Estados Unidos/Agosto de 2016/urgente24.com
La campaña electoral de Donald Trump no deja de caer. Sólo esto explica que el jueves 18/08 él se declarase arrepentido de las palabras hirientes que ha pronunciado durante su proselitismo: «A veces, en el fragor del debate y hablando sobre una gran variedad de temas, no se escogen las palabras correctas y se dicen cosas equivocadas», señaló Trump durante un acto en Charlotte, en Carolina del Norte. «Me ha pasado y, créanlo o no, lo lamento. Realmente lo lamento, y en especial cuando he causado dolor a las personas», añadió al asegurar a sus seguidores que «siempre les diré la verdad», en una declaración leída que supone un punto de inflexión en su campaña. Sin embargo, Trump renovó su equipo asesor en la campaña electoral y nombró como director a Steve Bannon, dueño del sitio web conservador Breitbart News, un hombre sin experiencia política pero reconocido por su virulencia. Trump nombró directora de su campaña a la encuestadora republicana Kellyanne Conway, experta en comunicación hacia las mujeres. Además, Trump detalló sus proyectos en educación para la comunidad negra, que se inclina en 90% por los demócratas pero que sufre desproporcionadamente la pobreza y la precariedad. En ese contexto, Trump se presentó como un agente del cambio en contraposición a Clinton, que según él representa al establishment y favorece a los ricos y poderosos. Pero le ocurren otros problemas a la campaña de Trump.
El lunes 15/08, el candidato presidencial republicano estadounidense, Donald Trump, presentó su plan para derrotar al Estado Islámico y al islam militante. Parte de sus propuestas, como proscribir la entrada temporariamente a Estados Unidos a los musulmanes que vienen de los países que exportan terrorismo, fueron calificadas por muchos analistas como, además de absurdas, inconstitucionales.
Paradójicamente, si pusiera en marcha ese plan, Trump debería bloquear la entrada a Estados Unidos a ciudadanos de varios países europeos, a los que el Departamento de Estado norteamericano ha calificado recientemente como peligrosos, debido a la amenaza terrorista.
Otra parte de su propuesta, sostienen los analistas, no se diferencia en nada de la que actualmente lleva a cabo el Presidente Barack Obama -a quien Trump acusa de haber “fundado” el Estado Islámico-, y la que probablemente sostendría su rival, la candidata demócrata Hillary Clinton, en caso de ser elegida presidenta.
Trump propuso además un sistema de selección de los inmigrantes que dejaría entrar al país únicamente a aquellos que comparten los valores de y respetan al pueblo norteamericano, y filtraría a aquellos con una actitud hostil o que no crean en la Constitución de ese país.
Trump puso como ejemplo los “escaneos ideológicos” que se utilizaban durante la Guerra Fría. Pero según James Poulos, de la revista The Week, la propuesta de Trump tiene un agujero con la forma de un país: Rusia, el que Trump no puede mencionar, pero que necesariamente debería convertirse en su aliado número uno para luchar con el Estado Islámico. Sea Trump o Hillary quien triunfe en noviembre, lo cierto es que el Presidente norteamericano heredará 2 bombas tiempo: Irak y Afganistán, más el involucramiento norteamericano en Siria, Libia y Yemen.
A casi un cuarto de siglo de que Bush padre brindara su famoso discurso sobre el Nuevo Orden Mundial, y que los especialistas hablaran del “fin de la historia” tras la derrota del comunismo, vivimos en un mundo convulsionado, con fronteras cambiantes, y más peligroso que el que George H. W. Bush había imaginado tras la caída del muro de Berlín.
Fuente: http://www.urgente24.com/255843-crisis-total-del-discurso-de-donald-trump