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El futuro del trabajo, entre el “nada que ver con lo habitual” a la “nueva normalidad”

Por: Eduardo Camín

 

Millones de personas del mundo han estado trabajando a distancia debido a la pandemia de la Covid-19. ¿Podría ser este “nada que ver con lo habitual” el futuro del trabajo? Al menos así se lo plantea Susan Hayter, Consejera Técnica Superior de la Organización Internacional del Trabajo sobre el futuro del trabajo.

Desde que surgió el teletrabajo en los años 70 en Estados Unidos hasta la actualidad, la atención sobre esta fórmula de organización del trabajo ha mostrado elementos positivos para promoverlo, por las ventajas que conlleva para el trabajador –entre otras, la conciliación de su vida laboral, familiar y personal–, para la empresa –el aumento de la productividad– y para la sociedad –favorece la descentralización de actividades, junto a otras ventajas–.Noticias | El futuro del trabajo: ¿cuáles son los cambios que se ...

Al mismo tiempo se hacen evidentes elementos negativos que causan recelos, respecto de las consecuencias sociales y laborales del teletrabajo, en relación, por un lado, con el aislamiento del teletrabajador, su mínimo desarrollo profesional, o la desprotección de sus derechos laborales. Por otro lado, en relación con los obstáculos para el control y supervisión de los teletrabajadores por parte de la empresa, y los costes de formación que la empresa debe asumir

Recordaremos que antes de la pandemia, ya había un debate en curso sobre las consecuencias de las tecnologías en el futuro del trabajo. El mensaje de la Declaración del Centenario adoptada en junio 2019 ha sido claro en este sentido; el futuro del trabajo no está predeterminado; perfilarlo depende de nosotros.

Ese futuro se adelantó a lo previsto, pues muchos países, empresas y trabajadores tuvieron que pasarse al teletrabajo a fin de contener la propagación de la Covid-19, cambiando drásticamente la forma habitual de trabajar. Las reuniones virtuales remotas son ahora frecuentes, y la actividad económica en una serie de plataformas digitales ha aumentado.
A medida que van levantándose las restricciones, una pregunta que todo el mundo se plantea es si el “nada que ver con lo habitual” se convertirá en la “nueva normalidad”.

Mientras muchas empresas comienzan a proyectar ahora la alternativa del teletrabajo, las precursoras del teletrabajo se plantean si deben continuar o expandir estas formas de trabajo alternativo. La oficina virtual aporta ventajas a empresas y trabajadores, pero también inconvenientes que sólo pueden ser resueltos con nuevas orientaciones en la gestión.

El teletrabajo no es únicamente una solución, es un derecho | MendoVozUnas pocas grandes empresas de las economías desarrolladas ya han señalado que lo que fuera un proyecto piloto imprevisto y prolongado – el trabajo a distancia, desde el domicilio y el teletrabajo – pasará a ser la forma estándar de organizar el trabajo. Los empleados no necesitan desplazarse hasta el trabajo, a menos que opten por hacerlo.

Puede que esto sea motivo de celebración para la gente y para el planeta. Sin embargo, la idea de un punto final para “la oficina” es decididamente – como mínimo – pretenciosa. La OIT estima que en los países de ingreso alto el 27 por ciento de los trabajadores podría trabajar de modo remoto desde el domicilio.

Trabajan en el tipo de trabajo que lo permite y tienen acceso a la tecnología y a la infraestructura de las telecomunicaciones que lo hacen posible. Pero esto no significa que efectivamente lo harán.
Ventajas e inconvenientes.

El giro hacia el trabajo remoto provocado por la pandemia permitió a muchas empresas seguir funcionando sin poner en peligro inmediato la salud y seguridad de sus empleados. Confirmó lo que algunos estudios ya habían adelantado, que en un marco de circunstancias adecuado –un despacho doméstico habilitado, acceso a herramientas de colaboración, y una rutina de trabajo predecible– el trabajo a distancia puede ser igual de productivo.

Quienes pudieron asumir la transición al teletrabajo durante la crisis sanitaria tuvieron la posibilidad de sentarse a la mesa cada día con la familia. Así, el trabajo pasó inmediatamente a estar centrado en las personas; pero a la vez, hubo que combinarlo con la enseñanza escolar desde casa y al cuidado infantil y de los ancianos.Teletrabajo: 3 desafíos que tiene Latinoamérica | TyN Magazine

Sí, estas personas han visto desdibujarse los límites entre el tiempo laboral y el tiempo para los propios asuntos, y ello ha aumentado el estrés y ha planteado un sin numero de riesgos para la salud mental. Para muchas personas, el giro hacia el trabajo remoto intensificó la sensación de aislamiento, de pérdida de identidad y de determinación.

Independientemente de la ropa que nos pongamos para entrar en ellas, las salas virtuales no pueden sustituir el valor social del trabajo y la dignidad y el sentido de pertenencia que nos proporciona.

Ante la inminencia de una crisis económica y del aumento de las tasas de desempleo, sin precedentes, surge la ocasión de celebrar consultas sobre la mejor forma de aprovechar las adaptaciones necesarias para ahorrar en los costos, mejorar la productividad y preservar puestos de trabajo. Ello podría suponer semanas laborales más reducidas o fórmulas de repartición del trabajo, para evitar suspensiones en tiempos difíciles.

Al mismo tiempo, la experiencia reciente de teletrabajo ha revelado profundas fisuras. Quienes están en la franja de ingresos altos tal vez elijan entre seguir trabajando a distancia en el futuro, pero los del otro extremo no tendrán elección, tendrán que desplazarse y es más probable que les falte tiempo.

Históricamente, las crisis económicas, las pandemias y las guerras han agudizado la desigualdad. La cuestión es si esta vez se tratará de un movimiento tectónico que provoque un aumento de la inestabilidad política y social, o una crisis que nos motive para consolidar los cimientos de sociedades justas y los principios de solidaridad y toma de decisiones democrática que impulse a las sociedades, a los mercados de trabajo y a los lugares de trabajo en la dirección de la igualdad.

Entre el “nada que ver con la realidad” … “a la nueva normalidad”

El futuro del trabajo pospandemiaAl analizar el alcance de algunas prácticas sociales que, en múltiples aspectos de la vida, parecen haber cambiado sin retorno posible, nos lleva a preguntarnos, si se trata de una herramienta provisoria o de un cambio definitivo. El uso de la tecnología, que en algunos casos puede maximizar rendimientos, en otros puede ir en detrimento de los vínculos sociales en el ámbito laboral y, sobre todo, de los derechos de los trabajadores en general.

Sin dudas, que el trabajo a distancia es visto como una forma eficaz de hacer frente al aislamiento social que estamos viviendo. Muchos, son los que se preguntan sinceramente, por qué no continuar con esta modalidad cuando pase la pandemia.
Después de todo, con las nuevas tecnologías no siempre es necesaria la presencia física en el lugar de trabajo. Además, los trabajadores pueden realizar su trabajo desde la comodidad de su casa, ahorrando tiempo y dinero para movilizarse, descongestionando el transporte público y ayudando al medio ambiente. Parece ideal ¿o no?

La realización de trabajo a domicilio, o a distancia, no es una modalidad tan nueva como parece. En efecto, hay un interesante antecedente histórico del trabajo a distancia, que data de la Inglaterra preindustrial. Entonces se lo llamó “industria a domicilio” y consistía básicamente en la elaboración artesanal de prendas de vestir.Robotización con MACH4 - Apotheka en 2020 | Farmacia, Automatizacion

Más allá de las grandes diferencias entre épocas y de las relaciones sociales involucradas, el caso analizado en la Europa prerrevolución industrial nos muestra que, su resultado fue mayor explotación para los trabajadores, precisamente por las condiciones que le fueron impuestas para desarrollarlo. La forma en la que se presentaba era relativamente similar a la actual: trabajar desde la comodidad del hogar.

Pero queremos hacer hincapié en algunas cuestiones del teletrabajo que podemos considerar disruptivos del marco en que habitualmente nos reconocemos como trabajadores.

¿Qué hacer entonces ante el teletrabajo?

Las condiciones materiales del teletrabajo tal como lo conocemos hoy, representan una amenaza potencial a la autopercepción de cada trabajador como integrante de un colectivo mayor en el cual se construye la conciencia colectiva y se constituyen las organizaciones de los trabajadores.

Se trata de aquel espacio en que los trabajadores luchan por derechos que exceden el plano individual de su situación particular (aunque la engloba) para alcanzar un estatus genérico que garantiza sus condiciones laborales en tanto integrante de la clase obrera estableciendo límites mínimos e irrenunciables de protección.

Alexro🌎🇨🇴🇦🇷 on Twitter: "Trabajo esclavo. #Teletrabajo ...Uno de los cambios más tempranamente advertidos es la modificación de la duración de la jornada laboral. El trabajador está disponible todo el tiempo. Las demandas de su empleador no se circunscriben con límites claros al tiempo en que el trabajador se encuentra produciendo, y el límite entre la vida laboral y personal se desdibuja.

La limitación de la jornada laboral es un logro por el cual el movimiento obrero ha pagado un costo muy alto luego de años de lucha, y, sobre todo, con la sangre de muchísimos trabajadores, que dieron su vida para conquistar la jornada de ocho horas y el descanso dominical. La amnesia de algunos no nos puede hacer obviar algo tan importante.

La dimensión colectiva a la que hacemos referencia nos alerta sobre otro aspecto disruptivo: el teletrabajo facilita el individualismo en detrimento de los aspectos colectivos del quehacer de los trabajadores.

Y en esta noción se desliza sutilmente el discurso tradicional del neoliberalismo en el cual pretende mostrarse como los defensores del individuo en contra de las políticas masificadoras de la izquierda, pero en realidad no se basa en la exaltación de las virtudes personales y de la libertad, sino en la destrucción de la organización de las redes sociales.

Por eso, y para contextualizar temporalmente el tema del teletrabajo, el problema no se plantea claramente en el presente de aislamiento obligatorio, sino a futuro. En el presente, el teletrabajo es una herramienta muy valiosa que permite que, en medio de una pandemia sin precedentes, muchos trabajadores ya sean en los ámbitos públicos o privados puedan seguir desarrollando sus actividades con relativa normalidad.

Pero es necesario advertir la amenaza potencial que esta modalidad laboral puede implicar en términos de flexibilización laboral, encubierta por el halo del avance tecnológico, estrategia de simulación no ajena al neoliberalismo. Las nuevas condiciones que puede implicar la generalización del teletrabajo llevan a enfatizar los aspectos colectivos del trabajo y a insistir en la necesidad de una reflexión crítica sobre las relaciones sociales que le dan marco.De la destrucción del trabajo, el teletrabajo y el paro masivo ...

No se trata de ser “luditas” de tiempos modernos, pero hay que debatir ampliamente entre todos los actores sociales involucrados, las repercusiones que pueden tener en el conjunto de la sociedad los cambios tecnológicos que están ocurriendo.

Es importante contrapesar el poder de los grandes grupos económicos que hace tiempo buscan implementar una reforma laboral en contra de los intereses de los trabajadores, y hay que ser conscientes que estos cambios imprevistos pueden ser plenamente funcionales a sus intereses.

Este no es un debate puramente teórico e intelectual, sino que hay grandes intereses económicos en juego. El capital -con o sin pandemia- intentará una vez mas maximizar sus ganancias, en detrimento de los mas débiles.

Fuente e imagen: http://estrategia.la/2020/07/03/el-futuro-del-trabajo-entre-el-nada-que-ver-con-lo-habitual-a-la-nueva-normalidad/

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Vidas tejidas al reverso de la historia

Reseña:

Estudios sobre el trabajo en los cañaverales y los campos de flores en Brasil

Maria Aparecida de Moraes Silva. Lúcio Vasconcellos de Verçoza. [Organizadores]

Maria Aparecida de Moraes Silva. Lúcio Vasconcellos de Verçoza. Beatriz Medeiros de Melo. Juliana Guanais. Juliana Dourado Bueno. Tainá Reis de Souza. [Autores de Capítulo]
…………………………………………………………………………
Colección Grupos de Trabajo.
ISBN 978-987-722-628-7
CLACSO.
Buenos Aires.
Julio de 2020

*Disponible sólo en versión digital: http://biblioteca.clacso.edu.ar/clacso/gt/20200707115646/Vidas-tejidas.pdf

Los/as lectores/as conocen la grandiosa historia de la agricultura brasileña, bastante difundida, inclusive por los medios de comunicación. El contenido de esta recopilación versa, sin embargo, sobre una historia poco conocida. Una historia/reverso de aquella. Una historia real tallada por personas que producen la gigantesca riqueza de los commodities exportados para varios países del mundo. Nuestra mayor intención es que la historia/reverso pueda ser leída y reflexionada por personas que desean una sociedad más justa, en la cual el ser humano pueda sobreponerse al mundo de las cosas. Una historia/reverso que no puede caer en el olvido social.
De la Introducción de Maria Aparecida de Moraes Silva

Fuente: https://www.clacso.org.ar/libreria-latinoamericana/libro_detalle.php?id_libro=2211&pageNum_rs_libros=0&totalRows_rs_libros=1408

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América Latina y el Caribe: La recesión podría llevar a miles de niños a trabajar

Redacción: La Prensa Gráfica

La profundización del desempleo y de la pobreza en los hogares podría llevar hasta 326,000 niños y adolescentes a trabajar, según estimaciones de la OIT y la CEPAL.

El deterioro de las condiciones económicas de las familias en América Latina podrían provocar un incremento de entre 1 % y 3 % en el trabajo infantil, lo que significaría que entre 109,000 y 326,000 niños y adolescentes podrían ingresar al mercado laboral sumándose a los 10.5 millones que ya trabajo actualmente.

Una nota técnica publicada por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) y la Organización Internacional del Trabajo (OIT) advierte que «la desaceleración de la producción, el desempleo, la baja cobertura de la protección social, la falta de acceso a seguridad social y los mayores niveles de pobreza son condiciones que favorecen el aumento del trabajo infantil».

En El Salvador, habían 101,921 niños y adolescentes de entre 5 y 17 años trabajando, según la Encuesta de Hogares de 2018, de estos 31,310 estaban por debajo de la edad mínima autorizada para trabajar y 70,611 eran considerados como trabajo peligroso. La nota señala que cuando la fuente de empleo son micro, pequeñas y medianas empresas (mipyme) hay mayor riesgo.

Este tipo de empresas son más vulnerables a la crisis sanitaria y económica, lo que se traduce en mayor riesgo de pérdida de empleo. El niño puede verse en la situación de tener que trabajar para buscar un ingreso complementario o incluso para sustituir parte del ingreso perdido.

En el caso de las familias que son propietarias de algún negocio, como microempresas, puede haber presión para que el niño realice el trabajo que antes hacía una persona asalariada a quien ya no alcanza para pagarle.

Por otra parte, donde ya existían condiciones de riesgo, como ingresos insuficientes y altos niveles de informalidad, existe la probabilidad que los niños y adolescentes se incorporen al trabajo en modalidades peligrosas.

«Las zonas rurales, donde existen mayores riesgos de trabajo infantil, se verán posteriormente afectadas por la crisis debido a las características de una menor interacción entre las personas y un menor dinamismo económico», dice la nota.

La OIT también publicó un informe junto al Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) sobre la relación entre el covid-19 y el trabajo infantil que consigna un aumento de un punto porcentual del nivel de pobreza puede implicar un aumento del 0.7 %, o más, del trabajo infantil.

«A medida que la pobreza aumenta, las escuelas cierran y la disponibilidad de los servicios sociales disminuye, más niños se ven empujados a trabajar. Cuando imaginamos el mundo después de la covid-19, debemos asegurarnos de que los niños y sus familias disponen de las herramientas necesarias para afrontar tormentas similares en el futuro. Una educación de calidad, servicios de protección social y mejores oportunidades económicas pueden cambiar las cosas», dijo la directora ejecutiva de UNICEF, Henrietta Fore.

El informe propone medidas como ampliar la protección social, facilitar la concesión de créditos, promover el trabajo decente para los adultos, facilitar el regreso de los niños a la escuela sin costos y disponer de más recursos para realizar inspecciones laborales.

«La protección social es fundamental en épocas de crisis, puesto que permite brindar asistencia a los más vulnerables», dijo Guy Ryder, director general de OIT.

https://www.laprensagrafica.com/economia/La-recesion-podria-llevar-a-miles-de-ninos-a-trabajar-20200620-0044.html

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Bendable: una nueva plataforma de lifelong learning

Por: Paola Estrada Villafuerte

El Instituto Drucker anunció el lanzamiento de Bendable, la nueva plataforma curadora de cursos en línea dirigidos a la comunidad de South Bend, Indiana.

La biblioteca pública del Condado de St. Joseph, Indiana, EE. UU., en conjunto con el Instituto Drucker de la Universidad de Graduados de Claremont, lanzó Bendable, un nuevo sistema de lifelong learning.

Este tipo de aprendizaje promueve la búsqueda del conocimiento de manera efectiva y voluntaria. Se cursa a la par y posteriormente de los grados académicos. Además, están dirigidos a cualquier rango de edad y rama educativa. Esto, con el objetivo de mejorar el “desarrollo personal continuo y motivación del estudiante”, explica Sofía García-Bullé.

Bendable, adopta las mejores características de este sistema educativo y ofrece una plataforma dirigida a los residentes de South Bend que les permite adquirir nuevas habilidades en distintas áreas de aprendizaje, desde codificación o finanzas personales hasta la filmación cinematográfica.

Bendable.

Bendable.

“Las oportunidades económicas cada vez mayores, así como la dignidad, dependen del aprendizaje a lo largo de la vida. Bendable es un sistema que hace que los tipos de aprendizaje más relevantes sean radicalmente accesibles para todos los residentes de una ciudad. A medida que lo lanzamos, nuestro objetivo final es forjar una «ciudad de aprendizaje permanente», haciendo que South Bend sea más resistente frente a una economía que cambia rápidamente, y ahora, COVID-19″. Así menciona Rick Wartzman, jefe del Centro KH Moon del Instituto Drucker. Este instituto planea establecer esta misma plataforma en más de diez ciudades en los próximos cinco años.

“Nuestro objetivo final es forjar una ciudad de aprendizaje permanente”.

Así, fomentando el desarrollo de la fuerza laboral en lugares con ciudadanos necesitados de fuentes de aprendizaje útiles para nuevas oportunidades de trabajo. Pero la plataforma no se enfoca solamente en habilidades para el trabajo. «Muchos de los recursos en Bendable están orientados a aprender para trabajar. Pero otros están orientados a ayudar a las personas a mejorar su vida cotidiana y la de su familia. Y algunos son simplemente divertidos», dijo Sarah Zaner, directora senior de lifelong learning del Instituto Drucker.”

Bendable no produce fuentes de educación en sí, sino que se dedica a seleccionar minuciosamente cursos –tanto presenciales como en línea y en su mayoría gratuitos– para brindar un catálogo definido en cada área. Así, los usuarios pueden seleccionar con una mayor seguridad el tipo de lecciones a las que desean suscribirse. El sistema brinda más de 1000 opciones de recursos de aprendizaje de 18 distintos socios de contenido, entre los que se encuentran Cell-Ed, edX, Ivy Tech, Khan Academy y Venues Parks & Arts, por mencionar algunos.

«Hemos tratado de crear un ecosistema de aprendizaje que tenga amplitud y profundidad reales, sin dejar de asegurarnos de que todo lo que se ofrece se adapte específicamente a las necesidades e intereses de una comunidad en particular», explica Sarah Zaner, directora de lifelong learning del Instituto.

El impulso de esta plataforma, significaría una capacitación significativa para muchos trabajadores de bajos salarios en búsqueda de mejores empleos. Además de la resignificación de comunidades como fuentes de aprendizaje para cualquiera interesado en expandir sus conocimientos. Una cultura de aprendizaje permanente impulsa la resiliencia para una comunidad, una economía y un individuo”, dijo Lex Dennis, de South Bend, director de lifelong learning en Drucker para South Bend Tribune.  Por su parte, Kathy Crimmins, directora de desarrollo cultural de General Stamping Metalworks, dijo que este sistema también podría ser de gran utilidad para aquellas empresas que deseen ofrecer cursos de equivalencia en estudios básicos para sus empleados.

Fuente e Imagen: https://observatorio.tec.mx/edu-news/bendable-plataforma-lifelong-learning

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El nuevo capitalismo ya está en nuestras vidas y exhibe sus uñas rapaces

“Decimos y proclamamos que es necesario una transformación cooperativa que barra injusticias”

“En torno a la naturaleza del hombre y la sociedad, desarrolla Robert Owen en su primera obra de difusión masiva, A New View of Society, Or, Essays on the Principle of the Formation of the Human Character, and the Application of the Principle to Practice. Se pretende demostrar que esta teoría evidencia un desplazamiento hacia los valores cooperativos, por sobre el individualismo, como base para enfrentar los problemas humanos”.

María Fernanda Lanfranco González

Está siendo cada vez más frecuente leer y escuchar sobre el Post-pandemia y al nuevo capitalismo, dando la sensación, al menos es lo que nos pasa, de que el nuevo orden mundial, es decir, el nuevo capitalismo será presentado “en sociedad” con todo protocolo y fanfarria. A nosotros nos parece, por el contrario, que el nuevo capitalismo ya está en nuestras vidas y exhibe sus uñas rapaces al implementar  ajustes impiadosos, pero también exhibe la ingenuidad de referentes políticos  y sindicalistas  que permanecen impávidos y no proponen mejoras.

Prueba de cuanto afirmamos traemos a colación: La UNESCO advirtió recientemente “La globalización, los cambios medioambientales y las crisis económicas y financieras están causando importantes transformaciones sociales que provocan el aumento de las desigualdades, la extrema pobreza, la exclusión y la negación de los derechos fundamentales”

Y  fue ese órgano de las Naciones Unidas más específico aún, si cabe decirlo, a través del Profesor Fethi Mansouri, Doctor en Filosofía, titular de la Cátedra UNESCO de Diversidad Cultural y Justicia Social de la Universidad Deakin, Melbourne (Australia)cuando fijó : “Tendremos que renegociar un nuevo pacto mundial, un nuevo contrato social, y creo que el diálogo tendrá que desempeñar un papel fundamental en que negociemos nuevos términos de nuestro orden social, económico, político y ambiental”. (https://es.unesco.org/news/entrevista-fethi-mansouri-adelantando-nuevo-contrato-social-era-post-covid-19)

Pero, es que surge inmediatamente una duda, dado que desde el capitalismo, sus representantes, no van a convocar a un dialogo o debate a fin de “negociar nuevos términos del nuevo orden social, económico, político y ambiental”, simplemente porque esa gente, al igual que los antiguos amos, o los señores feudales, no tienen ese guion de lógica o discernimiento. Como dijo alguien, el mundo no está hecho tan felizmente.

Así que, y a ojos vistas por doquier, los ajustes estructurales sobre la economía del sector laboral son crecientes, y ahora se avanza sobre los profesionales universitarios, sobre la pequeña y mediana empresa, precarizándolos. ¡¡Son los precariados sociales, señores!

El maltrato dispensado hacia la sociedad por parte de quienes deben resguardar la paz social es inaudito y feroz dondequiera que esté el capitalismo como orden socio-económico, es una actitud global, por tanto, no es casual sino causal, ello da motivo para pensar que el nuevo orden capitalista está entre nosotros, actuante, firme.

Y si esa situación o conclusión fuere una realidad, nos interrogamos: ¿Cuáles son las propuestas del sector social humanista o de mejoramiento social? ¿Cómo será el escenario de debate para contrastar o contestar al nuevo capitalismo? Barrer injusticias.

Estamos en la instancia que la propia realidad muestra, un panorama triste,injusto y tiránico  del que habla el organismo de las Naciones Unidas, por tanto, nosotros, profesionales universitarios y trabajadores, decimos y proclamamos que es tiempo de avance social y no de retroceso social, que es necesario una transformación cooperativa que barra esas injusticias.

Rescatamos como gesto positivo el hecho que desde la Confederación de cooperativas de Argentina-Cooperar-se presentara un documento, a la que adhiere TECNICOOP, denominado “Aportes para un Plan Nacional de Desarrollo. Por un Programa Federal de Economía Solidaria que construya “economía en manos de la gente” .

onemos de relieve el capitulo: Educar para una economía solidaria. Hacia un Plan Nacional de Educación Cooperativa y Mutual, por el pleno cumplimiento del Art. 90 de la Ley Nacional 26 206 de Educación cooperativa escolar, recordemos que existe el Fondo de educación y capacitación cooperativa-Ley 23427, fondo financiero que llegan a todas las provincias para ese inexcusable cumplimiento.

Una consigna, una bandera, imprescindible: Convocatoria al Congreso Pedagógico Cooperativo Escolar y Universitario.

¡En la fraternidad, un abrazo cooperativo!

Fuente: https://rebelion.org/el-nuevo-capitalismo-ya-esta-en-nuestras-vidas-y-exhibe-sus-unas-rapaces/

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Libro(PDF): «Trabajo y crisis de los modelos productivos en América Latina. Argentina, Brasil, México, Venezuela, Colombia, Chile y Uruguay»

Reseña: CLACSO

Este libro, con casos nacionales significativos de la región, continúa la reflexión colectiva de investigadores pertenecientes a varios grupos de trabajo de CLACSO, que analizan desde la Macroeconomía, la Economía y la Sociología del Trabajo el fuerte impacto que tuvieron en la década pasada los modelos de desarrollo, o más bien, las configuraciones sociales sobre el trabajo en varios países de América Latina. Permite comparar las grandes diferencias que se observan en solo una década con las que esos mismos autores describieron en el libro Trabajo y modelos productivos en América Latina: Argentina, Brasil, Colombia, México, y Venezuela luego de las crisis del modo de desarrollo neoliberal, coordinado por Enrique de la Garza Toledo y Julio César Neffa (CLACSO, 2010).

Autores (as): Julio César Neffa. Enrique de la Garza Toledo. [Coordinadores]

Fernando Urréa Giraldo. Daniel James Hawkins. Jaime Rendón Acevedo. Marcio Pochmann. José Ricardo Ramalho. Enrique de la Garza Toledo. Jorge Carrillo. Ana Karina Hernández. Francisco Pucci. Antonio Aravena. Héctor Lucena. Julio César Neffa. [Autores y Autoras de Capítulo]

Editorial/Editor: CLACSO.

Año de publicación: 2020

País (es): Argentina

Idioma: Español.

ISBN: 978-987-722-598-3

Descarga: Trabajo y crisis de los modelos productivos en América Latina. Argentina, Brasil, México, Venezuela, Colombia, Chile y Uruguay

Fuente e Imagen: https://www.clacso.org.ar/libreria-latinoamericana/libro_detalle.php?orden=&id_libro=1961&pageNum_rs_libros=0&totalRows_rs_libros=1387

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«1 de Mayo: Trabajo y servicios públicos. Otro modelo social y económico es necesario»

Europa/España/22/04/2020/Autor y fuente: tercerainformacion.es

CCOO y UGT celebraran un 1º de Mayo dedicado a las personas trabajadoras que están en primera línea frente al COVID-19 y para reivindicar «Trabajo y servicios públicos. Otro modelo social y económico es posible». Un 1º de Mayo, en medio del confinamiento motivado por el COVID19, virus que recorre el mundo y que se ha manifestado con especial incidencia en nuestro país, que también es la mejor ocasión para reivindicar un nuevo orden mundial más justo y solidario que sitúe a las personas y su bienestar por delante de los intereses económicos de unos pocos.

MANIFIESTO

Celebramos el 1º de Mayo, Día Internacional del Trabajo, en medio del confinamiento motivado por el COVID19, virus que recorre el mundo y que se ha manifestado con especial incidencia en nuestro país. Todo se ha visto afectado por la extensión de la pandemia; miles de personas han fallecido, nuestro tejido productivo ha quedado gravemente tocado, millones de puestos de trabajo están en peligro y cientos de miles de personas se encuentran sin recursos frente a la crisis.

El 1º de Mayo, jornada de solidaridad internacionalista

El COVID-19 está afectando a todo el mundo, aunque lo haga con diferente intensidad y en todo el mundo se ha puesto de manifiesto la fragilidad e injusticia del modelo social y económico imperante. El 1º de Mayo es la mejor ocasión para reivindicar un nuevo orden mundial más justo y solidario que sitúe a las personas y su bienestar por delante de los intereses económicos de unos pocos. Es también la ocasión de recordar la memoria de los y las sindicalistas que son perseguidos, despedidos, amenazados o asesinados en cualquier lugar de la tierra por defender ese mundo más justo, en el que el reparto de la riqueza, el valor del trabajo y la libertad sindical van de la mano.

Enfrentar la crisis desde las instituciones europeas

Europa debe tener el protagonismo que hasta ahora no ha sido capaz de asumir. La crisis es de tal magnitud que está poniendo en duda los cimientos del logro más importante de nuestro continente: la Unión Europea.

Las instituciones europeas deben aceptar que las políticas de austeridad que han impuesto en la pasada crisis han debilitado los mecanismos de protección social y laboral en los que se está cebando la pandemia y renunciar a ellas definitivamente para enfrentar la crisis de forma verdaderamente solidaria.

Hasta ahora, a duras penas, se ha alcanzado un acuerdo para liberar una primera partida de medio billón de euros destinados a enfrentar los efectos más perniciosos de la crisis. Pero hace falta más decisión y voluntad política. Necesitamos una verdadera herramienta unitaria de inversión en Europa y una iniciativa fiscal coordinada. En esta coyuntura urge impulsar la capacidad para emitir deuda común que ayude a financiar un gran plan de choque europeo contra la crisis y por la reconstrucción económica. Los sindicatos españoles, junto a la Confederación Europea de Sindicatos, trabajamos en esa dirección, porque no está en juego únicamente la recuperación de las economías nacionales. Está en juego el futuro de la Unión Europea.

Una vía diferente. Enfrentar la crisis en nuestro país

Desde el primer momento las organizaciones sindicales hemos presentado propuestas para evitar que la crisis destruya empleo y deje en la pobreza más absoluta a amplias capas de nuestra ciudadanía: la promoción y primacía de los mecanismos de ajuste temporal, las suspensiones y reducciones de jornada -a través del mecanismo de los ERTE-; las prestaciones por desempleo a contador cero para todas las personas afectadas, tuvieran o no adquirido el derecho a las mismas; las ayudas y subsidios extraordinarios, etc. son, en gran parte, el resultado de la exigencia sindical en el marco del diálogo social. Son instrumentos aún insuficientes, pero que han situado la respuesta a la crisis en una vía diferente, centrada en la atención a los problemas de las personas y en una nueva forma de percibir las necesidades de este país.

Queda mucho por hacer

Ahora, es necesario prorrogar los mecanismos de ajuste temporal del empleo, diseñados para el estado de alarma, el tiempo que sea preciso para sostener nuestro tejido productivo y la supervivencia digna de las personas trabajadoras. Es imprescindible cubrir las necesidades de aquellas que carecen de cualquier tipo de prestación. Con esta finalidad, el movimiento sindical exige la regulación urgente de un Ingreso Mínimo Vital, como ya hicimos en la legislatura anterior promoviendo una Iniciativa Legislativa Popular. Y debe garantizarse que la recuperación de la actividad económica se lleva a cabo sin poner en riesgo la salud de los y las trabajadoras.

Pero hay que ir más allá y determinar las líneas de un nuevo modelo productivo y social que siempre hemos reivindicado y que la crisis del coronavirus demuestra que es inaplazable. Más y mejores servicios públicos: sanidad, atención a las personas mayores y a las dependientes, educación, etc. Intervención pública en los sectores estratégicos (energía, suministros, servicios financieros, industria) que garantice, al mismo tiempo, la respuesta ante situaciones críticas y una mayor eficiencia y menor dependencia de un mercado que se articula bajo el principio del máximo beneficio y que carece de sensibilidad ante los problemas de las personas. Inversión en ciencia, tecnología e innovación, que oriente la recuperación hacia un modelo de desarrollo económico justo y medioambientalmente sostenible.

Para todo ello, es necesario un gran pacto. Un pacto al que las organizaciones sindicales estamos sin duda dispuestas, pero que para que tenga éxito debe contar con el compromiso del conjunto de fuerzas políticas. Estamos en un momento trascendental en la historia de nuestro país. Todas las fuerzas políticas, económicas y sociales deben actuar unidas si se quiere estar a la altura de las circunstancias.

Un 1º de Mayo dedicado a las personas trabajadoras que están en primera línea

Las personas que a pesar del riesgo de contagio y de los deficientes medios de protección están salvando vidas, ayudando a las personas mayores, dependientes y con discapacidad, las que garantizan el funcionamiento de los servicios esenciales que requiere nuestra economía son las verdaderas protagonistas de esta crisis. También lo son aquellas que teletrabajan y las que se han reincorporado a la actividad, las que han perdido el empleo o no lo tenían y les va a ser más difícil encontrarlo. Todas ellas son un ejemplo para este país y no debemos olvidarlo cuando esto pase. Para recordarlo hoy y siempre, en este Primero de Mayo el movimiento sindical les rinde homenaje.

Nuestras reivindicaciones en este 1º de Mayo

En tanto que organizaciones internacionalistas y solidarias, somos conscientes de que sólo una respuesta global puede ser la solución a una crisis global. La solidaridad y la colaboración sindical internacional tiene en este momento, en este Día Internacional, más importancia que nunca. Conscientes de que este es un 1º de Mayo especial, atrapados por el coronavirus y el confinamiento, sin manifestaciones en las calles y sin actos públicos, haremos de la movilización de las ideas en centros de trabajo, medios de comunicación y redes sociales nuestra principal manifestación:

  1. Reivindicamos un nuevo modelo económico y social cuya prioridad sean los derechos y el bienestar de las personas.
  2. Reivindicamos el trabajo como principal factor de cohesión social, ejemplarizado en este tiempo por las trabajadoras y trabajadores de los sectores esenciales y de los servicios públicos, de manera singular, por todo el personal sanitario.
  3. Reivindicamos condiciones de trabajo dignas y salarios suficientes, y denunciamos las reformas que se hicieron para devaluar y precarizar el empleo.
  4. Reivindicamos el papel de la mujer trabajadora en una sociedad más igualitaria y justa. Muchos de los sectores laborales que hoy están salvando vidas, facilitándonos la provisión de alimentos o evitando que se extienda la pandemia, son sectores feminizados, en los que muchas de estas trabajadoras no llegan ni a mileuristas.
  5. Reivindicamos, hoy con más fuerza si cabe, una Unión Europea más social y políticamente más unida y más solidaria.
  6. Reivindicamos algo que siempre hemos considerado un pilar esencial del Estado de bienestar, los servicios públicos, que sufrieron los recortes durante la gestión neoliberal de la crisis de 2008 y con los que algunos poderes autonómicos se han ensañado y que deben ser considerados un bien social ahora y siempre.
  7. Reivindicamos, ante el drama humano, social y económico que está causando el coronavirus, que las políticas públicas (y también privadas) atiendan sobre todo a las personas y sectores más vulnerables. En este sentido, hay que poner en marcha cuanto antes un Ingreso Mínimo Vital.
  8. Reivindicamos un Pacto de Estado para combatir el COVID19 y reconstruir la estructura económica y productiva de nuestro país, garantizando que no dejamos a nadie atrás. Sindicatos y organizaciones empresariales estamos llamados a jugar un papel determinante en este proceso.
  9. Reivindicamos el impulso de políticas sectoriales en el corto plazo en los sectores que más van a sufrir la caída de actividad, así como la recuperación de una base industrial para nuestro país que garantice el aprovisionamiento de bienes básicos. También la inversión en Investigación, Desarrollo e Innovación, que en el ámbito sanitario, pero no sólo en él, se vuelven a demostrar imprescindibles para un país.
  10. Reivindicamos una estrategia económica y social de desescalada y salida de la crisis acompañada de un cambio de modelo productivo, respetuoso con el medio ambiente y asentado en el empleo estable y con derechos.

¡Viva el 1º de Mayo!

¡Vivan las trabajadoras y trabajadores de todo el mundo

Fuente e imagen: https://www.tercerainformacion.es/articulo/actualidad/2020/04/21/1-de-mayo-trabajo-y-servicios-publicos-otro-modelo-social-y-economico-es-necesario

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