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Centennials y millennials no son grupos generacionales, sino de hábitos de consumo

Boletín UNAM-DGCS-647
Ciudad Universitaria.

• Pueden ser categorías muy populares, pero se carece de investigación rigurosa al respecto, expuso Ricardo Trujillo Correa
• Hay que romper el cliché de que los jóvenes «tienen chip integrado» y saben usar la tecnología, consideró Rubén Darío Vázquez Romero

Pese a ser muy usadas y populares, no existe una definición a partir de las ciencias sociales de lo que se denomina las generaciones centennial y millennial, pues no son grupos etarios (que tienen la misma edad), sino grupos de mercado o con determinados hábitos de consumo, coincidieron en señalar los académicos de la UNAM, Rubén Darío Vázquez Romero y Ricardo Trujillo Correa.

“Desde el punto de vista de la mercadotecnia corresponden a hábitos de consumo de ciertos grupos, por eso hay tantas variaciones de cuándo a cuándo corren estas ‘generaciones X, Z o los millennials’” expuso Vázquez Romero, académico de la Facultad de Estudios Superiores Aragón.

Son características más cercanas a jóvenes de contextos urbanos, de determinados espacios universitarios, quienes comparten hábitos de consumo tecnológico y de entretenimiento, agregó.

Por separado, Ricardo Trujillo Correa, académico de la Facultad de Psicología, coincidió en que no hay sustento para usar estas categorías como cortes demográficos o características particulares de un grupo poblacional. “Pueden ser muy populares, pero no hay investigación seria ni rigurosidad al respecto”.

Es un debate que no tiene fundamento. “De los millennials se decía que no eran muy comprometidos, que no les importaban los demás y tras el terremoto en nuestro país (de 2017) allí estaban, muy comprometidos”, destacó.

El también maestro en Psicología Clínica indicó que al revisar artículos sobre millennials y centennials se encuentra que en su mayoría son encuestas de opinión aplicadas en grupos pequeños, de otras naciones y generalmente de poblaciones urbanas, de clase media o media alta. “No creo que sean las características para definir a una sociedad o a una generación”, reiteró.

Hoy en día en la investigación ya no se puede universalizar, aplicar criterios generalizables, subrayó.

¿Nativos de la tecnología?

Con motivo del Día Internacional de la Juventud que se conmemora mañana 12 de agosto, Vázquez Romero expuso que generalmente suele decirse que los millennials son quienes nacieron a partir de mediados de los 80 al año 2000 y los centennials de 2000 en adelante.

Ambos comparten algunas características como percibir a la tecnología como una cuestión “muy nativa”, pues nacieron cuando un número importante de los desarrollos actuales ya eran una realidad, abundó el especialista en publicidad y métodos de investigación.

Los millennials crecieron con internet y entienden fácilmente la comunicación digital.  Los centennials nacieron en la época de internet móvil y la posibilidad de encontrar educación, socialización, empleo, grupos sociales más específicos a través de herramienta de comunicación.

“Coinciden en señalar aquello que no les gusta y que se había normalizado -como la violencia sistémica contra las mujeres, el abuso laboral- y no dudan en utilizar las plataformas para construir estas protestas, a través de crear tendencias y contenidos en redes sociales; pueden señalar situaciones y sensibilizarnos respecto a ellas”, argumentó el especialista.

El académico universitario refirió que en México se estima que uno de cada cuatro habitantes tiene acceso a internet, pero no se encuentra distribuido de manera uniforme, por lo que hay zonas como la Ciudad de México en la cual la mayoría tiene conexión, mientras en entidades como Chiapas sólo tres de cada 10.

Agregó que se deben romper mitos como el que las nuevas generaciones “tienen ya un chip digital”, pues el confinamiento ha mostrado que si bien tienen cierto control y conocimiento de algunas plataformas, no saben utilizar todas las existentes para realizar trabajo en equipo, hacer videoconferencias, teletrabajo, acceder y utilizar bibliotecas digitales y bases de datos especializadas.

“Es un cliché que hay que romper, porque en la medida en que reconozcamos que tenemos carencias digitales y que nos hace falta capacitación, va a ser más sencillo que empecemos a capacitar profesores y alumnos  en el uso de estas plataformas para tener un mejor rendimiento digital”, aseveró el también especialista en Cultura Digital y Derechos Digitales.

#UNAMosAccionesContralaCovid19
https://covid19comision.unam.mx/

Fuente e Imagen: https://www.dgcs.unam.mx/boletin/bdboletin/2021_647.html

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“Basura Cero”: un tema de agenda nacional

Por: Héctor Rodríguez Cruz

Una buena gestión de residuos sólidos es mucho más  que contar con una ciudad limpia. La verdadera solución al problema no se logra solamente reaccionando al desastre que ocasiona su desbordamiento.

Nunca será suficiente denunciar y gritar la peligrosidad y toxicidad de la basura.  La alerta tiene sentido porque la basura daña considerablemente el medio ambiente y la salud física y mental de la población, especialmente los más vulnerables: niños, embarazadas, población adulta mayor y población en extrema pobreza.

La basura no conoce de límites municipales. Los desechos de un municipio se convierten en una seria amenaza para los habitantes del propio municipio y los demás  municipios formando así una tétrica cadena de peligros.

Ante el fracaso de los gobiernos municipales para solucionar la problemática de la basura se hace necesario asumirla como un tema de la agenda nacional. Bien haría al país el que el actual gobierno la asumiera con ese carácter.

Una buena gestión de residuos sólidos es mucho más  que contar con una ciudad limpia. La verdadera solución al problema no se logra solamente reaccionando al desastre que ocasiona su desbordamiento  o para acallar los justos reclamos y las protestas de los habitantes frente a la crisis.

Sin un buen sistema de gestión de residuos sólidos no se puede aspirar a construir una ciudad sostenible ni habitable. Pero no se trata únicamente de soluciones técnicas. Existen impactos climáticos, de salud y de seguridad, así como otras consideraciones sociales importantes que exigen una respuesta responsable.

Existen ya respuestas adecuadas y probadas. BASURA CERO es una de ellas. Una  iniciativa mundial  que surge a partir de la problemática ambiental generada por el aumento descontrolado de residuos que se depositan o se incineran diariamente en los rellenos sanitarios del mundo.

La definición de BASURA CERO fue adoptada por la Alianza Internacional Basura Cero: “Basura Cero es la conservación de todos los recursos a través de la producción y el consumo responsables, la reutilización y recuperación de todos los productos, envases y materiales sin incinerarlos y sin generar emisiones al suelo, agua o aire que supongan una amenaza para el ambiente o la salud humana.” (ZWIA, 2018).

BASURA CERO es un objetivo y un plan de acción. Dirigidos tanto a conservar y proteger los recursos naturales y el medio ambiente como al logro de la justicia ambiental y social, la regeneración, la equidad y el respeto por la naturaleza poniendo fin al tratamiento de los  residuos en incineradores, vertederos y rellenos sanitarios.

Propone la educación como el  centro  de una cultura del consumo consciente y responsable, de la clasificación de residuos y de su aprovechamiento, con lo cual  se contribuye a mejorar el ambiente y avanzar en la aplicación de nuevas tecnologías.

BASURA CERO  integra a toda la ciudadanía, en tanto como consumidora de bienes y servicios y generadora de basura. Los fabricantes y comerciantes, por su condición de productores y proveedores Las autoridades, por su condición de responsables del saneamiento.

BASURA CERO comprende acciones de estímulo a la producción de bienes de consumo reutilizables o biodegradables, construcción de una cultura de separación de residuos en la fuente, recolección separada, procesos industriales de reciclaje y aprovechamiento final y minimización de la disposición en relleno sanitario.

Al diseñar e implementar planes BASURA CERO  a nivel local, los municipios deben respetar e involucrar a todos los sectores que componen el ecosistema de los residuos, incluyendo comunidades y trabajadores formales y de la economía popular.

Sin embargo, hay que considerar que las operaciones del modelo BASURA CERO son costosas. En muchos de los países en vías de desarrollo, la gestión de residuos sólidos puede llegar a consumir del 20% al 50% del presupuesto de un municipio.

Desde el año 2000, los préstamos del Banco Mundial para proyectos de gestión de residuos sólidos han alcanzado los  USD $4,500 millones y apoyado 329 programas de residuos sólidos alrededor del mundo.

También existen otras salidas convergentes. La República Dominicana (RD) ha asumido  el compromiso con la consecución de los objetivos del Acuerdo de París bajo la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático (UNFCCC), en el proceso de mejora y actualización de la Contribución Nacionalmente Determinada de RD 2020 (NDC-RD 2020). ¡La iniciativa requiere ser difundida”

Con la  propuesta del PLAN BASURA CERO no sólo se trata de anunciar  una idea nueva para mirarla y acariciarla de lejos. Se trata de  una clara invitación al cambio responsable por parte de los gobiernos locales y del gobierno nacional.

En todos los municipios y en el país debemos  mirar con ojos nuevos la agobiante y riesgosa situación de la basura. Apuremos el paso o llegaremos tarde.

Hagamos caso a la advertencia que Albert Einstein nos hace a todos: “No pretendamos que las cosas cambien si siempre hacemos lo mismo”.

Fuente: https://acento.com.do/opinion/basura-cero-un-tema-de-agenda-nacional-8971246.html

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La tecnología en la práctica unidocente

Publicada en blogs.iadb.org

Por:

La tecnología juega un rol fundamental en el salón de clases de Daniel Ballestero Umaña, unidocente de la escuela San Isidro de Florida en Siquirres en la provincia de Limón en Costa Rica. Su iniciativa, basada en el uso de aplicaciones interactivas, ha sido ejecutada en la escuela donde trabaja con estudiantes de segundo a sexto grado y en otras 9 escuelas multigrado en esta zona rural de Costa Rica, un esfuerzo que lo hizo merecedor del reconocimiento REDUCA. Durante la pandemia, Daniel desarrolló sesiones lúdicas a través del uso de aplicaciones y dispositivos digitales para que sus alumnos se apoyaran y trabajaran conjuntamente en la construcción de conocimiento, al tiempo que, también guio a otros docentes en el desarrollo de herramientas educativas que facilitaran el aprendizaje.

Daniel demuestra que el docente es un agente de cambio y que la tecnología representa la mejor manera de aprovechar el tiempo en el aula. Dentro de su mediación pedagógica, promueve el uso de la tecnología y busca que maestros y directores sean agentes activos para su aprovechamiento, visitando centros educativos y mostrando ejemplos de actividades que realizan sus estudiantes. Considera que la tecnología permite reducir la brecha digital, diversificar las herramientas para el aprendizaje, desarrollar mejor las habilidades transversales, fortalecer el desarrollo profesional de los docentes y mejorar la eficiencia en la gestión de la escuela y del aula[1].  Daniel desempeña su labor en condiciones de ruralidad y multiplicidad de responsabilidades, brindando atención simultánea a niños de diversos grados en un mismo espacio. Hablamos con este docente sobre su trabajo con otros centros educativos unidocentes cercanos a su escuela ubicada al este de Costa Rica y su motivación por promover el trabajo colaborativo entre maestros, padres de familia, estudiantes y directivos.

¿Qué se puede rescatar de las nuevas formas y metodologías surgidas durante la pandemia?

Sentía que hacía falta este “remosón”, esta “sacudida” para valorar las problemáticas que siempre salen a flote como la conexión a internet, los dispositivos digitales, la manera de enseñarle a nuestros niños, etc. Durante la pandemia, nos dimos cuenta de la importancia que tiene para el desarrollo del país, que todos los niños tengan las mismas posibilidades. En este contexto, las escuelas unidocentes resultaron diferentes, pues atendemos una población reducida de niños. Actualmente, los estudiantes solo tienen 3 horas al día de clase y para aprovechar ese tiempo se trabaja mucho con dispositivos digitales. Durante la pandemia, la escuela construyó un Kiosco, un área de7x7 metros, con techo, toma corriente para la electricidad, lavamanos, jabón, gel anti-bacterial y los más importante: internet para que puedan conectarse. Ya que pocos tienen conexión en sus casas, los niños aprovecharon este nuevo espacio en la escuela para que su aprendizaje continuara.

 Los profesores son la primera fuente de contacto con sus estudiantes ¿Cómo fomentar el autoaprendizaje y el aprender a aprender en tus formas de enseñar?

La interacción profesor-alumno es clave. Mis metodologías van enfocadas a la solución de problemas. Mis estudiantes se acostumbraron a ser autónomos, ellos se forman en una escuela unidocente donde deben preocuparse por aprender solos, colaborar con estudiantes de otros niveles y participar activamente. Además, mis alumnos sienten un alto grado de responsabilidad en cumplir con sus deberes. En su contexto, están acostumbrados a luchar y a perseverar. Están acostumbrados a entrar a internet y ser curiosos en buscar la información y yo les digo que me expliquen en sus propias palabras lo que han aprendido, en vez de replicar lo que encuentran. Una de las prácticas que más me gusta implementar con mis alumnos es que transformen la lectura en un mapa conceptual y así puedan procesar mejor la información. Este ejercicio les permite decir lo que saben y cómo lo entienden. Ellos son muy creativos y mi labor es apoyarles a indagar para que sean críticos, cuestionen las fuentes de información y a que no crean todo lo que está en redes. Hoy es clave acompañar y monitorear a los estudiantes, así como promover el desarrollo del pensamiento crítico.

Escuela San Isidro de Florida en Siquirres en la provincia de Limón en Costa Rica por Daniel Ballestero Umaña

¿Qué consideras que esta pandemia ha exigido más de los profesores? ¿Qué habilidades has desarrollado en este panorama?

Adaptarse a la tecnología y desarrollar habilidades digitales. A mí siempre me ha gustado la tecnología. Los niños aprenden diferente cuando se les acompaña el aprendizaje con herramientas digitales. Por ejemplo: el proyector. Cuando empiezo a usar el proyector y veo que otros profes usan la pizarra tradicional, les pregunto que si tienen este aparato y por qué no usan Word o PowerPoint. Me parece triste que muchas escuelas tienen este y otros equipos, pero algunos profesores no les gusta usar la tecnología y no se dan cuenta cómo mejora la educación. Hay casos en mi provincia donde los maestros y directivos no usan los dispositivos digitales. Allí es de dónde nace mi motivación: decidí apoyar a otros maestros y trabajar con directivos para incentivarles el uso de la tecnología. Desde el 2020 visito varias escuelas cercanas para compartir mi experiencia.

¿De qué formas las TIC ayudan a sostener propuestas de enseñanza renovadas?

La tecnología es un apoyo, puedes llevártela a casa y los ejercicios no se acaban, algo que el cuaderno no puede hacer. Los ejercicios en varias de las aplicaciones interactivas que usamos no se detienen, el que se detiene es el niño. Los niños pueden hacer 30-40 ejercicios y no se acaban. Yo trabajo con el aula invertida y ha sido muy efectiva. Esto me permite trabajar con alumnos de diferentes niveles de una manera más personalizada cuando estamos en un mismo espacio en el salón de clases. Además, hay aplicaciones que no necesitan internet y permiten que el alumno estudie tanto en el aula como en la casa.Esto ayuda a personalizar el aprendizaje, interactuar con las nuevas tecnologías y les brinda a los estudiantes nuevas destrezas.

¿Y los profesores?

Ese es un reto muy grande. No hay respuesta muy proactiva. Creo que es falta de ética y, autorregulación. Muchas veces me pregunto ¿es ético que los maestros no se preocupen por aprender de las tecnologías? He visto los resultados con mis estudiantes, cómo logro utilizar la tecnología para conectarme por video-llamadas con ellos y con los de otros centros educativos y cómo este tipo de interacción motiva a los alumnos.

¿Cómo ha sido el apoyo de los padres de familia durante la pandemia?

La pandemia nos ha permitido que podamos interactuar más con los padres, a establecer mejores canales de comunicación, ya sean presenciales cuando vienen a dejar a sus hijos o por WhatsApp. La comunicación ha mejorado muchísimo y acompañan mejor a sus hijos para ayudarles con las tareas. Siempre están consultando proactivamente. Pero hay que trabajar más con los padres para hacerles comprender que más allá de las responsabilidades en casa y el sustento, deben acompañar a sus hijos en el aprendizaje a distancia.

¿Cómo ve la educación de aquí a 10 años?

Me imagino una educación super interconectada y cada niño con la computadora. Sería injusto no pensarlo. Me imagino una educación que utilice tecnologías de vanguardia.

¿Cuál cree usted que ha sido hasta el momento el mayor logro en temas de educación en Costa Rica?

La cobertura, sin duda. Ese intenso deseo que el internet llegue hasta el interior, a las zonas más alejadas de Costa Rica. Esto es señal de que mi país quiere llegar hasta el último rincón. También, que ninguno se quede sin la misma oportunidad y brindar la posibilidad que los niños tengan sus computadoras, y se trabaje para que nadie se quede afuera.

En esta serie de blogs Voces de Maestros: trabajadores de primera línea compartiremos cada una de las voces de estos 16 docentes que son inspiración para nuestra audiencia en América Latina y el Caribe y que ponen en práctica las #habilidades21 dentro y fuera del aula. Encuentra la primera entrada de esta serie aquí. Mantente en sintonía siguiendo nuestra serie de blogs sobre educación y #habilidades21, descarga el Futuro ya está aquí y mantente atento a nuestras novedades!

[1] Mateo Diaz, M. and Chan, Lee. (Eds.) 2020. What Technology Can and Can’t Do for Education. Washington DC: Inter-American Development Bank.

Fuente e Imagen: https://blogs.iadb.org/educacion/es/la-tecnologia-en-la-practica-unidocente/

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Richard Stallman en Público: «Hay que prohibir que las empresas recojan nuestros datos»

Por: Joan Canela/Público 

«Cualquier móvil se puede convertir en un dispositivo de escucha, incluso apagado, por eso yo no tengo. No acepto la tecnología digital injusta», dispara Richard Stallman (Nueva York, 1953) a modo de presentación cuando el periodista saca el aparato para usarlo de grabadora. Stallman, un mito viviente del movimiento en defensa de una informática ética tiene tics de gurú. Habla con seguridad y de forma tajante. Hay cosas que son cómo son y no necesita desarrollarlas, aunque la afabilidad en el trato o detalles como que pare la conversación para escuchar el canto de un pájaro, revelan una gran humanidad.

Ante la pregunta de si se puede vivir sin utilizar ningún servicio digital programado con software privativo [aquel que es propiedad de una empresa y queda fuera del control del usuario, que no lo puede estudiar ni modificar] responde con un simple «yo lo hago». El precio a pagar podría parecer alto a muchas personas, Stallman no solo no tiene móvil, tampoco usa tarjeta de crédito: «Siempre pago en metálico. Si algún lugar no acepta el dinero en metálico, no quiero su producto». Aunque reconoce la dificultad creciente para realizar trámites oficiales sin pasar por el aro del software privativo. «Cada vez más webs de entes públicos cuentan con [el lenguaje de programación] JavaScript, que funciona enviando un programa a tu máquina para que se ejecute allí. Esta es una mala manera de hacer informática y los estados no tendrían que utilizarla», explica Stallman, quienes también reconoce que «por ahora evito los seguimientos, pero quizás en un futuro ya no podré».»Siempre pago en metálico. Si algún lugar no acepta el dinero en metálico, no quiero su producto»

Pero, ¿por qué es tan importante evitar ser seguidos? «Es una cuestión ética, lo que se encuentra en juego es nuestra libertad», continúa Stallman, quien alerta del peligro de «vender esta libertad a cambio de comodidades, de unas comodidades, además, que podrían existir igualmente, pero que alguien gana más dinero a base de controlarnos. Si no somos tontos, tenemos que reconocer donde nos lleva este camino y decidir no ir». Además, denuncia que el nivel de control cada vez va a más: «Por ejemplo, los últimos años han impuesto tener una cuenta de Microsoft, y es muy injusto vincular el uso de un programa a tener una cuenta con la empresa, es un motivo suficiente para rechazar el uso». «Cualquier programa que se ejecute a la máquina del usuario, si no es libre, es un instrumento de poder del amo del programa y somete el usuario, es el que queremos evitar desde el movimiento del software libre», continúa.

Richard Stallman, el creador del software libre, en una entrevista con 'Público'.
Richard Stallman, el creador del software libre, en una entrevista con ‘Público’.  Helena Olcina

Stallman va más allá del simple resistencialismo individual. Cree más necesario que nunca un gran movimiento ciudadano que obligue a los gobiernos a legislar para impedir a las grandes empresas a recopilar datos del usuario, a menos que sea estrictamente necesario. «Y por necesario, me refiero a imprescindible, no tendría que servir como excusa incluir una pequeña funcionalidad para justificarlo. Por ejemplo, me he encontrado en ciudades europeas un sistema de pago de los aparcamientos municipales donde hay que incluir el número de matrícula. Es un abuso y una fórmula de controlar los movimientos de la ciudadanía. Tendría que estar prohibido por ley, puesto que hay muchos sistemas para hacerlo sin obligar a identificarse. La eficiencia no lo justifica, ni tampoco la comodidad. Incluso se pueden hacer pagos por teléfono de forma anonimizada, como por ejemplo con el sistema GNU Taler que estamos desarrollando».

«Tampoco me fío de los reglamentos de protección de datos, puesto que dan por supuesto que los datos se recogen, y después ya sabemos que en casos de emergencia todas estas normas acaban siendo papel mojado», continúa Stallman, por quien la única solución pasaría por «prohibir a las empresas la recogida. Este es el punto de resistencia y es donde podemos triunfar».

¿Serían suficientes estas leyes? ¿Se cumplirían? «Pienso que sí. Si fuera explícitamente ilegal y con penas duras, las empresas no se arriesgarían. Incluso se podría hacer en un solo país. Las empresas que quisieran operar allí tendrían que cumplir la ley y no recoger datos de los clientes que viven en el país». Ante las dificultades políticas y las presiones para impedir leyes en esta línea, asume que existen, pero pide no «convertir las dificultades en obstáculos que pueden hacer que el objetivo parezca inasumible».

En este punto de la conversación parece obligatorio sacar el ejemplo de las leyes antimonopolio aprobadas en los EEUU a finales del siglo XIX para impedir el control de todo el mercado de productos petroleros por parte de la Standard Oil. ¿Sería necesario romper Google? ¿La situación es similar? «Sí y no. Por un lado, Google no es un monopolio, hay alternativas a sus productos. Además, lo que hace es mucho peor. En el siglo XIX nadie te espiaba para comprar petróleo, pero Google sí que lo hace con sus usuarios. Si hubiera diez empresas cómo Google, las seguiría rechazando todas. Pero por otro lado, si el Gobierno americano de entonces prohibió los monopolios, es porque había una demanda popular en este sentido, un movimiento organizado. Este movimiento existió más o menos hasta 1980, cuando [Ronald] Reagan llega al poder. Reagan representaba a los ricos y aceptó darles ventajas y mucho más poder. A partir del 2000 se han ido creando trusts de empresas casi sin límites, corporaciones muy grandes que provocan que en muchos sectores industriales de los EEUU no haya prácticamente competencia».»Google no es un monopolio, hay alternativas a sus productos»

Otra consecuencia de los gobiernos republicanos ha sido la firma de tratados que imponen el «supremacismo empresarial, aunque normalmente se denominan tratados de libre comercio». Estos acuerdos, defiende Stallman, «tienen el propósito de transferir el poder de los estados a las grandes empresas. Por ejemplo, la empresa que quería construir el Keystone XL [un oleoducto entre Canadá y los EE. UU., suspendido por Barack Obama tras fuertes protestas de indígenas y ecologistas] acaba de exigir 16.000 millones de dólares al gobierno en indemnizaciones».

Por eso, Stallman reclama una gran movilización para obligar en los gobiernos a implementar leyes que acaben con las prácticas tecnológicas injustas. «La democracia se inventó en Atenas para que los pobres, si se unían, fueran más fuertes que los ricos. Ahora, la cuestión es saber si tenemos suficiente democracia para que los gobiernos que nos pertenecen nos defiendan, o se revela que en realidad son gobiernos de la plutocracia».

Fuente: https://www.publico.es/sociedad/richard-stallman-hay-prohibir-empresas-recojan-datos-punto-resistencia.html

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Simulación de una educación de la sanidad

Por: Eduardo Hernández de la Rosa

El proceso de confinamiento que hemos vivido como humanidad ha reflejado las desigualdades que existen en nuestro presente. Tal como se ha dicho por algunos autores, la posmodernidad ha llegado, pero no de la misma manera para todos (Fullat), este ejercicio de confinamiento nos ha mostrado  las diferentes realidades en las que el riesgo (Beck), se convierte solo en una opción psíquica, más que una realidad inminente.

Si bien, en los contextos periféricos (Wallerstein), la muerte aparece como un culto, como una forma de manifestarse ante las realidades opresoras (Maffesoli, Scot), también emerge como una circunstancia conocida, vivida y natural, que muestra aquellos dibujos que se hacían por los cines más críticos (Buñuel) donde aludían lo crudo de las realidades en las que se vive.

Mi razonamiento aparece del lado de las realidades con las que convivo, aquellas que mostraron desde el inicio la otra cara de la moneda, por un lado, la de la necesidad de confinamiento y por el otro la de posibilidad de confinamiento, claramente ambas con circunstancias distintas.

Así, las realidades latinoamericanas expresaron en lo cotidiano, zonas completas en las que la necesidad de alimentarse era la razón más urgente para no pensar en confinamiento, más que la necesidad de salvaguardar la integridad.

Del confinamiento, emergieron movimientos y transformaciones no deseadas, como resultado del empuje del dispositivo de control salubre en las sociedades. Del lado de la educación, aparecieron ejercicios que impulsaron la migración forzada hacia el proceso de sociodigitalización de las comunidades educativas, siendo esto, una analogía a una estampida, en donde los más veloces podrían mirar y tomar las decisiones del rumbo, por sus condiciones, pero los más lentos, tendrían a sufrir atraso y consecuencias difíciles en su andar.

De la misma manera, el proceso sociodigital cobró factura y expresó de manera constante las dificultades existentes en su desarrollo. Así, se introdujeron dentro del quehacer educativo muchas formas y propuestas de operar la formación cívico-técnica en los estudiantes, sin embargo, las resistencias aparecieron y las formas íntimas de vida se convirtieron en parte del entretenimiento de la construcción formativa, especialmente donde el streaming podía ver su lugar.

Ahora bien, no solo eso cambió, sino que la industria de la sanitización también tuvo un crecimiento, promoviendo un gran simulacro de guerra contra el enemigo invisible. El instrumental militar para hacer frente al enemigo cundió todos los espacios, tanto en público como en lo privado, tanto en lo visible como en lo íntimo; caretas, cubrebocas, googles, guantes, sanitizadores e incluso trajes sanitizantes de diferentes niveles de calidad, se convirtieron en las nuevas formas de negocio para muchos que pudieron ver en el riesgo del contagio un modo de vida, mediante la simulación de la prevención.

Derivado de la necesidad de estos equipamientos, aparecieron reportajes, sobre las funcionalidades de uno u otro aparato para alejar, evadir, prevenir, erradicar e incluso minimizar el virus. Al lado de dicho instrumental de “guerra” contra el SARS-CoV-19, aparecieron otros instrumentos, como lo fueron los “memes” cuyos mensajes aludían al virus desde el aspecto más sarcástico posible, así como dispositivos institucionales, como los semáforos epidemiológicos, cuyas métricas decidían si el confinamiento era menor o más riguroso.

Aún con esta biopolítica, en la vida real, todo podría ser distinto, las personas caminando sin las restricciones de los metros necesarios, hacían ver al enemigo invisible como un mito, como si pudiera prevenirse su asalto a través del aparato sensorial humano, siendo los indicadores bióticos para poder identificar la amenaza  “el estornudo, la tos, la temperatura”, tan pronto es identificado algo de ello, se estigmatiza y se genera un abandono social inmediato.

El gran simulacro, aparece sobretodo en épocas de elecciones, sabedores de que la pandemia no cambia de un momento a otro, que los procesos de contagio se mantienen, aparece la llegada de dosis, para el caso del continente americano, al menos, son evidentes la llegada de vacunas previas a las elecciones, de la mano de la esperanza prometedora de una realidad dosificada como preámbulo del fin del confinamiento.

Al concluir las elecciones, la euforia disminuye y sucede lo esperado, de nueva cuenta se reactivan los colores no deseados del dispositivo del estado: el semáforo epidemiológico, por lo que la esperanza se mantiene nuevamente en espera.

Las autoridades educativas institucionales si bien realizan todas las acciones posibles dentro de la comprensión de sus esfuerzos socioculturales y de las recomendaciones de sus asesores, a todas luces, se observa, que aún son insuficientes, pues ante realidades heterogéneas, donde la pandemia está dosificada, no solo por biología, sino también por condición social, las necesidades y los semáforos se vuelven solo aparatos de simulación institucional, frente a realidades de necesidad coyuntural.

Mientras tanto, se sigue haciendo teoría de lo sociodigital, sin mirar las realidades, sin comprender que los procesos de confinamiento, provocan más que un resguardo al riesgo de nuestra biología, la urgencia de transformar  nuestras necesidades, se olvida que en un contexto desigual, las políticas homogéneas, generan desigualdad y que los cambios, no son ni serán en una sola medida.

El vivir cotidianamente nos expresa las realidades, la sociodigitalización, solo es una forma de enfrentar la pandemia, para intentar mantener el sistema en el que se vive, no obstante, las organizaciones deberán de atender de manera recurrente, que el ser humano no puede mantenerse bajo el síndrome multiscreen del homeoffice, la anomia que produce la adaptación del sistema al confinamiento y la búsqueda de posibilidades de interacción a través de la mediación tecnológica, emergerá de formas que poco sospechamos.

Mientras tanto, las instituciones proveerán de dispositivos de control biopolítico a sus comunidades cautivas, lo cual tendrá como consecuencia un conjunto de construcciones subjetivas en la interiorización de prácticas de la cotidianidad, por lo que se deberá poner especial atención al “simulacro de la sanitización, no solo en una institución, sino en las realidades que vivimos y operamos”.

Referencias

Fullat, O. (2011) Octavi Fullat, filósofo catalán – Posmodernidad e incertidumbre. CNN. recuperado de https://www.youtube.com/watch?v=0bg7HjXBz1A

Maffesoli, M. (2005). La tajada del diablo. México: Siglo XXI.

Scott, J.(1990). Los dominados y el arte de la resistencia: discursos ocultos. México D.F., México: Ediciones Era.

Beck, U. (2002) La sociedad del riesgo. Madrid: Siglo XXI de España Editores

Wallerstein, I. (2005). Análisis del Sistema Mundo. Una introducción. México: Fondo de Cultura Económica.

Fuente: El autor escribe para OVE

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El 90% de los docentes cree que su labor mejora la sociedad, pero solo la mitad se siente reconocido

Por: Educación 3.0

Más del 80% de los docentes creen que la tecnología puede facilitar el aprendizaje del alumno y el 70% de ellos se tienen que formar en tecnología por su propia cuenta. Estos son algunos de los datos que recoge un estudio reciente sobre el papel de la tecnología en la educación actual.

Más del 90% de los profesores y futuros profesores está orgulloso de formar a los ciudadanos del mañana y creen que su profesión contribuye a crear una sociedad mejor. Sin embargo, a pesar de que son conscientes de su relevancia social, sólo la mitad (56%) se siente bien reconocido en su profesión.

Así lo muestran los datos recogidos en un estudio realizado por la plataforma internacional de sostenibilidad Quiero y Samsung Electronics, que busca conocer el papel que está jugando la tecnología en la educación actual y el que podría tener en el futuro. Para ello, se han entrevistado a docentes de Primaria y Secundaria, tanto de escuelas públicas, privadas y concertadas, así como a alumnos de último año del máster en Educación Secundaria y estudiantes del grado de magisterio.

Según el informe, el 70% asegura que se sienten sometidos a mucha presión por parte de las familias de los alumnos, aunque, a pesar de ello, solo el 16% manifiesta tener conflictos con los padres de alumnos con mucha o bastante frecuencia.

En este sentido, cabe destacar que tanto los profesores actuales como los futuros profesores (un 73%), consideran que la educación y el respeto de los alumnos hacia los docentes es mucho peor que el de la generación de hace 10 años, según los datos extraídos del estudio.

La tecnología, un elemento fundamental para la integración en la sociedad

El estudio también destaca que más del 70% de los profesores se forman en tecnología para la educación por su propia cuenta, o bien con ayuda de otros profesores, Internet, tutoriales o directamente experimentando con herramientas y aprendiendo a base de ‘prueba y error’.

Además, casi la totalidad de los profesores españoles (89%) coinciden en que, para estar integrados en la sociedad, tienen que estar al día de los avances tecnológicos. En esta línea, más del 80% coincide en que la tecnología en la educación puede facilitar el aprendizaje del alumno. De hecho, el 67% siente que la tecnología puede ayudar a relacionarse mejor con el alumno y saber más sobre ellos (por ejemplo, qué necesitan, qué piensan, qué les gusta).
labor docente

En este sentido, el 71% de los docentes también considera que la tecnología fomenta el trabajo en equipo, la interacción con los compañeros, la creatividad y otras competencias sociales.

Por otro lado, a pesar de que la tecnología está presente en la educación, hay una percepción mayoritaria (88%) de que su uso en las aulas es menor que el uso general que hace la sociedad, según los datos. En este sentido, al 71% de los profesores le gustaría sacarle el máximo rendimiento a esta en el aula para adaptarse a las necesidades propias de la sociedad en la que vivimos.

Una educación personalizada

Otro de los aspectos que se observa en el estudio es la idea de que un buen uso de la tecnología puede contribuir en el avance de una educación personalizada; una educación que ponga en el centro las necesidades particulares de cada alumno.

En esta línea, la tecnología permite una mayor adaptación y flexibilidad para poder abarcar una diversidad cada vez mayor en las aulas. Tal y como desgrana el estudio, cuando la tecnología se centra en el alumno favorece su empoderamiento, es decir, se hace más responsable de su educación.

Los retos de la educación actual

El informe también hace hincapié en los retos a los que se enfrentan los profesores en el futuro. Así, se resaltan dos tipos de retos: estructurales y socioculturales. Entre los estructurales, destaca el de las aulas ‘masificadas’ (el 72% piensa que el ratio de alumnos por clase es uno de los principales problemas para poder formar a los alumnos adecuadamente), acompañado, en menor medida, de un malestar por un cambio constante en las leyes que rigen la Educación. Le sigue la dificultad de impartir un temario que consideran demasiado extenso y que deja poco espacio para trabajar en valores y competencias sociales.

Entre los retos socio-culturales, el más necesario es el de conectar con los alumnos, tanto personalmente como con los contenidos, ya que se percibe que la distancia entre generaciones es cada vez mayor. Esta preocupación se articula en la necesidad de captar la atención e interés del alumno para poder ejercer su labor de profesor. Muy ligado a este reto de conexión y a la educación personalizada a la que se aspira en el futuro, está el reto de gestionar la diversidad en las aulas, que cada vez es mayor. Otro desafío importante está en la necesidad de formarse y usar adecuadamente la tecnología en las aulas, muy ligado a la necesidad de introducir nuevas metodologías de enseñanza que permitan la conexión tan deseada y alcanzar esa educación personalizada ideal.

Fuente e Imagen: https://www.educaciontrespuntocero.com/noticias/labor-docente-mejora-la-sociedad/

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República Dominicana: Ministerio de Educación entrega equipos tecnológicos a estudiantes de Samaná

América Central/República Dominicana/18-07-2021/Autor(a) y Fuente: acento.com.do

En el acto de apertura, Jimmy Rosario, director general de Tecnología del Ministerio de Educación, exhortó a los padres, madres y tutores a cuidar los equipos.

SAMANÁ, República Dominicana.- El ministerio de Educación inició la entrega de 17,873 equipos tecnológicos a estudiantes de tres Distritos educativos de Samaná correspondientes a la Regional 14.

Desde este miércoles se entregan 10,174 tabletas y portátiles en el Distrito 14-04 de Samaná, 3,924 correspondiente al 14 -05 del municipio Sánchez y 3,723 del 14-04 de Las Terrenas.

En el acto de apertura, Jimmy Rosario, director general de Tecnología del Ministerio de Educación, exhortó a los padres, madres y tutores a cuidar los equipos.

“Queremos insistir en la necesidad de cuidar estos equipos. El Estado dominicano ha invertido millones de pesos para que nuestros hijos tengan acceso a educación, para cerrar la brecha y permitir que continúen aprendiendo aun en medio de la pandemia del coronavirus”.

Paulino Jiménez director de Informática Educativa dijo que el objetivo es impactar a los estudiantes del sistema educativo de esos municipios.

“El Minerd está entregando 11,569 tabletas y 6,304 netbooks para los estudiantes del nivel primario y secundario de estos Distritos que superan una inversión de 300 millones de pesos”.

El director de Distrito Felix Moris, explicó que los equipos corresponden a los alumnos de 76 centros.

“Gracias a la entrega de los dispositivos, los estudiantes serán impactados académicamente. Esta es una provincia muy vulnerable, donde los jóvenes no podían visitar las bibliotecas por la distancia, pero ahora desde la comodidad de sus hogares tendrán la facilidad de obtener la información que requieran”.

A la escuela Berca Morel Castillo de El Limón acudieron cientos de padres y madres. El director del centro José García Amarante, calificó de extraordinaria e histórica la entrega de equipos.

Entrega de equipos en Gaspar Hernández y Jamao al Norte, Espaillat

Simultáneamente se inició la entrega de 7,390 tabletas y portátiles a estudiantes de los municipios Gaspar Hernández y Jamao al Norte en la provincia Espaillat.

En esas comunidades correspondientes a la Regional 06 se entregaron 2,822 netbooks y 4,568 tabletas con una inversión de RD$92,622,441.

A la fecha se han entregado equipos en las Regionales 02 de San Juan, 08 de Santiago, 09 Mao, 10 de Santo Domingo y la 13 de Montecristi. También en Dajabón y Nagua.

Fuente e Imagen: https://acento.com.do/actualidad/ministerio-de-educacion-entrega-equipos-tecnologicos-a-estudiantes-de-samana-8965205.html

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