Durante una inspección a la Universidad de Tecnología y Educación de Tianjin, Li aseguró que China necesita cultivar más profesionales con mayor calidad, promover el espíritu del artesano y fomentar las empresas de varios tamaños para proporcionar productos finos e impulsar la marca Hecho en China.
En mayo de 2015, Beijing lanzó el plan Hecho en China 2025 enumerando varias tareas para el sector de fabricantes de alta tecnología, entre ellas el impulso a la innovación, la promoción de marcas nacionales y la manufactura orientada al servicio.
El gigante asiático busca aprovechar los recursos de talento masivo, mejorar su capacidad de innovación general y convertirse en un país innovador, así como en una potencia mundial en ciencia y tecnología.