América del sur/Colombia/25 febrero 2017/Fuente: Semana
La cartera educativa y el SENA realizaron un balance sobre sus programas en el Foro Colombia Educada: Logros y Retos. Sin embargo, quedó en la incógnita la controversia por norma que equipara a universitarios con técnicos.
Los más altos representantes del gobierno en materia educativa se dieron cita en el ‘Foro Colombia Educada: Logros y Retos’, convocado por la Fundación Buen Gobierno, para presentar una rendición de cuentas de lo que la administración de Juan Manuel Santos ha hecho en el sector en estos casi ocho años. Entre los asistentes y ponentes estuvieron la ministra de Educación, Yaneth Giha; el director general del Sena, Alfonso Prada, y el director ejecutivo de la Fundación, Martín Santos, quien, además, presidió el evento.
Durante su conferencia, Giha hizo un recuento de los avances en las áreas de educación básica, primaria, media y superior y en programas como Ser Pilo Paga, bilingüismo, gratuidad educativa y excelencia docente, entre otros. También abordó la estrategia trazada a propósito de los nuevos escenarios de paz.
“La educación no cambia el mundo, cambia a las personas que van a cambiar el mundo, es por eso que tenemos la meta de llegar a ser el país más educado en 2025. Hemos llegado al día de hoy a un nivel de cobertura del 97,4% en educación media y nuestro índice de deserción está por el 3,26%”, dijo durante su intervención.
La ministra contó que 500.000 estudiantes de colegios oficiales de todo el territorio estudian bajo la modalidad de la jornada única, y que para el 2017 se espera que el número ascienda a 1 millón de los 10 millones de estudiantes que hay en el país.
En cuanto a educación superior, Giha hizo énfasis en el incremento de la cobertura que ya alcanza el 57 %. Frente al posconflicto, espera que esas cifras de acceso también caractericen las zonas más golpeadas por la violencia. Y que la calidad de la oferta sea una realidad como ya sucede en las ciudades más importantes del país. “Vamos a superar las brechas que dividen Colombia. La idea es que no existan esas brechas que dividen lo rural de lo urbano”, puntualizó.
Por su parte, el director del Sena, Alfonso Prada, dio una conferencia sobre el papel de esta entidad como articuladora de oportunidades laborales y emprendimiento. “El Sena es la joya de la corona en la educación, así me lo dijo el presidente cuando me dijo que sería yo sería su director. Mi tarea es poder brindar pertinencia y calidad al sector educativo, relacionándolo con el laboral”, dijo.
Según cifras presentadas por Prada, el Sena cuenta con 138.430 aprendices, de los cuales 71.232 ya se encuentran empleados. En 2014, la entidad de formación para el trabajo tenía alianzas con 16.015 empresas; hoy en día cuenta con 145.000, lo que significa mayor oferta laboral para sus estudiantes.
El Snet pasó desapercibido
Durante el foro, la cartera educativa repasó todas las metas y logros alcanzados a lo largo de los dos periodos de la presidencia de Santos. Sin embargo, hubo un gran ausente en este listado de éxitos que, además, ha sido tema de polémica en las últimas semanas: el Sistema de Educación Terciaria (Snet). Esta política del gobierno pasó de agache y ni la ministra ni Alfonso Prada hicieron mención explícita al tema, aún cuando esta iniciativa representa una sinergia entre el Ministerio y el Sena.
Para eliminar la brecha entre las diferentes modalidades de formación de educación superior, el MEN, junto con el Ministerio de Trabajo, el Ministerio de las TIC y el Sena desarrollaron el Snet. Esta política pública, que lanzó la exministra Gina Parody, busca configurar una nueva perspectiva educativa para que los estudiantes puedan tener mayores posibilidades formativas y de movilidad entre los niveles educativos, además de compensar el bajo reconocimiento que tienen programas de formación técnica, tecnológica y de educación para el trabajo y el desarrollo humano en comparación con los universitarios.
La medida surge en un momento en el que el desempleo juvenil en el país se sitúa en el 15,3 % y el mercado está saturado con el número de egresados universitarios, de acuerdo a cifras de la cartera de Trabajo.
“El Snet quiere poner en igualdad de condiciones al sistema técnico y al universitario. La educación superior está desarticulada, porque hoy los tecnólogos y los técnicos están debajo de los profesionales, cuando no debería ser así”, indicó Padory durante la presentación de la estrategia en mayo de 2016.
Tan polémico ha sido el Snet que generó la renuncia del profesor Pedro Prieto como miembro del Consejo Nacional de Educación Superior. También ha recibido fuertes críticas de diferentes rectores de universidades de renombre, quienes no han dudado en rechazar públicamente la supuesta intención del Ministerio de aprobarlo por la vía rápida. Es decir, sin el beneplácito del Congreso de la República. Uno de los más críticos fue Ignacio Mantilla, rector de la Universidad Nacional, que en una carta abierta aseguró que “aprobar vía fast track una reforma a la educación superior deslegitimaría cualquier acuerdo, limitaría las acciones que las universidades públicas vienen implementando para atender las necesidades en educación en el escenario del pos acuerdo y despertaría dudas que podrían empañar y desvirtuar el propósito de la paz”.
Por el momento, ante la incertidumbre de qué va a pasar con el Snet, una vocera del MEN aseguró a Semana Educación que la consolidación de un sistema como este se tiene que dar, pero no por “fast track”, así exista una necesidad de cerrar brechas humanas en las zonas del conflicto de manera inmediata. “Se necesita un consenso entre los diferentes actores involucrados para que haya un acuerdo”, señaló la misma fuente y añadió que, mientras se resuelva esta polémica, se está buscando un componente que articule un lenguaje entre el sector productivo y el educativo para que haya pertinencia en la educación. Esto se hará a través del mejoramiento del Marco Nacional de Cualificaciones que ordena el Plan de Desarrollo. El primero que se presentará será el de las TIC, una guía para saber qué tipo de talento humano están buscando las empresas en este sector.
La única mención que hizo Giha sobre el Snet en el Foro es que el gobierno trabajará en las rutas educativas para que técnicos y tecnólogos puedan seguir formándose. “Esa parte se tiene que seguir hablando con las universidades para que haya una verdadera oferta educativa pertinente”, concluyó.
El problema de La Guajira
En cuanto a la reciente intervención del gobierno en el departamento de La Guajira, que ha presentado serias falencias en el manejo de los recursos por culpa de la corrupción, Yaneth Giha señaló varios temas preocupantes relacionados con la mala calidad de la prestación del servicio educativo: todavía hay 15 mil niños que no están matriculados en ningún colegio; se presentan inconsistencias en los informes financieros y los gastos administrativos superan lo aprobado.
Por todo ello, el Ministerio de Educación (MEN) será el que asuma el manejo directo de la educación en el departamento que hasta hoy estaba en manos de la Secretaría departamental y las de Riohacha, Uribia y Maicao. La medida hace parte del paquete de intervención a la administración del departamento que se dispuso este martes, luego de la reunión del Consejo de Política Económica y Social (Conpes) para analizar las situaciones excepcionales que se vienen presentando en esa zona del país. Además de la educación, el gobierno nacional asumirá también el manejo de la salud y agua potable.
Con la intervención, los 513.000 millones de pesos que se transfieren desde Bogotá a la educación de La Guajira serán manejados directamente por el MEN. La ministra dijo durante el foro que la medida busca garantizar el servicio a 217.000 niños y jóvenes del departamento, pues hoy se encuentra en riesgo.
A su vez, el informe del Conpes da cuenta de contrataciones sin el lleno de los requisitos legales e irregularidades en el reconocimiento de horas extras de maestros. Tampoco hay registros de entrega de dotaciones a docentes e instituciones educativas en varios años, y se contemplan pérdidas de recursos de la Nación de los que no existe reporte ni información.
En alimentación escolar, durante el segundo semestre de 2016, en 12 de los 15 municipios del departamento no se ejecutó el dinero destinado para la prestación del servicio. En el caso de Riohacha, ya hay un proceso de investigación por parte del a Fiscalía. Es por eso que el MEN también asumirá todo lo referente al manejo de los recursos de la alimentación escolar.
Según explicó Giha, la intervención durará tres años, lapso que podrá acortarse si el departamento logra las metas del Plan de Desempeño de manera anticipada.