Además, el documento recoge que el desarrollo tecnológico está cambiando el mundo «a una velocidad de vértigo» en áreas clave como el empleo, la salud y la educación. En este marco, explican que las nuevas tecnologías presentan «un doble filo» ya que pueden generar desigualdad en ciertos ámbitos, como en el laboral, donde pueden destruir puestos de trabajo. Aun así, consideran que la sociedad debe «aprovechar el potencial mayor de su vertiente positiva pues el buen uso y la universalización de las nuevas tecnologías son fuente de igualitarismo y constituyen un acelerador esencial para paliar la desigualdad en el mundo».
En el informe, un grupo de expertos analiza cómo la tecnología puede formar parte del problema pero como también forma parte importante de la solución, en tanto en cuanto puede contribuir a ofrecer acceso universal a servicios básicos y, a ello se une, el gran poder que otorga a los individuos.
El texto señala que la educación es uno de los «factores esenciales» para la prosperidad y las nuevas tecnologías pueden ser un contribuidor positivo neto a la hora de hacerla más accesible, reducir sus costes y permitir su acceso desde cualquier lugar posibilitando una formación que favorezca la empleabilidad.
En el terreno de la salud el informe señala que la tecnología está ayudando a reducir la brecha entre las personas que tienen acceso a los servicios sanitarios y las que sufren graves consecuencias por no poder acceder a dichos servicios. Así, nuevas herramientas, como la telemedicina, el Internet de las cosas a través de los wearables, el big data, el blockchain aplicado a los historiales médicos y otras nuevas tendencias de logística están cambiando la relación de los pacientes con los servicios de salud al ampliar las soluciones que pueden tener a su disposición.
En lo que respecta al empleo, FTF señala que las organizaciones empresariales tendrán que afrontar una adaptación a la transformación tecnológica y digital para poder sobrevivir en el corto plazo. Entre las recomendaciones que emanan del informe figuran algunos cambios que deberían adoptar, como implantar estructuras horizontales, horarios flexibles y abrirse a experimentar con la economía informal. En este ámbito, los emprendedores se revelan como una fuente de innovación adaptada a la tecnología, por lo tanto, son un agente de prosperidad que «hay que reconocer y formar como líder para el cambio».
Por último, los poderes públicos deben apoyar el desarrollo tecnológico del país potenciando la aceleración digital y la adopción y acceso a las nuevas tecnologías por parte de los ciudadanos e instituciones.
PROPUESTAS PARA COMBATIR LA DESIGUALDAD
El informe también recoge doce propuestas que buscan que la tecnología sirva para combatir la desigualdad en el mundo. Entre ellas se encuentra reconocer Internet como un derecho humano; utilizar mentores digitales basados en inteligencia artificial; crear una reválida digital para niños e introducir la financiación por crowdfunding al entorno educativo.
Además, consideran relevante utilizar Open Data en el terreno de la salud; crear una aplicación móvil de reporte rápido de incidencias en el espacio público; crear un Banco digital de propiedad intelectual y crear un Banco digital de capacidades.
Introducir indicadores clave de rendimiento específicos sobre la desigualdad en la memoria de responsabilidad social de las empresas; crear una plataforma de economía colaborativa; potenciar la transformación digital del sector público y potenciar el despliegue de conectividad en áreas rurales o deprimidas son otras de las iniciativas plasmadas en el informe.
Fuente: http://www.lainformacion.com/tecnologia/tecnologias-favorecen-desarrollo-educacion-emprendedores_0_968604527.html
Imagen: https://ut1156174.files.wordpress.com/2015/04/desv-tecnologicas.jpg?w=398&h=301