Educación para la salud en el Amazonas venezolano

Por: Jorge Antonio González Carralero

Promotores culturales

La organización comunal de las poblaciones indígenas del Estado Amazonas es muy similar en casi todas las etnias de la región. Está constituida por un Capitán (conocido en otras regiones de Latinoamérica como Cacique), que es la máxima autoridad de la comunidad y persona muy sabia y respetable; un Chamán, sabio que aplica sus conocimientos sobre medicina tradicional y religión, y un Promotor Cultural, que se encarga de todas las actividades relacionadas con el mantenimiento de las tradiciones culturales propias de la etnia, así como de la educación y la preservación de los valores autóctonos del pueblo.

Por tanto, el promotor cultural fue un eslabón muy importante a tener en cuenta por los colaboradores cubanos del programa Yo, sí puedo en el momento de seleccionar al personal que servirá como Coordinadores Municipales y Supervisores de Rutas o Ejes fluviales, en el proceso de generalización de la campaña a todo el Estado.

Yo, si puedo – programa cubano de alfabetización.

En primer término, porque por lo general son personas muy bien preparadas para desempeñarse como promotores culturales de una comunidad. En segundo lugar porque dominan, además del idioma español, el dialecto de su comunidad y otros dialectos de pueblos indígenas vecinos, lo que les permite ampliamente capacitarse en métodos de programas para preparar a los facilitadores que trabajarán en ambientes multiétnicos y multilingües. Y en tercer término, porque son personas muy respetadas por sus semejantes dentro del pueblo de su etnia y sus diferentes comunidades.

Enormes obstáculos

El acceso desde los municipios selváticos hasta la capital del estado, es difícil. El único acceso es a través de la navegación por el río Orinoco o por vía aérea. Pero ese no es el único escollo. Las estructuras locales que ofrecen servicios de educación no son confiables; se observa una falta de atención médica y hospitalaria, así como la escasa o nula promoción de la educación para la salud en las comunidades alejadas y de difícil acceso. En conjunto, constituyen enormes obstáculos para cualquier iniciativa destinada a impartir alfabetización en la región.

En estas condiciones, los colaboradores cubanos aplicaron una estrategia de trabajo con acciones encaminadas a la preparación de los promotores culturales indígenas para la generalización del programa de alfabetización Yo, sí puedo, la que se sustentó, entre otros aspectos, en la preparación metodológica y en actividades de capacitación destinadas a los supervisores y facilitadores.

En una primera etapa de diagnóstico se determinaron las principales debilidades, amenazas, fortalezas y oportunidades con que se trabajaría; ellas se convirtieron en prioridades de trabajo para asegurar la retención escolar y por tanto el éxito del empeño.

Entre los graves problemas de salud comunitaria detectados pueden mencionarse el desconocimiento de elementales normas de higiene; la elevada mortalidad infantil y materna; el consumo de agua contaminada con heces fecales del rio Orinoco; la carencia en muchas de estas comunidades de letrinas sanitarias, así como las diferentes enfermedades endémicas que azotan la región. Todo lo anterior impulsó la necesidad de familiarizar a los habitantes con estos problemas y de promover la educación para la salud comunitaria en casi todos los encuentros presenciales del programa de alfabetización.

Dicho programa consta de 65 videoclases en las que la teleprofesora conduce el aprendizaje mediante el método alfanumérico, que relaciona a los números conocidos con las letras desconocidas. La flexibilidad con que se imparte permite incorporar temas de educación y promoción de salud, con el fin de valorar las alternativas que posibilitan la solución a los problemas frecuentes de salud de la comunidad indígena.

Graduación de patriotas.

Asistir a clases

En la teleclase #8 se introduce el estudio de la vocal “i”. La teleprofesora utiliza para ello la palabra FAMILIA, a partir de la frase: La familia y su importancia para la vida. En el encuentro presencial se proponen analizar conceptos como prevención, normas de higiene, salud y enfermedad.

La teleclase #17 se ocupa del estudio de la consonante “c”. Ella permite que sea tratado el tema de la Vitamina C, vinculándolo a la dieta de la comunidad, la propuesta del consumo de vitaminas y el cuidado del medioambiente.

La teleclase #34 lleva por asunto el estudio de la consonante “ch”, con el análisis del término LECHE, mediante la frase: La leche materna es el alimento más completo, protege al niño de las enfermedades: catarros, diarreas e infecciones. El análisis permite que el grupo reflexione sobre la importancia del consumo de alimentos bien cocinados y de agua limpia, y se sienta motivado para poner en marcha un proyecto de construcción de letrinas sanitarias en la comunidad. De este modo se evita que las constantes lluvias lleven las heces fecales depositadas en el suelo al rio Orinoco, de donde se toma el agua para el consumo humano (IPLAC 2003).

El programa cubano Yo, sí puedo posee la flexibilidad suficiente para que el intercambio entre facilitadores y estudiantes pueda llevarse a efecto desde el punto de vista bilingüe y multiétnico. De este modo fue posible elaborar un Glosario de términos propios de los diferentes dialectos que aportaron palabras para ser utilizadas por los facilitadores en los encuentros de intercambio de promoción y educación de salud comunitaria.

Palabras aprendidas

Abuje: Insecto que pica y provoca comezón y diferentes alergias e infecciones.

Ají: Variedad de pimiento muy picante y elemento fundamental en las comidas indígenas como el famoso ajicero, plato elaborado con ají y pescado. Además es usado en remedios caseros para combatir diferentes males.

Atol: Bebida hecha con harina de maíz, muy nutritiva para los niños.

Auyama: Calabaza, fruta que aporta elementos precursores
de la vitamina D y A, muy importantes para los niños.

Bagre: Pez de carne sabrosa y con pocas espinas, abundante en casi todos los ríos de América, rico en proteínas, calcio, fósforo y vitaminas liposolubles.

Caraota: Frijol, alimento que aporta vitaminas y minerales a la dieta.

Casabe: Torta de Yuca. Alimento principal de los pueblos indígenas.

Chamán: Sabio del pueblo indígena.

Chigüire: El mayor roedor del mundo. Vive a orillas de los ríos y las proteínas de su carne son muy apreciadas por los diferentes pueblos indígenas.

Conuco: Huerta familiar en terreno secano donde se cultivan frutos menores. Heredad de la yuca o de la labranza.

Danto: Tapir, especie de mamífero utilizado en la alimentación de las comunidades indígenas y que hoy se encuentra en peligro de extinción, por lo que debemos protegerlo.

Mañoco: Harina de yuca muy utilizada por los indígenas como espesante de las sopas u otros alimentos.

Yucuta: Mañoco diluido en agua; horchata. Bebida elaborada con polvo de yuca y agua que posee propiedades medicinales y refrescantes para la digestión.

Zancudo: Mosquito, entre los que se encuentra el Aedes aegypti, agente transmisor de muchas enfermedades como el paludismo o malaria, el dengue hemorrágico entre otras.

Resultados exitosos

Con la aplicación de esta experiencia se logró la alfabetización de 3.049 ciudadanos, de los cuales 322 continuaron el proceso hacia el sexto grado y hacia la Misión Ribas (Enseñanza Media Superior).

A la vez que se generalizó el programa de alfabetización se logró incentivar el desarrollo de proyectos comunitarios como la alfabetización informática en La Esmeralda, Alto Orinoco; el desarrollo de charlas sobre promoción de salud y prevención de enfermedades endémicas en Watamo, Tama Tama, Acanaña, Laja Lisa, Topocho, Platanillal, Buena Vista, Gavilán, así como la construcción de letrinas sanitarias en las comunidades.

La creación de equipos de trabajo para la protección de la salud comunitaria permitió vincular el proceso educativo con la misión de salud Barrio Adentro y con el estudio socio genético José Gregorio Hernández, llevado a efecto en los rincones más apartados del Estado Amazonas y en todo el país, por médicos especialistas de Cuba y Venezuela.

Yo sí puedo, representa un ejemplo exitoso de cómo llevar a cabo programas de alfabetización y educación para la salud en zonas remotas y en entornos aborígenes. Se trata de un método flexible, adecuadamente probado y exitoso al estar basado en el entendimiento cultural. Como dijo Martí: “Al venir a la tierra todo hombre tiene derecho a que se le eduque y en pago, el deber de contribuir a la educación de los demás…” (Martí 1963).

Referencias

IPLAC (2003): Manual del facilitador. Programa Yo, sí puedo. La Habana.

Martí, J. (1963): Nuestra América. Obras Completas. Editorial Nacional de Cuba. Unidad 210-04 “Mario Reguera Gómez”. Tomo VIII.

Relys Díaz, L. I. (2005): Yo, sí puedo, un programa para poner fin al analfabetismo. La Habana: Editorial Abril.

Sobre el autor

Jorge Antonio González Carralero es licenciado en Educación en la especialidad de Biología y Máster en Ciencias de la Educación. Trabaja en la Dirección de Educación del municipio Puerto Padre en la provincia Las Tunas, Cuba. Entre los años 2007 y 2009 prestó servicios de colaboración internacionalista en el estado Amazonas de la República Bolivariana de Venezuela donde aplicó una estrategia para la incorporación y preparación de los promotores culturales indígenas a la campaña de alfabetización de esa hermana nación.

Contacto
Asociación de Pedagogos de Cuba (APC)
Dirección de Educación
Puerto Padre, Las Tunas
Cuba
jagonzalez@pp.lt.rimed.cu

Revista Alemana de educación de Adultos y desarrollo Nº 81 año 2014

https://www.dvv-international.de/es/educacion-de-adultos-y-desarrollo/ediciones/ead-812014-comunidades/articulos/educacion-para-la-salud-en-el-amazonas-venezolano/

Socializado por Oscar Fernández Galindez

osfernandezve@hotmail.com

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