gráficas establecidas. La SEP es la mayor editorial de México y el mayor cliente para las empresas que producen libros. También es la editorial que más papel para impresión de libros consume. La producción de los libros para cada ciclo requiere de alrededor de 60 mil toneladas de papel.”

Impresionantes cifras, pero las políticas públicas editoriales en México ante tales dimensiones y a efecto de atender a las necesidades educativas y didácticas de millones de niñas, niños y jóvenes ¿Qué problemas enfrentan? ¿Cuáles son los desafíos mayores y las prioridades de la gestión de libros en la SEP-Conaliteg?

“El programa de secundaria y de bibliotecas escolares se nutre con los libros editados por la industria editorial mexicana. En el caso de secundaria, la Secretaría de Educación Pública evalúa las propuestas que los editores privados hacen para las 17 materias y con ellas conforma un catálogo de donde los maestros y las autoridades educativas de los estados seleccionan los libros que se usarán en los salones de clase. Cada año alrededor de 400 títulos son puestos a disposición de los maestros para que escojan aquel que consideran más adecuado para ayudarlos a dar sus clases. Se reparten alrededor de 33 millones de libros que son adquiridos en parte por la Conaliteg y en parte por los estados.”

Cabe recordar que la SEP es la principal dependencia del gobierno federal que coordina, edita, imprime o publica el mayor volumen de libros educativos al año, sobre todo si pensamos en la producción editorial de libros para niñas, niños y jóvenes que se utilizan en las escuelas públicas de nivel básico (y en menor medida en las escuelas privadas de ese mismo nivel educativo que, aunque reciben los libros de la SEP, no siempre los utilizan como apoyo didáctico durante sus jornadas escolares).

La participación de la industria editorial, como empresa privada, siempre ha sido significativa en el sector educativo. Recuerdo que cuando me inicié como docente en el sistema educativo, en secundaria, las agencias y empleados de la industria editorial repartían libros en forma gratuita a las maestras y maestros durante las reuniones de academia (1984-1985), con intenciones e intereses de promoción y venta. Tengo entendido que esa misma forma de trabajo de las empresas editoriales privadas continúa.

“La inversión de la Conaliteg representa 75 por ciento del total de esta compra. Algo similar sucede con los acervos de las bibliotecas. La Secretaría de Educación Pública lanza una convocatoria a los editores para invitarlos a participar con títulos que cumplan con las especificaciones generales de las bibliotecas: ser libros adecuados para los niveles de enseñanza y la capacidad lectura de los alumnos de los distintos niveles educativos. Se forman consejos estatales que escogen de esta oferta los títulos que les gustaría tener en sus acervos y se conforma el pedido que la Conaliteg adquiere.”

Más que una productora de libros, hoy, la Conaliteg es una compradora/consumidora gigantesca de obras.

“La Comisión también produce libros accesibles para niños con baja visión o ceguera en los niveles de primaria y secundaria. Para los niños ciegos que estudian la primaria existen las versiones de 41 títulos. La Conaliteg produce también para los estudiantes de primaria con baja visión 73 títulos en macrotipo, que son libros de gran formato adaptados para ellos, entre los que se incluyen los 32 títulos de “La entidad donde vivo”. (Información tomada de: https://www.gob.mx/conaliteg/acciones-y-programas/programa-de-produccion )

Además esa instancia gubernamental, la Conaliteg, rectora de las políticas editoriales de la SEP, entrega millones de libros a maestras/os, directivas/os escolares y asesoras/es técnicos de la educación básica, entre otras figuras educativas.

Sin duda, la existencia de la Conaliteg es un acierto de las políticas públicas educativas transexenales, es decir, del Estado mexicano. Sin embargo, hoy en día se han registrado algunos problemas en el ejercicio de dichas políticas que conviene analizar.

Según una nota de la revista Expansión/Política, “La producción de materiales educativos ha caído hasta 80 por ciento en la planta industrial de la Comisión Nacional de Libros de Texto Gratuitos (Conaliteg), debido a la antigüedad de la maquinaria y a la falta de mantenimiento, reveló la Auditoría Superior de la Federación (ASF).” (Nota firmada por Dulce Soto. “ASF: la producción de libros de texto gratuitos cayó 80% en planta de Conaliteg”, Expansión/Política, 8 de noviembre, 2022).

“De acuerdo con el organismo auditor, la Conaliteg reportó que su planta industrial de Querétaro trabaja al 35 por ciento de su capacidad y, pese a ello, en 2021 no se autorizó ningún plan de ampliación o modernización del equipo y maquinaria.”

“Entre 2012 y 2021, el presupuesto de la Conaliteg aumentó 58 por ciento, al pasar de mil 968 millones de pesos a 3 mil 108 millones de pesos.”… “Sin embargo, la entidad paraestatal no cumplió el año pasado con la totalidad de las acciones de mantenimiento previstas para la planta industrial de Querétaro, pues solo realizó 65.6 por ciento (de lo programado).”

“La ASF expuso que se superó la meta de producción de libros programada para 2021. Sin embargo, de los 183 millones de libros de texto gratuitos producidos para el ciclo escolar 2021-2022, la planta industrial de la Conaliteg contribuyó con apenas 2.9% (5 millones de libros); mientras que la producción externa alcanzó 97.1% (178 millones de libros).”

¿Quién resulta beneficiada económicamente con la baja producción editorial de la planta impresora de la Conaliteg (SEP) en los talleres de Querétaro? Sin duda, la industria editorial mexicana.

El cuadro que se presenta en la principal dependencia del Estado mexicano responsable de la compra y distribución de libros para estudiantes de educación básica, indica la existencia de una situación conflictiva debido a la baja producción. Aparte de constituir una sensible adversidad para la autonomía editorial del gobierno federal (SEP) en este sector clave de generación de libros, dicha situación y el contexto que prevalecen, resultado de administraciones inoperantes, pueden plantear el inicio de una etapa de privatización de la plataforma editorial de la SEP.

¿Esa condición conviene a la nación? Pienso que no. Conviene, sí, a los intereses empresariales, para quienes el libro es una mercancía, no un bien público.

Fuente de la información e imagen:  https://www.sdpnoticias.com
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Semana de taller intensivo de formación continua: ¿la desorganización?

Por: Abelardo Carro Nava

Hace unos días – yo lo encontré en Facebook el 7 de diciembre –, a través de las redes sociales, se conoció un documento firmado por la Subsecretaria de Educación Básica, Martha Velda Hernández Moreno, mediante el cual informaba que, con base en el Acuerdo número 9/06/22 por el que se establecen los calendarios escolares para el ciclo lectivo 2022-2023, aplicables en toda la República Mexicana para la educación preescolar, primaria, secundaria, normal y demás para la formación de maestras y maestros de educación básica, publicado en el Diario Oficial de la Federación el 3 de junio de 2022, del lunes 2 al 6 de enero de 2023, tendría lugar el “Taller intensivo de formación continua para docentes: plan y programas de estudio de la educación básica 2022”.

Para ello, a decir de este documento, el día 2 de enero de 2023 trabajarían los supervisores y directivos con la finalidad de conocer lo que abordarían con los colectivos docentes en lo sucesivo, y del 3 al 6 de ese mismo mes, lo harían las maestras y maestros de educación básica, acompañados de los primeros, motivo por el cual, de acuerdo a lo programado al inicio del ciclo escolar, esta jornada se realizaría sin la presencia de estudiantes en las escuelas y, días más tarde (no se especifica en el cuerpo del documento la fecha) se harían llegar los materiales a través de los responsables de los Consejos Técnicos Escolares, Formación Continua y Enlace Educativo de cada entidad federativa.

Un poco más adelante, para ser preciso, en el cuarto párrafo de dicho documento, se señalaba de manera enfática, que se “solicitaba que se difundiera esta información a la comunidad educativa, a fin de que directivos y directivas, maestros y maestras estén en sus centros escolares durante la primera semana del próximo mes de enero para dar continuidad con las acciones de formación continua”.

Como era de esperarse, los comentarios que podían leerse en las páginas que compartieron ese documento, fueron diversos; algunos de ellos referían la falta de planeación para el desarrollo de estas actividades por parte de la Secretaría de Educación Pública (SEP), otros, se preguntaban cómo era posible que todo lo que se abordaría en cuatro días, se iba a dar a conocer en un solo día a directivos y supervisores, y unos cuantos más, señalaban los escasos días de descanso que tendrían los colectivos docentes en esta temporada decembrina para que, en dichos días, se les dieran a conocer las orientaciones que marcarían la ruta de trabajo y, en consecuencia, preparan los productos o actividades que tendrían que realizarse en esa semana de formación.

Desde mi perspectiva, es preocupante la simplicidad con la que la SEP está viendo proceso formativo de tal envergadura que, obliga a pensar, que en lugar de atender la formación del profesorado mexicano con relación al plan y programas de estudio 2022, se intente cumplir, burocráticamente, con los tiempos y acciones que estipula el calendario escolar, aprobado por la misma SEP. Me explico.

Para quienes hayan sido formados en alguna institución formadora de docentes, y aun cuando no hayan cursado sus estudios en éstas, saben que la planeación es un ejercicio fundamental para el logro de los propósitos, en este caso, educativos. De hecho, por ejemplo, si se revisan los planes de estudio de las escuelas normales, se podría observar que en varios de éstos se incluye alguna, o varias asignaturas relacionadas con la planeación de la enseñanza, gestión escolar, etcétera. Desde luego que, en sus contenidos, se abordan algunos temas vinculados con la organización de los aprendizajes o del proceso administrativo donde la planeación, organización, ejecución, control y evaluación, son elementos esenciales para el desarrollo de las planeaciones didácticas, o bien, para la conformación de lo que se conoce como Programa Escolar de Mejora Continua (PEMC). En ambos casos, ya sea para la planeación de los aprendizajes o para la construcción del PEMC, el tiempo es fundamental, porque permite establecer las estrategias didácticas o acciones de gestión a desarrollar, pero también, los recursos y materiales a emplear, los objetivos de aprendizaje o las metas y acciones a lograr, en fin, un cúmulo de cuestiones que forman parte de un proceso que, visto así, puede ser sencillo de escribir, pero que, ponerlo en marcha implica un cierto grado de complejidad importante, dada la cantidad de factores que inciden o influyen en éstos; supongo que esto lo saben, o al menos lo deberían saber, en las oficinas de la SEP.

Por ello es que resulta “extraño” que, a unos días de salir de lo que se conoce como vacaciones decembrinas, la misma SEP “informe” sobre el desarrollo de un proceso formativo como el que ya he señalado. ¿Incapacidad o ignorancia? Podría ser alguna de estas cuestiones, sobre todo si es que se desconoce lo que ocurre en los centros escolares durante la semana previa al periodo vacacional de los estudiantes y trabajadores de la educación. ¿Acaso la maestra o el maestro no tendría que disfrutar de un derecho que está contemplado en ese mismo calendario escolar como lo es el referido en diciembre?, ¿acaso no ha sido suficiente toda la carga administrativa que se les ha asignado en lo que va del ciclo escolar como para que no se les permita estar con su familia o seres queridos en estas fechas que, como se sabe, traen un cúmulo de emociones, encuentros y sentimientos?, ¿acaso la revalorización docente no contempla los espacios que puede tener cualquier trabajador de la educación con los suyos?

No tengo la menor duda de que la educación de los individuos es un tema trascendental para el desarrollo de los pueblos, sociedades y naciones. Es un tema incuestionable. Sin embargo, pienso, que también las maestras y maestros, directivos y supervisores son seres humanos. Supongo que la empatía no cobra mucho sentido cuando se trata de cumplir con tiempos y actividades, sin que éstas estén debidamente planeadas para ser desarrolladas.

En suma: ¿cuándo la SEP podría ser empática con los docentes?, ¿acaso alguna vez esta dependencia, que hoy día la encabeza una profesora, le habrá preguntado a una maestra o a un maestro cómo se siente en estos momentos?, ¿hasta cuándo dejará de ser visto al profesional de la educación como mero sujeto ejecutor de las políticas educativas, aunque no estén planeadas como debiera?, ¿acaso no se le podría exigir y/o demandar una mayor y mejor organización a esta Secretaría?

Al tiempo.

Con negritas:

Cierro estas líneas revisando el portal de la Subsecretaría de Educación Básica y, aún no se encuentran disponibles, los materiales que habrán de orientar los trabajos de esa semana de formación continua.  ¿Desorganización entonces?

Fuente de la información e imagen:  https://profelandia.com

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Ajustar la educación para los nuevos tiempos

Por: Miguel Ángel Gallegos Cárdenas

«Las escuelas públicas deben abrir sus puertas a la sociedad y a la comunidad, para dar respuesta al planteamiento que señala la ley general de educación y el programa sectorial de educación 2021-2025…»

El pasado 3 de octubre se cumplieron 101 años de la fundación de la SEP, pero al parecer fue una fecha que paso inadvertida para el grueso de los actores educativos. No hubo mensajes, conmemoraciones, ni mucho menos celebraciones.

¿Acaso no hay nada que celebrar? Al parecer de quien escribe no tenemos casi nada que festejar, pero si mucho que reflexionar, repensar y más aún por hacer. Por ello, muy particularmente celebro que hace algunos días, el Senador Israel Zamora Guzmán, haya organizado el Foro Educativo “Transformar la educación para los nuevos tiempos”, evento en que tuve oportunidad de disertar junto con los doctores Arturo Vázquez Rangel y Claudia Amanda Juárez Romero.

A dicho evento se dieron cita docentes de educación básica y superior, académicos, funcionarios, investigadores educativos, estudiantes y profesores de la Benemérita Escuela Nacional de Maestros y de escuelas secundarias, entre muchos otros; mismos que abarrotaron el auditorio “Octavio Paz” del Senado de la República, para escuchar las reflexiones sobre el devenir que la educación en México debería de realizar en diferentes rubros.

En el inicio de los trabajos, el Senador Zamora Guzmán dio la bienvenida, contextualizando y reconociendo lo realizado por el sistema educativo desde su fundación, además de compartir su propia experiencia formativa y destacando la importancia de que la educación en la vida de las personas, hace trascender a quienes hacen vida en el mundo educativo, sea como estudiantes o como docentes, pero reconociendo que la educación es el camino para materializar los sueños de los individuos y de la sociedad.

Como estudioso de los temas educativos en nuestra nación, puedo mencionar que fue un excelente espacio para reflexionar sobre algunas temáticas, dimensiones y subsistemas en que se considera necesario y oportuno hacer ajustes para mejorar el quehacer, servicio y fines de la educación en México, que como lo he escrito en otros espacios, la educación tiene el único fin que formar mejores individuos para conformar mejores sociedades.

Es por ello que, me permito compartir en este espacio, algunas de las conclusiones que se vertieron durante el foro, para dar difusión de lo que a nuestro parecer se debe considerar para transformar la educación para los nuevos tiempos.

-A partir de los sucesos históricos vividos en el sistema educativo, se debe aprender y tomar lo que mejor convenga a los tiempos actuales. Los maestros han sido pieza clave en la historia de la conformación social y la nueva escuela mexicana se debe construir desde la base y con los maestros, para dar el perfil necesario y apegado a la realidad que demanda el nuevo proyecto educativo.

-La formación docente, se debe adoptar como un compromiso de Estado, fomentando ante todo el trabajo en equipo, en redes y colaborativo, partiendo del diseño curricular y brindando las herramientas y conocimientos que los docentes requieren para los nuevos tiempos de la era digital.

-Los docentes deben aprender a transformarse a partir del nuevo marco social y de la pregunta, ¿qué conocimiento social requieren los docentes ante la era pospandemia?

-Es necesaria la reestructuración, fortalecimiento y apoyo a las escuelas formadoras de docentes, sobre todo a las de educación normal. Para ello se debe trabajar conjuntamente en lo que permita pensar en transformaciones colectivas, con modelos equitativos y sostenibles. Formar para los tiempos y contextos poscovid.

-Se debe considerar que, si las revoluciones tecnológicas han estado siempre presentes, conformando nuevos paradigmas y sentidos de vida en la sociedad, entonces, enseñar sobre tecnología a los niños y jóvenes, es y será siempre una gran estrategia e inversión para pensar en posicionar a nuestra nación como potencia económica, en el entendido de que estamos en medio de una nueva revolución tecnológica-industrial, en medio de la era digital y rodeados de tecnología por doquier.

-Hablando de la educación básica y particularmente del nivel secundario y a partir de los cuatro subsistemas existentes (secundarias generales, telesecundarias, secundarias para trabajadores y secundarias técnicas), el que se centra y le da más énfasis al enfoque tecnológico es el de secundarias técnicas por lo que es el modelo más acorde y oportuno para los nuevos tiempos tecnológicos que la sociedad ha comenzado a vivir, por lo que debe replicarse en todos los subsistemas de educación secundaria, es decir, se debe unificar y transformar al subsistema de educación secundaria en secundarias tecnológicas.

-El enfoque de enseñanza tecnológica en educación básica debe de promoverse e impulsarse con mayor fuerza, dado que únicamente se imparten ocho horas a la semana en las secundarias técnicas y solamente tres horas semanales en secundarias generales y en telesecundaria, por lo que el modelo de secundarias técnicas debe reconocerse y replicarse en los demás subsistemas, lo que sería una de las mejores decisiones que se pudieran hacer para la educación básica a fin de comenzar a formar jóvenes con pensamiento tecnológico, innovador y creativo que revolucionen el devenir de nuestra nación.

-En las escuelas secundarias técnicas no debe desaparecer ningún taller o actividad tecnológica de las que aún se imparten en cada escuela secundaria, por el contrario, se debe invertir y dotar de tecnología a cada énfasis tecnológico, creando incluso y en la medida de las posibilidades nuevos talles y oferta tecnológica, acorde a las nuevas necesidades de conocimientos que el mundo social, tecno-digital y laboral requiere.

-A los estudiantes de educación secundaria técnica se les debe entregar un diploma por haber cursado la actividad tecnológica durante tres ciclos escolares, dado que es un patrimonio que debe reconocerse como se venía haciendo hace varios años. Este documento simbólico y motivante para todo estudiante no debe desaparecer.

-Las escuelas públicas deben abrir sus puertas a la sociedad y a la comunidad, para dar respuesta al planteamiento que señala la ley general de educación y el programa sectorial de educación 2021-2025, por ello, se propone que en las escuelas secundarias se continúen ofertando los cursos de formación tecnológica a personas con mayoría de edad, como sucedía hace algunos años.

Estas son solo algunas de las puntulalizaciones que se manifestaron en el foro, sin embargo, siempre hay más por decir, reflexionar, hacer y construir. Sigamos trabajando en favor de una mejor educación en México.

Enlace del video del Foro: https://www.facebook.com/watch/?v=1781623608883125

Fuente de la información e imagen:  https://profelandia.com

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Las filtraciones de la SEP: poder y deseo

Por: Abelardo Carro Nava

«¿Dónde han quedado los objetivos que la SEP persigue para el desarrollo y progreso de los seres humanos plasmados en la Constitución Política de nuestro país?»

Decía, atinadamente, Rosa Ma. Zuñiga (1990), en su texto titulado La institución escolar, lugar de deseos y lucha de poderes que: “El poder, el deseo, el deseo por el poder y por su libre ejercicio, son características de lo humano, sin embargo, a pesar de que se juegan en todas las actividades humanas, son reiteradamente negados u omitidos… Esto hace que, a pesar de que la tendencia de la institución a conservarse y representarse como estática, su dinámica fundamental sea el conflicto, en la que luchan – entre otros – dos proyectos fundamentales, uno de conservación y otro de transformación… Esto provoca una situación desgastante que limita el desarrollo de los sujetos y de la propia institución, haciéndola girar en círculos cerrados que repiten un discurso monótono y vacío…”, y no se equivocaba pues, como sabemos, en las instituciones la acción humana tiende a generar una lucha constante, independientemente de las circunstancias, y claro, del tiempo en el que sucedan.

En este sentido sería ingenuo pensar que, desde que se creó la Secretaría de Educación Pública (SEP) en 1921 (y aún antes de que comenzara a operar como tal), en su interior no se vivieran una serie de deseos y pugnas por el poder de importantes consideraciones. Es, por así decirlo, un proceso “natural” en cualquier institución que puede ser observado, reflexionado, analizado y dialogado o debatido. Esta idea es clara, si consideramos que los hombres no llegan sin la construcción de una ideología ni con el sentido de pertenencia a ésta. Por tanto, la visión que, en este caso se tenga de la educación, suele marcar los conflictos y deseos personales de los hombres pues, independientemente de esa ideología (que parte de un constructo colectivo), también persigue intereses personales que nacen en la subjetividad de los individuos.

Es claro, al menos así lo considero, que a través de los años esta lucha ideológica y de intereses personales, han concurrido en una de las instituciones públicas de mayor presencia en nuestro país. Negarlo, sería ignorar los procesos sociales, políticos, económicos y culturales por los que ha atravesado el territorio mexicano y de los cuales, se desprenden distintos momentos educativos que son parte de la historia de la educación en nuestro país; por ello podemos comprender la existencia de una educación nacionalista, educación rural e indígena, educación socialista, educación técnica, de la unidad nacional, del plan de once años, la descentralización educativa, la reforma de los noventa, la reforma educativa de 2013 y la reforma educativa de 2019.

Desde luego que, hombres como José Vasconcelos, José Manuel Puig, Moisés Sáenza, Narciso Bassols, Jaime Torres Bodet, Luis Sánchez Pontón, Fernando Solana, Manuel Bartlett o el mismo Aurelio Nuño, han llegado a ocupar uno de los lugares más privilegiados del terreno educativo; no obstante, tales figuras han llegado con otros tantos personajes que, por ejemplo, recientemente han ocupado una Subsecretaría de Educación Básica, la Subsecretaría de Educación Media o la Subsecretaría de Educación Superior, y también, por ejemplo, han sido colocados en otros tantos puesto de menor rango, como recientemente ha ocurrido, otras figuras como en la Dirección de Materiales Educativos o en la Dirección de Diseño Curricular.

Tal designación o asignación de ciertas responsabilidades en la SEP, desde hace mucho tiempo, no obedece precisamente al conocimiento que tal o cual servidor público pueda tener con relación a la responsabilidad designada o asignada, sino a la cercanía con alguna otra figura que pueda tener un rango o responsabilidad mayor, ya sea en el poder ejecutivo, legislativo o judicial, pero también, por la simpatía o coincidencia con cierta ideología política o de grupo, o por el trabajo que haya hecho en los procesos electorales que haya favorecido la posibilidad de tener eso que conocemos con el nombre de “poder”.

Luego entonces, ya en el cargo, manteniendo una cierta lealtad con la forma, persona o grupo que los haya ahí colocado, asumen su ejercicio independientemente del propósito que persiga la institución en la que se encuentren. Obviamente, la lucha encarnizada por el poder en los distintos cargos o responsabilidades asumidas, se mantiene sin tregua ni descanso, pues los deseos naturales de los hombres, pueden o no, conjugarse con los de los grupos a los cuales dicen pertenecer o, al menos, sentirse identificados.

No obstante, valdría la pena preguntarse, si los deseos naturales de los individuos pueden superponerse a los objetivos de las instituciones en las que se encuentran ejerciendo el poder concedido. Pienso, desde luego, que no, porque cuando un individuo se incorpora a una institución, también incorpora parte de su libertad de acción y de decisión a la organización, por consiguiente, renuncia parcialmente a ese deseo, lo que a su vez supone que cada uno de sus miembros ya no sea libre para actuar a su albedrío y para decidir de manera autónoma cómo, dónde y cuándo deben hacerse las cosas (Antúnez, 1993). Esto último, ¿obliga a los individuos a buscar otras maneras de imponer sus naturales deseos y ambiciones por el poder para satisfacerlos?, ¿ello explica lo que, en los últimos años, sucede en el ámbito educativo desde que inició el régimen lopezobradorista?, ¿de qué manera se explica entonces, la serie de “filtraciones”, de diversos documentos, que hemos observado en los últimos meses y que, por su contenido y la relevancia de éste, podrían haberse dado a conocer por los canales oficiales de la propia Secretaría de Educación y no por las redes sociales?; es más, con dichas “filtraciones”, por ejemplo, del plan de estudios 2022 o de la nueva familia de textos gratuitos ¿se buscó “medir” las reacciones de muchos de los actores educativos y no educativos, interesados en la educación en nuestro país? Si la respuesta es afirmativa, ¿por qué no se hizo por los canales oficiales puesto que, si de transformaciones se habla, habría que considerar que “filtrar” tales o cuales documentos, es un ejercicio que poco abona a la transparencia tan necesaria en tiempos en los que se cuestiona la democracia. Entonces, tales “filtraciones”, ¿corresponden a la guía ética que dio a conocer el actual presidente de nuestro país?

Hoy, como antaño, la lucha encarnizada por el poder y por ver cristalizados los deseos de ciertos individuos es, por así decirlo, más que evidente; por ello es que me pregunto: ¿dónde han quedado los objetivos que la SEP persigue para el desarrollo y progreso de los seres humanos plasmados en la Constitución Política de nuestro país?, ¿habrá quien ponga orden en la mesa y fije un rumbo en el que, independientemente de esos deseos y de esas luchas por el poder que, repito, pueden ser considerados como “naturales”, anteponga los propósitos que persigue una institución tan noble, pero tan importante, como lo es la SEP y no los deseos personales y de grupo siendo omiso u omisa a lo que es evidente?

Si así están las cosas en estos momentos al interior de esta Secretaría, ¿qué nos espera de aquí al 2024?

Al tiempo.

Referencias:

Fuente de la información:  https://profelandia.com

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El Sistema Integral de Formación, Capacitación y de Actualización

POR: SERGIO MARTÍNEZ DUNSTAN

«¿Dónde está la formulación de los programas formación, capacitación y actualización?»

El Estado Mexicano está obligado a garantizar el derecho a la educación de las niñas, niños, jóvenes y adolescentes, sin distinción alguna. Una educación orientada a lograr el máximo aprendizaje y el desarrollo integral del educando bajo un ambiente de equidad e inclusión a través de políticas públicas y programas educativos y, con la aspiración,  la mejora continua. Se busca promover el enfoque humanista en las alumnas y los alumnos a fin que estén en condiciones de resolver situaciones problemáticas, aplicar los conocimientos y participar en los procesos comunitarios en la búsqueda de la transformación y el mejoramiento de la sociedad. Las ideas anteriores condensan, en la narrativa oficial, el concepto de la “Nueva Escuela Mexicana”. Ésta se concibe como medio o instrumento de la política. Para contribuir a afrontar tal desafío se constituyó el Sistema Nacional para la Mejora Continua de la Educación coordinado a su vez por la Comisión Nacional para la Mejora Continua de la Educación (Mejoredu).

Desde la perspectiva anterior, las y los docentes son considerados agentes fundamentales por su experiencia y compromiso. Se espera de ellos que propongan soluciones de acuerdo al contexto en que desempeñan su labor. Para enaltecerlos y dotarlos de las capacidades requeridas y con la finalidad de cumplir con tales expectativas, se estableció el Sistema para la Carrera de las Maestras y los Maestros (SCMM). Las profesoras y los profesores, en el cumplimiento de su deber, poseen cualidades personales y competencias profesionales de acuerdo con su función. El perfil profesional es un conjunto de características, cualidades o aptitudes que incluyen conocimientos y metodologías de intervención educativa. Sus competencias didácticas son las más apreciadas. La intención del párrafo es sintetizar, a grandes rasgos, la filosofía del SCMM. Para su administración y garantizar el cumplimiento de sus fines y propósitos se creó la Unidad del Sistema para la Carrera de las Maestras y los Maestros (USICAMM).

Paralelamente, al Estado Mexicano se le ha impuesto, por ley, la obligación de garantizar lo necesario para que las maestras y los maestros tengan opciones de formación, capacitación y actualización del magisterio. Tienen el derecho constitucional, y legal por supuesto, de acceder a un Sistema Integral de Formación, Capacitación y de Actualización (SIFCA). Las autoridades educativas, en sus ámbitos de competencia, tienen el deber de constituirlo. en los términos que determine la ley en materia de educación continua de la educación. En dicha ley, párrafo tercero del artículo 12, señala:

“Las autoridades de educación media superior, las autoridades educativas de los Estados y de la Ciudad de México y los organismos descentralizados, bajo la coordinación de la Secretaría de Educación Pública (SEP), a través de sus áreas competentes, ofrecerán programas de desarrollo profesional y cursos, de conformidad con los criterio que emita el Mejoredu.

Por otra parte, en la misma ley, artículo 14, se establecen los fines del SIFCA. Se busca orientar la oferta académica hacia:

  1. La formación con nivel de licenciatura
  2. La formación continua
  3. La promoción de programas de especialización, maestría y doctorado
  4. La realización de programas de inducción, actualización, capacitación y superación profesional
  5. La promoción del enfoque de derecho humanos, de igualdad sustantiva, la cultura de paz

Para efectos de su instrumentación, y con el fin de garantizar el derecho al acceso al SIFCA, se define el concepto de actualización, capacitación, formación (artículo 15). Incluso sus alcances (artículo 16). En este artículo, último párrafo, se establece que:

“El personal elegirá, los programas o cursos de formación, capacitación y actualización en función de los resultados obtenidos en la evaluación diagnóstica en que participe o de sus necesidades, intereses, habilidades y capacidades, tomando en cuenta además los contextos locales y regionales de la prestación de los servicios educativos”.

Lo anterior en concordancia con el párrafo sexto del artículo tercero constitucional.

Asimismo, en apego al precepto jurídico, el proceso tendría que realizarse en tres etapas:

  1. El USICAMM enviará al Mejoredu los resultados de los procesos de admisión, promoción y reconocimiento para que determine, formule y fortalezca los programas de formación, capacitación y actualización.
  2. El Mejoredu emitirá los criterios conforme a los cuales la SEP, las autoridades de educación media superior, las autoridades educativas de los Estados y de la Ciudad de México y los organismos descentralizados llevarán a cabo la valoración del diseño, la operación y los resultados de la oferta de formación, capacitación y actualización, y formularán las recomendaciones pertinentes.
  3. La USICAM remitirá a las las autoridades de educación media superior, las autoridades educativas de los Estados y de la Ciudad de México y los organismos descentralizados los resultados de la evaluación diagnóstica, para que implementen, de conformidad con los criterios que determine la SEP, los programas de formación, capacitación y actualización de las maestras y los maestros formulados por el Mejoredu.

Derivado del análisis al marco normativo, en los párrafos que anteceden al actual, me surgen algunas preguntas sobre el Sistema Integral de Formación, Capacitación y de Actualización (SIFCA).

¿Cuál es el diagnóstico acerca del perfil profesional del magisterio tomando como referencia los resultados obtenidos en los procesos de admisión, promoción y reconocimiento en el marco del Sistema para la Carrera de las Maestras y los Maestros?

¿Qué saben y qué pueden hacer quienes desempeñan funciones docentes, técnicos docentes, de dirección, supervisión y asesoría técnico pedagógica en el cumplimiento de su labor?

¿Dónde está la formulación de los programas formación, capacitación y actualización?

¿Dónde están los programas de formación, capacitación y actualización?

¿Dónde están los criterios para valorar el diseño, la operación los programas de formación, capacitación y actualización?

¿Y las recomendaciones del Mejoredu a la luz del análisis de los resultados de las evaluaciones derivados de los procesos de admisión, promoción y reconocimiento del Sistema para la Carrera de la Maestras y los Maestros?

Y en consecuencia

¿Cuál es la oferta de formación capacitación y actualización?

¿Cuándo serán evaluados las maestras y los maestros para esos fines?

¿Cuándo se darán a conocer los resultados globales e individuales de la evaluación diagnóstica?

¿Cuándo elegirán los programas o cursos de formación, capacitación y actualización las maestras y los maestros?

¿Se han utilizado los resultados de la evaluación diagnóstica para la mejora de los procesos de admisión, promoción y reconocimiento del SCMM? ¿y para las reformas curriculares?

Hoy por hoy, ¿qué han hecho en materia de formación, capacitación y actualización de docentes la SEP, las autoridades de educación media superior, las autoridades educativas de los Estados y de la Ciudad de México y los organismos descentralizados?

Probablemente habrá algunas experiencias, ejercicios y quizá ciertos resultados. Pero, ¿están debidamente articulados? ¿o son esfuerzos aislados, inconexos que poco o nada ayudan a las necesidades y requerimientos de formación de los docentes?

¿En dónde está la evaluación diagnóstica? ¿cuál es su concepción y diseño? ¿se ha piloteado? ¿se ha implementado? ¿a quiénes se ha evaluado? ¿qué resultados se han obtenido? ¿cuáles son los hallazgos para fines de política pública en materia educativa? ¿se cuentan con resultados individuales? ¿se les ha informado los resultados a quienes han sido sujetos de evaluación? ¿qué avances presenta? ¿por qué no han sido presentados?

¿En dónde está o que avances hay del Sistema Integral de Formación, Capacitación y de Actualización? ¿quién o quiénes debe dar cuenta de ello? ¿La SEP? ¿el USICAM? ¿el Mejoredu? ¿las autoridades educativas de los Estados y de la Ciudad de México tanto de educación básica como de media superior? ¿los organismos descentralizados? ¿quién deberían exigir su cumplimiento? ¿los maestros? ¿el poder legislativo? ¿la ciudadanía? ¿quién incumple la ley? ¿quién es omiso en exigir su cumplimiento en quienes descansa una responsabilidad de tal calibre?

¿Cuándo se apegarán al estado de derecho? ¿cuándo cumplirán la ley? ¿o la reforma educativa es mera simulación? y por ende ¿la política gubernamental en materia educativa, también? ¿es un fiasco el Sistema Integral de Formación, Capacitación y de Actualización? ¿la política educativa en materia de formación docente es una política fallida? ¿aún hay tiempo de enmendar el camino?

¿Este es el fortalecimiento a la formación docente estipulado en la LGE?

Carpe diem quam minimun credula postero

Fuente de la información: Profelandia.com | Comunidad docente en la red

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